Jump to content

Adivinación ~ Agosto 2021.


Anne Gaunt M.
 Compartir

Publicaciones recomendadas

Se sorprendió por la respuesta casi inmediata de Darla ante el contacto con el objeto mágico. La habían solo perdido un par de segundos, pero habían sido los suficientes para captar el interés del resto del grupo. Hess en cambio sólo se había sentido paralizado mientras el trance de Darla duró, imposibilitado de mover sus pies del suelo a pesar de su fuerza física. No pudo hacer ni decir nada hasta que ella volvió a estar consciente.

Yo no he visto nada Darla-, dice, pero hay algo extraño. Tampoco le arrebata el objeto mágico inmediatamente de las manos, sino que evita que se le caiga al suelo nuevamente cuando Darla recupera la conciencia. —Pero se de lo que me está hablando-, distraído le entrega el objeto al muchacho Blackner y enfoca sus cristalinos ojos en Darla, que ha dicho algo que ha intrigado a todos ahí, incluso a Mónica que se había mantenido apartada del grupo. —Creo que... también lo sentí- ,dice un poco extrañado de su propia explicación. 

No le está mintiendo, sus ojos que habitualmente son ciegos no han captado ni una sola imagen más allá de lo que podría haber reflejado Darla en aquel trance que duró sólo segundos. No obstante, realmente cree que podía sentirlo, no está seguro el cómo, pero es mucho más perceptivo ahora ante la energía que Darla desprende en este instante, casi al punto de saber de qué está hablando aun cuando, ciertamente, él no ha visto nada de nada. Como si algo hubiera conectado los sentidos de ambos en ese momento.

¿Está bien Darla?-, cuestionó suavemente mientras que ahora el otro par de brujos inspeccionan el objeto.

Era difícil de explicar aquel breve contacto, pero así funcionaba esta magia ¿no? era totalmente incierta. En lo que espera por la respuesta de la Potter Black, para asegurarse de que ella se ha recuperado completamente, el mago aprovecha también para inspeccionar toda esa fuerza que recorre por sus manos, como si de un puente eléctrico se tratase. 

Quizá esto necesite de más energía-, lo dice en un tono de voz baja, tranquilamente a pesar de lo mucho que lo inquieta de pronto esta fuerza de la que habla y el objeto ahora en manos de Matt. —O de otro tipo-, ¿cómo explicarles? —Si, verán, hay textos de ocultismo que hablan de que no solo con la mirada se pueden percibir estos mensajes, si no que también nuestro cuerpo es un conductor de energía que puede darnos información si prestamos atención-, hizo una pausa, ¿ellos estarían tan interesados como él en llevar esta experiencia más allá de solo especulaciones? 

Habría que averiguar.
 
Mónica, ¿verdad?-, acude a la atención de la muchacha. Ese es el nombre con el que Darla la ha llamado. —Si, déjeme un espació ahí por favor. Usted háganos el favor y sostenga esa esfera con firmeza mi señor Blackner-, dice algo más animado a Matt antes de acomodarse en el espacio que hay entre ambas brujas para formar una cadena cerrada o círculo. —Entonces, ¿lo intentamos?-, pregunta serenamente, extendiendo una de sus manos a Darla y otra a Mónica.

cpoR6Mo.gif
B259aHz.jpg
Kl83Ehb.gif

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

No le sorprende que Matt no sepa de qué habla cuando pregunta qué ha visto, sí le preocupa el ensimismamiento de Anne, hace tanto que no habla con ella. De hecho, se ha preguntado si la bruja hubiera aceptado la clase de saber que ella estaba, sigue culpando a Jeremy del alejamiento de ambas.

Sus orbes se posaron sobre Mónica que repetía ahora la pregunta de su primo,  cuando había llegado la media sonrisa de la bruja y su sorpresa de encontrarla allí habían sido correspondidas con el mismo gesto de su parte y un encogimiento de hombros, como expresando que ni ella misma esperaba estar en ese lugar. Cosa que era muy cierta, una fuerza más que extraña la había arrastrado hacia ese conocimiento que siempre había considerado innecesario pero que hoy parecía traerle el encuentro de un grupo de personas tan vario pinto pero tan relacionada con cada etapa de su vida que le causaba una cierta sensación que aún no lograba descifrar.

Su mirada se volvió hacia el Crouch y entre abrió los labios con un nada oculto gesto de sorpresa. Pero si él había mirado a través del objeto. ¿Cómo podía ser que no hubiera visto aquella escena en la campiña? Darla no se ha dado cuenta que la bola de cristal se ha resbalado de sus manos hasta que la ve en las de Hessenordwood.

—¿Lo ha sentido? —pregunta un poco sorprendida, de hecho luego se da cuenta que él no habla de sentimientos, sino de sensaciones, pero lo curioso es que ella ha podido sentir los sentimientos de los tres personajes de la escena, la pena del anciano, la indiferencia del más joven y la determinación sumada a la adrenalina y una extraña certeza de que lo que está a punto de suceder es incorrecto pero necesario. No, no son sentimientos, son ¿qué demonios son?

—¿Cómo lo sabes? —pregunta en voz baja, observando al Crouch, él insiste con que lo ha sentido y ella niega con la cabeza ante su pregunta pero de sus labios sale exactamente lo contrario —sí, sí, estoy bien —cuando uno hace pacto con el diablo debe saber que éste siempre le pondrá pruebas y obstáculos en el camino, esa idea loca que se le acaba de ocurrir es algo que no tiene idea de cómo definirla, centra su mirada en los ojos del mago, intentando entenderlo y por unos segundos olvidando donde está pero él rompe el contacto, ese leve momento en que estuvo a  punto de dejar caer sus desconfianzas y dar  un paso de fe.

—¿Más energía? No es una lámpara... —dice algo incrédula y se muerde el labio mientras Hessenordwood intenta explicarles sobre ocultismo, su mente corre a un oscuro salón en el que un rubio mago le explica sobre las maldiciones y le muestra libros antiguos, sus ojos azules parecen brillar con esos conocimientos tan peligrosos como atrayentes, no lo puede negar. Pero vuelve, no puede permitirse abrir más ventanas al pasado delante de los presentes.

Observa la soltura con que él se desenvuelve, se han acercado formando un círculo, o algo parecido alrededor de la bola de cristal y Hess extiende sus manos a ambas mujeres. Darla duda, observa a su primo con la esfera de cristal en su mano y aunque extiende su mano parece esperar un gesto de aprobación de parte del Blackner antes de tomar la de mano del Crouch… el frío comienza a recorrer nuevamente su espalda, piensa en unpentagrama y sus ojos pasan de Matt hacia Anne, esperando… no está segura lo que espera en realidad ahora que lo piensa, la energía de los cinco está en ese lugar y todos se interconectan entre sí… seis grados de separación… susurra sin darse cuenta.

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Prestó especial atención a Darla durante unos minutos hasta que Hess empezó a hablar y desde luego las palabra de este ultimo no provocaron que perdiera el interés en lo que estaba pasando. Ella no había sentido absolutamente nada y, a causa de su experiencia, le resultaba de lo más extraño y sorprendente que alguien pudiera ver algo diferente a la realidad estando despierto. Era cierto que ella había experimentado sueños rarisimos con personas que no conocía, que incluso se había convertido en realidad de alguna manera, pero nunca los había vivido despierta.

Se apartó un poco a petición del mago al que menos conocía de la reunión y se quedó mirando las manos que le extendía a ella y a Darla. Matt se había quedado en el centro de lo que pretendí8a ser un circulo, con la esfera de cristal en la mano y la ex-mortifaga desvió la mirada hacia el objeto con curiosidad, esperando a ver algo distinto al brillo cristalino que despedía.

- Anne, con tu permiso, creo que no estaría de más probar lo que propone Hess – dijo finalmente hacia la bruja, que parecía estar desconectada de todo. De hecho, a Mónica le resultó extraño su rostro, como si la mujer estuviera en un lugar que no era en el que realmente se encontraba.

Luego miró al Blackner esperando que estuviese de acuerdo.

- Como dice Darla creo que no es una lampara como para necesitar “mas energía”, pero es verdad que si todos nos concentramos… podamos ver lo que ella ha visto y entender que ha ocurrido mucho mejor - tomó las manos de Hess y la Potter Black, casi cerrando el circulo que las tres figuras formaban. Sol9o quedaba que Darla tomara la del mago que había propuesto la idea y, así, comprobar si funcionaban.

- Un momento ¿Podría ser peligroso que el señor estuviera agarrando ese cacharro? - preguntó al grupo, soltando inmediatamente las manos de los otros-. Podríamos… ponerla en algún lugar como agarre, ¿no?

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

- No te preocupes @ Monica Malfoy Haughton  no creo que sea más peligroso que otras cosas que he hecho en mi vida. - contesté, con una sonrisa, antes de volver la vista hacia @ Hessenordwood Crouch  y @ Darla Potter Black , que me había pasado la esfera para que la observara, mientras su amigo hablaba con ella. Preferí dejar que ella misma procesara lo que quiera que hubiese visto...entendía esa sensación.

 

Ya contaba con la habilidad de la videncia desde hacía años, y despertar el Ojo había sido...muy complicado. Casi traumático. Aun hoy no conseguía dominarlo del todo, asi que si una visión te "ataca" de repente, podía comprender que necesitaras un momento para procesar lo que acababa de pasar.

 

Mientras ellos hablaban, intentando saber que le había pasado a Darla, observé la bola de cristal. Apenas pesaba, y la niebla que creía ver en su interior ahora estaba tranquila, en calma, y ahora volvía a ser transparente. No parecía tener imperfecciones. 

 

La idea de nuestro compañero me hizo levantar una ceja, pero no me parecía del todo descabellada. Asi qeu asentí, quitando hierro a las preocupaciones de las chicas, sobre todo a Mónica, que la había expresado en voz alta, asintiendo ligeramente mientras miraba a Darla, sonriendo. No lo dije en voz alta, pero en alguna ocasión, Sagitas y yo habíamos compartido visiones mediante la videncia...tal vez porque nos encontrábamos en una situación emocional similar, o porque nuestras energías se sincronizaban más fácilmente, pero...no me parecía del todo descabellado.

 

- No me parece mala idea. A veces un conjuro es más poderoso si son varios los que lo convocan, asi que...por qué no funcionaría con esto? - apoyé la idea, adelantándome un paso para formar un círculo. Sostenía la bola con firmeza, con fuerza, extendiendo el brazo para que la esfera quedase entre todos. El contacto era importante si nuestro objetivo era conducir la energía.

 

- Listo.

M4xQXhr.jpg

XaIHB03.gif.8d9da3f22cdcf76478ba8b5e63d5666a.gif KhGckEc.gif.6e9b2b71e2797bafac6806b66df1d1b0.gifXXBPo79.gif

 

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Mónica encogió los hombros cuando Matt comunicó que estaba de acuerdo con la idea y que incluso le parecía una buena opción. Si todos tenían más o menos la misma opinión no había ningún problema por intentarlo ¿verdad? O eso fue lo que pensó y se dijo a sí misma de forma tranquilizadora mientras volvía a tomar las manos de los dos compañeros que tenía a ambos lados.

Miró fijamente la esfera de cristal intentando que sucediera algo, o al menos ver algo que le diera una pista de lo que Darla había experimentado. Las manos ya le sudaban cuando la niebla transparente de la bola de cristal comenzó a hacerse más espera y a girar en su interior hasta formar lo que le recordó a una nube de humo atrapada en un recipiente.

- “Intenta ver más allá” – pensó para sí misma cerrando los ojos por un instante. Cuando los abrió observó como una tenue luz empezaba a salir del interior de la esfera y como de pronto la imagen nítida de un grupo de aves sobrevolaba el mar, acercándose a tierra. Justo cuando iban a alcanzar firmeza, un gran dragón las envolvió en su aliento de fuego, provocando que las criaturas más pequeñas terminaran fulminadas por él.

- A veces el camino cambia de sentido, no es el mismo para todos, ni para los mismos – dijo Mónica, aunque con una voz mucho más grave que no pareció la suya. El mensaje no fue demasiado claro, realmente no parecía referirse a nada en particular-. Malditos los que den la espalda a su destino – finalizó, cayendo al suelo.

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Hay algo extraño, cuando finalmente Mónica cuestiona por un momento a Anne y Matt si es prudente continuar con esto, que el demonio finalmente parece notar que algo no anda del todo bien. Puede ser tan solo esa pérdida de sensaciones tras la terminación de la visión de Darla o quizá la idea de compartir una visión o lo que fueran estas cosas, con estas personas. Es un grupo bastante particular, ciertamente, y de algún modo le intriga también el cómo esta variación de entidades puede influir en este ejercicio. Por otro lado está el profundo silencio en el que se encuentra sumergida Gaunt, ¿era todo esto un truco planeado por ella?

Se reacomodó nuevamente luego de que Mónica les soltara, gira sobre sí mismo en busca de alguna base donde puedan colocar el objeto tal como ella lo menciona, aunque finalmente Matt Blackner decide que será él quien porte el objeto. A Hess le anima esa determinación del brujo y de buenas vuelve al círculo que han formado para de una buena vez comenzar con esto. Es demasiado más experimental de lo que habitualmente se aventuraría a explorar, pero tiene todo ese conocimiento teórico al respecto que espera que, en el peor de los casos, le pueda servir en algo. 

Hay  más  ahí de lo que a simple vista se ve-, la voz no viene de él, ni de la esfera, ni mucho menos de alguno de los elementos que forman aquel círculo. El hombre es capaz de reconocer la voz de su origen y por un momento su respiración se detiene.

No veo nada-, supone que lo ha dicho en voz alta, su pecho vibra como si así fuera, pero no puede despegar la mirada de la esfera. —Muéstrame-, casi le retó.

Tú nunca has tenido buena vista, hijo mío-, dice, la molestia le invade el cuerpo. —Pero siempre hemos tenido mejor percepción-, puede sentirlo sonreír. 

Todo después de ahí es un remolino. Se encuentra nuevamente como hace unos minutos con Darla, pero esta vez es diferente, hay agonía, un dolor fuerte en su piel, le resulta imposible pensar como todo ese calor que de pronto acumula en sus manos no hace que los demás lo suelten. En medio segundo todo se convirtió en calma y solo después, muy, muy en el fondo, había aparecido algo como ¿ira? ¿rencor? No tuvo más tiempo de razonarlo, el tirón a su lado significó que finalmente alguien salía del círculo.

Le llevó unos cuantos segundos más dejar aquella postura rígida como una estatua en la que había permanecido, abrió nuevamente los ojos tan lentamente como alguien que acaba de despertar por la mañana con cansancio después de una terrible noche. Y respiró. Aún hay cosas mezcladas ahí, no solo en su mente, si no en sus sentidos, que se revuelven como el ritmo de la niebla en el interior de la esfera. Pero no hay nada más, ni una sola visión. 

Cuando es más consciente, se da cuenta de que Mónica ha quedado inconsciente, pero aunque intenta acercarse a ella, simplemente no puede moverse.

¿A dónde vas? Yo aún sigo aquí-, le habló el demonio.

cpoR6Mo.gif
B259aHz.jpg
Kl83Ehb.gif

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

No podía negar un cierto cosquilleo en el estómago, más por la curiosidad de hacer algo nuevo, sin saber el posible resultado, que por otra cosa. No me daba miedo, algo me decía, en algún lugar de mi mente, que no podía pasarme nada malo (más allá de un posible dolor de cabeza, esperaba) y que el posible descubrimiento podría ser mucho mejor.

 

Miré a mis tres compañeros con una media sonrisa, sintiendo la determinación en @ Hessenordwood Crouch , como la duda se disipaba de @ Monica Malfoy Haughton  y el ligero convencimiento de @ Darla Potter Black . Formamos un círculo, con mi mano, sujetando la esfera de cristal, en el centro. Todos nos tocábamos, pues el contacto creíamos que era importante para conducir la energía que necesitara aquel objeto para mostrar....lo que fuese que quisiera enseñarnos.

 

Durante unos segundos no pasó nada...nada...

 

Y entonces percibí la energía, pasando a través de mi. Era como una corriente, fuerte, imparable, que se transmitía a través de ellos, llegaba hasta mi y se concentraba en mi mano, dándome la sensación de que echarán a arder si seguían tocándome. Ardía, era muy fuerte, pero no aflojé el agarre. Tal vez, por eso, por ejercer de conductor entre todos y la bola de cristal, percibí imágenes cruzadas de todos ellos. Un paisaje, una voz. Oscuridad, pequeños animalillos. Una queja, un dragón. El costado me dio un latigazo, seguramente más psicosomático que real. Voces, desconocidas, que no entendía pero seguro que mis compañeros si.

 

No apartaba la mirada de la esfera, no podía. La veía brillar, y eso me atraía para seguir mirando. Y vi. Vi...un gran lobo. Pero no era Fenrir, poruqe mi lobo era blanco como la nieve. Era...Era negro, grande. 

 

- Grim. - murmuré sin darme cuenta, notando qeu la energía cesaba. Dos de ellos se habían soltado, habían roto el círculo y la energía se diluyó. De pronto, el brazo pesaba, la mano ardía. Lo bajé pesadamente, aunque sin dejar caer el objeto. Jadeé unos instantes, intentando ordenar mis ideas. - Monica. - estaba en el suelo, desmayada. - echadme una mano con ella.

M4xQXhr.jpg

XaIHB03.gif.8d9da3f22cdcf76478ba8b5e63d5666a.gif KhGckEc.gif.6e9b2b71e2797bafac6806b66df1d1b0.gifXXBPo79.gif

 

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Allí todo era negro. No era como cuando dormías, que a veces soñabas cosas que perturbaban tu sueño, si no que donde quisiera que estuviese no había ni una gota de luz ¿Qué le ocurría? Estaba tomando las manos de Hess y Darla hasta hacía un momento y de pronto todo se había vuelto completamente negro. Se veía a ella misma en el centro de aquella oscuridad y, aunque intentaba hablar, ningún sonido salía de su garganta.

¿Qué estaba pasando?

Aún sentía la sensación ardiente en su cuerpo, como si hubiera sido ella la que había ardido y no la bandada de pequeñas aves de su visión. En la boca tenía cierto sabor metálico que le recordaba a la sangre, pero al tocarse no tenía nada.

- ¿Hola? - intentó decir.

Sus labios se movieron pero su voz no se oyó. Solo había silencio. Miedo, angustia. De pronto un torbellino de sensaciones invadió su mente y algo humedeció su rostro ¿Estaba llorando? Se tocó la cara y las inexplicables lagrimas se deslizaron entre sus dedos. Buscó de nuevo a su alrededor sin encontrar a nadie; de pronto, encontrar a aquellos casi desconocidos que se habían convertido en compañeros durante ala clase se volvió una necesidad.

Quiso sacar la varita, pero no la encontró y entró en pánico. Fuera de su mente, su cuerpo aún estaba en el suelo y sudaba como si se encontraba en medio del desierto. Murmuraba algo aunque de forma inaudible para ninguno de los presentes en la habitación.

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Mónica parecía tener la sensatez de quien pregunta a la profesora, la Potter Black observó de reojo a la Gaunt, preguntándose qué era exactamente lo que le ocurría que no emitía opinión alguna respecto a la sucesión de acontecimientos que los había llevado encontrarse ahora alrededor de una esfera de cristal, intentando descubrir si sus energías permitían visualizar qué es lo que ella les podía transmitir desde su interior.

La Malfoy acordaba con ella pero ponía en duda la seguridad de Matt sosteniendo la bola de cristal entre sus manos, Darla observó a su primo ahora, esperando su decisión.  Pero el Blackner no temía a lo que pudiera ocurrir, su sonrisa le arrancó una a ella también, sí, sabía muy bien lo que los accidentosos y los miembros de la familia Potter Black eran capaces de sobrevivir. Sus ojos se posaron en el rostro de Matt unos segundos, y sintió curiosidad, había algo extraño en él y no lograba dilucidar qué era pero las palabras del Crouch la hicieron distraer de ese momento de percepción.

Lo que no se esperaba cuando había asentido correspondiendo a la sonrisa despreocupada de su primo es lo que ocurriría luego. Todos habían formado el círculo y su mano en la de Hessenordwood se estremeció por sentir la piel de una manera inesperada, como si su temperatura no fuera la normal. Lo siguiente que pudo sentir sin embargo fue la presencia de la mujer, la rubia que había visto en su anterior visión. Casi podía sentirla a su lado, esta vez su rostro era visible, le sorprendió el reconocerla, la Black no le había contado demasiado de su vida antes de ser engendrada. Pero podía verse junto con ella recorriendo los pasillos de una antigua mansión de estilo barroco.

Darla cerró los ojos y presionó sin darse cuenta la mano con la que mantenía el contacto con su primo. La sensación era exactamente la contraria a la que tenía en contacto con el Crouch, de hecho pudo sentir por un momento esa esencia familiar pero lo que más le preocupó es la calidez humana que había en él, casi había olvidado que era tener contactos con humanos puros. De pronto todo fue un torbellino, podía sentir las emociones de la rubia, temor, decisión, odio…  y las voces de sus compañeros, no, no eran de ellos, salvo la que dijo Grim y mencionó a Mónica, abrió los ojos para descubrir que la Malfoy se había desmayado.

—Matt tu mano —susurró Darla notando el enrojecimiento producto de sostener la esfera, como si ésta le hubiera quemado la piel, Darla soltó a Hess, cuya mano helada aún sostenía. Curación, pensó para sanar la mano de su primo en cuanto materializó su varita en la mano y arrodillándose junto a la bruja la apuntaba susurrando un —enervate —que no parecía dar los mejores resultados tampoco.

—Anne —llamó elevando su vista a su profesora que parecía estar formando parte del trance general ¿qué habían hecho?

 «No lo olvides cuando regresen Darla… todos habrán cambiado… sus vidas habrán cambiado el rumbo… para bien o para mal… pero nada vuelve atrás… nunca… todo avanza y evoluciona para que el universo se vuelva a ordenar..»

Darla abrió los labios con asombro, de dónde venía la voz aquella, su vista se elevó y no pudo ver a la mujer pero supo que era Ursula Southiel, podía sentirlo como una certeza y mordió su labio, observando a una afiebrada Mónica ¿qué habían hecho?

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Permaneció solo un tiempo más ahí de pie en el mismo lugar que ocupó en aquel círculo que habían formado y que ahora se encontraba disperso, con Mónica inconsciente en el suelo, Darla casi sobre ella tratando de reanimarla y Matt, bueno, Hessen no esta seguro, la esfera que aún sostiene con firmeza en su mano no lo deja ver del otro lado, donde se supone que debería estar el Blackner, aunque puede escucharlo, apenas, si, agotado casi tanto como todos ellos. Él en cambio, sólo era semi consiente de que su cuerpo está ahí paralizado perdiendo rápidamente el calor en su cuerpo hasta recuperar la heladez de sus extremidades. 

Después de unos cuantos segundos más, es él nuevamente solo en ese cuerpo de dos. A su lado, aun escucha a Darla conjurar hechizos para intentar despertar a Mónica, Hessen se tambalea un poco antes de recuperar completamente la conciencia y acercarse también, aunque si es sincero consigo mismo, su mente se siente extraña aún, como si estuviera de pronto vacía de todo, de cualquier pensamiento y que pudiera ser llenada con cualquier contenido, pero ¿cómo? Se hincó junto al cuerpo de Mónica contemplando la palidez de su rostro, hay algo en su inercia casi total que le hace pensar que incluso podría estar muerta. Él compartió una mirada con Matt y luego con Darla antes de estirar su brazo para alcanzar a sentir el pulso de ella en su muñeca.

Dos, tres...cuatro. Ahí está apenas perceptible, pero se siente. Está apunto de decirle a Darla que se relaje, que mejor vayan en busca de algún médico cuando su propio ritmo cardiaco disminuye tanto y tan rápido cómo él de Mónica. Se siente mareado, y si no fuera porque aún tiene un brazo libre, hubiera caído al suelo. Pero se consigue mantener erguido, de rodillas junto al cuerpo de la bruja, mientras aún sostiene el pulso en su mano. De esa forma es como siente que su mente, que se había sentido vacía por un tiempo, comienza a llenarse nuevamente de ideas, sentimientos y sensaciones que no le pertenecen a él.

¿Hola?-, dice involuntariamente, lo suelta difícil como si no pudiera hacerlo en un principio, es más bien como si repitiera un eco, o algo que retumba en su mente junto a los pasos sin dirección de aquel que busca con desesperación. Hessen dudó en si mantener el agarre de Mónica por lo que esa conexión pueda hacer de ambos. Antes de decidir cualquier cosa, aquel cúmulo de sentimientos comienza a desbordarse y Hess no puede hacer más para contenerlo dentro. Hay miedo, angustia y confusión en gran medida. Puede sentirlo, pero no verlo. Lentamente, una a tras otra, lagrimas largas y espesas se resbalaron por su rostro. Era el reflejo de ella.

Con su otra mano, la que no sostiene el pulso de Mónica, le hace una seña a Darla y a Matt, para que le hablasen de vuelta, como si fuera él una especie de transmisor. Al menos esperaba que ella pudiera escuchar si lo intentaban en otra dirección.

cpoR6Mo.gif
B259aHz.jpg
Kl83Ehb.gif

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Guest
Esta discusión está cerrada a nuevas respuestas.
 Compartir

Sobre nosotros:

Harrylatino.org es una comunidad de fans del mundo mágico creado por JK Rowling, amantes de la fantasía y del rol. Nuestros inicios se remontan al año 2001 y nuestros más de 40.000 usuarios pertenecen a todos los países de habla hispana.

Nos gustan los mundos de fantasía y somos apasionados del rol, por lo que, si alguna vez quisiste vivir y sentirte como un mago, éste es tu lugar.

¡Vive la Magia!

×
×
  • Crear nuevo...

Información importante

We have placed cookies on your device to help make this website better. You can adjust your cookie settings, otherwise we'll assume you're okay to continue. Al continuar navegando aceptas nuestros Términos de uso, Normas y Política de privacidad.