Castillo Gaunt • (MM B: 102403)

[Mery Gaunt Karkarov]

Aquel momento debía de llegar en algún momento, y no es que quisiera evitar a su familia, simplemente quería evitar gritos, regañinas y la vuelta a responsabilidades que nunca había decidido tener en su vida, aunque tampoco debía haber cargado a su madre Anne con ellas. Miraba de lejos el castillo Gaunt, con añoranza y ternura, se había criado allí y aunque quisiera huir a veces de todo siempre acababa volviendo a su hogar de origen.

 

Se puso la capucha de su túnica verde y caminó con velocidad para adentrarse en el jardín principal. Miró a un lado, a otro, la puerta de entrada, los árboles, ventanas... Y se acordó del último incidente que vivió allí con el maldito dragón y su difunta oveja. Soltó una carcajada demasiado sonora que tapó con la mayor rapidez con sus manos. Ya estaba haciéndose ver con sus ruidos.

 

- ¿Y ahora qué? -preguntó para si misma mientras colocaba sus brazos en jarra y torcía el morro, entonces recordó que cuando era pequeña jugaba a escalar árboles y esconderse allí hasta que escuchaba a los elfos llamarla con desesperación.

 

Caminó rodeando el castillo, si no había pasado nada en su ausencia, debería de encontrar el árbol perfecto, ese en el que jugaba siempre con su difunto amigo. Suspiró con pena y lo divisó a unos 100 metros de ella y en menos de dos pestañeos de un muggle, estaba en el rama más alta que podía sostenerla.

 

- ¿Cuanto tardarán en notar mi presencia? -comentó en su mente mientras admiraba las vistas de aquel magnifico edifico.

[Thoth]

El nigromante aparece en las cercanias de aquella antigua residencia de los Gaunt, este mago le conocía bien y tenia curiosidad sobre el devenir de cierto vampiro. Sin embargo, algunas circunstancias habían cambiando y eso era algo que sin duda alguna debería tener siempre en mente, a pesar que sus instintos le pudieran traicionar. En ese momento se detuvo al contemplar aquél castillo. 

 

"Quizás no éste. "

 

Suspiró y comenzo a caminar rumbo aquélla residencia, sus pasos eran lentos y seguros, sosteniendo su varita en mano, la cual apretaba con fuerza y de los nervios provocaba que caiga nieve a su entorno, dejando esos copos de nieve a su paso. Y cuando, llega al fin al territorio comienza a respirar hondamente, percibiendo ese aroma ¿Acaso será posible que siga con vida él? Y fue así que se desconcerto. 

 

-Es imposible. -

 

Murmuro y nego con la cabeza, prosiguió su caminata rumbo a las puertas de ese castillo, en cada centímetros que avanzaba umos viejos recuerdos agradable paso por su mente, fue allí que una sonrisa se le dibujo, asi como se le sonrojara un poco el rostro. Este esperaba ver otra vez esa mirada, pero era extraña esa sensación que sentía y más con alguien en su actual situación, pero seguro no era posible que le volvería a ver y si pasaba ¿Qué ocurriría?

 

-¿Hay alguien? -

 

Cuestiona y toca la puerta, esperando la respuesta de algún Gaunt.

@ Emmet Haughton Gaunt

[Emmet Haughton Gaunt]

El retorno del vampiro, luego de sus extensas vacaciones, no había pasado desapercibido pero no deseaba cruzarse con nadie hasta poder organizar sus asuntos y poner todo en pie nuevamente; la última vez desapareció sin dejar rastro alguno pero ahora no podía volver a dejar todo.

Apareció en el extenso jardín de la mansión Gaunt. Una brisa de aire puro y frío ingresó por sus orificios nasalas inundando todo su sistema respiratorio.

- Ahhhhhh ....

Soltó ese aire sintiendo una leve calma que se apoderaba de todo su cuerpo. Sus ojos daban vueltas recorriendo todo el terreno del castillo como si fuera la primera vez que contemplaba ese paisaje . Siempre fue de su agrado estar en dichos jardines, cuidando de sus plantas y criaturas mágicas que, por cierto, adquirió muchas desde que había empezado a trabajar en el concilio como empleado y luego en el puesto de director. Aquello era algo que siempre recordaba; uno de sus mejores empleos.

Inspeccionó rápidamente su invernadero y las diferentes instalaciones de sus criaturas, todo estaba en orden, cuidado y limpio tal y como se los había encargado a sus elfos domésticos.

- Shave ... Anko.

Emmet llamó a su elfo personal y a otro del castillo. Ambas criaturas se materializaron frente a él, haciendo una reverencia y comunicándole que se alegraban de verlo.

- Espero que todo haya estado en orden y no hayan desatendido a mis plantas y criaturas - dijo con la mirada fija en ellos. Ambos agacharon la cabeza pero no era un regaño - Por lo que he visto así lo han hecho asique ... muchas gracias.

Si, si algo había aprendido en esas vacaciones, era respetar a los elfos como a cualquier criatura mágica. Le había costado pero vio muchas de las injusticias por las que pasaban.

- Shave, quiero que me prepares un baño como los que a mi me gustan.

El elfo obedeció y desapareció.

- Anko, necesito que ordenes mi estudio y habitación - indicaba mientras ingresaban al castillo por la puerta trasera - y, cuando termines, quiero que vayas al Callejón Diagon a ver como está mi local ... por favor - se detuvo.

El pequeño asintió con su cabeza y desapareció.

Justo cuando se disponía a ir a corroborar si su baño ya estaba preparado cuando, en ese mismo instante y al mismo tiempo, una voz y aroma sumamente familiares, fueron percibidos por los sentidos del vampiro. Miró por el gran ventanal de vidrio y vio la figura masculina, confirmando lo que había percibido.

Todos los recuerdos pasaron por su mente, hasta aquellos que no queria recordar, pero formaban parte de lo que había vivido con su ex esposo. ¿Era necesario salir al encuentro con aquél luego de haber descansado tanto tiempo?. ¿Qué podría llegar a salir de ese encuentro?.

Bajó las escaleras, llegó a la puerta. Algo lo detenía. ¿Estaba haciendo bien? Aclaró su mente como pudo y abrió la puerta principal.

- Pero mira nada más a quien tenemos acá - esbozó mientras miraba a su ex - Veo que la soltería te ha sentado más que bien - soltó una risita nerviosa mientras se posaba en el marco de la puerta tapando la entrada - ¿Que quieres? - soltó cortante demostrando las pocas ganas de interactuar ... y más con él.

@ Azrael Lycan

 

 

[Thoth]

-A decir verdad. - Le clavo la mirada, evocando en sus orbes ciertos eventos del pasado. - creo que mis planes cambiaron, no pensé que siguieras con vida y mucho menos que alguien aún habitara en este castillo. - Bajo lentamente la mirada. - Aunque, eso de andar soltero no es del todo cierto, pero creo que andar comprometido no es el término más adecuado que pudiera precisar. - Le aclaró, a pesar que no existiera un motivo para hacerlo. - Creo que tampoco a ti te ha tratado mal el tiempo, supongo que ser vampiro tiene sus ventajas. - 

 

Y subió lentamente la mirada, para así clavarla nuevamente en los ojos del Gaunt. - Y como por lo visto, te encuentras ocupado, supongo que prefieres que le marche a no ser que me desees invitar a pasar al castillo. - 

 

Con su mano creo un portal, en caso de ser la respuesta negativa, ya que éste conocía bien que cuando @ Emmet Haughton Gaunt no deseaba hablar o ser molestado, era mejor darle su tiempo, quizás en otro tiempo le hubiera insistido a conversar o robarle algo, pero prefirió seguir de una forma pausada, además esa actitud que mostraba no le era indicativo de un buen inicio para algo, por ello se limitó en su siguiente acción. Esto era motivado porque por su mente rondaba aún el rostro del Dumbledore.

 

Este encuentro casual si hubiera ocurrido en otro tiempo, quizás los eventos fueran diferentes y aún hoy el licantropo se sentía confuso ante la presencia del vampiro, era extraño lo que por su mente se creaba, y ahora sólo esperaba la repuesta de ese mago tenebroso que tenía al frente para saber si quedarse o irse, o bien descubrir la respuesta que le había formulado Gaunt antes, pero que intentó divagar para así no responderla. 

 

Y aún alrededor del egipcio, se creaba una leve nevada poco a poco esos copos de nieve caen y dan algo de blancura a la ropa que tenía el mismo, cayendo alguno de esos copos en su cabellera ¿acaso Emmet le ponía nervioso? ¿Qué significaba todo ello? Esto era algo que el Nigromante evitaba en responder. 

[Emmet Haughton Gaunt]

- Amo, su baño está preparado.

El elfo se habia materializado en medio de ambos magos.

- Gracias Shave, iré en un momento. Puedes continuar con tus tareas.

El pequeño chasqueó sus dedos y desapareció sin prestarle atención al otro mago con el que estaba hablando el vampiro.

Emmet volvió su vista y atención a su "invitado".

- Debo confesarte que no he extrañado esta teatralidad que le pones a las conversaciones y encuentros ... - inquirió mientras se mantenía en la misma posición sin ánimos de liberar el paso hacia dentro del castillo - ... misma teatralidad que le pusiste a tu encuentro que tuviste en mi local con ... - con una muesca de asco mediante se propuso a terminar la frase - ... alguien.-

Hizo una pausa. La nieve seguía cayendo de manera copiosa y se comenzaba a acumular en las orillas de la entrada. Ambos seguían parados ahi, uno amenazando con irse y esperando una respuesta y - el otro - pensando qué era lo que decía. ¿Acaso quería retenerlo un poco más? ¿Deseaba, verdaderamente, hacerlo pasar?

- No deseo saber ni conocer tus aventuras - se irguió - Tampoco quiero volver a verte que estas rondando mi local con tus amoríos o lo que sean - la voz del vampiro se puso firme y el tono se volvió serio - Sabes que poco me va a importar a la hora de tener que tomar medidas - sonrió de manera malévola.

Por dentro dentro sentía mucha rabia y, si fuese en otro momento, ya se habría encaminado a buscar al de turno pero el cansancio y las ganas de estar tranquilo lo frenaban.

- Tómalo como una advertencia. Poco me importa lo que hagas o dejes de hacer, pero no quiero verte con alguien mas cerca de mis propiedades - lanzó una mirada seria y cambió su semblante por completo - Habiendo dicho esto, acabo de llegar de mis vacaciones y tengo un baño caliente preparado para relajarme, si no vas a estar contando tus aventuras, puedes pasar, caso contrario, te invito a retirarte - envió una sonrisita pícara y se dispuso a subir las escaleras en dirección a su baño privado.

Su otro elfo había vuelto de hacer las averiguaciones que el vampiro le encargó. Dos individuos habían estado en los jardines de su Herboristería cuando nadie podía entrar allí estando su negocio cerrado ya que las puertas estaban cerradas bajo hechizos poderosos.

- Shave - detuvo su paso - El señor Dumbledore está decidiendo si pasa o no - le dijo a su elfo - Si se queda, le indicas a donde estaré, caso contrario, cierras la puerta y no quiero que nadie me moleste - habiendo dado esas directivas, siguió su camino hacia su baño.

@ Azrael Lycan

Editado 7 de Marzo del 2022 por Emmet Haughton Gaunt

[Thoth]

El egipcio no respondió y sólo se limitó en observar al vampiro, este le había amenazado, en verdad era extraña la sensación que le provocaba. Sin embargo, en otra oportunidad pudiera toparse con el Gaunt, ya que no desearía molestar al recién llegado de sus vacaciones, porque en otro tiempo pudo haber relacionado diferente, ahora solo se limitó a pensar sus palabras.

 

-No te preocupes Gaunt. - 

 

Fue lo único que alegó, y cambió su varita por su forma de cristal. Por consiguiente, el Nigromante comprendió que era mejor dejarle sólo, allá en sus pensamientos y que su cuerpo se relajara con el agua caliente. Además, este había dejado algo claro y era ese tiempo de no ser molestado, al menos eso reflejaba su corporeidad ¿Acaso le molesto lo que había expresado de andar con otro? Era algo por lo que su mente pasó un segundo. 

 

"Quizás sea mejor así." 

 

Se dio una vuelta, haciendo que levemente apareciera una carta escrita en pergamino en la alcoba del vampiro, el mago sabía donde se encontraba, igual ya antes había estado en ella. Sin embargo, el escrito sólo tenía una intención y era disculparse, por eso se encontraba escrito con su puño y letra algun escrito dirigido a él. 

 

--

Para: Sr. Emmet Gaunt 

 

Es posible que mis palabras lleguen tarde, solo que no tuve el valor para disculparme en persona. Quizás sea un cobarde, porque al verte dudé de hacerlo y al ver que estabas indispuesto solo me resta este medio, comprendo que en el pasado pude haber errado el camino, defraudado esa confianza, pero aún así me alegro saber que estás bien. Ahora, el tiempo ha pasado y somos diferentes, y respetaré tu deseo. Sin embargo, ten presente que si llegase necesitar mi ayuda tendrás mi varita para defenderte, mis hombros para llorar, incluso la distancia para que seas feliz. Hoy te escribo para pedir tu perdón, lamento que llegará en un mal momento y que los dioses ahora marque un destino diferente en las estrellas, te deseo siempre lo mejor y que puedas volver a sonreír.

 

Atentamente, 

 

Azrael Lycan 

 

--

 

Y en un suspiro, Lycan comienza a dar esos pasos para marcharse en el portal. Era momento de respetar la decisión de @ Emmet Haughton Gaunt y poder seguir el sendero que sus decisiones pasadas ocasionaron. Esto era algo que posible lamentará, pero era necesario hacerlo, aunque algo le indicará que estaba cometiendo un gran error, pero otro le decía que era lo correcto, todo esos juegos que sólo el corazón comprende. 

[Emmet Haughton Gaunt]

El baño había sido perfecto pero era hora de salir. Se dirigió hacia su habitación mientras el agua goteaba de su cuerpo sin importarle si mojaba todo a su paso. Mientras estuvo metido en la tina, se quedó pensando en todo lo que le dijo al Dumbledore y de la manera en como éste había reaccionado. Tenía que aceptar que esperaba otro tipo de reacción por parte del egipcio ya que fue más que sorpresiva. ¿Habían sido las palabras correctas?¿Era tan así lo que pasaba por su mente o, simplemente, eran celos de no poder ser esa persona que ahora compartía las noches y días con el Dumbledore? Sea cual fuere la respuesta, ya no eran lo mismo el uno para el otro. Todo había cambiado.

Tomó una toalla y se envolvió la parte baja de su cintura. Abrió el ventanal de par en par y se tiró en su cama. Aunque estaba nevando bastante copioso y la temperatura era bastante baja, eso no le impedía poder disfrutar de la bella noche que estaba sucediendo.

Giró si cabeza y trajo uno de sus almohadones grandes. Cuando lo corrió notó que un sobre se deslizó hacia la parte baja cayendo justo a su lado. Lo tomó, lo inspeccionó un poco y lo abrió. Bastaron unos pocos minutos para leer el corto párrafo que el egipcio le había dedico antes de abandonar los terrenos del vampiro. No le produjeron nada esas palabras, eran puras letras vacías que sólo se unían para formar un todo sin sentido.

- Que desperdicio.

Dijo en voz alta tirando la carta hacia un lado y desapareciendo de la vista del Gaunt.

Se levantó, fue hasta su escritorio aún envuelto en la toalla y se dispuso a escribir unas pequeñas líneas para el hombre:

"Debo decirte que una parte mía esperaba que ingresaras al Castillo y  me siguieras, como lo hacías antes, pero me suponía que no lo ibas a hacer. Tampoco esperaba que admitieras tu error (o quizás, ¿varios errores?) pero parece que verdaderamente en algo has cambiado. Aunque eso signifique poco y nada para mi, necesito escucharlo de tu propia boca y no mediante vagas palabras escritas en un pedazo de papel. Te espero en dos horas en la entrada trasera del Castillo. Ya sabes como llegar allí.

Emmet "

Le dio la carta a su elfo y la pequeña criatura desapareció.

@ Azrael Lycan

[Thoth]

El egipcio apareció nuevamente en el castillo Gaunt y vestía del lugar de donde era. Este se encontraba en el sitio pautado por @ Emmet Haughton Gaunt  y su mirada era diferente, aún más cuando volvió la última vez. Este solo tenía una intención y era reafirmar las palabras que había pronunciado, por lo que sus pensamientos se encontraba determinado a lo que venía, en su mano portaba su Vara de Cristal, la cual poseía la forma de su cetro. En cambio, en su otra mano se encontraba su flagelo, los cuales representaba su autoridad como Regente.

 

-Espero no haber llegado tarde.-

 

Afirmo, y camino lentamente, tras de sí se encontraba sus aurores. Estos hombres poseían el rostro cubierto con mascara de oro con un mineral oscuro, esta combinación era el color de la vestimenta de esos que le acompañaba. 

 

-Pueden marcharse.-

 

Ordeno y cada uno de esos aurores se retiraron. Este  aún tenía las palabras de Gaunt en su mente, por lo que por cuestión de honor debería reconocer sus errores, incluso disculparse en caso de ser necesario. Ahora bien, era posible que aprovechará el momento de encontrarse en ese país para luego dirigirse al motivo porque aún late su corazón. Aunque, algo lo dejaba inquieto y era esa confesión del vampiro ¿Acaso ese anhelo de verle ingresar significaría algo?