Jump to content

Protegiendo el Hogar


Helike R V PB
 Compartir

Publicaciones recomendadas

Un ave bastante particular se situaba en la torre más alta del castillo Rambaldi. Oteaba con sus grandes ojos rojos el lugar, como intentando avistar cualquier peligro, que cerniese la gran edificación de piedra. Las luces del hogar de la matriarca Rambaldi estaban apagadas. Era de madrugada, pero a ella siempre le gustaba hacer rondas, para controlar que todos los accesos estaban controlados. ¿Y qué mejor hacerlo que, gracias a su habilidad de animagia?

 

El buitre divisó a lo lejos, lo que parecía una figura extraña cerca de los terrenos y de los jardines que tan bien cuidados estaban gracias a los elfos del lugar. Negó con su cabeza e intentó no ser paranoica. No podía hablar, era cierto, pero estaba bastante intranquila. Agitó sus alas y descendió suavemente, gracias a las corrientes de la suavce brisa que hacían mover los setos y los árboles y que producían un sutil arrullo tranquilizador.

 

En cuánto se transformó en la vampira que era, la mortífaga miró hacia la gran luna que, con su brillo iluminaba todo sin falta de ningún artefacto mágico o de varita. Pero aún así, desconfiaba. Hacía muchísimo tiempo que su hogar no era atacado y eso la ponía un poco nerviosa. Quizás los enemigos de los Vulturi y de los suyos propios, intnetaban hacer algo que un ataque directo. No se confiaba.

 

Estaba vestida con unos tejanos, camiseta, cazadora de cuero y botas de piel de dragón. Tomó su varita y revisó que su monedero de piel de moke que continuaba en su bolsillo. Recogió el anillo detector de enemigos y lo colocó en el dedo corazón, al lado del anillo de la habilidad que tanto apreciaba. Éste empezó a brillar de una forma intensa, entre rojo y color rubí, indicando el peligro. Alguien andaba por ahí, lo había visto desde las alturas...

 

Caminó con cuidado por los terrenos, a unos diez metros de la entrada principal de la entrada y a unos doce, de la gran cristalera que tenía la biblioteca y que ahí se podía divisar la zona trasera de los grandes jardines del lugar. Agarraba su varita de álamo con fuerza. La madera brillaba con intensidad cuando la luz de la luna incidía sobre ella... Maldijo por lo bajo...

 

Cuando estaba a unos ocho metros del intruso y que pudo identificar como a una mujer, susuró el hechizo que, sabía que tendría que actuar rápido sino quería morir ahogada a causa de los gases venenosos... Se centró en el conjuro y divisando a la mujer, susurró tan bajito que sabía que aún así era efectivo...

 

- cinaede -un gas invisible rodearía a la figura de la mujer e intentaría que, los gases tóxicos atascarían su garganta y finalmente si no procedía con agilidad, podría morir a causa de los mismos. Sabía que, con su rango social el poder sería mucho más efectivo. La bruja mostró una sonrisa burlona y a pesar de querer actuar en silencio no pudo evitar decir:

 

- Espero que, por tu bien, no vuelvas a entrar a deshoras en una casa como la nuestra. No sé qué demonios pretendes. ¿Atacarnos? Intentaré que no salgas viva de éste lugar...

 

@@Candela Triviani

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

  • Respuestas 0
  • Creado
  • Última Respuesta

Top participantes en este tema

Días Populares

Top participantes en este tema

Días Populares

Guest
Esta discusión está cerrada a nuevas respuestas.
 Compartir

×
×
  • Crear nuevo...

Información importante

We have placed cookies on your device to help make this website better. You can adjust your cookie settings, otherwise we'll assume you're okay to continue. Al continuar navegando aceptas nuestros Términos de uso, Normas y Política de privacidad.