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La Colonia Perdida


Syrius McGonagall
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Matt Ironwood.

 

 

 

Oficina del FBI: División de Asuntos Mágicos, Oahu Hawaii.

 

 

-¿No esta prohibido por el MACUSA perturbar este lugar? – preguntó su amigo Alan levantando la vista de el informe para observar a Eric Jacksonpoint el director de la Oficina del FBI en Hawaii y el responsable de haberlos convocado en su oficina privada aquella mañana.

 

-Para nada, esa mansión incluso esta en venta para la población nomaj, o bueno lo estaba hasta que compraron la finca para rodar esta película – masculló entre dientes el mago sentado tras el escritorio de roble pulido.

 

-Pero hubieron homicidios en esa casa, matanzas hasta diría yo – inquirió molesto Matt apoyando las manos en el respaldo de su silla, la sorpresa generada por aquella misión le impedía poder sentirse cómodo estando sentando, necesitaba estar de pie.

 

-Si, todos los anteriores dueños de la finca en Roanoke han abandonando pavoridos o muerto dentro de esas cuatro paredes en menos de un año de haber vivir allí, nomajs y magos por igual, es una casa antigua maldita desde su creación a mediados de los 1700 –

 

-Pero cualquier intento de contactar con los espíritus que habitan allí o en los bosques de alrededor ha sido infructuoso en el mejor de los casos y violento en los peores, esa maldita casa fue siempre un dolor de cabeza para el MACUSA y como buen dolor persistente que es en ocasiones la mejor solución es pretender que no esta allí – dio por finaliza la discusión el mago de mayor edad de los tres presentes.

 

-Según el informe la casa ha llevado abandonada desde finales de los 80s, cuando la familia nomaj que la ocupaba encontró el cadáver del padre hecho un alfiletero en la entrada… 15 flechas… - Alan resumió lo que acababa de leer.

 

-¿Qué explicación dio la policía no mágica? – el Ironwood alzó las cejas mientras observaba a su jefe.

 

-No dio ninguna, el caso quedo sin resolver…hasta los nomajs saben que hay fantasmas pero sus autoridades niegan poner en un informe policial “asesinado por un espíritu” – Eric miró su reloj de muñeca – ya va siendo hora que le envié la confirmación al Congreso –

 

-¿Pero por que debemos ir nosotros? – Alan un mago rubio y compañero laboral de Matt desde que este entró al cuerpo del FBI apoyó el informe que sostenía en sus manos sobre el escritorio del director - ¿Acaso este cineasta no es capaz de contratar seguridad privada? Con la fortuna que cuesta la ***ida mansión no creo que sea un hombre que este corto de dinero –

 

-Solicitó seguridad al MACUSA…. – comenzó diciendo el mago canoso pero fue rápidamente interrumpido por el agente Bay.

 

-¿Y no hay agentes disponibles en Carolina del Norte? – Matt tuvo que contener la carcajada, Alan tenía razón toda aquella situación le resultaba ridícula pero más ridículo era que el MACUSA decidiera que la seguridad fuera aportada por dos miembros del FBI que se encontraban a miles de kilómetros del lugar teniendo la oficina de Charlotte en el estado.

 

-Fueron expresamente pedidos por la producción – concluyó el mago con los ojos entrecerrados.

 

-¿Nosotros? – Matt no se contuvo, aquello si que lo desorientó totalmente – ¿Cómo nos conocen? –

 

-Fueron pedidos por la estrella de la película, o más bien tú Agente Ironwood – una sonrisa socarrona se dibujo en el rostro del director – Angeline Opelka –

 

 

-¿La actriz que sale cada semana en Corazón de Bruja? ¿La chica fiestera de Los Ángeles? – dijo casi riendo su amigo mientras se giraba hacia el -¿De donde la conoces? –

 

Matt no se podía sentir más incómodo, hacia años que dejo de tener contacto con aquella mujer y ahora ella lo demandaba, y Angeline siempre obtenía lo que quería era rica, talentosa, famosa, muy bella pero sobre todo muy audaz e ingeniosa y no estaba acostumbrada a que se le negaran las cosas.

 

-De Ilvermorny, fuimos juntos, ella entró un año después de mí – uno nunca salía ganando estando cerca de aquella mujer (y Matt lo tenía muy en claro) y posiblemente fuera aquello lo que mas miedo le daba de toda la misión.

 

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El rubio se sujetaba a su amigo Asrael, no deseaba demostrar su miedo a la forma alocada de conducir del pelinegro, pero los arrancones le hacen sentir que puede salir del asiento de la motocicleta mágica-- De verdad que no entiendo...puedes ir a tu convención de medimagos tu solo Asrael, no me necesitas..--Menciona el ojiazul, más el aprendiz de medimago solo vuelve a repetir el mismo argumento -- Pero no quiero pasear solo, además tú Abizaid, no tienes nada que hacer, deberías ser mejor amigo y apoyarme en esto, anda! te vas a divertir, ya lo creo que si!--Abizaid Lerma no cree las palabras de su amigo, pero en parte tiene razón, no hay algo que verdaderamente le importe al rubio, pero enfadado le responde al ojinegro--¡Estás loco Asrael! ¡Eres un hombre muy loco tú!---esconde la cara detrás de la espalda del mago conductor y cierra los ojos para no ver como se acerca a gran velocidad junto a un risco...está pensando que el ojinegro quiere matarlos...al menos está seguro que él posiblemente morirá del susto...

 

Después de varias horas de vuelo, al fin el ojinegro desciende cerca de un hotel, el hechizo a servido bien para no ser sorprendidos por los muggles y acelera sobre el asfalto para dar una vuelta por el lugar, Abizaid no entiende a su amigo...--Asrael...estás loco! habías podido estacionarte justo en el aparcamiento del hotel ¿que demonios haces dando vueltas?--Menciona enojado el joven rubio, pero el pelinegro mira atentamente las calles, cuidando de fijarse en las edificaciones, hasta que divisa una joven que lleva una pañoleta naranja contrastando con su vestido morado, él saca de su chamarra negra su bufanda roja para que el aire la haga ondear y ambos levantan la mano en un saludo, igual que acordaron el encuentro días antes, los jóvenes se llaman a voces, Asrael se detiene y baja de la motocicleta, Abizaid extrañado, también desciende y acompaña a su amigo, los jovenes ríen, se abrazan como grandes amigos y luego Asrael le presenta con la chica:

 

--Mandy, he aquí como te lo prometí, él es mi amigo Abizaid, tal como te dije ¡a que si, verdad!, será el mejor! --Le asegura a la chica que mira al rubio con gran interés-- ¡Ay Asrael! ¡es perfecto! ¡tiene el carisma! buen porte, fino rostro, mirar cándido...no creo que lo rechacen...--Responde la joven haciendo mohínes con los labios pintados de color cereza...Abizaid entiende menos la conversación y exasperado habla con los dos muchachos-- Ey! un momento, ¿de que está hablando ella?¿En que lío me estás metiendo Asrael? ¿rechazarme para que? ¿que es lo que han planeado ustedes dos?--Mira entre enojado y serio a ambos jóvenes y la chica le pregunta asombrada: --¿No sabias que te ha traído tu amigo a un casting? va a filmarse una gran película, tu amigo y yo, estamos seguros que puedes ser seleccionado como parte del elenco.

 

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Rachel Grace — Actriz

 

Aunque esta era una grandiosa oportunidad para mí, no estaba del todo segura de la locación que los directores y productores habían decidido utilizar esta vez. Para ellos era sencillamente una casa con mitos urbanos pululando alrededor, una construcción de más de trescientos años que merecía ser venerada como la obra de arte que quiso ser. Pero a mí, a mi esos mitos claro que me importaban, habían compartido mis clases en Ilvermorny más de una vez, las fogatas se se hacían eternas cada que algún alumno con aires de superioridad se jactaba de conocer los terrible secretos de esas paredes, nadie parecía acordar que hablaban de muertes reales. Y yo entendía que los nomajs no pudieran descubrir nada, pero que el mismísimo MACUSA se queda en la incógnita, era algo que la hacía temblar de pies a cabeza, casi nada se le escapaba al gobierno mágico americano.

 

Estaba empacando todo lo que necesitaría para aquel mes de grabación, en mi maleta adapté un pequeño bolsilo con fondo de piel de moke, que me servía para acomodar con menor terror los zapatos, la infinidad de zapatillas y carteras que necesitaba, por si el directos no enviaba directamente a promocionar algo de la película. No había conseguido el papel central, pero los rumores decían que Angelina Opelka tenía el ego más grande Hollywood, y que poco a poco se acortaba la lista de personas dispuestas a tolerarle los caprichos, si es que a la actriz estrella se le apagaba la luz, estaría yo ahí, dispuesta a colocarme frente a los reflectores ante la primera llamada.

 

Caso contrario, igual tenía un papel lo suficientemente grande en la película como para interesar a más productores para nuevas películas. Llevab más de dos años sobreviviendo con insignificancias o apariciones incluso sin guión, ya estaba cansada.

 

¿Tienes lista la documentación? —preguntó a su asistente antes de cerrar la maleta— Espero que si, no firmaré una sóla toma si cada uno de mis huesos no está asegurado.

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Angeline Opelka

 

 

El ferrari rojo último modelo levantaba una nube de polvo a su paso, los neumáticos del costoso auto lanzaban piedrecitas al lado del camino sin asfaltar, la mujer al volante tenía la mirada fija en el camino. El ferrari atravesó la verja de la entrada, dándole el tiempo justo al empleado de quitarse del camino. El carro atravesó en cuestión de segundos la distancia que separaba la verja de entrada con la gran mansión al final del camino. Con una maniobra rápida giro el volante, cambio la palanca de velocidades y estaciono el flamante auto último modelo, no importaba que estuviera mal estacionada o que ese ni siquiera fuera lugar para estacionar.

 

La puerta del automóvil se abrió hacia arriba, un zapato de tacón rojo caro y elegante toco el camino de tierra, en segundos un par le hizo compañía, de entre la nube de polvo que aún se disipaba en el aire se materializo una delgada, alta y hermosa mujer, de piel color caramelo, con una cabellera larga color chocolate y unos labios carnosos resaltados con un labial de suave color rosado.

 

La mujer echo una mirada al lugar, inspeccionando todo por detrás de las gafas oscuras. Con un movimiento delicado, para evitar dañar su manicura, se quito los lentes CK dejando a la vista unos ojos cafés grandes y profundos, enmarcados con unas largas pestañas y una cejas perfectamente delineadas.

 

Un joven salió corriendo de la mansión, saltando de dos en dos los escalones de entrada, perdiendo un poco el equilibro en el último tramo, se acercó hasta la bella mujer quedando mudo por la belleza de esta para después comenzar a hablar de manera apresura y torpe -Señorita Opelka- balbuceo el joven -La esperábamos dentro de una semana...- su nerviosismo era evidente.

 

-¿Qué quieres decir con eso, cariño? ¿Que debo de retirarme? o ¿Qué mi habitación no esta lista aún?- su tono era suave, sedoso, seductor pero detrás de aquellas simples palabras se podía sentir la amenaza implícita.

 

El joven asistente palideció -Na..Nada d...de eso Señorita Opelka, todo esta...como usted lo ordeno- tartamudeo el joven en respuesta.

 

-¡Que bien! Justo lo que deseaba, el trayecto fue muy largo- con una sonrisa, la estrella del cine tomo una pequeña bolsa de la parte trasera del automóvil y camino hacia la mansión -Llévame a mi habitación, querido.- el joven corrió de nuevo para poder guiar a la mujer.

 

Durante un mes aquella mansión sería su hogar, que cosas tenía que sufrir y soportar para poder realizar su trabajo, solo esperaba que todas sus diez maletas con pertenencias hubieran llegado bien y que todo estuviera listo para su baño de la tarde, no soportaría la incompetencia.

 

Aquellos eran los pensamientos de la mujer mientras ingresaba a la mansión en donde rodaría su nueva película.

Editado por Nicole Evans Crowley

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Sébastien Lindley

El lamborguini aventador no lo manejaba él pero el auto iba a excesiva velocidad, como era de su agrado. Había tenido que confundir a un inspector muggle y por eso estaba de mal humor. Hablaba por el teléfono, irreflexivo a la mirada entre divertida y exasperada del conductor, que estaba ganando como conductor con él una cantidad decente de oro luego de retirarse de las competiciones en Le Mans.

 

Se las arregla para conducir el auto sin chocar en medio de la noche gracias a esa experiencia, a la velocidad demencial con la que avanzan. Mientras tanto, Sébastien lo daba todo en esa conversación por el teléfono.

 

—Si, ya te digo Oliver, la muy est****a llamó al MACUSA —su tono reprobatorio era de temer. Denotaba que era el tipo de persona que echaba a un lado cualquier cosa que se interpusiera en su camino—. Como si necesitásemos más vigilancia de parte de esos entrometidos —pareció atender un poco a las palabras del otro lado del teléfono por un instante, antes de continuar—. No, no, no podemos usar a otra, hemos realizado los primeros videos promocionales y esa descerebrada ya ha llamado la atención del público —volvió a callar al parecer distraído por la información proveniente de la otra línea—. Sí, sí, yo también he leído sobre la repercusión de su fama: ocho sobre diez, es muy buena para desestimarla.

 

Las negociaciones con el mánager de la mujer habían sido arduas pero al final se habían decidido por un precio irrisorio. La realidad, era que la mujer lo necesitaba tanto como él a ella, solo que no lo sabía. Su fama peligraba debido a sus actitudes de diva; a él no le preocupaba procurarle atenciones y ayudantes, al fin y al cabo le salía más barato que pagarle un sueldo más elevado al mes, especialmente porque la atenderían los pasantes. El problema era si generaba inconvenientes con el rodaje y el retraso les causaba pérdidas.

 

La disminución de la velocidad y el frenado en seco le hicieron darse cuenta que ya no se trataba de un ameno paseo con el viento en la cara, habían llegado. Levantó los lentes oscuros que había estado llevando y los colgó de su pecho. El hombre en el volante le hizo una seña pero Sébastien la desestimó. Sí, no lo necesitaría más y podía retirarse. No había allí más que el aire fresco de la noche y sin embargo, Sébastien se pasó una mano por el cabello rubio con hebras de plata con extrañeza: había algo que no encajaba y no era capaz de sacar en claro el qué. Las luces de la casa iluminaban apenas el suficiente espacio allí afuera como para que él se decidiera a entrar rápido. No le gustaban esos sitios apartados de noche: mosquitos o criaturas mágicas problemáticas.

 

Dentro, a diferencia de lo que había esperado, las cosas eran un hervidero de actividad. Así que detuvo a una de las muchachas que se apresuraba con un grupo de papeles por el recibidor, haciendo que por poco los desparramara por el piso.

 

—¿Qué sucede?

 

La muchacha, nerviosa al ver a quién encaraba, respondió con voz aguda:

 

—Es la señorita Opelka, llegó antes, ha solicitado varias cosas...

 

Sébastien maldijo en voz baja luego de dejar ir a la pasante pero decidió que no pensaba ocupar sus pensamientos en esa niña esa noche. A la luz del día, probablemente se sentiría con mejores ánimos de lidiar con ella sin insultara y mientras tanto, otros podían encargarse del engorro.

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Demisit lacrimas dulcique adfatus amore est 

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Sherlock Holmes encubierto como uno de los entrometidos...(?)

 

El mago habia hecho un largo camino hasta ese sitio... Roanoke... habia vuelto... no era la primera vez que estaba ahi la vez anterior casi no la contaba... sus compañeros tampoco... los gritos... la sangre... todo!!! y ahora la pesadilla habia vuelto... los rumores eran ciertos... el mago oculto detras de ese arbol lo estaba viendo con sus propios ojos... la colonia perdida de roanoke habia vuelto... pero porque? acaso no leian los periodicos... las noticias!?...

 

-- Otra pelicula...--

 

por lo que se sabia la historia nos lleva a los primeros asentamientos europeos en Norteamérica y a una colonia inglesa fundada en la isla de Roanoke, en Virginia, un lugar donde el agua dulce era difícil de conseguir, y donde los colonos vivían rodeados de un entorno natural completamente nuevo para ellos y dos tribus indígenas con las que las relaciones tampoco eran sencillas. Aquellas primeras colonias tenían una alta tasa de fracasos, pero ninguna desapareció sin dejar rastro en 1590. O, siendo más concretos, ninguna desapareció dejando sólo tras de sí una palabra grabada en un poste: "Croatoan".

 

--Siempre se creyó que se habían ido en busca de una mejor vida y solo habían dejado una indicación de donde estaban... pero nunca encontraron un lugar asi y aun apesar del tiempo cosas raras iban pasando con ese sitio cada determinado tiempo... la colonia tenia hambre y el buffet ya estaba servido.--

 

Dicho eso el mago haciendo uso de sus habilidades de vestimenta el mago rapidamente se hizo pasar como uno de los ayudantes-esclavos de esa producción, hacia tiempo sus fuentes le habían indicado del regreso de ese sitio y no iba a dejar que la historia se volviera a repetir...

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Matt Ironwood.

 

 

Lugar de la filmación, cerca de Roanoke, Carolina del Norte

 

La silueta de la imponente casona de campo apareció tras la última colina del agreste camino rural que la Ford Ranger alquilada y conducida por el agente especial Ironwood tuvo que forzosamente atravesar. El trayecto no había sido fácil, una vez se tomaba aquel pequeño camino tierra a una milla al oeste del pueblo de Roanoke uno se adentraba en un terreno completamente agreste, pocas eran las granjas que se apiñaban en torno al camino aquel lugar era dominado por bosques de pinos, sucesiones interminables de colinas vírgenes y pequeñas cañadas de aguas cristalinas que corrían veloces hacia el este.

 

-No entiendo como alguien querría vivir en un lugar así, tan apartado de todo – Alan a su derecha comentó mientras observaba la imponente construcción de madera alzarse al final del camino.

 

- Entiendo tu punto de vista de Nueva Jersey – bromeó Matt mientras atravesaba con cuidado los lindes del terreno y buscaba un espacio libre donde detenerse, el lugar era un hervidero de gente y equipamiento en constante movimiento, parecía ser que aquella iba a ser una gran producción – Lo que no puedo entender es porque alguien querría vivir en un edificio como este… apenas hemos llegado y ya me quiero volver… no me gusta este aire – al dar por fin con un lugar apagó el motor y bajó de la camioneta.

 

Apenas sintió el sonido de la puerta al cerrarse a su espalda cuando ya alguien cruzaba el enorme jardín delantero directo hacia ellos. Era un hombre delgado y de cabello negro que se presentó como John Silver - ¿Ustedes deben ser los agentes del FBI no es así? –

 

-Si, Agente Especial Ironwood y el es el Agente Especial Bay – ambos magos estrecharon la mano del hombre mientras este los invitaba a seguirlo para encontrarse con el responsable de toda aquella producción, el famoso cineasta Sébastien Lindley.

 

El sol del mediodía comenzaba a pegar con fuerza pero al llegar a la enorme sombra que proyectaba la casona uno sentía un frescor poco natural, otra mala sensación que recorrió la espalda al castaño y le hizo preguntarse si había hecho lo correcto al venir hasta aquel maldito lugar.

 

John los condujo hacia una elegante mesa de madera junto a unas matas de bonitas flores silvestres, sobre la misma una jarra de agua con hielo y tres largos vasos de vidrio aguardaban por tres invitados – Tomen asiento iré por el señor Lindley enseguida – se despidió el nerviosos sujeto que desapareció al atravesar una pequeña puerta lateral de la enorme casona.

 

-Que sanos – sonrió Alan mientras se apresuraba a servir los tres vasos con el frío liquido.

 

El Ironwood estaba tan sediento como para preocuparse que era lo que les ofrecían y dio un largo trago a la refrescante bebida – Por lo menos tenemos una vista privilegiada para disfrutar de toda la fauna farandulera de Hollywood – bromeo el hawaiiano.

 

-Quizás hasta podamos conseguir algunos autógrafos – acompañó el chiste su amigo.

 

Mientras aguardaban Matt se dedicó a pasear la vista por el hervidero de movimiento que era el jardín delantero, donde cámaras, técnicos, iluminadores, sonidistas, corrían de un lado al otro ocupándose de tener todo listo para cuando se comenzaran con las grabaciones.

 

Pero inconscientemente sabía que era lo que estaba buscando y lo encontró… detrás de una bruja con pañoleta naranja y vestido morado seguida por dos magos la vio. El corazón del mago dio un vuelco al verla después de tantos años y una lluvia de tanto malos como buenos recuerdos acudieron a la mente del incómodo mago.

 

¿Por qué después de tanto tiempo ella pidió por el? Creía que ya ni lo recordaba… ¿Debería acercarse para averiguarlo? Angeline no estaba mirando en su dirección, estaba enfrascada en una intensa conversación con otra bruja que el castaño no pudo reconocer.

 

-¿Te encuentras bien? – La voz de Alan lo sacó de sus tribulaciones – Si… - sacudió la cabeza el castaño.

 

-Tarde o temprano tendrás que hablar con ella…después de todo es la responsable de que nosotros estemos aquí.-

 

-No nos hemos hablado desde el colegio – reconoció Matt – pensé que todo había quedado zanjado –

 

 

@ @@Nicole Evans Crowley @ @

 

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Abizaid Quijano

 

Muy serio, Abizatd fulminó con su mirada azul intensa a su amigo que no dejaba de sonreír...Asrael conoce bastante bien al rubio, puede estar muy enfadado pero ni ese sentir hace que su comportamiento lo transforme en un energúmeno, Su amigo Abizaid lo tomo por el brazo con fuera a la altura del codo, dirigió una sonrisa leve a la joven:

 

-Disculpános unos minutos por favor-- Después arrastro al pelinegro hacia la esquina de la calle a un metro y medio de la joven que los miraba con curiosidad, con voz baja pero enfadada, le reclamó a Asrael que lo inmiscuyera en aquella actividad -- ¡Pero que demonios te pasa Asrael! ¿Cómo se te ocurre semejante tontería? ¡Yo no soy actor! ¿Está es una de tus bromas?--Le mira conteniendo las ganas de apretar su cuello con sus manos...como sea una de sus "tomadas de pelo"...

 

-- Calma! ¿crees que no me preocupa ver lo insatisfecho que te sientes? Sabes disimular muy bien amigo, pero sé que te desespera no encontrar una profesión como la tenemos Ángela, Alejandro y yo...pero deberías probar actuar, pienso que se te daría natural, tienes las cualidades Abizaid, además de tener la apariencia de un actor, ¿no lo creían Angy y Lucila? ¿porque no lo haces realidad? si yo tuviera la mitad de galanura que posees tú, lo haría, intenta al menos, ya entonces puedes restregarme en la cara si no obtienes nada bueno de esto, ¿qué puedes perder?--Terminó de argumentar el ojinegro mirándolo fijamente, Abizaid no supo que responder, aquella mirada de su amigo es distinta a cuantas le conoce...es extraño que el pelinegro hable seriamente, pero no solo eso, también se adivina que habla con sinceridad...su amigo Asrael está preocupado por él...por como se siente al compararse con ellos... Abizaid no se los había dicho porque piensa que no es de amigos sentir celos de ellos, pero lo está, está celoso de que sus amigos sean personas que saben lo que les apasiona y se dediquen a ello y él...¿qué es él?...baja la cabeza...ese vacío que tiene en su vida le deprime...levanta su rostro, casi sale de sus labios aquella pregunta "¿tú crees que pueda?" pero no hace falta...la mirada de su amigo le inyecta confianza y le hace sonreír.

 

Asrael le coloca su mano sobre el hombro, aguarda unos segundos por si su rubio amigo quiere decir algo, entonces le abraza y dice con tono festivo:

--venga un abrazo, cuando seas famoso, seguro que te da amnesia y no quieras relatar que nos conocimos en las calles de Viena...

 

--¿A no? esa parte es de la que me ufano de que fue lo más afortunado en mi vida...a bueno, vamos pues, a ver que sale de todo esto.

 

Los dos amigos se reúnen con Mandy y le informan que Abizaid realizará el casting, a lo cual la joven se emociona, les da una nota con la ubicación de la locación de filmación y se despide, solo tendrán media hora para luego verse nuevamente en la mansión.

 

 

&&&&&&&&&&&&&&&

 

En la mansión

 

 

Los dos amigos se alegraron de contar con la motocicleta mágica, fue más veloz y cómodo llegar hasta la mansión, lo retirado que se encuentra del pueblo es en parte algo que les extraña, pero Mandy les asegura que ese detalle evitará que halla gente ajena que solo aparezca a fisgonear durante la filmación, Abizaid nota que hay mucha gente, antes no había pensado en que se requiriera tanto personal para rodar una película...pero no dice nada, camina sin prestar demasiada atención, aunque si mira con el rabillo del ojo a los iluminadores y técnicos, pero no se preocupará demasiado que sea lo que se ocupen aquellos, trata de enfocarse en que le pedirán a él que se ocupe, así que sigue a Mandy, la que por ahora es su guía en esta nueva faceta que está tomando..

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Sam - Propietaria de Roanoke

 

La noticia de que una película se iba a rodar en la finca inquietaba de sobremanera a Sam, quién en secreto era la heredera legal de la propiedad, pero debido a las historias alrededor de Roanoke se negaba a admitir algo, no quería que la relacionaran directamente a los acontecimientos de los últimos años, porque de ser así jamás podría librarse de los periodistas, por tal motivo decidió hacerse pasar por la manager a cargo de uno de los protagonistas de la película y el trabajo era relativamente fácil, lo único que tenía que hacer era asentir a todo lo que le decían, conseguir algo de agua y mentirle diciéndole que era un excelente actor, pan comido.

 

Los intentos de Sam para alejar a todo aquel que quisiera comprar la propiedad habían sido inútiles, el morbo podía más que cualquier otra cosa y estaba segura que una nueva desgracia los azotaría. Con suerte la finca quedaría como una de esas antiguas y abandonadas mansiones embrujadas, en la que niños queriendo ser valientes llegaban hasta la entrada y después salían corriendo, pero era tanta la publicidad que ahora todos querían filmar comerciales en ella, hacer películas, documentales, siempre atrayendo personas de todo el mundo y eso no hacía más que alimentar a los espíritus que allí vivían.

 

Otra cosa acerca de Sam, ella era una Medium.

 

El galán que quiere con todas - David Thompson

 

Últimamente no le llegaban buenas ofertas de trabajo, todos le querían pagar una miseria, a él, quién era sin duda el actor más guapo de los últimos tiempos, las revistas de los ''100 hombres más guapos'' lo confirmaba y aun así sentía que no había llegado el papel de su vida. Había tenido una discusión fuerte con su Agente/Manager sobre un papel que él se negaba aceptar, de nuevo no le parecía que estuviese a su altura, pero cuando le contaron quiénes hacían parte del reparto no pudo evitar esbozar una sonrisa al darse cuenta que estarían Angelina Opelka y Rachel Grace y con las dos había tenido un amorío ocasional, aunque la primera lo negara.

 

-¡No me hagas perder más el tiempo, Sam! Por supuesto que quiero ese papel -habían sido sus últimas palabras, no entendía por qué la había contratado, aunque había sido la Agencia, pero a él le parecía que no estaba dando lo suficiente para hacerlo brillar. Una vez terminada la película la despediría. Al llegar a la mansión lo primero que hizo David fue buscar las habitaciones de las actrices, quiénes seguramente estarían encantadas de verlo.

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Angeline Opelka

Lugar de la filmación, cerca de Roanoke, Carolina del Norte

Primer día de grabación.

Angeline se habia levantado temprano aquel día para cumplir con su rutina de ejercicios, no habia ni un solo día en que se saltará aquella actividad. Después de dos horas de arduo trabajo habia regresado a su habitación, ubicada en el ala este de aquella mansión. Se relajo durante más de media hora sumergida en las sales y fragancias de la bañera de mármol, traída a petición de ella, para finalmente abandonar su habitación seguida por su asistente personal Blake Mood y sus dos guarda espaldas.

 

Su primera parada de aquel día era "Vestuario y Maquillaje", Blake ya sabia que Angeline tenía que ser la primera del cast en pasar por aquel proceso, a la estrella de cine le gustaba que los encargados de aquella área tuvieran el tiempo suficiente para dejarla espectacular, aunque gran parte del trabajo lo hacia ella misma con su increíble belleza.

 

Angeline camino por la mansión hasta la habitación designada para vestuario y maquillaje, ingreso en el lugar, dejando a sus guarda espaldas apostados a cada lado de la entrada, tomo asiento frente a un gran espejo con bombillos que iluminaron su piel canela y de manera inmediata dos personas comenzaron a trabajar en ella. Blake dejo su gran bolso en una silla y se acerco a ella con un juego de hojas.

 

-Aquí tiene su guión señorita Opelka, el director Lindley solicito que todos los actores estuvieran listos para el medio día en la entrada de la mansión, al parecer la primera escena será grabada ahí.

 

Angeline tomo el guión hojeando un poco el contenido, Blake carraspeo a su lado, la bruja rodo los ojos y la miro directamente, odiaba cuando la chica se ponía nerviosa antes de decirle algo -¿Algo más que deba saber?- regreso su atención al guión abriéndolo en la primera página.

 

-Ya sé quien será su co-estrella en la película señorita..- la chica trago saliva -Da..David Thompson...

 

-¿¡QUÉ?!- Angeline, golpeo el tocador frente a ella con el guión, los maquillistas retrocedieron unos pasos -¡DE TODOS LOS ACTORES QUE EXISTEN TUVIERON QUE ELEGIR A ESE PATÁN!- hizo una seña para que los maquillistas siguieran con su trabajo -El muy cretino aún sostiene que tuvo algo que ver conmigo- soltó un bufido -Como si tuviera esa suerte. Avisa a los chicos de que lo vigilen y no dejen que se acerque a mi habitación- regresó la atención al guión, Blake salio de la habitación.

 

**********

 

Dos horas después sus asuntos en maquillaje y vestuario habían terminado por lo que dejo la habitación para dirigirse al frente de la casa, llevaba el guión en manos y seguía ensañando internamente los diálogos y reacciones que los acompañarían. El grupo salió de la mansión, caminaron hasta una pequeña carpa en donde la esperaba su desayuno y una cómoda silla, esperarían ahí hasta que el director diera la señal para comenzar a grabar.

 

Iba por la mitad de su plato cuando un joven se acerco hasta el grupo, Blake camino hasta el para atenderlo, después de una corta charla el joven se fue y la chica se acerco hasta Angeline. -Señorita, me informan que el agente especial Ironwood acaba de llegar a las instalaciones, esta esperando al director en su carpa- la bruja dejo su cubierto, se limpio la boca con cuidado para no correr su labial, se levanto revisando que todo estuviera en orden y dejo la carpa con paso elegante.

 

En cuestión de minutos llego a la carpa del director, su sequito detrás de ella, sentados en espera del director había dos hombres vestidos de manera formal, ambos hombres se giraron para poderla mirar, cuando se levantaron la bruja camino hasta el que estaba más cerca, plantando un rápido beso en sus labios.

 

-¡Matt, querido! Qué bueno que has aceptado venir, no me imagino a nadie mejor para realizar este trabajo- cruzo su brazo con el del hombre y se dirigió al otro agente –Angeline Opelka, un placer.

 

La mujer no pudo evitar sentir un aleteo en su estómago, hacía años que conocía a Matt, millones de recuerdos se proyectaban en su mente, varias emociones se arremolinaban en su interior, desde alegría, vergüenza, amor hasta odio, tristeza, desilusión; pero como buena actriz que era, no dejo que nada de eso se reflejara en su rostro ni en su actuar.

 

-Espero que disfruten de su estancia aquí, si necesitan cualquier cosa mi asistente Blake lo podrá hacer por ustedes- señalo con una mano a la chica, quien a su vez asintió –Creo que es mi deber informarles que fui yo quien los solicito, así que tal vez Sébastien no esté muy contento con el asunto, solo ignórenlo … o miren…hablando del rey de roma.

 

 

@@Syrius McGonagall @ @ @

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