. Mansión Di Médici . (MM B: 113112)

[Blaise Zabini]

Solo una observacion mas minuciosa pudiera haber dado cuenta que ante las palabras de la chica presentandose cierto tono rojizo habia inundado mis orejas. Por suerte estaban ocultas a publico entre mi cabellera rubia. otra cosa en comun que tenia con la chica. Al parecer la Medici era mas que solicitada en cuando a tutorias se referia, y claro, ahora que estaba acompañado por alguien de mas o menos mi edad, pues seria mucho mas llevadera mi estadia aqui. Y lo mejor era una chica hermosa. Pero mejor no dejar que ese pensamiento me desviase del asunto. Ante el saludo de Luna me incline respetuosamente para tomarle la mano y besarla con delicadeza.

 

-Un placer conocerte Luna-dije cubriendo un leve rubor mis mejillas.

 

Mientras terminabamos las presentaciones el señor de la puerta se presento nos dejo el ofrecimiento de seguirlo al salon principal. No tuve peros en eso aunque me toco seguirlos y ver como le extendia la mano para que la chica se apoyase en el. No era de envidiarle nada a nadie pero sin duda algo me pellisco la panza. Los segui y despues de unos pasos y cruzar una puerta llegabamos a un finamente amueblado salon. Como ya habia comprobado Lucrezia tenia buen gusto. Sin mas me acerque un poco hasta ponerme al lado de Luna cuando nos detuvimos y para evitar que lex me oyera le susurre al oido:

 

-Conoces a Lucrezia??-dije una vez mas apenado- sabes como es -me detuve- de caracter???

 

Si, la habia visto en la hosteria donde le entregue la carta y la verdad me resulto impresionante, pero no era bueno juzgar por la portada el libro, que tal si era una explotadora de sus amadrinados (aquellos que tutorea.)

 

@@Lex Grindelwald@

[Matthew Black Triviani]

Matthew, en El Caldero Chorreante.

 

 

Dicen que la vida pesa, que el sueño por las noches se pierde en un laberinto y durante su transcurso el cansancio persigue la luz del sol... La situación parece simplemente no ayudar, de vez en cuando uno se cansa de tantas emociones... O decepciones, Matthew no sabia diferenciar entre algo tan burdo, optaba por alejarse de todo y disfrutar la soledad que el tiempo le ofrecía, aunque después le medio pesara. A final de cuentas, no era la primera vez que abandonaba una situación familiar, estaba acostumbrado, a huir de ellas.

Durante semanas, Matthew se había preguntado cuando seria la ocasión en la que un Triviani sugiriese que su sitio no era aquel, que tenia otro hogar y que podía largarse. La respuesta por fin llego: poco más de dos meses. Cuando tenia la esperanza de haber encajado en aquel lugar, alguien le decía que no. Fue bonito mientras duró. Aquellas frase tan simple le había dolido más de lo que admitiría nunca a nadie. Tal vez tenía razón. Tal vez debería volver a manejar los asuntos de su familia, y dejar de frecuentar con aquellos; por el simple hecho de que pronto desaparecerían. Siempre lo hacían.

No supo que decir. Capaz había puesto un tono extraño sin percatarse, pero de hecho le había hablado amistosamente. ¿Por qué cuando intentaba ser amigable, lo tomaban como un ataque? ¿Qué tipo de tono de voz tenía? quizás serlo, no era su fuerte. Desvió su cabeza sin siquiera esperar una respuesta, pestañeando más rápido de lo normal mientras intentaba contenerse. Años y años practicando una mejor actitud ante la gente, una importante persona como él siempre le había dicho que alguna vez, por conveniencia, tenia que cambiar su manera de ser frente a otras personas. Y lo intentaba con todas sus ganas, pero sabia bien en el fondo que aunque se fuerce un cambio, siempre quedara la esencia de quien se es.

Luego de meditarlo, saco su varita y apunto al hombre que se ubicaba su derecha, sus ojos se iluminaron con aquel destello verde que Frida despidió, su lúgubre sonrisa se figuro y a quemarropa, lo asesino. Sacio su ansiedad, o su cavilación... Se alejo a paso lento hacia la puerta rechinante, tomo su capa y cubrió su rostro con la capucha, partió hacia los terrenos de una vieja familia amiga... Los Médeci.

Editado 22 de Enero del 2020 por Matthew Triviani

[Ada Camille Dumbledore]

Luna Cristal Gryffindor Dumbledore

 

 

La situación que me había llevado hasta esa mansión no era de mí agrado, mi madre y padre se habían confabulado para que aprendiera del mundo mágico y no era de mi agrado. Estaba entonces en aquella casa de una persona que no conocía y que mi padre había ordenado que viviera con ella, con meretriz, era indignante, lo bueno es que estaría con mi hermano Luka.

 

El hombre que estaba en la puerta se dirigió hacia Lucrezia como su prima, así que seguro vivía hay con ella. Me ofreció el brazo para acompañarme al salón, susurre un "gracias" e hice caso omiso a mi molestia de estar cerca de la gente, lo tomé firme y camine guiada de su brazo hasta un salón amplio. Mi sorpresa fue al ver una gran pintura de mi padre hay, sus ojos verdes intensos inconfundibles y esa sonrisa juvenil de los retraros con mi madre.

 

Salí de mis pensamientos cuando Blaise me habló, casi tuve que luchar por contener una risa burlona con lo que me dijo.

 

- No lo sé Blaise... No la conozco

 

Volví a concentrarme en el cuadro de mi padre, era lógico que era el señor de la casa.

 

@@Blaise Zabini @@Lex Grindelwald @@Lucrezia Di Medici Di Médici

[Blaise Zabini]

Con mis palabras al parecer interrumpí a la chica que miraba detenidamente un cuadro. Otro rubio de ojos verdes, pensé, por las dimensiones de cuadro tal vez el patriarca. La verdad es que con Lucrezia de regente toda la prole sin duda heredaría ese rasgo físico. Claro ante la respuesta mi rostro revelo la incredulidad por lo que escuchaba. En serio no conocía a Lucrezia? Pero si se parecían un montón. Habia oído que venia como yo de ¨tutoreada¨ pero supuese que tendría lazos consanguineos. Una vez mas, no juzgar al libro por la portada. Molesta costumbre que ya me llevaba a dar golpes en pleno rostro ante la realidad.

 

-Lo siento, no debí asumir eso

 

Ahora solo quedaba esperar en este silencio incomodo.

 

@@@Lex Grindelwald@@Lucrezia Di Medici

[Ada Camille Dumbledore]

Luna Cristal Gryffindor Dumbledore

 

Sonreí al ver los rasgos de mi padre tan juveniles y recordé la foto que mi madre tenía en su mesa de noche, allí estaban ella y mi padre felices sonriéndose el uno al otro en los jardines sumaes, mientras se tomaban de la mano y se abrazaban, ella se veía muy joven al igual que el, pero los ojos de mi padre eran muy alegres y brillantes, ese rasgo no cambiaba. Solté el brazo de Lex con una sonrisa.

 

-Padre...

 

Susurre sin poder evitarlo, quería saber de él, de su vida de porque me había dejado sola con mi madre. Levante la cabeza y me recompuse,

 

-¿Blaise de donde eres?

 

Estaba ya aburrida de no poder ni tomar asiento, así que preferí socializar

[Blaise Zabini]

Ya había detallado los cuadros por lo que solo quedaba mirar la decoración y después el fuego crepitar en la chimenea. De alguna forma siempre había sentido como mía la afinidad por el fuego. Es que tenia algo envolvente, tanta facilidad para hacer el daño y tanto control para hacer el bien. Un elemento ambivalente que no se pudiera decir que en si generase vida, mas bien lo opuesto. De hecho algo que me encantaba de hacer pociones era ver el fuego en diferentes intensidades calentando el cardero, haciendo hervir la preparación, lentamente.

 

-Disculpa???-me gire a ver de nuevo a la hermosa chica. Tanto mirar el fuego y acababa divagando.-Este, soy de Milán. Italia. Tal vez sea por compartir nacionalidad que mi padre y la Medici se conocen.

 

Una suposición fundada en unas creencias personales y es esa carta que me había dado para que le entregase. Quien sabe si en mi estancia aquí podría revelar el secreto detrás de esa carta.

 

-Y tu, eres inglesa??

 

@

[Ada Camille Dumbledore]

Luna Cristal Gryffindor Dumbledore

 

@@Blaise Zabini me había contado de su proveniencia y sonreí, solo había estado una vez en Milán hacia mucho tiempo con mi madre.

 

-la recuerdo muy poco, pero si recuerdo que era hermosa

 

Comenté de manera tranquila ñ, con mi mamá habíamos hecho muchos viajes, ella siempre me llevaba junto a ella hasta que nacieron mis hermanos Luka y Reiven, después de eso se radico aquí y luego en París. Volví de mis ensoñaciones.

 

Nací aquí en Inglaterra, pero la mayor parte de mi vida he estado en París, mi madre se radico allí y hace poco ha venido a vivir de vuelta a Inglaterra y pues mi padre[/i]- Indique señalando la pintura -... Quiere que Lucrezia me eduque para ser una bruja, no se mucho de magia... No ha sido muy cercana para mi y el creyó que era lo mas adecuado para mi educación

 

Solté casi resignada a mi destino en aquel lugar, al menos estaría con mi hermano.

 

- ¿Tu también vienes a vivir con ella?

 

Pregunte curiosa, al menos habría más gente es esa gran casa.

[Lex Grindelwald]

La niña tomo mi brazo, el otro chico nos siguio. Caminamos hasta el Salón principal, el cuadro de hay les gusto, ella dijo que ese era su padre. No lo conocía, tampoco sabia que Lucrezia estuviera casada. Era parte de su vida pero le preguntaría teniendo oportunidad a mi prima.

 

Recordé que mi prima tiempo antes había cruzado hacia el aviario, era mi deber estar pendiente de la casa, le ayudaría a mi prima ella era excelente anfitriona y seguiría su ejemplo. - Los llevare con ella, creo conocer su ubicación en la Mansión, siganme

 

Le ofrecí el brazo y cuando lo tomo camine afuera del edificio, me asegure que el joven Blaise también lo hiciera. Fui por los terrenos hasta el lugar donde estaban las aves, el aviario y allí vi a la bella Rubia.

 

-prima -la llame - estos chicos vienen a verte

 

Tome la mano de la chica llamada Luna la bese y le indique que diera el paso adelante hacia la aristócrata, se parecían las dos ojos azules rubias porte y una belleza singular

 

@ @@Lucrezia Di Medici Di Médici @@Blaise Zabini

[Ada Camille Dumbledore]

Luna Cristal Gryffindor Dumbledore

 

Blaise de veía una persona amable, Lex por el contrario era serio, distante, fino, elegante, de esas personas que son criadas en altas esferas y cree que los demás están bajo su nivel.

 

Ofreció llevarnos hasta donde Lucrezia y accedí a seguirlo, tome de nuevo su brazo y le regale una sonrisa a Blaise, él se veía un chico amable. Camine, no sin antes mirar atrás para ver el cuadro de mi padre.

 

Los jardines estaban llenos de una ligera nevada, con mi mano libre acaricie por un momento a mi elfina que habia estado de pie a mi lado todo este tiempo. Era lo más parecido a afecto que tenía siempre.

 

Suspiré viendo lo amplia que ers la parte posterior de la propiedad había en ella una sensación de libertad estando allí. Lex anunció nuestra llegada, solo podía verla de espaldas junto a otra dama de cabello violetas, al parecer el tono de cabello de mamá sí era común aquí. Lucrezia tenía un vestido largo, clásico y ajustado a su figura, su cabello Rubio caía por su espalda y brillaba a la luz, sentí el impulso que Lex me daba para que me dirigiera a ella, mire a Blaise y después a Lex.

 

-Buenas tardes Señora Lucrezia, Soy Luna Cristal Gryffindor Dumbledore, la hija de Thiago Gryffindor y Selene Ariane Dumbledore...

 

Hice una pausa para tomar más valor y controlar el tono de mi voz, mi mirada estaba fija en su rostro el que veía de perfil.

 

-Vine por orden de mi padre para que usted me instruya en magia

 

Pase saliva y espere que ella se diera la vuelta para verme, mis ojos azules fulguraban por mi confusión, tenía las manos empuñadas a lo largo de mi cuerpo y mi postura era algo rígida, pero trataba de mantener la calma

 

@@Lucrezia Di Medici Di Médici @@Lex Grindelwald @@Blaise Zabini

Editado 22 de Enero del 2020 por Ariane Dumbledore

[Blaise Zabini]

El comentario de la bella rubia me llego. Le tenia gran estima a mi ciudad y a toda su historia, aunque bueno, nuestra familia había incidido poderosamente en ella, no solo desde el punto de vista mágico. Claro Luna también había tenido mucha suerte, asentarse en París, la ciudad del amor, con ese río Sena atravesando la ciudad y con una historia singular, pues era todo un privilegio. Por otro lado, tristemente su historia era igual que la mia en cuanto a aprendizaje. Mi padre sin consultármelo me había regresado a Inglaterra para continuar mis estudio bajo la supervisor de dos mujeres, una de las cuales estaba por ver.

 

-Pues si, me quedare aunque admito que la compañía mejora por momentos -evidentemente mis palabras se referían a ella, aunque a saber de donde había salido ese impulso, que al darme cuenta regreso a rojo tomate mis orejas.

 

Por suerte apareció Lex que nos indico donde estaba Lucrezia y nos dirigió a ese lugar. Para mi ligera frustración Luna iba una vez mas de su mano. Rara combinación para un joven ya bastante maduro, pero tampoco yo ofrecía mucho, era un enclenque mediano nada que hacer contra sus casi 2 metros. De todas formas, respira, recuerda a tu padre, todo se basa en la confianza. Así, salimos a los jardines que tenia una ligera capa de nieve sobre el pasto, recorrimos el trayecto que nos separaba del aviario. Ya en el lugar Lex nos introdujo y Luna fue la primera en presentarse, solo faltaba yo.

 

-Ya nos habíamos conocido hoy -hice una suave y ligera reverencia- Blaise Zabini a su disposicion -y ya que estaba algo inclinado me gire y le dedique un guiño a Luna.

 

@@@Lex Grindelwald@@Lucrezia Di Medici