Jump to content

~Mansión de la Familia Gryffindor~ (MM: B 104490)


Mael Blackfyre
 Compartir

Publicaciones recomendadas

No sabía cuánto tiempo había pasado, solo sentía frio, por todo mi cuerpo y una debilidad que amenazaba con dejarme desparramada en el césped. Lo único que podía hacer era respirar y mirar al vacío. Una mano se apoyó sobre mí, gire para ver el rostro de Sophia, la tristeza se reflejaba en ella, una tristeza que nos inundaba y en mi caso sentía que iba a ahogarme. Deje que ella me guiara, sin ganas de tener que decidir qué hacer, cruzamos la puerta de entrada y subimos los tramos de escaleras hasta mi antiguo dormitorio.

 

Despedí a Sophia en la puerta y entre a mi habitación, todo estaba igual de como lo había dejado, no pude evitar sonreír, mi primo siempre tenía las habitaciones de la familia preparadas por si alguno volvía de improvisto. Ese simple gesto de Elvis hizo más lagrimas salieran de mis ojos, sabía que no tenía que tener esos pensamientos, que esa tristeza ataba a mi primo y lo que más deseaba era que pudiera elevarse.

 

Me dirigí hacia la cómoda donde guardaba mi ropa de cama, abrí uno de los cajones al azar y tome un camisón, me cambie y apartando las mantas me metí en la enorme cama con dosel, pensado que me iba a ser imposible conciliar el sueño, pero en menos de diez minutos estaba profundamente dormida, la ceremonia se había llevado todas mis fuerzas, pero a pesar del cansancio mi cabeza seguía dándole vuelta a todo lo que había pasado.

 

“Me encontraba en un sector del bosque que rodeaba la Mansión Gryffindor, pude sentir las hierba cosquillear en la planta de mis pies, aquello era un sueño y no era uno común. Comencé a girar en redondo tratando de encontrar al hombre, o mejor dicho dios, encargado de meterse un mis sueños sin permiso. Lo encontré apoyado sobre el tronco de un hermoso nogal, cruzado de brazos, cuando nuestras miradas se cruzaron el sonrió de lado haciendo que un perfecto hoyuelo pareciera e su mejilla derecha.

 

Tomando la falda de mi camisón, corrí hacia él, quien abrió sus brazos y me cobijo entre ellos, escondí mi rostro en su pecho y me abrace a su cintura y lloré… Lloré lo que parecieron horas, llore por mi primo, llore por mis niñas, llore por mí y por mi familia. Y él solo me abrazo y acaricio mi cabello blanco y lacio.

 

- Mith- dije separándome lo justo para míralo a los ojos y apoyar mi mano en su mejilla- por que ha venido, es muy peligroso, pueden rastrearte.

 

- No podía dejarte sola en este trance Bella- me dijo mientras besaba mi frente, cerré los ojos ante aquella muestra de cariño.

 

Me separo de él, pero me tomo de la mano y comenzó a caminar, con sus características zancadas largas, tuve que volver a tomar mi falda con la mano libre para intentar seguirle el paso son tropezar, llegamos junto al arroyo que recorría la propiedad, allí en me indico que me arrodillara junto al hilo de agua.

 

- Mírate en el agua - me dijo mientras en se arrodillaba junto a mí.

 

- No quiero, no he podido cambiar mi cabello ni mis ojos, desde que me entere de la muert…- un nudo se me instalo en la garganta- Desde que Elvis murió- finalicé.

 

- Lo sé Bella- tomo uno de los mechones lacios y blancos entre sus manos- y sabes cómo me gustaba tu cabellos rojo y tus ojos verdes, por eso…- el cerro sus hermosos ojos y comenzó a murmurar algo.

 

Un instante después al mirarme nuevamente en ese espejo de agua, la antigua Arabella me miraba, me gire y le sonreí mientras depositaba un suave beso en sus labios, y murmuraba "Gracias". Él tiro de mí y acomodándose junto a un árbol me abrazo.

 

- Me he arriesgado por que necesitas saber que las niñas se encuentran bien, cuando te fuiste ellas me invocaron, están a salvo, nadie podrá dar con ellas, ni hacerles daño. Volverán cuando puedan manejar sus poderes y cuando no sea peligroso que las vean por aquí- el alivio me inundo mientras lo escuchaba.

 

- Gracias Mith, es un alivio saber que ellas están bien- tome sus manos y las lleve a mi pecho- necesito que me prometas que las vigilaras y velaras por ellas. Necesito saber que ellas te tendrán a ti y que cuando sea el momento ellas podrán venir a la mansión a tomar su lugar entre los Gryffindors.

 

- Me imagino porque me lo pides- dijo él suspirando- no estoy de acuerdo pero lo entiendo.

 

Me aparte unos centímetros y le di la espalda, aquel hombre era imposible, nunca había lograda esconderle ninguno de mis pensamientos. Mith no usaba la legeremancia, pero al ser un dios del sueño podía hurgar en el subconsciente de los mortales y saber aquello que no queríamos revelar.

 

El siempre había sabido que lo quería mucho pero que no lo amaba, mi corazón pertenecía a dos hombres, Elvis en primera instancia, como mi primo, mi hermano y a veces mi padre, él era mi familia, mi hogar, mis recuerdos, y en segunda instancia Richard, él había sido el amor de mi vida, mi otra mitad, me alma gemela, con quien tendría que haber envejecido, a quien tendría que haberle dado hijos, y quien se había llevado parte de mi corazón al morir.

 

Mith había llegado a mi vida en el momento justo, se había acercado como un amigo y al entender cuál era el deseo de mi corazón, había decidido ser el quien me regalara la oportunidad de ser madre. Me gire para mirarlo, el sonreí y jugueteaba con un mechón de mi cabello.

 

- Supuse que estarías enfadado- suspiré- que me creerías una cobarde por lo que pretendo hacer, una mala madre, por dejarlas… abandonarlas- cerré los ojos y volví a recostarme junto a él.

 

- Sabes que nunca podría enojarme contigo- me abrazo- sé qué piensas que solo tu obtuviste algo de nuestro encuentro, pero no es así Bella, yo también obtuve algo que deseaba. Pude ser parte integral de algo, me convertiste en padre y por un corto tiempo me permitiste quererte, pude vivir como un hombre común a tu lado y eso fue el mayor obsequio que alguien ha podido darme- me tomo del mentón y alzo mi rostro- por eso he venido, por eso estoy aquí, para decirte que todo estará bien- me besó.

 

Se incorporó y me extendió una mano para que hiciera lo mismo, caminamos lentamente abrazados hasta llegar al límite del bosque, allí donde lo había aparecido. Era momento de su partida, volvió a abrazarme y luego me dio un empujoncito hacia donde se encontraba la mansión, una risa agito mi cabello y Mith había desaparecido.”

 

Abrí los ojos, me encontraba en mi habitación, podía ver el intrincado diseño del dosel de mi cama, un suave golpe en la puerta me hizo incorporarme, era Dido, la elfina de Annick. Entro a mi habitación con una bandeja de desayuno y me comunico que su ama nos espera a todos para una reunión familiar en la sala. Le agradecí y espere a que saliera del cuarto, me acerque al tocador, me reflejo era el mismo de ayer, solo en el sueño había logrado volver a tener mis cabellos y ojos característicos. Suspire apenada, me senté junto a la mesa, por más que no sintiera ánimos para comer, mi estómago protestaba.

 

Media hora más tarde me encontraba vestida y lista para bajar, tome mi varita y la coloque en el bolsillo de mi saco, me mire por una última vez al espejo, fruncí el ceo al no reconocerme y salí del cuarto. Baje las escaleras y me dirigí hacia el salón, cuando entre Annick estaba hablando, me dirigí hacia una silla que se encontraba junto a la ventana. Desde allí pude ver toda la situación como un mero espectador, Annick quería ver cómo había muerto Elvis, no compartía su curiosidad pero la entendía.

 

Se sucedieron un montón de momentos, Luna contando que ella había estado allí, Sophia apoyando lo que decía luna, Mica sosteniendo un pensadero, en este punto deje de prestar atención, no quería saber cómo había muerto mi primo, seria reavivar el dolor y acunar una sed de venganza que no me permitiría llevar a cabo mis deseos.

 

Mientras entraban en el pensadero cada una de las personas allí reunidas, me dedique a mirar por la ventana. Sophia salió de aquella vasija mágica y pude ver por su cara que aquello había sido duro para ella, se dejó caer en un sofá no muy lejos de donde me encontraba, me levante de donde estaba y me senté junto a ella y apoye mi cabeza, a sabiendas de que no era muy adepta a las muestras de cariño.

 

Debía estar todavía débil, ya que cerré los ojos y quede en un estado semiinconsciente, hasta que la voz de Annick gritado “CRUCIO” me despertó, tomando mi varita me incorpore de un salto, pero nada salió de la varita de la pelirroja ¿Cómo era eso posible? El muchacho que haya visto en l ceremonia también haya reaccionado alzando su varita, pero al igual que yo no haya atinado a conjurar nada.

 

Shelle apuntándose con su varita saco un recuerdo de su cabeza y lo dejo caer, para el que quisiera pudiera verlo, luego se dirijo a Annick, escupiendo lo que tenía en su mente, recriminaciones hacia la pelirroja por haber abandonado a sus hijos y a mi primo. Volví a sentarme y cruzarme de brazos. No haya entrado en el recuerdo de Luna y no entraría en el recuerdo d Shelle, deseaba que todo terminara para poder ir al panteón.

4dV4RuU.gifhttp://i.imgur.com/AQmRzhf.gif

GreMr1t.png

http://i.imgur.com/uj6dJe4.gifhttp://i.imgur.com/zXlSMy2.gif

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Ella había dejado su recuerdo en el pensadero en cuanto habían salido para que Mica lo resguardase, le parecía necesario que alguien ajeno a el suceso en particular los resguardara por si alguien tuviese la tentación de borrarles la memoria para salvar al asesino de su primo. Lo siguiente que paso lo observo como en cámara lenta. Estaba sentada en un sillón con Annick por un lado y Arabella por el otro, esta ultima parecía muy cansada y se había recargado en ella. Contrariamente a su costumbre de alejarse del contacto humano la dejo estar, porque lo necesitaba ella misma. Pero cuando menos se lo espero, Annick ya estaba brincando sobre Shelle lanzándole un imperdonable a su sobrina que simplemente no salió.

 

Se levanto como un resorte al mismo tiempo que Ara y levanto la varita hacia Mael y Shelle, miro con rabia al par de magos frente a ella y pudo sentir como perdía el control ante las palabras impertinentes de la hija de Elvis. Tal vez la falta de maldad de Annick había hecho que fallara en su hechizo pero de eso ella tenia de sobra. Así que no lo pensó ni un poco y lo lanzo ella

 

- jamás vuelvas a hablarle así a tu madre, con que cara le reclamas algo a la mujer que dejaste viuda, ella tal vez fallo por que le falta maldad, pero creeme, yo no fallare - le grito mirandola fijamente con esos ojos cambiantes que podía sentir que en ese momento estaban totalmente negros, porque estaba invocando toda la oscuridad que poseia

 

- Crucio! - grito esperando que el rayo verdoso saliese e impactara sobre su sobrina pero solo salían chispas - crucio! - volvió a lanzar pero aun no pasaba nada

 

- bien! si así lo quieres Elvis, así será - gruño guardando su varita mientras miraba hacia el techo de la sala como si su primo anduviera flotando en el aire mirándola severo - no se que hará tu madre pero yo si que te tomo la palabra, querida sobrina

 

Apenas guardo la varita y se fue sobre la pobre bruja dispuesta a darle tal golpe que se acordara toda la vida de lo que había hecho, puesto que parecía que su primo había hecho algo para que nadie se atacase en la mansión no le quedaba de otra, no había podido atacar a Aaron cuando había asesinado a Elvis así que estaba hecha una furia y buscando sobre quien descargar su dolor y su rabia y Shelle era su único blanco posible en aquel momento.

c3cuSMA.gif4dV4RuU.gif

adUnqJb.png

8qIYq5A.gif

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Luna estuvo de acuerdo y dejó su recuerdo en el pensadero del que acababan de salir. Eso la tranquilizó, puesto que tales revelaciones solo en la mente de su sobrina eran una verdadera bomba de tiempo. Hubiera replicado ante sus palabras, recomendándole no confiar a ciegas en tanta gente, pero temía que aquello generase una reacción no deseada. Lo cierto era que cuidaría de su recuerdo, lo mantendría en resguardo e impediría que pudiesen alterarlo. Eran su último recurso para reclamar justicia, ya fuese entre miembros de la Orden o en el CMI. Ya lo vería.


Fue entonces cuando su atención se desvió, naturalmente, hacia su cuñada. Sus palabras fueron muy duras contra Shelle y no llegó a comprender la razón. Tal vez Annick sabía algo más, ¿acaso lo que habían visto en el pensadero estaba mal? No lograba entender, pero vio a la pelirroja alzando la varita y pronunciando una maldición imperdonable. Esperó los efectos en su sobrina, pero estos nunca sucedieron. Por el contrario, la mujer pareció tomar mayor valor a la hora de dirigirse a su madre.


No intervino, la vio acercarse al pensadero y dejar aquellos recuerdos, y vociferar nuevamente contra su cuñada. Apretó los puños para no interceder. Se sentía culpable de aquellas acusaciones que iban dirigidas hacia la mujer de su marido, ella también había estado lejos, al punto de no saber nada respecto a Elvis en los últimos años. Y sí, su amnesia era una realidad, ¿pero antes? ¿qué la había mantenido alejada antes? El dolor de la pérdida empezaba a sobrepasarla nuevamente. ¿Algún día espantaría esa culpa?


Su prima, Sophie, fue la encargada de dar una respuesta a Shelle. Eran las palabras justas y necesarias, las que ella misma no había logrado pronunciar. Pero la sorprendió lo siguiente, pues su prima intentó utilizar la misma maldición que para su cuñada había fallado. Y nuevamente nada sucedió al hacerlo. Las palabras de Sophie, entonces, la hicieron llevarse ambas manos a la boca, pues lo nombró a Elvis, como si él hubiese hecho algo para impedir que pudieran atacar a su hija.


-Sophie no… por favor- le pidió al ver cómo su prima estaba lanzándose sobre Shelle. – No creo que sea el momento de empezar a los golpes. Estamos todos en shock y no sabemos qué hacer, las provocaciones y acusaciones están de más, a fin de cuentas, todos los aquí presentes somos culpables de no haber sabido, haber estado o haber intervenido. No se trata de medir y buscar quién es más culpable, sino entre todos buscar justicia. Hemos visto el rostro del asesino. – en eso debían pensar, en que tenían un culpable directo, acababan de ver al hombre que había robado el último respiro a Elvis.

oKhf7Mf.png

4dV4RuU.gif

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

El jaguar comenzaba a sufrir una transformación a su forma humana, la cual se encontraba completamente desnuada, y aún ese ser con la mirada baja despojado de su varita se encontraba contemplado su entorno invernal, viendo las visiones de sus insectos y seres vinculados a él, nadie más los podía controlar, bueno a sus insectos si, pero a esos despojos de seres no, algo tenebroso había en ellos, y dependía de su único maestro. Sin embargo, en parsel comienza a surrar Azrael Licaón.

 

-Cronos. -

 

Su elfo doméstico aparece a su lado con su varita, el cual la toma lentamente, con un leve movimiento cubre su cuerpo con un atuendo oscuro. Y camina unos pasos dejando ver claramente el hogar de los Gryffindor, sus hombres ya habian ingresado a ese sitio. Este ordena a los insectos que se encontraba en cada rincón del hogar de esos seres despreciable crear un bucle temporal, ellos notaría el cambio, simplemente viviría sus vidas como si nada, sólo que sus acontecimientos transcurrirá de la forma más lento. Esto ocurrió en todo ese hogar, por lo que los únicos capaces de mover en un tiempo sin alteración sería dado por sus juguetes, los cuales para los otros serían como fantasma que destroza el lugar.

 

En ello, los insectos exteriores provoca los mismos cambios que en el interior del lugar. El tiempo que rodeaba todo esa asquerosa morada se redujo producto de saber como Senecal de Caronte

 

-Vara de Cristal.-

 

Expreso en el idioma vulgar que fue creado el hechizo. Y en ese momento su objeto mágico adquiere su forma más poderosa, esas tres serpiente. En ello evocó su conocimiento de las Artes Oscuras y dentro un rango visual, y tras un chasquido de dedos sus hombres que habían destrozado todo en esa posilga que llamaban hogar. Estos perdieron su voluntad, dejando así verse miles de cuerpo.

 

-Fuego Compacto-

 

Y unn infernal ataque iría contra esos seres, era momento que los Gryffindor que estaban ocupados con el cuerpo de Elvis F Gryffindor, o esa discusión familiar murieran en compañía de Black, aquel líder de la Marca Tenebrosa, y ni su poder más fuerte de algunos de los presentes podría detener ese ataque. Y viendo, la posible complicación que sus insectos fueran molestia, este simplemente se disvinculo de los mismos y así, nada ni nadie podría frenar ello, así que los insectos caían del techo a esos magos y brujas.

 

-Cronos, es hora de irnos. -

 

Su elfo lo toma del pie y se marcha a rumbos desconocidos, sabiendo que esto le haría saber a Mael Blackfyre que si alguien amenazaba sufriría las consecuencias, y ésto era un claro ejemplo que no tendría ni el más mínimo sentimiento o le temblaria la mano en matarle a él o alguien que se meta en su camino.

7VZGWBY.jpg

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Intente hacer algo cuando vi a Shoppie pelear contra Shelle pero de nuevo no hice nada, algunos se preguntarán de mi falta de acción pero el que nombrará a Elvis me dejó paralizada de nuevo, así que internamente le agradecí a mi tía Mica que dijera algo, porque yo estaba tan sorprendida que solo podía observar la escena sin saber que decir.

 

Movi mi mano como si espantara una mosca en un vano intento de aclarar mis ideas, estaba tan sorprendida con lo que había pasado con mamá y Shelle que luego ver el accionar de Shoppie no me extrañó, pero me dolió demasiado darme cuenta como mi amada familia se iba desintegrando poco a poco, como si de un juego de naipes terminado se tratase y yo no pudiese hacer nada por impedirlo, menuda Auror de pacotilla estaba hecha.

 

Me lleve la mano a la boca de nuevo e intente decir algo pero nada salió de mis labios y era porque realmente no sabía que hacer ni que decir, Donde estaban mis ideas de parar la pelea ahora? Acaso estaba siendo débil? Era cierto que la muerte de papá me había dejado descolocada, pero jamás pensé que mi dolor me impediría proteger a la familia de lo que parecia ser una lucha, más de dolor por su perdida que otra cosa.

 

Simplemente me quedé allí siendo una muda espectadora de lo que pasaría a continuación, entendía que estaba hablando el dolor de ambas en realidad o al menos, eso era lo que quería pensar, porque pensar que en realidad no sé querían era demasiado para la vampireza, que deseaba más que nada tener a su familia unida y feliz de vuelta.

Luna-Gryffindor-Delacour.png.2b76e3b40e3

LGDdef.gifLEdef.gif

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Un pequeño y asqueroso insecto fue el único que quiso realmente escapar de allí, desde uno de los muebles del costado hacia abajo de los sillones, porque quizás creía que podría llegar a la salida. Pero mi pie fue mucho más rápido y pesado, provocando que quedara por debajo, totalmente aplastado. Esa imagen me hizo acordar del Rey de los Insectos y Supremo de las Arenas Orientales siendo aplastado por completo. Me incentivaba saber que iba a ser el encargado de destrozar cada centímetro de su persona. ¿Le tenía miedo? Sonreí ante la idea.

La situación en la sala de los Gryffindor se estaba volviendo cada vez más densa. La sacerdotisa estaba totalmente rendida en uno de los sillones y Annick desbordaba la mayor cantidad de ira posible por sus hermosos ojos verde esmeralda. Miré a la siguiente voz que parecía imponerse allí dentro. Pero ésta vez no me alarmé. No podía creer lo que mis ojos estaban mirando: Sophie apuntaba perfecto con su varita, como lo había hecho la otra bruja. Exclamaba con la manera que tenía que hacer la maldición. Y lo irónico de todo aquello es que hasta parecía que lo había hecho antes.

“¡Crucio! … ¡Crucio!”

Gritaba pero desde su varita no salía nada. Miré sorprendido a la bruja porque exclamaba el nombre del patriarca. ¿Qué tenía que ver? Todo pasó muy rápido (o tal vez la que era rápida era aquella vampiro) porque escuché primero a Mica intentar frenarla. Pero mi impulso me llevó a meterme delante de Shelle. Si, tal vez era una decisión totalmente est****4 pero era la parte que me tocaba. El impacto de su puño fue preciso, fue profundo, fue en seco y con demasiada fuerza, Tal vez si hubiera sido un simple muggle me hubiera partido la mandíbula. El golpe me hizo cerrar los ojos y sentir que me lanzaba hacia un costado. Tuve que apoyarme en una rodilla para intentar que el mundo me dejara de dar vueltas.

Aferraba mi varita con demasiada fuerza. Si tan solo hubiera tenido mi máscara allí, aquella muchacha no sería la misma. Respiré. No podía. No quería.

Me puse de pie con un hilo de sangre que caía desde la comisura de la boca. Me sequé con el puño de mi túnica. Y mire a Sophie. No dije nada. Estaba seguro que aquello no terminaba. Algunas chispas salieron de mi varita pero me estaba obligando a contenerme. Miré al otro grupo`, porque al parecer eso éramos otro grupo, la “otra familia”.

Al parecer ustedes quieren paz solo cuando les conviene. ¿No es así? ¿Y se hacen llamar familia? —miré a cada una, incluyendo a mi madre. No podría creer que si no estaba presente en aquel momento, la estaría llevando a la horca en ése preciso instante. Lo peor era que un pensamiento extraño se me cruzaba por mi cabeza, suponiendo que ella en realidad me había traído allí para tener alguien más de su lado. Porque si íbamos al caso, muchas personas habían pasado por mi vida y me habían jugado una mala pasada.

Si en aquel momento todo parecía que se iba centrar en aquella pelea, si su intención era matarse uno contra otros, entonces era yo quien tenía que poner un corte, frenar realmente todo.

Levanté la varita. Me hubiera encantado desquitarme con un par de maleficios y encantamientos, pero en vez de eso, giré mi varita y apareció volando a mis manos un sobre de papel beige con algunas letras que formaban una simple oración: Testamento de Elvis Gryffindor. Y la firma del patriarca y algunos pergaminos dentro.

— ¿Van a tratar la situación familiar como corresponde o prendo fuego esto? —lo decía en serio. Creía que podríamos haber llegado a ése momento de una manera más amena. Hasta había imaginado la situación de contándoles que había encontrado todo eso en Fabricantes de Mentiras, pero ya no me importaba eso, no me escucharian. Si querían leer sus últimas voluntades del mago que ya no se encontraba entre nosotros.

 

@@Luna Gryffindor Delacour @@Mica Gryffindor @@Sophia Elvira Mackenzie @@Arabella Gryffindor @@natasha evans malfoy @@Annick McKinnon @@Shelle Katerina Gryffindor

|| 1yqixEK.gif || Marca-1.gif.664cbd85ef4de2f10b959916cce5||
Chw3Ljs.png
GOLDOR ♦ DEMONIUM MERIDIANUM

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Fueron demasiadas cosas las que ocurrieron en pocos segundos. Si bien Annick nunca antes había empleado el hechizo cruciatus, le sorprendió percatarse de que no había tenido ni un mínimo efecto. ¿Acaso había algún problema con su varita? Incluso se preguntó si no tenía la habilidad suficiente para utilizar una maldición como esa…

 

Las palabras de Shelle la hicieron apartar la mirada del trozo de madera que sostenía, pero no tuvo tiempo de responder a los impertinentes comentarios de la joven porque su prima Sophia intervino. A Annick comenzó a formársele un pequeño nudo en la garganta al escuchar lo que la vampiro decía, y por un breve momento vislumbró la posibilidad de abandonar la mansión Gryffindor y regresar a la Granger. Sin embargo ese pensamiento casi se esfumó de inmediato al ver que el hechizo de Sophia tampoco parecía tener efecto.

 

Si de algo estaba segura era de que la oscuridad que su prima poseía era suficiente para que realizara ese hechizo a la perfección. Algo sucedía. Y fue la misma Sophia la que lanzó al aire una posible explicación: ¿Elvis? ¿Acaso el patriarca había hecho algo para impedir que sucediera lo que estaba ocurriendo?

 

La pelirroja vio que su prima se lanzaba hacia Shelle, pero como ella seguía desconcertada por escuchar el nombre de su esposo, ni siquiera intentó detenerla. Escuchó que Mica decía algo, pero fue Mael quien recibió el golpe de Sophia. Hubo un breve momento en el que todos guardaron silencio y Annick aprovechó ese instante para expresarse:

 

No te atrevas a hablar sobre mi relación con Elvis ―dijo a Shelle con la ira aún reflejada en su mirada y en la voz―. Yo lo amo… ―se dio cuenta de lo extraño que sonaba esa palabra dadas las circunstancias― Lo amaba tanto que hice lo que me pidió; y si no tienes ni idea de dónde estuve todo este tiempo, me queda claro que él no te tenía la suficiente confianza como para contártelo; y no seré yo quien te lo revele.

 

La pelirroja escuchó la recriminación de Mael y le sostuvo la mirada. Apenas lo conocía, pero le llamó la atención esa determinación que acababa de demostrar a pesar de ser tan joven. No obstante esa primera impresión desapareció cuando amenazó con prenderle fuego a lo que ella creía que era el testamento de su esposo.

 

¡Accio sobre! ―en esa ocasión, para alivio de Annick, el hechizo funcionó, los documentos fueron hacia ella y los atrapó al vuelo―. ¿Por qué tienes esto? ―preguntó a Mael con cierto recelo en la voz.

 

Hasta ese momento no lo había visto con malos ojos, pero le provocó cierta desconfianza que el joven tuviera en su poder esos documentos tan importantes y que ella había imaginado guardados en el despacho de su difunto esposo. Miró lo que había escrito fuera del sobre y reconoció la letra de Elvis. Sintió un pinchazo de dolor al observar los trazos de su firma.

 

Esto debe estar en las manos correctas… ―alargó la mano con la que sostenía el sobre para que lo tomaran Mica, Arabella o Luna, pues le parecía que ellas eran quienes tenían más derecho a conocer el contenido del testamento. Unas por su relación sanguínea con Elvis y la otra por su estrecha relación con el Auror.

 

Por su parte, lo que Annick deseaba no podía tenerlo y los bienes materiales no lograrían reemplazarlo; además estaba casi segura de que Elvis no había dejado desprotegido al pequeño Elros, quien tomaría posesión de ello cuando tuviera la edad suficiente para saber manejarlo. Así pues, ella estaba poco interesada en lo que los pergaminos pudieran decir; pero tenía la convicción de que solo ciertos miembros de la familia eran quienes tenían derecho a que esos documentos estuvieran en sus manos.

 

gnDEgfw.gif                   ¡Gracias, Elviro! 😍

QMxjxpE.jpg
HBbtNSf.giffSL7BoU.gif ~ JJlyjO8.gif

 

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Era sabido que sus palabras no servirían de mucho. Observó la situación como si fuese una espectadora más. Justo cuando Shelle estaba a punto de ser golpeada, Mael se interpuso y recibió el puñetazo. Al incorporarse, notó que caía sangre de su labio, se lo notaba molesto y miraba a todos con frialdad. “Episkey” pensó, concentrada en al menos sanar el golpe no merecido por el mago, a fin de cuentas, era el que menos tenía que ver con aquella trifulca.


Las palabras del joven fueron duras pero realistas. ¿Acaso en eso se había convertido su familia? En individuos dispuestos tan solo a pelear por sus propios intereses y descargar su rabia contra los demás… podría serlo, quien realmente los unía y los llevaba a ser mejores personas, cuidándose los unos a los otros y fomentando la confianza en la familia, ya no estaba. Y no regresaría.


No pudo evitar la sorpresa al notar el modo en que él trató de terminar con la pelea, tal vez metiéndolos en alguna nueva. Las letras que se leían en el pergamino que sostenía eran demasiado clara y, a su vez, dolorosas. ¿Acaso Elvis estaba ya preparado para este momento? No le extrañaba de su hermano, pues siempre había sido muy ordenado en todos los asuntos que implicasen papelerío.


La amenaza de prenderlo fuego no la alborotó, puesto que de lo que allí decía no quería saber nada. No estaba lista para tratar esos asuntos y, de todos modos, no quería quedarse con nada. No le correspondía. El único sitio que le interesaba ya lo compartía con Mael. El resto era de su esposa e hijos.


Su cuñada pareció pensar diferente, apropiándose del sobre. Estaba bien, si alguien debía leer ese papel era ella y nadie más. Pero el gesto de Anncik al tratar de tenderlo hacia ellas le partió realmente el alma. No pudo hacer más que acercarse y cerrar la mano en torno a la de su cuñada, negando lentamente con la cabeza.


-No hay persona más indicada que tú para tenerlo en su poder, y leerlo cuando lo sientas. Todo te pertenece, lo quieras o no. Fuiste el amor de la vida de mi hermano, su compañera de vida, y eres quien tiene derecho a decidir sobre todo… bueno, tú y tus hijos. -notó que sus ojos se empañaban, comenzaba a quebrarse nuevamente. Soltó la mano de su cuñada para volver a alejarse. Solo esperaba que Mael no hubiese intervenido en ese papel, como ya lo había hecho con el del negocio.

oKhf7Mf.png

4dV4RuU.gif

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Cuando Mael dijo que prendería fuego el testamento de papá, quise estirar la mano para atrapar el papel pero me detuve en el acto cuando vi a mamá tomarlo en su lugar y preguntarle ¿por qué él tenia eso? asentí a su pregunta porqué además de esas se abrieron nuevas preguntas en mi cabeza, unas que quizas nunca tendrían una respuesta adecuada, ¿de donde había salido eso? ¿era legitimo el papel o era solo una chapuza del mago? suspiré porqué confiaba en él, por la simple razón de que era hijo de Shelle y porque había jurado protegerlo y así lo haría, por más que sus modos para calmar a la familia no fueran los que hubiera elegido, al menos funciono para que no siguieran peleándose tanto, estaba por tomar el papel por segunda vez cuando las palabras de mi Tía Mica me detuvieron de vuelta, ella tenía razón mamá debería de leer eso, porque estaba segura que nadie había amado a papá tanto como ella, así que era evidente que la que tendría que leerlo era mamá, pero una parte mía también quería saber que decía eso, ¿Qué hacía ahora? ¿veía a mi familia desintegrarse o los unía de alguna manera? lentamente tomé una decisión y dije lo único que podría decir en tales circunstancias.

 

- Para empezar creo que la tía Mica tiene razón, debes de leerlo mamá, nadie merece leerlo más que vos y en cuanto a la idea de mi sobrino Mael de quemarlo... fue una bonita treta para logar que se calmarán los ánimos, así que mil gracias por calmar a mi familia, por lo demás quisiera leer el testamento así que Annick, ¿quieres que lo leamos ahora o más tarde? es que de veras que quiero saber que decía papá allí y que nos corresponde a cada uno, aunque se porque investigué apenas paso todo esto, que es mitad para cada uno de sus hijos por igual, no recuerdo los porcentajes en estos momentos y el resto para vos má, o al menos, eso sería lo más lógico ¿no?.... así que má si quieres leerlo para todos nosotros me gustaría saber que dice el papel - Le pedí en un susurro a Annick preguntándome si podríamos averiguar la ultima voluntad de Elvis o no -

 

La pelea familia había minado mi espíritu y mis ánimos, por lo general sonaba mucho más alegre y feliz pero si a eso le sumábamos lo mal que estaba porque papá había muerto, ¿Cómo podía sonar alegré y sonreír como siempre? me dije que era evidente que no estaría para nada feliz, máxime porque siempre había querido a mi familia unida y me dolía verla tan dividida y peleándose por doquier, se sentía como si hubieran dos bandos y eso era algo que quería evitar a toda costa y buscaría hacerlo de alguna manera, estaba segura que algo se me ocurriría para lograr unificar a la familia de vuelta, al fin y al cabo, alguien tenía que hacerlo ahora que el capitán del barco ya no estaba más ¿no?.

 

- Solo quiero pedirles que nos mantengamos unidos todos, no importa quien tenía el papel o porqué lo tenía, lo importante es que aquí lo tenemos y que podemos enterarnos de que quería decirnos papá en su testamento ¿no? además de que quiero mantener a la familia junta y en paz, se que les costará a todos esto, pero les pido que nos mantengamos unidos todos como la familia que somos ¿Qué les parece? - Les pedí con mi repique de campanas más alto de lo habitual, preguntándome si no estaría siendo muy optimista sobre la unión de la familia -

 

Me seguía preguntando lo mismo que me decía a mi misma desde que papá se fue, ¿podríamos volver a tener paz en mi hogar? pase mi mirada azul clara por mi tía Mica, por mamá, por Shopie, por mi hermana Shelle, por mi tía Bella, por Natasha y por Mael diciéndome que lo lograríamos de alguna manera y prometiéndome a mi misma que haría lo que estuviera en mis manos para mantenernos a todos juntos y en paz, al fin y al cabo, nos gustará o no éramos familia y teníamos que convivir juntos, por ende en estos momentos no podía haber bandos contrarios, solo unión familiar, misma por la que lucharía con uñas y dientes, porque lo más importante de todo era mantener junta a la familia.

 

 

@@Mica Gryffindor @@Sophia Elvira Mackenzie @@Arabella Gryffindor @@natasha evans malfoy @@Annick McKinnon @@Shelle Katerina Gryffindor @@Mael Blackfyre

Luna-Gryffindor-Delacour.png.2b76e3b40e3

LGDdef.gifLEdef.gif

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

La situación en la sala de la mansión estaba pasando de claro a oscuro, acusaciones iban y venían, Sophia también alzó su varita y nuevamente nada volvió a suceder. Me quede pensando por que pasaba aquello, ¿Acaso algo no nos permitía atacarnos? aquello era demasiado extraño y no podía dejarse pasar por alto. Sophia trato de llegar a Shelle y en su cuerpo podías notar la tensión y la furia que sentía. Mica fue la primera en reaccionar y trato de calmar a nuestra temperamental prima, yo me mantuve de brazos cruzados, si querían llegar a los puños por mi bien, el dolor y la tristeza debía salir de alguna manera, no era la forma, pero, consideraba no ser quien para juzgar como se conducía cada quien.

 

El muchacho que había visto durante la ceremonia, y que se encontraba allí, Merlín sabría por que, hablo y lanzó una frase que me hizo ver todo rojo. ¿Quién él para venir a decirnos como actuar? que relación tenia con la familia para sentirse con derecho de hablar de nuestra familia. me acerqué a donde se encontraba, y lo mire directamente a os ojos, algo en el no me gustaba, y estaba decidida a hacérselo saber.

 

- Acaso no sabes, que para que haya paz, primero es necesario ganar y perder batallas- lo mire desde la coronilla hasta los pies y luego volví a fijar mis ojos en los suyos- Las familias pelean, se enojan, se lanzan acusaciones, pero cada uno esta aquí para el otro- mire a Shelle- a pesar de no estar muy seguros de las lealtades- mis ojos volvieron al joven- eso es algo que solo va a entender alguien que ha creído en una familia como la nuestra, una familia grande y ruidosa- me gire para alejarme, ya tendría tiempo de averiguar cosas sobre él.

 

Mientras Annick con una floritura de su varita recuperaba el sobre que aquel hombre llevaba consigo me acerque a la pelirroja, quien nos lo ofreció, a Mica, a Luna y a mí, amas mujeres negaron ante la petición de que fuéramos nosotras las encargadas de abrirlo. Me uní a la negativa meneando mi cabeza, si alguien tenia derecho era ella, la mujer que Elvis había amado, la madre de sus hijos, la sangre no necesariamente representaba parentesco y muchos de los allí presentes podíamos dar fe de ello.

 

- Annick- dije apoyando mi mano en su antebrazo- concuerdo con Mica y Luna, tu eres la mas indicada para abrir y leer esos papeles.- callé un momento para tratar de controlarme- Tu tienes todo el derecho a ser quien los lea Annick, así que po favor, haz los honores- dije mientras volvia a tomar asiento en uno de los sillones muy cerca de la pelirroja.

4dV4RuU.gifhttp://i.imgur.com/AQmRzhf.gif

GreMr1t.png

http://i.imgur.com/uj6dJe4.gifhttp://i.imgur.com/zXlSMy2.gif

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Unirse a la conversación

Puedes publicar ahora y registrarte más tarde. Si tienes una cuenta, conecta ahora para publicar con tu cuenta.

Guest
Responder a esta discusión...

×   Pegar como texto enriquecido.   Pegar como texto sin formato

  Sólo se permiten 75 emoji.

×   Tu enlace se ha incrustado automáticamente..   Mostrar como un enlace en su lugar

×   Se ha restaurado el contenido anterior.   Limpiar editor

×   No se pueden pegar imágenes directamente. Carga o inserta imágenes desde la URL.

Cargando...
 Compartir

Sobre nosotros:

Harrylatino.org es una comunidad de fans del mundo mágico creado por JK Rowling, amantes de la fantasía y del rol. Nuestros inicios se remontan al año 2001 y nuestros más de 40.000 usuarios pertenecen a todos los países de habla hispana.

Nos gustan los mundos de fantasía y somos apasionados del rol, por lo que, si alguna vez quisiste vivir y sentirte como un mago, éste es tu lugar.

¡Vive la Magia!

×
×
  • Crear nuevo...

Información importante

We have placed cookies on your device to help make this website better. You can adjust your cookie settings, otherwise we'll assume you're okay to continue. Al continuar navegando aceptas nuestros Términos de uso, Normas y Política de privacidad.