Jump to content

~Mansión de la Familia Gryffindor~ (MM: B 104490)


Mael Blackfyre
 Compartir

Publicaciones recomendadas

Luego de haber vuelto a la mesa y preguntar si de algo me había perdido me di cuenta de que no a pesar de que me había retirado un buen rato a atender a la puerta. Le sonreí a Luna escuchando lo que me platicaba asintiendo mientras colocaba de nuevo la servilleta para terminar de cenar. La idea del café me parecía maravillosa, ya mi hermana conocía mi adicción a esa bebida y casi en automático estaba diciendo que si. Justo después de eso apareció uno de los elfos que pertenecía a Luna.

 

—Oh, sí por favor.— dije al elfo quien en seguida hizo una reverencia y desapareció. Esperaba que mi elfina Mahuru no se hubiera dado cuenta ya que solía ponerse celosa aunque no lo demostrara mucho.

 

Segundos después mi taza se rellenó mágicamente de café. Tomé la cuchara y tomé una porción de azúcar para echársela. —¿Saben?—dije a las allí reunidas —Había una chica allí en la puerta diciendo que había recibido un supuesto reporte de una criatura que la verdad no se que es... un Krampus o algo así, pero nadie había denunciado nada que yo sepa—dije dando un sorbo al café—, además, se quedó muda y ya no volvió a decir una palabra y al parecer se marchó cuando me distraje por un ruido... cosa más extraña.

 

No llevaba ni a la mitad el café cuando volvieron a tocar el timbre. Vi la hora y ya eran las 11 de la noche... Afuera comenzaba a llover muy fuerte. No pude evitar que la piel se me erizara, ¿quién podría ser a esas horas?

 

 

 

OTvTKGk.png

Rol del Cuartel General de Aurores

La noche era perfecta, con esa tormenta peligrosa que movía bruscamente los árboles de un lado a otro. La mansión Gryffindor sin embargo, ni se inmutaba por el mal tiempo. Las luces adentro indicaban que aún había gente despierta tal vez disfrutando de un buen momento al lado de la familia. Sammael caminó despacio hacia la entrada. Llevaba puesta una capucha negra de viaje y llevaba consigo un maletín de piel. Sus botas manchadas de lodo a causa de la lluvia iban pisando los charcos sin siquiera preocuparse por evadirlos. Observó con cuidado y llamó tocando el timbre, esperando a alguien que le respondiera.

 

Los Gryffindor eran reconocidos por ser personas hospitalarias, demasiado tontos y confiados como para ver el peligro aunque les mordiera la nariz. Sammael comenzaba a sentirse desesperado ya que no atendieron al llamado de manera inmediata <<malditos elfos inútiles>> pensó observando con exasperación su reloj de bolsillo.

 

Un elfo viejo y de aspecto amable abrió la puerta, mientras saludaba y daba una reverencia. Detrás de él estaba una mujer de cabello rizado y castaño que lo observaba con recelo, esperando que el extraño se presentara. Ella debía ser Ley Gryffindor, una de las matriarcas quien en un tiempo estuvo a la cabeza de los aurores... y precisamente era contra ellos con quienes cobraría venganza, por todo lo que lo hicieron pasar.

 

—¡Prima!— dijo con una sonrisa en el rostro —, tanto tiempo... ¿qué acaso no me recuerdas? Soy Sam... Sammael Gryffindor— he venido a visitarlos querida familia... Espero que Kytta esté por aquí también, quiero verlos a todos.

 

@Kytta Gryffindor Rambaldi @Dennis Delacour @Lunatica Lupin Evil Black @@heberth portillo

 

Off: éste rol es para trabajo del cuartel, pero pueden unirse los familiares obvio (?

Editado por Ley Gryffindor Rosier

http://i.imgur.com/Fcazzag.gif|| http://i.imgur.com/8g56kcK.gif||http://i.imgur.com/7lEGqUN.gif


SpXVsLD.png

http://i.imgur.com/0A7BEB7.gif|http://i.imgur.com/yYl0nGf.gif|http://i.imgur.com/Y0QeE0I.gif

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Pasar tiempo en familia, algo que la pequeña Gryffindor no hacía desde hacía mucho tiempo, era lo que más deseaba en el mundo, mientras tomaban algo de café y se olvidaban del mundo que azotaba afuera con todos sus enredos, se sentía protegida en su adorada casa y con su familia, como si nadie pudiera entrar al fuerte que habían logrado tener en su amado hogar, luego de que mi elfo Arturo nos sirviera más café y desapareciera, escuché presurosa lo que mi hermana decía ¿una criatura? todo eso sonaba de por sí extraño y raro y así se lo hice saber, observándola asombrada, no supe porque pero un escalofrió me recorrió toda ¿qué estaba por suceder allí?

 

- Lo de la criatura es raro, máxime si ¿dices que se marcho sin más? hay cada uno más raro, quinas se olvido de algo, aunque si intentaba denunciar alguna criatura que le hiciera daño, quizás el Krapus pudo hacerle algo para que no le denunciará, según tengo entendido pueden ser algo persuasivos cuando quieren, pero realmente es sumamente extraño ¿no? - Le pregunté atenta a lo que decía mientras revolvía mi café y tomaba un poco, ajena a lo que sucedería luego -

 

El timbre resonó por toda la mansión, haciendo que me levantará con varita mágica en mano, dejé que mi hermana fuera a atender, mientras la miraba con mis azules ojos, diciéndole con una sola mirada que estaría detrás suyo, algo me decía que quien fuera que fuera, no podría ser amigo, así que por extensión tenía que ser enemigo, así que la Auror que había en mí, pensaba en los posibles escenarios y ninguno era demasiado amigable, de veras que pasar tiempo con Made hacía que una se volviera más precavida y menos inocente, lo cual era bastante bueno para mi trabajo diario, me dije que en algún momento se lo agradecería a la bruja.

 

OTvTKGk.png

 

Rol del Cuartel General de Aurores

 

http://i.imgur.com/R3Qn2cS.png

 

 

Cuando el extraño entro con aquel "prima", mi varita mágica ya estaba apuntándole, la Gryffindor no recuerda en que momento se movió para estar frente al extraño y protegiendo a su hermana, apuntándole con la varita mágica al tal señor, pero algo le decía que no parecía ser alguien bueno, ¿Samuel Gryffindor? un bufido evidente hizo que achicará mis ojos azules claros haciéndole un escanear, no era alguien bueno, no parecía querer algo decente, así que le apunté acercándome al extraño ¿qué quería en realidad? ¿de verdad pensó que estaríamos todos indefensos? no era de fiar, mi sexto sentido me lo decía, ¿podría estar equivocada? algo me decía que por está vez estaba en lo cierto, estaba demasiado alegré como para no reconocer el peligro cuando lo veía enfrente de mis ojos.

 

- Perdone la bienvenida pero una bruja precavida vale por dos dice el dicho ¿quien es usted y por qué nunca le vimos? comprenderá no quiero ser descortés pero no confió en usted, así que repita que hace aquí y porque es que vino y lo más importante ¿como supo donde encontrarnos? además de que ya es muy tarde para que ande por acá ¿no le parece? siendo desconfiar pero como le decía no soy de confiar en extraños y menos si se aparecen a estás horas de la noche y sin avisar - Le dije a Samuel con la voz una octava más alta y mucho más autoritaria de como solía tratar a las personas, en aquel momento, intentaba preservar a mi familia y no me puse a pensar que estaba siendo descortés con quien decía ser familia, algo que no me sonaba para nada real -

 

Mis ojos azules claros no pararon de obsérvalo intentando indagar quien era, no recordaba haberlo visto antes, ni en el ministerio, ni en las diversas dependencias en las que trabaje, además de que su sonrisa me sonaba falsa, todo en el inducia a la alarma, ¿o era por qué veía cosas que en realidad no eran? no estaba lista para hechizarlo aún, pero por si las dudas, seguía apuntándole con la varita, sin dejar que Ley se le acercará más, sabía que mi hermana era una hábil bruja y una de las mejores en hechizos, pero no dejaría que nadie le hiciera daño, al fin y al cabo, no por nada era tan sobre protectora con toda mi familia, supiera como defenderles o no, lo haría así se me fuera la vida en ello.

- Le invitaría un café pero no estoy por la labor de invitarle nada, si podría decir a que vino, así se puede ir, no confió en usted y sigo sin saber porque - Susurré con mi voz más baja de la cuenta, sonando tan amenazadoramente como pude sonar, siendo algo raro en la cordial y alegré vampiresa que nunca lastimaba a nadie en su vida -

 

@@Ley Gryffindor Rosier @ @@Dennis Delacour @@HerbertET Portillo

Luna-Gryffindor-Delacour.png.2b76e3b40e3

LGDdef.gifLEdef.gif

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Sammael Gryffindor

 

Cuando apenas había pasado saludando alegremente, una bruja salió bastante agresiva y apuntando al Gryffindor recién llegado. Sammael cayó al suelo sobre su espalda y tiró su maletín del que salieron varios papeles con escritos sin importancia, uno de ellos ponía "lista de compras" y seguía un montón de palabras como: "leche, azúcar, repelente de babosas carnívoras". Sin duda se había asustado, no esperaba que la familia reaccionara de ésa manera. Al final, se puso rápidamente de pie y bastante acalorado por la pena acomodó su túnica.

 

—Luna Gryffindor ¿no? Sabía que estabas loca, pero no al grado de atacar a tus familiares— dijo fríamente Sammael fulminándola con la mirada y moviendo la cabeza de un lado a otro de manera reprobatoria —. Tal parece que trabajar como auror te ha hecho bastante daño, te recomiendo unas merecidas vacaciones en las Bahamas.

 

Comprendió entonces que no debía decir ese tipo de comentarios, sin embargo no pudo evitarlo. Sentía como su sangre hervía de odio y sería tan fácil como lanzar un maleficio sobre la bruja, pero ahí estaba en desventaja, tenía que seguir con el plan tal como estaba escrito. Suspirando y armándose de mucha paciencia hizo una reverencia a las brujas ahí presentes con un gesto amable que no le costó nada de trabajo.

 

—Como había comentado al principio— dijo respondiendo a las interrogantes de Luna —, vengo a visitarlos. Decir "primo" de donde vengo, es una manera amigable de decirle a alguna persona, pero en realidad yo soy su sobrino. Soy hijo de Morrighan, no de sangre claro, pero me adoptó y decidí venir a ver a mi familia. Ella me aseguró que me recibirían calurosamente.

 

Sammael sabía perfectamente que Morrighan, la hermana e hija de las presentes, llevaba muchos años desaparecida, por lo que eso podría ser real y no tenían manera de comprobar lo contrario. Esperaba que mordieran el anzuelo. Qué plan tan bien ideado, qué bueno era mintiendo.

 

—Tía Ley, por favor.— Susurró al final, esperando.

 

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~o~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

http://i.imgur.com/KmYChAZ.png

 

Me había quedado en silencio, observando la escena boquiabierta. Luna se había levantado de un salto y sin que yo pudiera decir nada estaba haciendo de escudo entre el visitante y yo. Sammael, que no había dado señales de querer hacer daño cayó de espaldas por el susto y cuando apenas quise ayudarlo se puso de pie de un salto rápidamente y rojo como un tomate. La verdad era que no sabía que decir.

 

—Luna, por favor tranquila— dije tomándola de el hombro —, guarda la varita. No creo que... Sammael... quiera hacernos daño.

 

Sentí que la sangre se me ponía helada al escuchar el nombre de mi hermana Morrighan. Éramos bastante unidas, sin embargo se había ido un día y nunca volvió. Probablemente se puso a rehacer su vida lejos del mundo mágico y de toda la maldad que tenía. Yo sabía que estaba viva, pero no sabía que había adoptado a un hijo.

 

—¿Mi hermana.... Morrighan? Oh por dios...— musité —¿Cómo está ella?¿En dónde está? Oh, disculpa. Estoy bastante emocionada de escuchar su nombre. ¿Porqué no pasas a sentarte y nos cuentas? Kytta debe estar por ahí... ¡Oh por amor a Merlín, Luna, guarda eso!

 

Tenía miedo de que el visitante se fuera. Tenía muchas preguntas que hacerle, y estaba muy nerviosa. También me sentía un poco desconfiada, pero no podíamos ir por ahí lanzando hechizos a todo mundo.

http://i.imgur.com/Fcazzag.gif|| http://i.imgur.com/8g56kcK.gif||http://i.imgur.com/7lEGqUN.gif


SpXVsLD.png

http://i.imgur.com/0A7BEB7.gif|http://i.imgur.com/yYl0nGf.gif|http://i.imgur.com/Y0QeE0I.gif

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Hacia meses que no tenia que vivir el ritmo en los que me manejaba en mis viejas épocas. Antes podia pasarme los dias enteros sin dormir entre las misiones que realizaba para la Orden del Fénix y los patrullajes para el cuartel Auror. Y mas si le agregabamos los negocios que atendía y mi familia que eso afectaba tambien.

 

Pero ahora, el tiempo libre desbordaba más de la cuenta y si no estaba durmiendo, desaparecía por semanas. ¿Hacia cuanto que no pisaba la mansión Gryffindor? Y Annick. Y Elros. Ni hablar de las muchachas. Habia perdido un poco el contacto con ellas.

 

Por eso que intentaba de alguna manera, retomar aquellas relaciones que estaba seguro, que lograría hacer. En la Mansión siempre ocurría algo extraño, que donde un Gryffindor se paraba mas de dos segundos, iban apareciendo otros cada vez más. Actuabamos como una especie de imán entre los Leones.

 

Aparecí justo en mi habitación. Por el golpe que provoque al aparecer dentro, algunos pergaminos que se encontraban sobre el escritorio, se cayeron al suelo. Annick y mi hijo no estaban por alli. Me encargué de cambiarme por un poco de ropa adecuada y tomé mi varita, guardándola dentro de mi manga izquierda. Y sali de mi cuarto.

 

Camino a la sala, pude observar que las ventanas mostraban otro panorana, donde la lluvia golpeaba fuerte los cristales y la copa de los arboles se movian agresivamente. Aunque el interior de la mansión era cálido, gracias al trabajo de lo elfos. Baje las escaleras mientras iba escuchando que habia movimiento en la sala.

 

Me detuve en la base de las escaleras, para ver que por alli estaban Luna, Ley y una figura que no llegaba a distinguir

 

--¿Hijas?

|| 1yqixEK.gif || Marca-1.gif.664cbd85ef4de2f10b959916cce5||
Chw3Ljs.png
GOLDOR ♦ DEMONIUM MERIDIANUM

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

http://i.imgur.com/R3Qn2cS.png

 

Escuchar el nombre de Morringon, mi querida hermana, con la cual conformaba el trió dorado junto con Ley cuando eramos más jóvenes, hizo que se me helará la sangre ¿dónde estaba ella? aún tenía mi varita mágica en alto, por lo cual cuando mi hermana me pidió que bajara la varita la observé asombrada, mientras efectivamente guardaba mi varita mágica en mi oreja, aún indecisa de que hacer a continuación, bufé rodando los ojos sin podermelo creer aún ¿era el hijo de ella? estaba más cerca de convertirme en una leona que en que él pareciera el hijo de mi hermana, aún así pude intentar ser amable con él, ante el pedido de mi hermana no me quedaba nada más que hacer eso, aunque aún lo observaba con cautela.

 

- Siento mi exabrupto, como comprenderá señor Samuel, estamos en una situación delicada y en alerta permanente, así que no me es posible bajar la guardia, quizás por los años pasados con mi querida Eileen, aprendí a no confiar en desconocidos y a ser precavida en quien confiaba y en quien no, algunos podrían pensar que aún soy aquella joven bruja que conocieron y de hecho lo sigo siendo, solo que algo más.... ¿como se diría? cuidadosa y precavida con quien permito entrar y quien no en mi vida ¿me explico? - Le dije aún haciendo de escudo entre Ley y él, si bien me había disculpado eso no quería decir que confiará en él en lo absoluto y pensé con nostalgia en papá Elvis, dándome cuenta cuanto necesitaba de él en aquellos momentos -

 

Como por arte de magia o un ruego a mi suplica silenciosa, sentí su esencia antes incluso de escuchar aquel hijas que hizo que quisiera gritar de alegría, mi sonrisa fue amplia apenas lo vi con el rabillo de mi ojo, por la simple razón que no había nadie como él y que me sentía cuidada así, me gustaba dejar que mi papá me cuidará, aunque no se lo admitiera ni si quiera a él, al fin y al cabo, tanto él como Annick me habían salvado cuando llegué completamente magullada aquel primer día y siguieron haciéndolo los días subsiguientes a aquel, así que no podía estar más feliz de que mi papá estuviera en casa al fin.

 

- Pa, no sabes la alegría que me da escuchar tu voz, te extrañamos bastante en tu ausencia, aquí esta de visita un tal Samuel no se que y me gustaría que lo conocieras y en cuanto a moverme de delante tuyo, lo siento hermanita, pero tendrás que buscar otra forma de que entre al fin, no confió en él, Ley, se que escuchar de mi hermana hizo que quisieras saber de ella, hasta a mí me hizo dar un escalofrió cuando la menciono, pero no confió en él, así que Papá te necesitamos aquí por favor - Les dije a Ley y rogándole a Elvis que se acercara a nosotras cuanto antes, mi voz había sonado una octava más alta de la cuenta, como siempre que me ponía nerviosa o me alteraba, en esté caso estaba alterada y seguía mirando con desconfianza al extraño, sin importar lo que intentará Ley, no quería que entrará, exagerada mi ración o no, algo me decía que no era de fiar y quizás estuviera paranoica o tal vez... estuviera más cuerda que nunca -

Luna-Gryffindor-Delacour.png.2b76e3b40e3

LGDdef.gifLEdef.gif

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Apenas Sammael iba a dar un paso adelante, Luna seguía enfrente sin dejarlo pasar. Su actitud comenzó a molestarme bastante y fruncí el ceño, sin embargo no le dije nada. Me quedé en silencio escuchando lo que sucedía. Entendía su preocupación, pero no dejándolo pasar no resolveríamos ninguna duda, al menos era como yo lo veía. Había algo extraño ahí que no cuadraba. De pronto, unos pasos indicaron que alguien iba bajando las escaleras y se quedó allí parado. Mi corazón dio un vuelco.

 

Era Elvis, mi padre, en persona. Estaba allí parado observándonos mientras nos mencionaba. Sentí una alegría profunda y quería correr a abrazarlo ya que hacía mucho tiempo no lo veíamos, pero me contuve, por el visitante que teníamos en la mansión. Con una sonrisa en el rostro dejé de tener los brazos cruzados y los bajé lentamente mientras me agarraba de uno de los muebles.

 

—Padre...— dije en un susurro. Luego de un silencio de unos 15 segundos y de intercambiar miradas, Luna comenzó a hablar rápidamente como sólo ella sabía. No sabía muy bien si mi padre le había entendido, así que luego de que terminó de hablar, aclaré mi garganta un poco y dije: —Así es, padre. Éste hombre ha llegado y dice llamarse Sammael Gryffindor y que es hijo de mi desaparecida hermana Morrighan. Estaba invitándole a pasar a sentarse para conversar bien con él— dije con respeto, esperando su opinión.

 

~~~~~~~~~~~~~~~~o~~~~~~~~~~~~~~~

 

 

Sammael Gryffindor

 

—Mi nombre no es Samuel, señorita Luna, me llamo Sammael— dijo exasperado, corrigiendo a la matriarca.

 

La bruja de aspecto descabellado no se callaba ni por un minuto. Para Sammael era como un dolor de muelas, pero tenía que mantenerse sereno. De pronto, otro miembro de la familia apareció ante todos y por el efecto que causó al parecer era el cabecilla de la familia. Era sin dudas Elvis F. Gryffindor. ¿Es que los Gryffindor tenían como un imán o algo parecido? Cuando aparecía uno, de la nada ya estabas rodeado de un centenar de ellos, tal como había escuchado decir.

 

Rápidamente hizo una reverencia al patriarca y acomodando su cuello, saludó —Señor Gryffindor. Efectivamente. Morrighan me adoptó hace algunos años luego de haber dejado la mansión. Yo he hecho mi vida ahora, pero me dijo que algún día viniera a visitar a la familia y que me recibirían con los brazos abiertos, pero veo que me he equivocado.—dijo sin dar más explicaciones.

 

Abrazó entre sus manos el maletín, no quería perderlo de vista. Ahí dentro guardaba el plan que había hecho con un regalo al que en pocas horas entregarían en uno de los castillos de Ottery St. Catchpole y que seguramente cobraría la vida de alguien

http://i.imgur.com/Fcazzag.gif|| http://i.imgur.com/8g56kcK.gif||http://i.imgur.com/7lEGqUN.gif


SpXVsLD.png

http://i.imgur.com/0A7BEB7.gif|http://i.imgur.com/yYl0nGf.gif|http://i.imgur.com/Y0QeE0I.gif

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

No pude evitar emitir una sonrisa ante mi hija Lunática. No había ni un solo momento que mi hija se comportara de aquella forma. Y debía admitir que me agradaba de más, tal vez para muchos sería una vergüenza, pero no era mi caso, no me avergonzaba ninguno de mis familiares. Asi que me acerqué a ella, y apoyé mis labios en su frente, dándole un delicado beso y apretándola con un solo brazo por encima de sus hombros. Intentaba entender cada palabra que me decía, pero claramente necesitaba un par de explicaciones.

También me alegra verte, hija —ésta vez me acerqué un poco más a Ley, la acaricié con una mano en su mejilla y una sonrisa. La amaba de la misma forma que a Luna, pero cada una tenía su personalidad y así nos llevábamos. Mientras que con Luna era todo más un juego y diversión, con Ley la formalidad y la coherencia parecían los pilares fundamentales. Pero luego necesitaba mi momento con cada una de ellas—. Ley, linda.

Ambas Aurores y ambas matriarcas de la Gryffindor. Podía quedarme tranquilo con aquellas brujas como cabecillas de la familia. Mire a Luna. Sonreí ante su comentario de desconfianza. Me encantaba su sinceridad, ni siquiera se había tomado la precaución de decirme aquellas palabras al oído. De igual manera Ley, era más racional y tal vez había heredado más curiosidad como yo. Estaba seguro que si pasaba algo, ella misma se encargaría de sacar su varita y encargarse del problema.

Sammael, bienvenido a la familia. Disculpa ésta confusión. Debes entender que en los tiempos en los que vivimos, abrirle los brazos a cualquiera puede llevarnos a la perdición —le dije con una sonrisa—. Y mis hijas —señalándolas— han aprendido cada lección que les enseñe. Precaución y cuidado. Pero adelante, muchacho. ¿Hijo de Morrighan? Eso si que todo es una sorpresa… —exclamé con los ojos más abiertos. Miré a Ley. Ella entendería mi asombro, sabiendo la personalidad de la tercera de mis hijas—. Pero todos los Gryffindor son bienvenidos, asi que pasa a la sala, por favor.

Le guiñé un ojo a Lunática, esperando que la muchacha entendiera que estaba de acuerdo con ella. Luego apoyé mi mano en el hombro hacia Ley. No me había dicho nada, pero me encantaba continuar con su plan. Si el joven nos había dicho que éramos familia, entonces debíamos saber cada detalle. Cerré la puerta y miré por la ventana. Ninguna de las dos estatuas, el lobo y el león, se habían despertado. Eso significaba que no era tan malo tal vez. Les hice una seña para que avanzaran del vestíbul0 a la sala.

Rhaenya —llamé a la elfina. Ésta apareció con una exagerada reverencia—. Trae un poco de té para los cuatro, por favor. ¿Tanis? —éste se había tardado un poco más, pero mientras la elfina desaparecía en una estela de humo morada, el elfo hacía su aparición, más tranquilo—. Envíale una carta a Morrighan, por favor, comenta en ella que su hijo Sammael a llegado —la criatura desapareció con la misma rapidez que su semejante. Mientras que la primera aparecía con una bandeja de plata, con cuatro tacitas y una tetera despidiendo vapores con una aroma delicioso.

Dime, muchacho. ¿Cuándo fue la última vez que viste a mi hija Morrighan? Tenía entendido que se encontraba por Transilvania —sin esperar, me senté en uno de los mullidos sillones. Esperaba que las chicas y el joven hicieran lo mismo. Acomodé el cuello de mi túnica. Y quise aplacar mi cabello con la mano que me faltaba, pero era cuestión de tiempo a que me acostumbrara—. Disculpa mis preguntas. Me parece raro que Morrighan ni siquiera nos haya mencionado de tu existencia. Ni de su estado. Generalmente por cortesía, cuando uno llega a un sitio, envía una carta o un aviso para su llegada —no me sorprendería que si se encontraban otros Gryffindor, no lo hubieran sacado a patadas.

@ @@Ley Gryffindor Rosier

|| 1yqixEK.gif || Marca-1.gif.664cbd85ef4de2f10b959916cce5||
Chw3Ljs.png
GOLDOR ♦ DEMONIUM MERIDIANUM

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

La pelirroja llevaba un tiempo fuera de la mansion debido a sus responsabilidades como matriarca de su propia familia, pocos entendía como había llegado a ser matriarca de aquella familia italiana y la verdad es que ella misma tampoco podía explicarlo bien, pero eso si sabía que era una gran responsabilidad,pese a ellos siempre añoraba la mansión y a su padre para la mayoría, el era el único quien sabía losas grandes secreto de la demonio y el por que muchas veces se alejaba tan repentinamente, era momento de volver a casa y sentir un poco de calor familiar, ese que solo el le solía dar.

 

Entró por la cocina como solía hacerlo siempre, Marabella conocía muy bien a Kyttara y sus mañias, una de las cosas que más adoraba era pasar tiempo en la cocina robando pastelillos y molestando a Tanis aquel elfo que había cuidado de ella desde el momento en que llegó a la familia , por lo que la Demonio interpretaba muy bien su papel .

 

—Buenas— dijo entrando por la puerta trasera mientras los elfos exaltados por la voz mirando en su dirección.

 

— Ama Kyttara , ¿desea algo? La ama asustó a Rhaenya— dijo una de las pequeñas elfinas que preosraba una bandeja con usted tazas y un plato con variados pastelillos.

 

— vamos Rha, no seas asustadisa, no muerdo — dijo la demonio en tono gentil — en teoría — mencionó esto último con una sonrisa traviesa —¿ Dónde llevas eso?, veo que tenemos visitas, supongo que habrá reunión Gryffindor — comentaba mientras le robaba un pastelillo del plato.

 

— si ama, ha llegado un nuevo miembro, las amas Luna y Ley lo recibieron, a Rhaenya la mando el amo Elvis para llevar estos bocadillos, ¿quiere la ama que Rhaenya la anuncie? - pregunto la el fin a luego de explicarle a la demonio sobre la visita .

 

— No Rha, yo misma me presentaré, mal que mal soy parte de la familia aún— término diciendo la pelirroja mientras le robaba otro pastelillo y se encaminaba hacia las afuera de la cocina si era un nuevo miembro era de suponer que estarían interrogandolo en la Sala, para saber de que rama del árbol provenía; Claramente las voces provenían de esa dirección.

 

"comportate, recuerda que Elvis aún no te a visto y no sabe que estas tú" Dijo Kyttara en el subconciente de la demonio, era su cuerpo , más no su alma la que dirigía aquel ser, desde hacía un tiempo se había dejado dominar por su demonio y le había dado el control mientras ella permanecía en su mente dando vueltas, era raro que dos almas compartieran el mismo cuerpo más no imposible — ¿a caso no me comporte recién con aquellas criaturas inútiles? Tengo un poco más de fe en mi — dijo exasperada la demonio en un tono de voz muy bajo .

 

Camino hasta la sala sigilosamente sin que los demás notarán su presencia y antes de entrar arreglo su blusa turquesa que llevaba que con Inaba justo a sus jeans azules y sus botas negras de taco los cuales parecieran que ni emitieran ruido al caminar , se paro frente a la entrada y carraspeo levemente para que los presente notarán su presencia.

 

— Buenas a todos, veo que lleguen en un buen momento para una reunión familiar — dijo sonriendole a su padre el cual miraba fijamente.

 

@ @@Ley Gryffindor Rosier @

1hL47Hb.gif // http://i.imgur.com/AdMC7Gl.gif

QQbfwZo.png

xrUcL28.gif // c3cuSMA.gif/Lf6RTmI.gif

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Mi padre se acercó a Luna y la besó en la frente, luego me acarició la mejilla. Él siempre tenía tiempo para demostrar su cariño por sus hijos y jamás le había importado frente a quién lo hiciera, lo que me hacía feliz. Al final invitó a pasar al recién llegado. Vi que antes que nada fue a asomarse por la ventana en dirección a las estatuas. Eso me dejó pensativa. O había encontrado la manera de encantarlas o de verdad no tenía ninguna mala intención. Pasó frente a mi para ir a sentarse mientras le asentía con la cabeza y lo seguía para tomar asiento junto a ellos.

 

Al escuchar las preguntas que le hizo a Sammael, me di cuenta de lo mucho que me faltaba por aprender. No por nada papá había trabajado por años como auror, eran preguntas directas y concisas que podrían revelarnos la verdad en un santiamén. Apenas hizo éstas interrogantes se apareció en el lugar Kytta, mi otra hermana. Le sonreí, pero sin descuidar vigilar al invitado.

 

—Hermana, ven, siéntate con nosotros y haznos compañía— le dije mientras estiraba mi brazo y le indicaba que se sentara en el sillón que estaba a un lado nuestro—. Tenemos un invitado, hijo de Morrighan... Gracias Rhaenya.

 

La verdad era que aún estaba bastante desconcertada con aquella noticia. Era verdad lo que decía papá, siempre se suelen mandar cartas o algo así, pero ya Tanis estaba informando a mi hermana sobre aquello. Yo no sabía que andaba por Transilvania y sólo había escuchado historias sobre el lugar que estaba infestado de vampiros. Si algún día volvía a la mansión se lo iba a preguntar.

 

—Y bien, Sammael. Estamos esperando...

 

 

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~O~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

 

 

Sammael Gryffindor

 

Al fin lo invitaron a pasar. Sammael comenzaba a pensar que era mucho más fácil lanzar un maleficio encima de todos ya que lo exasperaban bastante. Tomó asiento dejando a un lado su maletín, no le perdería de vista. Las preguntas comenzaron a llegar, como tenía previsto. Era obvio que no se confiarían así como así y tomarían sus precauciones.

 

—Lo entiendo señor, hay muchos delincuentes allá afuera. Puedo darme cuenta de que sus retoños han aprendido bien. Es usted un excelente padre— decía ésto mientras sentía cómo se le revolvían las tripas. Le parecía ridícula la manera de cómo se demostraban tanto cariño que pensaba que era innecesario. Un par de palmadas eran más que suficientes para saludar a alguien.

 

Por un momento, Sammael se estremeció al escuchar que enviarían una carta a aquella bruja que había elegido como "su madre". Todo su plan se vendría abajo, pero no podía evitar que el elfo entregara el paquete. Si lo asesinaba, nada se ganaría. Podría parecer un accidente, pero no era el momento de despertar sospechas; sin embargo, tardaría muchísimo tiempo en dar con ella, ya que la bruja iba viajando de un lado a otro y no tenían certeza de dónde es que estaba exactamente. Mientras tanto, le daba tiempo suficiente de ganarse su confianza y dar la puñalada cuando menos lo esperaran.

 

Cuando habían metido a su padre a Azkaban, pudo hablar con él minutos antes y éste le había dado la misión de vengarlo, ya que se pudriría ahí lo que le quedara de vida y no lo defraudaría, al menos eso esperaba.

 

Llegó al lugar otra bruja, una de cabello pelirrojo. Por lo que pudo ver, era Kytta, a quién tenía entendido tenía poco que la habían nombrado jefa del cuartel. Sammael dio un asentimiento con la cabeza a manera de saludo y dirigió su mirada de nuevo a la mujer que lo había recibido. Si, ya sabía que aún no respondía las preguntas y no era necesario que lo estuvieran apurando.

 

—Bueno—dijo mientras daba un sorbo al té que habían acercado, en realidad estaba delicioso y perfecto para el mal tiempo—. A ella la vi por última vez en donde me adoptó, al norte de Estados Unidos, en Canadá para ser exactos. Me encontró en la calle mientras pedía comida ya que yo era un vagabundo. Tenía en ese entonces 13 años y me llevó a vivir a su casa y decidió adoptarme, de eso le hablo hace 4 años. Yo dejé de verla hace un año, porque luego de trabajar duro pude hacer mi vida solo y ella decidió seguir viajando por el mundo. No se decir con exactitud en dónde esté... pero le agradezco por lo que soy ahora.

 

Dio otro sorbo al té hasta terminárselo, los elfos rápidamente se acercaron a rellenar la taza con la tetera.

 

—Gracias— dijo a secas y vio al elfo desaparecer —. Antes de irse me contó sobre ustedes, y me dijo que si me veía en un apuro podría venir a refugiarme aquí. Por desgracia tuve un accidente con mi casa y ésta se quemó, así que he venido para acá. Sólo logré salvar mi maletín y la ropa que traigo puesta... Por las preguntas no se preocupe, es que ella tiene una vida muy apurada y regularmente no se queda más de un año en los sitios y si duró 3 años en Canadá, fue por mi.

 

Terminó de hablar y se escondió detrás de la taza que le habían rellenado, esperando a ver qué era lo que tendrían que decir ahora.

 

@ @ @

http://i.imgur.com/Fcazzag.gif|| http://i.imgur.com/8g56kcK.gif||http://i.imgur.com/7lEGqUN.gif


SpXVsLD.png

http://i.imgur.com/0A7BEB7.gif|http://i.imgur.com/yYl0nGf.gif|http://i.imgur.com/Y0QeE0I.gif

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

No conocía la razón, pero de alguna manera, empezaba a notar tambien la misma desconfianza con la que Luna habia recibido a Sammael. Parecía que su cabeza de alguna manera estaba utilizando mas palabras que las que realmente pronunciaba. Gire la cabeza al ver que Kytta hacia acto de aparición.

 

-- Siempre es momento para una reunión, hija --guiñandole un ojo mientras la muchacha de cabello rojo se acercaba a nosotros. Ley la invitó a acercarse. Cada vez ibamos a ser mas Gryffindor, obviamente. Y todas ellas, mis hijas--. Sammael...

 

Habia empezado a hablar pero me obligué a no continuar con aquellas palabras, porque varias respuestas de las que iba diciendo me empezaban a sonar mal en la cabeza. Arrugué un poco el ceño y luego miré a la nada misma para enfocarme en Sammael.

 

-- ¿Estás seguro que la Morrighan que conociste es nuestra Morrighan? Cabia la posibilidad de que todo lo que cuentas sucediera, pero mi hija jamás estuvo en Canadá. Mucho menos durante 4 años. Hasta el momento, vivia con nosotros y se fue éste último tiempo a Transilvania.

 

Tenia muchas dudas. Llevé mi mano hacia el colgante que tenia en el cuello, aquel que nos permitia comunicarnos entre nosotros de una manera más directa. Necesitaba a Morrighan, tenia como una percepción de miedo, como si estuviera pasando algo. Tal vez Sammael sabia algo que nosotros no. Tenia que retenerlo hasta estar seguro.

 

-- Disculpa, me dejé llevar por mi lado guardián. ¿Tanis? --volví a llamar al Elfo. Éste aparecio envuelto de una neblina rojiza, con sus dos orejas puntiagudas y dedos largos, dirigiéndome una segunda reverencia. Me miró atentamente y asintió a mi orden-- Por favor, lleva la maleta del señor Sammael a nuestro cuarto de huéspedes del tercer piso. Se quedará a cenar con nosotros. O eso espero --la criatura se aferró a la manija de la valija y desapareció junto a ella rumbo al cuarto. Le dirigí una sonrisa a Sammael.

Editado por Elvis F. Gryffindor

|| 1yqixEK.gif || Marca-1.gif.664cbd85ef4de2f10b959916cce5||
Chw3Ljs.png
GOLDOR ♦ DEMONIUM MERIDIANUM

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Unirse a la conversación

Puedes publicar ahora y registrarte más tarde. Si tienes una cuenta, conecta ahora para publicar con tu cuenta.

Guest
Responder a esta discusión...

×   Pegar como texto enriquecido.   Pegar como texto sin formato

  Sólo se permiten 75 emoji.

×   Tu enlace se ha incrustado automáticamente..   Mostrar como un enlace en su lugar

×   Se ha restaurado el contenido anterior.   Limpiar editor

×   No se pueden pegar imágenes directamente. Carga o inserta imágenes desde la URL.

Cargando...
 Compartir

Sobre nosotros:

Harrylatino.org es una comunidad de fans del mundo mágico creado por JK Rowling, amantes de la fantasía y del rol. Nuestros inicios se remontan al año 2001 y nuestros más de 40.000 usuarios pertenecen a todos los países de habla hispana.

Nos gustan los mundos de fantasía y somos apasionados del rol, por lo que, si alguna vez quisiste vivir y sentirte como un mago, éste es tu lugar.

¡Vive la Magia!

×
×
  • Crear nuevo...

Información importante

We have placed cookies on your device to help make this website better. You can adjust your cookie settings, otherwise we'll assume you're okay to continue. Al continuar navegando aceptas nuestros Términos de uso, Normas y Política de privacidad.