Jump to content

Prueba Libro del Caos #9


Bakari
 Compartir

Publicaciones recomendadas

-Mientras Athena tampoco se entere sobre esto... Estamos a salvo, Helike- respondió sonriendo el Gryffindor, pues éste gozaba con poner en "evidencia" la belleza de una mujer; especialmente si ésta lucía sus prendas íntimas de forma tan sensual como se le veían a distancia a la española. Lo que sucedió a continuación fue lo más "raro e insólito" que había visualizado jamás en un duelo por los conocimientos Uzza; ya que la Rambaldi cogió una piedra y se la llevó a la boca justo después de tener un ramo de rosas blancas en la punta de su varita producto del veloz hechizo que el adolescente le había lanzado en su última acción. <<Le romperá los dientes>> pensó curioso, debido a que la dureza de esa roca podía fácilmente quebrar una pieza dental si de masticarla como a un bezoar se tratase. En realidad y a simple vista, la vampiresa parecía estar hipnotizada por algún factor externo a la contienda, pues de otra manera Thomas no se justificaba que el accionar de su compañera de clases fuera tan poco habitual. Fue así que, antes de que la inmortal intentara dirigir sus dardos hasta el paladín; éste pensó en "Maldición", lo que produjo que Helike vociferara "Silenorina" en vez de Silencius, ridiculizando la pronunciación original. -¿Qué fue lo que querías decir?- preguntó burlesco el pelirrojo, fijando su mirada esmeralda en la avispa que seguía ahí.


-Debe estar pensando que te quiero matar- contestó con sinceridad a lo expuesto por la Vladimir, porque el vidente ya estaba tomando por costumbre asesinar a sus rivales (cualidad en contra de sus ideales fenixianos); así quedó demostrado en la cátedra del Equilibrio cuando indujo una hemorragia masiva en Lyra Katara, y también cuando acabó con la última chispa de vida de Mei Black Delacour en la prueba desértica del Druida. -¡Floreus!- volvió a usar en contra de la funcionaria ministerial, aunque en esta ocasión saldrían tulipanes violetas (como los cabellos de Sagitas Potter Blue) del extremo distal del arma de Helike cuando quisiera conjurar algo. Si sus cálculos no le fallaban; la ninfa debía desaparecer en el siguiente turno, y si la vampiresa no se curaba del veneno inducido por la letal criatura pegajosa aún aferrada a su muslo, fallecería indudablemente producto de un shock sistémico.

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Sentí como se me trabababa la lengua al intentar el decir el hechizo. Lo reconocí de inmediato. Era uno de los conjuros de los libros que había "estudiado" con los Uzza no hace mucho tiempo. Sonreí de lado y negué con la cabeza. Aún sentía los tentáculos de esa cosa... Así que, con una mano la saqué de mi pierna y la pisoteé hasta que murió...

 

- Así mucho mejor... menudo asco -susurré. Pero a pesar de que quería usar un bezoar me fue imposible. Tuve que sacar la piedra y escupir los guijarros que salían de ella. "¡Qué asco!" pensé para mí, escupiendo. Desde luego, mi compañero lo estaba haciendo bastante bien y en cambio yo... Bueno, definitivamente tendría que retomar las clases de duelo.

 

Pensé en el siguiente movimiento. Aún sentía recorrer el veneno de la avispa así que era urgente acabar con ella. La saqué de mi pierna y sentía cierto ardor cuando la arranqué de la pierna. Farfullé molesta y la pisoteé hasta que murió, volviéndose a transformar en los pantalones que había llevado hasta ese momento y me los volví a poner ... lo que me hacía gracia es que uno de ellos, estaba hecho girones pero bueno, ya lo arreglaría más tarde.

 

- ¿Athena? -pregunté al mago, curiosa- supongo que la conozco... - pude decir después de que se me trabara la lengua al decir el encantamiento silenciador. Vi que hacía algo más y negué nuevamente.

 

- ¿matarme? Bueno, tendrías mucho que hacer para llegar a esos extremos, ¿no te parece?

 

- obsistens - susurré el hechizo. Había invocado el cerco luminoso de un color rojizo para neutralizar y absorber su floreus. Lo que haría sería absorver la magia realizada por el mago al decir el hechizo floreus, con lo cuál, me daría la oportunidad de conjurar un bezoar. Cosa que hice al momento.

 

Recogí la piedra que había escupido y teniéndola en la mano volví a susurrar:

 

- morphos -el efecto del mismo, sería el de hacer una cura rápida para la ponzoña que ya recorría mi torrente sanguíneo y era vital que me curase inmediatamente porque sabía que si esperaba un poco más, moriría en ese dichoso duelo en el que tantos fallos había cometido. Cuando ya había mutado, me lo llevé directamente a la boca y sentí como parecía restablecerse todos los sentidos, y todo mi organismo, gracias a esa "piedra" de curación para venenos comunes.

 

- Es más, yo pienso que hasta darías para un buen mortífago -le dije, guiñándole un ojo- protegerías a los de sangre pura, las siguientes generaciones de magia te estarían agradecidos por esa labor y bueno - dije todo eso, al terminar de tragarme el bezoar- obtendrías más poderes de lo que jamás te hubieses imaginado -sonreí, mirando al chico. Imaginaba que se opondría. Parecía que, había pocos magos y brujas que llevaban a cabo esos ideales con pasión y todo el mundo los veía como terroristas. Yo no pensaba de esa manera, desde luego. Sólo el hecho de querer formar una familia había salido de la Marca Tenebrosa, pero por supuesto, seguía apoyando sus ideales.

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

A ciencia cierta, Elros jamás supo qué había sucedido con el ramo de tulipanes violetas que encomendó al hechizo Floreus (sobre la varita de su rival) en su última maniobra defensiva; pero de algo sí estaba seguro, y eso era que Helike había caído en su trampa "como ratón al queso". Ahora la ninfa no estaba en el campo de duelo, y la mujer ya no tenía la facultad de utilizar más las fuerzas del caos, debido a que había ocupado las dos posibilidades que Bakari les brindó a un comienzo de la contienda. <<¿Será necesario dejarla morir?>> se cuestionaba con un dejo de ambigüedad el Gryffindor; pues únicamente bastaba con silenciarla, entorpecer su pronunciación u otro ramo de rosas para dar "luces" a su fallecimiento al contrarrestar u, mejor dicho, omitir los efectos de un "posible" Morphos que convertiría algo en un bezoar. Pero, el pelirrojo finalmente concluyó que no era lo mejor matarla en una clase de aprendizaje; así que la dejó vivir a través de un "Zancadilla" que ató ambos tobillos de la Rambaldi con un lazo mágico negro que le hizo caer de bruces a la arena, segundos antes de que ésta utilizara el encantamiento de transformación para mutar su preciado antídoto contra la ponzoña de la avispa marina (que nuevamente volvió a ser un pantalón "común y corriente").


-¿Estás bien?- le consultó a la distancia, observando que la española aún continuaba en el suelo. -¿Mortífago? Pues no lo creo, linda. No soy partidario de los ideales de la Marca Tenebrosa... y creo que tú lo debes saber, o lo habrás corroborado mejor en este enfrentamiento- vociferó el veinteañero, a sabiendas de que la vampiresa, como una funcionaria ministerial activa, debía de conocer los hechos que acontecieron en el Atrio del Ministerio hace un par de meses atrás; donde la Orden del Fénix se reveló ante la comunidad (incluyendo a Thomas). -Tarantallegra- susurró apuntando hacia la Vladimir; lanzando un rayo dorado desde su arma de pirul que de impactar, haría bailar velocísimo a su duelista contra su propia voluntad por un turno completo.

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

- ¿Estar bien? ¿A ti te parece que lo estoy? -le solté cabreada al ver como había anudado mis tobillos y me había hecho caer al suelo. "Maldito estúpi.do" pensé para mí. La cosa se estaba alargando demasiado y a pesar de que me defendía cómo podía usando conjuros que iba recordando. La ninfa por supuesto, había desaparecido, con lo que se había ido mi última ocasión de usar sus dones naturales curativos. Farfullé molesta y a pesar de todo lo sucedido... De momento aún no lo odiaba... Me recordó lo que había sucedido en el Atrio.

 

- ¡Ah, es verdad! No me acordaba que estaba batallando con un traidor a la sangre - dije burlonamente, mirándolo a los ojos a pesar de mi posición, tirada en el suelo. Había visto como quería invocar algo más...

 

- no, no, no... te seguiré dando guerra. No seré tan fácil de acabarme, eso te lo prometo - comenté, alzando una ceja, burlona- una lástima que no pueda usar las maldiciones imperdonables... Claro que, en otra ocasión... quizás...

 

- zancadilla -alcé la varita en cuánto vi que conjuraba el hechizo gritándolo, en mi caso, lo pensé y el efecto fue instantáneo. Se cayó de la misma manera que yo al suelo. Un nudo mágico se ató a sus tobillos haciendo que, el encantamiento que iba a mandarme, saliese desviado hacia arriba...

 

No volví a abrir la boca y apuntando mi arma mágica a mis tobillos anudados con magia, pensé "finite incantatem" el efecto fue instantáneo. Deshizo el lazo lanzado por mi compañero y tenía ya por fin, los pies desatados, con lo cuál me ayudé con una mano a levantarme y mirarlo a a los ojos desde la posición caída en dónde estaba.

 

- Es una pena, darías un buen protector, en vez de proteger a los sangre sucia, muggles y squibs que no hacen más que estorbar a la protección de la sangre mágica pura...

 

Saqué una petaca de plata que llevaba en el monedero. Tanto tiempo de duelo, bueno la verdad es que me había dado sed. Así que di un sorbo largo y eso calmó un poco mis sentidos alterados. Sabía que debía de estar alerta pero la verdad el enfretamiento duraba demasiado y parecía que el Uzza no tenía ninguna intención de aparecer por el lugar.

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Guest
Esta discusión está cerrada a nuevas respuestas.
 Compartir

Sobre nosotros:

Harrylatino.org es una comunidad de fans del mundo mágico creado por JK Rowling, amantes de la fantasía y del rol. Nuestros inicios se remontan al año 2001 y nuestros más de 40.000 usuarios pertenecen a todos los países de habla hispana.

Nos gustan los mundos de fantasía y somos apasionados del rol, por lo que, si alguna vez quisiste vivir y sentirte como un mago, éste es tu lugar.

¡Vive la Magia!

×
×
  • Crear nuevo...

Información importante

We have placed cookies on your device to help make this website better. You can adjust your cookie settings, otherwise we'll assume you're okay to continue. Al continuar navegando aceptas nuestros Términos de uso, Normas y Política de privacidad.