Perversion. Espiando enfermeras

[Sean -Ojo Loco- Linmer]

Hoy iba a ser el intento numero 109372, sentia en lo mas profundo de mi pervertido corazon que saldria bien. Ya tenia listo el disfraz, asi que frente a un espejo que reflejaba toda mi estatura comence a darle los ultimo toques para pasar desapercivido en la Clinica. Lo bueno de mis continuas visitas al lugar y el hecho de ser desmemorizador es que puede encargar una copia exacta de la indumentaria con que trabajaban los sanadores del lugar, ahora bien..tendria que tener cuidado con la Jefa Helike..en estos dias estaba bastante enojada conmigo..a saber por que???..Debia ser el estres de ser jefa..no todos pueden con el peso de esas obligaciones..o acaso seria por tener cierto favortitismo de Sagitas...que mas da...el hecho era que podria ser peligrosa si me encontraba en un casillero espiando a las enfermeras de la Clinica.

 

Ya con todo listo realice el viaje de forma tranquila hasta la Clinica y sin problemas pase a los guardas de seguridad enseñando una placa falsificada....no piropie a la recepcionista ni a ninguna enfermera en el camino...podria delatarme...y esquive a Helike en alguna que otra ocasion....Fase i del plan conpletada...Espere en una esquina hasta que las taquillas donde se cambiaban las enfermeras estuviesen vacias..sigilosamente entre...Varita en mano..busque la taquilla que mejor campo visual me diese..la abri y la acondicione....y mirando a los lados me cole en la misma. Fase 2 completada....ahora solo quedaria esperar.

 

Minutos despues

 

Estaba medio entumesido cuando oi que alguien entraba...mire por las rndijas de la taquilla y para mi sorpresa frente a mi estaba Helike..que comenzaba a cambiarse...eso no es que fuese malo..lo malo fue el escozor que me dio en la nariz el perfume que llevaba..asi pues se fue abajo el plan con un sonoro estornudo...Evidentemente acabaria mal....sostuve fuerte mi varita...y pedi a Merlin que me diera algo de suerte...

 

Del otro lado Helike se acerco a la taquilla la abrio....y evidentemente enojada me lanzo al medio de la habitacion..tropezando con algunos banquillos que habia ahi...retrocedi un poco -Hola Jefa- dije intentando sonreir...pero la varita en su mano indicaba que era mejor haber caido en manos de seguridad que ser descubierto ahi...justamente en el momento que helike pretendia cambiarse.

 

Ahi estabamos..en una habitacion suficientemente grande paras que cupiesen alrededor de 30 taquillas...hubicadas una al lado de otra contra la pared...dejando un espacion en el centro de la habitacion que tenia varios banquillos para que las chicas se sentaran...Mi posicion me hacia estar a dos metros de la puerta....y a 10 de Helike...y a unos tres metros del banquillo mas cercano...Aparte de esto....en el techo algunas rendijas de ventilacion...exactamente cuatro...por ahora ninguna encima de nuestras cabezas.

 

-Te lo puedo explicar..este yo...

[Helike R V PB]

Por fin había terminado la jornada laboral dentro de la clínica. No es que estuviese realmente cansada. No, para nada, simplemente quería estar tumbada en cama y leyendo un libro en la Mansión Rambaldi, hasta que poco a poco los sonidos de la gran casona se fuesen apagando...

 

Generalmente llevaba la ropa que usaba normalmente de diario, prendas cómodas para hacer lo que los sanadores me mandasen en ese momento, pero a decir verdad, ese día llevaba el pijama característico de las enfermeras, de un color malva y detrás de los bolsillos llevaba la varita. Quizá para los muy asiduos de la seguridad me llamarían loca por llevarla ahí, pero era una mera costumbre, como tantas otras.

 

Después de terminar de ayudar a un sanador con una operación sencilla, me dirigí hasta el vestuario de enfermeras. Detecté un cierto aroma un tanto familiar y fruncí el ceño, gracias a la ponzoña, mis sentidos estaban mucho más agudizados que el de un humano normal y no me costó identificar al humano que estaba ahí dentro, obviamente, escondido, y a saber a cuántas compañeras enfermas había espiado a través de las rendijas.

 

La rabia se apoderó de mí en esos instantes. Terminé de cambiarme rápidamente y me puse una camisa blanca de tiras y unos pantalones vaqueros azules, acompañados de las botas de piel de dragón del mismo color. Escuché un sonoro ruido, <<¿eso sería un estornudo?>> me pregunté a misma. Después de varios segundos, deduje que sí, y por la dirección en que había venido el sonido, me fui hasta la taquillera con la varita en ristre...

 

El cabreo que llevaba en esos instantes hacía salir la fiera que era cuando salía de caza ciertas noches a la semana. Abrí la puerta, con tal fuerza que casi salió despedida de los goznes, ésta sólo colgaba por uno de ellos...

 

-maldito bastardo depravado -insulté cargando con cada palabra, mi desprecio al chico que tenía delante de mí, que era ni más ni menos que mi trabajador en el área de desmemorizadores del departamento de la tercera planta. Con gran fuerza y agarrándolo por el jersey negro que portaba tropezó con varios banquillos. En mi defensa, podía decir que no sentía lástima por él. Podía actuar como una mortífaga y matarlo allí mismo, pero estaba en una clínica privada y debía de mantener las apariencias. Menos mal que había ocultado el tatuaje con un buen maquillaje mágico que no se iba con nada.

 

-No puedes explicar nada -mis dientes rechinaban con fuerza. Me aparté unos cuántos metros unos cinco, para ser exactos.

 

-No tienes ningún derecho a espiar a nadie -la ira que sentía, se hacía notar en por las palabras que soltaba por mi boca. Iba a recibir una buena lección, aquella en la que, al menos, pensaría un momento antes de que actuase por impulso.

 

Me fijé a mi alrededor, en aquello que me podía ser útil, pero antes de nada, con un movimiento de mi varita, sellé la puerta para que no se escapase...

 

-Vas a saber lo que es sufrir -le prometí al joven, si tuviese un poco de cordura en su cabeza tendría que tener miedo de una mujer con mucho genio.

 

-morphos -susurré, apuntando la varita al jersey fino negro que llevaba y que era la prenda que lo había agarrado anteriormente, cuando lo saqué de la taquilla se transformó en una avispa marina muy venenosa, que enseguida le inyectó su letal veneno. Si no se curaba pronto, moriría envenenado en cuestión de minutos.

 

-silencius -el efecto del hechizo, enseguida se hizo notar en la garganta del mago, que quedó totalmente silenciado, sin pronunciar una sóla palabra. Tendría que usar encantamientos no verbales por si quería realizar alguna acción más.

 

-A ver cómo solucionas ésto, querido -le dije con una sonrisa macabra, esperando a ver cómo reaccionaría ante ésto.

 

off:

 

con el permiso de Sean, edito.

Editado 20 de Septiembre del 2014 por Heliké Rambaldi Vladimir

[Sean -Ojo Loco- Linmer]

No me dejo terminar de explicarle....si..por experiencia debia saber que ante una mujer enfadada no vale las escusas..solo el cubrise la cabeza para no recibir una calderazo en la misma..asi que cuando la vi varita en mano, sellando la puerta y diciendo que ahora iba a ver lo que es sufrir...evidente lo primero que pense es en que me violaria....a saber porque fue ese el primer pensamiento...esto era un caso clasico de celos...algo asi de porque espias a otras si me tienes a mi...Sin embargo su primera accion aclaro mis dudas.

 

Si evidentemente queria violarme..claro luego de envenenarme...el jersey que me cubria el torso se transformo en un mortifero animal marino...no era la primera vez que me lo utilizaban contra mi...asi que sin mas tiempo que perder me parte del bicho ese..y apunte hacia la credencial que llevaba alrededr del cuello

 

-Morphos- al intante esta se trasformo en un bezoar el cual trague rapidamente- si me querias vio...

 

No termine la frase pues la chica me enmudecio, evidentemente no queria saber de escusas..y de paso asi no podia pedir auxilio...aunque verdaderamente nunca he estado encontra de que una femina me viole...de hecho apoyo esa mocion...Mire a su rostro y la veia mas enfadada de ser posible..aunque por mi no habia problemas...si queria jugar podriamos hacerlo los dos.

 

-Crece-Uñas- pense y un rayo salio hacia la chica...de impactarle las uñas le crecerian en demasia dificultandole el apuntarme con la varita..aunque pensadolo bien le dificultaria desnudarme.