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Prueba del Libro de La Fortaleza XXXI


Dennis Delacour
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Aquellas criaturas los habían hecho descender al nivel inferior de aquel coliseo, prácticamente a una catacumba enterrada bajo las arenas del lugar rodeadas simplemente por oscuridad y muerte. El mago había bajado primero y cuando todo parecía que estaba en orden un ataque lo hizo gritar de dolor pero haciendo uso de sus conocimientos logró sanar y ponerse en pie nuevamente.

 

De las sombras una criatura como las primeras pero más pequeña saltó en su dirección pero unos movimientos de su varita lograron deshacerse de ella antes de que atacara a alguno nuevamente. Descendieron un poco más por aquel piso de roca hasta llegar a un terreno que era arenoso y se sentía incluso algo viscoso a su paso, lo cual no le agrado mucho.

 

Cuando llegaron allí varias antorchas ubicadas alrededor se encendieron brindándoles la luz necesaria para ver donde se hallaban. El lugar era como la arena el coliseo en la superficie solo que más pequeño, era un círculo de unos 30 metros de radio cuyo terreno estaba cubierto de lodo y sangre. El olor a putrefacto se sintió de pronto con más fuerza en el lugar cuando un halo de fuego rodeo aquel circulo dejándolos en medio a ellos dos.

 

En varios puntos podía ver figuras espectrales ubicadas tras mantos negros, parecían hechiceros de antaño, tan cadavéricos y llenos de oscuridad que incluso parecían flotar sobre la tierra. Los observaban atentamente y entonces entendió que de nuevo los Uzza hacía gala de su negro sentido de humor haciéndolos llevar su lucha en aquellas condiciones. Además de ese halo de fuego que no les dejaba huir estaban aquellos seres que no se moverían hasta que todo terminara, el calor y olor del lugar se calaba en su ser haciéndole maldecir por lo bajo a los guerreros que parecían divertirse a veces en hacer sufrir a quienes se atrevían a dar sus clases o tomarlas sobre todo cuando no eran sus compatriotas.

 

— Creo que es hora de que tu prueba de inicio y en este momento no soy quien manda, así que solo hay una forma de salir de aquí y es que la completes — dijo al mago al tiempo que hacía una reverencia, esperaba que él fuera capaz de vincularse con el libro y salir de allí antes de sentir que iba a tirar el contenido de su estómago sobre aquel desagradable lugar.

 

 

 

*********************************

@León Crowley vs @Dennis Delacour

Reglas:

 

  • Las Reglas son las mismas que para duelos
  • Pueden emplear todos los hechizos que deseen (Esto es Neutrales, Neutrales Graduados, los del Libro del Aprendiz de Brujo y los del Libro de la Fortaleza, con énfasis en este último)
  • Pasadas 24 horas, si su rival no responde, pueden crear una bestia mediante Morphos para atacarle, y los hechizos se considerarán impactados. Después de 48 horas sin respuesta se considera abandono y habrán reprobado.
  • En el tercer posteo de cada uno, van a ser atacados por uno de los entes que los observan. Deberán sortearlo rolisticamente, no se considerará como acción dentro del duelo su defensa, ni afectará los tiempos del duelo.
  • Hechizos resaltados con negritas y/o cursivas. De no hacerlo, la acción será inválida.
  • La prueba durará desde 22/07/2019 hasta el 28/07/2019. Por favor se agradece la constancia.
  • No se permiten los OFF ni tampoco la edición de posteos. Cualquier duda en el topic de consultas. Link

 

 

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La plataforma no tenía más por donde continuar, todo parecía estar fríamente calculado y ya en verdad dudaba de que Dennis fuera la artífice de todo. De ser así, habría anticipado el ataque que recibió. Para su fortuna, diestra en las habilidades curativas que seguro le habían dado sus demás libros. Al final de la rampa no los esperaba más que arena, pero esta se sentía diferente, más espesa, más pegajoza. La poca iluminación del lugar le impidió al holandés establecer si era sangre o brea. O las dos, Poco o nada importaba ahora. Ambos estaban en el centro del coliseo, figuras y entes oscuros se reunían a su alrededor, ansiosos, deseosos del espectáculo para el cual había sido hecho el lugar.

 

Creo que no hay otra salida, Dennis —comentó desenfundando la varita—. Lo había pensado, pero me costaba un poco admitirlo

 

En el lugar no había CarloMagno, Alexander o ningún cesar que les diera el visto bueno o malo de arranque. Devolvió la reverencia y se puso en posición. ¿Cuanto llevaba sin disfrutar un duelo? Años, tal vez, estaba oxidado y temía que eso le costara volver o no a su presente. Por el momento su presente era ese, la pariente lejana, frente a él, parecía tener la misma determinación. Verificó que no hubiera ningún objeto en el rango de los 8 metros a su alrededor y apuntó su arma en dirección a la rubia

 

Sectusempra —espetó y de su varita salió disparado un solo objetivo en la mira. Sabía bien de las habilidades de Dennis para curarse, pero ¿cuantas veces podría hacerlo? Ya lo averiguaría.

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No quedaba otra opción más que llevar a cabo la prueba en ese lugar y bajo las condiciones que establecian los Uzza, a veces aquellos guerreros podían ser tan caprichosos que incluso se inmiscuían en lo que debía ser su clase y sus decisiones pero así habían sido siempre y era un caso perdido tratar de discutir con ellos aún cuando la Delacour muchas veces creía tener la razón.

 

Que ironía estar en aquella arena como si fueran gladiadores de ese tiempo aunque su lucha no sería física sino mágica y con la energía y mente puesta en aquel duelo para conseguir el objetivo de aquel curso. Solo esperaba que el mago pudiera cumplir con lo necesario para aprobar ya que veía interés de su parte por vincularse con los poderes del libro.

 

Vio como el rayo salió disparado de la varita del mago en su dirección — Protego — dijo claramente logrando que el escudo formado a su alrededor absorbiera aquel rayo para que no le causara daño alguno, siempre al ataque como la mayoría de sus estudiantes lo hacían.

 

Ahora era su turno también, — Disparo de flechas — pensó al momento de haberse defendido y de su varita salieron un puñado de flechas dirigido a impactar el cuerpo del mago en varios puntos, la ojiazul no quería herirlo de gravedad simplemente causar un poquito de dolor para hacer todo más interesante. Solo quería que el Crowley respondiera a aquel duelo de modo que probará que esa clase le había servido de algo.

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Ella también lo sabía, y si bien eso pudiera ser parte de la prueba, era algo que estaba fuera del alcance de sus manos. El pelinegro había iniciado el ataque y desconocía por completo si era o no una falta de respeto hacerlo. Pero ya era demasiado tarde para arrepentirse. Escuchó la réplica de la mujer y entendió que ella pensaba exactamente lo mismo. Tal vez solo uno de los dos iba a salir en píe esa noche, pero no había forma de saberlo hasta que el duelo terminara.

 

Morphos —espetó apuntando a la prenda de la parte superior de Dennis que de inmediato se transformó en una avispa marina e inyectó su veneno en la piel desprotegida de la Delacour para luego caer muerta y volver a su inerte estado original.

 

Era una jugada arriesgada, pero estaba consiente del alcance de sus poderes y de los de su rival de turno. Las sombras se movían inquietas, expectantes, pero en un silencio sepulcral que era solo cortado por el sonido de los rayos al salir disparados de las varitas. En el aire viajaban ya las flechas de Dennis y parecía no haber nada que el pelinegro pudiera hacer. Recordó entonces los poderes del libro, la razón por la cual estaba ahí. Sonrió y pensó en la "Salvaguarda Magica". Al instante el cuerpo de León cuerpo adoptó una forma intangible y las flechas siguieron derecho, atravesando su torso sin hacer ningún daño alguno y estallando contra un muro lejano tras él.

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Estaba atenta a los movimientos del mago, no pudo evitar la sonrisa cuando uso el morphos, en serio quería envenenarla y ella que pensaba le había caído bien al Crowley, bueno todo era parte de aquella prueba así que era de esperar que el mago atacará con todo con tal de aprobar aquel curso y vincularse con el libro. Observó la transformación de su prenda y sintió el contacto de aquella criatura para luego el veneno entrar a su organismo.

 

— Morphos — dijo señalando a una pequeña roca junto a su pie para que se transformara en un bezoar que uso para contrarrestar el veneno en su sistema y poder recuperarse de aquel ataque. Nuevamente su mirada estaba en su oponente el cual se veía bastante acalorado igual que ella por estar en ese subsuelo sucio y rodeados de fuego y muerte, de pronto mejorar el clima pensó.

 

— Incendio — dijo y una llamarada salió disparada de su varita, su objetivo no era en si el mago sino el terreno a sus pies que cubiertos de fango y sangre se encendió como una mecha a su alrededor, no quería lastimarlo de pronto quemarlo un poco para ver que hacía al respecto, un par de heridas no le harían mal pensaba la Delacour mientras observaba al Crowley.

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La avispa había cumplido su objetivo y el veneno ya estaba haciendo estragos en la piel de Dennis. Lamentaba tener que hacerlo, en serio lo hacía. Pero solo parecía una forma de salir del lugar, sin importar lo que sucediera. Cómo lo había supuesto, la rubia utilizó el bien conocido Morphos para transformar un bezoar. Lo que le daba un buen margen para atacar

 

Desmaius —espetó con fuerza, apuntando al pecho de Dennis

 

De la punta de su varita salió un rayo con la firme intención de aturdir a la rubia que no tardó en lanzar su respuesta. En menos de lo que pudo darse cuenta el fuego estaba consumiendo todo su alrededor. Duró unos cuantos segundos mientras se consumía el fuego que parecía acompañar a la sangre, pero fue lo suficiente para generar una quemadura significante en su pierna derecha. Recordando nuevamente los poderes del libro asignado, pensó en la Curación, que hizo el efecto inmediato en su pierna quemada, quitando todo rastro de dolor. Se dio cuenta que Dennis hubiera podido acabar con él si lo hubiera querido, pero había optado por un incendio. Estaba probando sus conocimientos, lo estaba probando a él. En ese orden de ideas, todo lo que veía era fruto de su poder. Todo estaba bajo su control. Eso le daba un poco más de tranquilidad

 

Sectusempra —lanzó con firmeza, casi seguro de que no podría hacerle daño alguno. Esperaba no haberse equivocado o no tendría momento en que no se maldijera a si mismo por matar a una pariente Rambaldi viva.

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