Night of terror

[Marabella Rambaldi G.]

Semanas antes - Marabella Viglietti

 

Recorría los terrenos de Hogwarts a paso lento. Observando h analizando a todos los estudiantes que corrían apresurados para no perder sus clases. El cuerpo que habitaba se movía con gracia, y Marabella Viglietti sonreía a los colegas que pasaban con un rostro que no era suyo. Ya iban siendo semanas desde que se había apoderado del cuerpo de Kyttara Gryffindor Rambaldi y se sentía tan a gusto que había decidido no dejarlo jamás.

 

Chicos y chicas levantaban su mano en dirección a ella en un saludo amistoso. Lo cierto era que Kytta era insufriblemente simpática con ellos. Todos los largos años que había pasado presa en un rincón de su mente la había visto actuar cariñosa con todo el mundo. Hijos, Padre, madre, hermanas y hasta desconocidos...esa mujer amaba a todos y la hacia rechinar los dientes.

 

Aunque le disgustara tener que fingir amar hasta la última flor del mundo, era imperativo que nadie se percatara de que era Marabella quien estaba al mando de ese cuerpo, su plan dependía de ello...el plan que traería a su insulso mundo una horda de los más malvados demonios que habitaban en el otro mundo; esperando pacientes, por un cuerpo que habitar.

 

Un niño de cuarto año, al cual conocía como Luke pasó a su lado y Mara dejó caer "accidentalmente" un pergamino. Aceleró el paso, yéndose antes de que el muchacho se diera la vuelta después de haberse agachado a recoger el papel. Dicho pergamino en realidad era una invitación para festejar clandestinamente Halloween, reunir una cantidad excesiva de alumnos a los que le atraía fugarse de Hogwarts para una noche de diversión y adrenalina. La pelirroja sabía que en menos de dos horas, la información sería manejada por todos los estudiantes, susurrada en los pasillos de uno en uno.

 

Una sonrisa malévola se abrió paso por sus bellas fracciones...en una semana traería a los suyos al mundo de los mortales. Una semana, y harían temblar la tierra.

 

 

 

Proximidades a la casa de los Gritos

 

Su sangre cantaba entre más de acercaba la media noche. Al rededor suyo, a través de las sombras, podía sentir el murmullo incesante de los demonios que le urgían llevase a cabo el plan. Como había esperado, la casa de los gritos estaba llena de estudiantes disfrutando de una velada excepcional ignorando que dentro, la propiedad estaba encantada para que los pasillos cambiasen a voluntad...guiando a los mocosos hacia una habitación predispuesta para un ritual originario de los Celtas y Druidas. Al llegar la media noche, ella y los demonios del Inframundo recitarán un cántico para abrir las compuertas del reino de Samhain a los cuerpos de los alumnos.

 

Su cuerpo dió un tirón antes de que pudiera ingresar a la Casa. Kyttara aún intentaba retomar el control de su cuerpo, pero era un intento inútil. Mara era más fuerte ese día, más poderosa que la propia Kyttara a causa de que el mundo de los muertos estaba más cerca esa noche. Es inútil que luches, esto se llevará a cabo y no tienes como evitarlo. Así que te aconsejo que consigas unas palomitas, podrás ver la función en primera fila...quizás hasta te alegres de saber que tus dos hermanas estarán allí.

 

Sintió la angustia de la Rambaldi antes de escuchar su voz No lo hagas Marabella, no toques a mi familia. La pelirroja resopló ante su est****o sentimentalismo. Tan débil, fácil de doblegar y de hacer sufrir.

 

- Es por eso que ahora eres esclava de mi voluntad- está vez en voz alta - Amar te hace débil, hace que tengas algo que perder y con lo que te chantajeen ¿Sabes cuál fue tu peor error? Caerte ante tu separación... inservible y patética - Sintió el pesar de Kyttara, pero está se había quedado callada, así que prosiguió a entrar en la Casa de los Gritos.

 

Kyttara era tutora en Hogwarts, parte de eso la había ayudado con su plan. Pero como había pros había contras, y era que la reconocerían como tal. Así es, que había decidido disfrazarse al estilo veneciano, haciéndose pasar por el personal de la fiesta. La máscara que llevaba hacía imposible reconocerla. Dentro de la casa los estudiantes reían y bailaban mientras charlaban con sus amigos, y en una esquina no muy apartada vió a Kamra y Saori Rambaldi. Nuevamente la insufrible de Kyttara intento en vano, obligarla a salir de allí. Marabella solo sonrió y comenzó a servir las bebidas en las copas.

 

-Te tardaste Mara- una voz familiar susurró cerca suyo - llevas tardando quince años...quince años en los cuales me pudría lentamente en esta miserable cabaña de los mil demonios.

 

- Eres impaciente Luka, créeme cuando te digo que me hubiera encantado hacer esto antes, pero estaba presa en la mente de Kyttara - Luka Viglietti, primo de Marabella. Había muerto en esa misma habitación y residido desde entonces en la propiedad como un fantasma. Le había prometido conseguirle cuerpos que habitar a él y a toda su familia exceptuando a dos de ellos quienes residían encerrados en la mente de Kamra y Saori - Paciencia, esta noche se hará y junto a nuestra familia...- Marabella tomó una copa de arriba de la mesa, haciendo un gesto con ella hacía Luka - llenáramos de desgracia la vida de estos insulsos mortales.

[Saori Rambaldi Ragnarok]

las palabras de su sobrino dejaron a saori algo emocionada pues hace mucho que no lo ve - Hay estas igual de tierno, joven - dijo dando palmadas a su espalda esperando respuesta, sin mucho que esperar de su torpeza dejo su pie por accidente en la capa de un joven al parecer el cual ella no había visto en su vida tal vez.

 

-Disculpe - dijo mirando al joven - No me di cuenta es que hace mucho no hablo con mi sobrino que me emocione y no se donde puse mis pies - dijo dando una reverencia mientras miraba si encontraba alguna debida cerca.

 

-Kamra, miraa el es joseph uno de lo tantos hijos de ale jajaja - dijo riendo mientras sostenía a su hermana de gancho sin dejarla sola, mientras su hermano se iba al parecer vio algunas personas que conocía.

 

-Bueno y que se hace aquí - dijo esquivando toda mirada.

 

@@JosephEsteban C.G @ @@Lestat Rambaldi

[Alexander Fox]

El camino por el túnel resultaba tener un ambiente húmedo e incomodo los pasos hacían eco y todo se volvía muy denso, Alexander se mantuvo en alerta permanente, algo no le agradaba y tenía a los más pequeños de la casa a su cuidado, por lo cual se mantuvo con su varita en la mano, pero con cada paso que daba por el recorrido le emocionaba saber como sería todo, los minutos pasaron y por fin salieron del hueco llegando a la casa de los terrores, el destino que había sido colocado en la invitación.

 

-¿es allí? – preguntó con gran curiosidad, la tinieblas se apoderaban de todo, la casa resultaba tener un aspecto maléfico, era tétrica, esperaba que ninguno de los niños se asustara, pero sabía que eso era pedir demasiado, el aire a muerte podría provocar miedo en cualquiera – no se separen mucho, ¿vale? – pidió con seriedad mientras mostraba una sonrisa tranquila, sabía que algo no pintaba bien, pero cuando estuvieron frente a la puerta todo se congelo cuando un olor terrible se apoderó a sus fosas nasales.

 

Resultó asfixiante por unos segundos, hasta que sin darse cuenta su nariz ya ni podía respirar bien – de acuerdo… quien tuviera la idea de hacer una fiesta aquí, quizás estaba un poco mal de la cabeza o quiere un Halloween inolvidable en todos los sentido posibles – declaró a su sobrina con cierta burla en su voz para mover la puerta que casi se caía con el aire, para poder de esa forma apreciar por fin el interior destrozado de la casa.

 

- música… Hay música aquí - era una tonteria asombrarse, debía ser una fiesta, pero el aspecto le decía todo lo contrario, pero cuando escuchó un ruido proveniente del interior de todo, no sabía si terminar de entrar, no le parecía buena idea, y se podía apreciar porque no había guardado su varita desde que congeló al sauco boxeador.

 

-Sigamos… parece que ya varios han llegado- mencionó con cautela escuchando pasos adentro, una parte de él estaba emocionado, deseaba ver todo más allá, pero, algo le preocupaba, esperaba que solo fuera una tontería.

 

@@Bodrik @@Ezra Lockhart

[Jeremy Triviani]

Jeremy finalmente se decidió después de dar muchas vueltas. Iría a la fiesta en la antigua Casa de los Gritos. Decían que era un lugar espeluznante y se contaban miles de historias horrorosas de allí. Pronto seria un alumno, y tendría que demostrar que era digno de ese mundo. No un cobarde de dudosa reputación. Había nacido siendo mago, ahora debería demostrarlo. Se preparo meticulosamente, sabiendo que el camino sería difícil.

 

Se vistió con jeans cómodos, zapatillas blancas y una camisa. Tal vez no era la vestimenta más adecuada para una fiesta ilegal. Pero antes de llegar a ella tendría que merecerlo. Guardo la varita mágica recientemente adquirida, en la cintura de sus jeans. “Sera como sacar un arma” pensó con una mueca.

 

No tardo mucho tiempo en sortear los terrenos de Hogwarts, hasta llegar al sitio indicado. El rubio observo con respeto El Sauce Boxeador. Noto que como varias personas pasaban por allí, y al juntar coraje. Siguió el ejemplo. Se metió en ese agujero extraño. “Soy como Alicia” Pensó riéndose de sí mismo, al notar que ambos eran rubios y de ojos azules.

 

No tardo en perder la sonrisa, cuando vio el largo túnel oscuro, húmedo y peligroso. Jaremy saco la varita de la cintura de sus jeans y sin pensarlo dos veces empezó a caminar.

 

-Lumo…-dijo y la varita solo largo un par de chispas. Confundido la sacudió y largo mas chispas aun.

 

-¿Pero qué le pasa? –pregunto a la nada. Haciendo que su voz grave retumbe por el largo pasillo.

 

Sentía muy profundamente que no estaba solo allí, así que se apresuro a caminar más rápido, tocando con la mano vacía, la pared para guiarse. Sentía su respiración más rápida y un miedo apenas contenido en el centro de su pecho.

 

-Ya me acorde…-murmuro para sí mismo. - ¡Lumos!

 

La varita se encendió enseguida, llenando de luz, la oscuridad opresiva del lugar. Fue en ese entonces cuando el rubio, conoció lo que era un fantasma real. No las sombras que los Muggles siempre veían de reojo, sino un fantasma real que se acercaba gritando hacia él.

 

El aire se le congelo en el pecho, y lo único que pudo hacer fue, salir corriendo. Esquivo con velocidad al fantasma, que riéndose continuo su camino, y siguió tomando velocidad hasta que ya no pudo correr, el lugar se estrechaba mucho y continuo gateando.

 

Al llegar a la fiesta, lo recibió un olor repugnante. El rubio tuvo arcadas pero logro controlarse. El lugar estaba repleto de personas, tanto vivas como muertas. Una banda tocaba una especie de chirridos, en tono melancólico.

 

Jeremy se guardo la varita en la cintura de nuevo. E intento acomodar su pelo, ya no sentía tan profundamente el olor. Sonrió y se dispuso a disfrutar la noche. Su primera fiesta en aquel mundo.

[Noah Lockhart]

​Luka Viglietti

 

-humm-

 

solto un sonido de enfado al ver como ese extraño estudiante habia evitado el golpeque le envio, -ahora me agrada menos presumido-refunfuño apartandose de la ventana para que no lo vieran no le conveniaque alguien fuera por alli y lo confundiera con alguno de los fantasmas buenos del castillo ya que seguro si lo hacian luego tendri a todos molestandolo con preguntas bobas y con todo encima no estaba de humor pararesponderle preguntas a personas que apenas y podian comprender porque ese dia era tan importante.

 

comenzo a desvanecerse cuando escucho la vozde aquel chico @@Lestat Rambaldi, parecia que le habia podido adivinar lo que pensaba se volteo aun mas enojado de lo que estaba, -no slo es un presumido sino que ademas uno de esos que no piensa por si mismo - casi grito al escucharlo -tiene suerte de que no tenga todo mi poder, pero en cuanto transcurra la noche me las pagara- dijo aun mas enojado ya que algo en el extraño chico no le agradaba para nada y lo hacia querer lanzarlo muy lejos de alli.

 

-mejor me oculto- dojo antes de desaparecer rapiamentepes estaba seguro que no soportaria a mas personashablando sorprendidas como si nunca hubieran visto algun fantas maspor alli y mucho mas siendo halloween, ya tenia planeado a quienes se llevaria primero aunque tendria que esperar a que estuvieran todos dentro de la casa.

 

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[Kamra Ashryver D.]

La peliblanca estaba siendo llevada a rastras por su hermana Saori los dioses sabían donde. Dylan corría la misma suerte y Kamra. Hasta que se topó con Joseph el hijo de Alessandra y ahora hijastro suyo.

 

- Es un gusto conocerte al fin - dijo haciendo una reverencia.

 

- Estoy sedienta hermanita, déjame ir en busca de algo aceptable que beber, aunque sinceramente -paso su lengua por sus alargados incisivos - tengo ganas de una bebida espesa y a ochenta grados de temperatura - le apetecía buscar un cuello del que poder alimentarse. La voz en su cabeza le susurró para que lo hiciera instando a su cuerpo a ir en dirección opuesta a la que se dirigía. La híbrida empujó a su demonio dentro de su mente e hizo caso omiso a sus demandas.

 

Dentro de poco, tu y yo iremos a cazar. Solo espera un poco más le dijo a Nyx en su mente, tranquilizando a la demonio con su promesa. Llego hasta donde una mujer vestida de época Victoriana llenaba los vasos en las mesas dispuestas, llenas de golosinas y deliciosos manjares.

 

- ¿Tienes algo aquí que valga la pena ingerir? ¿O solo es más de ese apestoso líquido amarillo, intento de aguamiel? - exigió Kamra hacia la mujer - Hola...¿Me escuchas o eres sorda?

 

La ira parpadeo en su interior y sintió sus ojos cambiar de color. Presionó sus uñas contra las palmas de sus manos para mantenerse en control. La ira buyia muy cerca de la superficie y a pesar de que deseaba con cada fibra de sus instintos dejarla salir, había integrantes de su familia en la Casa. No estaba segura, pero le pareció haber cogido el olor de Lestat en la otra habitación y también el de su recientemente encontrado hijo Jeremy. Miró a la mujer que le seguía siendo indiferente a través de esa máscara que tenía y azotó su mano contra la mesa, inclinando la cabeza en un movimiento puramente felino.

 

- Me eres familiar, y tú olor es realmente nauseabundo ¿Qué es? ¿Colonia barata? Cualquiera diría que mi hermana usaría uno mejor - que hacía la insufrible de su hermana Kyttara en ese lugar no era un misterio. Era tutora en Hogwarts y si medio mundo mágico se había enterado de la fiesta, ella también - sabes deja la bebida conseguiré una yo misma.

 

Se cruzó de brazos observando atentamente a Kyttara. Su demonio por fin estaba en calma y hasta parecía reconocer a la mujer. Un pequeño susurró por parte de Nyx y luego un paso involuntario. La ira de Kamra se hizo más visible ante el intento de Nyx de controlar su cuerpo empujó a la demonio con fuerza contra las barreras que la confinaban y habló en su mente.

 

- Maldita ingrata, dejo que salgas cada tanto y dejé en claro el que te permitiria hacerlo está noche ¿Aún así intentas controlarme? Sabes que soy lo suficientemente fuerte para controlarte si sales - y la razón de ello era su dieta. No importaba lo que le hiciera creer a su esposa, seguía tomando sangre humana y cuando le decía que cazaba, lo hacía...pero no animalillos del bosque.

 

<<Ella es sangre de mi sangre...nuestra sangre Kamra, hermana nuestra >> habló Nyx en su interior. De repente Kamra se hizo conciente de que sentía la misma atracción hacia Kytta como la sentía con Racks. Pero con su hijo era por ser familia y a pesar de que ella era su hermana la Ivashkov y la pelirroja no tenían lazos sanguíneos.

 

Un niño pasó por su lado y sus incisivos se alargaron al sentir el exquisito aroma de su sangre, al oír el incesante palpitar de su corazón. Lo tomó fuertemente del brazo y lo jaló hasta tenerlo enfrente suyo. Sin demorar hundió sus incisivos en la delicada carne del pequeño.

 

Una explosión de sabor inundo su boca y alimento sus células hambrientas. Sintió sus ojos cambiar a un negro onix y su cuerpo se relajo visiblemente. La ira disminuyó, siendo sustituida por una especie de estado de ebriedad. Extaciada por aquel líquido vital dejó al muchacho en un asiento y sacó su varita.

 

- Ovliviate - le daba igual si podía o no usar el hechizo, no le importaba. Dió media vuelta para mirara a Kyttara y esbozó una sonrisa llena de arrogancia - Delicioso...debo dejarte Hermanita, y para cuando vuelva Nyx y yo deseamos saber a quién más tienes ahí dentro

 

Con uno de sus dedos capturó una gota de sangre que escurría por la comisura de sus labios y eliminó toda evidencia de lo que había ocurrido. Mientras iba en busca de Saori y Dylan se topó con la viva imagen de su esposa. El pequeño había llegado recientemente a sus vidas y Kamra ya sentía que mataría por él.

 

- Jeremy es un gusto verte aquí - se acercó a él dándole un abrazo fugaz - Ven con nosotros, está tu tía Saori y tu tío Dylan aquí - señaló a sus hermanos en la distancia y luego caminó hasta llegar a ellos - espero que no os haya afectado mi ausencia. El es mi hijo Jeremy, saluden malditos

 

Dejó a un lado a su familia y llamó a su elfina, quien estaba no a mucha distancia. Le tendió un pergamino, dandole órdenes de llevárselo a su ahijada Rose, una invitación para disfrutar de una noche fuera de lo común. La elfina asintió y desapareció, yendo a cumplir las órdenes de su ama y Kamra volvió con sus hermanos e hijo.

 

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@@Dylan Dogg

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@@Rose Black Lestrange

[Jeremy Triviani]

Jeremy aun se sentía un poco nervioso por su entrada a la Casa de los Gritos. El lugar parecía deprimente con aquella música, pero por mas raro que pareciera, la gente allí reunida estaba pasándolo bien. Tanto vivos como muertos disfrutaban de la fiesta.

 

El rubio sonrió al ver a su madre allí (@). Recibió con agrado su abrazo y la siguió hasta donde estaba el resto de sus familiares. En el camino pudo notar lo elegante que estaban algunas personas. Y se sintió un poco fuera de lugar al tener puesta una vestimenta común.

 

-Es un gusto -saludos a su tío (@@Dylan Dogg) con un apretón de manos y con un beso en la mejilla a su tía (@) - ¿Como estan?

 

Luego mientras escuchaba sus respuesta, el rubio decidió tomar una copa de las bandejas y probar la bebida. Le encantó el sabor de aquel líquido y vació el contenido en su garganta con un rápido movimiento. Ya no se sentía nervioso. La bebida le habia infundido valor.

 

-¿Alguien quiere bailar? -dijo con una media sonrisa.

 

Sabía que la música era horrible, pero quería divertirse aquella noche. No le importaba mucho el costo que tendría que pagar por aquello a la mañana siguiente. Estaba rodeado de brujas. Esa era una buena noticia.

[Saori Rambaldi Ragnarok]

Ya en aquella fiesta senti un poco de hormigeo por mi cuerpo, era algo insonportable mientras mi hermana y mi medio hermano se alejaban un poco mas quede algo perdida en una de las meseras que se hayaba a un costado mio no muy lejos, mi mente sacudio fuerte se nublo aquel lugar desapareciendo poco a poco las voces y el rostro de su hermana.

 

Era evidente que era un mal chiste aquel alma perdida que habitaba en mi un ser oscuro lo peor es que desde que naci este ser habita en mi, no muchas veces ha salido de mi para toamr lamas y desgarar humanos a su antojo, una fuerza sobre humana hace que mi cuerpo se colapse en grumos un voz en mi mnete con un po de eco dice. << Vamos pequeña ya es hora y lo sabes>> dijo aquel alma perdida o ni alma era un demonio, de nuevo todo volvio a mi agache mi cara pero ... mi nariz se volia loca oliento tan exquisistos cuerpos y alma que aquellos demonios como humanos llevaban en su interior la codicia y el egoismo de este ser se apoderaban de mi paladar de mi, un rojo escarlata aparecio, pero NO dejare que Belsabu salgo de mi no puedo.

 

<< Si, si puedes hazlo saori HAZLO >>, Exclamo aquel demonio dando golpes en mi mente, tome mi mano y me pegue ami misma y susurrando -No, jaja no lo aras- con una sonrisa ya casi aborde de la locura, callo al piso con algo de mareo un golpe fuerte en sus rodillas, empece a gater como un bebe no era yo la que esta en mi cuerpo cada vez iba desapareciendo pero..

 

<< vamos a comer saori vamos a comer >> exclamo Belsabu, con mis pocas fueras me levanto olfateando a Nyx el demonio de mi hermana, no ellos no se podían encontrar así mismo, era imposible no, sacudí mi cabeza y al levantarme vi a kamra mis ojos variaban de color un pequeño picón y sentí que mi ojo iba a salir de mi cara. Con una sonrisa casi que forzada, saludo a mi sobrino -H..... ola Jeremy un... p..pla..placer - casi que tartamudeando respondí a las palabras de aquel joven.

 

Bumm, la fuerza de aquel demonio era indescriptible... Me perdi.

 

Belsabu- Demonio de saori

 

<< por fin por fin >>, ojos color escarlata ya arribaban ante kamra y jeremy, belsabu logro salir de mi encierro para tomar mi cuerpo, era extraño estar apartada de él, durante toda mi vida él era mi único compañero, pero pude ver y senti todo lo que el hacia.

 

-Hola Nyx- miro kamra con sus ojos sombríos y sin vida alguna -Sal maldito o tienes miedo -Dijo belsabu tornando una mal mirada kamra, por un instante torno los ojos negros mirando a kamra intentando llamar Nyx volvió y hablo -Jajaja patético- dijo aquel demonio - Vamos Nyx -dijo de nuevo pero sabia que aquel demonio estaba escondido en algún lugar del cuerpo de kamra.

 

-Jjajajaja patético, tu niña eres patética - intentando lograr un poco de enojo -La ira te consume vamos niña cobarde,.- con un truco belsabu empieza atentar a kamra con lo preferido <<Sangre>> algo que ellos dos no se resistirían -Hueles Kamra hueles, vamos niña egocéntrica crees que todo esta a tus pies jajajja-exclamo sacando un sonrisa que no mostraba piedad o compasión por lo que decía -NYX -volvió a llamarlo, tomo a kamra de un hombro el cual apretó con un poco de fuerza, mientras yo encerada en aquella prisión al ver que lastimaba a mi hermana, empuje con fuerza dando una señal fuerte kamra.

 

-No, soy yo- exclame mientras empozo a reír <<Tu quédate hay no estorbes >>.

 

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[Rose Black Lestrange]

El elfo de su madre irrumpía a Rose cuando esta se encontraba en la sala de duelos disfrutando un practica sola causando, el mal humor por la pérdida de atención, elevando a la criatura por el aire.

 

¿¡Por qué rayos apareces aquí?! No te dije nada de molestarme solo que sea importante.

Cuando el elfo buscaba levantarse de rodillas se acercaba a Rose con una rollo de pergamino que lo entregaba con cierto temor mientras trataba de hablar claramente

 

Es es urgente Ama lo lo lo envía la Sra Kamra .

 

Una vez más ese nombre aparecía en los momentos de la bruja que al escucharlo arqueo una de sus cejas interesada y dudosa de lo que se trataba.

Vete antes que conozcas un poco de mi cólera maldito. Acomodándose en una de las butacas del salón con la daga que siempre portaba rompe el precinto que sellaba el mensaje, Se trataba de la invitación a una fiesta, al parecer la Ivashkov estaba interesada en crear un vínculo que dentro de todo podría ser de gran beneficio e imposible de negar esa oferta tentadora.

 

Casa de los Gritos

 

Sus pasos resonaban por la entrada principal completamente sombría donde la delicada brisa causaban escalofríos no solo eso, presencias extras acompañaban a la bruja corrompiendo por momentos su tranquilidad, aun gobernaba la delicadez y atrevimiento clásico de la Black eran más intensos al punto que el olor a carroña le eran indiferentes.

 

El ambiente se modificaba en su pasar donde los presentes se tornaban interesantes, era ahí que agradecía la elección del vestuario acorde a la ocasión, falda negra ceñida a sus curvas mientras en la parte superior un sostén que cubría parte de su torso por encima una chaqueta de cuero una gama de negro luto. Lo fatal en ella se despertaba cuando un joven rubio se cruzaba en su panorama logrando deseos, deseos que se transformaban a ver a la dichosa dama que por más cubriera su rostro las curvas la delataban; era ir por el chico o ir por su madrina entonces fue ahí donde su razón pudo más que sus deseos encaminando al encuentro con Kamra tomándola por la espalda.

 

Dudo que esperara tanta eficiencia pero al leer lo urgente de mi presencia me tiene detrás de usted con dos opciones una daga que podrá correr por su cuello aprovechando el ambiente o bien me aclare muchas cuestiones sobre Daphne. Su mano izquierda presionaba sobre el mango de la daga y con su mano ubicada en su cintura .

 

@ @

[Jeremy Triviani]

El rubio observo como la expresión de su tia (@) cambiaba. Su voz y todo el porte de su cuerpo ya no era el mismo de hace unos minutos cuando lo saludo. Hasta su madre (@ Rambald) sufrió los efectos de la transformación, ya que el demonio de la oriental le exigió que liberara a su demonio y la atacaba físicamente para conseguir aquello.

Cuando Jeremy estaba por interrumpir la discordia entre las brujas. Una mujer apareció y tomó a su madre por detrás (@@Rose Black Lestrange). El vampiro sintió como sus hormonas empezaron a retumbar en su cuerpo al verla. Aquella bruja de pelo amarillo era de los más picante con su atuendo.

-Deja a mi madre, preciosa- le dijo acercándose a ella- puedes hablar conmigo.

El rubio no esperaba tener que usar la fuerza. Aquella mujer misteriosa era un deleite para sus ojos azules. Le sonrío para distender el ambiente. Para distraerla de lo que sea que la habia traido alli con tanta urgencia. No sabía si era por la bebida que se había tomado o por las ganas de divertirse que tenía, pero de pronto se sentía osado con ganas de portarse mal.

-Podemos bailar esta música horrible si te parece -le sugirió con una media sonrisa, para que cambie de objetivo - Mi nombre es Jeremy Myrddin Triviani.