Encantamientos

[Crazy Malfoy]

Crazy llegó el primero de vuelta con su cuerpo y se encontró el lugar vacío, al parecer tanto sus compañeros como el profesor habían salido a dar un paseo por el bosque. No le sorprendió, aunque se preguntó qué clase de travesura estaría preparándoles Matthew en consonancia con aquella clase que se tornaba más sádica por momentos. Se sentó tranquilamente sobre una piedra bajo el puente y se puso a leer el Necronomicón dónde lo había dejado.

 

Al cabo de un rato todos estaban de vuelta y habían colgado boca abajo sus cadáveres. El que había traído la chica también estaba vestido con una túnica de buenos materiales, por lo que comenzó a pensar que quizás estaban jugando con los restos de magos de cierta prominencia en aquel lugar. Olía a problemas.

 

El pergamino reveló la segunda tarea, que curiosamente era la misma que él había realizado sobre la varita del mago asesinado. Percibió de reojo cómo su compañera lo apuntaba y comprendió lo que se avecinaba, sus instintos de combate lo llevaron a susurrar una defensa que le permitiera evadir el hechizo pero en el último momento decidió dejarlo estar. La bruja sólo intentaba cumplir con la tarea y no estaba en su ánimo entorpecer a sus compañeros.

 

La varita le voló de las manos y observó pacientemente cómo la chica revelaba sus últimos hechizos, uno de ellos fue su propio prior incantato. Cuando hubo terminado, Crazy se sacó del bolsillo la varita que le había tomado prestada al cadáver y susurró un Accio, conjurar aquel encantamiento con una varita ajena le hizo sentirse incómodo pero resultó igualmente efectivo y la suya propia voló de vuelta trazando un suave arco hasta caer en su mano extendida.

 

Lady había centrado ahora su atención en los cadáveres, observándolos con una mirada torva y no exenta de malicia. Comenzó a pronunciar un hechizo que Crazy reconoció al instante, y esta vez actuó.

 

- Ignea

 

La llamarada invocada por la bruja bañó el cadáver sin llegar a quemarlo y ella se giró con expresión confundida.

 

- No soy mucho de profanar cadáveres - dijo a modo de explicación - Me llamo Crazy, por cierto

 

Recordó entonces la tarea, pero dado que Lady ya había revelado que uno de los últimos hechizos conjurado por su varita había sido el prior incantato y que usarlo sobre la mujer sólo revelaría el incendio y el resto de hechizos que acababa de pronunciar momentos antes, lo consideró redundante. Su tío Abraxas le había enseñado décadas atrás que la magia era un don preciado que no debería usarse a la ligera.

 

***

 

Edito Off: Matthew estábamos roleando a la vez, mandé el mío sin ver el tuyo xD. Lo voy a dejar así sin editar y cuando alguien postee sigo con la tercera tarea, así no me adelanto demasiado en la historia y esperamos a Jeremy.

[Jeremy Triviani]

Al regresar junto a los demás, Jeremy observó con solemnidad el trofeo en forma de ardilla. No esperaba menos de su hermano. Estaba loco. Ahora les pedía que levantaran los restos del cuerpo que cada uno había encontrado, pero él solo tenía una mano de un cadáver. Por lo que la lanzó al suelo y apuntó con la varita.

 

-Levicorpus –Dijo viendo como la mano levitaba y saludaba a los presentes movido por la sacudida de la madera. Era macabro.

 

Eso le trajo lindos recuerdos de la familia Triviani, ahí las cosas macabras eran naturales. Nunca pasaba un día o dos, que algún familiar trajera un cuerpo vivo o muerto de un muggle, animal o ser que respirara oxígeno. Sin embargo no debía olvidar que el profesor era pariente cercano con las malas costumbres italianas que heredaban junto al apellido mismo.

 

La siguiente prueba que debían hacer lo trajo más concentrado por su complejidad. Debía usar una de las varitas de sus compañeros para saber qué hechizos habían estado utilizando. No quería saberlo, porque se podía llevar muchas sorpresas, pero se acercó a Lady y le quitó su varita en un movimiento rápido.

 

-Permíteme… es solo un segundo -Le dijo antes de que ella lo atacara - ¡Prior Incantato!

 

De la varita de la bruja, salió una neblina que formó los tres últimos hechizos que había utilizado “Incendio, Prior Incantato y Accio” los tres contra el hombre desconocido. Aunque el último no llegó a nada. El hombre defendió su cuerpo con una rápida defensa. Lo que hizo que el vampiro lo mirara sin disimular, cuando se presentó.

 

-Soy Jeremy Triviani -Se presentó ignorando el apellido paterno, para decir solo el de su madre Candela. Creía que estaban recien presentándose , ya que no lo habían hecho muy bien al principio. Pero se dio cuenta rápido de su error al notar el frío helado que empezaba a envolver al grupo. Algo no estaba funcionando. De repente y sin previo aviso, un sentimiento de tristeza empezaba a invadirlo con fuerza.

 

@@Crazy Malfoy @ @Lady Luxure Grindewald

[Malum Luxure]

Me encontraba esperando la próxima tarea cuando de improviso @ me quito mi varita, di un brinco y mi cara automáticamente se transfiguro en una mueca de furia.

 

-No sabes que no debes tocar lo que no te pertenece rubio!.- Camine hacia él con paso firme esperando que terminara y se la arrebate con enojo.

 

Una vez que volví a tener mi varita en la mano le apunte dispuesta echarle una maldición pero escuche a Matty llamarme la atención sobre hacer trampa...yo no lo consideraba como tal, ya que en la guerra y en lograr lo que deseo todo se vale.

 

-Yo no hago trampa.- Sisee entre dientes mirando como mi hechizo de incendio no había dado resultado en el cadáver de @@Crazy Malfoy lo que me dejo algo de fastidio realmente.

 

En ese instante en el pergamino apareció la tercer tarea para mi la cual fue bastante obvia ya que el ambiente se puso triste y frío...un impresionante dementor arremetió contra mi tomándome por sorpresa, no dejaría que me intimide aun que el asunto me había bloqueado y no podía recordar el encantamiento para detenerlo.

 

-Depulso!.- Grite en un intento pobre de detenerlo ya que no podía pensar con claridad.

 

Aquella criatura se alimentaba de las alegrías o algo así tenia entendido, el tema era que yo tenia escasos recuerdos por culpa de Mefistofeles, el maldito demonio se había llevado todo...lo que hacia el trabajo mas difícil para mi, maldito @Matthew Triviani lo sabia perfectamente. Me puse recta tratando aguantar mientras me concentraba.

 

-Expecto patronum!.- Grite nuevamente cuando el encantamiento golpeo mi maltratada memoria.

 

Realmente era un poco complicado que necesita de un poderoso recuerdo feliz...en mi mente los únicos recuerdos tan fuertes y capaces de crear aquel guardián consistían en el nacimiento de mi dulce Alex y el retorno a mi vida de Damian...mis hijos eran la razón mas poderosa para seguir adelante, De la punta de mi varita emergió una serpiente tomándome por sorpresa aquella forma, aunque la mire fascinada un momento debido a su estructura deslumbrante y poder...la vi mover su cuerpo ondulante y atacar con la boca abierta enseñando colmillos al dementor.

 

-Maravillosa...- Susurre sin poder despegar la vista.

 

Aquella criatura se alejo de mi yendo hacia los otros magos, dejando que la preciosa figura me protegiera ante la mirada de los demás.

 

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[Jeremy Triviani]

El vampiro sintió que la tristeza seguía embargandolo. Recuerdos que creía olvidados aparecían sin cesar en su mente. Una tras otras las situaciones feas de su vida volvían a él. No podía manejarlo. Buscaba con los ojos a algunos de sus compañeros, pero no los veía. ¿Se había trasladado del lugar inconscientemente? Parecía que sí. Se había alejado del círculo que habían formado sus compañeros y el profesor.

 

Estaba solo rodeado de negrura, de tristeza y desesperación. Se sentó en el suelo de tierra, esperando que el mal momento pasara siguiendo de largo. A Veces los vampiros tenían sus momentos de debilidad tras tantos años de vida. Se aislaban, curaban sus heridas y volvían a transitar el tiempo. Aquello no era normal, pero Jeremy estaba tan metido en su desgracia que no veía la sombra que aspiraba toda su vitalidad a medida que se acercaba.

 

Ni siquiera el olor putrefacto del Dementor lo sacó de sus recuerdos. Estaba noqueado. Sin fuerzas. Lo veía acercarse y estaba entregado a morir. ¿Porque no? Siempre había sabido que todo tenía un final. Todas las historias terminan. La varita mágica le pareció un juguete en su mano. Estaba por lanzarla al suelo, pero unas chispas de su punta le dieron un mensaje de lealtad. La varita lo había elegido hacía años y se quedaría con él hasta el final.

 

Apenas noto el frío de la mano del Dementor cuando levantaba su cabeza. Observo la belleza de la muerte en el rostro del ser. Nunca había notado el vacío de las cuencas oculares. No había rostro definido debajo de la capucha. Solo un agujero extractor y dos círculos con una especie de membrana por donde veían. ¿Veían? ¿O sólo tenían una brújula que detectaba alegría?

 

 

@

[Crazy Malfoy]

Con todos los alumnos robándose la varita unos a otros el ambiente se había enrarecido peligrosamente, en su juventud quizás hubiera sido el primero en prender la llama del conflicto pero consideró que no tenía mucho que ganar atormentando a unos jóvenes magos que acababa de conocer. Sin embargo, aquella escalada de tensión fue interrumpida por la inesperada irrupción en escena de un dementor.

 

- Nunca creí que me alegraría de ver un dementor - dijo acariciándose la barba- Qué curioso

 

La criatura atacó a Lady, alejándola del lugar, y fue seguida rápidamente de otra que se abalanzó sobre Jeremy. Crazy, sabiendo contar, dedujo que un tercero estaba al caer, de forma que se alejó un poco del puente para tener espacio suficiente. El frío no se hizo esperar, llenando el ambiente nocturno con una fina pátina nebulosa de tinte blanquecino.

 

No conseguía ver al dementor, pero el miedo aflorando en su pecho y el frío que se apoderaba poco a poco de sus entrañas le indicó que estaba cerca. Conocía demasiado bien el poder de aquellas criaturas, ya que habían luchado bajo su mando en las guerras mágicas, demostrando ser aliados útiles aunque quizás demasiado toscos. Conocía cómo defenderse de ellos, aunque era un hechizo que rara vez utilizaba, pero quería ver a su enemigo primero.

 

Al fin lo vio, surgiendo de la niebla como si nadara en el aire, retorciéndose y deslizándose mientras extendía las manos en su dirección, desesperado por nutrirse de su felicidad.

 

- Expecto Patronum - pronunció quedamente mientras giraba la varita en el aire -

 

Un gran águila plateada surgió al encuentro del dementor, cruzando el aire como una flecha y emitiendo un poderoso estallido de luz al impactar con su objetivo. La criatura salió despedida, perdiéndose de nuevo en el mar de niebla y el frío se desvaneció, sustituido por una inmediata sensación de calidez. El patronus comenzó a volar en torno a Crazy en círculos, lanzando pulsos de luz que alejaban cada vez más la neblina que los rodeaba.

 

Al cabo de unos instantes la niebla había retrocedido lo suficiente para mostrarle a uno de sus compañeros, Jeremy, tumbado en el suelo y con un dementor sobre él, levantándose poco a poco el velo negro que cubría su rostro. Comprendiendo lo que eso significaba, realizó un gesto con la varita y el águila plateada planeó como un rayo rozando al dementor, sin llegar a tocarlo. Esto fue suficiente para lanzarlo al suelo, obligándolo a soltar a Jeremy.

 

Su compañero sacudió la cabeza, como si despertara de un sueño y aferró la varita con fuerza. Crazy realizó un gesto con la suya y su patronus remontó el vuelo, dejando solo a Jeremy frente al dementor.

 

- Puedes hacerlo chico - le gritó - Busca en tu corazón un recuerdo feliz y úsalo como si fuera un arma