Prueba del Libro de la Sangre 15

[Hades Ragnarok]

Aquel obstáculo había sido “fácil” para aquellos aprendices del libro de la sangre, por lo que sin ninguna novedad y después de quitarse de encima todas aquellas criaturas continuaron adelante. El pasillo cada vez se hacia mas estrecho tanto de altura como de grosor. El vampiro supuso que aquello era algo mágico ya que no se notaba al menos ningún descenso en lo que estaban piando o que hubiera cambiado algo más en el ambiente. Sin embargo, a pocos metros de que aquello fuera ridículamente estrecho observo un punto luminoso que no había notado hasta llegar allí. Aquel punto que, si no se estaba lo suficientemente atento lo pasarías por alto era donde justamente se había realizado aquel maleficio.

 

-Bueno, al igual que el laberinto –susurro para si mismo. Sin embargo, apunto a aquella minúscula mota de luz y pronuncio un viejo conjuro.

 

Inmediatamente aquel lugar cambio. Era como i se hubiera abierto algún tipo de portal ya que lo que estaba frente a ellos era muy diferente al lugar donde habían estado parados hacia unos segundos. Frente a él y a los aprendices apareció una habitación con muchas puertas, aunque algunas de ellas parecían barrotes o celdas donde dejaban a los prisioneros pudrirse. Dio unos cuantos pasos y observo como algunas cadenas intentaban asirse a él o legar hasta la posición del Ragnarok. Asintió. Eran cadenas mágicas las cuales podrían atraparte y no dejarte escapar jamás.

 

Suspiro. Aquello era realmente nuevo. Supuso que sencillamente cada puerta llevaba a un lugar o habitación diferente. Ahorita podíanestar en aquella mansión, pero no sabias si un segundo después podrían aparecer en una hermosa playa o terminar en un oscuro cementerio. Eso, lo sabrían una vez que eligieran una de aquellas puertas.

 

 

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OFF: Como ven el primero que postee escogerá una de aquellas puertas y colocara la descripción del escenario del duelo, su compañero o contrincante deberá completar lo que sigue.

 

@ vs @@Patrick Colt

@@Keaton Ravenclaw vs @Hades Ragnarok

 

 

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Reglas de la Prueba.

 

• Podrán usar hasta los hechizos de Graduados. Más los del Libro Nivel 1, Nivel 5 y Nivel 7. (LINK)
• No se permite interferir con los demás duelos.
• En su primer post, la Daga de Sacrificio se activa y les produce una herida en el pecho a ambos duelistas. Deberán curarse antes de empezar el duelo.
• En el segundo post, la Marca de Sangre actuará en ustedes y los obligará a anular su segunda acción.
• En el cuarto post, el Juramento de Sangre les prohibe lanzar rayos por ése turno.
• El saltar las barreras, no consume acción. Pueden saltar las barreras en un post y luego (despues de que les hayan hecho puente) volver a postear para atacar a sus compañeros.
• Si el rival no responde en 24hs, se desprende una roca del techo y deberán evadirla.
• La prueba finaliza el día 22 de Julio

Editado 15 de Julio del 2017 por Hades Ragnarok

[Thoth]

Algo extraño me sucedió de haber pasado el laberinto, entrando por la puerta me había transportado a una playa donde se precipitaba una poderosa tormenta, las olas chocaban bruscamente contra las rocas, el viento era bastante fuerte y sobre todo algo me decía, que esto no sería nada en comparación a la ira que pudiera devastar el Cardenal de la Muerte ( @@Patrick Colt ) , era bien sabido para un iniciado en las artes oscuras, su fama y su alarde, no negaba que este momento sería una perfecta oportunidad para comprobar los rumores.

 

Al llegar en mano derecha se encontraba la daga y sin hacer nada, la misma se había activado, supongo que era parte de la prueba, por lo que me produjo una herida sangrante, era un sangrado leve, pero continuo, algo que no podía dejar de pasar, fue en ese momento que por mi mente pasaba una única palabra.

 

“Episkey”

 

Eso logro que por completo sanara, y observe como mi oponente resolvería la situación, dado que para ese momento opte por no atacar, simplemente por curarme. Y además, para ese encuentro me encontraba completamente desnudo, pero mi cuerpo se veía envuelto por una especie de niebla que me cubría mis partes intima. Era curioso como ese lugar afrodisiaco no existía ninguna creatura terrestre, es decir, ni cangrejos o algo así que me pudiera atacar por sorpresa desde la arena, inclusive los escorpiones no se observaban, por lo nada bajo de nuestros pies se encontraba, es posible que creaturas marítimas o aéreas, pero solo muggles, igual era una simple playa.

 

La vegetación era típica y las palmeras se encontraban a una gran distancia, por lo que único que poseíamos era arena y más arena, el agua que comenzaba a llegar a cada impacto, pero sobre todo era imposible que esa agua nos llegara, a no ser que duremos mucho tiempo en ese lugar, preferi guardar silencio y ser prudente.

[Keaton Ravenclaw]

Justo cuando Keaton comenzaba ya a desesperarse, aquel raro grupo conformado por alumnos e "instructor", llegaron antes una sala con varias puertas, las cuales, según pudo entender, llevaban a diferentes lugares donde tendrían, al fin, la prueba del Libro de la Sangre. A decir verdad, al vampiro no le generaba mucho placer aquello, sin embargo, le daba cierto gusto poder llegar hasta el final y poder culminar el aprendizaje de ese Libro que seguramente jamás volvería a emplear.

 

Supuso que al estar ya las cartas expuestas sobre la mesa, solo se tenía que elegir una puerta y ver a dónde se llegaba y ahí mismo batirse en duelo con quién osara cruzar la misma puerta. El Ravenclaw era bastante supersticioso, por lo cuál contó, y a en la séptima puerta fue en la que entró. Tan pronto hubo cruzado notó una oleada de emoción.

 

El agua prontamente se hizo presente en invadió todo el escenario. Se hallaba en las profundidades del oceáno, y bajo de él había una ciudad sumergida. Varios edificios erosionados e impregnados de algas, varios pedazos de piedra de entre 50 a 200 centímetros se hallaban desperdigados así como cuatro estatuas de peces de 50 centímetros, dos de sirenas de metro y medio, una más de un tritón que rondaba en los dos metros de alto, y cuatro de Grindylows que no pasaban de los 50 centímetros.

 

Además había toda cantidad de animales marinos: justo en ese momento un tiburón ballena pasaba por ahí, varios cardúmenes de peces, uno de ellos de peces Globo, y algunos delfines, pulpos, cangrejos, medusas y avispas marinas.

 

Asió con fuerza su varita mágica de cerezo y justo en ese momento, la daga le hizo un corte en el pecho, sin embargo, no podía curarse en ese turno, porque debía realizar otro hechizo para poder respirar y hablar en el agua, ya que la superficie estaba a unos 200 metro sobre él. <<¡Casco Burbuja!>> pensó el Ravenclaw y una fina capa mágica rodeó su cabeza proveyenfolo de oxígeno y de la capacidad de hablar bajo el agua. Entendía aquella regla de curarme del corte de la Daga antes de empezar el duelo, pero imperaba respirar antes de curar el corte.

 

Ahora sólo faltaba ver las primeras acciones de su oponente. La vestimenta de Keaton, a parte, había cambiado, ya sólo llevaba un bañador y ni una prenda más.

 

@@Hades Ragnarok

[Thoth]

El tiempo transcurrió y el Cardenal de la muerte no actuó, seguía sangrando. Lentamente comenzaba a debilitarse y si no se sanaba pronto moriría. En ello note como nuestro entorno cambiaba no sabía a donde llegábamos, pero fue así. Al cerrar y abrir los pardos, no te como nos encontrábamos una viejas ruinas. La misma estaban cubiertas de una vegetación densa. Al mismo, tiempo y saber se es desprendida dos fragmentos de roca de un increble tamaño, consideraba que era unos cuatro metros de ancho y tres de largo, la primera iba contra Colt y la otra en mi contra.

 

-Morphos

 

Y la roca que venía en mi roca se transformó un águila que tenía las intenciones de atacar a mí adversario, ya habiendo librado de ese mal, observe como el mismo ahora enfrentaba tres dilemas, el primero el brote de sangre causado por la daga, el segundo era la roca y el último mi creatura. Pero mi instrumento hizo algo en mi contra, pues me hizo obligar a dejar mi segundo movimiento.

 

Al menos encontraba a salvo ante esa prueba, curiosamente sobrevivía porque mi oponente me consideraba tan insignificante que ni respondía ante las amenazas, a este ritmo él tendría que repetir el curso, esa experiencia era amarga y ya la había vivido. Era curioso cómo me había preocupado por el Ravenclaw, pero qué más da, en verdad esperaba que el profesor le diera alguna lección, mientras yo me moría de aburrimiento. Solo me preocupaba el rugir de ciertos animales a la lejanía, pero de lo que estaba seguro era la distancia que nos separaba y era unos catorce metros.

[Hades Ragnarok]

El vampiro estaba esperando aquello. Sabía contar y la verdad desde un principio supuso que tendría que ser él el rival de alguno de aquellos alumnos. La suerte o quizás el destino había elegido a Keaton para él. Sin embargo, no podía bajar la guardia, estaba un poco oxidado y no sabía que iba a encontrar en aquella habitación a la que iban a parar.

 

Una vez que entro todo cambio, en un segundo ambos se encontraban bajo el agua. El vampiro no necesitaba respirar por decirlo de alguna manera pero aquella lucha seria pareja, no iba a aprovechar las circunstancias por lo que sabía lo que debía hacer. El Ragnarok sin más tomo la varita entre sus níveos dedos y miro rápidamente en un radio de 360º todo lo que le rodeaba, había visto aquellos tiburones, banco de peces y noto algunas estatuas sumergidas. Una de ellas se aprecia a Poseidón y llevaba un tridente entre sus manos de mármol.

 

Al sentir aquella herida en su pecho no hizo más que dibujar una mueca y pensó en una curación. Sabía que aquel encantamiento podía usarlo ya que no requería ninguna acción por lo que podía simplemente jugar como quisiera, además el efecto de la curación como tal había sido inmediato por lo que estaba curado y preparado para arremeter contra el aprendiz. Aun así el Ragnarok sin más y sin perder tiempo movió la varita para conjurar un -<<casco burbuja>>- penso nuevamente, el cual en un simple susurro convertido en burbujas se poso en la cabeza del cainita. Ahora todo estaba listo y la suerte estaba echada. Había llegado el momento de jugar.

[Thoth]

El Cardenal se encontraba en las últimas, pero no sé porque demonios le desee ayudar, dado que su cuerpo se encontraba golpeado por la gran roca, poseía las heridas de la daga y continuaba el ataque de mi ave. Era extraño como no disfrutaba ese combate, por lo que simplemente mencione.

 

-¿Qué demonios pasa?

 

Una segunda roca se avecinaba ante Colt y mi persona. Por suerte mencione.

 

-Morphos

 

Y un búho se transformó de la roca que se venía en mi contra, su orden era defenderme de cualquier ataque. Mientras a Colt le comenzaba a caer otra. Era posible que el mismo no sobreviva, pero no podía hacer yo nada más, ya después de muy poco, este iba a morir, era lamentable, pues mi única prueba seria la paciencia.

 

-Silencius

 

Y Colt, no pudo hablar. En ello me preguntaba cómo le estaría el encuentro del RAvenclaw contra el profesor, igual sería más interesante que mi combate, ya que mi suerte no jugaba a mi favor, simplemente suspire y espere que transcurriera el tiempo. Era cuestion de tiempo que pasara por lastima el dichoso libro, al menos pudiera provar sus encantamientos, pero no deseaba causar más dificultades al dichoso Cardenal de la muerte.

[Keaton Ravenclaw]

Tras unos momentos de espera, Keaton conoció a su oponente, y tal vez por suerte, le había tocado luchar en contra, precisamente, del Ragnarok, profesor de aquel libro. No sabía muy bien si aquello era bueno (por aquello de que podría aprovechar los conocimientos del vampiro para aprender todo del Libro de la Sangre), o bien fuera algo terrible al él conocer todos los secretos de ese libro.

 

Sin más, el Ravenclaw pensó en una Curación que le cerró la herida del corte de la Daga, y así, se encontraba ya en igualdad de condiciones ante el Ragnarok. El pelinegro observó su entorno, y notó aquellos animales tan particulares de la zona, los cuales seguramente utilizaría más adelante. De momento, el ojiverde deseaba retrasar cuanto fuera la batalla como tal, por lo que alzando la varita, y apuntando al profesor, pensó ¡Maldición! por lo cual el siguiente hechizo que realizará Hades quedaría anulado.

 

Ahora debía atacar o poner alguna barrera, por lo que apuntó a uno de los Tiburones Ballena que rondaba en ese momento cerca de él y dijo con fuerza:

 

-¡Oppugno! - Sin embargo, justo en ese momento, entró en acción la Marca de Sangre, y aquel hechizo, había quedado completamente anulado.

 

Keaton soltó un suspiro, aquello no le gustaba mucho, era algo torpe en los duelos y la verdad es que le apetecía muy poco, pero ni hablar, había que cumplir los requerimientos para poseer aquel librajo.

[Thoth]

Colt había muerto y era una desgracia, al menos se había cumplido el título del libro, pues la sangre del Cardenal de la Muerte se encontraba tiñendo el suelo, era posible que la daga era un tema que aún este no dominaría, en contra parte yo me quedaría observando la ruinas, mientras que se determinara el resultado del combate entre Ravenclaw y el profesor. Curiosamente venia en mi contra una nueva roca.

 

-Morphos

 

Y esta se trasformó en una águila, la cual le ordene marcharse y desaparecer hasta el horizonte. De igual forma, ante el cadáveres de quien había sido mi adversario le impacta una, me era curioso como el mismo hubiera muerto por los impacto de las rocas, la herida sangrante de la daga y los ataques de mi creatura.

 

-¿Qué pasará ahora?

 

Indague y ante de mí se apareció una puerta traslucida, fue mi curiosidad tanta, que simplemente la pase y llegue a una sala de trono, la misma se encontraba oscura, curiosamente lo único que existía era un trono creado de huesos humanos. Lo admitía tenía cierta curiosidad, así que lo único que hice fue sentarme en el mismo y comenzar a esperar. En mi mano derecha portaba la daga y en la izquierda mi varita.

 

-Curioso en verdad…

 

Mi voz hizo resonancia y lentamente una llamarada se comenzó a deslumbrar en el horizonte, mostrando mi sombra, la única compañía que poseía. Cerraba los parpados y note como se había finalizado mi enfrentamiento, esperaba que al menos ante mi participación se me aprobara, dado que no había gran despliegue de encantamientos o mucho menos consideraba que había captado todo. Sin embargo, la práctica me haría dar la maestría en este arte sanguinario.

 

Off. Suerte en el combate. Supongo, que dejare de postear, hasta tener adversario.

[Patrick Colt]

La noche era espesa y Patrick Colt estaba débil.

El demonio no podía obviar el hecho que sus fuerzas estaban siendo drenadas lentamente y era a causa de aquel encuentro que había tenido con el amo de la muerte. No habían pasado más de dos semanas de aquello, el Libro de la Sangre había sido capaz de abrir un portal en el que las almas del infierno ubicaron al Cardenal de la Muerte llevando dicho mensaje a lo más profundo del lago de fuego.

 

Seguramente, Satanás había sonreído al obtener la noticia. Se decía que los demonios eran incapaces de poder leer la mente de quienes se encontraran en tierra viviendo una vida mortal. Patrick Colt tenía esa certeza pues hubo barajado centenares de años fundido en las llamas de ese cavernoso y ardiente lugar.

 

Aquello le bastó al demoníaco para emerger de su reino y acorralar al mortífago quien estaba moroso con aquella cuota. El interior de su pecho se revolvió y quedó sin fuerzas al tener que combatir con aquello para que no se zafara de su alma con facilidad. Era lo único que lo mantenía con vida, y por ende, lejos del castigo del reino de Satanás.

 

Su Threstal había sido el único testigo del rescate, y aunque por aquellas criaturas Patrick Colt seguía con vida, éste no bajaba la guardia ni se entregaba a la humildad. Por el contrario, ira era lo único capaz de brotar de su duro y frío corazón.

 

Llegó a la cita, Hades había preparado un paraje para que se enfrentaran Demian y él. Y al colocarse a 10 metros del Malfoy, tuvo que esquivar una roca que le cayó del techo inmediatamente.

 

- Morphos - la transformó en un cuervo corpulento y cuyas patas tenían filosas garras, tal como un ave adulta. La misma tenía la orden de atacar a Demian en el rostro, hacerlo sangrar y con su cuerpo mismo y aleteo inquieto, dificultarle la visión.

 

- Silencius - le conjuró a Demian en su garganta, inmediatamente seguido de un curación. Hechizo aprendido de su primer libro adquirido, que lo sanó de la maldición de la daga de la sangre. Quizás Demian hubiese querido conjurar 3 morphos y un silencius, sin embargo Patrick Colt no se había defendido de su primer movimiento y por ende las alucinaciones se quedaron en su cabeza.