Prueba Libro de Hermes Trimegisto - Octubre 2021

[Gahíji]

Obligados a pelear entre si ambos aprendices estaban. En aquel punto no importaba si habían sido aliados o se habían salvado la vida el uno al otro. Si deseaban aprobar o más bien, si su meta era alcanzar los poderes del Libro de Hermes ambos deberían dar lo mejor de si

 

El terreno era simplemente un cuadrado por el cual aún no pasaba el río de lava, más sin embargo, estaba rodeado por el incandescente magma que destruía todo a su paso. El calor abrazador sería, y como ofrenda al dios del fuego estaban los dragones surcando el firmamento, los cuales tenían órdenes expresas de que cada cierto tiempo deberían lanzarle una llamarada de fuego a los aprendices obligándolos a (de una u otra forma) utilizar sus conocimientos sobre el libro y los anteriores.

 

Desde el cielo, en el lomo de Aphophis sería juez y verdugo. Disfrutaría el espectáculo, el duelo y sobre todo las explosiones volcánicas del monte Vezubio.

 

 

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REGLAS

• No existen los límites de tiempo entre respuesta y respuesta. Por tanto, la regla de hechizos impactados desaparece.
• Duración del duelo: Del 20 de Octubre al 29 de Octubre
• Nos guiaremos por las reglas Nuevas de duelos existentes.
• Lista de Hechizos(con especial énfasis en el Libro de Hermes Trimegisto)
• Están prohibidos los Off y las ediciones. Consultas, dudas o sugerencias, al topic del Libro de Hermes Trimegisto
• Cada 3 posteos los aprendices deberán protegerse contra una llamarada de dragón. En caso de no hacerlo quedarán quemados.

 

@ Mael Blackfyre  @ Mica Gryffindor

Editado 21 de Octubre del 2021 por Alyssa Black Triviani

[Mael Blackfyre]

Mis ojos no podían desviarse de las tres figuras aladas que volaban a unos cuantos metros por encima de nuestras cabezas. Eran criaturas hermosas y no entendía cómo hasta el momento no le había prestado la atención necesaria. Ni siquiera en el ataque al aeropuerto de Heathrow, el cuál habíamos atacado con el grupo de mortífagos. Tal vez había ideado algunos planes. Tal vez, se me habían ocurrido algunas cosas nuevas en las que podía proyectar.

— ¿Por qué será que siempre terminamos en el mismo sitio? ¿Coincidencia o destino? —le pregunté algo filosófico a Mica, la cuál se convertía en mi rival de ahora en más. No necesitaba ser Goldor, no necesitaba dejarme llevar por la ira, la cuál me había arrastrado las últimas veces. Solo tenía que enfocarme como alumno en demostrar al Uzza que sabía utilizar los poderes de su libro. Levanté la varita pero especialmente hacia a mi—. Himno de Eléboro.

Conocía que la bruja podía llegar a conocer algunos encantamientos que pudieran afectarme. Aquella defensa tal vez no dudaría para siempre pero al menos me daría un margen para ver como seguía. Aquella vibración me envolvió, protegiendo mis sentidos. ¿Se sentía algo mas? Era extraño pero me daba cierta ventaja porque eso limitaba un poco las opciones de la Gryffindor.

[Mica Gryffindor]

Nuevamente había llegado esa instancia, en que lejos de cumplir con la misión que esperaban debía enfrentarse a su compañero de clase en forma inevitable. Observó a Mael, sabía que era alguien hábil  y no lo menospreciaba en ninguna actividad. Sabía muy bien que el mago siempre podía sorprenderla.

-¿Crees realmente que pueda ser el destino reuniéndonos? -sonrió negando con la cabeza, incrédula ante la frase del joven de ojos negros. 

La sombra de aquellos dragones volando sobre su cabeza le llamó enseguida la atención, sabía que el fuego podría ser protagonista en cualquier momento del enfrentamiento. Prefirió entonces "ser precavida". No iba a iniciar a lo tonto, lanzando ataques para intentar obtener una ventaja, sino que preferiría utilizar aquello aprendido más recientemente, para resguardarse de incidentes innecesarios y así poder enfocarse en su duelo. 

-Vara de Cristal Sectusempra -pronunció, en primer lugar convirtiendo su varita en aquella especie de bastón de color verde esmeralda para luego disparar aquel rayo con tal velocidad que aseguraría su impacto -Himno de Eléboro- agregó entonces, generando aquella vibración que protegería sus sentidos de cualquier intento de alteración. 

[Mael Blackfyre]

Chasqué la lengua. Estaba más que claro que de alguna manera nuestros destinos se habían cruzado, ya que desde el día uno, de una manera u otra, me había cruzado con la joven. A veces a favor y otras veces en contra. Pero lo importante ahora es que ambos estábamos enfrentados para conseguir un mismo objetivo: el libro de Hermes Trimegisto. Observé, como si fuera en cámara lenta, cómo Mica actuaba, invocando su Vara de Cristal e imbuyendo aquel hechizo que ya me preparaba que iba a doler.

— Fuego Compacto —exclamé, con mi varita demasiado aferrada entre mis dedos, apuntando a Mica, esperando que todo saliera como esperaba y cómo había aprendido. Cerré los ojos en el momento que aquel rayo salía como una barra de luz directamente contra el mismo hechizo de Mica. Si hubiera sido contra ella la habría aniquilado en el momento, pero la dirigí contra la acción de la joven, con el Sectusempra que me hubiera dañado.

Y así se anuló tanto su acción como la mía. Como si nada hubiera pasado, provocando que solo ella se quedara con su protección de sus sentidos como lo había hecho antes. La miré…

— Vara de Cristal — mi varita se alargó como lo había hecho con Mica. Pero ésta vez si se activó para engullir el poder que estaba pensando en mi cabeza, el Mutis. Era un hechizo totalmente inútil porque había otros que lo igualaban o superaban en eficacia y poder pero tenía que demostrarle al Uzza que sabía usar sus poderes. Mica se quedó callada al instante, limitando sus opciones a la hora de elegir un hechizo.

[Mica Gryffindor]

Su ataque había sido anulado, como si nunca hubiese sucedido. Su rival había actuado en forma rápida, evitando su accionar y quedando ileso frente a ella. Antes de que pudiera hacer nada, él había utilizado la vara de cristal y un hechizo que afectaría sus intentos de pronunciar palabra alguna. Sin embargo, eso no la dejaría fuera de combate en absoluto. 

Utilizando la vara de cristal lanzó un Mutis, devolviendo el favor, haciendo que el hechizo impactase de inmediato. No necesitaba hablar para devolverle la jugada. El hechizo era nuevo para ella. Kansho invocó entonces, logrando tener en sus manos aquella daga que la ayudaría a defenderse de los ataques que Mael decidiera lanzarle. 

No sabía bien por qué había utilizado solo una acción en su contra, sin embargo seguramente tendría sus intenciones... nunca lo subestimaría, era un rival muy astuto.