Feria Gastronómica Internacional

[Fengari M.]

—¿un negocio de café colombiano? ¡Eso es maravilloso! Me encantaría conocer tu local Tauro, espero pronto visitarlo.

 

Jugueteé con el tenedor removiendo una bolita dulce de color rosado, como una gragea gigante, apartándola de una esquina del turrón para tomar otra porción, llevándomela a la boca con religiosidad, saboreando el dulzor del postre mientras pensaba en todos los puntos positivos de tener una cafetería, y aunque me encantaba el café con azúcar, lo cual iba en contra de los grandes conocedores del café, ser dueña de una cafetería podría ser lo que todos los dormilones necesitábamos.

 

Miré a Antoni y sonreí, se veía distante y un poco apesadumbrado, quería decirle que un poco de azúcar podría darle un golpe de energía, pero conocía esa sensación, cuando te encerrabas en la burbuja y a pesar de estar rodeado de muchas personas, sus sentimientos y palabras no llegaban a ti, porque los miedos y las dudas a veces eran demasiado grandes, cargas tan pesadas que hacían muros entre nosotros y el resto. Lo miré con ternura esperando que dejara esa etapa pronto.

 

—¿hay algo que te gustó mucho en esta feria? —pregunté al Dracony.

 

—También mencionaste que te dedicabas a las criaturas mágicas, debo admitir que no sé bien cómo cuidarlas, tal vez un día de estos podrías enseñarme. —recordé mirando a la peliazul.

 

 

 

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Editado 22 de Noviembre del 2019 por Fengari Naberrie Black

[Tauro M.]

—¡Por supuesto! ¡Puedes ir cuando quieras! En general todos pueden ir cuando quieran —los invitó. Tauro seguía conversando con Cye, de vez en cuando intercambiaba palabras con los demás que estaban en la mesa, aquella era una reunión que no estaba para nada planeada, porque de haberlo hecho probablemente habría salido mal, ya que era muy difícil ponerse de acuerdo con alguien en estos días. En ese momento la bruja experimentó quietud absoluta, no se sentía estresada ni que debía pensar en las multiples obligaciones que tenía, ni hacerle caso a las preocupaciones. En parte les agradecía por darle un buen momento.

 

—¿Qué dicen? ¿Nos vamos hacia otro stand? ¿Quién elige?

 

Ella iba a estar bien sin importar la elección, pero ya ese habían puesto demasiado cómodos y si no se levantaban entonces no iban a poder terminar de recorrer la feria completamente y al parecer ese era el plan. En lo que decidían ayudó a recoger un poco el desastre que habían hecho, agradeciendo la invitación y la explicación sobre cada comida. Perú ahora hacia parte de uno de los países que seguramente visitaría apenas tuviera la oportunidad.

 

Tauro jamás considerado tener amigos, pero ahora que los veía allí conversando alegremente, pensaba que quizás si los tenía. Se guardó ese pensamiento para sí misma, quizás algún día se los diría, pero de momento solo quería seguir pasando un rato agradable con ellos.

[Nicole Evans Crowley]

Habia terminado de revisar las papeles y condiciones legales de aquel evento, todo estaba en orden y mucha gente ya hacia acto de presencia para deleitarse con la cultura y gastronomía mexicana <<ya que estoy aquí, podría disfrutar un poco>> pensó la Crowley por lo que habia guardado todo su papeleo en su bolsa, junto con su insignia que la identificaba como parte del departamento de cooperación mágica. Ahora caminaba tranquilamente entre los diferentes food trucks que se encontraban en el lugar, deteniéndose en el de Doña Conchita para pedir unas empanadas y sopes.

 

Caminaba tranquilamente por el lugar, con su plato en una mano, disfrutando de la comida que habia comprado; estaba a punto de dirigirse al puesto de golosinas cuando se percato de la presencia de Fengari, su hermana, por lo que decidió acercarse hasta donde se encontraba.

 

-¡Fen! Que bueno verte aquí.- le dio un rápido beso en el cachete en forma de saludo, cuidando no tirar su comida sobre su hermana o sobre algunas de las personas que la acompañaban.

 

-Hola, ¿Están disfrutando de la feria?- pregunto justo antes de darle otra mordida a su empanada.

 

@ @

[Leslie Ashryver PB]

Alec Malfoy

 

 

 

Alec estaba en shock, aquél accionar no se lo esperaba pero le gusto, el calor que emanaba el dedo de Elizabeth en sus labios desprendían una gran carga de electricidad. Sus labios quemaban por besarla pero su estómago comenzó a pedir otra cosa también, sangre.

 

Sys ojos azules que antes brillaban ahora estaban oscuros, sus oídos captaban con mayor intensidad los corazones de todos a su alrededor, no le quedó de otra que tragar en seco.

 

-Nial y Amara- le respondió con rapidez los nombres de sus hijos.

 

No estaba seguro si Elizabeth estaba usando sus encantos de demonio pero el Malfoy no se resistió en tomar su cintura para aplastar su cuerpo al suyo, con su mano izquierda libre levantó el rostro de la morena y el como le sacaba una cabeza de altura se inclino como a besarla pero a los pocos centímetros se desvío a su mejilla para dejarle un suave beso.

 

-Es mejor que sigamos paseando- le aviso en su oído -estas haciendo que pierda la cabeza- confesó aflojando su agarré para tomar su mano y depositarle un beso.

 

-Me alegro que ya no te invoquen asi no te separan de mi lado- sonrió el castaño.

 

 

 

@ Nerón Blackthorn

[Fengari M.]

—oh! Excelente! Me encantara estar por ahí, de hecho el fin de semana sería perfecto —pensé considerando que las mañanas de los sábados eran muy solitarias— podríamos desayunar juntas Tau.

 

Y la soledad no era incomoda la mayoría de las veces, pero debía admitir que en ocasiones, por momentos cortos, los espacios se hacían más grandes y el eco de una sola voz era demasiado triste. Suspire reevaluando la facilidad con la que podía cambiar nuestra perspectiva cuando consideramos los pequeños momentos, esos que ignoramos, aquellos que al restarle importancia por insignificantes, eran los que contaban. Suspire volviendo a concentrarme en la conversación.

 

Sonreí terminando la última porción del turrón, fascinada por el dulce arenoso en el paladar, con aroma a licor y suaves toques de anís y otras especias. Estaba enamorada de ese sabor. Pestañeé observando a los demás, asintiendo y debatiéndome a donde seguir— bueno, no estoy segura, hay tanto que ver! ¿A dónde quieres ir tu Tau?

 

De pronto escuché una voz familiar y me tenté a girar a su encuentro, pero solo me tomé la mejilla después de recibir un beso de mi hermana —Nicole! —su presencia fue tan sorpresiva que sonreí un rato mientras ordenaba mis ideas, estaba feliz por verla ahí, miré a Tau y a los otros magos en la mesa, suponiendo que todos se conocían, sin embargo no estaba segura de que conocieran nuestro parentesco, y definitivamente eso podría darme un comodín con Tauro y su curiosidad sobre mi familia sanguínea—. Ella es Nicole, mi hermana.

 

—Estoy sorprendida de verte aquí Nicole ¿Encontraste cosas ricas?

 

 

@@@Nicole Evans Crowley

[Tauro M.]

Desayunar le parecía una estupenda idea, sobre todo teniendo en cuenta de que era su comida favorita del día y más si la acompañaba con café y un delicioso bocadillo de postre, porque nunca se era lo suficientemente temprano para ello. Le sonrió a Fengari asegurándole de que la estaría esperando, aunque tenía a varios meseros y meseras a disposición de los clientes, ella misma la atendería y la complacería con el que era sin lugar a dudas el mejor café del mundo.

 

--Uhmm, se me ocurre que quizás podríamos seguir recorriendo la zona de latinoamérica o en definitiva saltar hacia otro país --comentó, tomándose el tiempo para meditar a donde le gustaría ir. En eso llegó una nueva persona, que resultó ser la hermana de Fengari. Tauro las miró sorprendida a ambas, porque para ella si que era una nueva información.

 

--¿Hermanas? Wow, jamás me lo hubiese llegado a imaginar. Bienvenida, Nicole, escuché que estás comiendo cosas ricas, por lo que al ser la nueva del grupo, tienes que cumplir con la tradición que me acabo de inventar y es elegir el siguiente lugar a visitar --sonrió --¡Ah! Y también estás invitada a mi cafetería, tenemos un café Colombiano exquisito, quizás para la próxima feria me anime a participar. ¿Qué dicen?

 

@@@Nicole Evans Crowley

[Anthony R. Dracony M.]

Era notorio que el Ryvak no estaba en un buen momento, su ser estaba añorando con gran fuerza a Cindy...quizás porque no había puesto freno a la avalancha de momentos que deseaba compartir con la castaña...pero le costaba detener aquella melancolía que le tenía absorto...

 

Estaba sufriendo en silencio, cuando la voz de @ le hizo girar para que su rostro quedará frente al de la chica de pelo celeste que le ofrece hablar:

 

--Si quieres luego de que terminemos de recorrer la feria podemos seguir platicando sobre los planes de la reserva y de paso conversar un poco de lo que quieras, siento que te caería bien.

 

El peliverde responde en voz muy suave pero cargada de desesperación (hubiese dado todo con tal de que nadie lo viese sufrir...):

--Si....si quiero hablar...ya no soporto su ausencia...--Pide con un ademán discreto silencio a la magizoologa...tiene que cambiar su semblante triste...y coloca su mano sobre la de Tau y hace presión sintiendo que el alma le inclina a suplicar ayuda...se da cuenta de la cercanía que su movimiento le ha puesto con la joven y avergonzado retira con rapidez su mano tomando un vaso de zumo que hay cerca suyo.

 

 

No sabía si los amigos habían presenciado aquella reacción, esperaba que no porque no era su intención amargarles "la fiesta" trato de concentrarse en algo diferente a sus pensamientos, una música lejana regalaba notas alegres a los visitantes a la feria, si al menos su espíritu pudiese "sintonizarse" a la melodía... @ le hizo una pregunta de la que no pudo decir mucho a la amigable bruja.

 

--¿hay algo que te gustó mucho en esta feria?

--Bueno...el tamarindo enchilado definitivamente es algo que me gustó mucho.--La joven desvió la mirada del ojimiel para atender a Tau y a los otros compañeros del grupo, por fortuna eran varios y dialogaban entre ellos. Para suerte del ojimiel que lucha interiormente con los deseos contenidos que le enloquecían de dolor, respiro profundo tal como le enseño la Ex directora del hospital San Mungo, Anna...entre cerro los parpados, necesitaba usar esa sonrisa que era la envoltura de su dolor callado.....le está costando más que otros días...pero poco a poco los muros se van levantando a su alrededor...aquellos tras los que esconde su mente, abre sus ojos miel y la fortaleza que le rodea le va calmando, él no ve a nadie pero de igual manera nadie le puede mirar, aunque al costado izquierdo aparece un oscuro agujero, el ojimiel duda en asomarse a ver en su interior, puede que ahí hay algo perturbador....aquel agujero no parará de abrirse hasta que se decida a observar...

 

Pasa saliva y atisba con cierto recelo...en aquella oscuridad hay un pequeño arrodillado en el suelo...él se acerca, no es natural descubrir al niño castaño que rescato el año pasado...Aydin luce con el cabello largo en un aspecto semisalvaje, se arrodilla frente a él incrédulo de verle como si se sintiera perdido, le toma de ambas manos las sobrepone una sobre la otra y luego él mismo sobrepone sus manos sobre las del niño que levanta sus ojos castaños y fija la mirada en los suyos...se miran mutuamente...

 

El joven mago le mira sin encontrar algo que decirle...se asombra mucho más al ver que el niño es él, sus ojos llenos de lagrimas, mueve sus labios como si suplicará...un grito sin voz que él sabe cuál es..."¡¡ayudame!!" le mira las manos, en sus muñecas están gruesas cadenas...el pequeño peliverde no le quita los ojos de encima, su cabello verde largo esta con polvo, sus ropas rasgadas apenas cubren su cuerpo delgado desmejorado por la carencia de alimento, su mirada huye con miedo...

 

Lo que pasa no se lo explica del todo, él es el peliverde niño, está mirando a ese mago que le toma de las manos...su mirada oscura es muy gélida, su rostro inexpresivo solo le atraviesa como si los ojos negrísimos fuesen dagas...es el vampiro Reacon, Ryvak está en ambas personas, en el niño peliverde prisionero del mago Regan y es también el pelinegro vampiro que le sostiene las manos...Reacon usa su fuerza sobrehumana y rompe las cadenas...¡le ha liberado!

 

El rostro del vampiro no cambia su expresión, no muestra ningún sentimiento, Ryvak hasta ahora lo comprende...el vampiro también tiene sangre demoniaca por su propio padre, no es alguien común, tiene poca estima por el mundo y la gente...Ryvak antes le temía, pero el tiempo ha ayudado a hacerlos más cercanos...el peliverde recuerda a @@Darla Potter Black ...seguramente ella es tan distante por su naturaleza de vampiresa...ahora Ryvak comienza a ver como las cosas van encajando...no es solo lo que él creía, es....que todos tienen una historia, sobre sus labios "vuela" un espejismo...él es el niño que fue liberado por el vampiro, pero al ser un ser vacío que no poseía sentimientos, le "abandono" dejando lo en aquella sospecha que no valía nada...

 

Ryvak niño se ve a solas en aquella oscuridad que le duele en el alma, sus lagrimas corren de sus ojos mojando sus mejillas, ¡no tiene a nadie! se ve en un claro de un bosque, ya no puede correr más, tampoco seguir caminando sin rumbo alguno...el dolor en sus piernas le mantienen en aquel sitio, cierra sus manos sobre sus rodillas ahoga los gritos que quisiera dejar escapar...se contuvo a tiempo de explotar de ira...ira que hubiese demostrado con la aparición de fuego...

 

Pero Lyra logro enseñarle un poco sobre controlar su ira y el poder del fuego que posee...¡sino fuera porque se enfado con él!...ahora no puede saber más...ella ya no podrá decirle si es un demonio...no, ya no podrá...desesperado se flexiona hacia el frente para apoyar su rostro sobre el pasto y abandonarse en aquella tristeza de no saber nada sobre él...y he ahí que descubre descansar la cabeza sobre una falda, el aroma de nardo le sobrecoge el corazón, sin necesidad de levantar la vista, adivina que es Cindy quien lo consuela, siente como le acaricia el cabello y le cuenta esa historia bellisima:

 

--"Nunca darás rosas porque no eres un rosal, tampoco darás frutos porque no eres un manzano, eres fuerte por naturaleza porque tú eres un roble..." Antoni, yo creo que eso eres precisamente, eres alguien que da fortaleza, no se si como el roble o el cedro, pero creo que no conoces tu propia fortaleza porque no te has mirado interiormente, sufres porque crees que no eres nadie, pero lo eres, solo necesitas "verte" y te conocerás verdaderamente.

 

Sus lagrimas cesan de brotar, una dicha diminuta brota en el centro de su pecho, ahora puede levantarse, esta oscuro pero mira al frente, Cindy camina hacia él sonriente, a cada paso que da, surge fuego tras de ella, Ryvak se percata del latir de su corazón, unos pasos más y ella llegará hasta él...estruendos se escuchan muy cerca...¡la guerra!... entre fuego desaparece Cindy, se fue ella para cuidar de Aydin...Ryvak trata de sujetar el fuego...unas llamas están entre sus manos...igual que el fuego que Renna le ayudo a surgir cuando hizo sus votos nupciales...fuego eterno...como el amor entre Cindy y él...

 

Ryvak sujeta con fuerza el vaso de zumo...entonces un calor sobre el dorso de sus manos le sobresalta...¡Cindy!...él también podría haber desaparecido al igual que la castaña...pero no quiso huir...no ahora que tiene cierto saber mágico...quiso probarse a si mismo que podía sobrevivir...

 

Al fin bebe del vaso, es un zumo de fruta fresco, lo que más gusta al ojimiel, justo entonces ve llegar a alguien que recuerda de la academia mágica, está sonriente y les mira a todos, la dulce @ se ve orgullosa sentada entre @@Seba Granger y @ quienes sonríen a la recién llegada, Darla parece disfrutar de la inesperada reunión que se ha dado y se le nota la dicha en sus bellos ojos tan expresivos como su rostro.

 

--Hola, ¿Están disfrutando de la feria?--Saluda @@Nicole Evans Crowley la joven que menciona Feng, que es su hermana...

[Nicole Evans Crowley]

La bruja se alegro con la reacción de su hermana, desde hace algún tiempo las cosas habían ido mejorando entre ellas, cosa que la Crowley disfrutaba. Tomo asiento junto a Fen, dejando su plato sobre la mesa pero sin dejar de disfrutar las delicias culinarias que se distribuían en el. Antes de responder la pregunta de su hermana termino su primera empanada.

 

-Ni tan sorprendente, vine para checar el papeleo de la feria como parte de cooperación pero ya he terminado por eso aproveche para disfrutar de la comida y esta esta bastante bien, son empanadas y sopes- señalo el contenido de su plato con un dedo.

 

La chica de pelo azul que acompañaba a Fen le dio la bienvenida, a lo que ella agradeció con una sonrisa. Se tomo unos segundos para pensar cual bocadillo comería primero, se decidió por el sope, antes de darle una mordida respondió a lo que la peli azul proponía -Me pareció ver un puesto con golosinas mexicanas, he escuchado que sus dulces son buenos aunque algo picosos ¿Qué les parece?

 

Espero a que los presentes pensaran un poco si les gustaba la idea que habia dado, dio una mordida a su sope, disfrutando de su delicioso sabor. -Pues la verdad si la estoy disfrutando, Antoni, la comida es buena y hay muchas cosas que ver.

 

@ @ @

[Tauro M.]

Al parecer iban a volver al stand de comida mexicana y la verdad no le molestaba, de hecho había quedado encantadísima con las golosinas y se había quedado con ganas de más, por lo que la oji-azul estuvo de acuerdo con Nicole y se preparó para ir, pero cuando estuvo a punto de iniciar la caminata recordó que debía hacer algo. Antes Antoni le había dicho algo que la había dejado un tanto inquieta, por lo que se disculpó con los demás, pidiéndoles que por favor la esperaran y así pudo platicar un poco con el peli-verde.

 

-- ¿La ausencia de quién? -preguntó sin rodeos, procurando estar bien cerca del muchacho para que solo él la escuchara --Aquí estoy para lo que sea, puedes contar conmigo --Tauro no tenía ni la más mínima idea de lo que estaba pasando por la mente de él, ni mucho menos lo que estaba sufriendo su corazón, pero a juzgar por su mirada y su expresión, era capaz de deducir que había algo que no estaba bien y que estaba matándolo por dentro.

 

La empatía que estaba sintiendo Tauro se le hacía demasiado familiar, quizás porque ella también se había sentido así en algún momento de su vida, cuando el gran amor de su vida, Sophie, había desaparecido así sin más, sin dejar una nota, sin despedirse. El dolor que sintió fue tan grande que casi creyó que no lo iba a lograr, que era mejor sumirse en la depresión y odió a los humanos y sus sentimientos. En ese momento cometió lo que casi fue un suicidio, porque fue al inframundo donde se hizo enemiga de la mayoría de los demonios y cuando pudo escapar, por poco ni lo lograba.

 

Nadie merecía pasar por algo así solo, para ella era el peor de los castigos, ella que había físicamente sufrido en innumerables ocasiones a manos de torturadores, de personas que hicieron experimentos con ella de pequeña y ataques hacia su persona cuando era líder de la Marca Tenebrosa. Nada de eso se le pudo comparar a un dolor del corazón. Suspiró, elevando su mirada hacia Antoni, buscando conectar con la suya.

[Anthony R. Dracony M.]

Ryvak sintió un mareo ante las respuestas de Nicole...¿papeleo?....¿Cooperación Mágica?....era sorprendente...pero que lo comentará tan sencillamente le hizo recordar un viejo plan de solicitar un permiso a ese departamento respecto al nuevo local que debido a la declaración de guerra había dejado un tanto en el olvido...aunque no dijo nada en ese momento a la joven bruja, guardo en su mente aquel dato y si el tiempo lo permitía, en unos días la invitaría a su local para ponerle al tanto del plan que su amigo Ángel Crowley, tenía en mente.

 

La propuesta era ir nuevamente al stand mexicano, el ojimiel no negó, solo asintió a la joven, tras probar aquellos picosos dulces, definitivamente no era una mala idea, al parecer era lo que pensaba la mayoría pues empezaban a moverse para marchar juntos al stand, él fue uno de los que tardo en levantarse dudando si sus piernas tenían el poder de moverse...las sentía adormecidas. A su oído Tau le pregunto sobre la persona cuya ausencia le estaba teniendo en aquel estado melancólico, el peliverde le miro a los ojos...entonces se percató que nunca antes le compartió a Tau sobre ella...

 

--De Cindy....--Se sujeto al filo de la mesa, el solo mencionar el nombre de la castaña en voz alta le hizo sentirse en el interior de un vórtice...si se movía podía ser levantado sin control y perderse............habían contraído matrimonio a pesar de que él era menor de edad, pero debido a que ambos no tienen padres que lo pudieran evitar, se hicieron familia ante la vida...

 

 

Tau no dijo nada, ¿cómo podría? Ryvak sabía que aquello era desconocido para la ojiazul....para el peliverde solo existía la castaña, era su mundo....tal vez por eso se sentía caer en un abismo sin fondo...pero su siguiente frase de la joven @ fue como si le sujetara con una especie de lazo metálico:

 

--Aquí estoy para lo que sea, puedes contar conmigo.

 

Se aferro al lazo y mirando la a sus ojos azules, musito agradecido: --Gracias...