Escondiendo la Magia

[Lisette Ryddleturn]

A todos los había pillado por sorpresa lo que el ministro de magia había hecho recientemente acerca de lo que a todos preocupaba.

 

La mitad de los magos estaba muy feliz pensando que sus vidas iban a tener una chispa nueva ahora que no tenían que esconderse.

 

Seguramente el caos ya se estaba respirando en el aire, había quienes de inmediato habían tomado las varitas para comenzar a encantar todo lo que tenían a la mano sin miedo a ser arrestados.

 

Otros como en la época de la derrota de Voldemort, habían decidido que comenzarían a andar por todos lados con sus ropas de magos y brujas.

 

Después de todo y a pesar de lo extravagantes que se verían, no tenían de lo qué preocuparse si de todas maneras no era como que les fueran a poner una multa.

 

Pero también había magos y brujas que aún seguían firmemente aferrados al plan original que era el mantenerse alejados de la comunidad muggle por la propia seguridad de esta.

 

Si no era mezclándose con los muggles como tales entonces, permaneciendo en sus hogares hasta que las malas rachas pasaran y el peligro desapareciera.

 

Aunque desde hace ya varios meses que incluso los que permanecen en encierro se han decidido a que aquello va a durar para largo y quizás vaya siendo hora de emigrar a mejores lugares.

 

-Pienso seguir haciendo mi trabajo como Herbologista para la OPAM y encargada en la oficina que me corresponde en el departamento de accidentes

 

Les decía Lisette a los que habían ido a su casa en la Ryddleturn ese día ya que estaban más cerca de algunos vecinos que habían acudido preocupados

 

-Pero decidí que sería un buen momento para escondernos de los extremistas en el pueblo mágico de donde vengo, es un sitio pequeño pero muy seguro

 

Animaba a los vecinos que habían mostrado interés en quizás mudarse de regreso con aquella chica al sitio donde sentían que más seguros iban a encontrarse

 

-Partiremos en unos momentos, tienen que entender que Westown es un pueblito principalmente minero y ganadero pero tenemos otro pueblo cerca que tiene playa, si estan interesados

 

Les dijo a los vecinos reunidos mientras pensaba con entusiasmo que quizás no tendrían problemas en irse de inglaterra por un tiempo en lo que se calmaban las cosas

 

Solo esperaba que todos los que llegaran al pueblo fueran personas tranquilas como los que vivían en él o ella se iba a meter en problemas por abrir tantas puertas

[Rory Despard]

Rory sentía que ya no le daban las fuerzas para más cosas. En sus últimos meses, las aventuras que había sumado a sus espaldas eran muchas, e incluían espacios y hasta situaciones, que dudaba si se habían dado en la realidad o habían sido pura imaginación o sueño (como ese, especialmente recurrente, donde aparecía Aries Black Lestrange tomándole la mano, y mirándolo directamente a los ojos, como si supiese ya con solo hacerlo lo que se cocía en su propia mente).

 

No, necesitaba un poco de paz, en medio de esa guerra, y especialmente de la locura que se había apoderado de la sociedad mágica ante la caída del estatuto del secreto. Sin embargo, había sido precisamente esa loca idea del Ministro de magia, lo que había arruinado la posibilidad de pasar una temporada en su hogar, junto a su madre y hermanos, usando apenas la magia indispensable para tareas cotidianas, puesto que incluso en Irlanda, las escaramuzas de muggles y magos habían comenzado y su propia madre le había dicho que "En Ottery estaría más seguro".

 

Era por todas esas razones, que cuando había escuchado de boca de un vecino al que confesaba todos los miércoles por la mañana, que un grupo de vecinos se organizaba para irse a vivir alejado de los extremistas, en un lugar alejado y apacible, que supo que aquello era una señal de Dios y respuesta a su pedido. No tardó en alistarse entonces, y aunque confiado, con cierta timidez se colocó entre muchos otros magos y brujas que oían, en los jardines de la residencia Ryddleturn, a una bella muchachita de dorados cabellos y dulce sonrisa.

Aunque de apariencia frágil, la convicción con que ella iba expresando el plan trazado le infundió todavía mayor determinación a su decisión. No tenía idea de donde es que quedaba Westown, pero que fuera un pueblo minero y ganadero, calzaba perfecto con sus expectativas. Unos días que lo alejasen de los disturbios, y donde tuviese tranquilidad para meditar y compartir la palabra de Dios era perfecto, así que en cuanto la salva de aplausos concluyó cerrando la participación de la joven se acercó a ella. Por respeto, y aunque no le gustase, se quitó el sombrero que traía, revelando su encendida cabellera pelirroja, y con una venia se presentó.

— No tiene idea de cuánto aprecio la idea que se le ha ocurrido, señorita Rydleeturn— no podía evitar que la timidez y los nervios le impidiesen ser más fluido con sus palabras— me interesa mucho unirme a su comitiva ¿podría decirme qué implementos será necesario llevar? ¿Hay ya una fecha programada de salida?

Rory esperaba que fuese lo más pronto posible.

@@Lisette Ryddleturn

[Lisette Ryddleturn]

La bruja suspiró con alivio mientras se colocaba una mano en el pecho al ver que su idea había sido bien aceptada y sabiendo que la familia se apuntaría pronto para ir

 

Incluso si de repente sentían que podrían no estar en peligro en sus propias casas, sabía que por puro cariño y las posibilidades de tomar aire fresco, irían

 

Al menos una de ellas a las que conocía y sabiendo que tenía niños pequeños, se iba a apuntar de inmediato para tomar a los suyos y partir por el momento del peligroso Ottery

 

Después de todo, así era como se habían conocido y ella ya tenía una especie de granja en el lugar por lo que al menos ella tenía seguro a donde iría a quedarse

 

Y seguramente hospedaría a todos los demás, ella por su parte pensaba poner el segundo piso de su antigua florería a disposición de los que necesitaran una casa

 

Y sabía que sus demás amigos y su hermano, que todavía habitaban en el pueblo les darían alojamiento a todos los que llegaran empujados por las nuevas declaraciones del ministro

 

Un joven se acercó a ella unos momentos después y se sorprendió bastante al ver el color de su cabello, ya que no había visto a muchas personas con aquel color

 

-Hola, es un gusto conocerte... yo soy Lisette

 

Se presentó con educación antes de sonreirle con agrado y comenzar a escuchar sus palabras, parecía que él también estaba más que ansioso por partir quizás por la misma sensación de inseguridad en el aire

 

No podía culparlo, el de repente decir que todos iban a poder exponerse a los muggles implicaba que estos últimos pudiesen tomar demasiadas decisiones mal intencionadas hacia los magos

 

Estaba segura de que nadie se olvidaba de las quemas de brujas, de los problemas en norteamérica con aquellos que todavía deseaban quemarlos y cortarles la cabeza

 

Y también les pasaba por la cabeza todos aquellos que querrían aprovecharse de su magia por intereses que en nada tenían que ver con la ayuda y bienestar de otros

 

Las posibilidades y consecuencias de todo aquello eran terribles

 

-Partiremos en una hora

 

Dijo con un gesto un poco más serio dándose cuenta de que muchos de los presentes ya querían ponerse en marcha y no se sentirían a salvo hasta estar en un pueblo que era inmarcable

 

-Estaré yendo y viniendo con diversos grupos, estoy segura de que hay quienes les va a tomar más tiempo reunir a los suyos y no quisiera dejarme a nadie atrás

 

Dijo y entonces pareció voltear a verlos a todos

 

-Tenemos que tener cuidado porque probablemente al gobierno no le guste que muchos de sus magos no apoyen esto y prefieran apartarse a lugares más tranquilos

 

Dijo

 

-No necesitas llevar nada más que lo que tu sientas que es indispensable para tí o si prefieres ciertas comodidades, puedo mostrarles un hechizo para encoger lo que quieran y llevarlo en una bolsa mágicamente ampliada

 

Dijo

 

-La casa, la comida y el agua ya están disponibles en el pueblo, incluso tenemos una pequeña sucursal de banco que va y viene cada día hacia gringotts por lo que si necesitan efectivo solo toma cosa de media hora en lo que te lo traen del banco

 

Le informó imaginando que muchos magos no iban a sentirse cómodos si no podían disponer de efectivo cuando la crisis estaba más dura

[Xell Vladimir Potter Black]

Aunque no estaba totalmente de acuerdo con la idea de abandonar Ottery, siempre había tenido ganas de visitar el pueblo de la tía Lisette. Alguna vez había mencionado la sencillez de la relación entre los vecinos y que si no se hubieran enamorado las tías, aún seguiría viviendo en él. Sabía también que tenía una bonita floristería que añoraba y, por ello, trabajaba en la Floristería de las Tres Hermanas locas que tenía como tías.

 

No era el momento de irse, sin embargo. Aquel acto del Primer Ministro en contra de la Ley del Secreto obligaba a cambiar todas las ideas sobre nuestro futuro. Yo estaba decidida a quedarme en Londres, luchando por mi familia. Al fin y al cabo, yo era inglesa. Las tías, sin embargo, eran de todas partes y si se iban, me iba a sentir muy solita. Yo estaría con la familia aunque, en realidad, esperaba que se lo pensaran y sólo pusieran los niños a buen recaudo, volviendo después a casa. Todos los necesitábamos allá, intentando remendar el Mal que nos había lanzado Aaron Black Lestrange.

 

Además, le había prometido a la tía Sagis que ayudaría a Lisette con los desplazamientos, aunque después volviera a Ottery de nuevo. Por ello, ayudaba a Lisette a tener todo listo para abandonar el pueblo.

 

- ¿En una hora sólo, tía? - Interrumpí la conversación entre la tía y un jovencito pelirrojo, así que me disculpé por ello. - ¿Dónde pongo esta caja, tía? He recogido toda la medicina posible para tu nuevo hogar. Hay pociones de todo tipo y muchos ungüentos. ¿Crees que podrás usarlo allá donde vas? ¿Tu pueblo conoce la magia?

 

Nunca me había quedado claro si era un pueblo mágico o si era totalmente muggle.

[Hayame Snape Potter Black]

-Westown es un pueblo mágico, colinda con los pueblos mágicos de Lulukoko, que es donde está justamente la zona de playa y Tsuyukusa... que es un poco más tranquilo y pacífico pero tiene unos árboles de cerezo que te relajas sí o sí

La vampiro había llegado hasta aquel sitio con una pequeña sonrisa traviesa al ver que de alguna manera u otra, Lisette se las había arreglado para reunir más personas de las que seguramente se había imaginado; ladeó la cabeza mientras que se acomodaba su propio morral sobre un hombro, más que nada para ella poder preparar la propiedad que tenía en el otro sitio y poder recibir a las personas que quisieran refugiarse y no se convencieran sobre ninguno de los pueblos

 

-Estaremos bien, mientras que nadie del gobierno quiera ir a imponerse... afortunadamente, los cabezas de cada pueblo son bastante independientes así que no creo que dejaran que eso pasara

 

Añadió colocándose los dedos en la barbilla de forma pensativa, su ex novia era interesante queriendo ayudar a las personas

 

-Entonces... me sorprende verte aquí, pequeña Xelli -dijo con verdadero cariño hacia la sacerdotisa rubia -ahora que lo pienso, un poco de tus poderes le vendría de perlas a la protección de los grupos en lo que los vamos transportando de forma sigilosa... solo faltaría que nos toparamos con retenes innecesarios, así que una o dos bendiciones nos caerían de perlas...

[Ela Karoline]

Aquella declaración del Ministro había dejado a muchos sin habla, replanteandose la vida bajo aquel nuevo panorama, ser mágicos 1al ojos del universo entero Abajo el estatuto del secreto de la magia, arriba la libertad así lo habían anunciado algunos medios entre fanfarrias, por supuesto, de inmediato se generaron tres corrientes, los que estaban a favor, los que estaban en contra y los que se mantenían neutrales esperando una señal que de algún modo inclinará la balanza a un lado o al otro. Lo cierto es que Ottery ya no parecía un poblado seguro.

 

Ela Caroline estaba abierta a las aventuras, pero sobre todo amaba la paz y tranquilidad que seguramente perderían después de semejante locura, si, si, para ella el Ministro estaba de atar e ingresar en el pabellón psiquiátrico de San Mungo.

 

El caso es que había escuchado un comentario sobre irse a un lugar más apropiado por una temporada, como ir al campo en verano y quedarse en la urbe en invierno. Y claro, también escucho quien era la anfitriona de dicha idea o donde podía enterarse de más detalles.

 

Llego hasta la propiedad y en los jardines había gente, una chica conversaba y ponía a todos al tanto de los planes y de la partida que se iniciaría en tan sólo media hora.

 

De todos los presentes reconoce al Xell, y le pregunta --¿Yo también puedo ir?--

Editado 27 de Abril del 2020 por Ela Karoline

[Hayame Snape Potter Black]

Hayame se había colocado los brazos por detrás de la cabeza, mirando a su sobrina mientras que esperaba a que esta dijese algo que le explicase la presencia en el lugar; al menos siendo una sacerdotisa poderosa (así la consideraba ella) le parecía un poco curioso el tenerla en aquel sitio junto con todas las demás personas que iban de huída.

Al menos, ella misma no era de huír pero quería ayudar con el contingente y esperaba al menos una buena pelea... o que alguien de la autoridad los detuviese.... cualquier cosa que provocase una reyerta!!

Que si bien no era de gustar los duelos...

Quién le impedía comenzar a lanzar puñetazos a lo muggle y la tan afamada poderosa chancla de las madres?

-Ah!!... creo que tienes compañía... -comentó la bruja pelirroja al ver acercarse a alguien más... no parecía reconocerla aunque le sentía un aire ligeramente familiar pero de todas maneras... hizo una inclinación respetuosa con la cabeza y finalmente decidió alejarse, lo mejor sería dejar que las brujas tuviesen su conversación y se sintiesen cómodas antes de que tuviesen que partir. Se acercó en aquellos momentos a la rubia que guiaba y se señaló el reloj mágico en la muñeca -creo que es hora, guapa....

[Lisette Ryddleturn]

-Muy bien todos, necesito que me pongan atención por favor, necesito que volteen en esta dirección para que puedan escucharme atentamente si fueran todos tan amables

Finalmente el momento había llegado y la bruja rubia se había alzado sobre una roca cercana que le iba a permitir el levantar la cabeza en medio de toda aquella multitud

No esperaba ver a tantas personas reunidas y por unos instantes se había puesto bastante nerviosa pero ese no era el momento de sentirse de aquella manera así que había tomado aire profundo antes de suspirar y asentir con seriedad

-Sé que todos los que están aquí o al menos la mayoría lo que quieren es alejarse de los peligros de estas batallas y correr de sangres que realmente no tienen que ver con nosotros

 

Decía colocandose la varita en el cuello para llamar al hechizo que le permitía hablar en voz alta para ser escuchada por todos y componía una expresión de gran seriedad

 

-El pueblo al que vamos en estos momentos está escondido por un fuerte fidelio, se preparó todo para que realmente todos puedan estar a salvo y todos van a ser recibidos. Es hora de marcharnos, hay alguna duda?

[Ashley Peverell]

-¿Entonces sí vamos a ir todos a ese pueblo mágico donde estaremos seguros y a salvo de que nadie nos va a atrapar? ¿estás segura de que podemos llevarnos todas nuestras cosas y no nos van a asaltar de camino? ahorita ya se juntaron muchas personas y solo quiero saber de que pueden llevarnos a todo el grupo y de que una vez que estemos allá ninguno de nosotros vaya a terminar siendo atacado o maldecido, ya ves lo que pasó en la boda de la familia.

Había comenzado a decir la hermosa brujita con hermosos ojos húmedos de color castaño alzando una pequeña mano blanca como la porcelana mientras la agitaba en el aire pero ya veía que los demás magos y brujas se estaban acercando para formar una especie de filas ordenadas, era obvio que nadie quería perderse en el camino y tampoco querían hacérselo difícil a la bruja de los Ryddleturn así que ella también puso de su parte y se formó con los demás.

[Lisette Ryddleturn]

-Y lo haremos inmediatamente, ya hay suficientes magos y brujas reunidos y no podemos arriesgarnos a que nos sigan deteniendo en estos momentos así que es lo mejor

Anunció y entonces se bajó de donde se había colocado para que todos la vieran y movió las manos de forma que podía comenzar a instruir a sus elfinas para que se acercaran

 

-Vigilen los caminos que vamos a tomar, ya que tenemos que hacer tres traslados mágicos en tres puntos distintos mientras avanzamos para que nadie corra peligro y no nos sigan

Indicó a las criaturas mágicas que asintieron y se alejaron para no estar pegadas a aquellos magos y que todos pudieran moverse de donde estaban y avanzaran para iniciar el viaje

-Síganme por favor!!

Les pidió la bruja rubia a los que se habían congregado y volvió a hacer rapidos movimientos con las manos

-Necesito que se tomen de las manos para hacer el primer traslado mágico hasta el punto donde estaremos viajando en una carreta mágico para llegar al segundo punto de traslado

Dijo y frunció el ceño

-Todo entendido?... los guiaré a través de una aparición conjunta así que no vayan a soltarse, para que no pierdan pedazos que después tengamos que recoger

Pidió la en esos momentos medimaga