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En el Zoologico Santa Fe...de Bogota...


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Bogota, el paraiso de las Esmeraldas, un pais bonito y diferente a los que el joven Gryffindor acostumbraba ir, habia ido mas que nada para cambiar de aires y dejar por un momento la magia, pues de alguna forma, la magia le habia absorbido toda la felicidad que habia logrado mantener.

 

Llevaba la varita en el tenis izquierdo, mas que nada como un recuerdo de que pronto debia volver, sin embargo no pensaba llegar oxidado.

 

Era tarde, el zoologico ya habia cerrado, pero el mago seguia ahi. habia hecho lo posible por lograr quedarse en este por la noche y afortunadamente lo logro.

 

Se habia detenido al lado de la jaula de los leones, estos apenas se estaban levantando para empezar su actividad nocturna.

 

El hechicero llevaba un pantalon de mezclilla de color azul, tenis negros y una playera de color negro.

 

El initie se quito la varita del tenis y se puso de forma que la jaula de los tigres quedaba a su izquierda y la de los leones a la derecha junto a una roca de mediano tamaño.

 

Frente a el estaba el pasillo donde se encontraria el oponente, pero primero tendria que llamar la atencion de alguien cercano.

 

Con un movimiento de varita apuntando hacia las estrellas del firmamento, hizo que unas luces simulando pirotecnia se formaran en el cielo, pero que formaran la palabra DUELO en azul para los magos, pero los muggles solo verian el nombre de un antiguo amor o su verdadero amor.

 

No tardo mucho en que llegara su oponente.

 

-Bravo amigo has llegado temprano, me prestaron el zoologico por la noche para esta practica de duelo, pero tenemos que devolverlo intacto y sin matar ningun animal, ¿Estas dispuesto a estas reglas?- dijo el muchacho. - Aunque solo sea practica, no me pienso contener- dijo mientras que en la bolsa de su pantalon de mezclilla toqueteaba el polvo de oscuridad peruana- Usted empiece honorable oponente- dijo mientras hacia una reverencia demasiado exagerada.

 

 

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Escuche al Gryffindor y solo pensaba. “En verdad este piensa que esta osado para ponerse atrás de la jaulas de los pumas, curiosamente solo está a unos dos metros de ella, en donde existe dos machos.” Por lo que miraba de reojo el enrejado, no obstante opte por usarlo más tarde, ya que era consciente que la distancia que nos separaba era de unos doce metros, es decir él con respecto a mi persona.

 

Por un segundo mire de reojo y note como nada se encontraba a mí alrededor, dado que era un largo camino de piedras y poseía en sus bordes varias flores silvestres. “Al menos he quedado al descubierto, dado que a mi derecha no existe nada que me cubra de un ataque por ese lado, al igual que a mi izquierda. “ Y seguidamente apunte la varita a mi oponente, mientras que por mi mente pasaba una única palabra, la cual expresaba en voz alta.

 

- Así que yo comenzare, espero que no te lamentes. - Hice una leve pausa. -Cinaede

 

Lo que ocasiono que alrededor de mi oponente comienza a producirse una extraña niebla venosa invisible, que apenas si podía suponer que se había creado con eficacia, la misma era producto de la extracción de los Pétalos de mi Pensamiento. Tal toxina comenzaba a producir efectos inmediatos, por lo que si este no se curaba pronto moriría, sin contar las cualidades ocultas que había desarrollado. Dicho poder, lo había adquirido por el libro de los guerreros Uzza.

 

Por lo comenzaba a sentir una suave brisa que movía mi cabellera, la misma ocultaba gran parte de mi mascara de zorro (la que se me fue dada como Mortífago, por lo que no podía ser transmutada en nada), dado que mi ropaje era una vana ilusión, ya que no existía, pero simulaba ser el traje de un zorro, algo que sin duda combinaba con mi objeto tenebroso. Por lo que solo me limite a esperar la reacción del mismo, pero era posible que si le mataba, lo próximo que haría sería en liberar a cada creatura.

 

Off. Podemos usar hechizos hasta el equilibro. =)

 

@@Ernest Macnair Wilfred

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Un antiguo oponente habia llegado al lugar, lo reconocia porque ya varios meses atras habia dueleado con el, sin embargo el joven parecia haber avanzado mucho en ese tiempo, el Gryffindor sentia ese nuevo poder salir del chico.

 

El muchacho no tardo mucho en hacer su primer movida y rapidamente Ernest siento los efectos del hechizo, sentia como las vias respiratorias se le tapaban cual si fuera un caso grave de gripa, esos mismos efectos los habia sentido triplicados cuando le habia tocado enfrentarse a una hechicera de bastante mayor rango que el joven.

 

Apunto la varita hacia si mismo y en su cabeza solo se formo un hechizo, - Anapneo- penso y rapidamente se terminaron los efectos del envenenamiento. - Buen co..mien...zo, pero no es suficiente para derrotarme- dijo entrecortadamente, mientras apuntaba con la varita al joven y en su mente aparecia un hechizo. - Babosas- penso y un rayo de color amarillo iba dirigido hacia el pecho del oponente que si llegaba a dar estaria vomitando babosas y no podria hacer ningun hechizo verbal, se acercaba poco a poco el momento en que podria hacer uso de lo que tenia en el bolsillo, solo tendria que tener un poco de paciencia.

 

-Vaya suerte de encontrarte por Bogota Demian, por lo que veo ya eres mas fuerte que antes, pero no lo suficiente para mi- dijo sonriendo - ¿Sera que quedaremos en empate?- dijo esperando lo que vendria del joven, ¿Que otra sorpresa vendria para el Rambaldi?

 

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“Arena de Hechicero”

 

Pensé y evoque como este ya no se encontraba bajo los efectos de mi veneno, lastimosamente ahora se encontraba ciego, por lo que al momento que me intenta apuntar y lanzarme un rayo, este simplemente sale desviado. Pero me deseaba divertir un poco, dado que me preguntaba si el mismo podría defenderse de todo lo que tenía preparado, por lo que sentencie con voz firme.

 

-Vitae

 

Y la roca de mediano tamaño cercana a @@Ernest Macnair Wilfred adquiere vida, saliéndole unas cuatro patas de león, cabeza de águila y una cola de serpiente. La misma se dirige con la intención de atacarle, era posible que se defendiera, pero estaba seguro que ese espécimen se encontraba seguro, ya que al no ver, no podría detenerla con facilidad.

 

-No sé quién es Demian.- En ello evoco su comentario. –Si es posible que estemos empatados, pero pudiera equivocarme y resulte que tu poder sea superior al mío, dado que ese control de varita que posee es impresionante. No obstante, parece que tu puntería no es muy buena.- Solté una carcajada. –Pero supongo que es un buen intento.

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Y habia llegado el momento, mas temprano que tarde de usar lo que tenia guardado en el bolsillo que tocaba con la mano izquierda, mano libre de la varita. En el momento en el que se sintio cegado por el hechizo que probablemente hizo que fallara el babosas, del bolsillo con su mano izquierda saco el polvo de Oscuridad Peruano que habia guardado para ese momento y sin esperar un segundo mas lanzo este al piso http://i.imgur.com/CRSo3Ae.png

 

El polvo creaba una gran capa de Oscuridad que cubria el espacio del joven enmascarado y el de Ernest, aprovechando esto el hechicero se movio a la izquierda, haciendo que el animal que habia creado el chico por el Vitae fallara en su ataque.

 

-Estamos en condiciones iguales- dijo el sonriendo, ahora los dos no podian hacer nada mas que efectos y pensando en el joven enmascarado y con una sonrisa en su rostro penso mientras apuntaba frente a el Zancadilla lo que haria que el chico se cayera de bruces al piso. - En venganza por la criatura que me intentaste lanzar- dijo el y sin pensarlo dos veces apunto hacia arriba de el - Silencius- el muchacho ahora no podria usar ningun hechizo verbal para atacarlo, asi que tendria que limitarse a efectos no verbales igual que el mago.

 

-Estamos aun en empate...- dijo el mago sonriendo felizmente. - Intenta encontrarme....- dijo el chico mofandose, ¿ahora que era lo que el tenebroso haria?

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Melodía:

 

Caía de bruces al suelo, por suerte había frenado el impacto con mi otra mano, evitando así un golpe en mi nariz. No podía negar, que estar en la más profunda oscuridad me agradaba y más porque me parecia escuchar una hermosa melodía, por lo que podía presumir que el combate sería de lo más interesante. Pero estando ya en el suelo, en mí mano aparece una daga.

 

- Immolo oppugnare

 

Creando con ello herida en mi pecho, por lo que a su vez en mi oponente son creadas. Acto seguido estas mismas son sanadas en mi cuerpo, al momento que pensaba.

 

“Curación”

 

No obstante, allí mi voz no salió más, en verdad odiaba este acto. Dado que simplemente, se me venía a la mente.

 

“Maldición”

 

Algo que provoco que mi oponente me divierta un poco, dado que el mismo no podria podria pronunciar bien, ,no obstante, sabía que este miserable ataque contra él sería insignificante. No obstante, mi creatura rocosa seguía buscando su presa, pero tarde o temprano la conseguiría. Al menos contaba que dispondría del suficiente tiempo para causarle heridas.

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El polvo de Oscuridad peruana seguia estorbando la vision de los duelistas pero eso sabia que no iba a ser impedimento para el mago con el que se estaba enfrentando y lo habia predicho muy bien puesto que rapidamente el joven sintio una gran punzada en el pecho, sabia que no habia sido un sectusempra pues no habia visto ningun rayo, pero el joven se sentia fatal, saco la varita y penso

 

-EPISKEY- la herida que le habia hecho el enmascarado al parecer gracias al hechizo que hizo dejo de sangrar por el momento, no sabia si mas tarde tendria que reforzarlo o no. La criatura deforme y extraña que el chico habia creado aun seguia por el lugar, sin embargo no sabia en que lugar se encontraba. Sabiendo que mientras la oscuridad estuviera y presintiendo que algo mas pasaria si abria la boca para decir otro hechizo decidio esperar a que la oscuridad llegara a su fin y por fin poder hacer algo mas.

 

Cruzo los brazos esperando que la oscuridad llegara a su fin pronto cosa que ya estaba por pasar y con ansias de ver lo que su oponente tenia planeado para seguir con el interesante duelo....

 

@

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Era extraño la estrategia de mi rival, por lo que simplemente ante su acción, solo supe responder de una única forma y fue pensar.

 

“Flechas de Fuego”

 

Y unos filamentos de fuego, parecido como serpientes fueron con la intención de impactar a mi oponente, teniendo la clara intención de incendiarlo. El objetivo era que impactaran las mismas, acto seguido le apunte, mientras que por mi mente pasaba otra palabra.

 

“Cinaede”

 

Lo que ocasiono que alrededor de mi oponente comienza a producirse una extraña niebla venosa invisible, que apenas si podía suponer que se había creado con eficacia, la misma era producto de la extracción de los Pétalos de mi Pensamiento. Tal toxina comenzaba a producir efectos inmediatos, por lo que si este no se curaba pronto moriría, sin contar las cualidades ocultas que había desarrollado.

 

-¿Qué haces?

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