Clinica Santos Mangos (MM B: 87868)

[Ashley Peverell]

-No entiendo porqué ese ataque a la casa de Sagitas... ¡no tiene sentido alguno!

La hermosa rubia con cara de un ángel que ha descendido desde las alturas para tener cuidado de sus hijos mortales que solían estar en problemas y que necesitaban del cálido abrazo de sus alas en aquellos pequeños momentos se encontraba frotándose suavamente la cara con una de sus pequeñas manos como si con esos actos pudiera despejar un poco los pensamientos que la rodaban al respecto del hecho de que hubiera tanta gente lastimada en lo que debía de ser un evento de total felicidad y amor completo por la encantadora pareja que ahora estaba unida par siempre.

Las bodas eran situaciones en las que dos seres entrelazaban el amor eterno de quien sabes que el corazón estará en un lazo de amor por siempre, así que algo como una matanza cruel y sin sentido desentonaba con su imagen de palomas blancas volando y celebrando por todos lados.

-Tú sabes quién fué ¿verdad Anee-we?

[Lisette Ryddleturn]

Lisette se colocó la yema de sus dedos por un lado de su mejilla mientras que veía para otras partes donde otros magos heridos y muchos familiares llegaban y se quejaban por las heridas.

En lo personal era la primera vez que veía de vida propia como su novia tomaba ese aspecto de una bruja que sabía lo que hacía y que entendía de las batallas y sacaba la varita para destrozar todo lo que estuviese cerca de ella; ya había escuchado historias de la propia Hayame pero no era lo mismo presenciarlas en vivo y estar cerca de tocar los cadáveres y la sangre de los muertos que estaban a su alrededor que solamente tenerlo de oído.

Dejó salir un suspiro corto y apenado y se concentró en seguir de cerca a las dos brujas que iban por delante de ella.

Aquella "Hayame", que le resultaba curiosa y extraña porque era la primera vez que entendía de ese fenómeno le había pedido que la siguiera y por eso era que estaba ahí de primera mano.

[Hayame Snape Potter Black]

Los ojos azules de la bruja que en aquellos momentos guiaba a las otras dos se viraron para verlas de reojo como si estuviera pensando que tanto decirles al respecto o de lo que sabía la verdadera forma de Hayame que estaba en otro sitio intentando ayudar a resolver los problemas que todo aquel asunto les había traído al pleno como familia.

Dejó escapar un gruñido.

-No lo sé del todo- accedió a aceptar a regañadientes y apretó los dientes un poco así como el sujetapapeles que tenía contra el pecho- tú estabas ahí cuando Sagitas nos contó todo en la sala de la casa, lo recuerdas? no tenías mucho tiempo de haber llegado y te me pegaste por un lado como si en cualquier momento Sagitas te fuera a atacar

Resopló imaginándose la cara que pondría Ash en aquellos momentos tan solo por lo que había acabado de decir pero no tenía tiempo de entretenerse para ver si estaba demasiado enojada

Tenían muchas cosas por hacer y esta vez, se viró para ver a Lisette

-Ya tienes tus credenciales de Primeros Auxilios, no es así?

[Ashley Peverell]

La joven y hermosa Peverell hizo un puchero y se cruzó de brazos pero solo durante los momentos necesarios porque en esos instantes no eran los momentos correctos para dejar ver que estaba molesta por la actitud de aquella hermana suya de oscuros cabellos que a ella le parecía que reflejaban más que bien la oscuridad del alma que carcomía a la hechicera inmortal vampiro y ahora que estaban en el hospital, se preguntaba internamente si esta en alguna ocasión se había dejado arrastrar por sus oscuros deseos de morder los cuerpos de los pacientes a los que tenía en su merced.

Suspiró y alzó la mirada con un dejo suplicante a los cielos para que los heridos encontrasen pronta recuperación de sus heridas y que de los muertos hubieran podido sobrevivir aquellas almas piadosas con las que convivía en el cada día y a las que quería tanto que ella misma estaba dispuesta a dar la vida por ellas.

-Tienes razón, no recordaba que habíamos tenido esa charla con la pobre de Sagitas acerca de su malévola familia.

Accedió finalmente acordándose de ese día y preguntándose porque no hizo un esfuerzo sobrehumano para poner más atención a una situación que evidentemente era de gran peligro para todos.

[Lisette Ryddleturn]

Lisette parpadeó una sola vez y asintió ante la pregunta de la otra mujer que se suponía que era su novia... pero tan diferente.

-Si, por eso es que pude tener la oportunidad también de poder entrar a trabajar para el Ministerio y para el Departamento de Accidentes junto con ustedes

Explicó la chica ahora con un gesto de aire preocupado mientras que movía una mano y sus gestos se hacían más preocupados conforme movía las cejas para reflejar aquello.

-Si lo que me quieres preguntar es acerca de si estoy dispuesta a ayudar en el hospital como algún tipo de enfermera o tipode sanadora para hacer de ayuda, me encantaría la verdad

Aseguró moviendo la cabeza una vez

-A decir verdad desde el primer día me sorprendí de ver que había otro negocio de atención a los pacientes, aparte de San Mungo- comentó mirando con extrañeza y algo de curiosidad seria a la bruja que las iba guiando por los pasillos a los alrededores- sé que alguna vez fuíste Directora de San Mungo o eso fué lo que me contaste cuando estabamos en Westown en aquel entonces, cierto? -preguntó aún sin dejar de verla de lado

[Sagitas E. Potter Blue]

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¿Aún no querían dejarme marchar? ¿Pero qué se creían? ¿Qué me iba a tomar unas vacaciones permanentes en la cama de un hospital? De eso nada de nada... Yo, a escaparme. No me gustan los hospitales, aunque sea la maravillosa clínica de mi hermana y me traten como si fuera la reina de Java. Prefería menos atención y estar en casa, peleándome con los elfos, con Matt, con el niño...

 

Pero allá estaba, poniendo carita de niña buena a mi hermana Ash, quien estaba velándome aquella vez en la habitación, no sé si era porque pensaba que estaba muy malita o por lo contrario, porque pensaba que no estaba tan mala como para no intentar largarme y necesitaba controlarme. Por ello la escuchaba con cara de estar muy atenta mientras mi mirada iba de un lado al otro de la habitación buscando un lugar por el que escabullirme con una Desaparición.

 

-- Gracias por la bienvenida, mana. ¿Puedo preguntar quién ha obrado el milagro de mi recuperación...?

 

 

 

El recuerdo de cómo me había librado de la contención de mi familia aquel día me habría hecho reír pero no en aquel momento, en la zona de la Morgue del hospital. Sé que mi marido y mi hijo había insistido en que me ingresaran y comprobaran mi estado pero yo, en aquel instante, sólo quería ver a los muertos que se habían producido en el ataque durante la boda. No me podía creer lo que había sucedido sólo porque, al final, una parte de aquella familia me habían descubierto.

 

Era culpa mía, si hubiera mantenido las distancias, si no me hubiera asentado en el pueblo, si no hubiera formado una familia...

 

Supongo que eso implicaba que no hubiera conocido a mis hermanas, a mis sobrinos, a los grandes amigos que había conseguido en aquel lugar... No habría conseguido crecer como una ciudadana más en Ottery ni habría llegado a Warlock... Pero... ¿Merecía la pena si los había puesto a todos en peligro?

 

Levanté una de las sábanas con un movimiento de varita. Uno de ellos...

 

-- ¡Malditos...! -- y fui mirando uno a uno a los fallecidos. Al menos me quedaba el consuelo muy débil que ninguno de ellos eran invitados nuestros. Decidí dejarlo ya. Me estaba martirizando por nada.

 

Era mejor volver a casa antes de que Jack y Matt descubrieran que me había escapado de la PB después del salvamento. Sí, lo sabía, les había prometido descansar en la cama y olvidarme de todo pero... Necesitaba verlo con mis propios ojos. Ahora volvería a casa antes de que me pillara alguien haciendo un tour por aquel lugar de los muertos.

[Helike R V PB]

off: espero no interrumpir la trama que lleváis por aquí. Intentaré no poner barbaridades ^^ si alguien me guía, le estaré agradecida xDD

 

On:

 

Después de la luna de miel...

 

Tras el merecido descando al terminar la boda y con todo lo demás, era necesario volver a uno de los pocos lugares en dónde me sentía más útil, a pesar de ser una vampira. Ya había resultado bastante curioso el que me contrataran y más aún que siguiera tras el período vacacional. Me despedí de los habitantes de la Potter Black y me dirigí, vestida ya, con el pijama de enfermera hacia la clínica Santos Mangos. El día parecía que iba a ser bueno, pero tampoco prometía nada. El tiempo en Londres, solía ser bastante cambiante...

 

Me aparecí a unos cuatro metros calle abajo del hospital privado y fui caminando despacio y saludando a los viandantes que conocía. No tardó en llegarme el aroma a desinfectante y arrugué la nariz. Lo odiaba, no era algo que me gustase, pero ya que estaba ahí "currando" al menos, estaba acostumbrada. La recepcionista borde y malhumorada seguía en su lugar. Ésta me miró alzando una ceja, un tanto sorprendida...

 

- Qué alegría verla, esperaba que no se apareciera por aquí...

 

- Yo también me alegro de verte - la miré fijamente a los ojos, con rabia. Si por mí fuera, la echaría de patitas a la calle y sin derecho a nada- ¿alguna novedad? -pregunté, al ver alguna pila de informes que tenía para archivar...

 

- ¿No lo sabe? -me preguntó, burlona- debería saberlo...

 

- ¿Qué debería conocer, según usted, doña cotilla? - le solté, sin poder evitarlo...

 

- Su suegra está ingresada... Algo gordo debió pasar en la boda, no? - ¿cómo esa mujer podía saber tanto? Aunque si llevasen allí heridos o muertos, era lógico que sumara dos más dos.

 

- Algo que a usted, señora, no le importa. Haga su trabajo, que para eso le pagan... Si me necesitan estoy en zona de boxes...

[Perenela Arya Grindewald Potter Blue]

Sj presentía a donde veníamos, pero todo buen mago y toda buena bruja debe tener completas sus vacunas mas aun cuando no te gustaran las agujas ni las personas, lo cual me daban dos razones para no ir a San Mungo y bueno si teníamos una clínica en la familia lo mejor era dejar que mi madre le pusiera a Sj sus vacunas: le faltaba contra la viruela de dragón y según el registro dos de las vacunas muggles también.

 

Entre empujando la puerta con la espalda mientras atajaba a SJ con los brazos, empezó a llorar y a patalear por lo que trate de contenerlo lo mejor que pude, y entre directo hacia las salas de revisión sin pasar por la recepción:

 

-Vamos amor, es necesario que tengas tus vacunas, se que no te gustan pero si te portas bien te compro un helado de cinco sabores, y puedes batirte en duelo con el dragón de la abuela - Mire a todos lados a ver si encontraba a mi madre, a Matt o a helike para que me ayudaran con el terremoto de mi hijo

[Hayame Snape Potter Black]

Después de tantos lios que habían pasado, la vampiro estaba más que feliz de sentir una poca de normalidad al entrar en aquel hospital que literalmente era como su segundo bebé; o más bien tendría que decir que el tercer bebé ya que hasta hacía un rato que había estado embarazada mientras atendía las urgencias familiares del sitio pero finalmente, el pequeño Severus se removía felizmente en los brazos de toda familiar que quisiera alzarlo.

O bueno, se podía decir que felizmente era un termino relativo ya que el pequeño había heredado los gestos serios y graciosamente molestos de su padre biológico, que había fruncido el ceño la primera vez que había visto al bebé.

"Me siento usado, debo de decir"

Había gruñido el Snape pero al menos no le había recriminado el seguir teniendo hijos suyos como si se los estuvieran regalando.

Pero a Hayame eso no le molestaba, tenía trabajo, tenía negocios y definitivamente tenía las formas para mantener a sus pequeñuelos (bueno, eso si le regresaban al mayor en algún momento); en todo caso, tenía todas las formas par tenerles bastante bien en casa y ella era feliz imaginando como sería cuando pudiesen estar todos juntos.

Pero al momento de estar caminando en los pasillos y perdida en su mente, se sorprendió al escuchar algunas voces en la entrada.

-Valgame!! recién casada y ya peleándote con la recepcionista, dicen que una vez que la vida de casada esta en boga todo es felicidad- dijo riéndose mientras que veía a Heliké y se colocaba una mano en la cadera

[Lisette Ryddleturn]

Lisette que iba por detrás de la vampiro levantó una mano y le dió un pequeño golpe en la nuca con la parte plana de la mano, observándola con un dejo de regaño pero sin dejar de sonreír a sabiendas de que la otra chica se iba a estar sobando luego

-pero qué maneras de contestar son esas cariño, que son tu familia, recuérdatelo

Apuntó moviendo un dedo en su dirección y negando un par de veces con la cabeza para luego, ver a la otra vampiro que había llegado y que por los gestos de los demás atendientes podía interpretar que trabajaba ahí; movió la cabeza y juntos sus dos manos por delante con un gesto mucho más amable que el de su novia.

Era tan extraño pensar que ellas dos pudieran ser pareja cuando eran de dos tipos de energías tan distintas pero quizás era eso mismo lo que las complementaba.

-Muy buenos días- saludó a la otra bruja -espero que todo esté en orden

Dijo pero entonces, miró que había llegado otra más de la familia y esta vez parecía que estaba llevando a un niño pequeñito; con los ojos brillantes por aquello, se movió tan rápido como podía para acercarse y se rió levemente al ver que el pequeño se removía del agarre como si creyese que algo malo le iba a pasar

-Es verdaderamente encantador, es tuyo? -le preguntó con un brillo en los ojos a la chica que acababa de llegar

Editado 28 de Septiembre del 2018 por Ini-Herit