Prueba Libro del Caos

[Bakari]

—Es el momento. —comentó dirigiéndose a la bruja recién llegada.

La mujer que tenía delante, había desaparecido justo en el momento en que le iba a realizar la prueba de vinculación con los conocimientos del libro, ¿el motivo? No estaba del todo seguro, pero tampoco le importaba demasiado, sino que se limitó a seguir las indicaciones que le había dictado la dirección de la universidad para esperar a que volviera a cursar la última etapa de la clase.

Afortunadamente, no fue necesario un translador o algo similar, porque la había citado en la plaza del árbol de fuego y allí sería el sitio elegido para realizar el duelo. Estaba seguro de la prueba sería rápida y que la Malfoy estaría lista para enfrentarse a él, pero en esa ocasión, no sería él quien se encargaría de realizar el duelo, sino Khufu, quen no tardaría en llegar.

La luz del sol, iluminando ligeramente el árbol y sus alrededores era como ser trasladado a otro sitio dentro de otro país, sin saber que era justamente su espacio personal, el que esperaba tener siempre. Esperando a que llegara el guerrero, le regaló una media sonrisa, justo antes de comenzar a relacionar las posibles inclinaciones mágicas de sus participes y las decisiones que tomarían.

—Para aprobar, deberás pasar un pequeño duelo. —le indicó— Solo debes vencer al guerrero Khufu y demostrar tu valía como duelista.

Sin más, en cuanto notó que el Guerrero Uzza que le ayudaría brindaría su ayuda con la prueba le regaló una sonrisa y se alejó de los magos, esperando a ver los movimientos que realizarían entre los dos para comprobar que Beltis estaba lista para vincularse con el libro del caos. .

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@Beltis

• El duelo tendrá una duración de una semana (28/07/2019)
• Pasadas 24 horas sin respuesta del contrincante, los ataques se considerarán impactados.
• Pasadas 48 horas sin respuesta del contrincante, se considerará abandono (reprobará).
• Los hechizos permitidos son los de la lista de neutrales, y los libros de hechizos hasta el libro del Caos.
• Nos guiaremos por las reglas de Duelos y Asaltos.
• Las dudas sobre la prueba podrán ser realizadas en el topic de dudas y consultas del libro del Caos.

Editado 21 de Julio del 2019 por Beltis

[Beltis]

1d10

Rueda del Caos

[Beltis]

Beltis torció la boca al oír que tendría que demostrar su valía como duelista. Su gesto no era de profunda seguridad ni derrochaba confianza, algo que se suponía que debían tener los buenos duelistas. Para ella esto era lo que más necesitaba practicar, tal vez el punto más débil de toda su construcción como bruja: la confianza. La duda perpetua era muchas veces el motor que la motivaba a aprender y a desafiarse, pero algunas otras era el freno que le impedía avanzar. Respiró hondo y se relajó, soltó los brazos y el cuello a la espera de Khufu, el uzza que debía recibirla si lograba salir con vida del duelo.

 

Estudió la plaza que tantas otras veces había visitado durante el estudio de otros libros y siempre por breves momentos. Era una zona extensa y árida, un campo de batalla rodeado por asientos de piedra y presidido por la estatua de diosa guerrera del pueblo uzza junto al árbol sagrado de su gente. El sol estaba en lo alto y quemaba como solo puede hacerlo en pleno verano en una zona tan desértica como esa. La bruja, poco acostumbrada al sol, maldijo entre dientes su mala suerte y sacó su varita. La media sonrisa de Bakari la desconcertó por un instante y prestó poca atención a la llegada de Khufu.

 

Cuando se percató del uzza, rápidamente invocó la rueda del caos, aunque no tuvo suerte.

 

- Cinaede -dijo.

 

El gas venenoso inundaría las vías respiratorias de Khufu rápidamente, en una situación normal. Sin embargo, no era una situación normal, la efectividad había disminuido a causa de la poca suerte que tuvo al invocar la rueda del caos. Seguramente el veneno causara menos daño y solo requeriría un anapneo para liberar las vias respiratorias. En seguida, hace aparecer la daga del sacrificio en su mano libre.

[Khufu]

La solicitud de ayuda hecha por Bakari había llegado a sus manos algunos días atrás, motivo por el cual decidió que podía darse aquella libertad para cooperar con uno de sus compañeros y conocer un poco más de cerca a aquella mujer que decían formaba parte del consejo de Warlocks, ¿qué era eso? nunca termino de comprender aquellos términos raros usados por los británicos y como tal, no le prestó tanta atención, porque al final de cuentas no era revelante.

 

Presentarse a tiempo, era lo único importante así que justamente en cuanto llegó el día de la prueba final de la Malfoy, se pusó en marcha con su vara de cristal y caminó desde su vivienda en la universidad hasta la plaza del árbol del fuego, un sitio que era tan semejante a su tierra que por unas fracciones de segundos se sintió trasladado a esa época de antaño en la que había vivido con los suyos.

 

—Veremos que tienes para mi. —soltó con tranquilidad en cuanto llegó hasta el lugar.

 

Saludando a su viejo compañero con un asentimiento de cabeza, y miró a la persona con cual tendría que enfrentarse en duelo y se alejó unos pocos metros de ella, sintiéndose como en casa con cada paso que daba y sentía la arena debajo de sus pies. Girándose lentamente, la miró y esperó con paciencia su ataque y al ver como fracasaba con la rueda del caos y su hechizo terminaba siendo un intento vano del que debía ser.

 

—Cineade. —siseó tranquilamente, consiguiendo que un gas venenoso invisible comenzará a aparecer al rededor del rostro de Beltis, el cual comenzó a inundar las vías respiratorias las cuales quedarían por completo obstruidas dejándola envenenada.

 

Tras aquello, supo que era momento de curar el veneno que él había respirado segundos antes, producto de un ataque igual de la bruja en su contra, así que simplemente pensó en un <anapneo>, logrando que de esa manera su cuerpo quedara completamente curado y listo para continuar con la prueba.

[Beltis]

1d10

Rueda del Poder

[Beltis]

Beltis se quitó los mechones blancos del rostro y el insipiente sudor de la frente con el dorso del brazo, poco después de la llegada de Khufu se levantó el viento seco y caliente del desierto, trayendo consigo polvo y arena. Ese lugar era un sitio duro que criaba gente aún más dura. La bruja no sabía si su batalla era contra el hombre que tenía enfrente o contra el endemoniado sol que abrazaba su piel. Vara de cristal en mano, el guerrero movió los labios pero su palabra produjo hechizo ninguno, y el sonido de su voz pronto desapareció en el viento. La bruja no iba a desperdiciar aquella equivocación, menos cuando las ganas que tenía el uzza de acabar el duelo de forma rápida eran tan evidentes.

Invocó la rueda del poder y resopló ante el resultado. Maldijo entre dientes su pésima suerte y el puñetero caos que se reía de ella. Iba a quemar el libro al finalizar la clase, iba a quemar hasta la última de sus hojas. Ardiendo sería más útil de lo que había sido hasta ahora. Sonrió ante la est****a situación, no podía tomarlo de otra forma cuando hasta el momento la suerte no había estado de su parte al invocar al caos; parecía una broma. Invocó mentalmente y lanzó hacia el uzza la Arena de Hechicero, los polvos de hueso harían que Khufu quedara sin visión durante unos minutos, reduciendo así sus posibilidades.

Inmediatamente después, con solo pensar Flechas de Fuego, varios filamentos de fuego salieron despedidos de su varita hacia el torso del uzza, las saetas quemarían la piel y provocarían heridas sangrantes.

 

- ¿Qué tengo para ti?- le respondió finalmente- al principio tenía un cabreo descomunal. Pero ahora comienzo a ver el punto cómico de este libro. Es como jugar a ver quién tiene peor suerte. No podemos hacer otra cosa que reírnos del resultado.

 

Desde que había comenzado el libro ninguna sola vez había tenido buena suerte ¿qué sería lo próximo? ¿Peeves?

[Khufu]

A pesar del pequeño error de pronunciación que había tenido con su hechizo, Beltis había sufrido el daño del veneno ocasionando estragos en su cuerpo y como no se había curado cuando debía podía observar como la muerte comenzaba a asomarse a través de su cuerpo, así que negando lentamente y teniendo que desperdiciar uno de sus dos hechizos para la bruja y para preservar su vida, soltó un bufido, preguntándose ¿por qué eran así los ingleses? ¿a caso no les importaba aprender y mantenerse con vida en sus duelos para mostrar sus capacidades o preferían morir rápidamente? No lo tenía del todo claro, pero debía actuar rápido y justamente eso era lo que había.

 

<Anapneo>, pensó mirando a la Malfoy, consiguiendo que el veneno la dejará respirar y eso era lo único que necesitaba de momento, las curaciones extras dependerían de ella, porque no pensaba ser tan generoso nuevamente y menos, al sentir como sus ojos comenzaban a sentirse un poco arenosos y le impedía enfocar de manera correcta. No le molestaba en absoluto porque tenía cierto control de su entorno gracias a lo bien desarrollado de sus sentidos y eso generaba confianza en su forma de pararse y continuar con la postura despreocupada.

 

—El caos siempre genera eso caos y nadie sabe cuál sera su siguiente movimiento, siempre considerará el azar como lo más divertido, independientemente de quien seas. —explicó con tranquilidad, mientras invocaba la daga que era capaz de absorber un hechizo— Kansho —pensó, con los ojos cerrados.

 

El ataque de las flechas de fuego que habían sido invocadas por Beltis, consiguió desaparecer durante algunos segundos puesto que el kansho lo proceso para regresarlo a su invocadora, de tal manera que ahora los filamentos de fuego comenzaron a viajar de vuelta a donde habían aparecido, para al instante en que tocaran la piel blanca de la mujer causaran quemaduras que necesitarían ser atendidas.

 

Si, la bruja también tenía el mismo efecto que él en los ojos y eso los dejaba en igualdad de condiciones, pero sabía que la balanza no estaba del todo pareja aún, le faltaba aún a ella por demostrar que podía vincularse correctamente con el libro de hechizos.

[Beltis]

1d7

Señor del Caos

[Beltis]

Al contrario de su creencia inicial, el veneno acabó por penetrar en su cuerpo. Ocurrió de un momento a otro cuando se pensaba libre del hechizo. Por más esfuerzo que hiciera no era capaz de respirar, su pecho bajaba y subía de forma acelerada sin ingresar aire a sus pulmones. Antes de llevarse una mano al cuello, el efecto desapareció. Miró a Khufu mientras recuperaba el aliento después de tamaño error, un error que había estado a punto de costarle la vida y, aún peor, la prueba Se irguió nuevamente y le hizo una señal con la cabeza, agradeciendo su ayuda. El guerrero le había dado una nueva oportunidad. Aprovechando la bocanada de aire fresco invocó el Señor del Caos, tentando nuevamente su, hasta ahora mala, suerte.

Una bella criatura se apareció en el campo, muy cerca de ella, de suaves movimientos y una apariencia sobrecogedora. La ninfa utilizó sus extraordinarios poderes curativos sobre Beltis, haciendo desaparecer todos los efectos del veneno, dejando como único y último rastro el regusto amargo de los pétalos de pensamiento en su boca. La doncella se mantuvo a su alrededor y se quedaría junto a ella durante algunos turnos más. Al fin después de muchos intentos el caos le sonreía. No había invocado a un troll o peeves, para variar.

- Immolo oppugnare - dijo

Con la daga se hizo una herida en la pierna sabiendo que tenía a la ninfa de su parte, esta se replicaría en la pierna de Khufu y se sumaría al daño sufrido por las quemaduras de los filamentos de fuego que el guerrero fue incapaz de detener. Acto seguido, maldijo mentalmente la siguiente acción del guerrero, pensando una Maldición, que haría que el próximo hechizo que usara el uzza acabara siendo una mala y ridícula versión del original.


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