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Alecsa Atkins

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Alecsa Atkins ganó por última vez el día 19 Febrero 2015

¡Alecsa Atkins tenía el contenido más querido!

Acerca de Alecsa Atkins

  • Cumpleaños 23/01/1992

Ficha de Personaje

  • Nivel Mágico
    3
  • Rango Social
    Unicornios de Plata
  • Galeones
    33007
  • Ficha de Personaje
  • Bóveda
  • Bóveda Trastero
  • Bando
    Neutral
  • Familia
    Rambaldi
  • Trabajo
    0
  • Raza
    Vampira
  • Graduación
    Graduado
  • Puntos de Poder en Objetos
    20
  • Puntos de Poder en Criaturas
    20
  • Puntos de Fabricación
    0
  • Rango de Objetos
    10 a 200
  • Rango de Criaturas
    10 a 200
  • Conocimientos
    -Leyes Mágicas
    -Conocimiento de Maldiciones
    -Pociones (Conocimiento Adquirido)
  • Medallas
    0

Profile Information

  • Género
    Female

Contact Methods

  • Website URL
    https://www.facebook.com/profile.php?id=100006448308204
  • Skype
    Alecsa.aster

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Reputación

  1. Una carta cayó en manos de Andrew antes que se fuera de aquel lugar. Aquella letra era totalmente reconocible, como tambien el papel arrugado, casi destruido entre arrugadas y lagrimas. Las letras se distinguian, por lo menos el mensaje central, era dificil diferenciar parte del mensaje con manchas y cosas asi. Su letra pulcra estaba grabada en aquella hoja, una letra escrita con furia, el lapiz incluso había sido roto al escribirla. -Creo que tus promesas no valen. Prometiste no hacerme daño y nadie me había hecho tanto daño en toda mi vida como tu en una sola noche, ni siquiera el hombre que me hizo tanto daño, aquel que casi me asesina, pero que logro asesinar al bebe que llevaba en mi vientre. No se como es posible pasar de decir "te amo" a decir "te odio" en unas horas, pero asi es. ME destruiste Andrew y esto no te lo perdonare. Ni a ti, ni a Isabella y menos a quien supuestamente es mi hermana, aquella con la que casi te acuestas, Cirse. Hasta nunca Potter. A.A.R. En cuanto termina de leer la carta, esta se quema, desapareciendo.
  2. Hola vengo a pedir mi cambio de nick *-* algo que esperaba hace mucho mucho y que al fin gane *-* soy feliiiiizzzzz ahora aqui dejo la ficha o cita o como se llama *se hiperventila*
  3. Hola!! me he dado cuenta que roleare mucho en este negocio por el simple hecho de que me encantan los libros y rolear en un lugar asi me fascina, por lo que vengo a inscribirme como afiliada espero me acepten. Aqui dejo los links ^^ Ficha Bóveda
  4. Asintió ante su afirmación de que debía retirarse, ya que recién en ese momento recordó que ella también tenía asuntos serios que solucionar. Se sorprendió por el beso en la mejilla y le respondió con una sonrisa. -Un placer haber compartido contigo Andrew –asintió y bajo su mirada a su vaso, acabando su jugo, cuando noto nuevamente que el regresaba. Sonrió ante su afirmación y asintió- Misuto To Yami es mi local, lo inauguraré hoy, por si quieres pasarte. Te atenderé personalmente –Agregó colocándose ella de pie ahora y besando su mejilla- Iré a pagar nuestros pedidos, nos vemos mas tarde –terminando asi su conversación se alejó en dirección donde estaba Leto. - Leto, disculpándome esta vez por mi actitud, espero aceptes la paga de lo consumido por el joven y por mi en este rato y te pido que le des las gracias a Tommy también, incluyéndote por el buen servicio recibido, no es culpa suya que yo sea una impaciente, igual que el joven Potter –hablo con suavidad al elfo.
  5. Respondió a la sonrisa y luego negó con suavidad ante aquellas afirmaciones que comenzó a realizar. Estaba intrigada con aquel joven, una intriga que le agradaba, una ternura extraña, parecida a ella, una intriga que la ponía nerviosa, que le agradaba y no quería dejar de sentir. Escuchó su afirmación, aquella que quedo a medias y suspiró al momento que de reojo fijaba su mirada en la de el. - No es por la familiaridad del lugar… es por…la respuesta a lo que piensas es si, por la misma razón… que creo es tu rubor –sus palabras eran como un secreto a voces, que llegaban a los oídos de el como una caricia. Asintió ante su afirmación y pensó unos segundos para luego sonreír tierna. - Si quieres puedo ayudarte a recorrer el lugar, asi buscamos juntos. Y si no, vamos a otra librería –no quería que acabara el tiempo a su lado, por eso se había ofrecido a aquello.
  6. Asintió a pesar de la carcajada que el liberaba, aunque entendía su reacción, ya que si a ella la llegaban a llamar así también reaccionaría de la misma manera. Se sorprendió ante su pregunta, más cuando sintió su mano en su frente, notando sus mejillas arder por un leve pero sincero rubor. Este aumentó ante el comentario sobre su piel. “¿Piel suave? Nadie me había dicho algo así… es raro esto” - No tengo fiebre –susurró alejándose un poco – Es solo… un ligero rubor, nada mas – al decir aquello bajo la mirada. Tomó su vaso de jugo y notó como su mano temblaba suavemente, por lo que bajó nuevamente el vaso y suspiró. Agradeció al escuchar su pregunta, intentando pensar en otra cosa. - Nada en especial, unos sobre encantamientos y una novela que me gusta –susurró mirándole- ¿Y tu llevaras algo?
  7. Una suave risa escapó de sus labios al escuchar la broma que él decía, asintiendo suave mientras suspiraba suave. ¿Qué le estaba pasando? Ella no era así desde hace ya mucho tiempo, pero ahora un nerviosismo raro se apoderaba de su cuerpo. Notó como el apartaba su mano cuando el elfo llegó con el jugo. Alejó la suya secándola un poco ya que el sudor comenzaba a bañar su mano. Se sorprendió ante el cambiar de Andrew con el elfo, quedándose ligeramente estática. Bajó la mirada hacia su jugo y la mantuvo ahí firme. ¿Qué estaba sucediendo? Esto de verdad comenzaba a asustarla, pero era un susto que le gustaba. Notó la respuesta del elfo, siempre con educación antes que este se retirara, pero mantenía su vista fija en su vaso, cuando una dulce sonrisa apareció en su rostro. - Aquello fue muy tierno Andrew –susurró sin moverse – De verdad fue algo… Aunque es extraño que yo lo diga, fue algo encantador – su voz era un susurro suave, para que solo el escuchara, ya que era la única persona a la que le importaba en ese instante.
  8. Soltó una leve risa al notar que no era la única con el nerviosismo a flor de piel. Asintió ante sus agradecimientos, sintiéndose totalmente entregada, fuera de su zona normal de comodidad, pero sentía que con él no tenía que fingir ni nada. Acabó su café mientras escuchaba sus palabras y notaba un ligero tono de tristeza, aquel tono que ella también ocupaba al recordar su pasado. En un ligero gesto muy raro en ella, pero que le nació estiró su mano en la mesa y tomo la de él, dándole a entender que lo que él decía era exactamente lo que ella pensaba. -La vida, con grandes golpes y dolores nos muestra cómo debemos sobrellevarla. A veces nos toca ser más dulces, otras, como es mi caso, y creo también un poco el tuyo, nos enseñó a enfrentarla con máscaras, ocultándonos tras diversas fachadas - Aquellas palabras no eran solo por decirlas, al contrario, eran palabras salidas de lo más hondo de su corazón Se mantuvo así mientras tomaba un bocadillo, notando como el también acababa su café y llamaba al elfo. Agradecía aquella reunión se extendiera, ya que quería saber mas de el, o simplemente pasar mas tiempo en su compañía, que era algo la reconfortaba. - Tambien necesito algo mas para beber, comienzo a pensar que estos elfos necesitan cierto entrenamiento de atención al cliente –aquel comentario fue dicho en voz alta, pero no con la frialdad del inicio, al contrario, fue dicho en un todo de broma, algo también muy extraño en ella, sobre todo teniendo en cuenta que aun no soltaba la mano de el.
  9. Asintió cuando él le dijo su motivo de estar en aquel lugar. Sonrió suave al recordar su tiempo en la academia, un periodo en el que su vida era distinta, en que ella no necesitaba el corazón de piedra, el último periodo donde existió Niqqui, luego, apareció Alecsa. Notaba la mirada de el fija en ella, por lo que volvió a mirarle fijamente, notando como volvía a ese estado de trance. Se sorprendió cuando el volvió a hablar, disculpándose y acotando que no veía motivos de no querer hablar con ella. Rió suave al escuchar lo de que sabía leer. ¿Debía tomar eso como un cumplido? Se respondió sola cuando siguió escuchando lo que él decía, pero su respiración se detuvo al momento de escuchar lo último. Ahora el sonrojo era mucho más notorio en sus mejillas, más aún cuando bajo su mirada y comenzó a jugar con sus manos, tal cual hacía cuando estaba nerviosa y cohibida en tiempos de antaño. -Yo… – no sabía que decir, sus nervios provocaban un temblor en su voz, lo que la hacía ver como una quinceañera cualquiera – Yo… gracias. Tu… Tú también eres muy atractivo – en ese momento se detuvo de golpe, aquellas palabras habían salido sin pensarlas de su boca, pero era lo que pensaba. Aquel chico de ojos verdes y piel pálida era muy guapo para ella, y era el único que en el último tiempo había logrado hacerla volver a sentir algo más que frialdad. Tomo su café y bebió un poco mas intentando no expresar su vergüenza, pero era inevitable, el sonrojo estaba asentado en todo su rostro. - Y la razón por la… que la gente no quiere hablar conmigo es por mi frialdad, un corazón de piedra que cree porque no quiero hacer daño… y no quiero que me hagan daño – nunca había hablado con alguien sobre eso, pero el le brindaba la confianza necesaria para hacerlo, aún recién conociéndolo – ¿En que casa de la academia estas? - preguntó intentando cambiar de tema.
  10. En cuanto sintió la mano de el sujetando su brazo se giró para mirarle a los ojos. Aquel gesto en cualquier otro momento hubiese hecho que lanzara una maldición imperdonable a quien fuera que se atreviese a tocarla, pero en aquel momento su estado no era dentro del corazón de piedra y simplemente se quedó estatica. Escuchó sus palabras y suspiró bajando levemente la mirada, asintiendo para que le supiera que entendía lo que el decía. Soltó una suave risa, algo raro en ella, al escuchar el comentario del servicio y se sorprendió aún mas cuando el chico tomo su mano. Volvió a acomodarse en su asiento y fijó su mirada en la taza frente a ella. Notaba sus mejillas arder y sabía el lo notaría, lo que no sabía era porque se sonrojaba. - Tranquilo, todos hemos sido nuevos en este lugar y entiendo seas reservado, no quiero me cuentes toda tu vida, simplemente que haces, y principalmente porque quieres compartir tiempo con alguien como yo –sus palabras eran sinceras y al momento de mencionar lo último fijo su mirada en el, notando también un sonrojo en sus mejillas – Digamos es raro alguien quiera estar cerca mio, solo eso
  11. Alzó la ceja al escuchar la nula información que él le entregaba sobre su persona. Suspiró y negando bajo la mirada. Volvía a equivocarse ¿acaso su vida era tan miserable que todo lo que hacía o decía solo acababa decepcionándola? Cruzó sus brazos y se removió en el asiento al momento que el elfo entregaba su orden de bebida. Le miro y escuchó y sorprendiéndose incluso a si misma le sonrió suavemente en forma de agradecimiento. Tomó su taza y bebió un poco de café al tiempo que Tommy llegaba con su pedido. Revisó los libros y volvió a sonreir de tal manera que solo el elfo le viera, aprovechando esa simple sonrisa para disculpase por su actitud anterior. -Gracias Tommy, esta perfecto - agregó mientras le pasaba el dinero de los libros y de lo que estaban consumiendo ella y Andrew – Y hazle llegar esto a Leto, es el valor de nuestro consumo. Se fue rápido por lo que no pude entregárselo –su voz era mas suave mientras tomaba uno de los dulces que le habían ofrecido y lo llevaba a su boca. Con cuidado guardo sus libros en su bolso y volvió su vista a su acompañante. -Si no quieres darme a conocer ningún otro detalle de tu vida no te preocupes, es mejor así porque cualquiera que se acerca a mi termina estando en… peligro –lo último lo dijo en un susurro. Suspiró y se levanto – Lamento incomodarte. Fue un gusto conocerte y tranquilo, no volveras a saber de mi –lo último lo dijo en un tono bajo, un tanto… triste, desconcertante – Un gusto
  12. La conocía a la perfección y sabía que aquello no ayudaría para su amistad. Suspiró al ver que se alejaba y ella también se levanto, alejándose en dirección al otro lado de la habitación apoyándose en una muralla, bajando su mirada para que Eto no la viese. Respiraba agitada, agradeciendo su blusa fuese un poco mas ancha y no se notara. Estaba agitada, y su sangre comenzaba a hervir. Cerró sus ojos e intento calmarse, lográndolo levemente cuando volvió a escuchar la voz de su acompañante. No alzó la mirada, solo se mantuvo en la misma posición al tiempo que comenzaba a hablar. -Han pasado muchas cosas desde nuestro último encuentro. El saber que mis padres biológicos no eran quienes creía y que Leah era mi madre fue un golpe extraño, más por la relación que llevábamos, la muerte de… de mi hijo, mi transformación ha empeorado, mi vida es un desastre. Por eso mantengo a todos alejados, así no les hago daño, así no me hacen daño. Prefiero ser una sombra más –susurró aceptando que tenía razón en su segunda afirmación. Las cosas habían cambiado en pocos minutos, pero no quería involucrarse en un lugar donde simplemente no pertenecía, mientras mas lejos estuviese… mejor.
  13. Debía admitir que esa situación la tenía un poco descolocada, hace mucho no se sentía fuera del corazón de piedra, y era algo que de verdad la ponía fuera de lugar. Iba a sentarse para lograr pensar un poco cuando Andrew se adelanto y le alejo la silla. Se quedó unos instantes estatica mirando aquel actuar, no porque le molestara, si no porque hace mucho tiempo alguien no hacia pequeños detalles como aquellos por ella. Negó de manera imperceptible y se sentó con ayuda de el. -Gracias –susurró mientras acomodaba su chaqueta en el respaldo de la silla y cruzaba sus piernas acomodándose, esperando que su acompañante también lo hiciera. Sin que el lo notara, comenzó a analizarle como acostumbraba, observándole de pies a cabeza, notando ciertos detalles que llamaban su atención, provocando una ligera sonrisa ladeada en su rostro. Aunque no mentiría, lo más atractivo de aquel chico eran sus ojos, aquellos que en ese instante volvían a estar fijos en los de ella. Escuchó su pregunta y se recostó en el respaldo, analizando la forma de comentarle, pero sin exponerse mucho, aún tenía cierto temor y recelo. - Digamos que hace meses no me paseaba por estos lugares –susurró aún mirándole- Una serie de… eventos me han tenido alejada del mundo –al decir eso una mueca entre disgusto, dolor y rabia se apodero de su rostro, pero la cambió de inmediato- Pero ya estoy de regreso y conociendo a alguien… interesante –aquellas fueron sus palabras mientras alejaba su vista en dirección a aquel lugar – ¿Tu que me cuentas de ti Andrew?
  14. Su mirada seguía oscura mientras la escuchaba. Sentir su mano en la propia la hizo temblar, ya no era aquella mano que la apoyo desde que se conocían, aquella que en una ocasión que nunca olvidará llegó a acariciarla, ya no brindaba calor, pero no repararía en eso, a pesar de que su textura fuera diferente, pertenecía a su amiga, por lo que con cariño la tomo entre la suya y comenzó a acariciarla con delicadeza con el pulgar. Intentaba descifrar el mensaje que las palabras de la Ravenclaw escondían, pero antes que pudiera hacerlo ella se lo dio a conocer al momento que alejó su mano. Un temblor la recorrió cuando la hizo recordar que ahora era una Atkins. Suspiro pero no alejó la mirada, la mantuvo observando cada uno de sus movimientos, de sus gestos. Iba a responder cuando aquella pregunta llegó a sus oídos. Sus músculos se tensaron completamente, pero logró disimularlo lo mejor que pudo. Ahora entendía todo y lo peor era aquella sensación de…. ¿dolor? Sí, eso era lo que sentía. En cuanto escucho el nombre de su madre alejó la mirada de su amiga y la fijo en la mesa con las cosas para comer, aunque su apetito había desaparecido. - Soy su hija y no sé nada de ella desde que regresé de mi…. Viaje –una mueca se formó en su rostro y no se molestó en ocultarla. Sabía que el saber que era hija de Leah le causaría un impacto a Eto, pero no tal impacto como el que ella sentía en ese momento – Regresé hace casi un mes y he estado encerrada en mi habitación que todos creen abandonada, creo que nadie de mi... familia sabe que regrese . Se notaba en su voz la rabia que sentía, pero no era con Leah, no era con Eto, no era con los Atkins, era consigo misma. Cerró los ojos y empuñó sus manos apoyada en el sillón, para luego cruzarlas en su pecho, alejándolas del alcance de su amiga. - Si supiera algo te lo diría, pero eres la primera persona de la que se algo desde mi regreso Eto –susurró volviendo a abrir sus ojos- Siento no serte útil en ese aspecto amiga
  15. Su mirada color miel en ese entonces estaba fija en los ojos verdes de su ahora acompañante. Entrecerró los ojos al momento que sintió un leve sentimiento de… ¿Vergüenza? Ya no sabía cómo llamarle, ya que desde hace algún tiempo su corazón solo sentía crueldad, frialdad, dolor. Escuchó atenta las palabras del joven que se había presentado como Andrew y respondió a la presentación con un leve asentimiento de cabeza, sin apartar la mirada de él. - Me gustaría un café, simple. Y que revises nuestros pedidos en cuanto puedas mientras buscamos un lugar donde esperar - su voz era mas suave, ya que su frialdad estaba… ¿apagándose? Negó levemente intentando salir de aquella hipnosis en la que estaba envuelta con el chico y alejo la mirada en dirección a donde podrían sentarse. No conocía bien el lugar, por lo que tendrían que buscar. Suspiró y miro de reojo a su acompañante para no volver a quedarse en ese estado de trance. - Busquemos un lugar donde conversar –su voz era como un susurro mientras intentaba volver al estado de corazón de piedra como ella le llamaba, aquel en el que no permitía que nadie le hiciese daño – Y esperamos que Tommy nos lleve nuestro pedido Se giró mientras se quitaba su gabardina dejando al descubierto su blusa roja y sus jeans negros y empezó a encaminarse hacia unos asientos vacíos que había divisado, mientras su andar provocaba que su cabello se moviera en un vaivén ya acostumbrado para ella.

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