Tienda de Deportes The Infernal's Dragon's (MM B: 108283)

[Hades Ragnarok]

El Ragnarok guardo silencio esperando que Pandora el dijera alguna cosa, aun que parecía fuera de lugar o un poco nerviosa. Sin embargo, el cainita aguardo pacientemente a que la chica hablara. Dibujo una mueca de sonrisa al ver que la había asustado, aquello era extraño, era feo pero no era para tanto. Al la Dyonel hablarle confirmo sus sospechas, pero aun así la chica no le había dicho a ciencia cierta qué era lo que deseaba o buscaba en el local.

 

Tomo la tarjeta que esta le daba pero no pudo leerla bien ya que la chica se la quito y le entrego otra. Asintió, al parecer la joven tenía muchos más trabajos que él en diferentes lugares, bueno, no se podía quejar o hablar mucho ya que se la pasaba en san mungo al mayor parte del tiempo, rara vez iba a su mansión y en su tiempo libre iba a los negocios que eran de su propiedad, quizás lo que debía hacer era ir a buscar a su ahijada y llevarla a alguno de los negocios que poseía, allí seguro encontraría algo con lo cual divertirse, hasta podría darle la escoba voladora antes de tiempo y sin que Mei se enterara de aquello,.

 

-vale, lo tendré en cuenta y te escribirse o te avisare si necesito alguna cosa –comento el Ragnarok- eso me recuerda que debería pasar por el ministerio a pedir que conecten el negocio a través de la red flu con mi mansión y algunos otros lugares –sonrió- gracias por recordármelo.

[pandora dyonel]

abre tu mano hades nada de esto a nadie ok , dando un suspiro profundo confese algo

mira yo soy abogada de los mercaderes negros , aquellos de mercado negro claro

por eso ando nerviosa , pues nuestro jefe es el sr crouch , al decir ese nombre se me venia el mundo encima bueno de por si me trae corta , recuerda estoy para lo que quieras

dibujaba una risa de confiansa pero tenia un plan por el susto mmmmmm me llevo

la quaffel .

 

deja de mirar mi cuello te estoy biendo , con mi estatura de 1.68 me las ingeniaba para todos y tome lo que queria , ejjj ya te vi , algun dia te daras rienda suelta con mi cuellito

los ojos de velosiraptor no los quitaba , estaba por irme , algun dia te visitarte , pues tengo muchas ganas de ir , o mejor aun te invito un pastel , zack tiene una pasteleria

nos ponmos de acuerdo no , crees

[Mery Gaunt Karkarov]

Caminó despacio por todo el lugar mientras pensaba que era lo que podía hacer para entretenerse. Sin duda alguna la pelirrosa y una tienda de deportes no encajaban ni con cola pero, por un hermano se hacía cualquier cosa, ¿no? Observó varias equipaciones, las cuales no le sonaban absolutamente nada, pero una de las camisetas llamó su atención, era de colores verdes y,sin duda alguna, aquella sería su próxima prenda.

 

Giró su cuello para buscar a Hades entre las estanterías e intentando seguir su voz, aunque, como aquello fue nulo decidió hacer lo que mejo se le daba, llamar su atención por todo lo alto.

 

- ¡HADES! -gritó de una forma media y graciosa-. ¿Cuando me vas a regalar algo de tu tienda? -volvió a vociferar, acompañando esto con una fuerte carcajada. Colocó de nuevo la camiseta en su sitio, no sin antes memorizar donde se encontraba y como era, estaba claro que aquello sería parte de Mery tarde o temprano.

 

Siguió caminando por toda la tienda hasta llegar a un apartado donde se encontraban todas aquellas pelotas de distintas formas, colores y tamaños, donde se encontraba también una chica y Hades.¿Dónde demonios se había metido aquella chica desconocida?

 

Caminó de nuevo por toda la tienda sin encontrarla, aquello era más que sospechoso y si la vampiresa no tenía demasiada confianza con aquella chica, tras aquella desaparición hacía que Mery sospechara más. Suspiró resignada y caminó de nuevo hacia su hermano, el cual hablaba con una chica bastante rara, o incluso más que eso. Cruzó sus brazos y alzó una ceja para observarla mejor. Se podría decir que aquella era la primera vez que la mortifaga tenía miedo de una persona.

 

- Oye hermanito, ¿estás seguro de que no me quieres de guardiana del local? -le preguntó de forma seria-. te aseguro que no mato a nadie que no se lo merezca -y sin poder evitarlo soltó una carcajada.

 

@@Hades Ragnarok

[pandora dyonel]

mire aquella chica de cabellera hermosa , claro un poco de envidia no lo niego , hermano , valla guardas muchas sorpresas , disculpa mis modales me presento , pandora tonks malfoy

me apena que pienses mal , me moria de la verguensa pues tenia que hacer algo ya..

bueno , soy amiga de tu hermano , nada mas que bine a comprar , ajjj genial no , los nervios se evaporaban pufff , guarda las 2 tarjetas ok , te serviran de mucho

 

[Hades Ragnarok]

El vampiro seguía hablando con pandora cuando escucho el grito de su hermana, no era un grito normal, más bien era el tono que usaba la pelirrosa cuando deseaba algo del vampiro, era como aquello que solían decir los muggles tipo… “¿verdad que tú me quieres?” y terminaban pidiendo algo. El Ragnarok no pudo más que sonreír, ya su hermana menor se había tardado mucho, al fin había encontrado algo que el gustará entre todas aquellas cosas deportivas. Lo peor es que Mery sabía que de una u otra forma terminaría obteniendo lo que ella deseaba de él.

 

Rio ante el comentario de la chica, era la segunda vez que le decía aquello. Negó con la cabeza, la verdad s que sería divertido trabajar con su pequeña hermanita, al menos podría divertirse molestándola o simplemente vigilándola para que no se metiera en tantos problemas. Además, existía el hecho de que frecuentaba a personas indeseables a las que le gustaría sencillamente cortarles la cabeza y torturarles lenta y dolorosamente.

 

-No se hermanita, creo que me lo estoy pensando seriamente, pero ¿Qué ganaría yo con eso? –Bromeo divertido- y según escuche… -refiriéndose al grito que la chica había pegado hacia unos segundos- creo que al fin encontraste algo que te gustara, o ¿me equivoco? –Pregunto el Ragnarok volteándose para verla con las manos vacías- quizás no encontraste nada, no te veo con nada en tus lindas manitas –rio divertido.

 

El vampiro volteo a ver a Pandora quien ahora parecía un poco más nerviosa o se estaba recomponiendo de la sorpresa. Escucho como esta se presentaba ante Mery y lo que le dijo después a él. El cainita asintió y sonrió guardando ambas tarjetas en el bolsillo de su túnica de trabajo.

 

-Muy bien, las guardare y si necesito algo te llamaré –dijo sonriéndole- y pues, espero que consigas algo de tu gusto en la tienda, la verdad tenemos un amplio surtido de cosas –comento el Ragnarok, luego de aquellos e volteo para ver a Mery- a ver ¿Qué era eso que andabas gritando que seguro te escucharon hasta en el ministerio? –dijo divertido moviéndose tan rápido que la chica no le dio tiempo a nada para llevarla de caballito.

 

@@Mery Gaunt Karkarov

@@pandora dyonel

[pandora dyonel]

Deje lo que queria lastimosamente , asi que fui a tomar una escoba mi tiempo se termino , mire mi reloj de volsillo pues indicaba lo exsacto hora de irme , dando un silvido muy aguardientoso , llamo la atencion de los hermanitos , ok me llevo esto , linda me llevo la escoba

 

 

Lo siento es hora de irme , algun dia los visitare lo prometo va , o como sea a ver que rayos hago

 

No tan solo era eso mi carta de las clases de defensa contra las artes oscuras llego , vamos bie , vamos bien

Buen chicos yo aqui me despido . , adios , de una forma genial me fui ( chasqueo los dedos y desapares entre llamas lilas)

[Hades Ragnarok]

El Ragnarok observo a Mery quien se había quedado callada de vuelta para luego prestarle atención a Pandora. Cuando esta se movió la siguió con la mirada y segundos después fue tras ella para ver qué era lo que deseaba o si podía ayudarla, sin embargo, la chica encontró lo que requería antes de que él pudiera volverle a preguntar si buscaba algo en especial. La observo escoger una escoba, quizás la joven aun no había aprendido a volar, no recordaba que en la actualidad en Hogwarts se diera aquella asignatura, a menso que fuera claro estaba una habilidad de la universidad.

 

Sonrió, él le había dado clases a la chica por lo que sospechaba que su hipótesis era cierta, a menos que alguien le hubiera enseñado, esa ya era otra cosa. Se encogido de hombros y asintió una vez que Pandora dijo que aquello era lo que quería, sin más la envolvió para que la joven pudiera llevarse su artículo deportivo y después de recibir los galeones por aquella venta despidió a la Dyonel quien en un segundo había desaparecido de la tienda junto con la escoba, dejando aquellas 2 tarjetas de presentación.

 

Suspiro y busco a Mery, Rio divertido al encontrarla, estaba mirando algunas cosas por lo que podría darle un buen susto o simplemente jugar con ella aprovechando que no había más clientes.

[Jank Dayne]

- Expecto Patronum!

Fue lo que se le escuchó decir a Jank Dayne cuando su cuerpo, envuelto en una túnica azul celeste con tirones blancos que destellaban brillos ante la luz inclemente del sol diurno, se le vio llegar al Callejón Diagón, haciendo surgir una hermosa Esfinge que, formada en cientos de hilos plateados, se materializó frente a su figura a la espera de un mensaje conciso. Mientras caminaba, la estela le seguía, atenta a cada movimiento de sus labios, como si de ello dependiera su vida. Y, en cierto sentido, así era.

- Avísales a todos que vengan ya a la Tienda de Deportes The Infernals Dragons - Jank se relamió los labios después de leer el título del local en la entrada; detestaba a las personas que no podían resumir ni siquiera para vender, como si llamase más la atención un nombre cansón y extenso que nadie terminaba de leer completo antes de seguir de largo - que traigan sus varitas bien listas, que las usarán.

Así, el hombre se introdujo al desconocido lugar por la puerta principal, elaborando un sencillo hechizo de localización. Una luz blanca iluminaba su rostro y, aunque quisiera no tenerla, Jank sabía que no había opción alguna. The Infernals parecía acojedor, pero no lo suficiente como para nublar su perspectiva.

- El detector nos ha indicado que aquí se encuentra un sospechoso de magia oscura - dijo, buscando entre los presentes a Hades Ragnarok y, cuando lo localizó, le apuntó con su varita.

[Lisa Weasley Delacour]

Un patronus, una esfinge, un ideal, una misión. Como warrior no tenia opción. Me pase la varita por el esotro, creando así una luz que impedía al resto del mundo reconocer mis facciones. Por el momento seguiría siendo así, luego, tal vez mañana, todo podría cambiar. Estaba orgullosa de quien era, de que camino había tomado y cuales eran mis valores. La mascara luminosa era una medida de seguridad para los míos, los cuales me hacían seguir luchando y hacia delante.

Desaparecí del castillo Hunyad, dirección Londres. Hank, el joven demon hunter, necesitaba mi ayuda. Hice acto de presencia a diez metros de la Tienda de Deportes The Infernals Dragons envuelta en una nube grisácea, propia de mi personalidad. Kim, en mi diestra, vibraba, con la misma fuerza que la adrenalina asolaba mi espina dorsal. Camine con paso autoritario y la cabeza en alto para eliminar la distancia que me separaba de mi objetivo. En mis verdes ojos decisión y honor. Ingrese al local, siguiendo la estela de mi AR hasta dar con el Ragnarok.

[Jank Dayne]

- Ardius... - empezó Jank, concentrando su energía mágica y haciendo que drenara hasta su varita mágica, la poderosa e incomparable Libra - ¡Confundus!

 

Terminó, en un pensamiento agresivo. La mente de Hades fue invadida inmediatamente por una confusión terrible, a tal grado que podría concentrarse de ninguna manera y, por ende, perdió toda capacidad de formular cualquier tipo de ataque o defensa durante breves lapsos de segundos, los cuales trataría de que tanto él como Lisa, quien acababa de acudir a su llamado, sacaran provecho al máximo. Quizás ideando una que otra estrategia. Jank le hizo un gesto a Mery, para que se apartara; no merecía resultar herida o afectada.

 

- ¡Lusentium! - dijo justo después, haciendo que una onda mágica se expandiera y chocara contra el cuerpo de Hades, quien se encontraba a unos siete metros. Al instante, el poder de la onda logró quitarle el sentido del gusto, por lo que el mago quedó totalmente sin la capacidad de hablar o usar su lengua para conjurar cualquier tipo de magia, algo efectivo en ese caso.

 

- ¡Strellatus! - culminó, afectando los ojos de Hades con un flash mágico que le dejó ciego debido a una infección poderosa.