SLE I | Fecha 3: Vratsa Vultures vs Tutshill Tornados

[Mael Blackfyre]

Podia ver como todo iba en cámara lenta. No le dije nada a Cillian, confiaba en su habilidad porque por algo era parte de los Vratsa Vultures. El joven se preparó y tenía el apoyo de todo el equipo. Aunque tenía que admitir que tenía que atravesar aquellos aros con toda la fuerza que poseía porque el partido lo perdíamos por 30 puntos. El arbitro dio la señal de que podía lanzarlo y pudimos ver como el joven cazador, realizaba la sanción que nos favorecía al menos, una vez en ése partido.

 

Cillian aprovechó todo lo que tenía para aquel momento. Tenía un truco debajo de la manga y eso aprovechó, para hacer uso de su habilidad provocando que el trayecto de su quaffle fuera como un remolino imparable contra uno de sus aros. Y eso hizo, la Guardiana no se esperaba aquello y no llegó a cubrir la quaffle que pasó como una flecha. Estaba seguro que de haber estado cerca de Cillian lo habría levantado en el aire, se merecía unos cuantos besos en el vestuario. Rápidamente los cazadores se prepararon, porque aquello no terminaba ahi.

[Mateus Blackburn]

Turno 17

Mientras observaba las impolutas jugadas de los buscadores, me detuve en búsqueda de la quaffle, la cual estaba en poder del equipo rival. Estaba ubicada en los tres cuartos del campo del equipo contrincante, en posesión de Dana. Observe atentamente como intercambiaba la posesión de la pelota con Cillían y Luca en busca de alguna oportunidad para robar la quaffle. Sin embargo, sus esquives y pases en la zona del mediocampo eran suficientes contra nuestro trabajo defensivo.

No obstante, al pasar los tres cuartos de nuestro campo, Luca, que estaba en posesión de la quaffle, chocó de frente contra Darla. En la frente de Luca rápidamente se empezó a vislumbrar un fruncir el ceño muy característico, seguido de una acalorada discusión en la que posteriormente intervendría el árbitro. Aun frente a semejante acto de violencia, Darla recorrió el camino de la virtud y tomo la situación con paciencia.

Estaba ubicado unos metros atrás y debajo de ella en ese momento de choque, cuando la quaffle salió disparada en diagonal hacia el suelo y dio inicio a su enfrentamiento. Frente a semejante oportunidad en la que el rival estaba distraído, aproveche buscando la quaffle, pero de reojo logre ver una bludger que se aproximaba peligrosamente a mi cabeza, a pesar de ello logre reaccionar a tiempo agachándome, la única víctima de ese proyectil fueron algunos de mis blancos cabellos que fueron arrancados por la violenta velocidad a la que iba esa bludger. Tras recibir la quaffle, rápidamente lance un pase largo hacia Aedis Greengrass que ya se encontraba incursionando nuevamente en territorio enemigo.

[Mentita]

TURNO 18

Ya había pasado demasiado tiempo del partido como para que la capitana estuviese tan tranquila. Estaba calmada, a pesar de la euforia de los tantos marcados y de esa falta cometida en contra del árbitro. Desde luego, se reprochaba por la mancha en el marcador, en su contra, que había mantenido invicto durante los tres primeros goles; y se lamentó un poco, aunque no la culpaba, el que Maida hubiese tenido que ser víctima de sus impulsos que rayaban en el autoboicot. Sin embargo, y porque sabía que la ira debía ser redireccionada, continuó el partido sin emitir ni una palabra. Le confortaba darse cuenta de que sus compañeros aún confiaban en ella, la estaban marcando para los pases y eso significaba que no habían perdido la fe en que podían sacar adelante el juego, muy a pesar de sus jugadas en contra. 

Cuando recibió el pase del muchacho de cabello blanco, Vizcacha, entró de forma sigilosa a la zona de tiro, donde un guardián estaba entretenido con la pantalla que habían armado los cazadores de Tutshill Tornados. Mael, supuso Mosquito, creía que la quaffle aún se encontraba en poder de Darla o Vizcacha, por lo que no la vio acercarse nunca al aro lateral izquierdo. Disparó.

Para cuando Arya, golpeadora de los Buitres, se hubo dado cuenta del peligro que corrían, ya era demasiado tarde. Aedis Greengrass había anotado un cuarto gol, dejando el marcador en 40 a 0.

[Dana Gryffindor]

Turno 20 penal.

Y finalmente el marcador dio 40-0.En un arrebato de furia le saqué el bate a Arya y le arroje la Bludger a un seguidor de los TT que agitaba en el aire un cartel en apoyo a su equipo. El golpe le dio de lleno en la cara dejándolo inconsciente para satisfacción mía. Sin embargo el arbitro se acercó rápidamente declarando a viva voz: -¡PENAAAAAAAL!-. Le devolví el bate a mi compañera y pude ver la mira de mis seis compañeros queriéndome asesinar en cualquier instante. 

Y fue entonces cuando Aedis se apoderó de la quaffle nuevamente tras su anterior anotación y se dispuso a realizar el disparo.

Sus movimientos revelaban que usaría una habilidad probablemente destinada al aro central y así lo hizo, un golpe directo al aro central y Mael Blickfire, guardián de los buitres se lanzó al aro central y detuvo la quaffle gracias a un reflejo inmediato. 

Los VV nos salvamos pero aún así habiamos quedado muy atrás en el marcador y era de extremada urgencia anotar cuanto antes, o al menos evitar que sigan ganando puntos.

La snitch estaba próxima a nuestros buscadores pero Ada debía retrasar la posibilidad de atrapar la pelotita dorada, debía distraer al otro buscador al menos hasta realizar dos puntos, sino estaríamos realmente en problemas.

[Darla G Dumbledore]

Turno 3 de Buscadores - Sustituyo a Kalevi (Aaron)

 

Se sentía como si le hubieran lanzado un confundus, luego del robo Speelman todo había ocurrido a una velocidad muy extraña. Se sentía como en una nube afiebrada. Si no fuera que estaban en medio de un partido hubiera jurado que luego de su gesto hacia su golpeador, éste había utilizado efectivamente contra ella el hechizo confundus, pero no era tan tonto como para hacerlo en medio del partido ¿o sí?

Los golpes y los goles se sucedieron, cuando no era ella era Vizcacha quien marcaba el pase exacto para que la Mosquito metiera su gol, bueno, no uno, sino cuatro, salvo por un penal, claro. Miró a Mael, la lluvia había empezado a despabilarle, seguía con la idea que el partido era como un sueño en cámara lenta, pero quizás solo fuera efecto de su estado de ánimo.

Su mirada castaña se posó en la figura del joven Kalevi, ella también había alcanzado a ver el inesperado giro de la snitch, pero no era a ella quien debía ir tras la dorada pelotita alada. Lo vio adelantarse y ser más veloz que la buscadora rival, lo lamentaba por Ada, bueno, no tanto, en el luego todo se vale y quizás por eso mismo que todo se vale fue que Kalevi en ese preciso momento evadía despeinándose una bludger que había sido lanzada por Malum, la pareja de su propia golpeadora, Elizabeth, pareja o proyecto, no le había quedado muy clara la historia entre ambas golpeadoras luego de leer el excelente reportaje del Quidditch Time

[Mael Blackfyre]

TURNO ESPECIAL 3 DE BUSCADORES

Luego de aquella atajada de mi parte pude visualizar los movimientos como flecha que estaba destinada a hacer nuestra buscadora Ada. Era como un relámpago pero también pude ver como su golpeador realizaba un certero golpe a la bludger que impactaba en la figura de nuestra estrella. Apreté mis dientes tantos que creía que se me iban a salir. Solamente habíamos hecho un tanto de parte de Cillian, teníamos que repetir aquello un par de veces más si queríamos ganar el partido. De nada servía enojarme pero no podía evitarlo.

Pude ver como nuestra buscadora avanzaba un poco menos que Kalevi, el otro buscador, que con un maravilloso giro, esquivaba la bludger, a diferencia de nuestro equipo. Eso debía doler pero tenía que admitir la persistencia que caracterizaba a la joven con la que continuaba el juego, aunque fuera mucho más atrás. Desde los aros. Era nuestro turno, ahora teníamos que reorganizarnos y volver a atacar. Lancé la quaffle a mis cazadores.

[Darla G Dumbledore]

Turno 21 - Cazadora de los TT robando en Defensa con Transylvanian Tackle 

 

No había notado que era lo que le pasaba hasta ahora que sentía el frío del agua en la cara, generalmente evitaba prestar atención a esos detalles para que no le provocaran lo que efectivamente le estaban provocando: los días opacos y aún más los de lluvia la apagaban. Pensó que lo mejor era ser consciente de eso hecho y no dejar que la afectara. Se obligó a tener buenos recuerdos, como si fuera a realizar un patronus, ufff, eso le recordó la imposibilidad de hacerlos, pero de pronto, su mejor recuerdo funcionó y se sintió con las fuerzas renacidas gracias a aquel rostro de ojos azules, cabellos oscuros y sonrisa pícara.

Se preguntó cuánto se había perdido tras el gol de los buitres pero también supo que sus compañeros confiaban en ella, y por eso se obligó a reaccionar. Por ellos y porque se lo imaginó a él en las gradas, en lo más alto del estadio, más allá del cielo gris. No le había importado enfrentarse cara a cara con Luca y sí había disfrutado de los pases entre Vizcacha y Aedis que volvían a terminar en tanto para su equipo.

Es la hora, pensó tras ver cómo atajaban el penal tras que se llevaran los medimagos a un simpatizante de los Tornados, al menos no era a uno de ellos, porque si los golpeadores rivales tuvieran tanta puntería como Dana estarían sonados, claro, el simpatizante no estaba listo para evadir como ellos mismos.

Lo siguiente ocurrió muy rápido, la pelota estaba nuevamente en juego y los tres cazadores de los Vultures estaban jugándose al palo, Dana pasó hacia la derecha, Luca más retrasado hacia la izquierda y Cillian se hizo una vez más con la quaffle. Cruzó miradas con Vizcacha y éste hizo un suave amague deslizándose hacia adelante y la derecha pero bloqueó más a Dana que a Cillian y allí ella aprovechó. A toda velocidad, sosteniendo solo con la zurda su cometa Darla se lanzó directo hacia Cillian, lo vió abrir los ojos al notar que ella iba derecho e intentar proteger la quaffle, pero la diestra cerrada de Darla iba derecho al rostro del cazador rival, no supo si él cerró o no los ojos esperando el inminente impacto contra su nariz. ¿Cuántas veces la Potter Black había practicado esa jugada del Transylvanian Tackle? No sabía pero su zurda soltó unos segundos antes la escoba y en el mismo momento que la diestra frenaba a menos de un centímetro de la nariz de Cillian se hizo con la quaffle y dejó que su escoba bajara a toda velocidad para adelantarse y mirando hacia donde estaba Aedis lanzarle una vez más la bola esperando que pudiera anotar un gol más. ¿Lo mejor de todo? Los había tomado tan de sorpresa que ni sus golpeadoras habían tenido tiempo de reaccionar e intentar detenerla, ahora todo dependía de la Mosquito.

[Mentita]

TURNO 22

Cuando Greengrass recibió el pase de Darla, quien había realizado un magnífico robo de quaffle en equipo con la Vizcacha, se encontraba un poco lejos de la zona de tiro. A lo lejos, alcanzó a ver que el guardián, Mael Blackfyre, ya no estaba tan distraído como en la anterior jugada. Probablemente, él se reprochaba haberse dejado llevar por la pantalla de bloqueo que habían hecho los cazadores de Tutshill Tornados y no los dejaría pasar tan fácilmente como en aquella ocasión.

Los Buitres estaban más presentes en la escena, Aedis lo notaba, pero eso fue suficiente para que ella detuviera su avance. Había sido una buena idea tener el cabello rojo atado en una coleta, de otro modo, a causa de la llovizna, podría haberle dificultado la visión. En el momento en el que la capitana de los Tornados vio pasar una bludger por delante, aceleró su cometa antes de que a alguien más se le ocurriese querer golpearla con una de esas violentas pelotas; de hecho, creyó que la bludger que había visto más adelante fue de parte de las golpeadoras VV, hasta que se dio cuenta de que, en realidad, habían sido Jeremy y Elizabeth tratando de desestabilizar a Mael. Se dio cuenta, entonces, que el duelo sería directo entre cazador y guardián. 

Sin una gota de duda, Aedis disparó al aro central. Se mordió el labios inferior cuando vio que el guardián se lanzaba para atajar y contuvo la respiración. Otro gol. La hinchada estaba enloquecida con el 50 a 10 que acababan de obtener.

-- ¡VAMOS TORNADOS! --gritó con ambos brazos levantados, aunque su gesto era una clara provocación poco amistosa para el capitán de las buitres. Le sonrió y se volvió a celebrar el tanto marcado con su equipo.

[Mateus Blackburn]

Turno 23

Mientras se desarrollaba el partido, nos encontrábamos con una cada vez mayor ventaja en el marcador a favor de nuestro equipo. La hinchada del equipo rival se estaba apagando pasados ya los dos tercios de la duración regular de un partido.

La formación de Dana, Cillían y Luca era una copia y pega de las anteriores, siempre con Dana a la cabeza. Por ello, se podía predecir a quien se dirigiría la quaffle con considerable precisión. Dana se encontraba trasladando la pelota por el centro del campo fue bloqueada por Aedis, en el momento idóneo dirigió un pase a Luca, que se encontraba a unos metros a la derecha.

Sin embargo, la recepción del pase no igualo la calidad del mismo. La quaffle reboto en el guante de Luca y aproveche el momento para robar la quaffle. Poco después, escuche un «uhhhhh» proveniente de los palcos, gire mi cabeza y observe una máscara de buitre cayendo al campo de juego. Una bludger que en principio debía dirigirse hacia mi había impactado en un fanático de los Vratsa Vultures en la cabeza.

Sin darle mas importancia, traslade la quaffle por la banda izquierda del campo y enviando un pase hacia el centro, que recibiría refinadamente Aedis en busca de convertir otro tanto para el equipo.

[Mael Blackfyre]

TURNO 24.

La lluvia golpeaba mi rostros y gracias a los encantamientos que habíamos utilizado en el equipamiento, éstos nos permitía ver bien todo de todas maneras. La escoba me mantenía erguido observando todo y pude ver como mis cazadores habían perdido la posibilidad de mantener a raya la defensa de los Vratsa Vultures. Estaba rezándoles a todos los dioses para que lo lograran pero aquel cazador pudo contra ellos.

El pase a la maldita cazadora era obvio, pero era entendible porque de los 3 al parecer era la que mejor puntería y mayores posibilidades de atravesarla por los aros. Pero estaba preparado o al menos tenía que intentarlo. Me doblé contra el mango de la escoba y me aferré a él, tal vez por mirar tanto a mi rival natural, no pude darme cuenta que el golpeador de su equipo ya había dirigido la bludger contra mi. Me golpeó si, pero aún asi, me estiré contra uno de los aros.

Mi cuerpo se encaminó hacia uno de los aros laterales, pude bloquear completamente el aro, con el torso dolorido que había recibido el golpe del contrincante. Aún asi, atajé la pelota y los vítores se escucharon en toda la cancha. Ibamos perdiendo, pero al menos teníamos que demostrar valía y no perder la dignidad.

 

Era el turno de los buscadores.