La Creación del Nuevo Ministerio

[Sagitas E. Potter Blue]

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El nuevo día me pilló dormida (algo normal a esas horas), con la mejilla pegada a la mesa de madera noble del despacho que tenía en el Ministerio. Aún sin abrir los ojos, sentí el siseo de varios molestos memorandums revoloteando sobre mi cabeza. Gruñí y gemí al levantar los brazos, colgados casi rozando el suelo, hasta la altura de la mesa.

 

-- ¡Ay, ay, ay...! ¿Por qué no ponemos una cama pequeñita, un camastro sobre el suelo, allá, en aquella esquinita? Muchos considerarían que este despacho podría contener un piso donde viviera una familia con todo lujo en el interior. Hasta piscina podrían tener. ¿Por qué yo no puedo tener una cama ahí, escondida en uno de los armarios. Al fin y al cabo, hay tantos que ni sé lo que hay dentro.

 

"Todavía..." Aún no había podido chafardear todos los recovecos de aquel lugar pero vamos, que en cuanto tuviera un poco de tiempo, iba a meter mis narices en todos los cajones, a ver si encontraba algún escondite de Crazy.

 

Ufff, Crazy... Sentarme en aquel sillón imponía mucho. Bueno, los primeros cinco minutos, en los que lo hice rotar y grité un "yujuuuuuu" que apenas notó nadie. Después, empezaron a bombardearme con libros, apuntes, manuales de protocolos, petición de citas, memorandums que amenazaron con cubrirme toda yo. Así que me encogí en el sillón, encogiendo las piernas y metiendo la cabeza entre las manos y grité, llamando a mi salvadora.

 

-- ¡¡Perenelaaaaaaaaaa!!

 

Si alguien se cree que por ser Ministra no voy a llamar a gritos a la gente, como hago en el Circo, que sepa que es muy difícil que un burro altere sus hábitos sociales sólo porque tenga un pesebre más grande. ¿Por qué le llamé a ella? Supongo que por costumbre. Ella es la que lleva las cuentas en la casa, pues a mí todo eso me sobrepasa. Así que, sin pensarlo, la convertí en la ayuda que necesitaba para ordenar aquellos papeles y de mi agenda en aquel nuevo lugar. Y, sin proponerlo, ella se convirtió en la Directora de los Servicios Ministeriales; quien me acuse de nepotismo con ella, se equivocará. Perenela es muy profesional y sabe dejarme la mesa limpita para que no tenga que ocuparme de nada.

 

El olor a café recién exprimido y de zumo de naranja recién tostada acabó de obligarme a levantar la cabeza, soltando más "ay's" a medida que despegaba la piel del pómulo de la mesa. Que conste que aún estaba dormida y no distinguía bien los olores así que todo se volvía apetitoso mientras despertada. Esa sensación de desconcierto me duraría unos 10 minutos. Eso iba a tardar en despertarme del todo.

 

-- Señá Ministra, lé traío el café.

 

Sí, tampoco se me puede acusar de nepotismo con Babila. A él le pago de mi bolsillo para que me haga de secretario personal. Es el único que, además, de Harpo, conoce mis gustos en mis almuerzos y de picoteos entre horas. Además, es un personaje muy querido por todos y a mi elfo prefería tenerlo protegido en la mansión, tras lo que le había sucedido con el Ministro anterior. El semigigante colocó una bandeja encima de la mesa, con café, periódicos varios, tostadas, un zumo de naranja helado, croissants sencillos y la agenda abierta por el día de hoy.

 

-- ¿En seriooooo? Esto es obra de Perenela, para que sepa lo que me espera... Quiere que me siente mal el desayuno.

 

Pasé el dedo por todo aquello anotado y gruñí.

 

-- ¿Estará presente mi cuñada Lucrezia de Médici en la Reunión del Gabinete de Economía? Espero que no tenga problemas tras el indulto que firmé el otro día. ¿Y sabes si Nathan Weasley ha recibido la nota con la fecha y hora correcta? ¿Qué duendes de Gringotts más estarán presentes? Espero que puedan venir a los miembros del Fondo Monetario Internacional. Creo que las cuentas del Ministerio fueron despilfarradas en el anterior mandato y tenemos una crisis que superar. Aún no he hablado con Alessia BL Crowley ni Lysander S. , a ver si puedo hablar con ellos a solas...

 

Por supuesto, Babila ni lo sabía, se había sentado delante de mí y puesto los pies sobre la mesa, comiéndose un puñado de croissants dulce que había cogido con la mano. Ni se molestó en contestarme.

 

-- También está la Comisión de Penitenciaría, para el control de Azkabán. Tenemos que comprobar que los Dementores y vigilantes de la cárcel siguen siendo fieles a la actual institución del Ministerio, no al anterior. ¿Cissy Macnair ha confirmado que asistirá, como miembro del Wizengamot? ¿Quién más estará presente?

 

Lo que dijo Babila es intraducible, así que tomé un croissant y puse los pies en la mesa, junto a los suyos, poniéndome la agenda en el regazo y repasándola con la mano libre.

 

-- Hum... No sé si nos dará tiempo de llegar a la reunión de la Comisión de Relación con los muggles. Antes he de hablar con Mackenzie Malfoy, ¿alguien sabe si ha respondido a mi carta de petición de consulta, por ser la Presi de la Confederación Mágica Internacional. Me interesa su opinión sobre la restitución del Estatuto del Secreto. Dile a alguien de Accidentes que quiero saber cómo van las obras de restauración del Palacio de Buckingham. Le prometí a su Majestad la Reina Isabel II que se lo dejaríamos como nuevo cuando volví a situar el Ministerio de Magia de Londres en su ubicación original. ¿Aaron Yaxley ha creado problemas?

 

Me metí un croissant en la boca y, mientras masticaba, pensé que lo peor no estaba agendado, la lucha contra el Inquisidor y la lucha contra los mortífagos, dos causas que necesitaba comentar con gente fiable y, en este momento, sólo confiaba en mi familia, Que la Diosa les bendiga, y en la Orden.

 

-- Recuérdame que Perenela mande una lechuza a Elvis Gryffindor. Es un ex-auror, estoy segura que sabrá aconsejarme sobre ciertos temas de Seguridad Nacional. También quiero que me consigas una cita con Niko Uzumaki. Sólo confío en él para las traducciones fiables para el ámbito internacional. A ver si accede a ocupar un puesto en alguna área relacionada con la diplomacia.

 

¡Jole, qué estress! Y eso que sólo llevaba 3 días como Ministra. Esperaba que me diera tiempo de darme una ducha y cambiarme de ropa.

[Perenela Arya Grindewald Potter Blue]

Sonreí al escuchar el sonido apagado de la voz de mi madre quien hablaba sola. Bueno no sola con Babila, yo había llegado hace una hora y había ordenado al secretario de mi madre que preparara el desayuno en la pequeña cocina que encontramos en uno de los paneles escondidos, el Morocho tenia la ayuda de dos elfos que se angustiaban cada vez que el semigigante entraba en la cocina, le sonreí de paso cuando vi la bandeja con el zumo de naranja, el café, una pila demasiado grande de croassants y acomode la agenda en un lado y los periódicos matutinos en otro, le di un par de palmadas al morocho y le abrí la puerta para cerrarla detrás de él.

Alise la falda pegada que traía, era larga hasta las rodillas de color vino tinto y de cintura alta con una blusa de mangas largas blancas muy profesional, los tacones eran negros y cerrados, junto al cinturón negro que le daba corte a la falda, el cabello lo traía suelto y mis gafas de montura me daban un aire demasiado formal pero eso hacia que la gente me tomara mas en serio, cosa que debía aprovechar ahora dado que mi madre me había dado el puesto de modo directo sin siquiera pensar en la anterior asistente que tenia el antiguo Ministro, me puse unas gafas de montura falsas, no las necesitaba pero completaban mi atuendo y me hacían ver muy competente.

Volví la vista a mi escritorio que habíamos traído para adaptar una pequeña recepción afuera de la oficina de mi madre con tal de que me tuviera lo mas cerca posible en caso de que me necesitara, bueno eso y como primera linea de defensa, y me fije en los memorandos que volaban sobre el escritorio y la pila auto acumulable de papeles que se estaba fijando en cada caja de correspondencia que tenia que entregar a la nueva Ministra, la caja de cosas urgentes estaba llenándose mas rápido de lo que ella podía resolver, tome la pila de memorandos interdepartarmetales que debía hacer que mi madre firmara y los deje a un lado. Cuando dejara lista a mi madre con su rutina diaria volvería para leerlos cada uno y pasar los verdaderamente importantes a la ministra.

Sabia que con el nuevo puesto de mi madre, ella no tendría tiempo de volver a casa sobre todo si quería poner en orden todos los pendientes que el anterior Ex Ministro había dejado antes de asumir el cargo, era increíble que ese hombre hubiera hecho algo de la carga ministerial dado la cantidad de cosas atrasadas que habían llegado en cuanto mi madre tomo el sillón de mi abuelo Crazy. Puse los documentos en una carpeta negra y tome el maletín que había traído desde casa. Toque dos veces la puerta tal como era mi costumbre, era el modo de avisarle a mi madre que yo era la que estaba en su puerta, y la abrí sin anunciarme. Me acerque a ella mientras la escuchaba leer cada uno de los apuntes que había anotado en la agenda, le sonreí y tomé un croassant de la pila y me serví una taza de café.

Deje la carpeta en un lado del escritorio y empece a recoger los papeles que estaban esparcidos en la mesa, la cera del sello Ministerial estaba casi volteada y el sello estaba en el suelo, lo recogí con rapidez y lo asegure en el puesto junto con las plumas. Mire los papeles que había dejado a mi madre el día anterior para que los firmara y arruge el ceño cuando uno de ellos tenia la forma de la mejilla y la comisura de los labios en vez del sello del Ministro. Tendría que cambiarlo y hacer que lo firmara de nuevo.

Tome un sorbo del café y sonreí sintiendo que mejoraba mi día con la carga de la cafeína, di un mordisquito al croassant y me quede mirando a mi madre haciendo nota mental de todo lo que decía para hacerle un reporte general. Acabe mi desayuno y abrí el maletín, lo deje en el suelo mientras metía la mano hasta el hombro dentro, el hechizo extensible que tenia el maletín me permitía traer las cosas de mi madre sin importunar a nadie en el tren de Londres. Saque primero la bolsa de la ropa que traía un traje de pantalón negra y chaqueta junto con una camisa blanca y una de las corbatas de colorines que mi madre usualmente vestía y dos pares de zapatos, unos formales de tacón pequeño que combinaban a la perfección con el traje y que hacia que resaltara de un excelente modo la corbata sin quitarle profesionalismo, el otro par de zapatos era en realidad las bambas de descanso de mi madre. Sabia que ella no iba a soportar las jornadas largas de trabajo en los tacones sin importar que tan bajos fuera de tacón, así que lo mejor era que se pusiera las bambas cuando estuviera sola en la oficina sin visitas ni citas.

Volví a meter la mano en el maletín y saque una carpa de circo pequeña de rayas rojas y blancas, de metro ochenta centímetros de altura y solo cincuenta de ancho, la puse delante de ella y espere a que ella hiciera silencio de su charla:

-Es para tus entrenamientos, es pequeña, portátil, con un hechizo extensible indefectible, esta equipada para todo lo que puedes necesitar para entrenar, tiene una tarima grande y un camarote pequeño para que dejes de dormir en el escritorio. - abrí uno de los paneles ocultos que daba a un armario que ya estaba vació, lo sabia porque había mandado a hacer la carpa con las medidas y la deje ajustada dentro del armario. Tome la bolsa de la ropa y abrí otro de los paneles ocultos que daba a un baño grande con tina y a un vestidor donde acomode la bolsa de la ropa, miré arriba y abajo y empece a pensar que prendas de mi madre iba a traer para llenar el vestidor con lo que necesitaba sin que ello significara que iba a desocupar su armario de casa. Hice una calculo estimado y me hice a la nota mental de llamar a Harpo para que solicitarle los trajes a mi madre. Deje la puerta del panel abierta porque dudaba que mi madre le hubiera quedado tiempo para explorar su oficina.

Me acerque al escritorio con el maletín y toqué un trozo de la moldura lateral que abría uno de los cajones ocultos de la parte superior, dentro había panes, dulces, tortas y delicias pequeñas que sabia que no habían sido tocados desde la época de Crazy, apunte con la varita y los hice desaparecer hasta que quedo todo prístino y limpio. Metí la mano en el cajón y saque una pequeña tetera con sus tazas y una caja de te, la tetera se llenaba de agua caliente cada vez que estaba vacía y cabía a la perfección en el cajón, también puse una caja de dulces turcos, tartas de calabaza, donuts de varios sabores, croassants y bombones todos hechos por Harpo junto con una nota de él que decía: «Espero los disfrute señora Ministra» Volví a cerrar el cajón y ajuste la moldura hasta que el cajón quedo cerrado. Mire a mi madre que tenia los ojos abiertos:

-Esta fue la oficina de mi abuelo, conozco algunos de sus secretos, recuerda que mi padre me trajo acá unas cuantas ocasiones cuando era pequeña.

Tome la carpeta negra y puse los documento firmados y sellados que mi madre había completado el día anterior, los que mandaría a los diferentes departamentos para solicitar un reporte completo de cada área, con sus respectivos reportes de accidentes laborales, monetarios, las coberturas de San mungo, y los problemas que quisieran expresar del administrador anterior y saque la nueva pila de papeles, hice a un lado la bandeja del desayuno y puse papel tras papel mientras le explicaba que era cada uno:

-Este es el memorándum para el gabinete de Economía, la señora @@Lucrezia Di Medici de Médici aun no ha confirmado su presencia pero ya se le informo a @, y a @@Nathan Weasley, junto con una representación de los duendes de Gringotts para que se presenten en horas de la tarde, la reunión quedo pactada para las dos de la tarde del día de hoy, ya pase los memorandos a los miembros del fondo con la solicitud de que estén presentes en la sala de conferencias que esta al lado del despacho. - Esperé a que mi madre firmara y sellara el memorándum y continué hablando:

-A medio día tendrás una reunión rápida, un almuerzo, con @ Y con @ antes de la reunión con los duendes y con Nathan. Estoy esperando aun confirmación del almuerzo pero aun es temprano - Alargue otro documento hacia el escritorio:

-La presidente de la Confederación magia internacional no ha contestado aun, este es una carta a la señora @@Mackenzie Malfoy solicitando que se presente a tu despacho a las 4 de la tarde para la hora del Té, así podrás tener una reunión a puerta cerrada y que ella te de su opinión sobre el restablecimiento del estatuto.

-las reuniones de la Comisión de Relación con los muggles, la Comisión de Penitenciaría para el control de Azkabán, quedaron aplazadas para mañana en horas de la mañana, le mande un memorándum a @@Matt Blackner para que nos informe sobre la reconstrucción del palacio estoy esperando respuesta. No tenemos mas información de @@Aaron Yaxley, ni del inquisidor, ni de disturbios adicionales ni dentro ni fuera del Ministerio- Alargue otro documento y le señale sobre la linea punteada con su nombre y cargo:

-Esta es la carta para @@elvis Gryffindor para que venga a visitarte, le solicite confirmación de día y hora para abrirle un hueco en tu agenda ya que el esta retirado no puedo exigirle que se presente. - espere que firmara y sellara y le alargue el ultimo documento de la lista:

-Esta es un memorándum para @@Niko Uzumaki le solicito un espacio en su agenda para que se reúna contigo, al igual que con Elvis no puedo exigirle que se presente pero estoy siendo muy enfática de que se requiere su presencia en tu despacho, tambien le pido confirmación de la hora y fecha. -Miré el reloj que tenia en la muñeca y le dije a mi madre - Tienes dos horas para que entrenes, en dos horas vuelvo a sacarte de la carpa para que vayas a ducharte y estés presentable para las reuniones del día. Necesito que te apliques maquillaje discreto, tu ropa y zapatos están en el vestuario y tienes un neceser con cosas de aseo y maquillaje en el tocador y antes de que preguntes: sí, esta tu jabón especial junto con tu shampoo y un conjunto discreto y cómodo de ropa interior ¿Hay algo mas que necesites de mi madre?

[Sean -Ojo Loco- Linmer]

Habia logrado desembarcar en el Reino Unido hacia poco. De hecho habia usado en esos dias el voto por lechuza para dar mi parecer sobre todo lo de las elecciones. Nuevos aires estaban soplando en esta parte del mundo y aunque no sabia si Sagitas pudiera llevar todo el asunto de la guerra a buen puerto, le habia dado mi voto de confianza. Y se lo habia dado a pesar de todo. Que no es que la tuviera como sacerdotiza de mi devocion. No, esa era Xell. Sobre el asunto solo habia una preocupacion, que me mandara a seguir por el tema de mis deslices de cama. O sea no me agradaba la idea de que cambiara de la ballesta fisica normal a una mas poderosa institucional. Pero para que ahogarse en un vaso de agua cuando aun no habia tormentas en el horizontes. Mejor centrarme en eso que llevaba en el bolsillo, la receta de la discordia...o bueno la de la pocion antigen.

 

Esa receta, era el producto vendible...a los mortifagos claro. Por otro lado en un frasquito habia cumplido mi palabra y le traia la cura a Sagitas. Claro soltando sus buenos galeones, sino nanay. Por suerte, aunque se demoro Alaric Woodman habia cumplido su palabra y me habia entregado lo que habia encargado. Evidentemente no le habia dicho para que era la pocion que debia traducir de la informacion muggle obtenida. Yo habia obrado de tal forma que si acaso se podria imaginar que la cuestion iba por una nueva forma de supresion de la voluntad.....a fin de cuentas el ayudante de alquimista conocia mi profesion Ministerial y la otra. Pero bueno ya ese asunto tampoco importaba pues el squib habia pasado a mejor vida....bueno me gustaria creer eso...aunque en el infierno no lo sabia exactamente.

 

Y heme aqui. Frente a la recien restablecida cede del Ministerio. Regresar despues de cierto tiempo me traia buenos recuerdos. Este realmente habia sido un gesto simbolico para todos con vista a que ya vieran que se queria regresar a la "antigua normalidad". Pero claro con variaciones. Nunca se puede regresar a la exacta situacion anterior y mas cuando mucho habia pasado. Asi baje en el elevador al subterraneo y entre por la puerta normal pasando por la fuente y tomando otro elevador. Ya ahi toque directo a la planta que recien ocupaba Sagitas. Nunca habia estado ahi...asi que esperabas sorpresa. Y asi la puerta del elevador se abrio dejando que la voz anunciara su llegada.

 

-Hola...alguien aqui..Perenela??? -avance un poco y me senti perdido.- Bueno por si me estan grabando....quiero una audiencia con la Ministra.

 

Supongo que nbo seria tan facil como llegar y pedirla y ya. De seguro habria un protocolo. Aunque con la locura de sagitas que a veces no se sabia si tenia puesta la cabeza..quien sabe. Y ahora que me lo preguntaba.....estaria Babila por aqui???...Alguien mas conocido. Porque lo de Perenela si lo habia leido en las carta de mi esposa. En fin tendria que esperar.

 

@@Perenela Arya Grindewald Potter Blue@@Sagitas Potter Blue

[Thoth]

La comisión de los países africanos encabezada por Luxure de hace presente ante el nombramiento de @@Sagitas Potter Blue , estos seres de encontraban dispuestos a negociar con la nueva ministra, ya que las relaciones internacionales con el anterior ministro no fueron las mejores. Sin embargo, el egipcio que gobernaba la comisión no tenía en agrado a la bruja, por ello, es que vistiendo su traje típico y portando en su mano Vara de Cristal con la cual se apoyaba al caminar dentro del atrio, y rodeado en su alrededor por diferentes aurores que eran parte de cada país africano. Este objeto era tan oscuro como el mago a la cual le pertenece. El cual era de un color carmesí, con grabado dorados en egipcios, en la punta poseía tres serpientes y estas se comunicaban entre sí. El núcleo de la misma era de la sangre de los padres quien la había invocado.

 

-Lord. Archimago de la Muerte. comenta la bruja de las tribus del extremo norte, las cuales eran independiente a un país.-¿Acaso considera prudente llegar ante este cambio administrativo.

 

El mago no responde y guía a la comisión por el atrio, ante casa paso era notorio el desprecio del mismo por los británicos, el ser conferido por la Unión de los Países Africanos le daba autoridad incluso mayor a su propio regente, aunque este se encontraba en desacuerdo con la mayoría de una sumisión y alianza, por lo que aquel encuentro definiría un posible conflicto o un proyecto de paz.

 

Entre los aurores se distiguian soldados de la élite de Egipto con máscara de sirvo de Anubis, otros portaban atuendos propios de sus etnias, aquellos símbolos jamás visto por un extranjeros. Además, que el color oscuro, moreno en su piel era muy común, sus melena era únicamente para las damas, los hombres en su mayoría poseían una clava.

 

-Disculpen. mencionó un aprendiz de alguno de los departamentos, ante ello las veinti ochos varitas de los integrantes del consejo y aurores apuntaron,todas menos la de Demian. El cual portando su máscara de Lord [esta era una evocación a Seth el Dios que protegía su casta.] se detiene en seco.

 

-Bajen las varitas hermanos y hermanas. Expresa el hombre lobo. -Usted debe respeto a la alta comisión de los países africanos, tenemos inmunidad diplomática e interferir en nuestros asuntos, es atentar ante la Condenación Internacional de Magos y Brujas, además por autoridad que me es conferida es de carácter urgente hablar con su nueva ministra. Y si, incluso en nuestros países conocemos la transición del poder, y deseamos ver si es momento de continuar o terminar nuestras relaciones. Sentencia y aun sus compañeros seguían apuntando. Este dando dos golpe en el piso con su Vara. -Bajen la varitas. y todos esos extranjeros obedecen.

[Xell Vladimir Potter Black]

Accidentosos:

"Apoyamos a la Nueva Ministra"!

 

El festejo de celebración había durado muy poco para mi gusto. La tía Sagitas había conseguido un puesto a la altura de sus gruñidos. La muy roñosa, protestó varias veces por el gasto de la fiesta, por las bebidas alcohólicas, por la iluminación excesiva y por el aumento de contaminación acústica. Así, empezó su mandato como Primera Ministra, refunfuñando por todo.

 

Pero toda la familia la conocíamos. Éramos conscientes que simulaba sus miedos a tan alta responsabilidad soltando pequeños bufiditos. Si lo hacía para gobernar una mansión y sus negocios, ¿cómo no iba a hacerlo dirigiendo un país? Por eso, todos íbamos a ayudarla, a pesar de su genio huraño cuando sentía que no dominaba la situación. Las primeras semanas de adecuación a su nuevo trabajo iba a probar nuestra paciencia.

 

Ni un día de pausa. Estableció la nueva sede del Ministerio en la antigua sede del Ministerio, a pesar que aún había zonas destruidas y que necesitarían un trabajo de restauración inminente. Sin embargo, para ella, lo principal era que dedicáramos nuestros esfuerzos en la puesta a punto del Palacio de la Reina Muggle para su ocupación Real en cuanto estuviera listo. Algo de política de colaboración entre las comunidades mágica y muggle.

 

Política; aburrida política.

 

Así que nos reunimos @@Matt Blackner, @@Helike R V PB, @@Hayame Snape Potter Black, @@Lisette Ryddleturn, @@Ashley Peverell y todos los que nos quisieran ayudar en aquel trabajo de limpieza de la mansión Real para su uso.

 

- ¿Por qué tenemos que arreglar este Palacio Real? - les protesté a todos. Me gustaba el mundo muggle, lo justo para saber que la Restauración del Secreto era la mejor medida para ellos. - ¿Creéis que Aaron lo ha dejado o nos guardará alguna sorpresita?

 

Lo peor de tener que restaurar el Palacio de Buckhinham era temer que cayéramos en una trampa de aquel maldito ex-ministro. Aunque era tan guapo...

[Perenela Arya Grindewald Potter Blue]

No pude esperar a que mi madre me contestara porque empezaron a llegar personas a la recepción y aunque todos eran bienvenidos al despacho Ministerial tenia que tener cierto orden de la situación o mi madre se vería acosada en todo momento, hice una mueca y le dije:

 

-Prepárate, porque este va a ser uno de esos días en los que al parecer no vas a tener muchos respiros, voy a ver quien te solicita - salí de la oficina y sonreí ampliamente cuando me di cuenta que en medio del pasillo estaba mi esposo, hacia meses que el no me veía en buenas condiciones y esperaba que el estuviera resolviendo lo del Carnicero. Me acerque a él y le bese con ganas como tenia tiempo que no lo hacia:

 

-No puedes tener simplemente una audiencia con la Ministra por mucho que sea tu suegra, hay que respetar el protocolo pero.... - le dije silenciándolo con el dedo antes de que empezara a rechistar - pero te puedo sacar un hueco en su agenda cuando acabe de desayunar amor.

 

Desafortunadamente mi estricta planeación de la Agenda Ministerial se fue al garete cuando la Comisión de Paises Africanos se presentó ante el pasillo ministerial rodeado de varios aurores de la planta, suspiré y compuse mi mejor sonrisa, le dije a Sean en voz baja:

 

-Siéntate en mi escritorio, no hagas ningún movimiento brusco, no saques la varita y por favor no entres en la oficina de mi madre si no quieres verla en paños menores - Lo ultimo era una mentira pero conociendo a mi marido era posible que aprovechara a que estuviera ocupada para colarse en la oficina Ministerial, tomé un respiro profundo y conté las caretas con el rostro del Dios Anubis y la del centro con el rostro del Dios Seth, me acerqué a la comisión, hice una reverencia propia de alguien de mi posición ante el Lord Archimago @. Aunque el Lord Archimago me sacaba una buena cabeza y media hice mi mejor postura para parecer mas alta:

 

-Bienvenido Lord Archimago - le sonreí con cordialidad, sin las muestras de coquetería que abundaban por el ministerio cuando veían alguien de su tamaño o posición - No le esperábamos, supongo por su visita y por la comisión que le acompaña que vendrá ver a la Nueva Ministra. En estos momentos ella se encuentra en una pequeña Reunión a puerta cerrada pero si gusta puede pasar acá a la Sala de Conferencias y con mucho gusto le avisare a la Ministra inmediatamente que le esta esperando.

 

Empecé a encaminarme hacia el pasillo lateral donde se divisaba la otra puerta que daba a la sala de conferencias con capacidad para unas buena 50 personas, la mesa de roble y las sillas cómodas estaban diseñadas para albergar todo el aforo de gente que llego con el Lord Archimago, asentí a los aurores que trajeron a la comisión y que desaparecieron en cuanto los dejaron en mis manos, esperé que todos estuvieran cómodos y les pregunté:

 

-¿Desean tomar algo mientras esperan? ¿Café Keniano, te ingle, rompope, whiskey de fuego, agua? - los murmullos se levantaron según las solicitudes, asentí con la cabeza y me excuse, cerré la puerta y toque la varita para activar el sello mágico, en esta planta no había protección alguna fuera del ascensor porque debían acceder con cita previa o ser escoltados pero eso no quería decir que iba a dejar que cualquiera viniera a atacar al Lord Archimago o a su gente, no si podía evitarlo y era mi deber evitarlo, sobre todo no quería que estallara otra guerra. Regrese presurosa sobre mis pasos, pase una mano sobre el hombro de Sean que estaba sentado en mi puesto y toque la puerta dos veces para entrar. Babila aun estaba en la oficina con mi madre:

 

-El Lord Archimago y la Comisión de Paises Africanos acaban de llegar, quieren una Reunión contigo, están en la sala de conferencias - sequé las manos en mi falda - límpiate el rostro que lo tienes lleno de migas de croissant, adecéntate un poco, voy a entretenerlos mientras llegas.

 

No me di el espacio de tiempo para escuchar la replica de mi madre, sino que salí de la oficina y me acerque al panel de la cocina, los elfos ya tenían un par de bandejas listas, una con una fuente grande de café Keniano con varias tazas a disposición, azúcar, miel y chocolate, otra con Pastas y diferentes tortas de Maíz, harina y dulce, apunté a ambas fuentes con la varita y me acerque a la sala de conferencias, tal como había investigado y aprendido en mis clases rápidas de protocolo internacional, a los paises africanos había que servirles a mano, los usos de la magia para las actividades domesticas estaban mal vistas y por respeto debía hacerlo. Deje la fuente en el centro de la mesa y empecé a servir las tazas junto con una sonrisa a cada miembro de la comisión. Las piernas me temblaban, cuando termine me enorgullecí de no haber derramado ni una gota de café, me dirigí al Lord:

 

-La Ministra de Magia ya esta enterada de su visita, en breve estará aquí para atenderles, me disculpo de antemano no poder tener una mejor recepción pero entenderá que nos ha cogido por sorpresa - la puerta se abrió de nuevo para revelar a mi madre en la jamba, lance un suspiro silencioso al verla arreglada, con la cara limpia y una sonrisa profesional en el rostro, le hice un guiño de modo imperceptible y abrí para ella el espacio de la cabecera de la mesa, tomé un respiro profundo:

 

-Ministra, ¿necesita que me quede con usted para tomar apuntes de esta Reunión o mejor le dejo a solas mientras atiendo al Encargado del Departamento de Accidentes que esta esperándole para darle el reporte que pidió?

 

@@Sagitas Potter Blue @@Sean -Ojo Loco- Linmer

[Thoth]

La comisión siguió a la bruja, aunque si eso era una treta de seguro lo lamentará, dado que quien los coordinaba era alguien guiado por sus impulsos y fiel partidario en secreto de @ , no obstante a voces públicas sus políticas se encontraba en resistencia al mismo, sólo por el hecho de significar un pensamiento distinto a los de Lord. Voldemort, algo que nunca perdonaría Licaón. No obstante, los integrantes de los países africanos obedecían ciegamente a Egipto que en tiempos de guerra fue el pilar de esa comunidad, el Regente en cierta forma se convirtió en el presidente de esos rumbos, a pesar, que por su archiconsejo nunca lo tomó y en su lugar, encomendó ese cargo a su cuñado, aquel no ambiciona el poder.

 

-Al parecer debemos esperar mi Lord.

 

Comentó uno de aquellos aurores, los cuales fueron parte en la defensa del Inquisidor en el hospital donde secuestraron a los infantes. En eso tomó la palabra la bruja que su cabellera poseía algunas canas, su cuerpo semi desnudo y un amuleto trivial colgando de su cuello. Al tocar el mismo, pudo hablar el idioma de los ingleses.

 

-No hemos venido por alguna clase de bebida, comida, esto es considerado una ofensa, le suplicamos que no haga perder nuestro tiempo, en cosas vanales. El tiempo es un hecho en esta tierra, la naturaleza marca el de nosotros, por ella y nuestra gente hemos venido, los espíritus que ronda este lugar reclaman justicia, y a su nombre venimos.- Y realizó puasa, la dama clavo mirada en ese ser que le atendió (@Paranela Araya Gryndelwald Potter Blue). Y por parte, el alto comisionado de relaciones exteriores postró mirada en el Archimago de la Muerte, al verle sostener con fuerza su Vara de Cristal. -Creo que es momento de la ceremonia.- En eso tomó la palabra Luxure.

 

-Si nos disculpa, deseamos privacidad. Quizás, ese tiempo que su Ministra pueda atendernos, así podamos hablar sobre el futuro de nuestros países, aunque, si consideramos prudente un momento alejado de toda intromisión.- y dando dos golpes de su objeto mágico, se crea una esfera de luz. -Notifica a los demás que hemos llegado, que pronto sabremos que desicion tomar al respecto. en ello el haz de luz se marcha en dirección de @@Kraven Von Alexandros y @Lady Luxure Gryndelwald , de igual forma otro aviso sin mención le llegó a @ , a este le indicaba que @@Sagitas Potter Blue, se encontraba reunida en el Ministerio de Magia y Hechicería, y que ya había asumido sus funciones, en donde su país y el resto de los países africanos al fin tomaría parte del futuro del mundo, que sus aliados y protegidos de los Arcanos debería de cierta manera limitarse actuar en los futuros problemas bélicos en caso que no desearan apoyar al país que lo acogió, desde que fueron expulsados por @@Mackenzie Malfoy y @@Crazy Malfoy de su país. Y que todo trató con los británicos debería quedar anulado.

Editado 19 de Septiembre del 2020 por Demian Luxure

[Sagitas E. Potter Blue]

 

La entrada de Perenela me sorprendió con los pies en la mesa y la vi entrar, bien elegante. Me miré yo y gruñí. O me cambiaba o parecería una pordiosera, comparada con ella. ¿Por qué el protocolo dictaminaba también el vestir?

 

-- Se dice "Hola", hija.

 

Iba a seguir gruñendo cuando la vi sacar una tienda de campaña de lujo, colorida como la carpa del circo. Me senté y giré el sillón hacia ella, apoyándome en la punta de los pies, con la expectativa de una chiquilla que está esperando que le den permiso para abrir el regalo que le habían dejado bajo el árbol de Navidad. Estaba impaciente y ella no dejaba de hablar. Ni que abriera puertas y descubrir un baño interior, un armario ropero, un escondite de dulces y más sorpresa, consiguieron que apartara la mirada de aquella carpa de circo que lucía hermosísima en la esquina de la derecha de mi mesa de Ministrosa, al menos hasta que nombró al anterior ministro del anterior ministro.

 

-- ¡Nieta de Crazy, las narices! -- Nunca me había gustado que ella se vanagloriara de ello pero sabía que le estaba haciendo un feo, porque ella adoraba a su padre a pesar de que ya no estuviera con nosotros. -- Oye, no digas mucho por ahí que eres una hija directa de un Grindelwalt. No me gustaría que me relacionasen con ese apellido. Para nada tengo que ver con la ideología política de su persona y que ahora parece heredar Aaron Yaxley. Pronto tendré que ocuparme de él y de sus seguidores.

 

Pocas veces me ponía seria con ella pero aquello era muy importante para mí, sobre todo ahora que me había metido a payasa política, que no política payasa. Quería fraguarme una reputación sin más manchas que la de mi maquillaje cirquense. Después, se me olvidó para extasiarme de nuevo con mi carpa de circo en el despacho. Me puse a cuatro patas y caminé haci la entrada de la carpa, haciendo caso omiso de la perorata de Perenela y del comilón de Babila. Entré, feliz, soltando "¡aaaaah!" y "¡oooooh!", intercalándolos con acertados "ajá", "sí, Pere". Me dejaba allá dentro y no lo iba a desaprovechar. Y no digo como disfruté como loca allá dentro hasta que sentí la voz de mi hija. Asomé la cabeza por la entrada de la tienda.

 

-- ¿Ya han pasado dos horas seguro? -- utilicé un tono mezcla de súplica y pena, el mismo que usaba Ithilion cuando me pedía cinco minutos más antes de meterse en la cama. Pero mi rostro se puso serio en cuanto la escuché. -- Lord Archimago y la Comisión de Países Africanos; oído cocina.

 

No puedo decir cuánto tardé ni cómo llegué a la sala de reuniones pero llegué a tiempo tras el baño y el cambio de ropa. Traje pantalón negro (¡puaj!) y camisa blanca, parecía un entierramuertos. Menos mal que mi corbata era multicolor o parecería una plañidera.

 

-- ¿Al encargado de Accidentes? -- Por un momento, fruncí el ceño. Me había fijado en que estaba Sean a la puerta de mi despacho pero... -- ¡Oh! ¡Ah! Claro...

 

No añadí nada de momento porque hablaba el Lord Archimago y no me gustaba su tono. ¿Hasta qué punto podía romper las relaciones con un país (un grupo de países, en realidad) porque no me gustaba cómo le habían hablado a mi hija? ¡Demonios parlantes, no me gustaba esta faceta de ser Ministra! La Diplomacia no era muy fuerte.

 

-- La Ministra ya ha llegado, pero si necesitan un momento a solas para parlamentar entre ustedes, puedo quedarme a esperar fuera.

 

Por supuesto, no lo hice, me apoyé en el marco de la puerta con el hombro y crucé la pierna y los brazos, en un gesto de espera.

 

-- No te necesitaré, cariño. Mi vuela pluma se encargará de copiar todo en acta para que después lo transcriban los administrativos, todo bajo tu supervisión para que filtres lo justo y necesario.

 

Y esperé a que me dejaran entrar en MI sala de conferencias, con cara de pocos amigos. Creo que necesito un experto en Diplomacia. ¿Tendríamos a alguien así en cartera dentro del Ministerio?

[Thoth]

El atuendo de la ministra de Magia y Hechicería británico sorprendió a la comisión de países africanos, ellos nunca habían visto alguien con ese atuendo, incluso sus miradas se posteraron ante ella, iquisidoras y curiosas ¿que clase de cobarbata era esa? ¿Acaso eso era una broma? ¿Esto era una burla? Sin embargo, Luxure conocía a la bruja, ya antes se había topado con la misma, ella conocía bien al Archimago de la Muerte, pero no fue quien habló primero sino la bruja de algunas canas, aquella que sostenía aún su amuleto trivial.

 

-Es mejor comenzar lo inevitable, si bien hemos sido ofendidos. observa a la persona quien les atendió.-por el bien de la naturaleza y los espíritus podemos hacer caso omiso, que sean ellos nuestros guías en este camino. Y así, considera. Clava la mirada en el egipcio. Y este con mirada baja no pronuncia palabra. En su lugar toma la palabra otro mago. Un hombre de piel oscura y corpulento, con una varita en su mano, y lanza trivial en la otra, en su nariz era penetrada por un hueso y sus orejas colgaban dos argollas de hueso. -Es de suponer que podrá dar explicaciones sobre los hechos ocurridos a raíz del rompimiento del Estatuto del Secreto de la Magia, además de como la Orden del Fénix tiene retenido a los hijos de nuestros países, para nadie es secreto que el gobierno estadounidense apoya a ese grupo criminal, y es de nuestro interés que esos actos clandestinos sean Eliminado de raíz. Y de igual forma, conocemos que ese grupillo de la Marca Tenebrosa surge, y tiene sus fieles en este país, por lo que es hora que su país responda por estos y otros crímenes.

 

El Archimago de la Muerte interrumpe a su homólogo. -Si bien este país tiene un mal, no creo que la Sta. Potter Blue deba responder por las acciones del ministro saliente. y se acerca a ella. -Sin embargo, el mal financiero que acoge en su banco, es un detalle que no escapa a los oídos de nuestros países, incluso consideramos brindar el apoyo, claro, sólo si la administración cambia, creemos en el manejo de los Di Medecci, en manos de @@Lucrezia Di Medici Di Medicci sería un cambio favorable y heroico ante la corrupción dejada por el antiguo mandato saliente.

 

En ese momento el más pequeño de la comisión interrumpe. -Aunque, no con ello deseamos interferir en su mandato, comprendemos que la inexperiencia ante temas delicados no podrá dar respuesta, por ello consideramos importante su vinculación ante ciertos partidos que ya están en su contra, ya podrá dislumbrar que se encuentra en medio de aliados y enemigos, aunque todo lo que hemos expresado seguro ya andará solucionando. este toma silencio y toma de nuevo la palabra el egipcio.

 

-Y habiendo todo nuestras incertidumbres Sra.Ministra Potter Blue ¿Cuáles son las acciones para detener al Inquisidor? Dado que este posee alianza en el mundo magico, y no tenemos duda alguna que su simpatía con esos seres sin magia es algo peligroso, incluso perjudica la tradición.

 

Finaliza y toma la palabra el de asuntos internacionales.

 

-hermanos y hermanas, recordemos que fuimos ofendidos por los británicos, que en el gobierno de los Malfoy secuestraron y dobluegaron a los Uzza, tras un contrato que viola todo acuerdo internacional y fue gracia a Egipto que regresaron a nuestra tierra, así como los Arcanos a otro país. Y el siguiente gobierno trae caos ¿por qué confiar en este gobierno? Sra. Ministra su país no anwa en buen término y lo alegado por los integrantes de la comisión señalan entre otros muchos más, motivos para suprimir todo contacto de alianza. Hace pausa. -¿Por qué debemos confiar en quienes traen muerte, caos y ante ta contra los espíritus y la madre Tierra?-

 

Se produjo un silencio y los magos extranjeros se encontraba aún ofendido por ese pueblo inglés, algo en ellos les hacía desconfiar, además sus mentes se encontraban envenadas po los planes del Regente y su cuñado, quienes eran mirados por todos los países africanos como héroes, salvadores de esos dementes británicos.

[Perenela Arya Grindewald Potter Blue]

¡Al cuerno del Demonio con el protocolo! Esperaba que mi madre le enseñara modales al Lord Archimago. Odiaba la gente prepotente y sobrada que pensaba que podían hablarle a uno del modo en que se le daba la gana solo por que ostentan un cargo. Respiré lentamente y me envaré mirando fijamente al Lord Archimago con su mascara del Dios Seth, puse mi rostro lo mas inexpresivo posible y rogué a todos los Dioses que mi madre mandara al cuerno el protocolo y le dijera como era que debia tratar a las personas tanto al Lord como a su comisión. Asentí hacia mi madre y le di una sonrisa gemela a que ella ostentaba en su rostro:

 

-Esta bien señora Ministra, estaré en mi oficina arreglando sus otros pendientes - Aunque éramos madre e hija habíamos acordado que nos trataríamos del modo mas profesional posible en estas instalaciones y cuando no hubiera nadie de la familia, salí presurosa de la sala de conferencias y no pude refrenarme en el pasillo:

 

-¡Protocolo, mis calzones! Ese... ese.... ese Lord y su grupo de Maniáticos va a tener que aprender buenos modales - lo estaba viendo todo rojo por la ira, llegué a mi oficina y sonreí del modo mas alegre al ver a mi marido aun esperando - Sean, Amor, espérame tengo una cosita mas que hacer.

 

Me encaminé hacia el ascensor y moví una de las placas de madera para que quedara enfrente de la puerta del ascensor, tomé mi varita y agrande la misma hasta que quedara lo mas visible posible y escribí unas pocas palabras en el. Esperaba que mi madre no se enojara por usar su cargo pero de seguro me lo agradecería:

 

Sacudí las manos y sonreí mientras volvía a mi puesto y miraba a mi esposo que seguía esperando en mi escritorio, me incline sobre el y le di un beso discreto antes de tomar la agenda que llevaba para mi madre:

 

-¿Tienes alguna idea de como van las reparaciones del Castillo, cielo? o has tenido noticias de @@Matt Blackner, @@Helike R V PB, @@Hayame Snape Potter Black, @@Lisette Ryddleturn, @Ashley Peverel o de @@Xell Vladimir Potter Black, les mande un memorandum pidiendo actualizaciones y no me han dado ninguna y mi madre anda preguntando. Esperemos que les vaya mejor de lo que me esta yendo a mi lidiando con Lores y majestades - dije con un punto de ironía y poniendo los ojos en blanco