Jump to content

Mansión de la Familia Potter Black (MM B: 90394)


Sagitas E. Potter Blue
 Compartir

Publicaciones recomendadas

xEFGjr3.jpg

Cronos (PJ secundario)

 

Y allí apareció rodeado de la vegetación con su atuendo oscuro, su máscara de cuervo y sombrero de punta, en sus pies portaba unos zapatos con tacones y punta de metal. En su mano derecha porto Kansho y en la otra Daga de Sacrificio de su amo. El objeto vinculado al libro de la sangre, la guarda en la funda de su cinturón, mientras la otra la guarda como sable en su espalda. Este ingresa a los terrenos como si nada, fijando su mirada en esa residencia. Este elfo domestico es mas sanguinario que su amo, odia a los sangres sucia y traidores de la sangre.

 

Y al chasquido de sus dedos, aparece en la cocina, está se encontraba sola, ningún otro elfo esta en ese lugar, allí estaba, quizás andaba en otro sitio los sirvientes de esa familia. Y fue como evoco visitar cada hogar y local para encontrarlo. El sirviente del mago oscuro recorre ese sitio, escuchando algunas voces y va en torno a ella. Y fue así, que vio a Herpo, y en un chasquido hace que un objeto de ese lugar, es decir, un cuadro vaya en su dirección.

Este sin embargo, no expreso palabra alguna, simplemente se limitó a sacar el arma que portaba en la espalda, la cual desvaino como si tratase de un sable, el brillo de está se encontraba teñido por la sangre de los elfos aún latente de los del hogar de los Potter Blue, quizás ese traidor pudiera reconocer a sus amigos. En ello su mirada se clava en Harpo ( Sagitas Potter Blue ). Y en cierto modo ignoro a Aaron Black Lestrange y su captora, pues su amo le ordenó fue matar a ese ser a quien se enfrentaba.

 

4NXE0Tb.jpg

Editado por Demian Luxure

7VZGWBY.jpg

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

  • 1 mes más tarde...

Me encontraba fuera, en los terrenos de la Potter Black. Las semanas estaban siendo extrañamente tranquilas, más o menos en calma, lo cual por naturaleza no me terminaba de gustar. Siempre tendía a estar alerta en los momentos de relajación, ya que había sido entrenado en la idea de qeu el enemigo siempre atacaba cuando más seguro te sentías.

 

Aunque el invierno se acercaba, y los días eran ya más cortos y fríos, aquella mañana era bastante agradable, el sol del medio día calentaba los jardines de casa, asi qeu había salido fuera con Ithilion y mi hija, ahora más tranquila desde que habíamos hecho aquel extraño viaje...

 

Fenrir estaba en el suelo, tumbado, cuerpo a tierra pero con las patas traseras tensas y el rabo en movimiento, lanzando pequeños gruñidos a la pequeña lobito de color tan blanco como él, excepto por las zonas de pelo ligeramente violeta en la cabeza y sobre todo, las orejitas. Freyja y Fenrir jugaban, provocando las risas de Ithilion, mientras Elentari dormitaba sobre la hamaca, apoyada contra mi espalda, con una de sus manitas sujetas al dobladillo de mi camiseta.

 

- Vamos It, una vez más...concéntrate. Intenta pensar en el fuego, en las llamas. Piensa en como surgen a través de ti, como te rodean. Piénsalo y deja que te rodeen la mano - no era la primera vez qeu lo intentábamos, pero aquel ejercicio parecía resistirse al pequeño, y me negaba a actuar como Jack y ser más severo con él, a pesar de qeu parte de mi me llamaba a hacerlo

M4xQXhr.jpg

XaIHB03.gif.8d9da3f22cdcf76478ba8b5e63d5666a.gif KhGckEc.gif.6e9b2b71e2797bafac6806b66df1d1b0.gifXXBPo79.gif

 

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

  • 2 meses más tarde...

Lucía un sencillo jersey negro de cuello alto y unos pantalones oscuros, junto a botas cerradas de invierno. Aunque aún no nevaba, estaba segura que pronto un blanco manto caería sobre el jardín de la mansión, sobre el pueblo. Lo olía. Sentía los chillidos divertidos de mi hijo Ithilion retozando en los jardines, junto a los gorgoritos con los que nos regalaba la ya crecida Elentari, seguramente medio dormida junto a su padre. Matt se hacía cada vez más adulto y sentía como aquella familia ya no me necesitaba, al menos como antes, cuando yo cuidaba de todos. Ahora, él se valía solo.

 

Con cierta nostalgia, me giré hacia Harpo que intentaba discutir conmigo. No le contestaba porque amo a este elfo y sé por todo lo que había pasado por mí y por la familia. Era uno más, sin dudarlo. Pero eso no significaba que me pudiera hacer cambiar de idea. Hacía tiempo que me rondaba por la cabeza y aquellos días había ultimado mi cambio.

 

-- Harpo, mira eso...

 

Aparté un poco la cortina. Ithilion jugaba con Fuego, bajo la supervisión de Matt. Era inútil, ambos sabíamos qué iba a suceder en el futuro. Lo habíamos visto. Ambos éramos buenos videntes, ambos habíamos vivido lo que iba a ocurrir. Suspiré levemente.

 

-- Ithilion será un peligro para todos en su fase adulta. No me importa qué tengo que arriesgar, qué pierdo, a qué me arriesgo. Para mí, la familia es lo primero, antes que nada. Además, ya he dado el primer paso. Ya he matado a un Nigromante para conseguir la información. Lo siento, Harpo. Sé lo que significa y lo que implica para todos, más para ti que has pasado por todo ésto últimamente.

 

Por supuesto, me refería a su secuestro en manos de Aaron Black.

 

-- Pero ya lo he hecho. Desde ayer soy Mortia y seguiré esos pasos en busca de más conocimientos de magia oscura que, de momento, me estaban vedadas.

 

Volví a mirar por la ventana y guardé silencio, dejando mis pensamientos escondidos bajo la protección de la Oclumancia.

kNTUx8c.gifsf6Sw.gifHdDMuO2.pngXXBPo79.gifKRLtVZp.gif

D69M3Vr.jpg

  tOWLU4S.gif  KhGckEc.gif.6e9b2b71e2797bafac6806b66df1d1b0.gif     Icr0JPz.gif

0jsC0dL.pngWliKSjc.pngckkcxVm.png

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

  • 2 semanas más tarde...

Ithilion bajó los brazos, frustrado. Su control del fuego, tan natural, de repente le parecía inútil. POdía qeumar cosas de forma descontrolada, o como mucha, generar pequeñas llamas en sus manos. Pero aquel pequeño trabajo, tan sencillo como le había parecido mientras se le explicaba, ahora le parecía la misión más complicada del mundo. Solo tenía qeu recubrir su mano de fuego, por completo, hasta la muñeca, y mantener aquel guante de fuego.

 

Suspiré, mirándolo. Tenía que aprender a frustrarse y entender qeu necesitaría trabajar sus habilidades, no siempre podía serle tan fácil. Fenrir, al verlo asi, se acercó hasta él, gruñendo ligeramente antes de darle con el hocico en la mano, logrando que sus deditos le quedaran en la frente, entre las orejas. Era su forma de animar al niño, pidiéndole que le rascara, mientras Freyja, el pequeño cachorro de mi hija, trotaba torpemente a su alrededor.

 

Desvié la vista hacia la niña, que miraba fijamente hacia la Potter Black, riendo. Ladeé ligeramente la cabeza, porqeu aquella risa, unida a esos intentos de palabras...solo los producía cuando veía a una persona. No me quedó más remedio qeu sonreir, antes de revolverle el pelo a Ithilion

- Eh, por hoy lo dejaremos, vale? Mañana te saldrá mejor, seguro. Aprovecha, juega un poco con los lobos....y cuida de tu sobrina,, quieres? - últimamente había notado que al pequeñajo le gustaba que le diera esos "pequeños" encargos. Realmente, quien cuidaría de ambos sería Fenrir, pero me gustaba que Ithilion se sintiera responsable.

 

Asintiendo con la cabeza, desaparecí....

 

Para aparecer justo detrás de Harpo y Sagitas, qeu miraban por una ventana.

- Ahora ya se por qué eres la única persona a la que no puedo sentir. Pero ahí abajo hay alguien que si te siente....y se reconocer cuando mi hija percibe a su abuela. - comenté, con las manos en los bolsillos. La observé fijamente, me costaba reconocerla vestida de negro....casi me recordaba más a Helike qeu a la propia Sagitas. - Encontraste lo que buscabas? - pregunté, acercándome a ellos.

M4xQXhr.jpg

XaIHB03.gif.8d9da3f22cdcf76478ba8b5e63d5666a.gif KhGckEc.gif.6e9b2b71e2797bafac6806b66df1d1b0.gifXXBPo79.gif

 

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Las palabras de Matt me hicieron envararme un momento, poniéndome a la defensiva, para después relajarme y soltar un pequeño suspiro. Ahora tocaba lo peor, hablar con mi hijo. No era una conversación que pudiera eludir mucho tiempo pues, como yo, él era patriarca de la mansión y eso implicaba que debía compartir con él temas que afectaran a la familia. Me giré hacia él y me di cuenta que mi rostro era serio. ¿Tan rápido había perdido la sonrisa?

 

-- Es magia ancentral, esa con la que nos topamos, Hijo.

 

Demasiado solemne, supongo. Desde la ventana, se sentían las risitas de Ithilion jugueteando con los dos lobos, junto a mi nieta, ambos por los que daría mi vida. El chasquido de la lengua de Harpo me devolvió a la sala, donde mi hijo observaba mi atuendo oscuro.

 

-- ¿No te gusta? A mí tampoco, pero hoy me encuentro inusualmente opaca. Supongo que pronto volveré a mis ropajes coloridos de payasa. ¡Oh, por Satanás, Harpo! Basta de chasquidos discriminatorios. Sé que, en el fondo, me ayudarás en todo, aunque no te guste.

 

Caminé despacio hacia una de las sillas que estaba cercana a Matt y le miré a los ojos.

 

-- Lo encontré a medias, Matt. Encontré a uno de los nigromantes que poseía la información. Tengo su anillo y tengo la lista de libros y poderes que necesito pero...

 

Quedé un momento con la mirada errática pensando en lo que había hecho y en la línea que había cruzado.

 

-- Pero para conseguirlo tuve que matarlo.

 

Punto. Así de sencillo.

 

-- Ahora sé dónde debo buscar, adentrarme en el mundo oscuro para conseguir esos conocimientos. Pero la familia es muy importante para mí, lo sabes, no me importa hacer lo que sea necesario.

 

Y silencio, sólo roto por los chasquidos negativos de Harpo, quien recogía la mesa con el disgusto marcado en su cara.

kNTUx8c.gifsf6Sw.gifHdDMuO2.pngXXBPo79.gifKRLtVZp.gif

D69M3Vr.jpg

  tOWLU4S.gif  KhGckEc.gif.6e9b2b71e2797bafac6806b66df1d1b0.gif     Icr0JPz.gif

0jsC0dL.pngWliKSjc.pngckkcxVm.png

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Miré a Harpo, sonriendo de medio lado. Me parecía un poco tierno escuchar los chasquidos de desaprobación del elfo, siempre amable y servicial, tremendamente leal a mi madre, y ahora, simplemente protestaba malhumorado mientras se movía aquí y allá.

 

Observé en silencio a Sagitas, qeu me contaba los avances de su búsqueda y que había logrado. Uno de los dos había tenido qeu permanecer en casa después de los últimos acontecimientos, y de nuevo me había tocado a mi...por más que me molestara, en estos tiempos complicados uno de los dos tendría que permanecer en la mansión, o al menos cerca...

 

Seguía pareciéndome un poco extraño verla tan vestida de negro. Creo que nunca la había visto asi, ni siquiera en los peores momentos, en aquellos en los que debíamos pasar desapercibidos y escapar, había preferido vestir sus ropas habituales, de colores vivos y llamativos...

 

Me recordaba a....

- No...dime qeu no te has unido a ellos. - dije, sentándome frente a ella, mirándola fijamente a los ojos. Me di cuenta de que me resultaba inquietante en su aspecto. - Vistes igual que...hablas como m...Helike la última vez que la vi - ni siquiera sabía cuanto hacía. Un año? tal vez... - Si te descubres el brazo y quitas la protección veré una serpiente enroscándose con una calavera?

 

Entendía que hacía, pero...hacía mucho tiempo que había dejado de creer en los bandos, y en la ayuda qeu pudieran darnos...al final, para los bandos solo contarían sus propios intereses, y rara vez coincidirían con los nuestros.

M4xQXhr.jpg

XaIHB03.gif.8d9da3f22cdcf76478ba8b5e63d5666a.gif KhGckEc.gif.6e9b2b71e2797bafac6806b66df1d1b0.gifXXBPo79.gif

 

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

  • 3 meses más tarde...

Había pasado mucho tiempo desde que me había ido corriendo. Al menos las últimas novedades en Italia me habían aplacado un poco. Todo estaba en paz, aparentemente, pero la bomba soltada por Sagittas en el Ministerio me había dejado desconcertada. Me había aparecido a unas calles aledañas de la mansión Potter Black. Una ironía llevando esos apellidos. Al mismo tiempo que nos realzaba como "nobleza" mágica, podía causarnos estragos políticamente. Ya se vería más adelante el cómo las políticas de nuestra querida ministra no influyesen de forma negativa en nuestra Casa y en el resto de nuestros negocios. Sabía que medio mundo estaría en contra nuestra. Entendía sus razones pero aún así... Era un cambio demasiado brusco para proteger a la población mágica.

Ese día hacía calor. Podía verlo en las pocas personas que paseaban por el lugar y se notaba gotitas de sudor en su frente. Ocultaba mi rostro con la capucha/capa que me había llevado al ministerio, lo último que necesitaba era llamar más la atención. Pero quizás el hecho de aparecerme a mediodía no pudiese pasar inadvertida para el resto de los mortales. Chasqueé la lengua, furiosa. Llevaba mi varita oculta en la mano, básicamente por costumbre y precaución. Caminaba despacio pero a pesar de todo, mis botas de piel de dragón hacían algo de ruído. Quizás hubiese mejor idea el llegar en escoba. Pero tampoco me apetecía. La aparición era el método más rápido para llegar a cualquier parte, si no había protecciones extras.

Saqué un cigarrillo del morral de cuero y lo encendí con la varita, decidí cambiar el color del jersey y de los tejanos por un tono más grisáceo. Así no me abrasaría antes de llegar a la casa. Había dejado allá a Antínoo y a Cesarión reforzando la seguridad de la mansión y de hecho, deberíamos discutirlo, pensé para mí. Añadir más magia adicional por mucho que se levantara el Estatuto del Secreto. Otro error más, estaba de acuerdo, pero había que hacer las cosas despacio, no tan brusco...

- Un error que nos costará caro - dije por lo bajo, dándole una calada al cigarrillo. Mis pies me llevaron a la entrada principal de la mansión en dónde los elfos de la familia estaban cuidando los jardines. Aunque estaba preocupada más por mis problemas maritales. Matt había estado hosco y como para no hacerlo y a pesar de los mensajes enviados telepáticamente, sólo había recibido silencio. Mientras pensaba, abrí la verja principal y pasé a los jardines. El crujir de la piedra del camino (?) me ayudó a relajarme un poco más, pero no tenía ni idea de cómo enfrentarlo, aunque respetase su silencio. Pero claro, una cosa era eso y otra muy diferente... Quizás sería buena idea el enseñarle el motivo de mi huída, porque no había podido ser de otra forma. 

Me senté en la escalinata a esperarle. Aunque fuese jefa de departamento, era cierto que me había dado ciertas libertades para ello. Fumaba tranquilamente aunque con algo de nervios... ¿Llegaría @Matt Blackner? No tenía idea, le había dicho que lo esperaba en casa, así que, tampoco tenía idea de cómo iba a ser su recibimiento pero tampoco me esperaba una gran calidez, algo de lo que había asumido en cuánto me aparecí en el Ministerio de Magia inglés.

 

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Había retrasado a propósito mi regreso a la PB después de la reunión con Sagitas, casi un evento más familiar que de trabajo dados los presentes. No quería...

 

No quería encontrarme con @Helike R V PB

 

Habían sido dos años que parecían muy cortos junto a Elentari, viéndola crecer y cuidando de ella, pero al mismo tiempo, parecían dos años tremendamente largos separado de ella. Había pasado por estadios muy diferentes. Nervios, ira, miedo, tristeza....y al final, simplemente, soledad. Sagitas había dejado de sacar el tema al cabo de unos meses, supongo que en el fondo, mi madre entendía bastante bien aquella situación. Nadie lo mencionaba, porque no sabíamos qeu decir. Si había muerto, si vivía, si prefería iniciar una nueva vida....simplemente no sabíamos donde estaba o porqué se había ido.

Tragué mucho tiempo con aquella angustia, y supongo que eso me había agriado un poco el carácter según el día, o cuando alguien sacaba el tema. 

 

Pero con el tiempo....me había acostumbrado. A cuidar a la pequeña solo, apañándomelas como podía, siempre con Sagitas vigilando por encima de mi hombro para echarme una mano (menos mal, o habría entrado en pánico más de una vez)...a no verla. A extrañarla en silencio.

 

Y de golpe, allí estaba. Tal como se marchó, regresaba, como si nada. De pronto, todas aquellas sensaciones que me había tragado tanto tiempo quisieron salir, pero por otro lado, quise contenerlo. No quería mostrar que me ahogaba volver a verla, sentirla cerca de nuevo, olerla, verla...era como una puñalada que me ahogaba. No quería sentirla, pero no podía evitarlo. No sabía como actuar, y que la relación con Sagitas estuviera tan tensa no ayudaba, no iba ir a contarle...cuando llevaba semanas rehuyéndome. 

 

Pero ese era otro tema, otro problema.

 

Con las manos en los bolsillos, caminé por los terrenos de la PB. podría haberme aparecido en la habitación y evitarla, pero en algún momento tendríamos que hablar. MIentras recortaba la distancia, me fijé en ella. Estaba pálida, tenía ojeras y parecía haber perdido peso. Lo qeu fuera, parecía haberle pasado factura. Me paré un momento frente a ella, sin mirarla, con la cabeza agachada, antes de continuar hacia la puerta. Era una invitación silenciosa para que me siguiera hasta la que, en el tiempo que habíamos estado juntos, era nuestra habitación.No quería hablar en los terrenos ni el salón, a la vista de todos. 

 

Llegué antes qeu ella, aunque escuchaba sus pasos. Me alejé hasta el escritorio, apoyando las manos en él, dando la espalda a la puerta, la cama, y el resto de la habitación. Esperaba qeu al menos cerrase la puerta.  Seguí de espaldas a la puerta tratando de contener la sensación de miedo y angustia  del pecho

-  qué es lo que quieres - pregunté. - por qué has vuelto ahora? 

Me atreví a darme la vuelta, cruzándome de brazos.

- Por qué  te marchaste de esa manera? Nos dejaste solos. - terminé, mirándola a los ojos.                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                        

M4xQXhr.jpg

XaIHB03.gif.8d9da3f22cdcf76478ba8b5e63d5666a.gif KhGckEc.gif.6e9b2b71e2797bafac6806b66df1d1b0.gifXXBPo79.gif

 

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Llegue a la mansión de mi madre y mi hermano sin avisar, traía conmigo una bolsa de mano con algunas prendas de ropa sucia que habían quedado de mi viaje, me frote las sienes para bajar un poco el dolor de cabeza que estaba formándose. Entre en la mansión sin anunciarme y me deje caer en el sillón de la sala. Deje mi maleta a un lado y tome un respiro profundo por primera vez en mucho tiempo, cerré los ojos y deje que el olor y los sonidos de la mansión, abrí los ojos de nuevo al sentir que el olor de la tristeza impregnando la madera. 

apunte con la varita la chimenea y volvi a encenderla esperando que el calor entibiara un poco la instancia, me arrebuje en el calor de una manta que estaba apoyada sobre el sillón y cerré los ojos a la espera que alguien de la familia llegara. No supe en que momento me quede dormida

Siempre seré tu hija... Reiven Grindewald te quiero // NiqQIUZ.gif

firma pere.jpg

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

La puntualidad es una cualidad importante en las personas-, la voz de su padre se escucha en su cabeza con la claridad con la que es capaz de escuchar a las molestas y ruidosas (muy ruidosas) aves que vuelan a su alrededor. —Pero créeme, cariño mio, no puedes confiar para nada en alguien que llega siempre tan demasiado a tiempo.

Maldición.

Sin duda, se estaba convirtiendo en su padre, o en una versión retorcida de él, mas bien.

Era molesto recordar cosas así cuando no las necesitaba, no es que pensar en sus viejos padres fuera un amargo recuerdo, pero no requería ahora ser acosado por ellos hasta en la voz de los memorándum del día a día.

Y de un solo movimiento Hessen consiguió serrar la protección de la agenda electrónica que marcaba en toda la pantalla la hora exacta (a dos minutos para el medio día), recordando a su vez y de mala gana que estos preciados aparatos electrónicos no funcionaban muy bien en estos lugares tan desbordantes de magia.

Levantó la cristalina mirada para observar con dificultad a su alrededor, todo ahí parece demasiado grande para lo solo que se veía y demasiado solo para la hora del día que era, por supuesto que no espera un gran recibimiento, después de todo ninguno de los correos (o cartas, como se acostumbra en estos lugares) fue resuelta antes de hoy, por lo que Hess imagina que, si algo o alguien se digna a atenderlo en la puerta de los Potter Black el día de hoy, solo podría ser de una de dos formas; con genuina e inesperada sorpresa o de mala gana.

Pero ¿no eran estas las cosas del oficio que, secretamente, mas disfrutaba? De algún modo lo era, aun cuando en voz alta siempre dice a su colega que su orgullo se siente ofendido cuando estrellan su cara con un portazo.

No, no. Es Hessenorwood Crouch, como Jess, no Eggs-, repitió dos (o tres veces mas) el nombre cuando lo atienden finalmente en la entrada, a los límites del predio. A eso añadió solamente la tarjeta blanca con el nombre de la empresa (Harmony Co.) y el titulo de “asistencia” después de su nombre. —No, ella no me está esperando, eso creo, pero ya le digo, es importante que hable con ella hoy mismo-, insiste con ganas, aunque tampoco parecía impaciente, no es bien visto hacer esas cosas, por lo tanto él no las hace tampoco. —Mire, si está en casa puede anunciarme y si ella no quiere recibirme lo entenderé, pero necesito que haga el intento, ¿si?-, empujó con solo algo mas de encanto.

Con algo de suerte encontrará a Darla Potter Black en su casa el día de hoy, podrá convencerla de sus razones y para antes de la comida estará devuelta en su piso, preparándose para la cita de esta noche con la hija nomaj del señor Ronald Adam.

 

@ Scarlet Akane

cpoR6Mo.gif
B259aHz.jpg
Kl83Ehb.gif

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Unirse a la conversación

Puedes publicar ahora y registrarte más tarde. Si tienes una cuenta, conecta ahora para publicar con tu cuenta.

Guest
Responder a esta discusión...

×   Pegar como texto enriquecido.   Pegar como texto sin formato

  Sólo se permiten 75 emoji.

×   Tu enlace se ha incrustado automáticamente..   Mostrar como un enlace en su lugar

×   Se ha restaurado el contenido anterior.   Limpiar editor

×   No se pueden pegar imágenes directamente. Carga o inserta imágenes desde la URL.

Cargando...
 Compartir

Sobre nosotros:

Harrylatino.org es una comunidad de fans del mundo mágico creado por JK Rowling, amantes de la fantasía y del rol. Nuestros inicios se remontan al año 2001 y nuestros más de 40.000 usuarios pertenecen a todos los países de habla hispana.

Nos gustan los mundos de fantasía y somos apasionados del rol, por lo que, si alguna vez quisiste vivir y sentirte como un mago, éste es tu lugar.

¡Vive la Magia!

×
×
  • Crear nuevo...

Información importante

We have placed cookies on your device to help make this website better. You can adjust your cookie settings, otherwise we'll assume you're okay to continue. Al continuar navegando aceptas nuestros Términos de uso, Normas y Política de privacidad.