~ House of Books ~ (MM B: 103943)

[Darla G Dumbledore]

Tommy y Leto - elfos de Darla

 

El sonido de una nueva aparición no sorprendió a los dos elfos de Darla, sabían que en cualquier momento o sus amos o algunos de los otros elfos, ya fuera Lualú o los elfos de Seba deberían aparecer. Después de todo, era algo habitual, intentaban ser una familia, aunque si tomaban en cuenta a los elfos ellos eran la parte disfuncional.

 

Leto se dirigía en esos momentos hacia la escalera para ir a los pisos superiores, ya que era en el primer piso donde él generalmente desempeñaba sus funciones. Tommy iba a empezar a acomodar el mostrador de atención al primer piso, y fue ahí cuando los dos elfos sí se sorprendieron, porque una vocecita suave e insegura preguntaba en ese momento si había alguien, lo cual no parecía ilógico, si no fuera por las palabras que le siguieron "estoy armado".

 

Tommy se sorprendió y corrió hacia el pasillo, pensando que de un ladrón se trataba, aunque no entendía cómo podía haber ingresado, el elfo había tomado un grueso libro de historia. Pero en la escalera Leto había reconocido la voz y corrió escaleras abajo chillando.

 

--¡Tommy no de librazo a Eros! ¡Eros no de percherazo a Tommy! --había alcanzado a ver "el arma" del elfo del año Seba desde la escalera.

 

--Leto está aquí Eros, no haga daño a su hermano mayor --y pasó patinando y tropezando con una de las telas que habían quitado de las estanterías.

[Ela Karoline]

Cye con Eirian Niall

 

Tenía mucho tiempo sin ver a Seba, sin siquiera cruzar una palabra, a pesar de que ambos compartían ideales y eran amigos, siempre los caminos eran distantes, y ni que decir de Darla, la novia del Granger, la última vez que la había visto había sido en el cumpleaños de Bodrik, meses atrás. Así que ahora que se había tomado un poco de tiempo para pasear por Diagón le apetecía pasarse por el local de ambos, una librería muy bonita con varios ambientes según sabía.

 

Claro que no iba sola, le acompañaba el menor de los Lockhart, quien jugaba con los rizos de su madre, mientras que la rubia lo mantenía en brazos, ya contaba con seis meses y era todo un manipulador con sus balbuceos y juegos de burbujas, pero cuando miraba con esos ojos azul intenso y sonreía, era capaz de derretir a un tempano de hielo. No recordaba si la pareja conocía al niñito de rubios cabellos, pero aparte de comprarle un cuento, si es que vendía allí, se los presentaría, ya era todo un hombrecito de medio año listo para las relaciones sociales.

 

--¿Queee?-- casi grito la Lockhart al ver el letrero que colgaba en la puerta de la Librería --Cerrado por refacciones, ¡oh no Eirian! Hemos perdido el viaje desde el castillo-- confeso desalentada la bruja y conversando con su bebe que al sentir el cambio de energía de la sacerdotisa hizo pucheros con ganas de llorar. --No mi vida, no vayas a llorar, mira está cerrado-- dijo girando la manilla de la puerta que curiosamente abrió.

 

--Bueno, cerrado, cerrado no está, que dices si nos aventuramos a saludar a Seba y a Darla-- el infante balbuceo algo señalando hacia adentro y Cye incapaz de negarle nada, se atrevió a entrar a riesgo de que la sacaran los trabajadores que hacían las refacciones o los hechizos que seguramente habían colocado para evitar intrusos.

 

--Hola, Hola, Seba, Darlaaa-- grito apenas dio un par de pasos hasta que se encontró con tres elfos, seguro eran los refaccionarios o personal del House, pero cara de buenos amigos no tenían como lo había anticipado.

[Darla G Dumbledore]

Tommy y Leto - elfos de Darla

 

Tommy había escuchado los gritos de Leto y apretó el libro de historia contra su pecho, deteniéndose más tranquilo de que ningún intruso hubiera ingresado. Pero siguió mirando desconfiado a Eros y su perchero para defensa. Leto había llegado junto a ellos y miraba preocupado a los dos elfos, aunque ya Tommy parecía haberse relajado.

 

--Leto está contento de ver a Eros, Leto no sabía Eros vendría a ayudar -y discretamene dio un codazo a su compañero.

 

--Tommy también se alegra de ver a Eros y... --pero no tuvo tiempo de decir más nada porque en ese momento la puerta tras Eros se abrió.

 

La magia se había activado en parte al ingresar los elfos, las puertas y ventanas habían sido destrabadas y la mayoría de los hechizos defensivos habían sido anulados, solo los de las habitaciones de sus amos seguían activos hasta que ellos pusieran un pie en el local.

 

--Hola, Hola, Seba, Darlaaa-- grito una rubia con un bebé en brazos.

 

Tommy casi en automático metió el libro a sus espaldas y miró a Eros rogando que el elfo no fuera a girar de golpe y darle un percherazo a la dama.

 

--Buenos días señora, ¿Tommy la puede ayudar? los amos aún no llegan a su casa.

 

--Leto puede ir a buscar a los amos con gusto --dijo el elfo pensando en escapar de la escena bizarra que representaban los tres frente a las visitas, haciendo una inclinación y listo para desaparecer en busca de sus amos.

 

@

[Seba Granger]

Eros, Elfo de Seba

Eros se puso tieso sin bajar su perchero por unos instantes, si el elfo de la Potter Black lo atacaba o tiraba el libro el se lo podía batear o esquivar de alguna forma.

-¿Como puede estar seguro Eros que son ustedes?- ok el elfo del Granger siempre había sido muy desconfiado si hasta con Dash lo dudaba un poco o mas bien se aprovechaba para golpearlo.

Pero cuando Leto empezo a patinar por un momento le causo mucha risa y bajo el perchero debilitando sus defensas, -¿Leto esta bien?- pregunto esperando no se hubiera golpeado.

Miro de reojo de nuevo a Tommy, aunque unas voces desde la entrada que había dejado hace poco se acercaban, miro a ambos elfos de su la ama Darla, luego giro en sus pies mirando a la dama que llegaba, Tommy ya se encargaría de atenderla, así que el trato de escabullirse como pudo hacia el jardín del hogar de la pareja.

@ Bienvenida Cye.

[Darla G Dumbledore]

Leto - elfo de Darla

 

Leto sonrió al escuchar las palabras de Eros, incluso vio una sonrisa en los labios del elfo jardinero del Granger ¿Haría sido su imaginación o de verdad el elfo había sonreído con la torpeza del más joven de los elfos de la Potter Black? Pero no tuvo mucho tiempo para averiguarlo, aunque Eros había bajado su perchero espada/bate, se había vuelto para descubrir de quién provenía el saludo que desde la puerta de ingreso se escuchaba.

 

--Leto está bien --alcanzó a responder a Eros mientras Tommy atendía a la joven bruja y su bebé y antes de que Eros se escapara hacia el jardín.

 

--Eros debe tener cuidado, Leto le puede ayudar luego en el jardín si necesita, Leto debe buscar a sus amos pero Leto y Tommy ayudarán a Eros con el jardín y el establo.

 

Mencionar el establo le hizo recordar al pequeño elfo la ocasión en que habían intentado con Eros descubrir el origen de unos extraños sonidos en la parte trasera del establo. Habían querido hacer una maniobra militar que el elfo había leído en los libros de su ama, pero no habían tenido oportunidad de terminarla y menos de descubrir quién o qué se escabullía tras la pequeña manada de criaturas que ambos magos, Seba y Darla, poseían en su hogar.

 

Tommy había carraspeado y Leto supo que debía ir a buscar a sus amos, miró al elfo y asintió desapareciendo con un sonoro crack tras hacer una nueva promesa.

 

--Leto ya regresa con sus amos.

Editado 1 de Marzo del 2018 por Darla Potter Black

[Ela Karoline]

Cye con Eirian Niall

 

La rubia con su bebe se había aventurado a abrir la puerta a pesar del letrero, por suerte los dueños del establecimiento no habían colocado ningún encantamiento golpeador o algo por el estilo y si lo hubo, de algún modo se había desactivado. De inmediato se encontró con un trío de elfos, no los conocía, no, ella solo recordaba a Dash, tendría que preguntarle a su elfina Feixac que era la social y se conocía a medio Othery en cuanto a elfos se refiere. Iba a volver a preguntar por los dueños, pero le causo curiosidad las pequeñas frases de la conversación de aquellas criaturas.

 

¿Había un establo? Y la sola mención del lugar la hizo pensar en caballos, acaso había logrado unir la lectura y la equitación, o solo eran paseos en alguna clase de carruaje mientras se leía, bueno su imaginación daba para muchas locuras, y a lo mejor era solo para uso de los dueños, después de todo ellos vivían allí mismo o eso tenía entendido. También escucho sobre un jardín y ese si quería conocerlo, pues amaba las plantas y la naturaleza, pero cuando el elfo se escabullo y el otro fue por sus amos, Cye no supo que decir.

 

--Lamento la intromisión, es que tenía muchas ganas de saludar a Darla y a Seba, espero no sea un problema-- dijo regalándole una sonrisa al elfo. --Soy Cye Lockhart y el es Eirian, somos viejos amigos de tus amos-- incapaz de quedarse quieta por temor a que Eirian comenzara a llorar avanzo solo un poco --Ammm ¿Cuándo estará abierto al público, es que me hacía ilusión sentarme a leerle algo al bebe, porque tienen una sección de cuentos ¿verdad?--

 

Hasta ese momento no se le había ocurrido que quizás no era una de las predilecciones de los londinenses, aunque si guastaban de la lectura estaba casi segura que pocos llevaban a sus infantes a las librerías a escuchar historias mágicas o ver dibujos por temor al llanto o a que rompieran las páginas de alguno de los libros, su hijo sin embargo podía estar hecho un mar de lagrimas y le leían y callaba, le miraba y se quedaba quietecito, como si entendiera lo que le leían. Así que el cuento de las noches era infaltable, así como la lectura del periódico dirigido por papá, que podía esperarse del hijo de un periodista.

[Darla G Dumbledore]

Tommy, elfo de Darla

 

El elfo se quedó de una pieza cuando vio que el resto de los elfos lo abandonaban, era verdad que Leto iba en busca de sus amos al local de la mamá de uno de ellos. Pero Eros había volado hacia los jardines. El elfo se preocupó por la imagen extraña que le habrían dado a la amiga de sus amos y apretó sus manitas contra el libro que de nuevo abrazaba, preocupado por esa situación.

 

--Tommy está encantado de conocer a la Señora Lockhart y al pequeño Eirian, la Señora Lockhart no se ha entrometido para nada, el local será abierto muy pronto al público, los amos de Tommy ya terminaron de remodelar y arreglar sus cosas.

 

El elfo se quedó pensando, ¿la joven querría cuentos muggles o cuentos de la comunidad mágica? Recordó cuando el amo Antony hizo una lectura y representación de un cuento en el primer piso, era allí, junto a la cafetería, donde estaban los libros infantiles y la sala donde se había hecho la representación del libro estaba llena de pequeños juegos hechizados y maquetas mágicas de los diversos cuentos.

 

--La apertura es en esta semana y tenemos una sección de cuentos infantiles en el piso de arriba, junto a la cafetería --dijo en voz alta el elfo para agregar --nuestros amos estarán encantados de ver a su antigua amiga, Leto los traerá pronto a su casa.

 

La joven había avanzado y el elfo hizo una reverencia muy grande frente a ella casi tocando el suelo con sus orejitas para luego señalarle la escalera.

 

--Tommy los invita a esperar a los amos en la cafetería y tomar algo mientras esperan, Tommy los puede llevar y hacer aparecer directamente para que la Señora Lockhart no tenga problemas con las escaleras al llevar a su bebé.

 

Tommy extendió la mano con timidez, ofreciéndose a aparecer los tres en conjunto directamente en la cafetería del primer piso, junto a la sala de lecturas. Sabía que Leto la había acondicionado ya así que no había problemas en que los primeros visitantes del local pudieran acceder a él.

 

@ Juro que en la próxima llego

[Seba Granger]

Las ultimas remodelaciones al local habían tardado un poco mas de lo previsto, era la primera vez que había estado tanto tiempo cerrado el negocio, ademas que tampoco estaba habitado la zona del departamento. El tiempo fuera de Londres había hecho bien, aunque se había extrañado mucho.

 

Con Darla nos encontrábamos en esos momentos en el local de mi madre, pero en esos instantes llegaba Leto para avisarnos que Cye estaba en House of Books de visita, no era bueno hacerla esperar mucho.

 

Mire a Darla a los ojos, teníamos muchas charlas aun por llevar pero esas irían saliendo con el transcurso de los días, teníamos muchas cosas que contarnos.

 

Invite a Darla a que me siguiera, entre el local de mi madre y el nuestro no había mucho camino que recorrer así que no habría problemas si hacíamos el trayecto caminando.

 

 

Regresando a casa...

Tras solo unos minutos después estábamos frente a las puertas de nuestro local, esperaba que todos los elfos ya estuvieran ahí, pero dudaba un poco que Dash y Lualu ya estuvieran.

 

Mire la puerta del local, no entendía muy bien por que este regreso se sentía distinto, tome el pomo de la puerta y la abrí, -Las damas primero- dije sonriendo a Darla.

 

En la entrada Cye no estaba, lo mas seguro es que Tommy ya se estuviera ocupando de ella, no veía en realidad a Eros en esos menesteres, la verdad dudaba que alguna vez lo hubiera visto socializando con alguien.

 

 

@ @@Darla Potter Black Mis disculpas a ambas por no pasarme mucho antes, pero el trabajo muggle no me da tregua.

[Darla G Dumbledore]

Darla con Seba en Ollivander's

 

La Potter Black había tenido un pequeño encuentro con su prometido, la limpieza avanzaba lenta pero el amor iba en el tiempo justo, como siempre en la pareja, los momentos y los detalles que el uno tenía para con el otro jamás quedaban fuera de lugar. Lo que sí quedó fuera de lugar fue el crack de una aparición. Sorprendentemente Leto había logrado aparecerse dentro del local, Darla no estaba muy segura de cómo sus elfos lograban siempre sortear cualquier trampa pero como fuere allí estaba, lanzando una cadena de palabras que hizo que la bruja le hiciera señas para que se calmara.

 

Finalmente, se vieron a los ojos con Seba y supieron que debían dejar para más adelante el resto y tomando la mano de su prometido, tras echarse su capa al hombro, salieron rumbo a su local y hogar.

 

Camino a House of Books

 

Mientras recorrían las calles del Callejón se susurraron algunas tiernas palabras y comentaron de cuánto tiempo hacía que no sabían de Cye, aunque la bruja estaba casada con Ishaya, quién había sido como un abuelo par ella, la verdad es que Darla no la veía desde... allí su memoria fallaba y al ver a los ojos a Seba supo el por qué y asintió en silencio, sus años perdidos.

 

El camino le resultó corto para seguir compartiendo con su amado, pero sin dudas la visita merecía que estuvieran con ella así que sonrió a su prometido y le dio un suave beso en respuesta a su galantería.

 

--Gracias mi amor --agregó mientras atravesaba la puerta que él le acaba de abrir.

 

--¿Hola? --sí, era extraño saludar en su propio local, avanzó mientras se quitaba la capa y observó hacia el primer piso, desde donde creía escuchar la voz de Tommy y pequeñas risas. ¿Estaría Cye y su pequeño allí? Leto había mencionado a la joven con un pequeño bebé.

 

@ @@Seba Granger

[Seba Granger]

Un par de días desde el regreso...

 

La mañana estaba soleada aquel día en el callejón la luz entraba ya por una rendija de la cortina que había quedado abierta la noche anterior, bostece un par de veces estirándome en la cama para luego girar hacia el lado donde estaba mi novia, aun durmiendo o eso al menos parecía.

 

Baje con cuidado de la cama, estaba casi seguro que ella se despertaría o ya lo estaba, pero hice como que dormía, salí del cuarto hacia la cocina solo en el pantaloncillo corto que llevaba, lo primero que oí fue los rezongos de Nana por mi facha, pero era yo el que mandaba no ella.

 

-Hace calor, no chilles mujer- dije mientras sacaba una botella de agua del refrigerador, -Ando prepara una bandeja de desayuno para Darla y para mi- dije mientras la observaba de reojo que movía la cabeza renegando.

 

-Nos lo llevas al cuarto en cuanto este listo- camine rumbo al cuarto de nuevo, sacando una rosa desde el florero que estaba en el pasillo del departamento.

 

-Buen día señora Granger- bese su frente con ternura, -¿Como durmió mi amor?-

 

 

@ Seguimos el otro rol cuando tu gustes pasar, saludos.