Osito Mediador: El Escape

[Hayame Snape Potter Black]

La bruja pareció detenerse por unos momentos para meditar en las palabras de la elfina, queriéndo darle una respuesta honesta sobre su pregunta; del otro lado, los magos y las brujas que ayudaban con las publicaciones y llevando y trayendo noticias para verificarlas hacían parecer que todo el ambiente de aquel sitio era un completo caos pero la verdad era que en el fondo, todo estaba milimétricamente organizado de manera que nada fuera a perderse

-Pues la verdad, se verificaría su procedencia nuevamente por sus genes -explicó después de unos segundos de meditarlo, moviendo la cabeza para saludar a otros compañeros que pasaban cerca y les daban las buenas noches -los genes de los padres nunca se modifican así que no sería tan difícil seguir esa linea... además, a lo otro que te preocupaba... mira en aquella dirección

Señaló cuando llegaron a un espacio más amplio

En un círculo, como una fosa que subía y bajaba por los diferentes pisos de aquel lugar, los elfos domésticos se movían, aparecían y desaparecían llevando de igual manera informes, comentando lo que sucedía y a veces incluso gritándose de un lado a otro lo demás que tenían que hacer

-Nuevamente... qué te parece eso?

[Lisette Ryddleturn]

La elfina seguía demasiado sorprendida por la enorme edificación y su boca continuaba muy abierta por la sorpresa de ver todo aquello y cómo había sido formado

Se ruborizó en verguenza al sentir que había acusado de formas muy falsas a aquellos brujos cuando veía que de hecho en aquel sitio, los elfos eran mucho sus iguales

Y eso la hizo sentir bastante satisfecha mientras que sonreía y se encogía de hombros, aunque todavía los murmullos de los magos y las brujas en aquel lugar la ponían nerviosa

-Me alegra ver que todos los seres mágicos que quieren ayudar de forma buena y honesta para estos fines están siendo recibidos para participar en estos trabajos

Le dijo finalmente a la Snape mientras que le parecía que se estaban acercando a una habitación demasiado oscura en uno de los pasillos y se pegó un poco más a la mujer

-Qué es ese lugar?

[Tauro M.]

Se hablaba de envenenamiento, otro nuevo ataque perpetuado por enemigos, quizás. El asunto de la guerra se había salido completamente de las manos, en el sentido de que todos estaban aprovechando la ocasión para llevar a cabo sus propios planes, ejecutar sus venganzas personal y también echarle un poco de agua sucia a aquellos a quiénes más detestaba. La guerra estaba sacando lo peor de todos o más bien demostrando quiénes eran en realidad, pero todavía existían quiénes demostraban una preocupación genuina ante tantos actos de vandalismo e intentos de asesinato.

 

No era el caso de Tauro, al menos no tan así. A ella no le preocupaba lo que quisieran hacer los demás, pero si le interesaba saber quién estaba detrás de todo ello, ponerse en contacto con la persona y sacarle el máximo provecho a la situación, después entregaría al responsable a las autoridades y de nuevo cobraría por ello, porque además de ser una Magizoologa ella era una investigadora a la que le gustaba el dinero y donde veía una oportunidad, la aprovechaba.

[Hayame Snape Potter Black]

Ministerio de Magia Inglés

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Un extraño brujo caminaba por aquellos pasillos con epxresión pensativa pero alegre, aún en medio de toda la muerte que rodeaba los alrededore sy recibiendo las críticas de quienes le veían con tantas energías; no le importaba en lo absoluto, esa era su mejor protección contra el enemigo y aún así mostraba en sus brazos los rastros de las heridas que le habían dejado las batallas pasadas en contra de aquellos animales que les habían agredido tan fieramente

Quién diría que unos osos cariñosos de mascota podrían ser tan agresivos y tan belicosos?

Silbó un par de veces, pensando en que ya iba siendo hora de que se dirigiera al centro de reuniones clandestino que se había formado como tantos otros, debido a las violencias de la guerra... cuando le pareció ver una cabellera azul que husmeaba cerca del departamento de Accidentes con una actitud bastante curiosa

Mattías se ajustó sus gafas redondas moradas de hippie por encima del puente de la nariz y entonces, se colocó los brazos por detrás del cuerpo mientras andaba lo más suavemente posible hacia aquella bruja, que desprendía un aura demoniaca más curiosa que de aquellas de la que había aprendido a cuidarse

-Señorita... -la saludó con cuidado y bastante interés -parece que los senderos de la vida la han guiado con sus finos hilos en medio de el caos que rodea nuestras almas hasta cruzar nuestras luces en este extraño pasillo... algún sendero en especial por el cuál su mente despierta desee observar? -le preguntó tratando de no hablar tan extraño como solían decirle que lo hacía

Hippies

[Kiyotaka Ayanokouji]

Las piezas seguían moviéndose... Este juego pronto acabaría y sin decir más el mago sencillamente sonrió... Sabía dónde estaba aquella vampiresa... Le había sorprendido?... Si de sobre manera ya que no tenía idea de que tuviera acceso a ese sitio... y eso llamaba más su atención... porque era algo que no sabia... el sitio? Ya lo conocía... pero de otra epoca... mismo papel, diferentes actores, grandes amigos... verdaderos heroes... Pero aún no era momento de interceptarla.. necesitaba hacer un encargo más...

 

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Ministerio de magia inglés:

 

El día estaba tranquilo... Incluso para ser el ministerio de magia y también para los acontecimientos recientes... Cosa que suspirando termino los protocolos necesarios comenzó con su misión... Tenía que buscarla... Necesitaba su magia... Solo había conocido a una bruja casi tan inteligente como el y para continuar con su caso talvez la necesitaba...

 

--Ahi está...--

 

Decía mirando a la pelo azul y con una sonrisa el mago se encaminó hacia ella que había Sido interceptada por otro tipo por lo cual tosiendo fuertemente para llamar la atención de los dos se acercó amigablemente a la señorita Tauro...

 

--Cariño mío aquí estás... Me tenías sumamente preocupado--

 

Decía mientras le abrazaba algo exageradamente pero era la excusa para comenzar a susurrarle al oído --Te necesito... Quieres entrar ilegalmente al bunquer más grande de información mágica del mundo?--

 

--Pero que haces aquí? Te dije que mi oficina estaba más arriba--

 

Le decía mientras saludaba amablemente al tipo que la había interceptado mientras esperaba una respuesta de la señorita Tauro

[Tauro M.]

Un joven de gafas redondas y de aura extraña la saludó y habló de manera muy extraña, para ser sincera no había entendido ni la mitad de lo que estaba intentando decirle, pero no sabía cómo disimular por lo que guardó silencio por un breve momento aparentando estar analizando una respuesta apropiada, pero no lo consiguió y finalmente tuvo que admitirlo y pedirle que le aclarara.

 

-- ¿Disculpe? No le he entendido. ¿A qué se refiere? --preguntó con formalidad, tratando de devolverle el gesto de amabilidad que había tenido con ella --Realmente vengo aquí por los rumores, ya sabe que estos viajan rápido, pero nunca llevan información completamente acertada, sin embargo, no quiere decir que no sea del todo cierto porque ya saben lo que dicen por ahí, cuando el río suena es porque piedras trae. ¿O no? --no sabía quién era él ni de donde había salido, pero se veía como una persona confiable para tener una conversación --¿Usted ha escuchado algo?

 

Tauro estaba segura de que sea lo que sea que escuchara no la iba a sorprender... tanto. En su larga estancia en Londrés había presenciado y participado en ataques de todo tipo, especialmente para los miembros de la Orden del Fénix, bando al cual pertenecía aunque nadie lo supiera, porque su estancia allí pasaba de lo más desapercibida posible por su propio bienestar.

[Hayame Snape Potter Black]

Ministerio de Magia Inglés

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El mago de gafas púrpuras dejó escapar una suave risita agradable ante lo que había dicho aquella bruja y se las acomodó un poco mejor con un ligero movimiento de uno de sus dedos; se sentía mucho más cómodo ahora al sentir un poco más del aura de la mujer, algo que le habían enseñado al entrar en el departamento donde actualmente trabajaba. Generalmente la gente ahí era bastante confiada pero también, se entretenían queriendo saber un poco más de quienes les visitaban

-Me disculpo, me disculpo

Dijo el hombre de largo cabello negro sonriendo con agrado a la mujer de cabellos azules

-Ya me han expresado que mi manera de hacer saber lo que navega por mi mente tiene el entendimiento de las expresiones a colores de un muggle llamado Picasso -dijo y entonces, suspiró dándose cuenta de que lo volvía a hacer -en resumen, que mis maneras de hablar son demasiado... confusas -dijo y se podía ver que tenía dificultades en hacer más sencillas sus explicaciones -Mattías Foresty. Un placer

Se inclinó delante de la bruja con una reverencia para entonces, enderezarse con mirada extrañada y esta vez, realmente desconfiada ante el hombre que acababa de llegar

-Ah!... parece que ha venido con compañía, señorita! -expresó el hippie y sus lentes brillaron por unos segundos, sin confiar en aquel recién llegado -en fin, puedo responder a sus preguntas madame, cuando se encuentre más libre de su visita que haga con este joven... estaré en el Departamento de Accidentes

Le dijo con tono agradable a la mujer de cabellos azules

-Señorita... joven... -se despidió y se dió la media vuelta para comenzar a retirarse, con un gesto un poco más serio por lo que acababa de pasar

[Tauro M.]

Tauro se vio sorprendida por alguien que la abrazaba con demasiada confianza y le tomó un minuto entender de quién se trataba, motivo por el cual no hizo nada, pero rápidamente el señor Sherlock susurró algo importante a su oído que hizo que le siguiera el juego, aunque no estaba de acuerdo en ser demasiado cariño en público. De todos modos no entendía de qué hablaba y no sabía cómo preguntarle, ahí fue cuando sugirió ir a su oficina.

 

-- Ah sí, es que aun me pierdo entre las oficinas --respondió en modo automático, pero el hombre de las gafas siguió hablando con total soltura que era imposible dejar de escucharlo aunque quisieras. El mago seguía hablando en ese lenguaje tan elaborado, pero ahora se le hacía más fácil seguirlo y ahí fue cuando supo su nombre.

 

-- Mattías Foresty --repitió --Un gusto, mi nombre es Tauro --se presentó, no dando ningún otro detalle acerca de su apellido porque no lo creía necesario o relevante. Para ella las acciones y las palabras decían más que un simple nombre o apellido aparentemente importante, era algo que la tenía sin cuidado. No sabía si Sherlock estaba familiarizado con Mattías, así que decidió preguntarles.

 

-- Disculpe, ¿se conocen? ¿trabajan juntos? --preguntó directamente. No sabía si había pecado de imprudente, porque el mago de gafas se retiró hacia el departamento de accidentes sin responder ninguna de sus preguntas, pero antes de que se fuera le alcanzó a decir --¡Allí estaré!

 

-- Sherlock, ¿de qué me hablabas? --le preguntó ahora sí que estaban a solas.

[Hayame Snape Potter Black]

Ministerio de Magia Inglés

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El viejo hippie se detuvo por unos momentos, no queriendo haber dejado a la bruja sin respuestas pero sabiendo que no le agradaría a sus compañeros que lo hiciera en presencia de aquella persona ahí; por lo que solo se detuvo por unos instantes para ver a aquella mujer de cabellos azules y luego, le dirigió una sonrisa agradable a esta, tomándose las gafas por el borde con la punta de los dedos mientras asentía con la cabeza una sola vez

-Hasta que los caminos estelares se decidan a juntarnos nuevamente, señorita Tauro

Musitó el hippie nuevamente con aires agradables para después, darse la vuelta para continuar su camino rumbo al departamento de Accidentes donde esperaba encontrarse con los demás; tenía que informarles de lo que había encontrado y quién los había interrumpido, ya que desde su perspectiva aquel hombre bien podía ser un italiano también

Su aura no le daba nada de confianza

[Tauro M.]

El extraño hombre se marchó sin más, pero estaba segura de que lo volvería a ver, sobre todo por esa última mirada que había lanzado hacia Sherlock. La idea del mago era ir hacia un bunker donde aparentemente había mucha información no la convencía, no del todo. ¿Qué tipo de información? pero sobre todo ¿cómo sabía que ella estaba buscando información? ¿Qué tanto de su conversación con el hombre de los lentes había escuchado? Todo parecía muy sospechoso y aunque había visto a Sherlock en diversas ocasiones, era normal para ella desconfiar dadas las circunstancias actuales del mundo mágico.

 

-- ¿Donde queda ese lugar del cual me hablabas? --volvió a insistirle. Quizás todo eso tuviera que ver con los ataques y de verdad Holmes ocultara información privilegiada, eso era exactamente lo que quería saber, por suerte tenía dinero para pagar por ella en caso de ser necesario. Pero también era cierto que se había quedado intrigada por el otro trabajar, a pesar de su manera extraña de hablar, con tantos adornos en sus oraciones que le costaba mantenerse atenta, aun así no dudaba de que fuese una persona inteligente, de hecho es lo que aparentaba.