- Mansión Luxure - (MM B: 110324)

[Dana Gryffindor]

Él me había besado. Esperaba que fuera por efecto del mareo por haber perdido tanta sangre, pero no... él estaba seguro de lo que había hecho y hasta preocupado porque Lady nos había visto. Sentí su mano en mi cintura y mi piel se erizó como un gato enfurecido al sentir un escalofrío recorrer mi piel.

 

-No voy a desmayarme- dije con seriedad cambiando mi semblante y dejándole ver que no me venía en gracia lo que había hecho.

 

-Veo que ya te sientes mejor- resolví -supongo que no puedo juzgarte, tu me besas sin permiso y yo tomo tu sangre a la fuerza. Es un intercambio... justo.

 

Me puse de pié fijando mis ojos en los suyos ¿Quién era este muchacho? Jamás lo había visto antes. Entonces resolví que a mi, ¡Shiva!, no iban a besarme sin permiso alguno y tomé mi varita y se la puse en la garganta arrojándome sobre Gabriel y posicionando mi cuerpo sobre el suyo para retenerlo. Acerqué mis labios a su oreja, podía sentir su perfume tan fino y su cabello suave sobre mi rostro.

 

-Si vuelves a besarme- dije dibujando una sádica sonrisa en mis labios -será lo último que hagas.

 

-Langlock- susurré probocando que la lengua se le pegue al paladar por un rato.

 

@@Gabriel W Diggory

[Hessenordwood Crouch]

No es habitual en él dejar el trabajo para después, no, es una mala costumbre y le da una imagen terrible y Hess se ha esforzado suficiente por mantener ese aspecto social que se ha conseguido, discretamente, hasta ahora. Al menos hasta hace apenas unos meses atrás. Claro que, el trabajo con el señor de Ollivander, habría absorbido el mayor de su tiempo, y luego de las cacerías nocturnas y los negocios clandestinos que despertaron en él mucho interés después de acomodarse en Europa como todo un mago, apenas le quedó tiempo de ponerse al corriente con asuntos familiares, suyos o tan siquiera del hombre Crouch. Igualmente, no es que le hubiera importado antes.

 

De todas formas, el apellido del mortal le ha ayudado mucho más de lo esperado, aun así, siendo apenas influyente, se ha manejado con discreción fuera de círculos sociales reales ruidosos y, por supuesto, de los familiares. Nada, Hessen tiene ambiciones muy diferentes a algo como eso. Desde luego, no está aquí para esto, no ha vuelto para un conmovedor encuentro familiar con los Luxure después de siglos de no verles las podridas almas demoniacas, no cree después de todo que les deba algo más allá de su des fortunio y ciertamente no acumula las razones suficientes para estar ahí ahora, aun si era verdad que pude encontrar ahí adentro a sus otras dos terceras partes.

 

Por otro lado, no podrá tampoco evitar a Luxure para siempre y el hecho de que finalmente reconozca a uno de ellos muerto, bueno, si era un algo que le mejoraba los ánimos, eso claro si las blasfemas que publicaba el profeta estos días eran de fiar, que aun para alguien como Hess, que ha vivido por mucho mas tiempo del que puede recordar lejos de Londres, o de la Europa misma, ya no lo son. Peor todavía viniendo de ese hombre de nombre ridículo, Uriel Luxure.

 

La mirada de Hess es casi transparente cuando finalmente alcanza los pies de la mansión de los Luxure, su rostro reluciente no es capaz de reflejar verdaderamente los pensamientos más rebuscados que pasan por su cabeza. El nombre de Uriel Luxure no le resulta en absoluto familiar, al igual que seguramente no lo será el de ninguna otra persona ahí además de ser familia, supuestamente. Por supuesto que no espera que ellos reconozcan el suyo, o tan siquiera su rostro, por que del demonio ya solo queda la conciencia oculta en un cuerpo mortal como cualquier otro. Hessenordwood Crouch solo era el desgraciado humano del rostro que debe lucir ahora.

 

--¿Cú-cúal dice que es su nombre? -, el elfo pregunta con terror en su voz. El mago destaca su presencia con elegancia, es una figura alta y robusta sobre el lobby de la mansión, casi desencaja, parece un tanto impacientado, por el modo en el que sus ojos cristalinos y planos recorren cada rincón de aquel espacio, su rostro es neutro y aun así critica todo lo que con su mirada toca. Hessenordwood fuerza el entrecejo mientras le devuelve rápidamente la mirada al elfo que le habla, automáticamente la criatura se contrae asustada como si temiera recibir un maltrato por parte del hombre frente a él.

 

—Hessenordwood Crouch-, pronuncia nuevamente con ronca voz, no es habitual en él estar tan callado por tanto tiempo, pero desde esta mañana no ha podido pronunciar palabra alguna sin que se le revuelven las tripas al hacerlo, claro que no le dará el gusto a Luxure de llevarse eso de él también. —No importa, ellos no tienen ni idea de quién soy. Lleva esto.-, con algo de mala gana el mago buscó el mensaje que había llegado hasta él justo esa mañana. —O al menos eso espero-, masculló apenas mientras nuevamente ve al elfo perderse en el interior de la mansión.

[Kahlan Blackthorn]

El Neozelandes estaba aclimatándose a vivir en Londres, no era adepto a los climas demasiado gélidos. Pero jamás pasaba por alto las recomendaciones de Hasani, justo por ella estaba dentro de esos terrenos, buscando obtener la nacionalidad y poder moverse con mayor facilidad dentro de la ciudad. No le gustaba el mote de ilegal, aunque varios de los negocios a los que se dedicaba, no le permitían del todo mantener un perfil bajo o difícil de detectar. Por ahora se concentraría en hacer buenas migas con los conocidos y amigos de la Nigromante, nunca estaba demás tener sus propios contactos y usarlos en el momento adecuado.

— Sería más sencillo, si...—pasando la mano por su cabello castaño, acomodaba el sombrero fedora que contrastaba con su elegante vestimenta. Un traje sastre de color arena acompañado por unos zapatos recién lustrados, le era sencillo ver el reflejo de su gallardo rostro en ellos. No olvidaba el seudónimo que le obsequiaran cuando fue profesor de maldiciones dentro de hogwarts, “Profesor sexy”. No terminaba de sorprenderlo la creatividad que algunas personas en edad adolescente poseen y el modo en que suelen emplearla.

Disfrutando de la agraciada suerte que tenía con el sexo femenino, quién iba a decir que el joven retraído e introvertido se convertiría en todo un Casanova. Haciéndose acreedor a una que otra bofetada, pero era imposible para el atarse a una sola persona y no tener deseos más que pecaminosos con el resto de las mujeres que le rodeaban. Era un sujeto difícil de comprender, pero al final del día siempre terminaba acompañado por una hermosa dama, quizás no era una relación para toda la vida, pero si se encargaba de dejarles un grato recuerdo de su persona.

El viento encaminó sus pasos hacia la mansión Luxure, poco o nada sabía de ese linaje. Solamente obtuvo de Hasani datos sueltos, pero entre ellos captó su atención la relación que la Nigromante mantenía con la matriarca de ese lugar, extraño nexo que de un momento a otro de fortaleció y le dio la excusa perfecta para visitarla. Posiblemente le tomaría por entrometido, pero su instinto le decía que no era del todo un mal plan aventurarse y causar una buena impresión en la joven. Aprendió de la mejor, no le costaría demasiado ganarse la simpatía de Lady.

Tenia varios ases bajo la manga, esperaba no tener que gastarse todos sus cartuchos de una sola e irse de ahí con algo menos que un palmo de narices. Descartando en el acto esa posibilidad profanaba esos terrenos con paso decidido y elegante, acomodando la corbata color blanco, que le daba un aire un poco más atractivo de lo que ya era. Todo un sex symbol o como era que las chicas muggles catalogaban a los de su especie, espécimen que estaba en peligro de extinción sin duda alguna— Veamos que tal me va, no creo tener que hacer más esfuerzos de los necesarios—esbozando una sonrisa cargada de suficiencia cargada en sus labios, se vio abordado por un elfo que paseaba en ese momento por los jardines.

— ¿Qué desea?—preguntó la criatura agitando sus enormes orejas, analizando inquisitivamente al vampiro. Provocando la cólera de este, detestaba a esos seres y más que se atrevieran a dirigirle la palabra. Dejándole de lado continuó con su andar, llegando hasta la puerta del hogar, dando dos toques espero una respuesta a su llamado.

@Lady Luxure Grindelwald

[Datura]

Me despedi de Darla y me dirigi hacia los jardines del Castillo, donde me encontré con Demian quien habia estado preguntando por hace unos instantes...

 

Después de una larga charla con demián me dirigí hacia mi habitación,empecé a acomodar mis objetos personales justamente debajo de la habitación de mi prima.

 

Me paré de frente de un espejo donde en la parte trasera se encontraba un pasaje secreto, me recosté un rato en la cama y tome una larga siesta.

 

Al despertar logré observar un pequeño periódico del profeta justo debajo de mi puerta, a levantar y ponerme a leer en levantar observe que la Primera Plana se encontraba un miembro de la familia.

 

Me quedé sorprendido por algunos instantes, se trataba de un miembro de la familia, con quien había tenido una larga charla anteriormente.

 

Me dirigí hacia donde los miembros de la familia se encontraban dándole luto al familiar, me coloque en la parte trasera del lugar, donde nadie me lograba ver, sin embargo desde ahí podía presentar mis respetos.

[Veronica Prince Rambaldi]

Había regresado de Estados Unidos hacía poco, tras el Mundial de Quidditch había optado por permanecer en aquel país, mis artes de reportera ya no eran necesarias en un mundo tan entremezclado con la revolución muggle. Me había enterado de incendios, robos, secuestros, explosiones y lo más curioso, o no, asesinatos. El complot muggle dejaba claro el temor que éramos capaces de provocar.

 

Tenía muchas ganas de re encontrarme con mi pasado, pero no esperaba hacerlo de aquella manera. Me había mantenido alejada de mi familia por no compartir totalmente sus ideales pero al ver ahora la primera plana de El Profeta sabía que mi madre me necesitaba. Doblé y el periódico con un dejo de nostalgia, parecía una eternidad desde que había renunciado a él y había intentado tener mi propia publicación.

 

Peiné mi larga cabellera rubia blanquecina y busqué una túnica adecuada para la ocasión, elegí un azul marino con una rosa bordada en negro a la altura del pecho. Desaparecí del departamento que había rentado en Londres para aparecer en las afueras de las rejas de la Mansión, la falta de trato con mi madre me obligaba a no arriesgarme a intentar otra cosa, me acerqué a aquella desconocida construcción para mí. Huír de mis orígenes había sido siempre una de mis artes favoritas y aunque había sido adoptada con amor y criada de la mejor manera posible, seguía eligiendo el no involucrarme, hasta ahora, que el tío de mi madre había fallecido, a sabiendas de su amor hacia él.

 

Por lo visto mi temor había sido infundado porque las puertas de rejas de la mansión se abrieron a mi llegada y me apresuré a ir rumbo a la entrada principal, sin prestar más atención que a lo verde del lugar.

 

@@Lady Luxure Grindelwald

[Danny Lestrange]

Sale hecho una furia después de un largo rato esperando a recibir una respuesta sin éxito. Estaba totalmente confundido y necesitaba una explicación que al parecer se iba a tardar en llegar, si es que lo hacía. Da un portazo y camina en dirección al jardín delantero de la casa y se sienta detrás del primer árbol que encuentra.

Era una locura. No podía ser verdad aquella noticia, ni siquiera habían pasado tantos días desde la vez que su tío le había revelado sus intenciones el día del secuestro de la ministro. Días después, Danny mira a su alrededor y exhala tratando de entender. Se encontraba en el mismo lugar en el que había platicado con Demian la última vez y casi podía sentir su presencia.

El joven mago estaba muy enojado, aquella era la forma en que trataba de sacar la frustración y experimentaba su duelo. ¿En realidad se había ido? ¿Y ahora qué pasaría con él? Se había quedado sin su protector en la familia, sin su mentor. A pesar del poco tiempo que le había tratado, Danny había aprendido a tenerle mucho cariño así que... ¿Ahora qué iba a pasar? Estaba tan decaído que no había notado que alguien desconocido acababa de entrar a la mansión.

Editado 10 de Diciembre del 2020 por Danny Lestrange

[Veronica Prince Rambaldi]

Había jurado que había sentido un sonido en el jardín, me sobresalté e intenté recordar ¿qué criaturas tenía mi madre? Difícil aquello cuando no habíamos sido las más unidas hasta ahora. Discretamente y para no causar un incidente saqué mi varita de entre las ropas y escuché atenta mientras continuaba avanzando. Siempre había espiado los registros familiares para las noticias, pero ahora descubría que no había prestado la bastante atención a criaturas y menos en los últimos años. ¿Cuánto había pasado desde la última vez que había investigado en serio?

 

Bufé, a lo hecho pecho ¿qué era lo peor que me podría pasar? ¿qué me atacara alguna criatura oculta de mi madre? No era una experta en duelos pero sabía defenderme, en este momento ya estoy considerando que quizás debería comprar y cursar el primer libro de hechizos. Me había jurado que no volvería a pisar la Universidad, pero ocasiones como ésta demostraban que era mejor saber más. Levanté mi varita mientras seguía avanzando y pregunté en voz alta.

 

--¿Quién está ahí? Busco a mi madre, Lady Luxure --a veces era mejor presentarme que dejar que atacaran primero y preguntaran después, claro que si era un enemigo de mi madre él feliz de la vida de hacerse con la vida de su hija, genial.

[Ada Camille Dumbledore]

Estaba en shock quería moverme de la pared en donde me había quedado inconsciente de pensar en la noticia de mi padre muerto, no entendía bien que sucedía. Mi elfina estaba a mi lado paralizada de verme sin articular palabra, tenía que obtener respuestas y pronto subí al tercer piso de la Mansión, entre a mi cuarto y cuando vi a @@taison logan greyback aún dormido en mi cama di dos pasos atrás cerrando de nuevo la puerta. A quien podría buscar para decirle lo que sucedía no era lógico que estuviera por hay llorando por los rincones sin saber si era cierto o no. En mi bolsillo estaba mi bolso de piel de moke y saque un pergamino y una vuela pluma

 

Chère Anne Marie

 

J'ai besoin de votre aide, mon père a été déclaré mort dans le journal The Prophet.

 

J'ai besoin de toi pour t'infiltrer et me donner un rapport détaillé, tu es la meilleure pour ça, je te fais confiance.

 

Ashta

 

Lo había enviado con mi nombre clave en el ministerio Francés, así sería mejor, entre las dos existía una historia que nadie conocía y confiaba en absoluto en ella.

 

Corrí al primer piso a buscar a @@Danny Lestrange y a @@Lady Luxure Grindelwald

[taison logan greyback]

El Rubio se removió incómodo en la cama, las pesadillas qeran algo habitual para el pero esta era algo especial, se sentía más real que ninguna, se despertó sobresaltado dirigiéndose tambaleándose a la habitación de su niño, el cual dormía plácidamente ignorante de lo mal que se sentía su padre.

 

Volvió a su habitación para volverse a colocar aquel traje, al terminarse de vestir fue a buscar a @@Ada Camille Dumbledore, sabía que ella lo necesitaba y el necesitaba estar a su lado.

 

Mientras caminaba un solo pensamiento invadió su mente, el atraía a la muerte, debía pensar como cuidar a la mujer que el amaba con su corazón.

[Danny Lestrange]

Seguramente el aire del jardín le relajaría un poco, necesitaba aclararse la mente para poder pensar de manera coherente. Ahora tenía tantas ideas en la cabeza que no era capaz de organizar una sola frase con sentido. Era un desastre. Las manos le temblaban y sentía la boca seca, ¿Era verdad todo aquel teatro? Era tan extraño, parecía que tenía una especie de niebla dentro de su cabeza.

"¿Quién está?"

Danny era sordo, pero podía darse cuenta de que alguien se acercaba por un extraño movimiento de sombras que no tenía nada que ver con los árboles ni las plantas del jardín. Por eso se pone de pie inmediatamente y saca su varita del bolsillo. Así la sostiene y se mantiene en alerta mientras mira a su alrededor, pega la espalda al árbol y desde ahí solo asoma la cabeza para descubrir que había una chica haciendo exactamente lo mismo que él con su varita.

"¿Quién eres?"

Le pregunta sin salir totalmente de su escondite, pero asomándose lo suficiente como para que la chica lo vea. Danny no la había visto nunca así que pensaba que quizá era una visitante que se presentaba al funeral de su tío Demian. Nunca se habría imaginado que se trataba de una familiar a la que el joven mago no conocía.

@@Veronica Prince Rambaldi
@@Ada Camille Dumbledore