Prueba de los Hablantes de Pársel #3

[Amya An]

El trash-trash de las pisadas de los pies de Sagitas por detrás de ella (?), le despejaron un poco el cerebro pero no le restaron el tembleque que ya lucía.

 

La runespoor conversaba entre sus 3 cabezas y discutían entre ellas (en pársel por supuesto) sobre la mejor manera de obtener su Recompensa salvar a su Dueña.

 

- Shhhh, déjense de cuchichear que me late el seso ...

 

Rogaba porque aquello era peor que una buena resaca.

 

Intentaba hilar sus ideas mas ya deliraba como Homero Addams en escena de la peli II, después de que el bebé "enfermase" (?)

 

- Señooooor ... ♪♫ oh gran señoooooor ... (se echó sobre sus rodillas, con el huevo aún en su izquierda pero elevándola como si se tratase de cántico religioso, xDDD) ... pieeeedad para este triste pecadooooor ♪♫ ...

 

Le sudaba hasta lo indecible y aunque se hubiera acordado de la pócima de lágrimas de fénix, no le hubiera servido.

 

Nuevamente ; Moe - Larry - Curly, tuvieron que negociar por ella ... Moe la del medio, era la líder del trío.

 

Le contó que sería mas entretenido ver como las 2 hermanas humanas solitas se destripaban por dentro de la pirámide mas adelante, después de todo, si restaba "carne" (de ellas), seguro su amo arcano les convidaría un poco a él por el buen servicio prestado (?)

 

Si además de ello, Moe le prometió algo mas al basilisco ... como las botas de la bruja que eran de buen cuero, ó algún chuche dulce de sus bolsas ... solo ellos cuatro los sabrían (las 3 cabezas de runespoor y el del arcano ... si no es que el Lawan mismo)

 

Acordaron.

 

La bruja estaba tendida boca abajo, lo que facilitó que el bicho le chorreara de su colmillo en las heridas aún abiertas de la mordedura cobril.

 

En cuanto hubo hecho su parte, reclamó su paga ; el huevo, pero en cuanto la bruja sintió que quería quitárselo, inimaginablemente, ella reacción veloz y conjuró ... ¿un patronus?

 

De la punta de su varita una Mamba Negra se materializó (humito brilloso, xDDD)

 

- S.O.S. ... sssss ... S.O.S. ... bruja morida ... enviar chocos ...

 

La Runespoor sintió pena ajena (=vergüenza) y no le quedó de otras de enrroscar la cola en una de las patas de Amya_An y arrastrarla hacia adelante, hasta que a ésta se le fuera los efectos del veneno culebril.

 

Lo que sucedió luego, con el arribo de Sagitas no se enteró hasta que escuchó que pronunciaban la palabra "agua".

 

- Agua ... yo agua ...

 

Iba recuperando el sentido pero aún estaba un poco ida.

[Sagitas E. Potter Blue]

¡Pero bueno! ¿Un patronus en forma de serpiente rara? ¿Es que eso era una provocación? No sé cuánto tiempo llevaba ese patronus en el aire. No lo había visto antes (y mira que brillaba) porque me moría de sed y me había tirado al suelo. Hasta que no me di la vuelta y contemplé el edificio desde abajo hasta el techo no me di cuenta de él.

 

Era la primera vez que lo veía pero no por eso dudé un instante sobre de quién era: la voz de mi hermana, ya casi inaudible, susurraba algo de un socorro y de chocolatinas. Era el patronus inconfundible de Amya.

 

Y encima, ella estaba allá, pidiéndome agua. Sé que debo de ser más reflexiva y no dejarme llevar por impulsos. Pero que lo sepa no quiere decir que lo cumpla.

 

-- ¿Quieres quitarme también MI agua? Primero la lagartija y ahora el agua. ¿Qué vendrá después, mala hermana?

 

Y moví la varita, que estaba enganchada en mi pelo, para invocar mi patronus: una rana con ligeros tonos verdes y naranja entremezclados con el plateado típico de estas invocaciones surgió y sacó la lengua a la serpiente mamba de mi hermana. Cerré los ojos, cansada, dejando que los dos patronus se pelearan entre ellos (si es que eso hacían este tipo de hechizos, supongo que sí, si es que heredan la psicología de sus dueños).

 

Ahora que pienso, si era capaz de hacer un patronus, ¿por qué no un Aguamenti? Abrí la boca y dejé que el chorro golpeara con fuerza mi cara, a la vez que el suelo en el que me apoyaba. A veces me olvidaba que sabía hacer magia. Estaba fresquita y enseguida pude pensar con más claridad. Así que me senté en el suelo y contemplé al pobre Arcano. Creo que no le gustaba demasiado pero yo no me dejo intimidar con tanta facilidad.

 

-- Señor Arcano, espero que no le deje cruzar el Portal a mi hermana porque es una descarada y una ladrona de lagartijas. Usted debiera entender eso, quitársela y devolvérmela.

[Amya An]

Mientras su hermana habla de no se qué cosas con el arcano (a ella aún le zumbaba un poco la cabeza), se arrastró de panza al suelo hasta las piernas ¿flacas? de la peli-violeta y se puso a lamer allí.

 

¡Mal educados!, claro que ella intentaba llenarse con las escasas gotitas de agua conjurada por Sagitas misma, que se habían quedado rezagadas sobre sus telas.

 

- No te muevas, bruja! tengo sed!

 

Parecía perro faldero buscándole el cariño con la cabeza (?)

 

No había perdido su varita, pero era mas fácil y rico, de lo ajeno (!)

 

Casi a sus espaldas y por encima, la Mamba y la Rana hacían de su Danza Guerrera casi artística. Una y otra de alguna manera se sacaban la lengua. La primera azotaba con su cola culebril y la otra saltaba ... o.O en serio parecía que jugaban ya a saltar la cuerda pero con cola de Mamba.

 

- Es mía! se come todos mis donuts, así que me pertenece ... Estoy lista, denme mi anillo ...

 

Dijo peligrosamente altanera al arcano (peligrosamente para ella porque ahorita el otro la descuartizaba por la impertinencia) evidenciando alguna clase de borrachera que le daba de esa "valentía" para expresarse aí.

 

Ya sabía cómo iba la cosa, se había leído el folleto informativo (?), así que era conseguirlo ó morirse en el intento, porque si retrocedía ahora, de todas formas, lo mas probable, es que el parseliano no le permitiese volver a intentar la prueba.

 

- ... dele, que ya hice mis arreglos funerarios en vida, y en mi testamento ya está escrito y notariado que quiero que me entierren con todos y cada uno de mis calzones (refiriéndose a sus ¿riquezas? ... cuáles?)

 

Nuevamente le extendió las manos ... es que no sabía en cuál iba el suyo y no sabía cómo le iba a hacer si eran mas de 9 (anillos de arácnidos en total, mas libros y su matrimonial, xDDD ... terminaría pareciendo Mr. T)

[Lawan Nguyen Thanh]

Una vez Taurogirl atravesó el portal, Lawan podía observar todo lo que hacía por el anillo que los conectada, de este modo no tendría problema alguno para estar pendiente de las otras dos que aun no llegaban. El Arcano temió que el basilisco se las hubiese tragado entera, ¿y si se enfermaba? Nada era peor que cuidar a un basilisco cuando no podía dejar de vomitar, por lo que decidió ir a espiarlas fuera de la pirámide y allá en la lejanía fue que pudo verlas. Como no quería que lo encontraran ahí espiándolas, volvió a ingresar a la Pirámide, si acaso llegaban con vida él las estaría esperando.

 

— ¡Veo que por fin han llegado! Estaba a punto de irme —empezó a decir sin hacer caso a las súplicas por el agua y sólo hasta que Sagitas se acordó de que podía hacer magia, el vietnamita le lanzó dos chorros de agua en la cara a cada una para ver si se despertaban.

 

— De pie, no van a entrar arrastrándose a la prueba, ¿o me van a decir que el haber pasado tanto tiempo con las serpientes las ha hecho actuar como ellas? —viniendo de esas dos no le extrañaría que de ahora en más empezaran a arrastrarse — ¡Y más vale que dejen de pelear! No tengo a Wootang aquí, pero sí un basilisco que estaría encantado de llevarse una pierna de cada una —las amenazó.

 

— De nuevo acérquense —en sus manos ya tenía los dos anillos que les entregaría — A partir de este momento todo lo que suceda dependerá de ustedes y yo no estaré ahí para cuidarlas —expresó con alivio —Una vez crucen esta puerta serán llevadas a cualquier lugar del mundo, al pasado, presente o futuro, incluso a otros universos y planetas que en otras circunstancias no conocerían. Es momento de que se prueben a sí mismas si merecen o no portar el anillo de Hablante Parsel, por lo que una vez más les pregunto. ¿Están listas para la prueba? —ni bien terminaron de responder, Lawan hizo un ligero movimiento de su mano derecha, lo que provocó que una fuerza invisible las empujara a ambas a través de la puerta y así como Sagitas y Amya desaparecían, Taurogirl regresaba.

 

— Tú también has vuelto —hizo una pequeña pausa —Esto demuesta que eres merecedora de la habilidad y si la puerta te permitió volver es porque demostraste lo necesario. Mi trabajo contigo aquí culmina, el tuyo continúa —dicho esto, Lawan tocó el anillo de la muchacha con la vara de cristal, de este modo terminaba de sellar la habilidad —Felicidades, puedes marcharte.

[Amya An]

- Ah bruto!

 

No pudo contener la exclamación pues como víbora escupidora, el Lawan le había echado algo en la cara (y mas le vale agua potable y no pis ... de lo que sea)

 

Refunfuñó secándose los 2 ojos.

 

Se encogió de hombros ; « Nos amenaza con dejarnos cojas de patas después de decir que no seamos rastreras ... hombres, ni siendo arcanos se salvan de sus ... », se dijo mentalmente recibiendo el anillo que le correspondía.

 

Miró de reojo a su manis ... aceptaría (vamos! sí, cómo nó!) ó se devolvería para su casa.

 

En cuanto sintió que se engarzaba mágicamente en uno de sus flacuchos dedos (anillo no hermana, xDDD), miró al arcano y apenas ella dijo sí ...

 

- ¡Maldecido!

 

El condenado bicho las expectoró con un especie de puntapié mágico hacia el portal.

 

Al cruzar ese velo dimensional, apretó los ojos, las mandíbulas y hasta las pompis. No obstante que sabía que le había como que empujado hacia atrás (que la bruja aún miraba al feyo ése cuando hizo lo que hizo) ... nada! abrió los ojos y estaba en pie, paradita como si nada en medio de la nada.

 

No lo comprendió.

 

Pensaba que la prueba conllevaría el mezclar parte de sus recuerdos, alguna vivencia con la cuestión pársel, pero no ... esta vez no (al parecer)

 

Se podía ver las manos pero mas allá de la distancia de extender el brazo ó una pierna era total y absoluta oscuridad.

 

- Hola?

 

Ni su Runespoor había ingresado con ella.

 

- ... como pretenda quedarse con mis 3 chiflados, lo fusilo!

 

Amenazó al arcano sin dejar de girar sobre sus pies constantemente para ver si divisaba algo, cualquier cosa.

 

Y allí estaba ... un pequeño niño de espaldas a ella, agachado moviendo una culebrita que mas parecería una lombriz con una ramita pelada.

 

- Ey! basta!

 

Dijo ella.

 

¿Ella?

 

Si su voz de por sí es chillona se oía como si ...

 

- Qué ha pasado? soy niña?

 

Se miraba los ojos con asombro y solo salió del susto aquel cuando oyó en el viento un shhhhh familiar y al pequeñajo que no dejaba a la bichita en paz.

 

- Te dije que pararás!

 

Y sintiéndose tal cual nena, empujó por sus espaldas y hacia un lado al mocoso abusivo. De inmediato de la culebrilla pudo escuchar con absoluta claridad un "malditos humanos" lleno de odio y en tono amenazador.

 

En ella fue natural el entendimiento inmediato y a pesar de que el otro crio (porque ella se veía como crio también) le había parecido un abusón de primera, no soportó la idea que lo mordiera la bicha.

 

Se interpuso entre ambos y ordenó en el mismo habla de la culebr y con el mismo coraje infantil del que no va consciente de las consecuencias de sus actos ...

 

- « Atrás »

 

En cuanto encaró al animal, éste se contuvo y fue en esa fracción de segundos que todo se disolvió a su alrededor como polvo.

 

Ella retrocedió un paso, confusa.

 

Volvía incesante la cabeza de aquí para allá sin entender. Otra vez estaba en ese limbo .., se sentía como subida en un escenario en preparación del verdadero show.

[Sagitas E. Potter Blue]

-- Gruñón -- le espeté al Arcano.

 

No, no se lo dije en idioma cristiano, ni en parsel, no estoy tan loca. Se lo dije en un dialecto local de mi tierra que sólo entendíamos los nativos, así que dudo que se enterara del insulto. Pero, por si acaso decidía cumplir su amenaza de darle nuestras extremidades con pies al basilisco, preferí no arriesgarme y acertar el anillo antes de volver pá trás y encontrarme con la bestia (no, mi hermana no; el Basilisco de la entrada).

 

-- ¡Estoy más que lista! ¡Soy la listura en persona! -- ¿Lo qué...? Creo que esa palabra no existía. -- Yo estoy super lista para pasar la prueba y recuperar la lagartija.

 

Eso también lo dije flojito, pues al fin y al cabo, el Arcano sólo necesitaba saber que me comprometía a seguir adelante y enfrentarme a cualquier cosa que nos deparara el Portal. ¿Quién dijo miedo? Bueno, mucho miedo, pero más rabia también al ver que Amya tomaba uno de los anillos y se lo ponía en el dedo antes que yo.

 

-- ¡Ese era el mío! -- protesté. Si el Arcano creía que mediante amenazas íbamos a dejar de pelearnos, es que no nos conocía bien.

 

No me dio tiempo de más. Algo (o alguien, seguro que aquel Taiwan estaba de nosotros hasta las mismísimas narices y nos había tirado pa'dentro para cerrar manualmente el Portal y dejarnos atrapadas) hizo que entrara de un empellón y que por poco probara el suelo con las narices.

 

-- ¡Eh, eh, sin empujar, que ya entraba yo solita!

 

Silencio...

 

Me incorporé, intentando poner una postura digna. No se veía nada. Todo era oscuro.

 

Silencio.

 

Silencio...

 

-- ¡Esto... ! ¿Hola?

 

Allá a lo lejos, dos ojos rojizos parecieron abrirse en lo negro. O era un efecto de mi vista cansada o es que estaba en peligro.

 

-- ¡¡¡Glups!!! Siga durmiendo, sea lo que sea. Si quiere, le canto una nana...

[Amya An]

Eco?

Eco...

Eco...

 

Pegó el respectivo brinco hacia atrás.

 

Sacó la varita ... ¡la tenía! ¡no solo éso! Sus manos volvían a ser ...!!! larguiruchas y algo ... TwT ajadas

 

Suspiró.

 

- Hola? ... hay alguien ahí?

 

Escuchó como un arrastre a su alrededor y lo primero que vino a su mente fue su hermana.

 

- Sagitas?

 

Llamó un poco mas bajo por si lo que sea que fuera precisamente que arrastraba el cadáver morido de la peli-violeta (?), la escuchase.

 

- « Quién eres... ? »

 

Pronunció en parselino y postura defensiva en preparación de que le brincara "el lagarto" (conste! uso un animal que no le he leído a nadie, xDDD)

 

Otra vez ese ruido y de inmediato, meneó la varita para conjurar :

 

- Serpensortia...

 

En aquel lugar y solo allí, empezaba a sentirse segura solo con una bicha cerca (paranoia). No sé si de ésta provenían los ojos que veía su mana ó en definitiva eran de algo mas peligroso que ambas juntas (!)

 

Entonces a sus espaldas sintió un Ohhhhhhh espectral que le pararon todos los pelos del cuerpo en punta.

 

Hasta encogió el cuerpo.

 

Apretando la varita en su mano giró muy lentamente y para su horror ...

 

- ¡BOOOOOOGGART!

 

Mas que mirarlo presencialmente (?, lo que vendría ser su forma original desconocida), lo sentía hasta en en el apéndice)

 

En su pánico, retrocedió demasiado rápido y sin coordinación de sus patas tropezándose de pompis al suelo.

 

Perdió temporalmente la varita, por lo que no podía lanzarle el Riddíkulus de ley.

 

Agitada, literalmente arrastró sus posaderas en reversa presa del pánico pues el "coso aquel" adoptó el miedo que en ese mismo momento padecía (no, no el arcano en persona ... quizás lo habría vestido de burlesque, xDDD)

 

- ... basilisco ...

 

Si era el de Lawan (Wootang) ó el de las afuera del Labe ... ¡el que fuera! incluso el del circo de su hermana TwT

 

- « No me comas ... »

 

Casi rogó en lengua bicha (y por poco se le suelta la pis encima)

 

- « ... somos familia y la familia no se come ... »

 

Bueno, decir familia era referirse a que poseían (lo hacían?) cierta afinidad ... era bicha, ella Sly ... bueno también algo de bicha y el arcano insinuado que hasta rastrera, xDDD.

[Sagitas E. Potter Blue]

Aquellos ojos parpadearon un par de veces, así que supe que era algo/alguien vivo. ¿Pero qué animal tendría unos ojos tan rojizos? ¿Un basilisco, quizás? No, tenía uno y eran más bien rojizos.

 

Me acerqué despacio y sentí el raspar de las escamas en el suelo. Fuera lo que fuera, era una serpiente de las gordotas, si hacía aquel ruido y tenía unos iris tan grandes. Me paré y Ello se paró también, dejando de hacer ruido. Me estremecí y tuve ganas de salir corriendo. ¿Pero adónde? El Arcano se había encargado (a alguien tengo que echar la culpa) de cerrar el portal para que no nos escapáramos. Seguro que quería que pereciéramos.

 

Aunque fuera así, al menos intentaría durar un poco más... ¿Mordería?

 

-- Hola, soy Sagitas, una invitada del Arcano de los Hablantes de Parsel y me ha dicho que aquí encontraría ayuda para... -- gemido -- para atravesar estas tierras y... -- gemido más agudo. -- ¿Te pasa algo?

 

Es que no sirvo para tener cautela. Puedo morirme de miedo pero siento que alguien tiene "pupa" y caigo como tonta ante las lágrimas de un cocodrilo. Yo y mi amor por las criaturas. Aún así, avancé con cuidado y con la varita en la mano. Una varita que me sería totalmente inútil porque no recordaba ni un sólo hechizo en aquel momento, bien podía servir para limpiarme la cera de los oídos.

 

-- ¡Por los dioses! Si eres un... una... ¿qué cacho de bicho eres tú? Con la mejor de las intenciones claro, bicho en plan amable.

 

Estaba segura que aquella criatura escamosa era hermana directa de la serpiente del Taiwan, o prima al menos. Era enorme, plateada, con unas fauces abiertas y con una cola enganchada en un tronco rugoso y lleno de hiedra venenosa. Bueno, venenosa para mí, como humana, como mucho sería urticante para ella. Pero la serpiente gemía y tironeaba de su cola. Era extraño cómo se movía y, sin embargo, no destrozaba aquel árbol medio seco que seguro que se rompería con un soplido.

 

Me sentí curiosa, otra de mis desventajas de carácter. Si no fuera tan peculiar con mi inexcusable deseo de entender todo lo que me rodea, no me vería metida en tantos problemas. Sin embargo, me pudo el impulso y me acerqué un poco más. La cabeza de la serpiente siseó de forma brava y se acercó a mi rostro, tan cerca, que pude ver que necesitaba un buen enjuague bucal y que una gotita de veneno resbalaba por uno de sus dientes huecos. Retrocedí un paso y levanté las manos.

 

-- Te puedo ayudar -- susurré. No por respeto sino porque no me salía la voz. Fue entonces cuando aquel bicho parpadeó de nuevo y me di cuenta que me entendía. ¿Había hablado en parsel? -- Soy amiga del Arcano y amiga de todos los reptiles.

 

Eso era decir mucho, así que, en realidad, estaba exagerando un poquito, pero el bicho no tenía porqué saberlo.

 

-- Duele...

 

Parpadeé. ¿Le dolía la cola? Bueno, era algo normal por la forma en que la tenía enredada en aquel árbol. Sin embargo, aún no entendía porqué no lo destrozaba y se salvaba. Después sólo tendría que hacer una muda y se desharía de los pinchos de la hiedra.

 

-- Yo te ayudaré -- le dije, acercándome al árbol y levantando la varita.

 

-- ¡Noooooosshhhhh! -- siseó, con violencia, alzando su cabeza y parte de su cuerpo delgaducho (es un decir, era más gruesa que yo) hacia mí. Me pilló de sorpresa y caí al suelo, dándome un golpe en salva sea la parte trasera. Mañana tendría un moretón enorme que tendría que justificar ante mi marido. -- Lo... Protejo...

 

Arqueé una ceja. ¿Protegía al árbol? ¿Es que era un árbol sagrado o así? Yo no notaba en él nada en especial, excepto que estaba algo seco y lleno de musarañas entre los hierbajos y la corteza.

 

-- Pero te duele -- dije, sin entender nada.

 

El ofidio bajó los ojos y se enroscó en torno al árbol, pero con una actitud que yo hubiera calificado casi de cariño. Aquello era increíble, la serpiente cuidaba un árbol, eso era...

 

-- ¡Oooooh! -- entendí de golpe. -- Tendría que haberme dado cuenta antes. Esa actitud... Es de una madre protectora. Me recuerdas a mí misma cuando mi niñito... ¿Tienes ahí a tu hijo?

 

¡Por fin notaba algo de calidez en aquella mirada. Casi me pareció humana. Todo lo humano que puede ser un bicho tan grande, rasposo, escamoso y colmilludo. Pero las madres somos todas iguales, protegemos nuestra camada a uñas y dientes.

 

-- ¿Me dejas mirar? Prometo no hacer nada sin tu permiso. Podemos analizar la situación y crear una acción conjunta para... -- ¡Leñe, hablaba con una serpiente de tácticas casi militares. -- Hum... Entre las dos podemos solucionarlo -- dije, en forma más clara.

 

Es curioso como dos naturalezas tan distintas y tan antagónicas pueden entenderse y colaborar cuando la situación se tuerce. Aquella mami (juro que hasta me parecía que tenía pestañas femeninas) necesitaba ayuda y aceptaba la ayuda de un humano por el bien de su hijo. Pero... ¿confiaba en mí de que no lo mataría? ¿O podía confiar yo en ella de que no me mataría cuando todo quedara solucionado?

 

Los problemas se solucionan a medida que llegan...

 

Me asomé en el hueco pequeño que ella me dejaba. Juraría que había una mueca de dolor en aquella cara triangular pero no podría asegurarlo. Había una astilla bien gorda que le cruzaba la cola y se clavaba en el árbol de forma profunda. De una forma inestable, un huevo (feísimo, por cierto, pero eso no lo diría nunca en voz alta, todo rugoso y con vetas verdosas) encajaba entre la cola y la madera. Cualquier movimiento le haría caer y romperse. Por eso la serpiente no rompía el árbol. Sería fatal para su descendencia...

 

-- Hum... Si desaparezco la astillita (?) podrás liberar la cola pero dudo que nos dé tiempo de agarrar el huevo antes de que caiga al suelo. Tal vez si uso un Accio o un Wingardium...

 

La mirada de aquellos ojos rojizos me dijeron que era mala idea, que no iba a dejarme arriesgar el huevo.

 

-- Hum... Hay otra solución pero... -- No había traído los guantes de dragón, aunque dudaba que al bicho le gustara ver la piel de un pariente en mis manos. -- Traigo el anillo antiveneno. No sé si funcionará del todo contra la hiedra venenosa, pero me puedo arriesgar. Meto las manos a través de la corteza, sujeto el huevo y lo cobijo. Después tú sacas la cola. ¿Qué te parece?

 

-- ¿A... través...?

 

La serpiente era lista. Tal vez mi parsel no fuera muy bueno (que lo era, sin duda) pero ella misma entendía que no podía ser a través... Sonreí.

 

-- Soy una gran maga, confía en mí.

 

Era más fácil decirlo que hacerlo pero eso no tenía porqué saberlo. La Salvaguarda Mágica era fácil para mí y atravesé el árbol con mis manos. Las puse debajo del huevo en forma de nido y esperé a que el hechizo acabara. No duraba mucho así que pronto sentí la presión de la madera contra mi piel y el dolor inmenso del veneno de las hojas.

 

-- Rómpelo -- dije entre dientes a la serpiente. Parecía dudar. Tenía que hacerlo cuanto antes puesto que podría perder mis manos si la corporeización se seguía formando pero no antes de que mis manos fueran tangibles de nuevo o el huevo caería de aquella altura y se estrellaría. -- ¡Rompe el árbol ya!

 

Ni en mis locuras más insospechadas hubiera imaginado que le chillaría a una serpiente gigantesca. Pero en aquel momento, el dolor se estaba haciendo insoportable y dependía de ella. El golpe fue tan brusco y tan fuerte que me asusté, a pesar de que lo esperaba. La serpiente golpeó el tronco con tanta fuerza que medio árbol, ramas y hojas salieron volando de forma brusca hacia el infinito. Aparté la cara mientras algunas astillas me golpeaban. Caí al suelo de lado, sujetando el huevo. La Serpiente se lanzó contra mis manos y... Creo que pensé que me iba a atacar. En realidad, recogió el huevo entre sus mandíbulas de forma tan suave que sus colmillos ni me rozaron. Fue todo tan rápido que cuando quise darme cuenta ya se alejaba a una velocidad increíble, dejándome allá, en el suelo, con las manos rozadas e hinchadas, rasguños en la cara y con una gran mueca de asombro.

 

El viento me trajo sólo una palabra.

 

-- ¡Gra... Sias....!

 

Sonreí. Creo que pocas veces había sido tan feliz como en aquel momento.

 

Y, de repente, todo giró y volvió a quedarse negro.

[Amya An]

Aún gateaba arrastrando las pompis en reversa por el suelo ante esa aparición ofídica fantasiosa y sin querer queriendo, su mano rozó algo escamoso por el piso mismo.

 

- AHHHHHhhhhhh!

 

- « Ssssssss »

 

- Ahhhhhhhhhhhhhh!

 

- « SSSSSSSsssssssssssssss »

 

... y creo que el Basilisco "imaginario"-Boggart se quedó como pensando "y ahora qué le pasa a ésta???"

 

La bruja gritaba de cara a su propia bicha conjurada (no antes había invocado un Serpensortia?), y la otra tampoco es que tuviese temple de acero ¡gritaba devuelta a ella! pero en ¿siseo?

 

Entonces quien "gritó" fue el Boggart porque fue como que obligado a mudar su forma espectral, ésta vez, a la que resultase del peor temor de la culebra que no era muy culebra (xDDD) pues sería solo hechizo de la misma bruja.

 

¿A qué le temen las culebras conjuradas?

 

- ¡Águila!

 

Un chillido agudísimo se oyó desde ... desde ... desde todos lados por detrás de las oscuridad reinante, xDDD.

 

- « SSSSSSSSSSSSSSSSSSSsssssss »

 

- Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhh!

 

..... Chilló en parseliano la bicha, gritó en humano la bruja. El boggart-águilesco se comió la bicha y la bruja quedó de panza al suelo agarrándose se la cabeza para que no se la arrancara cuando las sobrevoló en ese primer momento.

 

Mas ya venía de vuelta y quien también giró como tortilla de frente a tan horrorosa criatura (que no se transformó pues así tal cual estaba, Amya_An también le temía, xDDD)

 

- 1-2-3 Vera-verto!

 

Hechizó con una presteza inimaginaria en la adleriana y el boggart alado (?) se transfiguró en copa de cristal (sí, solo alucinen porque es un espacio irreal, así que lo irreal bien puede caber, ¿?)

 

Continuó la trayectoria de vuelo como objeto y terminó despedazándose contra el suelo.

 

El ruido agudo fue escandaloso, super estrindente ... tanto que ... hizo que la bruja tuviese que taparse los oidos y hasta cayó de rodillas adolorida por el asunto.

 

Así fue que cerró los ojos y sin darse cuenta, todo se desvaneció a su alrededor.

 

Ella ya no quería abrir mas los ojos. Temió mucho a lo que se le presentaría si los abrió de nuevo, y así, en esta "ceguera" voluntaria, oyó casi en su cabeza como un susurro.

 

- Abre los ojos ...

 

- No.

 

Continuaba de rodillas con la cabeza casi totalmente apoyada sobre las palmas de sus manos, evitando, precisamente que sus ojos vieran mas.

 

- ... ábrelos ...

 

- muérete!

 

Ella sentía que abrir sus ojos era como una invitación (a lo que fuera que controlase esas habitaciones dimensionales de pruebas) a su interior. Era la forma que conseguía (la prueba) accesar a sus vivencias para poder tejer con éstas, tan enmarañadas pruebas ultra personales (solo eran sus hipótesis locas, xDDD)

 

- Tu prueba a concluido ...

 

- Qué?

 

Esta vez sí los abrió de sorpresa ... había estado manteniendo una conversación perfectamente en culebril sin notarlo y por ende, podría decirse que sí tenía el don (?), aunque como con la videncia ... no la tenía totalmente controlado.

[Lawan Nguyen Thanh]

— ¡¿Pero cómo es posible que hayan regresado?!

 

De nuevo el Arcano había guardado las esperanzas de que se quedaran atrapadas en cualquier dimensión con tal de no volverlas a ver o lidiar con ellas una vez más y aunque no ocurrió él no dudaba de nadie que habiese regresado como un vencedor, tal como eral el caso de esas dos. Las miró de arriba a abajo cerciorándose de que no hubiesen dejado algo de sus cuerpos en el portal, asi fuese un pedazo de oreja y cuando terminó su revisión suspiró mirándolas por largo rato antes de decir algo.

 

— Yo no decido qué pasa allí adentro —comentó mientras tomaba las manos donde portaban sus anillos de aprendices —, pero aquí están, como unas verdaderas hablantes de Parsel —. Una floritura de su vara de cristal selló la habilidad dentro de los anillos y no existía magia que pudiera romper ese sello —. No olviden lo aprendido, confíen en ustedes, pero no demasiado, respeten a las serpientes así como a toda criatura, ellas huelen el miedo y las malas intenciones.

 

El trabajo de Lawan había terminado, ya no tenía nada más que hacer por ellas y lo que más deseaba era regresar a su Bungalow en compañía de las demás serpientes.

 

— Pueden marcharse —El Vietnamita hizo un gesto de que podían irse en paz y cuando desapareció no las llevó consigo, después de todo él las había llevado hasta allí y si eran tan listas podrían arregrárselas para regresar.