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Los Dragones de Salazar


Kahlan Blackthorn
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Sonrió, le encantaba lo que él decía, estaba segura de que le había reconocido, pero saber que esas palabras saldrían de sus labios dirigidas realmente hacia cualquier atrevida la hacían sentir como un calor en su pecho que se encendía e irradiaba por todo su cuerpo. Por poco ronroneo en su oído, disfrutando del momento y del sentirse amada por su hombre, hizo como que peleaba con sus dedos, cuando las manos de él se posaran sobre las suyas, aunque más bien se moría de ganas de entrezarlas con las suyas.

 

--Jamás lo confundiría con otro --susurró mimosa mientras la mano de él le hacía caso de soltar la suya pero buscaba otro lugar más entretenido donde investigar esta vez sí se le escapó un ronroneo con la caricia.

 

--Ey, ¿para dónde va usted? --bromeó acompañando la risa de su amado.

 

--Hola mi bebé --sus labios se unieron en varios suaves y románticos besos que más encendieron a la Potter Black, totalmente enamorada de su prometido, su Seba.

 

--Estoy bien mi amor, yo también te extrañé, siempre --afirmó mientras entrelazaba ahora sí su mano con la de él.

 

Abrió los labios y miró hacia uno y otro lado, la indecisión fue muy breve, aunque el salón se veía muy interesantemente decorado y ya varios magos y brujas comenzaban a recorrerlo sus ojos se volvieron hacia el jardín cuyo aroma a pasto recién cortado había podido apreciar al llegar. Lanzó un suspiro nostálgico y sus mirada castaña se encontró con los azules ojos de su amado.

 

--Me encantaría pasear contigo por nuestro jardín --dijo entrelazando su brazo al de Seba, tras besarlo una vez más con amor y ternura, para luego dirigir sus pasos hacia la salida.

 

Lentamente comenzaron a recorrer el lugar, disfrutando del aroma del parque, de la suave brisa veraniega que les regalaba un breve respiro a los calores del día y adelantaba lo que sería el otoño, próximo a comenzar.

 

@@Seba Granger

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Juliette se había quedado muda, algo que no le molestó en esos momentos porque justamente Romina hacía acto de presencia. ¿Estaba molesta? Sí, más que molesta, podía decirse que quería matar a alguien en ese preciso momento. Sin embargo, Eobard, había intervenido, intentando calmar la situación para evitar algún enfrentamiento entre las dos, pero eso no se podía evitar.

— ¿Cómo puedes acusarme de algo así Romina? —espetó con molestia— La que debió venir a saludarme eres tú, eres mi hija cariño… aunque no te guste. —completó con una media sonrisa en los labios.

Sin poder contenerlo, soltó una risotada al momento de escuchar el vago argumento de la Black Lestrange, ¿era en serio? Al parecer sí, porque lo había dicho con toda la seriedad del mundo. Algo que no le sorprendió, pero que sí le causo ironía, porque bien podía haberse esmerado un poquito más y comprender la importancia que tenía ese evento para ella, no solo como directora del banco, sino como profesora de Hogwarts y mortífaga.

—Hay sitios en los que puedes vestir como quieras y hay otros, en los que la formalidad es relevante. ¿Por qué no logras entenderlo? —soltó mirándola directamente a los ojos, mientras levantaba su varita mágica— Entenderás a las malas, ¿no es así? —completó, usando su arma para cambiar el atuendo de la bruja, por un vestido de color negro, sencillo pero que era elegante.

Sabía que se iba a molestar y que no dudaría en tomar acciones en su contra, pero no le importó porque en su rostro únicamente se veía reflejado serenidad y tranquilidad. Regresando su atención al Black Lestrange, asintió y cuando seguía intentando llamar la atención de su hermana, quizá podrían llevarse bien y congeniar, algo que no ocurría entre sus otros hijos, con ellos podría ser diferente.

— Ambos son mis hijos, así que espero que se logren llevar bien. —respondió con tranquilidad, quizá tener la figura de un hermano mayor le haría bien a Romina— Claro, jugo de arándanos, a mi no me engañas cariño. —añadió con una sonrisa divertida en los labios— Pórtate bien.

Girándose un poco para ver de frente a Saori, negó con lentitud. ¿Estaba un poco ebria? Esperaba que no porque @, no estaba allí para cuidarla y ella tendría que hacerse cargo de ella, pero igual no era que le molestará porque sabía tratar bien con las personas ebrias y era a veces divertido.

—Sigues siendo de la familia Saori, no importa que prefieras estar encerrada en tu habitación, y como tal, serás invitada a todos los eventos que sean organizados por mi, así que no te preocupes. —levantando su copa, bebió todo el contenido y aprovecho que un elfo domestico aparecía nuevamente a su lado, para tomar otra.

 

Mirando a Susan, sonrió al ver que Ishaya se acercaba a ella y la saludaba, así mismo notó la presencia de un mago más, que se quedaba sentado de manera solitaria, ¿quién era? No lo sabía, pero quizá en cuanto terminarán sus dramas familiares podría ir a saludarlo.




@@Eobard Thawne @@Juliette Macnair @@Romina Black Lestrange @ @@Juliette Macnair
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-Hey solo recorro el cuerpo de mi mujer- dije riendo mientras la besaba una vez mas. Acaricie sus dedos mientras que estaban en mi mano, y la observaba con mucho amor tratando de adivinar que era lo que ella iba a decidir.
Apegue mi brazo a mi cuerpo para que no se me escapara el de ella y apoye mi mano en la suya, guiandola hacia el jardin que tantos recuerdos nos traia, dejando atras las luces y el bullicio de la fiesta que se estaba llevando en el salon de Hogwarts.
La verdad es que nunca habia sido de muchas fiestas, era mas de momentos tranquilos mas si era ella quien me acompañaba.
Me detuve por un instante cuando ya pisábamos el césped húmedo, para robar un dulce beso de sus labios, -¿Recuerdas hace cuanto estuvimos la primera vez en este lugar?- apoye mis manos en su cadera mientras me perdía en sus bellos ojos.
-Gracias por cruzarte en mi camino- deposite un suave beso en su nariz.

 

@@Darla Potter Black

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Era como sentirse entre nubes de algodón, en esos momentos, cuando Seba y ella estaban juntos, la Potter Black olvidaba todo, sus trabajos, su negocio, las responsabilidades que ambos tenían. Solo importaban en esos momentos ellos dos, eso era algo que muchos quizás no entenderían, así como tampoco podían comprender como podían dejar de lado una fiesta tan magníficamente organizada para ir a recorrer los jardines en una noche que comenzaba a sentirse verdaderamente fresca, pero ella sabía que no tenían nada que temer.

 

--Tu cuerpo siempre será tuyo mi amor, para recorrer y disfrutar --susurró Darla mientras caminaban del brazo ya fuera hacia los jardines, deteniéndose solo para besarse con amor, saludando a algunos desconocidos a la pasada, pero centrándose en los besos que cada tantos pasos se robaban el uno al otro.

 

--Hace ya muchos años amor --y acercando sus labios al oído de él susurró --faltan dos meses y tres días para que se cumplan cuatro años mi amor --lo miró a los ojos con amor y ronroneó con el beso sobre su nariz derritiéndose de amor por sus palabras --gracias a tí por encontrarme y quedarte en mi vida --y con ternura lo jaló hacia sus brazos, besándolo con más amor mientras el rocío nocturno comenzaba a sentirse en el césped del jardín, aunque ellos no parecían sentirlo, solo la música llegaba hasta sus oídos, como dándole más magia a ese momento de amor que compartían una vez más.

 

 

@@Seba Granger

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La black lestrange tomo por ultimo un trago que se deslizo por toda su garganta, la fiesta iba genial suponía en ese momento las personas llegaban y llegaban, conocidas y no tan conocidas, saori esperando la respuesta de su tío sintió a su prima Susan en alado de ella saori la mira y sonrió muy relajadamente mientras acontecimientos se presento con romina y la abuela de la joven soari.

 

Saori quedo algo impresionada quien iba pensar que su abuela era de ese carácter tan fuerte, por un momento sintió miedo de su abuela , pues si era capaz de envenenar a su hijo era capaz de cualquier cosa, saori miro y al parecer tenia otra tía la familia crecía era algo inevitable los black lestrange son una familia muy grande.

 

Por otro lado saori saludo a su prima de manera sutil -Hola susan como estas - con una sonrisa de oreja oreja la joven saori se sintió cómoda por un instante, pero se sentía algo ebria al parecer se paso de copas por un instante sintió algo de mareo pero para calmarlo tomo un baso de agua, tomar tanto no era la especialidad de la joven.

 

-Abuela, ella también es tu hija - dijo a su abuela mirándola con agrado, saori era un amor con las personas que conocía, pero su estado no era el adecuado para hablar en ese instante.

 

Al mirar el lugar no muy lejos de donde ella estaba estaba una compañera con la que hacia guarda en el caldero le trajo buenos recuerdos cuando se sentaron a tomar unos tragos en ese entonces la joven black lestrange era nuevo en el oficio de ser parte de la marca, la vio muy cómoda con su pareja y sin mucho que ver no quiso interrumpir y siguió cómoda mente en el circulo familias que había en ese instante.

 

@@Mia Black Lestrange @@Eobard Thawne @@Juliette Macnair @@Romina Black Lestrange' @susan V. Goldster

Editado por Paula Malfoy

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Mientras esperaba una respuesta por parte de su madre, no puo evitar desviar su atención hacia uno de los presentes que trataba de que no se desatara una pelea entre ambas brujas, ¿Quién era? No lo sabía, pero esperaba poder averiguarlo en algún momento de la fiesta. Trataba de enfocar su atención únicamente en Mia, pero no podía, ya que más personas se acercaban al grupo, o se acercaban para hablar con otros.


Soltó un bufido al momento en que su madre cambió su vestimenta, ¿Por qué siempre arreglaba las cosas de esa manera? No lo sabía, pero esperaba poder entenderlo algún día ya que de otra forma estaba segura que sus enfrentamientos nunca cesarían. No respondió ante ninguno de sus comentarios puesto que se daría un poco de tiempo para pensar en sus siguientes movimientos.


Mientras Mia dirigía su atención hacia una de las mujeres, Saori, aprovechó el momento y se acercó a Eobard, quién al parecer era uno de sus muchos hermanos y otro más al que no conocía. —Mi nombre es Romina— respondió la pregunta que el mago le había hecho minutos atrás—Aunque supongo que para estas alturas ya lo habrás descifrado— agregó—Por cierto, ¿Cuál es tu nombre?


Observó la copa semivacía del mago y no pudo evitar que una pequeña sonrisa se formara en su rostro, ¿Le molestaría si la tomaba prestada por un momento? No lo sabía, pero de todas formas lo hizo. Le arrebató de las manos la copa y luego con ayuda de su varita hizo que el líquido se volviera viscoso.


Se acercó a su madre por detrás y le roseó el contenido de la copa en su cabello. ¿Cuál sería la reacción de la bruja al notar algo viscoso cayendo por su rostro y cabello? Estaba casi segura que se enojaría porque la bruja amaba demasiado su cabello. <<Para que recuerdes lo mucho que te quiero, madre>> le susurró al oído para que solo ella pudiera escucharla.


—Lo siento, ahora te lo recompenso— se dirigió a su hermano para luego llamar a uno de los elfos y decirle que le trajera una copa de la bebida que el mago quisiera.



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Mientras veía el espectáculo aflorar apareció mi padrino, quien también había notado su presencia al pasar pero no decidí acercarme. Hacía él y Maida estaban aquí y sin embargo no me había decidido en hablar con ellos. Tal vez tendría la oportunidad de volver todo esto un caos con su ayuda. Sonreí en el momento que beso mi mejilla y me despedí de mi con un gesto de mi mano. Un mesero se nos acercó él tomó una copa para mí y bebió de la suya. Comí el ultimo pedazo de mi bocadillo y lo imité.

 

—Supongo que Cye no se sentirá en familia por más que trates de mezclarla con serpientes—Bebí de mi copa una vez más— Una vez la conocí ¿Te conté de ello? Tu hijo Noah me invito al castillo y ella se presentó, debo admitir que es encantadora.

 

A Keaton no lo conocía pero varias veces había escuchado de él, el mundo suele ser pequeño—No, pero de seguro lo conoceré pronto.

 

Miré alrededor notando que poco a poco todo volvía a la normalidad, la única atracción ya no estaba y los presentes seguían en sus típicas charlas, para ser élites eran algo aburridos.

 

—¿Estas reuniones permanecen así hasta el fin de la noche? — Bromeé a mi padrino— ¿Que te parece si buscamos a Maida y hacemos un desastre? Lo lamento, pero tengo sed de discordia.

 

Tal vez era el efecto del vino mezclándose con lo dulce del bocadillo lo que me volvía tan deseosa de un espectáculo. Pero no podía hacerlo sola, destacar de ese modo no era mi fuerte y además estaban mis dos padrinos aquí, ellos decidirían si sería lo correcto.

 

 

@ Zamolódchikova

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Su pequeño experimento social de relacionarse con más miembros de la familia había resultado un tanto curioso. No era la primera vez que lo intentaba, pero ciertamente había algo que podía concluir de ambas interacciones: A los Black Lestrange les gustaba el drama. Si no fuera parte de esa familia, o le fueran ajenas algunas de las relaciones que mantenían algunos de sus miembros, habría jurado que no podían estar cinco minutos sin querer asesinarse entre ellos. Pero comenzaba a serle habitual, y en ocasiones se deleitaba con tales eventos.

 

-¿Portarme bien? Bueno, no prometo nada.- fue lo último que logró articular hacia su madre antes de que la joven que se había presentado ante el círculo social arremetiese contra ella.

 

Hizo una mueca en cuanto escuchó el sonido de su bebida impactar contra el cabello de su madre. Y la conocía lo suficiente como para saber que su reacción no sería nada tranquila. Y que si se metía en medio, posiblemente lo lamentaría. O no. ¿Por qué no optar por mediar un poco el terreno entre ambas mujeres? Ante el repentino silencio que ofrecía Juliette, sus opciones se agotaban.

 

-Espero sepas perdonar mis pésimos modales...- se dirigió finalmente hacia la joven, quien había sido revelada como hija de Mía. Su hermana. -Mi nombre es Eobard. Eobard Aldrich. Pero puedes llamarme por cualquiera de los dos, nunca he tenido gran problema en ello.

 

Sabiendo que sólo era cuestión de tiempo para la reacción de su madre, decidió poner un poco de distancia entre su hermana y ella. No sin antes tomar la copa que le ofrecía el elfo que previamente había sido encomendado para reponer su bebida. Levantó la copa hacía Romina a manera de agradecimiento.

 

-Por cierto, Saori. -se dirigió a su sobrina, quien parecía un tanto aturdida después de haber ingerido algunas bebidas. -Si vas a competir conmigo entre quién es el qué pasa más tiempo en su habitación, te deseo suerte. -y, aprovechando el momento, se acercó para susurrarle al oído. -Como veas que las cosas se salen de control, no dudes en cubrirte.

 

Una vez que se incorporó, se aseguró de conjurar un encantamiento impermeable sobre su traje. Siendo su dominio de los encantamientos no verbales algo razonable, no podía arriesgarse a que las represalias le alcanzaran. Y el iniciar un drama en un espacio tan cerrado no le parecía la mejor de las ideas.

 

-¿Te parece bien ir por algo para picar, Romina? -con su mano libre, señaló una de las mesas donde rebosaban algunos bocadillos, invitándole a acompañarlo. Con un poco de suerte, el desplazamiento momentáneo retrasaría la confrontación con su madre por su reacción.

 

-Digo, después de todo, soy tu hermano, el que estuvo perdido por varios años.

 

@@Mia Black Lestrange @ @@Romina Black Lestrange @@Juliette Macnair

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Repitió el nombre de su hermano en su cabeza <<Eobard>>. Le iba a costar un poco recordar su nombre en el futuro, aunque esperaba aprendérselo rápido, cosa que no siempre sucedía con las personas a las que recién conocía.


—¿Vienes con nosotros, Saori?—se dirigió a la chica—No creo que quieras estar cerca de la bestia cuando despierte— soltó a modo de broma, refiriéndose a su madre—Eobard, ¿No? Dime, ¿Qué edad tienes?— preguntó mientras caminaban hacia una de las mesas que tenía bocadillos.


Suponía que Eobad era unos cuantos años mayor que ella, y por lo tanto sería su hermano mayor, pero prefería estar segura. No sabía que elegir, no estaba segura de tener hambre puesto que antes de enterarse que iría a la fiesta había estado comiendo. Por lo que simplemente agarró un sándwich pequeño.


Llamó a uno de los elfos y le pidió que le trajera una bebida, tenía un poco de calor y estaba segura que algo fresco le sentaría bien. La copa contenía un líquido casi transparente. Reconoció el aroma como vodka, aunque no estaba segura con que fruta lo habían mezclado. Empezó a tomar su bebida dando pequeños sorbos para no marearse tan rápido, aunque se conocía lo suficiente como para saber que cedería ante la tentación de tomar de golpe en cualquier momento.


Una pequeña sonrisa se formó en su rostro. ¿Cuánto tardaría su madre en reaccionar? ¿O es que no se había dado cuenta de que le había tirado algo en su cabello? La miró de reojo, y se podría decir que estaba algo ansiosa por ver su reacción, aunque suponía que la bruja no armaría un escándalo en una fiesta que ella había organizado, ¿O si?



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Saori sentía un poco su cabeza que daba vueltas al parecer tomar esos tragos muy rápido fue algo est****o, tal vez su estupidez la llevo hacer eso, saori contentando a su familia a la cual quería, veía que de nueva había drama pues aquella familia solo era drama saori por su parte ya se acostumbro ya que su estadía en aquella casa ha sido genial.

 

Saori admira como su abuela se pelea con una de sus hijas, mientra saori escucha a su tio decir algo lo cual solto una risa en saori y dijo suave mente en tono algo sarcástico - No lo creo jajajaja mis elfos suben y traen todo a mi habitación superarlo tío.- dijo con un risa de niña pequeña

 

Su tío susurra al oído de la joven -Al parecer si - responde saori a su tio suave mente y sin mucho ruido, pos un instante saori vio como romina le lanzaba un trago en el pelo de su abuela saori dijo - Uyy, mi abuela va explotar - dijo cerrando uno de sus ojos, vio la expresión relajada de romina al parecer sabia como era mía.

 

Saori se espita un poco y al reaccionar escucha a romina dando un ligera invitación para comer algo antes de que mía explotara saori miro y dijo a romina -Claro no quiero estar aquí cuando mi abu forme un despelote - dijo mientras caminaba un poco detrás de ellos.

 

La mesa tenia muy ricas comidas saori al parecer no comía mucho pues no era su dieta adecuada pero como su mitad humano le obligaba a comer comida normal tenia que atender la mínima necesidad , saori tomo postres de chocolate que se encontraban en aquella mesa se quedo viendo a sus tíos por un momento seria de mala educación meterse en la pequeña conversación ya que son hermanos saori supuso que tenían que conocerse.

 

@@Romina Black Lestrange @@Eobard Thawne @@Mia Black Lestrange

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