Libro de la Sangre XXIII

[Helene Eloise Bellerose]

El descenso del maestro del árbol vino acompañado de una explicación más profunda sobre lo que intrigaba a Gabrielle, lo que distrajo brevemente a la castaña del entorno, sin embargo el anillo que llevaba en la diestra llamó su atención, haciéndole ver no solamente que no se encontraban solos, sino que el peligro los acechaba en forma de animales predadores.

 

—Tenemos compañía. —Anunció por mera cortesía, a sabiendas que Hades debía estar más que enterado de aquello. Lo bello de haber decidido usar aquel anillo era que no solamente podía percatarse de la proximidad de los animales, sino que podía entender hasta cierto grado su pensamiento, que en aquel particular estaba siendo motivado por el temor que sentían las bestias al percibirlos como una amenaza para su entorno.

 

Concentró su pensamiento en tranquilizar a los animales para hacerles entender que estaban allí sin intención de dañarles, y se calmó al percibir que le entendían. Quizás ellos no les iban a atacar, pero no pudo evitar espeluznarse ante las perspectivas que anunciaba el maestro. Estaba perfectamente consiente que la marca de sangre que él había pintado podía destruirlas si él lo deseaba así, por lo que quedaba esperar que no lo intentara.

 

—Nos temen, piensan que venimos a dañarles, pero he usado el anillo de amistad con las bestias para transmitirles que no es nuestra intención, creo que he logrado calmarles.

 

Emprendieron nuevamente la marcha y Weasley pudo avistar un templo al que lentamente se acercaban, la verdad tenía mucho nerviosismo al recordar su intento pasado de aprender aquella magia ancestral, puesto que en comparación, este camino estaba resultando bastante tranquilo y apacible.

 

@@Hades Ragnarok @@Gabrielle Delacour

[Hades Ragnarok]

El Ragnarok había pasado por cada uno de aquellos peligros que existían en aquel paraje, había pasado por cada una de aquellas pruebas, tanto por el fuego, el aire, el agua y la tierra para llegar a aquel templo escondido en lo más profundo de aquel sitio, claro estaba, él había tomado el camino largo, el más peligroso para llegar hasta allí, pero sus aprendices, aquellas alumnas que habían “sobrevivido” no tendrían que hacerlo. Dibujo una mueca mientras seguía cada uno de sus pasos. De una u otra forma, el sabia por todo lo que estaban pasando. Bufo por lo bajo, otro de los grandes secretos del cainita.

 

El vampiro espero pacientemente, al menos estaban probando los oscuros misterios de aquel libro, solo que, el tiempo se había terminado y tenían que pasar directamente a la prueba final. Aquella decisión no le había gustado nada, había tenido una acalorada discusión con el Uzza que le había dado la orden. Badru como siempre se había salido con la suya, pero en algún momento el vampiro ganaría, solo debía tener paciencia. Así que espero hasta que ambas aprendices, Kassandra y Gabrielle aparecieron en los peldaños de aquel templo. Las siguió con la mirada mientras toda sucias y heridas subían cada uno de aquellos escalones

 

-Interesante y sorprendente, veo que han sobrevivido –dijo en tono serio- pero lastimosamente no creo que dure mucho mas –comento de mala gana- deberán cruzar esa puerta, y enfrentarse a lo desconocido, quizás hasta tengan al lado a su peor enemigo o a quien deban vencer –dijo en tono aun serio- suerte y si todo sale bien nos veremos al final

 

No dijo mucho mas, movió la varita y susurro algunas palabras en un idioma extraño, místico, salido de quien sabia donde. El sonido de la pesada puerta rompió la paz y tranquilidad de aquella zona, por un segundo el silencio había sido sustituido por el chirrido. La puerta de aquel templo se había abierto para dejar pasar a las aprendices.

 

@ @@Gabrielle Delacour

[Gabrielle Delacour]

Al parecer Gabrielle se había distraído y la voz de su compañera le hizo prestar atención, antes de poder reaccionar la Wesley había tomado el control del inconveniente y la Black soltó el cuerpo al ver que las bestias habían desistido el ataque. Soltó el puño, al parecer le habían ganado la tirada del anillo y sonrió tranquila.

 

- Gracias por pensar rápido Kasandra.

 

¿Habían sobrevivido? ¿Lo había hecho con dolo? Entrecerró los ojos juzgando al profesor y bufó, seguro las cosas apenas empezaban y aquello no era algo que le gustara del todo.

 

Le observó mover la varita y hablar a lo que de inmediato asumió que estaba en lo correcto: Lo peor estaba por empezar. Sujetó con fuerza su varita, giró su mirada hacia su compañera y con una leve mirada le invitó a que juntas pasara a lo que fuera que el profesor les tenía asignado.

 

 

@@Hades Ragnarok