Aliento de Dragón (MM B: 107037)

[heberth portillo]

Mientras esperaba a que la elfina Tami llegará con un postre delicioso, me quede viendo por una de las ventanas que dada a la parte trasera del callejón donde se veía la gente ir en destino a sus hogares con bolsas llenas de las compras que habían realizado, cuando me giré vi que acaba de llegar Tami con un postre en la mano, lo puso en mi mesa y luego se fue rumbo a la cocina nuevamente.

<<Wow que postres, se ve sumamente delicioso>> pensé mientras lo observaba, cuando le di la primera cucharada, salió un aroma que me hizo sentir más ganas de comerlo, lo probé y era realmente delicioso, Me encanto el postre tanto asi que queria agradecerle a la persona que lo había hecho en persona. Terminé de comerlo y llame a la Elfina Tami para saber si podía ver a la persona que había hecho semejante manjar.

 

- Disculpa Tami, será posible que conozca a la persona que hizo este postre- Pregunté con voz amable a la elfina que me había atendido de la mejor manera. La elfina asistió con la cabeza de manera positiva y me dijo que ya mismo llamaría a la persona que había elaborado el postre. Me quede en la mesa esperando para darle las gracias a esa persona y del mismo modo hacerle un halago por que el postre era sumamente delicioso.

 

Espere unos segundo cuando vi que la elfina llegaba con una chica, de pelo castaño, que no llevaba uniforme sino una ropa casual que se le veía muy bien, espere a que estuvieran cerca de la mesa para presentarme. - Hola buenas tardes - le dije a la chica mientras la miraba y le sonreía amablemente - Mi nombre es Heberth Portillo Delacour - dije mientras me levantaba de la silla - El postre que me he comido, ha sido uno de los postres más deliciosos que haya probado en mi vida - le dije mientras veía que la elfina se retiraba.

 

Esperaba que la chica se presentará para seguir conversando por unos minutos con ella y después ir a hablar con el supervisor Abizaid, que la elfina me había dicho que se encontraba en la primera planta con algunas personas del ministerio.

 

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Editado 10 de Marzo del 2018 por heberth portillo

[Shena Cindy de Ryvak M.]

Los últimos metros donde ví los rastros de sangre, se hallaban como el resto, seco pero sobre algunas cosas que me hizo pensar que desesperada fue la idea de alejarse tratando de evadir un encuentro conmigo.

 

Así lo sentí, caminé con desesperación por darle alcance cuanto antes. El rastro parecía que él solo se preocupaba por donde ir, a donde marcharse más que atender su herida.

 

Aquellos locales no son conocidos ni frecuentados por nosotros, al ya no encontrar rastro, ví los locales comerciales, de todos ellos el más probable era un café y lo visite para indagar.

 

Los sillones se ubican como en secciones, opté por uno de los que se hallaba más adentrado del resto. Tomé asiento, un elfo fue a darme la bienvenida. Me ofreció una carta, pero no la miré, solo dije a la criatura que deseaba un té.

 

Me miró, después solo pregunto si estaba interesada en alguno en particular. Qué responder?

 

Mi mente trataba de elegir la mejor de las opciones, junté mis manos entrelazadas y mis ojos le miraron fijamente mientras le pregunté:

 

--Suelen las personas pedir comúnmente té? Qué tanto? No mucho? Ya veo...y dime, viste si estuvo por aquí un chico de cabello verde?

 

La criatura agrandó sus ojos grises y Bajando un poco la voz, respondió afirmativamente.

 

--Cuentame por favor, es sumamente importante.

[Anthony R. Dracony M.]

Elfo encargado de la cafetería (Local muy alejado del hotel)

 

 

La criatura se movía entre las mesas, atendiendo a los clientes, lo usual....hasta que de pronto entro aquella joven castaña...

Su porte era de alguien que se sentía segura de sí y fue a sentarse en el sitio más adentrado del local, ahí acudió el elfo con una carta y un block de notas que usa ara tomar los pedidos. Hace esa reverencia como su saludo respetuoso para la joven bruja y se extraña el elfo que solicite té y le "bombardé con tantas preguntas, la hace sentirse tenso.

 

 

-- Ehmmm bueno...yo...me hallo tan descolocado como usted...solo puedo ...contar lo que me consta. -- se acerca más a aquella joven...y empieza hablar en voz baja, para que solo ella escuche.

 

 

-- No señorita, lo usual es que soliciten café, tenemos muy buen café, no, no piden mucho el té, aunque tenemos también gran variedad ya que a la hermana de la dueña, si le gusta el té. ¿Cómo? ah...pues, ahora que lo menciona, si lo vi, recuerdo que pidió un té de frutos rojos y tardo como unas dos horas en beberlo...muy extraño, luego pago su consumo y se marcho.

 

 

La castaña agradeció y el elfo fue a atender a una pareja que recién llegaba a la cafetería y dejo a la joven por el momento.

 

 

@@Shena Cindy de Ryvak M.

 

 

 

 

http://i63.tinypic.com/25kr794.jpg Abizaid Mondragón, supervisor del hotel atendiendo a @@Ashura Lestrange

 

 

 

El joven rubio hablo con la joven, ella porta una credencial que la identifica como empleada del Departamento de Control de Criaturas Mágicas.

 

-- Mi nombre es Abizaid Mondragón, sera un gusto mostrarle las criaturas que hay en el hotel, si gusta acompañarme, la primera de ellas se encuentra en los jardines, por este lado, hemos de ir por aquella puerta, la que esta antes del ascensor, los jardines son extensos, tanto, que pueden servir incluso como sitio de emplazamiento de eventos, en ese sitio verán al thestral. -- El joven había mencionado la palabra "ver" casi por costumbre, aunque sabía que solo los magos y brujas que han visto a alguien morir, pueden ser lo que de "verdad" vean a esta enigmática criatura mágica.

Traspasaron la puerta de cristal y echaron andar por aquellos principescos jardines, solo flores de colores llamativos engalanan los jardines, y dos grandes pinos se levantan en las esquinas contrarias a la edificación, no encontraron de inmediato a la criatura, hubo que caminar un buen tramo. El rubio dejo que revisaran al Thestral y cuando anunciaron que habían terminado, él les dijo:

--Pues que bien, al joven Ryvak le alegrará saber que goza de buena salud, por favor acompañen me a la cuarta planta, a la habitación personal del matrimonio Ryvak, es ahí donde se encuentra el fénix.--Les condujo fuera de los jardines y de ahí al ascensor, que emitía esa música de piano mientras ascendía. Bajaron en la cuarta planta, a la derecha caminaron, ahí solo se veían dos puertas, esa ala de la planta eran dos grandes habitaciones, una de "huéspedes especiales" (pensada para el padre adoptivo de Ryvak, los padrinos o la "hermanita" del ojimiel (que no tenían más laso que una amistad tan inmensa que ella le adopto como "hermano") la otra era como un departamento lujoso; con sala, estudio, terraza, cuarto de juego, recamara, desayunador, y un guardarropa con su propio espacio de descanso.

 

 

 

 

Un largo silencio se hizo y el joven rubio, aguarda la palabra de la joven.

 

 

 

Ángela, repostera del Hotel con @@heberth portillo

 

 

La joven no podía entender lo dicho...o más bien, no podía dar crédito a sus oídos y se preguntaba si debía asistir o enviar una disculpa...

Todos en el hotel seguían con sus actividades y ella siguió a la elfina para que le mostrará a aquel joven

 

Llegando vio al mago y este se levanto, su saludo es directo así que tampoco se pone a dar rodeos.

 

--Mucho gusto diga usted, es motivo de regocijo escucharle sobre este tema en particular, es la primera vez que me ocuurre y me a llenado de sorpresa como de alegría. Ángela Quijano, a sus órdenes.

 

Asrael, sanador Principiante con @Zoella

 

 

--No has probado realmente mucho, digo, que Ángela es un verdadero ángel, con sus postres te hace sentir en el "cielo", no hay quien guste más de cocinar las cosas más dulces y delicadas para hacer feliz a cualquiera, ey, mira, halla va ella, es la joven castaña que esta con aquel joven, no estoy seguro si es amigo suyo, me parece que no.

 

 

Toma un poco del postre y mira a la joven acompañante para decirle un poco más sobre las cosas divertidas que hay en el hotel, es como si estuviera hablando de su "querida casa" y así parece, pues el mago ya lleva dos años en el hotel. Bebe un poco de la sangría preparada y usa la cucharilla para tomar con ella un poco de la fruta que hay en el fondo de la bebida con alcohol, varias veces a bebida de esta sangría, porque los amigos acostumbran celebrar bebiendo esta.

[heberth portillo]

Al llegar la chica que había preparado el postre se presentó como Ángela, era una castaña muy bonita sus ojos era muy hermoso, ademas de saber cocinar unos postres deliciosos también es una chica demasiado guapa y eso es algo realmente bueno.

 

- Es un placer conocer a la persona que ha hecho tan delicioso postre - le dije mientras señalaba el plato vacío- Realmente te quiero agradecer por tan estupenda recomendación de postre, de seguro me verán por acá más seguido- le dije mientras me preparaba para bajar a la primera planta.

 

Me despedí de la chica de una manera formal y muy respetuosas, baje a la primera planta a hablar con la persona que estaba a cargo del hotel porque Antoni no se encontraba, queria saber si sabía algo de él y que cuando podria encontrarlo, en el trayecto a la primera planta escuche un ruido de un ave el cual me genero curiosidad y en vez de bajar las escaleras lo que hice fue subir hasta el tercer piso.

 

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[Zoella Triviani]

- Veo que aquí todos se tienen cierto cariño, y hace del lugar un ambiente más ameno – Veo en dirección a donde señala y mis ojos se encuentran con una joven chica no tan alta de cabellos castaños. Llevando mis ojos nuevamente al rostro de Asrael, me le quedo viendo mientras come lo que le queda del postre. Creo que podría entablar una buena relación con él.

 

Escuchándole atentamente mientras me habla le sonrió viendo como me cuenta un poco del lugar con mucha alegría filtrándose en sus palabras. Poniendo mis codos en la mesa y recostando mi cabeza de mis manos le veo entretenida de su emoción al hablarme de cada uno de los espacios para los huéspedes.

 

- ¿Qué edad tienes? Disculpa si soy indiscreta pero me dio un poco de curiosidad – Le digo cuando termina de hablar mirándole cada detalle de su fino y joven rostro.

 

 

 

 

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[Anthony R. Dracony M.]

Elian, elfo del Hotel "Aliento de Dragón"en la tercera planta

 

 

Camina apesadumbrado, no se encuentra en la recepción ya que el supervisor Abizaid Mondragón, está a cargo y le ha enviado a ver que los huéspedes se encuentren bien y sus servicios contratados estén siendo brindados. Elian no ha podido recibir a ningún huésped estos meses, siempre el mago Mondragón se adelanta al elfo y atiende personalmente a los futuros huéspedes, eso le hace sentir que carece de importancia, recuerda como en los días anteriores a la inauguración del Hotel, el mismo propietario Antony Ryvak, le explico que su tarea principal era recibir y registrar a los clientes, apoyar en otras tareas era algo secundario, pero al nombrar supervisor a aquel rubio, el pobre Elian fue relegado.

 

 

Elian sabe que los magos Abizaid, Asrael, Alejandra y Ángela, son empleados pero amigos del propietario Ryvak, lo cual le deja a él a las órdenes de todos, sigue pensando en su vida laboral, a parecer de cada uno de esos magos y mucho se preocupa con aquel hecho acontecido mes atrás...la desaparición del joven dueño Ryvak Dracony y ahora también de la dueña y esposa de Ryvak...¿Qué será de Elian?

 

 

La preocupación por el incierto destino, lo hace sentir que lleva en los hombros una pesada carga que lo encorva, su mirada baja, sus pasos lentos, como si le pesará andar, no concuerda con su aspecto joven, pero sentirse abatido hace que sus orejas estén caídas y sus ojos grises húmedos por el sentimiento, dan una imagen que sobrecoge el corazón por la tristeza que trasmite su cara y cuerpo.

 

 

Se sorprende al encontrarse en la tercera planta con un joven mago, su entrenamiento lo hace actuar de inmediato, haciendo una reverencia.

 

 

-- Señor, buenas tardes, ¿puedo servirle? Pida a Elian lo que requiera que con gusto atenderé al señor--Una pequeña chispa vibra en sus ojos, al fin atenderá a uno de los clientes!

 

@@heberth portillo

 

 

Ángela Quijano, repostera del restaurante en el Hotel "Aliento de Dragón"

 

 

Ella fija la mirada en aquel joven mago, sus modales tan correctos la hacen sentir doblemente halagada, ya menciona estar complacido favorablemente por el postre que eligió para él comensal y le muestra su plato. Ángela tiene ganas de reír, justo su novio Alejandro le decía unas horas antes: "Mi vida, que hagas lucir tan bien tus creaciones, me crea un gran conflicto, no se como evitar sentir culpa al hacer "desaparecer" tan bella creación, pero a mi favor tengo que decir: fue lo más exquisito que he probado".

 

Con esa sonrisa guardada en la comisura de sus labios, la joven agradece al joven mirando lo con simpatía.

 

--Gracias, muchas gracias por decirme lo, es bonito que se tome la molestia de hacerme lo saber, gracias y yo también así lo espero, que venga más seguido y ya le iré mostrando más de mis especialidades, que con mucho gusto le daré a degustar.

 

 

Le da la mano al despedirse y lo mira marcharse, se da la media vuelta y se marcha a la cocina canturreando de extra felicidad.

 

 

Asrael, sanador Principiate con @Zoella

 

 

El pelinegro sonríe y sin pensarlo, pasa su mano por su cabello alborotado y mueve ese mechón que caía sobre su ojo derecho, despejando sus ojos que miran a la joven con gratitud y admiración.

 

 

Alguien podría asegurar, que la joven a puesto nervioso al mago, sencillamente esta maravillado, sus amigos Abizaid, Antoni y hasta Alejandro, son los que consiguen que las chicas giren a su alrededor...porque vamos! no es que él tenga la suerte del rubio de bellos ojos azules, o del peliverde con sus dulces ojos miel o del castaño que su mirar es de un zorro galante...él solo pudo aspirar a ser el "bromista" de ese grupo especial de amigos. Le parece estar en un bello sueño y continua platicando gozando de esa repentina suerte.

 

 

-- Si, precisamente esa fue la idea de Antoni Ryvak, nos reunión a nosotros, sus amigos en la desgracia de un ayer muy triste y sus amigos del colegio, pero solo permanecemos nosotros, no es la primera vez que vivimos juntos un problema, hemos enfrentado muchas cosas juntos y seguimos unidos porque nuestra amistad es lo más importante.

 

 

Termina su postre y aparta el molde, toma su bebida sosteniendo la entre sus dedos, parece que de ese modo maneja sus nervios y escucha a la joven bruja a la que si pensar mucho el porque indaga, le responde casi de inmediato sin abandonar su sonrisa.

 

 

-- Quince, soy el menor de los cinco, sigue después Antoni pero solo por meses, luego es Abizaid, Alejandro y Ángela...mmm eso si que no recordaba..........tengo que preparar algo, o empezarán a dejarse llevar por la desesperación, dentro de una semana es el cumpleaños de Ryvak, pero él se encuentra desaparecido, ¡se volverán locos si no aparece!

[heberth portillo]

Mientras mi curiosidad me hacía cambiar el rumbo de mi dirección y subir las escaleras al tercer piso, mi mente divagaba en especulaciones sobre el sonido que había escuchado anteriormente, esperaba que hubiera un animal mágico que no fuera visto antes, realmente me encantaban los animales magicos y mas sonreía al pensar que podría ver.

 

Subiendo me encontré a el elfo que me había recibido en la recepción, me dio gran gusto al verlo ya que asi podria preguntarle si había alguna criatura en esa planta para ver si tenía la posibilidad de verla; el se ofrecio amablemente a atenderme que si necesitaba algo; esto me hizo sonreír mucho más ya que era la mejor manera de saber si había algún animal en el hotel.

 

- Gracias elian, ya que lo mencionas sí - le respondí a la pregunta del elfo - quisiera saber si hay algún animal mágico en el hotel; es que realmente me encanta los animales y me gustaria saber si tengo la posibilidad de verlos- comente a el elfo que me miraba fijamente.

 

Esperaba la respuesta del pequeño elfo el cual se veía un poco pensativo; estaba haciendo toda la fuerza posible para que este accediera a enseñarme los animales y así poder pasar un rato más agradable. El hotel era maravilloso, su comida era deliciosa, sus postres exquisitos y el hecho de pensar que tenía animales me hacía emocionar mucho mas ya que seria lo mejor de todo.

 

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[Anthony R. Dracony M.]

Elian, elfo del Hotel "Aliento de Dragón"

 

 

Elian estaba muy gustoso por ayudar a aquel joven, después de haberlo recibido al ingresar al hotel, estaba más que alegre de brindarle los servicios que requiriera. Solo que el elfo tuvo que quedarse pensativo...¿sería bueno llevarlo a la tercera Planta? un par de minutos lo pensó, pero al estar aquella sala anotada en el folleto, decidió que no había motivo para que se enojaran si llevaba al joven a la sala que funcionaba como la sala cambiante.

 

 

--Muy bien señor, la verdad que si hay criaturas en este hotel, unas están en los jardines en la primera planta, otras están en la habitación de los Ryvak en la cuarta planta, pero en esta planta están las más interesantes...venga venga, le mostraré.--Elian le mostro el camino para ir a esa sala pensada para el juego de Goucha, entusiasmado por descubrir le al joven a esas criaturas. Estaban llegando y el elfo se adelanto unos pasos, tomo el picaporte y antes de abrir la puerta confio al joven:

 

 

--El compañero del amo Ryvak, ayudo a que esta sala de Goucha funcione muy parecido a la sala cambiante, con eso han hecho que esta luzca y sea como una extención de pradera y bosque, pase y lo verá con sus propios ojos.--El elfo se hizo a un lado para que el joven pasará y efectivamente, era como si estuvieran rodeados de naturaleza.

 

Caminaron por el lugar, el elfo sabía las criaturas que ahí tenían los amos así que no se asombro al verlos, eran un Ridgeback Noruego y un ave de Trueno...

 

 

--Aquí los tiene señor! ¿verdad que son de los más sorprendentes? --Menciono al joven que se notaba le agradan mucho las criaturas mágicas.

[heberth portillo]

Tenía la esperanza de que el elfo accediera a mi petición de subir a la otra planta y poder ver las criaturas; miraba fijamente la cara del elfo mientras este se tomaba su tiempo para dar respuesta a lo que le había comentado; cuando el elfo mostró en su rostro una sonrisa de amabilidad aceptando llevarme a ver las criaturas que estaban en esa planta, no podía disimular mi alegría, le sonríe muy agradecido.

 

El elfo me estaba guiando y a su vez me comentaba que había ciertas criaturas en la primera planta y en el cuarto de los Ryvak, pero me comento que en esa planta se encontraban los más interesantes, en cierto momento se adelantó un poco y se paró frente a una puerta con un gran picaporte, me miro y me comentó que detrás de la puerta había un tipo de sala cambiante, que antoni y uno de sus amigos crearon para visualizar un gran bosque.

 

Al abrir la puerta, el elfo me abrió paso para que ingresara al recinto, el cual realmente parecía un gran bosque frondoso, con grandes árboles y unas montañas lejanas, caminamos un poco hasta que el elfo me señalo a lo lejos a un Ridgeback Noruego el cual me sorprendió muchísimo al verlo, era grande y muy hermoso, antoni tenía excelente elección cuando se trataba de criaturas mágicas, me dio un poco de miedo al mismo tiempo.

 

-Elian no nos atacará cierto? - le pregunté con cierto miedo al elfo el cual parecía que no tenía miedo alguno - El te conoce a ti pero a mi no sera que me podría atacar? - le seguí preguntando - Sera que lo puedo tocar? - estaba muy entusiasmado al ver semejante ejemplar, era la primera vez que veía a un dragón tan cerca, queri poder tocarlo, pero me daba miedo un poco asi que espere a q el elfo me respondiera.

 

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[Zoella Triviani]

- Qué lindo ha de ser tener alguien con quien compartir tus tristezas y felicidades - susurro llevando la mirada a un costado, parpadeando un par de veces sintiendo la melancolía que me llevaba el recordar parte de mi soledad en la infancia. Recordaba las tardes felices con la hija de Candela, hasta que desaparecieron y no logre contactar al menos con Candela años después de lo sucedido.

 

Tomando compostura nuevamente y alejando los indicios de lágrimas de mis ojos vuelvo a sonreír un poco para seguir escuchándole. ¿Escuche bien? 15 años… vaya.

 

- ¿15? Waoh, no lo parece. Creí tenias más – Digo recostándome en el respaldar de la silla un poco asombrada y riendo tras mi último pensamiento – Aparentas más – Le digo volviendo a mi antigua posición y regalándole una amplia sonrisa. Escuchándole hablar de la desaparición del dueño del hotel el cual no conocía.

 

Quería seguir hablando con él, pero el tener poco contacto con otros me ocasionaba un límite con respecto a temas. Esperaba que el tomara el rumbo de un nuevo tema mientras tomaba un poco de la rica sangría de la elfina nos había traído anteriormente.

 

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