→~*Mansión Delacour*~← (MM B: 94786)

[Dennis Delacour]

La rubia terminó de descender al salón donde saludo pero antes de siquiera que alguien respondiera vio como su hermana también hacía acto de presencia, maravillosa como siempre en ese elegante vestido, quien diría que había tenido quintillizos por como se veía ahora. La vio ubicarse junto a Alessandra y cuando se disponía a acercarse a ellas escucho un insistente golpe en la puerta, en otro momento habría dejado que los elfos atendieran pero algo le decía que era mejor que ella fuera quien abriera así que con un asentimiento de cabeza a modo de excusa ante los presentes se dirigió a la puerta principal.

 

Cuando abrió no pudo evitar la sonrisa que se dibujo en su rostro al ver frente a ella a la persona que hacía latir su corazón a mil por hora tan solo con una sonrisa, estaba hermosa como siempre aunque la veía más pálida de lo normal y eso en Zoe ya era mucho pero le alegraba verla después de tanto tiempo así que sin dudarlo ni un segundo la rodeo con sus brazos para sentirla más cerca, la había extrañado sobremanera en esas semanas que estuvieron separadas. La sintió un poco más delgada y eso la preocupo, se separo un poco de ella para mirarla a los ojos, algo pasaba y eso la angustio un poco. Suavemente posó sus manos sobre su rostro dándole un suave beso en sus labios antes de hablar - Hola hermosa, te extrañe demasiado. estas bien? Que sucede? - dijo mientras le parecía ver un atisbo de dolor en la expresión de su novia, realmente ahora estaba más preocupada de lo que pudiera controlar. Con cuidado la rodeo con sus brazos nuevamente para hablarle suave al oído - sabes que puedes decirme lo que sea - termino de decir. Sabía que adentro estaban los invitados a la fiesta pero bien podían tomarse unos minutos para hablar en el jardín o en cualquier parte de la mansión.

 

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[Lisa Weasley Delacour]

Lisa

 

- Corpus Patronus

 

Aquel conjuro tan potente pronunciado con su dulce voz era una simbiosis única. Daniel, mitad paladín, mitad dhampir, a sus dieciseis años de edad compartía el carácter luchador que a todo Delacour nos movía. El adolescente lograba tras un tercer intento invocar y controlar a aquel enorme y poderoso patronus corporeo. Los miles de hilos plateados conformaron una forma tan característica para mi que, y aunque sabia su destino y conocía sus dones, me sorprendía para bien. El ave fénix se poso en su hombro con la delicadeza y gracia que lo caracterizaba y mi sobrino, audaz y orgulloso, me sonreía con esa carita de pillo que competía en presumida con la de su padre.

 

- No esta nada mal pequeño Hunter

 

Había dejado de ser un niño hacia tiempo, pero de igual manera siempre seria mi niño consentido. Igual que sucedía con Henry y Luna. Eran mi sangre, Eran mi familia y por ende los protegería con mi vida si hiciese falta. Le hice una seña para que se acercara y este lo hizo con premura. Sus verdes ojos, iguales a los míos, brillaban con el entusiasmo de quien se sabe parte de algo. Como era costumbre, después del entrenamiento, le revolví el cabello desordenándoselo más y le hice entrega de una de sus barritas de chocolate favoritas. El tiempo pasaba muy rápido cuando uno se esta divirtiendo y cuando mi loba aulló en lo alto de la colina supimos que era hora de irse.

 

Segundos después, usando la desaparición conjunta, ambos hacíamos acto de presencia en los jardines de aquella mansión imponente y bonita a la cual llamábamos orgullosamente hogar. En el rostro del chico una sonrisa genuina. Avance, tirando de él, hacia la entrada principal. No hizo falta llamar ni a la puerta, parecía que nos estaban esperando. Un elfo domestico apareció en escena y nos hizo pasar con educación y con algo de prisas. La pequeña criatura se quedo embobado unos instantes al verme la cara y era algo lógico si lo pensábamos. Desde hacia un tiempo mi residencia habitual, así como la del menor, era Hunyad.

 

- Heme aquí si, avisa a Alessandra anda.

 

- ¿Tia, Kam estará por aquí?

 

- Es parte de la Guardía real de Hunyad. Miembro del clan Lobo Negro y Esposa de Ale. Obvio estará enano - Era peor que Luca y yo juntos. Era mencionar a una mujer hermosa y el hombrecito no ocultaba sus gentes.

[Leslie Ashryver PB]

Alessandra sonrió por lo dicho de Sean sobre sagitas, ahora veía que ella había heredado la obsesión por tener criaturas raras, a eso lo demostraba claramente la granja que tenían cerca del bosque donde estaban los Aethonas, Unicornios, esfinjes y varias criaturas más con en el lago que descansaba el Kelpie.

 

-Kam debe estar preparándose- le explicó -le gusta hacerme esperar- sonrió.

 

Las siguientes palabras del Linmer la hicieron poner colorada hasta la punta de su cabello, no se esperaba aquéllas palabras de él menos pensaba que le dijera "hija" la única persona que la había llamado asi y que era conciente había sido Dylan, y eso ya hace mucho como con Steve, su padre.

 

-Mira ahí está- le dijo señalandole arriba de las escaleras.

 

Al ver a su esposa fundaba en aquel vestido naranja no pudo evitar ponerse cachonda(?().

 

Merlin, su cuerpo se estremeció al imaginarse agarrando el cuerpo de su esposa sobre aquélla fina tela, tragó en seco algo nerviosa que se dieran cuenta de como se había puesto al ver a su esposa vestida asi, sus ojos azules habían recorrido toda su delantera a causa del escote del vestido.

 

Alessandra no pudo evitar gemir cuando el aliento de su esposa rozo su oído.

 

-Ma petite- susurró para agarrar la cintura de su esposa y darle un beso caliente que la hizo estremecer -tengo que presentarte a Sean- le dijo señalando a su compañero.

 

 

 

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[Kamra Ashryver D.]

Su cuerpo se encendió y tembló, como si los besos de su esposa fueran una onda expansiva. Sentir los labios de Alessandra en contacto con los suyos y la manera en que su lengua acariciaba la de ella ( ) la dejaba en una especie de trance erótico del que no deseaba salir jamás. Pero a regañadientes abandonó el refugio que le brindaba y le sonrió mirándola a los ojos , diciéndole con su mirada lo que sabía que ella también pensaba ...Luego, amore mío . Ell brazalete de su boda se calentó en su muñeca, evidencia de que no solo estaban unidas de forma terrenal, y supo que durante un breve instante, la Delacour había oído su promesa susurrada en lo más profundo de su mente.

 

- Te ves radiante Alessandra - no pudo evitar pronunciar el nombre de la mujer de su vida con un suave ronroneo

 

Recordando que tenían audiencia, la peliblanca posó su mirada dorada en la persona que estaba frente a ella. Ladeó la cabeza ofreciéndolé lo que ella entendía como sonrisa amigable...esperando que no se pareciese en lo absoluto a un movimiento felino y premeditado.

 

- Kamra Rambaldi, es un gusto conocerlo señor...- aguardó a su respuesta mientras pensaba que eso de socializar era pura basura, pero por Alessandra lo seguiría intentando.

 

Su mano acariciaba la espalda baja de la rubia en un patrón circular casi ausente. Y mientras prestaba atención al hombre frente a ella, algo la hizo virar la vista hacia la entrada. Sientió una risa genuina expandiéndose por su rostro mientras llamaba la atención de @@Lisa Weasley Delacour había ellas.

 

Sabía que era - junto a Alessandra - las agasajadas esa noche. Pero la matriarca no olvidaba sus primeras responsabilidades. Sabía que Lisa estaba acostumbrada a reverencias pronunciadas y a miradas de profundo respeto, dignas de su alta alcurnia. Kamra jamás se habría inclinado ante nadie. Pero era miembro del Clan lobo negro, miembro de la guardia de Hunyad, todo lo anterior por elección propia. Así que inclinó la cabeza a modo de respeto antes de sonreír despreocupada.

 

- Veo que trajiste el pequeño trasero de un menor a la fiesta, Lis - dijo su nombre ocupando aquella flexión petulante que sabía disgustaba a Lisa - no me hagas tener problemas con la correcta concientización de las bebidas en menores de edad y controla al pequeño hormonas - dijo mirando a Daniel de soslayo - pequeña rubia ¿No vas a presentarme a tu amigo? - dijo al notar que había transcurrido todo ese tiempo sin saber quién era el mago con quien tanto hablaba su esposa.

 

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[Sean -Ojo Loco- Linmer]

Que una ,mujer se demorara embelleciéndose, era pan nuestro de cada día, incluso en este tipo de ocasiones protocolares hasta Sagitas se demoraba sus horas en lucir presentable. Si las otras veces uno la podía encontrar desparramada frente a la chimenea con su bata de dormir, ojeras y pelo violeta revuelto. Vaya, que si alguien entraba a robar se llevaba un buen susto de seguro.

 

-No te preocupes....este tipo de esperas las he sufrido en carne propia.- dije sonriendole a Alessandra

 

A continuación no me paso desapercibida la reacción de Alessandra ante mi autoproclamacion de ¨padre¨. Habia presionado un poco pero al menos que se pusiese cual tomate y no me lanzara nada a la cabeza, pues a mi me bastaba. Sin lugar a dudas la relación estaba mejorando y todo parecía indicar que era un genial ¨Daddy Cool¨, ojo no confundir con ´Sugar Daddy¨, esa parte de la industria nunca me había interesado. Si alguien recibía mis favores era desinteresadamente.

 

Pero en fin, ya llegaba la siguiente festejada. Y sin lugar a dudas Alessandra había elegido bien a su pareja, era casi tan bella como Perenela. Claro, la reacción de Alessandra me hizo reir un poco. Era raro lo fácil que toda ella reacciono ante la vista de su monumental pareja. Sin dudas los quintillizos no habían para nada menguado el apetito voraz de lujuria que chispeaba en los ojos de ambas. No cabia duda que Alessandra era hija de su madre....y....que no me podía dar lecciones de moral. Mira ese beso intenso que podría descolocar a mas de un invitado. Con tanta intensidad faltaba casi nada para colarse en la intimidad de un cuarto.

 

-Un gusto Kamra...Sean Linmer...pervertido por natarualeza y futuro padre de Alessandra. -Dije con toda la parsimonia posible. Si ibamos a ser familia de nada valia la pena ocultar quien era. -Por cierto....Rambaldi no??...por casualidad familia de Helike??? -dije meditando un poco, si era cierto ya sabia quien se habia ropbado toda la sensualidad en los Rambaldi...porque Helike a veces parecia huerfana, la estimaba...pero ni idea de como ella y Matt pudieron llegar a mas.

 

Por desgracia no era el unico presente pues ya asomaba la anatomia mi estimada Lisa....por suerte con compañia o ya destinaria algun dardo a molestarnos mutuamente....pero que conste habia un menos...asi que nada de palabrotas...-Hola Lisa

 

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[Ada Camille Dumbledore]

Luna Cristal Gryffindor Dumbledore

 

 

La Mujer que estaba ante mi si era la señora Alessandrs, pero su reacción me sorprendió aún más cuando supo quién era yo, me estrecho en sus brazos y me beso las mejillas, porque lo que sonroje notoriamente, no era muy dada a las expresiones afectivas. Las personas cercanas a mi siempre me consideraban fría y alejada, pero ellos no entendian que todo eso era exagerado para mí.

 

-Gracias Sra Alessandra espero usted y su esposa disfruten el presente.

 

Ella se distrajo con otro invitado y yo aproveche para escabullirse un poco, la observaba como era de afectiva sus reacciones. Reconocí a mi propia madre en ellas, siempre tan dulce tan agradable con la gente, tan amable. Creía que era una exageración tanta paz y amor y tolerancia, solo encontraba tales cosas en el arte que era no solamente sublime en creación sino cuando logras sentirlo.

 

La elfina halo de mi vestido y le sonreí.

 

-Debo hacer acto de presencia aquí, si querés vuelve con mi madre al Chateu, yo estaré aquí algún tiempo más y se volver a casa desde aquí

 

La elfina se dirigió a la puerta, ciertamente se veía graciaciosa con el vestido que mamá le había confeccionado, los elfos no eran muy estéticos a mi gusto, y desapareció más allá de la puerta. Yo me dedique a Verá las personas que iban llegando.

 

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[Valky]

Kaori.

Luego de haberlo estado dándole vueltas a la invitación la pelinegra finalmente se dio cuenta que las ganas de ver a sus locas primas eran más fuertes que cualquier otra cosa, como guardar el reposo que su sanadora le había pedido que tuviera. Se sentía bien y el pequeño Sammael se movía con ganas dentro de su pancita.

Luego de largo rato, pues cada vestido que se probaba la hacían sentirse como un globo y verse como uno, abrió un portal que la llevara a la Mansión de los Delacour. Se miró ultima ve al espejo, lucía bien. Lo único que cambió fue de zapatillas, se había puesto unas altas y algo le decía que a media noche, cual cenicienta, las perdería y no precisamente para que un príncipe las encuentre, sino porque ya no las aguantaría.

Su cabello negro caía en cascada sobre sus hombros, el vestido que había elegido era en un tono azul petróleo que le llegaba hasta la mitad de su pantorrilla, era una mezcla de seda y gasa por lo que caía muy suelto. Tenía el escote en V y debajo del busto una especie de cinturón de perlas que en tonos oscuros que se moldaban perfecto a su ya notorio vientre.

Al cruzar el portal apareció cerca del jardín. Las luces estaban prendidas y se escuchaba algo de música. Una sonrisa se poso en sus labios, le encantaba ver así la Mansión, toda llena de vida y no apagada y silenciosa como las ultimas veces que la había visitado. Al llegar a la entrada pudo distinguir a su prima Dennis quien estaba muy entretenida con Zoella como para ponerle atención.

—Busquen un cuarto niñas... —dijo sin poder evitarlo.

Rápidamente entró a la mansión, sin darle tiempo a que la Delacour pudiera cobrarse la pequeña broma. Cuando se encontró con las homenajeadas y los demás invitados, aun se reía. Y es que solo de imaginar la cara que su prima debió poner por su comentario, le causaba gracia.

—Buenas noches. —Saludó en general. —Espero llegar a tiempo para el brindis...Felicidades chicas —Dijo dirigiéndose a Memi y Kam, que lucían además de hermosas, muy contentas por la reunión.

Había una joven a la cual no había visto antes, la saludó rápidamente. Junto a Memi estaba un mago al cual si que conocía pues era un miembro activo del Simposio, aunque claro, él no la reconocería, cuando se habían visto Kaori usaba la metamorfomagia. Lo saludó rápidamente y entonces el rostro de la ojiazul perdió el color, era Lisa junto a un joven al cual tampoco conocía.

—Lisa, que sorpresa... —Dijo finalmente —Hola —Saludó al mago más joven. Sin atreverse a preguntar quién era—¿has llegado hoy? ¿Luka también esta? ¿Y Mei y los niños? —le preguntó y buscó con la mirada por si estaban por ahí el par de diablillos.

 

@tod@s (?

[Leslie Ashryver PB]

Alessandra estaba radiante, su esposa estaba al fin a su lado y desprendía un aura lujuriosa como ella, de reojo vio la expresión de Sean y supuso que ya seria muy hipócrita de su parte decirle algo a él y a su madre si mostraban sus afectos frente a ella.

 

La Delacour se sonrojó ante las palabras de su esposa, aquéllas dichas en su mente sin necesidad de expresarlas en vos alta. Esperaba que la fiesta avanzará más para poder darse a la fuga con Kam a sus cuartos, aprovechando que los quintillizos descansaban en los suyos al cuidado de los elfos.

 

-Si, Heli es hija de Deiwan un antiguo patriarca que desapareció- le explicó a Sean.

 

No había podido rodar los ojos cuando mencionó "pervertido por naturaleza", ahora su esposa aprovecharía aquello para seguir con la parte pervertida también, pero asi y todo la amaba a fin de cuenta asi se habían enamorado.

 

Alessandra levantó su rostro para ver a Kam, si era más baja que su esposa con tacones incluido pero lo que le faltaba de altura lo compensaba con un cuerpo voluminoso, cuando giró su rostro para ver que había captado la mirada de la peliblanca.

 

-Tía!!- chilló feliz de ver a la morena frente a ellos con un muchacho no más de 16 años que miraba embobado a su esposa.

 

La Nigromante apretó más la cintura de su esposa para marcar territorio ante la mirada del muchacho, lo que faltaba era lidiar con un adolescente hormonal loco por su esposa, ya suficiente tenía con Alec y Kyle como para agregar a su radar a un rumano.

 

-Me alegro de verte- saludo con una sonrisa a su tía, se sorprendió que Sean también supiera quien era aunque siendo la reina de Rumanía no debía sorprenderse.

 

Mientras observaba todo a su al rededor la pequeña figura de luna llamó su atención, agitando sus brazos llamó a la pequeña.

 

-Luna cielo ven- llamó a la Dumbledore -Amore, Sean, tia, Daniel, les presento a Luna Dumbledore vino de parte de su familia a estar con nosotros- la presentó estrechandola entre sus brazos.

 

Para su alegría su prima Kaori también llegó, su tía Dennis estaba más alejada muy ocupada con Zoella besuqueandose como si la vida dependiera de ellas, cosa que la hizo reír bajito.

 

-Kao, gracias prima- agradeció de corazón -y Aries? Como va el pequeño o pequeña?- le preguntó señalandole el vientre a su prima.

 

-Por cierto, quiero que conozcan a Sean es el prometido de Perenela, mi madre- explicó a los presentes -y pronto se unirá como mi padre a la familia- aviso.

 

Claro que más que nada era para la Potter Blue pero quería aprovechar la reunión para que lo conocieran desde ese momento.

 

 

@ @@Lisa Weasley Delacour @ @ @ @@Dennis Delacour @

[Lisa Weasley Delacour]

Lisa

 

Había estado tan pendiente de mi pequeño sobrino que no me había fijado en como Dennis se comía a besos a su novia a unos metros de mi figura. Iba a reprenderla, pero ¿Podía, acaso? Yo también lo hacia cuando se presentaba la oportunidad. Ademas, pillarla así, me daba permiso para luego molestarla. Su “yo soy una santa” había quedado relegado a la misma nada. Sus genes Delacour por fin hacían acto de presencia. Lo único que tenia claro es que si Zoella le hacia algo malo, acabaría enterrada viva en las mazmorras de Hunyad. La familia era la familia.

 

Avance, sintiendo como el calor de aquellas paredes me transmitía esa paz que mi alma a veces tanto anhelaba. El olor a hogar era inigualable. Daniel, a mi lado, sonreía al notar la esencia familiar de sus padres en todo lo que veía. Mei estaba presente en cada rincón de aquel lugar. La primera en darse cuenta de mi presencia fue Kam. Mi Delta. Una mínima reverencia por su parte fue el indicativo de su lealtad hacia Hunyad y hacia mi – La concienciación del alcohol te la pasas por donde jamas te da el sol. Ahora no te hagas la ingenua conmigo pequeño demonio.

 

Rebelde, carácter fuerte y tenacidad. Eramos parecidas en muchos aspectos. Tal vez era eso lo que ayudaba a nuestra cercanía y confianza. El adolescente a mi lado omitió una carcajada, disimulandola con una leve tos. El, en conjunto con la paladín y el dhampir eran quienes mejor entendían mis salidas de tono y bromas absurdas – ¿Por que me junto con vosotros? - Fue la pregunta que salio de mis labios – Porque si no te aburririas mucho tia Liss – Su respuesta llego segundos después. Por suerte o por desgracia, tenia razón.

 

Ignore por completo al tipo que sin vergüenza había osado pronunciar mi nombre y me centre en mi prima Kaori – Están en Rumania. Luca tenia una cena de gala con el ministro de Bulgaria para resolver unos asuntos – Tras compartir una mirada con la morena, agarre del brazo a Alessandra y la aparte de la pequeña multitud - ¿Que se supone que hace este ser despreciable en mi ***ido salón? No solo me ha insultado a mi en infinidad de ocasiones, sino también a tu apellido y ha intentado robar en nuestros negocios.

 

- Me da igual como lo hagas o que le digas, pero en cinco minutos lo quiero fuera de aquí. Y si, se que es tu fiesta y la de tu esposa, pero es una orden – Mis verdes ojos cambiaron de color a un rojo voraz. Mi lado vampiro salia a relucir – Daniel ve a tomar algo, pero no salgas de mi vista – Si iba a ver un conflicto el chiquillo no tendría porque estar en medio. Yuki, mi loba, hizo acto de presencia al sentir mi cambia de energía y se puso ante el tan Sean dejandole en claro que no era binvenido. Su gruñido asi lo gritaba. - La escoria esta de más

[Sean -Ojo Loco- Linmer]

Que Lisa me ignorase pues como que me daba igual. Mejor centrarme en todo el personal a mi alrededor. Si, no se podia negar que los delacour tenian genes que dotaban a sus mujeres de exuberante belleza y buen gusto. De hecho casi..casi el que desentonaba era yo. Ahora bien, ya que lisa me robaba la compañia de Alessandra, seguro para algun asunto importante, me dedique a catalogar todo aquello en lo que se posasen mis ojos. Mal de oficio que siempre me ayudaba a soportar el aburrimiento de estos eventos sociales y mas si estaba sin compañia. Si, ese jarron de alla era porcelana fina de china...nada mal, se podria vender muy bien en ciertos circulos fuera de Ottery, o que tal este jueguito de chucharitas de plata para el te o el postre..si....interesante, ademas de algun que otra decoracion de fina telas y cuadros de algun que otro mago famoso. Aunque claro...estos de seguro protestarian si los retiraba a una subasta.

 

En eso estaba cuando un lobo???....o....(mire su parte trasera)..Si definitivamente una loba, comenzo a mirarme con literalmente malas pulgas. O sea a pesar de que gruñera y me enseñara los dientes se veia tan tierna. -Ohh pero que dulzura...casi por un momento pense que eras Fenhir- dije mientras me arrodillaba sonriendo para tener cara cara al animal. Por cierto, ahora que me acordaba, ni idea de donde se habria metido el lobo de Matt, supongo que podria estar haciendo de corcel de su nueva prole con Helike.

 

-Si ya se que soy el nuevo y raro aqui...y que no huelo exactamente a "familia" -dije manteniendo el contacto visual- pero supongo podamos hacer las paces...tengo un filete bien jugozo en uno de mis bolsillos....algo frio...pero de primera calidad....supogo podremos compartirlo.