★ Magic Land ★ (MM B: 109743)

[Amit Lockhart]

Cuando esta corriendo, no me fije que había un chico en la oscuridad del parque, sin querer llegue con la gran velocidad que tenia contra el, lo que faltaba perder tiempo si los demás chicos me encuentran aquí va ser peligroso para ambos, pero mas mi

 

estaba muy agitado por la persecución que acabo de tener para poder llegar donde estaba, miraba hacia atrás a ver si había algún señal de la pandilla, pero a parecer los había perdido por los momentos, eso me dara tiempo de tomar un poco de fuerza para cuando lo vuelva a ver.

 

No había escuchado que el pelirojo me estaba preguntando algo, estaba tan metido en mis problemas que no le preste atencion a su palabras. - Suéltame yo me se cuidar solo y si estoy bien gracias - le respondí mientras lo empuje para soltarme un poco de el, no sabia cuales eran sus intensiones.

 

- yo no soy un ladrón , es eso lo que quieres decir con tus palabras, soy un chico de la calle, pero por eso no quiere decir que no se respetar las cosas de los demás - le dije mientras me quitaba el polvo sobre mi ropa, me senti ofendido pero se que acomodar mi ropa no haría que mi condición cambien.

 

acepte la invitación de lleva la conversación a otro lugar - dígame usted para donde, me quiere llevar, pero algo si le dijo estar conmigo no es seguro para un chico como tu- le dije por si acaso nos encontramos a los pandilleros, vieran a un chico rico por este lado de la ciudad

 

 

 

@@Alexander Fox

[Alexander Fox]

Se sorprendió de la reacción del joven, pero sencillamente sonrió, sentía que era como un gato arisco, sabía que resultaría peligroso ayudarlo demasiado podría asustarlo o incomodarle y era lo menos que el pelirrojo deseaba hacer, quería ayudarle un poco, sabía ese sentimiento de estar en esa situación, además le producía genuina curiosidad el saber porque otra persona estaría allí.

-jajaja es cierto, entonces eres mejor persona de lo que yo fui hace muchos años atras – respondió divertido, intentando restarle importancia y relajando un poco la tensión. En su pasado no solo había vivido en la calle como aquel chico, sino había robado, atacado y escapado muchas veces, no había tenido la opción de ser “honrado” como lo conseguía hacer el joven.

-No, no… Me acaba de regañar por juzgarle de esa manera y usted esta haciendo lo mismo conmigo ahora ¿soy un chico rico? de verdad suena gracioso – habló con sencillez para seguir caminando – sencillamente deseaba más luz, sabe este parque es bastante oscuro la luz por lo menos nos mostrara un mejor camino para no chocar con nada – agregó con suavidad son detenerse.

-¿Peligroso? ¿Por qué lo dices? ¿Por esos pandilleros que se nos acercan cada vez más ansiosos de violencia? – Preguntaba con sencillez mientras se girarla levemente observando con sus orbes dorados que se colorearon de un rojizo más fuerte

– Sabes… el huir jamás será una solución, en realidad solo quita respeto, eso lo aprendí de alguien que era muy fuerte – habló por fin siendo iluminado por una débil lampara, para sonreirle gentilmente, mientras le colocaba la mano en el hombro – el desconfiar es algo normal si vives en la calle, pero si no sabes reconocer quien puede ayudarte y quien… puede resultar peligroso – comentó con suavidad, mientras esperaba.

@@Amit Lockhart

[Alexander Fox]

Se sorprendió de la reacción del joven, pero sencillamente sonrió, sentía que era como un gato arisco, sabía que resultaría peligroso ayudarlo demasiado podría asustarlo o incomodarle y era lo menos que el pelirrojo deseaba hacer, quería ayudarle un poco, sabía ese sentimiento de estar en esa situación, además le producía genuina curiosidad el saber porque otra persona estaría allí.

-jajaja es cierto, entonces eres mejor persona de lo que yo fui hace muchos años atras – respondió divertido, intentando restarle importancia y relajando un poco la tensión. En su pasado no solo había vivido en la calle como aquel chico, sino había robado, atacado y escapado muchas veces, no había tenido la opción de ser “honrado” como lo conseguía hacer el joven.

-No, no… Me acaba de regañar por juzgarle de esa manera y usted esta haciendo lo mismo conmigo ahora ¿soy un chico rico? de verdad suena gracioso – habló con sencillez para seguir caminando – sencillamente deseaba más luz, sabe este parque es bastante oscuro la luz por lo menos nos mostrara un mejor camino para no chocar con nada – agregó con suavidad son detenerse.

-¿Peligroso? ¿Por qué lo dices? ¿Por esos pandilleros que se nos acercan cada vez más ansiosos de violencia? – Preguntaba con sencillez mientras se girarla levemente observando con sus orbes dorados que se colorearon de un rojizo más fuerte

– Sabes… el huir jamás será una solución, en realidad solo quita respeto, eso lo aprendí de alguien que era muy fuerte – habló por fin siendo iluminado por una débil lampara, para sonreirle gentilmente, mientras le colocaba la mano en el hombro – el desconfiar es algo normal si vives en la calle, pero si no sabes reconocer quien puede ayudarte y quien… puede resultar peligroso – comentó con suavidad, mientras esperaba.

@@Amit Lockhart

[Orión Yaxley]

Como si el Yaxley lo hubiese visto venir, con total calma y seriedad sacó la taza con café que tenía sobre la mesa para que Maida no la mandara a volar por encima de la que intentaba ser una limpia caravana. Que se aparezca Luisitha de esa forma no era tampoco ninguna novedad. Siempre entraba dramáticamente, como si su vida dependiera de ello y él ya se había como que medio acostumbrado. Recordó un cierto suceso en Hému que lo dejó con cierto cuidado frente a las relaciones amorosas de su hermana.

 

Sin embargo, se distrajo en un segundo cuando reaccionó ante la situación cómica que estaba viviendo. Le dio un trago que case escupe cuando Luisitha realizó su mejor impresión china. Si las agrupaciones anti racistas estuvieran escuchando toda esa conversación, ya se hubiesen metido en bastantes líos.

 

Se acercó a la mesada y calentó agua en una taza con su varita. Siguiente paso, sumergió un saquito de té. La idea era que Luisitha se tranquilizara. Con la gran palma de su mano derecha, empujó con mucha sugestión al cuerpo de ella para que tomara asiento de una buena vez.

 

- A ver, from the top. ¿Qué diablos pasó? ¿Qué pata metiste? ¿A quién crees haber matado?

 

Levantó los ojos como una suricata centinela. Algo estaba pasando fuera de la cabaña.

 

- Y qué diablos son esos ruidos.

 

Ya habían tenido visitantes en un pasado no muy lejano y no fue todo positivo. Si ignoramos los hechos de que fueron visitados por la banshee del engendro de la muerte –sea lo que signifique eso– y un trabajador misógino e irresponsable que terminó –esperamos– decapitado gracias a una afortunada deficiencia en ese momento dentro de la montaña rusa. Entre cerró los ojos y miró a Gatiux.

 

- ¿Hará falta usar la montaña rusa de nuevo?

[Maida Black Yaxley]

— Y mira que yo a veces pienso que ustedes son los magos más medianamente normales en Ottery —dijo mientras se bajaba por fin de la mesa, y confiaba en que Gatiux tuviera más fuerza en los zapatos de lo que aparentaba con esa figura tan delicada.

 

Trató de seguir el hilo de lo que decía Orión, sin embargo era un poco difícil si se tomaba en cuenta que pronto, unas voces se oyeron en el exterior. Dónde debería funcionar un centro de atracciones. ¿Serían los chinos buscando venganza por lo que supuestamente había hecho su madre? Ahora, por otro lado, la Black era incapaz de matar a nadie, ni siquiera estaba muy de acuerdo con que ella tuviera un elfo doméstico, no la veía en ninguna situación que resultara violenta. Cosa graciosa.

 

— Hagamos algo, primero que nada, averiguemos si algo de lo que dijo es cierto, segundo, creo que de mi lado podría ayudarlos verificando si esos comerciantes ingresaron por la vía legal a Inglaterra. Si no fue el caso, me temo que no podremos hacer mucho por rastrear nada, y en el lado positivo —bajo un poco la voz sin importarle si finalmente la iban o no a oír—, si esos personajes "no estuvieron en Londres", no les tuvo que haber pasado nada malo, ¿verdad?

 

Si, estaba poniéndose en el peor de los escenarios. En aquel dónde su madre había cobrado la vida de alguno de ellos y bueno, ella como funcionaria debía denunciarla y no lo haría. Sangre es más pesada que muchas cosas en esta vida, y lo estaba aprendiendo cada vez más. Entonces, ella no iba a decir nada, es más, se haría literalmente de la vista gorda. Solo faltaba confiar en que estos individuos realmente hubieran incumplido las leyes de formalizar su ingreso a Inglaterra.

 

— Ahora, tracemos una forma de solucionar esto, y para justificar mi día ausente en la Oficina, diremos que se equivocaron de solicitud y lo que realmente querían era contratar algún servicio de control de plagas o lo que sea —miró a su mamá, siendo ayudada para tratar de sentarse como una persona medianamente normal—, ¿en serio ninguno de ustedes cree que tiene problemas serios? —murmuró.

[-_Vegueta_-]

Habia llegado ahi, vestia mi larga gabardina gris y mi camisa blanca que tenia algunos botones fuera del lugar, mi corbata

estaba totalmente desalineada lo cual era normal en mi ya que nunca tenia tiempo de arreglarme al 100 %, pero debia

seguir mi camino. Habia algo o alguien que me atraía a este oscuro y viejo lugar lleno de luces y debia descubrirlo.

 

Me encamine hacia el puesto donde podria comprar mi boleto pues tal parecia el buen hechicero y exorcista no podria

entrar de forma gratuita pero era normal, debia tener un perfil bajo. Mis manos buscaron en mis bolsillos mi billetera para asi

poder pagar la entrada.

 

- Aqui tienes.

 

Una vez que pague mi boleto me adentre con pasos decidido observando la unica atraccion que tenia, era una montaña rusa

dañada, vieja, oxidada, pero aun asi se mantenia en pie, y en uso. Mi mirada siguio su rumbo observando el cartel que decia

que estaba en construccion, pero no habia respuesta del por que abriria un lugar asi tan poco llamativo pero aun asi la presencia era mas fuerte a medida que me adentraba.

[Beryl Serenity Hawthorne]

Eran alrededor de las 11 de la mañana y yo no tenía nada entretenido que hacer, me encontraba en ropa de dormir en mi sala de estar, claro, en mi departamento muggle en Chelsea, estaba viendo el televisor y honestamente no había nada bueno en su programación.

 

Estaba tan aburrida y perdí la esperanza de pasar un día realmente divertido, hasta que recordé aquel parque de diversiones al que mis padres me llevaban de pequeña. Recordaba que se encontraba cerca del famoso callejón diagon, sonreí del solo adentrarme en mis recuerdos de la infancia, más aparte recordar que decía parque en construcción, lo que provoco que soltara una carcajada de nostalgia.

 

Decidí que no me la iba a pasar aburrida en mi departamento, me puse unos vaqueros oscuros, unas botas estilo militar de plataforma negras, una blusa manga larga gris y un cárdigan negro. Después, me imagine como sería volver a ese lugar, desaparecí y reaparecí en aquel parque sueco.

 

Ahí estaba yo, en la entrada del parque que marco mi infancia, el famoso “Magic Land”, de solo verlo casi lloro de la nostalgia que me provocaba ese lugar. Decidí avanzar hasta la taquilla para comprar una entrada, me atendió una elfina muy simpática, algo que es muy raro en ese tipo de criaturas, me dijo: Hola, bienvenida a “Maic Lan”, cuantas entradas deseas? Me cuestiono con una enorme sonrisa, a lo que respondí:

 

-Una entrada, por favor-respondí con otra sonrisa.

 

Me entrego mi boleto y al mismo tiempo entregue los $200 galeones que costaba aquella entrada, Salí de la taquilla con dirección a los accesos al parque, tenía la loca idea de subirme a la montaña rusa que aún no estaba terminada, al fin y al cabo que no podía morir, por el hecho de ser inmortal, me forme en la fila para subir a la atracción, cuando la multitud de la fila me hizo chocar y empujar al hombre que tenía enfrente, haciendo que técnicamente quedara abrazada a él.

 

-Diablos, discúlpeme, esta gente empuja demasiado, se encuentra bien?-cuestione apenada por el vergonzoso hecho.

 

@-_Vegueta_-

[Beryl Serenity Hawthorne]

Eran alrededor de las 11 de la mañana y yo no tenía nada entretenido que hacer, me encontraba en ropa de dormir en mi sala de estar, claro, en mi departamento muggle en Chelsea, estaba viendo el televisor y honestamente no había nada bueno en su programación.

 

Estaba tan aburrida y perdí la esperanza de pasar un día realmente divertido, hasta que recordé aquel parque de diversiones al que mis padres me llevaban de pequeña. Recordaba que se encontraba cerca del famoso callejón diagon, sonreí del solo adentrarme en mis recuerdos de la infancia, más aparte recordar que decía parque en construcción, lo que provoco que soltara una carcajada de nostalgia.

 

Decidí que no me la iba a pasar aburrida en mi departamento, me puse unos vaqueros oscuros, unas botas estilo militar de plataforma negras, una blusa manga larga gris y un cárdigan negro. Después, me imagine como sería volver a ese lugar, desaparecí y reaparecí en aquel parque sueco.

 

Ahí estaba yo, en la entrada del parque que marco mi infancia, el famoso “Magic Land”, de solo verlo casi lloro de la nostalgia que me provocaba ese lugar. Decidí avanzar hasta la taquilla para comprar una entrada, me atendió una elfina muy simpática, algo que es muy raro en ese tipo de criaturas, me dijo: Hola, bienvenida a “Maic Lan”, cuantas entradas deseas? Me cuestiono con una enorme sonrisa, a lo que respondí:

 

-Una entrada, por favor-respondí con otra sonrisa.

 

Me entrego mi boleto y al mismo tiempo entregue los $200 galeones que costaba aquella entrada, Salí de la taquilla con dirección a los accesos al parque, tenía la loca idea de subirme a la montaña rusa que aún no estaba terminada, al fin y al cabo que no podía morir, por el hecho de ser inmortal, me forme en la fila para subir a la atracción, cuando la multitud de la fila me hizo chocar y empujar al hombre que tenía enfrente, haciendo que técnicamente quedara abrazada a él.

 

-Diablos, discúlpeme, esta gente empuja demasiado, se encuentra bien?-cuestione apenada por el vergonzoso hecho.

 

@-_Vegueta_-

[Beryl Serenity Hawthorne]

Eran alrededor de las 11 de la mañana y yo no tenía nada entretenido que hacer, me encontraba en ropa de dormir en mi sala de estar, claro, en mi departamento muggle en Chelsea, estaba viendo el televisor y honestamente no había nada bueno en su programación.

 

Estaba tan aburrida y perdí la esperanza de pasar un día realmente divertido, hasta que recordé aquel parque de diversiones al que mis padres me llevaban de pequeña. Recordaba que se encontraba cerca del famoso callejón diagon, sonreí del solo adentrarme en mis recuerdos de la infancia, más aparte recordar que decía parque en construcción, lo que provoco que soltara una carcajada de nostalgia.

 

Decidí que no me la iba a pasar aburrida en mi departamento, me puse unos vaqueros oscuros, unas botas estilo militar de plataforma negras, una blusa manga larga gris y un cárdigan negro. Después, me imagine como sería volver a ese lugar, desaparecí y reaparecí en aquel parque sueco.

 

Ahí estaba yo, en la entrada del parque que marco mi infancia, el famoso “Magic Land”, de solo verlo casi lloro de la nostalgia que me provocaba ese lugar. Decidí avanzar hasta la taquilla para comprar una entrada, me atendió una elfina muy simpática, algo que es muy raro en ese tipo de criaturas, me dijo: Hola, bienvenida a “Maic Lan”, cuantas entradas deseas? Me cuestiono con una enorme sonrisa, a lo que respondí:

 

-Una entrada, por favor-respondí con otra sonrisa.

 

Me entrego mi boleto y al mismo tiempo entregue los $200 galeones que costaba aquella entrada, Salí de la taquilla con dirección a los accesos al parque, tenía la loca idea de subirme a la montaña rusa que aún no estaba terminada, al fin y al cabo que no podía morir, por el hecho de ser inmortal, me forme en la fila para subir a la atracción, cuando la multitud de la fila me hizo chocar y empujar al hombre que tenía enfrente, haciendo que técnicamente quedara abrazada a él.

 

-Diablos, discúlpeme, esta gente empuja demasiado, se encuentra bien?-cuestione apenada por el vergonzoso hecho.

 

@-_Vegueta_-

[-_Vegueta_-]

Senti como una pequeña dama chocaba contrami y sin mas pase a abrazarla para que no cállese o se lastimara

era raro ver tanta gente cuando el lugar estaba en muy mal estado, cualquiera podria lastimarse

muy mal o hasta morir, pero no era de mi importancia

 

- yo estoy bien, pero usted se encuentra bien ?

 

La mire fijamente, su rostro era llamativo ya que se veia preocupada por mi eso era algo poco comun

ya que era una persona solitaria, nunca nadie preguntaba por mi, por que nunca estaba junto a nadie.

Observe sus mejillas sonrojadas se podia deber al tumulto de gente que habia, pero la hacia ver tierna.

 

- Espero que estes bien debes tener cuidado en un lugar como este, es algo peligroso como para una señorita

como usted.

 

La ayude a incorporarse con delicadeza y luego mis manos volvian a mis bolsillos donde deberian mantenerse

mientras mi estadia se encontrase en ese lugar, era normal ya que si sucedia algo en este peligroso lugar

deberia estar preparado para cualquier cosa.

 

@@Beryl Serenity Hawthorne