El Día de la Ira

[Sean -Ojo Loco- Linmer]

Sean en el circo con Elvis, Zahil, Sagitas, Babila, Matt y el Padre Andrews....ahh claro...se me olvido la acromantula.

 

Increible como una pregunta lanzada por cueriosidad informativa aportaba mas informacion en las no respuestas que si se hubieran centrado en aclarar las cosas. Evidentemente mi pregunta fue lanzada a todos pero tanto Sagitas como la bruja que acompañaba a Elvis en su premura intentaron hacer de Elvis un angelito cuando para nada habia sugerido que tenia que ver con alguno de los sucesos. Ergo....si...estaba metido en el ajo. Y ya nada que dijeran me quitaria esa idea. Aun asi seguia sin saber que era lo que pasaba con esos bebes secuestrados y despues rescatado y con la susodicha farmaceutica. Supongo que no perdia la maña de no soltar un hueso cuando ya lo habia mordido. Que habia sido unos "buenos terroristas" era un concepto nuevo para mi. En fin me encogi de hombros y me centre en el asunto de Alaska.

 

Sip, para ser Sagitas ahora mismo una vieja Squib tenia sus habilidades con los moviles muggles. Supongo que se estaba adaptando muy bien a lo que podria ser su futuro. pero la sorpresa es que se pudiera saber lo que suponia fuera informacion clasificada por esa via. O sea, suponia que encontrar al tal Inquisidor fuese mas complicado. Y mas cuando le hacia la guerra a los magos. De mas esta decir que no me gusta dulce regalado porque despues vienen las collejas de la misma manera...regaladas. Asi que me daba un tufo no agradable esa informacion.

 

-Yo creo que ir a Alaska seria un error. Digamos que si el Inquisidor no quisiese ser encontrado y trabajar en las sombras...como todo villano decente ha de hacer....pues no dejaria su locacion en la Internet Muggle. -me detuve y pense un momento- eso huele a trampa chunga. Atraer la guerra ahi.....o lo que es lo mismo a los magos mas capacitados -señale a los de la sala...porque yo como que no era de ir de frente en esas cosas- eliminarlos a todos para que despues todo sea cuestion de tiempo. Al menos yo lo haria asi.

 

Claro no es que yo tuviera voz y voto en esta conversacion. Pero a veces envestir como toro furioso sin ver otras aristas y solo cegado por el trapo rojo del torero antes tremedas ganas de lograr defensa de la magia...pues podria llevarlos a caer..y asi acelerar el proceso de eliminacion de la magia. Porque dudaba que no hubiese mas dardos junto al Inquisidor. Al menos yo haria las cosas diferentes....y tentar al raton y asi sacarlo de la cueva....de la zona de confort....sacarlo ahi donde uno tuviese la iniciativa de saber que hilos mover.

 

-Pero que conste..esas es mi opinion....yo sere mas humilde y robare la informacion del dardo anti-magico para venderse a los mortis. -me frote las manos- eso son galeones garantizados.

 

Sonrei, y me di la vuelta....

 

-No te preocupes vieja Squib....-me referi a Sagitas- si encuentro algo como la cura...pues ya negociaremos el precio.

 

Que malo era para jugar asi con la suegri...pero que se le iba a hacer. Al menos ahora no estaba abrazada a mi llorando..asi que habia recuperado mi dignidad. Era hora pues de poner manos a la obra.

 

@@@Sagitas Potter Blue@

[Ada Camille Dumbledore]

Trump Internacional hotel Waikiki, Habitación de Ada

 

Una rafaga de aire entro por la ventana y movio mi cabello fuertemente hacia atras, estaba anonadada de la propuesta que Taison acababa de hacer, se que entre nosotros habian pasado miles de cosas en cuestion de meses, pero una propuesta de matrimonio era algo totalmente importante. Teníamos un hijo en común, un promesa hecha entre los dos cuando apenas estabamos entrando en confianza, pues el pequeño Asher me habia robado el corazón desde el mismo instante en que lo habia visto. El estar consiente del sentimiento de amor que tenía por @ habia sido sumamente difícil para mi, puesto que jamas me habia enamorado. Ahora estaba enfrentada a unir mi vida a él y las palabras me habian dejado muda.

 

Medite un poco más, si asi fuera estaria unida al ser que amaba y padre de mi hijo, además que no tendría nada de malo. Solo que la situación actual era tan difícil y los volvería un blanco, pero ya lo éramos los dos. Mi rostro no expresaba ninguna emoción y lo miraba fijamente a los ojos. Una perfecta sonrisa afloró de mí.

 

-Si acepto... Pero aun me debes la cena y el anillo

 

Lo beso en los labios, le ayudo a levantarse para darle un abrazo fuerte.

 

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Ciudad de Sofia, Bulgaria. Suite del Hotel

 

La comida habia llegado a la Suite y me preocupaban los lobos sin comer y cansados, sobretodo Misha que había estado encerrado en aquel hotel donde se habia hospedado Taison, deje al Lycan en la tina y destapando la comida situe dos platos de carne con su respectiva guarnicion en la alfombra al lado de la chimenea.

 

-Sasha, Misha

 

El hocico de la loba apareció tímidamente por el umbral de la habitación seguida por su hermano, le ofrecí la mano y vinieron hasta mi, Mi loba me agradecio poniendo su cabeza bajo mi mentón, el Lobo corrio hacia el plato de comida. Acaricie a Sasha y le deje ir a comer. Fui hasta la habitación y fue cuando encontre a Taison en la cama, quedandose dormido de nuevo atravezado en la cama.

 

Como pude lo acomode correctamente y deje varias almohadas para que su cabeza quedara mas alta y no tuviera que hacer ningun esfuerzo.

 

-Me escuchas, si lo haces mírame, por favor

 

Mi mano instintivamente fue a su rostro, estaba muy palido habia perdido sangre y no sabia que hacer para ayudarle.

[taison logan greyback]

TRUMP INTERNATIONAL HOTEL WAIKIKI , HAWAII

 

Los nervios lo mataban mientras la rubia meditaba la respuesta , pero cuando ella lo acepto sonrio feliz y mas cuando ella lo beso , la abrazo fuertemente mientras la levantaba por el aire , dando vueltas hasta terminar los dos sobre la cama la cual crujio cuando ambos cayeron sobre ella , entonces el la admiro de pies a cabeza viendo lo sensual que era ella con ese traje baño .

 

-Te pagare mi deuda con intereses- dijo embobado por la rubia- aunque si te vistes asi para el dia de nuestra boda , no creo que vayamos a llegar a la capilla- dijo riendo levemente mientras empezo a besar el cuerpo de su prometida desde los pies muy lentamente.

 

Puso sus manos en la espalda , para dejar que los sentidos de su amada viajaran por los rincones que ella deseara , ya no importaba si el mundo caia en pedazos por primera vez en su vida era realmente feliz , aunque sabia que ahora mas que nunca tenia que pararse frente a la tormenta para proteger a su amada y a su hijo.

 

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Hotel Sofia , Bulgaria

 

La cabeza le daba vueltas y el cuerpo aun le dolia , le costaba mantenerse despierto pero algo estaba llegando a el , un aroma a carne asada seguido por la voz de su novia , seguido por dulce tacto de su piel , no entendia bien que por que todo en su mente daba tantas vueltas , con las pocas fuerzas que tubo se sento sobre la cama tomando la mano de @@Ada Camille Dumbledore suavemente con la suya.

 

-No podria solo mirarte -respondio con cierta dificultad para hablar- como llegue aqui?? y que es eso que huele tambien??- apoyo su mano libre en su otro lado para no caer ,dado que se sentia muy mareado , en eso asalto su memoria aquel mapa que habia visto en aquel laboratorio muggle .

 

-supongo que trajiste a Misha- dijo recordando que en sueños habia pedido que lo fueran a buscar , aunque ya no sabia si lo habia soñado.

[Lisette Ryddleturn]

LA GUARDERÍA

 

La bruja rubia se quedó viendo a quienes estaban ahí y movió un poco la cabeza entendiendo que aquella situación no era normal y que podía ser grave si no se le prestaba atención

 

Intentó pensar mientras que la otra bruja rubia también parecía tomar un poco de aire, eran muchas explicaciones para un momento tan corto y parecía que todos estaban apurados

 

-Puedo intentar colocar unas barreras mágicas con mis plantas para que no pierdas el tiempo y empieces a intentar con el antídoto, si Sagitas necesita ayuda entonces es algo urgente

 

Apremió la rubia sintiendo como si tuviera que estar viendo el reloj a cada rato, realmente ella no sabía de venenos que robaran la magia pero a esas alturas del juego ya nada la sorprendía

 

Y comenzaba a darle miedo pensar que a ella pudieran hacerle lo mismo, si acaso se podía crear una especie de antídoto vacuna para evitar ese peligro, se sentiría mucho más tranquila

[Malum Luxure]

Hotel Halekulani. Día de la Gala.

Ya me encontraba lista para la misión, aun que estaba llegando algo tarde cosas que me tenia algo fastidiada, pues me había tomado algo de tiempo decidir que vestir, si debía usar peluca pero finalmente decidí que no así seria fácil reconocerme pero si llevaba lente de contacto puesto que mis iris rojos seria muy llamativos entre tanta persona común, ya había sufrido en el pasado discriminación por ellos...sabia de sobra del desprecio en sus miradas, el odio por ser diferente, por ser simplemente superior.

Respire hondo antes de entrar al salón pues debía dejar en la puerta a Lady Luxure Triviani con todo lo que implicaba ser una bruja demoníaca para ser Naomi Boncarter una activista en contra del uso de artefactos "mágicos" en el mundo muggle...debía poner mi mejor actuación para que Akito Matiba caiga en las redes de mi mirada azul, usar todo mi dulce encanto para poder adueñarme de él y luego quitarle la información que necesitábamos.

Mis pasos sonaron seguros cuando entre, rompiendo el ambiente aburrido, el movimiento elegante y sexy con el que atraía la mirada de los presente era un alago a mi ego elevado, el vestido era precioso en cada detalle, las joyas, zapatos y cartera todo a juego y cuidado hasta el mínimo detalle, tenia un aire entre inocente por fingir que era mi primera vez en una fiesta de ese glamour y uno fuerte por el de luchar por mis supuestos ideales.

 

-Buenas noches...- Pase saludando a las personas con una dulce sonrisa, de vez en cuando jugaba con mi cabello asentando mi personaje.

 

Primero buscaría al agente Ironwood @@Syrius McGonagall para que me informe disimuladamente de la situación y así poder ir contra mi victima de una vez, no deseaba llevarme ninguna sorpresa desagradable a lo largo de la noche...aun que no estaba todo dicho y esto recién empezaba, vaya uno a saber que tan difícil podría resultar tal cometido.

 

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[Ellie Moody]

Días atrás

—Quedas a cargo Madeleine, me necesitan en otro lugar

 

La doctora Marie Tenenbaum la observa desde el suelo, con la mirada vidriosa y perdida. La sangre mana de la herida abierta en su brazo, no es letal. La desgraciada vivirá. Sin embargo, los ojos vacíos de la mujer le hacen dudar de aquella afirmación; no es falsa, pero quizás no sea acertada. Está viva, sí: respira, su corazón late, probablemente sea capaz de moverse... pero ¿aquello es vida? No comprende qué es lo que Graves le hizo, pero con sus clarividencia agudizada tras vincularse a la Nigromancia, puede observar que ya no es una persona. No tiene alma ni consciencia, sólo una mente que sirve para poca cosa y un cuerpo que es mas bien un cascarón vacío. Una daga helada aparece en la mano de Madeleine, sin que ella sea apenas consciente de ello; siente el impulso de acabar con aquel acto inhumano, de acabar con todo, pero la ira que siente los frescos recuerdos del asesinato de Violeta la detienen. ¿Acaso aquella mujer alguna vez les mostró misericordia a las personas que mantuvo cautivas en aquel lugar? ¿Cuántas veces no habría ignorado sus súplicas, sus lágrimas, su desesperación?

 

—Nos veremos en el cuartel general. Hay mucho que hablar.

 

Luego de derrotar a Tenenbaum, no faltó mucho tiempo para dar la misión por concluida. Sus compañeros rescataron a las personas secuestradas y, con la ayuda de Kaori, los llevaron al Refugio donde podrían tranquilizarse y resguardarse. Sus familias serían contactadas y la Orden haría todo lo posible por re-insertarlos a sus vidas, pero Madeleine sabía que aquello no sería fácil. Luego de conocer la experiencia de Violeta, lo que sufrió y tras indagar en la información que recuperó del edificio antes de que colapsara, sabía muy bien que sus vidas habían cambiado para siempre. Su magia había sido transformada en algo salvaje, destructivo y peligroso... Ellos mismos eran armas. ¿Cómo podían volver así sin más a sus casas, con sus familias? ¿Qué sería de ellos? ¿Sería algo temporal o algo permanente? ¿Podría haber una forma de arreglar aquello?

 

—Tenemos que ayudarlos de alguna forma —le dice a Ellie, mientras observa a los nuevos residentes del Refugio—. No son... no son...

 

—Por favor, no digas que no son normales —susurra Ellie, sacudiendo la cabeza—. Hay muchos tipos de magia y muchas formas de canalizarla. No la dañaron, sólo la transformaron.

 

—Sí, en algo horrible —replica Madeleine.

 

—Estoy en contra de estos experimentos, no te confundas. Estas personas fueron privadas de su libertad y fueron largamente torturadas, sin entender qué sucedía o qué les hacían. Fueron escogidas adrede, porque Tenenbaum las consideró descartables: buscó en pueblos donde no habían habitantes mágicos registrados para no llamar la atención del Ministerio, buscó a muggles problemáticos que no serían extrañados. Por supuesto, no iban a buscar participantes en las familias mágicas importantes de la comunidad o en barrios adinerados.

 

—¿Y ahora qué?

 

—Si ellos lo aceptan, puedo investigar su condición y ver qué posibilidades hay... Pero quizás lo más sano y menos traumático, sea que intenten vivir de esta forma, por lo menos durante un tiempo. Hemos podido comprobar que, mientras sus emociones estén controladas ellos mismos son estables y no representan un peligro para ellos mismos o para alguien más.

 

—¿Conoces a algún buen profesor de Uagadou? —susurra Madeleine por lo bajo.

 

—Es una buena idea —responde Ellie.

 

A sabiendas de que las cosas siguen sin estar bien entre Ellie y Richard, decide omitir que, de hecho, sólo se le ocurrió aquello al recordar que Richard fue capaz de dominar su magia salvaje con la ayuda de un profesor de aquella escuela mágica. Sin ser capaces de utilizar la varita mágica como catalizador, una alternativa es que usen sus propias manos; pero de alguna forma deben canalizarla, en lugar de dejarla salir en tremendas oleadas...

 

—Hay algo más —susurra Ellie—. Estuve... leyendo la información que recuperaste de Tenenbaum Futuristics...

 

—¿Qué sucede?

 

—No sólo secuestraron a magos y brujas, sino también a muggles, como bien sabes. Muggles con un grupo sanguíneo específico, sin anticuerpos A o B, todos con RH negativo. El origen de la magia todavía es un misterio y, aunque los investigadores del Inquisidor hayan asegurado encontrar el "gen mágico", no sé si podemos aceptarlo al cien por cien. Pero... pero creo que si así fuese... Pues ¿sabes que no todos los squibs no es que no tienen magia, sino que tienen un nivel tan bajo que no son considerados magos?

 

—No lo sabía, pero continúa.

 

—Lo mismo puede suceder con los muggles. Quizás... quizás pudieran tener algo, una pequeña chispa de magia, pero es tan insignificante que no son considerados magos. Aún así, está el potencial. Creo que Tenenbaum tenía esta idea y, por eso, estaba intentando forzar el desarrollo del gen en muggles... Con resultados terribles. Aún así, me pregunto si en todo el mundo, ella es la única con esta idea.

 

—Quizás no fue su idea —replica Madeleine—. ¿Y si alguien le exigió esa investigación? ¿Alguien con el interés de tener magia, sin tener que depender de magos convertidos en armas, en redentis?

 

—Quizás...

 

Actualidad

Un letrero le da la bienvenida a Juneau, pero Madeleine, obligando a su moto voladora a ir a toda velocidad sobre el asfalto, lo pasa por alto.

 

«Bienvenidos a Juneau, la ciudad capital de Alaska. Fundada en 1880».

 

Su mente está en mil lugares a la vez: está con las personas que rescataron de Tenenbaum Futuristics, está con los mapas que estuvo revisando en la Fortaleza Errante toda la noche, está con la crisis que está atravesando el mundo mágico y el muggle por igual, está con su familia, con sus amigos... Pero, por encima de todo, su mente está con el Inquisidor. La Orden del Fénix sabe que tiene su base de operaciones en Alaska, pero hay muchos lugares que buscar. Además, encontrarlo no lo es todo. Desde la caída del Estatuto muchas cosas terribles han sido construidas y son temas que incluso acabando con el Inquisidor, no desaparecerán de un día para otro. La verdad es que ha comenzado a dudar de si buscarlo sea el mejor movimiento que pueden hacer, pero por los momentos parece el único camino que pueden tomar.

 

No tiene ninguna pista que la conduzca a Juneau, pero le parece que buscar en la capital de Alaska no es una idea descabellada. No es que pueda ir preguntando por ahí si alguien lo conoce, pero quizás averiguar si "cosas raras" han estado sucediendo pueda ser una buena forma de llegar a algún lado. Quizás no den con él directamente todavía, pero sí con alguno de sus aliados que estén aprovechando el escenario actual para llevar a cabo sus negocios tubios.

 

Madeleine detiene su moto frente al Capitolio del Estado de Alaska, un edificio cuadrado de varios pisos de altura. Ya ha caído la noche, así que no hay muchas personas en la calle; sin embargo, espera poder conseguir un lugar para pasar la noche. «Mañana será un largo día... y sé que no lo lograré sola», se ve obligada a reconocer. Tras confirmar que no hay nadie observándola, levanta la varita mágica y realiza el encantamiento patronus con un fugaz movimiento de la muñeca. Los medio-Kneazles se materializan frente a ella.

 

—Misión de rastreo y reconocimiento en Juneau, encuentro a las 5.00 frente al Capitolio estatal—recita el mensaje que sería transmitido a los miembros de la Orden del Fénix a los que llegara el patronus—. Objetivo, el Inquisidor. Cambio y fuera.

[Ada Camille Dumbledore]

Trump Internacional hotel Waikiki, Habitación de Ada

 

El velo de la noche ya había caido sobre la isla, yacia en su cama abrazada al hombre que amaba y que seria su esposo, si sobrevivía a todo esto. Habian sellado su compromiso entregándose el uno al otro, llenando se de besos y caricias, olvidándose del exterior. Pero era hora de irse a cumplir si misión, me levante despacio dejando a @ dormido y yendo directo a la ducha, el agua caliente se lleno de aroma a azucenas para impregnarse en su piel. Tras aquel baño se dirigio al vestidor un vestido blanco ajustado que resaltaba totalmente su figura, zapatos dorados de tacón alto junto a un bolso dorado también. El cabello rubio suelto y liso, caía por su espalda un poco mas abajo de los hombros. Ahora me veía al espejo y estaba lista, suspiré. Algo dentro de mi me causaba tristeza y aun no entendía a que se debia ese sentimiento tan difícil.

 

Sali del vestidor hacia la salida, fue cuando me di cuenta que mi medalla aun estaba en mi cuello, la solte y la deje sobre la almohada junto a la que estaba dormido Taison, quería que la viera mientras volvía. Quise besarlo pero no quería que despertará ya estaba atrasada. Solo me detuve a mirar su cuerpo desnudo sobre mi lecho, me sentía afortunada de tenerlo conmigo.

 

Salí de prisa hacia el Lobby donde me esperaba una limosina, debia llegar pronto al Hotel Halekulani donde se realizaría la gala benefica.

 

Ya en el Hotel Halekulani ingrese directo hacia el salón en donde estaba llevándose a cabo la gala e ingrese, ninguno de los mios se veía cerca, por lo que me dispuse a tomar una copa de champagne que me ofrecio uno de los meseros y disfrute del licor.

 

@@Sean -Ojo Loco- Linmer @@Lady Luxure Grindelwald @@Zoella Triviani @ @@Syrius McGonagall McGonagal @@Danny Lestrange

 

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Ciudad de Sofia Capital de Bulgaria, Hotel de Ada

 

Estaba consiente por fin el lobo y me preguntaba si Misha estaba hay con nosotros.

 

-Si lo esta, quieres comer pedi también un poco de sopa, eso te ayudará, me alegra que estes mejor. Ahora no preguntes nada más solo descanza

 

Al ir por la comida me sentí mareada, al parecer estar son comer lo suficiente en el día y la tensión estaban haciéndome sentir mal. Tome la sopa y la lleve hasta la habitación, le puse la servilleta y empece a darle cucharadas en su boca. Recibío de comer poco, al terminar. Deje el plato a un lado y disimuladamente fui al baño, me lave la cara y me sente en la cama a su lado.

 

 

-Creo que no debemos ir solos a donde sea que vayas a ir, dejame que Danny mi hermano y el canciller con si equipo nos ayuden con esto por favor

 

Cerre los ojos recostandome en la almohada, sin esperar su respuesta me quede dormida

[Syrius McGonagall]

Matt Ironwood.

 

Hotel Halekulani. Día de la Gala.

 

 

 

 

 

Los colegas en la sede estarían buscando esos registros de vuelos y en cualquier momento le llegarían noticias, observó la pantalla del reloj de muñeca que llevaba, la información pedida se expondría en la misma pero por el momento era simplemente una pantalla digital que mostraba la hora.

 

Cruzó la concurrida pista de baile hasta su posición cercana a la puerta de entrada, al ocupar el espacio lanzó una mirada furtiva hacia donde estaba su jefe, el rumano. El hombre seguía atacando plato tras plato y no parecía notar nada más allá del tenedor y el cuchillo en su mano.

 

La puerta se abrió de par en par y una figura femenina ingresó a la pista de baile. Su figura imponía y su belleza hipnotizaba pero algo más captó la atención del mago, la magia. El rastro era un leve dejo pero se percibía, la magia siempre dejaba rastros y en aquella rubia se notaba. La observó caminar hacia el centro del salón y se preguntó ¿si sería Lady o Ada? Seguramente era una de las brujas francesas disfraza, al parecer no lo había notado por lo que en algún momento de la velada debería acercarse.

 

Pero si tenía dudas acerca de la identidad de la pelirroja está de despejo al ver entrar al salón a la bella figura de la Primer Ministra Francesa, Ada Dumbledore. La jerarca política se adentro en la gala y no pareció notar la presencia de su compañera ya que se dirigió hacia otro extremo de la fiesta a beber una copa.

 

Tenía que hablar con ellas, justo cuando daba el primer paso una pesada mano se apoyó en su hombro derecho y al girarse se encontró con el rumano - Ronda en el jardín, ahora - ladró el hombre e hizo un gesto indicando el lugar. El castaño contuvo el suspiro de molestia y asintió como toda respuesta. Hablaría con las brujas más tarde.

 

Fuera en el pequeño jardín interno se respiraba otro aire. La fresca brisa nocturna y la poca presencia de personas volvían aquel espacio una especie de bálsamo de tranquilidad del ajetreo de la gala en el salon.

 

El ojiazul se movió por la periferia del jardín junto a la pared con amplios ventanales que lo separaba del salón central rumbo a la zona donde los cocineros vigilaban la preparación del cerdo a la kalua. El humo blanco se elevaba desde el suelo y el aroma de la carne asándose a un metro bajo tierra bajo capas de hojas de ti y sobre piedras hirviendo y más hojas de ti.

 

Los tres cocineros bebían unos tragos y charlaban jocosamente entre ellos, el Ironwood los saludó de pasada y se detuvo para charlar un poco con ellos.

 

-Que aroma, ¿el personal de seguridad comerá algo de eso? - preguntó sonriendo a los cocineros.

 

-No estamos seguros si llegaremos a probarlos nosotros - se aventuró a contestar uno de ellos.

 

-El cerdo a la kalua es para los invitados, o eso nos dijeron, pero hay que arriesgarse y hacer la prueba de calidad - respondió el cocinero de mayor de edad sonriendo.

 

-Totalmente - acotó el tercero.

 

-Me ofrezco a tomar el riesgo - replicó Matt levantando la mano y en ese momento sintió el mensaje. Fue una leve vibración, la pantalla de su reloj de muñeca se iluminó, sus compañeros le habían pasado lo que había pedido.

 

-Disculpen, el jefe - fingió a los cocineros llevándose dos dedos al intercomunicador pretendiendo que le estaban hablando, se alejó un par de metro a una zona apartada del patio junto a unos delgados árboles.

 

Matt tocó la pantalla y observó la lista de vuelos que realizaron en los últimos tres meses los empleados de Genetics. Habían estado activos se percató mientras repasaba la información, la mayoría eran vuelos domésticos, los únicos en el extranjero fueron un vuelo que Emily hizo a Polonia hacía casi un mes y otro a Toronto realizado por Patrick hacía tan solo 8 días. Pero había una serie de vuelos que le llamaron poderosamente la atención al ojiazul, el estado de Alaska se repitió cinco veces entre los dos. La última frontera era una región apartada del país y no parecía ser un destino tan atractivo para dos científicos de laboratorio de Nueva Jersey. Es más ambos tenían programado un vuelo a Anchorage partiendo del Aeropuerto Internacional de Los Ángeles para mañana, el castaño sabía por la conversación que captó de Patrick en el baño que los mismos habían sido cancelados, de seguro los de Emily seguirán el mismo camino.

 

Anchorage, Juneau, Fairbanks e incluso uno por parte de Emily al remoto pueblo de Barrow. Alaska. Algo había allí arriba y habría que averiguarlo. Deberían comunicarse con sus compañeros en la Oficina Regional del FBI de Anchorage, de seguro alguna pista o información tendrían.

 

Borró el mensaje de la pantalla y la hora apareció, pasada la medianoche. Tenía que hablar con los franceses, quizás más miembros ya hubieran logrado infiltrarse a la gala. Alaska, todo parecía conducir a Alaska, Genetic tenía algo allí, lo presentía. Alaska era una estado enorme y remoto, muy poco poblado, muy poco controlado, uno podía ocultarse perfectamente en aquel lugar sin que nadie lo molestara.

 

El destello de luz blanca lo tomó por sorpresa, atinó a estirar su mano hacia el bolsillo de su pantalón donde guardaba su varita para defenderse pero delante de sus ojos la luz fue tomando la forma de un Patronus que se manifestó como un medio Kneazle. La voz de una compañera de la Orden le llegó con claridad, escuchó el mensaje hasta el final y lo repitió mentalmente cuando el Patronus se desarmó. Alaska, la Orden estaba en Juneau y realizaría un rastreo en el Capitolio estatal a la cinco de la mañana, suponía que hora de Alaska, hacia que sería a sus tres.

 

Tenía que ir, de alguna forma debería abandonar aquella fiesta. Los franceses ya estaban presentes, ellos podrían seguir buscando información y además no podía invitarlos a ninguna misión de la Orden, porque ninguno pertenecía a la misma, no, el verdadero problema sería justificar su inesperado e impostergable viaje a Alaska a su Oficina, estando ya en una misión encomendado por sus jefes.

 

 

@@Ada Camille Dumbledore @@Lady Luxure Grindelwald @@Ellie Moody

[Eterno Black Triviani]

DIA DE LA GALA - Hotel Halekulani

Geminys (JOYA) William (Eterno) Grupo Ternah

 

Había pasado mas de una hora de comenzada la reunión y la pareja se encontraba sentados dentro de la zona VIP siendo muy bien atendidos por los mozos del lugar. Les habían informado que su lugar que había reservado con anticipacion por alguna razón desconocida les habían cambiado pero el lugar ofrecido no seria tan malo después de todo, desde ahí se podía observar casi todo el panorama del lugar.

 

El muy bien arreglado con su traje de etiqueta negro llevando unos gemelos de plata en ambas muñecas acomodados en su fina camisa blanca y en cuyo chaleco un reloj pendiente de bolsillo cuya cadena sujetada de uno de sus botones de hueso de ballena jorobada con incrustaciones de diamante, el cual hacia elegantemente juego con su vestuario ya que se encontraba disfrazado sutilmente, seguía a su lado su acompañante quien no le quitaba los ojos de encima y le ayudaba con la misión que se les habían encomendado.

 

Una pareja se sentó en el lugar que les correspondia, JOYA se les quedó mirando ya que el Canciller se encontraba de espaldas observando como se retiraba el agente del FBI hacia algún lugar de abajo muy cerca donde ellos se encontraban.

Le picaba el rostro por el bigote y la barba en forma de candado que se había puesto y sus ojos le ardian un poco ya que las lentillas de contacto cafes eran algo incomodas y de vez en cuando se colocaba una gotas en los ojos para humedecerlos.

Le huele unan pelirroja conocida quien se cruza con el agente y una joven más que cruza la pista de baile quienes eran colegas suyas, sabiendo donde se encontraban si requerían apoyo.

En su oído tenia un aparato con el cual se podía comunicar con su grupo, el cual era muy parecido al que usan las personas con deficiencia auditiva.

Su gente se había distribuido de distintas maneras. En la cocina, en la entrada, como camareros, en los elevadores, como vigilantes de los baños y pasadizos, junto a las columnas, donde estaban las cámaras de seguridad, tanto en el segundo como tercer piso.

 

- Si tesoro, la pareja llegó están hablando al celular y no parecen que fueran muy unidos que digamos. -

 

Comento la rubia a su aconpañante sonriendo para tomar la mano rápidamente de su jefe sin mala intensión cuando se percata que la señora de la mesa contigua le observaba, puede que se hallan dado cuenta de que le observaba. Ella toma su copa y la bebe dándole unos sorbos cortos para mirar a los ojos de su jefe quien le corresponde pues entiende el mensaje para que le auxilie.

 

Su objetivo se le aleja perdiendole de vista en forma momentánea, el tal señor quien llevaba una cara de militar de cuarentaitantos años encima.

 

Morloc, el alto moreno fortachón de su grupo se aproximaba por los bordes de la pista de baile con un carrito de postres, el sonriente mostrando su diente de oro ofreciendo lo que traia en su móvil.

En la cocina por otro lado, le reportaban que no había nadan fuera de lo normal y este seguía cocinando lo que vendría ser él plato principal con mucho esmero.

 

Alguien llegaba con un par de pequeños perros quienes caminaban a pasos cortos siendo dejados en la zona de mascotas muy cerca a su dueño. Donde muy cerca la salida del jardín se encontraba un tipo bien parecido parte de la grupo quien colocaba las vajillas y cubiertos nuevos cada vez que terminaban de servirles la cena.

 

 

@@Syrius McGonagall

@@Ada Camille Dumbledore

@@Sean -Ojo Loco- Linmer

@@Lady Luxure Grindelwald

@taison_greyback

@@Danny Lestrange

[Luna Gryffindor Delacour]

Seguir a papá Elvis no me costo nada, lo que si me costaba era pensar como ayudar a mi amiga Sagitas, casi quería llorar al enterarme que ella no tenia magia por unos dardos del inquisidor, parpadee cuando dijo que el muggle la ayudo y comprendí rápido que teníamos que hacer algo, porque me sentía mal por ella y quería ayudarla de alguna manera.

 

- Sagis, tenemos que ver qué sustancia tenían esos dardos y buscar algo que solucione esto, en cuanto al hombre me alegro que te ayudara por cierto, viste alguna inscripción rara? Algo que pueda ayudarnos. Buscar el antídoto, esa flecha o lo que sea Que hizo que estés así, pero váyanos por partes, alguien sabe de dónde es esa flecha? - Dije mirando a Sagis y al hombre preocupada intentando saber que hacer a continuación -

 

Sagis era mi amiga no sólo de la Orden si no de la vida, habíamos pasado muchas cosas juntas y sufría por verla así de mal, sin magia y sin saber como ayudarla, verla tan desesperada hizo que quisiera ayudarla ahora mismo y pusiera todo de mi porque esté bien.

 

 

-Vámonos a Alaska y busquemos el antídoto, si tenemos que ir allá, vamos por trasladador o en escoba? Tenemos que ayudarla como sea y esperemos llegar a tiempo - Dije entre preocupados y contenta de que encontraríamos una solución al conflicto, entre todos ayudaríamos cómo pudiéramos y resolveríamos la situación-