Instituto Internacional de Investigación a la Magia.

[Hayame Snape Potter Black]

Laboratorio de Herbología

La pelirroja se colocó una mano en la cintura y alzó una ceja mientras veía aquel arrebato del otro mago para después, alzar la mirada un poco mientras hacia una mueca

-En fin... he visto cosas peores a estas alturas...

Resopló con fuerza a través de la nariz para luego, con calma alzar la varita y hacerla girar suavemente de forma que la puerta recién cerrada se selló esta vez con las maldiciones propias de la vampiro; el que quisiera entrar la siguiente vez incluso con las credenciales se iba a llevar una sorpresa bastante desagradable por no decir que se iba a topar de narices con la puerta cerrada.

Lástima que al menos no tenía el poder de ver a través de las paredes porque le hubiera gustado ver ese escenario si se presentaba en alguna ocasión; era muy probable que si por ahí había ayudantes de los laboratorios y alguno quería ir a comprobar el estado de la Ryddleturn, se terminaría golpeando el rostro y eso sería algo divertido de ver

Pero bueno...

-Bueno, ahora que el chico se ha ido y nos ha dejado el mismo desastre que el pequeño demonio que le enojaba tanto... -se empezó a reír con diversión viendo los restos de vidrio en el suelo -mentira, el pequeño demonio hizo más pero... bueno, ya no es responsabilidad nuestra y podemos seguir con lo que sigue

Se encogió de hombros y le dirigió una mirada brillante e interesada a la Ryddleturn

-Entonces... bueno, Ashley ya estaba aquí para ayudarte, pero hay algo que yo pueda hacer para aportar en esa investigación sobre las plantas y la guerra que estabas llevando a cabo? -inquirió con entusiasmo para luego comenzar a frotarse las manos rápidamente, demostrando que lo decía bastante en serio

[Jeremy Triviani]

Jeremy lanzó dos carcajadas antes de controlarse. Las palabras de Tauro le habían parecido hilarantes. Le impresionaba que pensara que estaban en el mismo equipo. Ya no lo estaban desde que había salido del pentac.ulo. Ahora era libre y no pensaba caer en órdenes de terceras. Se encaminó hacia el pobre demonio ahogado, que escupía el suelo y se tomaba la garganta con desesperación.

 

 

-Claro que puedo manejarlo, encanto -Respondió con una sonrisa - Pero no puedo tocar al demonio porque no tengo experiencias con ellos y se me saldrá de control, creo que tu deberías hacerlo antes de abrir el portal -Le guiño el ojo, antes de agregar - ¿O le tienes miedo al pequeñín?

 

 

El demonio estaba casi desmayado en el suelo aparentando ser inofensivo. El vampiro esperaba que como simple mortal no tuviera tanto poder, pero se equivocó apenas dio un paso para acercarse. Asmodeus tan pillo como era, hizo un movimiento de varita que lanzó un rayo hacia Cissy. En ese momento las luces de emergencia que se habían encendido al comienzo cuando se fue la luz corriente, empezaron a titilar descontroladamente a medida que el demonio se hacía invisible resguardándose en la oscuridad.

 

 

-¿Dónde está? ¿Lo ven? -Preguntó Jeremy que ni se había molestado en darse vuelta a ver si a Cissy le había impactado el rayo.

 

 

Aprovechando que las luces no los dejaban ver bien pensó “Arena del hechicero” para que Tauro quedara cegada por un tiempo, ocasionándole problemas para apuntar correctamente.

 

 

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[Tauro M.]

Todo el asunto se estaba saliendo de control , ahora ya no sentía que luchaba contra Asmodeus sino que Jeremy también estaba en su contra. Lilith se había aparecido únicamente para incrementar el caos, era de lo que mejor sabía hacer y ahora ya no estaba Sophie para que le ayudara a mantener todo bajo control. Todavía no confiaba en el vampiro y ahora con más razón, el demonio había intentado atacar a Cissy y ella realmente esperaba que hubiese podido esquivar el hechizo a tiempo.

 

— ¡Ya estuvo bueno! —exclamó exaltada. De nuevo Asmodeus jugaba con las luces, mofándose de ellos. Tauro estaba dispuesta a terminar el asunto allí mismo, pero un remolino de tierra que iniciaba debajo de sus pies terminó por metérsele por los ojos, logrando que se quedara sin poder ver. Culpó al demonio, pero también al vampiro por no hacer absolutamente nada. Aun así, la bruja usó sus poderes para crear un portal, ya que para eso no necesitaba más que su concentración.

 

—¡Maldita sea! No puedo ver nada, Jeremy. ¡Haz algo de una buena vez! —el portal ya estaba creado delante de ella, lo único que tenían que hacer era moverlo hacia donde se encontrara el demonio, pero para esto necesitaba las instrucciones de alguien, ojalá que de Cissy.

 

—¡Metanlo ahí y me avisan para cerrar el portal!

[Jeremy Triviani]

Jeremy volvió a reír a carcajadas con las palabras de la bruja. Se alegraba que no pudiera ver. Un pequeño destello de culpa, del hombre se expandió por su mente, pero el demonio que había tomado el mando, lo cayó con más risas. Mientras su aguda mirada buscaba entre las ráfagas de oscuridad y luz, donde estaba el pequeño demonio. Lo vio cerca de la puerta de la jaula que lo había estado conteniendo tiempo atrás. Se apresuró acercarse, mientras Tauro pedía que lo atrapara.

 

 

-Asmodeus, estoy de tu lado. Tu madre liberó algo en dentro de mí. Voy ayudarte a salir de aquí -Susurro despacio para que el demonio pudiera entenderlo, aunque se estaba poniendo morado sin poder respirar - Anapneo.

 

 

El demonio empezó a recuperar el color, aunque seguía un poco ido con tanta asfixia. Jeremy hasta pudo inclinarse a ver lo feo que era más de cerca. Le producía curiosidad los seres extraños con tanto poder. La maldad de los ojos de Asmodeus era muy notoria. Le sonrió al vampiro y pareció aceptar el trato.

 

 

-¡Ya lo tengo! -Gritó Jeremy agarrando al ser con cuidado, este parecía hacerse el desmayado, mientras se acercaban a donde estaba Tauro, completamente cegada. Cissy parecía estar en algún lado del laboratorio, pero el vampiro no llegaba a verla - ¿Tienes el portal abierto?

 

“Tírala dentro, que yo lo cierro” Ordenó el demonio dentro de la cabeza de Jeremy. Quien apenas se sorprendió de poder escucharlo en su mente.

 

 

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[Hayame Snape Potter Black]

Laboratorios

El pequeño dragonzuelo de fuego había conseguido escurrirse por entre las piernas de todas las brujas y no le había sido dificil también pasar de largo a aquel mago que se decía reportero, por un lado; de hecho le había convenido grandemente el que aquella persona tan solo hubiera entrado utilizando cualquier magia que hubiera llevado consigo para poder hacer su salida desde aquella habitación completamente sellada hasta los pasillos de aquel instituto, donde tenía muchísimo más espacio

Quizás no era uno de los demonios más grandes de la antigua mansión Ryddleturn pero de todas maneras se sentía orgulloso de formar parte de las filas de criaturas y seres oscuros que habían servido por generaciones a los cabezas de aquel sitio; desde las profundidades por debajo del hogar, vigilando, protegiendo, maldiciendo y alimentándose de todas las almas de los enemigos que osaran poner sus pies en un sitio donde no solían ser bienvenidos...

Todos ellos estaban orgullosos de su labor

Pero entonces había llegado aqella chiquilla y habían estado a muy poco de devorarla, de no haber sido por aquella situación en la cuál finalmente había recibido ayuda de varias sacerdotisas por lo que, muy a su desagrado, había hecho la vinculación; ese maldito ritual que por lo general hacía felices a los demonios pero que ahora, les había encadenado a una nueva ama de la que no estaban muy felices pero de todas maneras, estaban obligados a servir

Resopló de mala gana, tenía demasiadas ganas de desquitar su rabia con algun alma... y ahora que estaba libre, se dedicaría a buscar unas cuantas en aquel instituto; podía sentir los movimientos y la presencia de varios magos y brujas que no estaban al pendiente de ellos y con un poco de alimento, él sería capaz de explayarse y crecer a gusto

"Y aquí vamos..." pensó felizmente la criaturita, fusionandose con la sombra de una pared y comenzando a avanzar, en búsqueda de una futura presa.....

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[Tauro M.]

A ciegas, Tauro tentaba a su alrededor cuidandose de no caer o tropezar con algo. No le gustaba para nada lo que estaba ocurriendo y se sentía insegura al no poder tener control sobre lo que sucedía a su alrededor. «¿Por qué Jeremy se tardaba tanto?» Por otro lado no podía seguir así, debía dejar de perseguir a Asmodeos, resolver todo de una buena vez por todas y justo ahí se prometió a sí misma no volver a perseguirlo. Su incansable búsqueda de venganza debía parar, aquello la estaba cegando de mirar cosas más importantes y el demonio se aprovecha de eso.

 

— ¡Sí! ¡Hazlo de una buena vez! —le urgió. Todavía veía borroso, pero al menos podía abrir los ojos. El portal estaba rodeado por una gran cantidad de magia que al cerrarse se aseguraría de que Asmodeos no volviera a pisar la tierra por un buen tiempo y cuando lo hiciera, Tauro lo estaría esperando. Por años él había sido su pesadilla, ahora era su turno de devolverle el favor. Cada vez que el demonio escuchara su nombre temblaría, ella se aseguraría de eso.

 

Sintió tanto al vampiro como al demonio cerca, la hora de mandarlo a cruzar por el portal se aproximaba.

 

— Muévete —dijo con voz firme, ya viendo un poco mejor por su ojo derecho —Nunca más vuelvas a intentar venir. O lo lamentarás —sentenció con furia. Apuntó a donde creyó que él se encontraba y le lanzó un Sectusempra, lo más justo sería que en el camino de regreso sufriera. Sintió el impulso de perseguirlo una vez más, pero se acordó de Sophie, la bruja yacía desmayada, no podía abandonarla a su suerte.

[Jeremy Triviani]

Jeremy se acercó con el demonio desmayado a donde estaba el portal que lo enviaría a su casa. Según sus planes nada podía salir mal siendo aliado de Asmodeus. Al llegar junto a la bruja cegada, tuvieron el percance de que ella les lanzó un rayo. Que no pudieron esquivar por la cercanía. El hechizo impacto en el pecho del vampiro, haciéndolo doblarse por la cintura del dolor, mientras que el demonio saltaba hacia el suelo y arremetía contra Tauro para enviarla del otro lado del portal.

 

 

“Episkey” Pensó el Triviani sintiendo como las heridas dejaban de sangrar y empezaban a cerrarse. El olor a sangre volvió a llenarle las fosas nasales, permitiendo que en su interior volviera a dominar con más fuerza los instintos vampíricos. Sus pupilas se empezaron a dilatar, mientras se erguía para ver qué estaba pasando. Se sentía raro, y un poco confundido.

 

 

“Ya cerré el portal, ella vivirá los mil infiernos” Le dijo Asmodeus dentro de su mente mientras le devolvía la varita con una sonrisa maligna. Jeremy tomó su varita con precaución, empezando a entender que estaba ocurriendo. ¿Cómo traería de nuevo a Tauro? Se fijó la varita de Sophie que tenía en la otra mano y no supo de quién era.

 

 

-¡Desmaius! –Gritó apuntando al demonio con las dos varitas, que le respondieron al instante, haciendo que por la cercanía al ser, le impactara ambos hechizos en el pecho. Dejándolo desmayado por un tiempo.

 

 

La tarea difícil era regresar a Tauro al laboratorio. Él no poseía ese tipo de magia tan poderosa. Ni podía parar al demonio una vez que despertara y buscará venganza.

 

 

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[Tauro M.]

Tauro recuperó completamente la vista al tiempo que sucedieron muchas cosas, por un lado un grito de dolor protagonizado por Jeremy y lo segundo el fuerte impacto de algo chocándose contra su cuerpo con fuerza. Como aun estaba acostumbrándose a ver nuevamente, no pudo hacer nada para evitarlo, ni para frenar el empuje de lo que chocó contra ella. En ese momento no tenía conocimiento sobre quién había sido el cupable, pero sabía que había caído dentro del portal y debido a que era ella la que mantenía la conexión, este empezaría a desaparecer poco a poco y ella ya no iba a poder hacer uno nuevo, ni mantenerlo abierto, no con la poca energía que le quedaba.

 

— ¡Sophieeee! — fue lo primero que gritó, pero era inútil. — ¡Cissy! —. La bruja tampoco respondía. No quería llamarlo, no quería recurrir ahí y terminar debiéndole un favor. — ¡*****, Jeremy! ¿Dónde te has metido? — en el otro lado estaba a oscuras, no podía distinguir nada, tan solo tocar con la mano la superficie rocosa y resbalosa donde había caído. ¿Qué era eso? Hacia un frío tremendo, el más intenso que hubiese experimentado.

 

— No puede ser... — murmuró. Ahora sí que sabía donde estaba, ese no podría sino ser el lugar de donde había salido Asmodeos y es que a decir verdad al momento de crear el portal estaba furiosa y no había pensado bien a donde quería mandarlo. Aquello era un foso del infierno, allí iban a parar las almas desoladas, las que no iban a tener la oportunidad de aspirar a algo mejor.

 

El frío volvió a erizarle la piel, se estaba abrazando a sí misma para poder darse calor, pero era insoportable. Quiso aproximarse a donde creía estaba el portal, pero por algún motivo había caído demasiado lejos. Sus piernas no le respondían como quería así que tuvo que prácticamente arrastrarse, siendo guiada por el sonido de un hechizo pronunciado por el Vampiro.

 

—¡Jeremyyyyy! ¡Sácame de aquí!

[Lisette Ryddleturn]

Laboratorio

La bruja miró por unos momentos a la Snape que tenía delante y que parecía que ahora estaba un poco más calmada, sin la presencia de aquel reportero que se había colado en el laboratorio

Aunque ella se sentía bastante preocupada por el pequeño demonio con forma de dragón que se había escapado y que seguramente iba a causar bastantes problemas entre los demás científicos

-La verdad es que creo que deberíamos de traer esa cosa que trajiste aquí y que se ha escapado...

Dijo la bruja rubia y se pasó una mano por la frente y luego por el cabello hasta hacerlo hacia atrás de manera que ya no le estaba estorbando por encima de sus ojos

Miró a la pelirroja y luego, a la otra rubia que aunque estaba enferma seguía de pie ahí con ellas y que había permanecido extrañamente silenciosa a pesar de que siempre gustaba de las batallas

-Bueno, si hay algo en lo que podrías ayudarme

Dijo empezando a mover un dedo mientras acompañaba de ello su pensamiento, desenfocando los ojos solo lo suficiente mientras que parecía meditar

-Eres experta en pociones, no?

[Hayame Snape Potter Black]

Laboratorios

La bruja pelirroja había comenzado a caminar a través de aquella habitación esperando a que su ex novia le dijera algo al tiempo que se colocaba los brazos por detrás de la cabeza y caminaba hacia la puerta de salida; se paró delante de esta y abrió los ojos otra vez pero solo a la mitad, mirando con gesto aburrido y pensativo aquel ingreso que acababa de sellar para que no recibieran más sorpresas inesperadas como la de ese sujeto

No se tragaba ni un poco lo que le había dicho

Para qué quería exactamente ese sujeto ir directamente a donde estaban ellas cuando le constaba de primera mano que había alguien más haciendo cosas mas peligrosas en otras zonas de los laboratorios que donde estaba Lisette?; tampoco se creía que todo fuera un accidente, exactamente qué tenía en mente cuando había abierto la puerta dejando escapar al pequeño demonio en forma de dragón sin haberse movido para detenerlo de alguna manera?

Su actuar no había sido veloz, había sido lento para reaccionar al hecho de una criatura que al parecer el hombre detestaba y por eso mismo, no le tenía sentido

-Uh?... si, por? -questionó parpadeando como si la acabaran de despertar de un sueño y se giró para ver a la Ryddleturn con algo de desconcierto.