Castillo Hunyad - Familia Van Halen (MM B: 116660)

[Lisa Weasley Delacour]

HISTORIA

Van Halen, apellido con renombre en Rumanía. Estirpe de guerreros, de noble raza y alta alcurnia. Linaje que data desde tiempos lejanos, cuando aun el país era conocido como Valaquia. Basarabad fue el primero de su casta, nombrado como “El fundador” puesto que harto de ser vasallo a las ordenes del reino Húngaro, movilizo a su ejercito y derroco a Carlos I, logrando así la independencia de su nación. La batalla de Posada aun sigue firmemente arraigada en los corazones de los nacidos en Transilvania.

Su descendencia, fuesen hombres o mujeres, siempre estuvo fuertemente ligada a la corona. Muchos de ellos fueron monarcas, otros primeros ministros. Estaban destinados a ocupar los altos escalafones en el orden de mando, Nadie nunca se opuso a su mandato, puesto que la familia Van Halen luchaba por y para su pueblo, con principios y valores férreos. Siempre firmes en sus decisiones, obstinados y necios, dignos de confianza y egocéntricos a la enésima potencia. Con gran apego hacia la naturaleza. Instruidos en el arte del combate desde prácticamente la cuna.

Fueron muchas las batallas a lo largo de la historia hasta la época actual. En 1800 el conflicto con Rusia cambiaría la historia por completo. Moldavia se unió a Valaquia en 1877, terminando con la injusta sublevación del pueblo soviético.  Al final de la Primera Guerra Mundial, y con la disgregación de Austria-Hungría, los habitantes de Transilvania proclaman su unión con la ya definida como Rumanía. La alianza fue reconocida por las potencias europeas en el Tratado de Trianon. Conseguido aquel hito, fue cuando Katherine Daray Van Halen pasaba a ser proclamada reina.

La fémina instauro medidas innovadoras dentro de la alta asamblea. Perfecciono antiguas tácticas de combate y re afirmo el hecho de que la región era una potencia en ciernes, tanto política como militarmente. Aprobó el tratado con varias de las especies mas longevas en el mundo, logrando así que tanto hombres lobos como vampiros viviesen en paz y de forma amistosa. Creo la guardia real mas elitista de todos los tiempos; la brigada del lobo negro, destinado a custodiar los secretos de sus altos mandos y de defender a su nación y a los aliados de esta con la vida misma si así hiciese falta.

Al morir esta, el reino quedo desolado, pero con Lisa a la cabeza. Digna hija de su progenitora. Con las mismas ideas o incluso mejores. Capacitada para liderar y con un amor por su pueblo merecedor de mención. Fundo, junto a la suma sacerdotisa mas poderosa de los últimos tiempos llamada Claire, el clan luna negra, asumiendo su cercanía con Gaia y aceptándola en su vida. Restauro el vinculo con la Hermandad de la Rosa negra, desvistiendo por causas ajenas a ambas lideres. Confió en su instinto y acepto la coalición con su hermana Kamra y Escocia. La coalición mas importante de los nuevos tiempos europeos.

 

DESCRIPCIÓN

El castillo es una reliquia de la historia, fue erigido en 1400. Está construido en estilo gótico, pero en siglos posteriores se le añadieron elementos renacentistas y barrocos. Destacan sus fuertes torres defensivas y su jardín central. Fue levantado sobre las ruinas de una antigua fortificación, sobre el arroyo Zlaști. Cuenta con siete torres. La torre norte, la central y mas protegida cuenta con las habitaciones de la familia real. Esta situado en el distrito de Hunedoara, de la región de Transilvania. A unos cincuenta kilómetros de Brașov.

Es de dimensiones considerables, con altos tejados de pizarra roja y ornamentos de piedra labrada. Bello se mire por donde se mire, pues a pesar de que es imponente, la naturaleza es esencial, ya que esta vinculado a esta y crece en sintonia,  adecuándose a esta de la mejor forma posible. Esta ubicado de forma estrategia, siendo, ademas de la residencia habitual de la monarquía, un bastión inexpugnable. Una muralla, mezcla de granito, roca y magia, rodea la edificación, protegiéndola de cualquier cosa, desde inclemencias climatologías a ataques por parte del Cardenal. Gaia ayuda con ese cometido.

Lo que rodea la edificación es un foso de gran envergadura y con una profundidad bastante considerable, Lleno de agua y una fauna interesante. Para ingresar a la fortaleza debes cruzar la pasarela de madera, adornada con pendones y estandartes medievales con el blasón azul y negro de la corte. Tras eso, avanzar a través del arco de bajo la torre principal. El gran patio interior te da la bienvenida. Casi todo el castillo se edificó en torno a este gran patio, así que desde allí se accede a todas las habitaciones de la planta baja. Desde allí se tiene una inmejorable panorámica del conjunto. Siempre custodiado por miembros de la guardia.

Cuenta con siete plantas. El séptimo piso esta considerado lugar infranqueable para cualquier que no sea la regente y su familia. Uno de los lugares más interesantes del castillo es el Salón de los Caballeros, usado para ceremonias de carácter festivo y todo tipo de celebraciones. La ciudadela posee también una ermita, varias caballerizas y docenas de hectáreas de profundo bosque, en donde se encuentra la manada de lobos de la actual mandataria. Unas angostas, oscuras y complejas catacumbas y una zona oculta a todos aquellos que no fueran parte de la coalición formada por Escocia y Rumanía.

La primera planta consiste en el Hall de entrada y la escalera principal, de bello mármol. Los pasillos son anchos y están decorados con fotografiás de antiguos eventos, paisajes del lugar y retratos de actuales y viejos miembros de la familia. En el ala este; El comedor, la cocina y los aposentos de los elfos domésticos, así como la sala de juntas de la guardia real. El ala oeste cuenta con varios salones, una piscina climatizada interior y un garaje especializado con todo tipo de vehículos muggles. Todo fuertemente protegido por los alabarderos reales.

El cuarto piso es exclusivo para la libre práctica de la magia, los salones destinados a esto, estaban debidamente protegidos para evitar explosiones o accidentes indeseados. La sexta planta esta acondicionada para las habitaciones de los miembros del consejo, cargos políticos, guardia real, sanadores y las oficinas del capitán y comandantes de los escuadrones del clan lobo negro, así como algunos salones multiusos. En la séptima y ultima planta están las dependencias de la Familia Real, así como el despacho de Lisa. Cuenta con una sala cambiante similar a la de Hogwarts que se convierte en aquello que su dueño desee.

En el subsuelo esta lo mas oscuro de Hunyad, la prisión, adecuada para magos o muggles. Y en el bosque que rodea la construcción fortificada esta el nexo único con Gaia, este a ojos de alguien desconocedor del poder de la madre tierra se vera como una fuente natural, pero para cualquier sacerdote, mas aun si este pertenece al clan Luna negra, lo tomara como lo que es; algo único e invaluable, casi tan poderoso como el agua del templo blanco. Normalmente es utilizada para rituales de prosperidad y clarividencia. Solo con este agua se pueden abrir los portales que conectan Escocia y la mansión Delacour en Londres con Hunyad.

 

 

ARBOL GENEALOGICO

Fundador

Basarabad I*

Reina de Rumania

Lisa Weasley Delacour

Patriarca y Primer Ministro

Luca Van Halen

Miembro Honorario

Mei Black Delacour

Miembros de la familia real

Kaori Moody

Aliados y Coalición

Kamra Ahsryver

Sybilla Macnair

Aleksandra Romanov*

Ada Camille Dumbledore

Miembros

Altaira Ashryver Delacour (Hija Adoptiva de Luca)

Editado 8 de Diciembre del 2021 por Lisa Weasley Delacour

[Kamra Ashryver D.]

Kamra Ashryver Delacour - En los terrenos del Castillo Hunyad.

La gélida brisa invernal de Rumania era algo por lo que Kamra agradecía profundamente. Las mañanas frías la ponían de buen humor, tanto que incluso en los días más oscuros le resultaba mucho más sencillo despegarse de la cama, con la promesa de que el único peso sobre sus hombros sería su corona y su familia, y no el asqueroso calor sofocante que hacía a su piel picar con ecos de un dolor apenas perceptible, pero molesto aún así. 

Los ojos dorados de la peliblanca recorrieron el patio central, el lugar oficial dónde la guardia de Hunyad entrenaba. La graba de piedra a penas estaba cubierta por hielo en sus costados, ya que solían despejarla lo suficiente para entrenar en todo momento, pero a Kamra - que era comandante del Escuadrón Nemesis aún siendo Reina de Escocia - le gustaba que su lugar de entrenamiento estubiera accidentado por el clima, que supusiera un obstáculo para sus soldados en entrenamiento hasta que la superficie resbalosa fuera algo que utilizar a favor. No permitirá un solo soldado en el escuadrón que no fuera capaz de mantenerse en pie mientras luchaba, no importaba que tan extremo fuera el campo de batalla. 

Aunque helaba, Kamra llevaba una camiseta sin mangas bajo su túnica ajustada de práctica, dejando ver sus torneados brazos. Las solapas de la túnica color bordó le llegaban hasta más allá de las rodillas y le permitían libertad de movimiento, así como su pantalón de cuero marrón oscuro. Estaba vez, aunque raro en ella, llevaba el cabello atado en una coleta alta, y ya movía sus brazos para entrar en calor cuando el nuevo soldado a entrenar llegaba corriendo frente a ella. 

- Tarde - dijo la ojiambar estudiandolo rápidamente - siempre tienes que estar primero que tú maestro. Vuelve cuando decidas que no me harás perder mi tiempo - el muchacho de piel oscura había sido escogido por ella de entre los aspirantes a la guardia de Hunyad, pero aún así el retraso no era tolerado. Pareció encogerse bajo su mirada antes de murmurar sus disculpas, pero en vez de irse, caminó hacia la mesa con armas y comenzó a practicar a unos metros de ella.

Bien. Al menos no regresaba a olgazanear. Punto para el soldado novato. 

Reprimió el impulso de suspirar transcurridos los primeros 5 minutos ¿Estarían Luca o Lisa en casa? Por lo general Dimitri llevaba a esa hora del día para entrenar a los nuevos integrantes juntos, y particularmente se sentía de humor para tirar unos golpes. 

@ Lisa Weasley Delacour

[Ada Camille Dumbledore]

Era un día frío de otoño, debía un recibimiento a su hogar a la Reina @ Lisa Weasley Delacour y a su familia que estaban ahora en un lugar al que era bienvenida y por supuesto aprovecharía para pasar tiempo con ellas, además que no podía evitar que algunas veces queria conocerles más a nivel personal y la verdad era algo que me avergonzaba y no me permitía acercarme más. Aunque también tenía un título de nobleza por ser quien manejará el principado y eso me daba título d e princesa, no era del todo algo que me ayudara a acercarme. Sabía exactamente que la barrera era mía porque las veía d e parte de la familia real y ellas eran tan propias, yo solía ser más diplomática en todos los asuntos políticos… ellas tenían tanta propiedad, alguna vez pensé que por mi actitud en cualquier momento me cortaran la cabeza.

 

Me reí un poco de mi propio pensamiento, recordé entonces a mi bisabuela cuando nos contaba de nuestro antepasado Madamme Royale y de cómo ella nos había inculcado estar orgullosos de nuestra dinastía de los Borbón. Que aunque ya no estábamos manejando el destino de nuestro país habíamos dejado nuestra huella. Sentí un leve sentimiento de ansiedad d e pensarlo, pronto empezaría a llegar todas esas responsabilidades del principado y debía asumirlas.

 

Llevaba a sus casa una botella de Romanée Conti, un vino de la región de Borgoña. Vestía con un vestido de lana blanca corto, una botas negras por encima de la rodilla, una abrigo rosa y una boina blanca que hacía juego con el vestido. Arribe a la propiedad con nerviosismo y me encontré con una propiedad bastante antigua: El castillo parecía salido de los cuentos y era absolutamente maravilloso. En los terrenos vi a algunas personas que parecían estar practicando alguna clase de lección, me acerque a observar y para mi sorpresa era la Reina @ Kamra Ashryver D. quien estaba allí, sonrei de verla y me quede mirándolos. 

 

 

[Lisa Weasley Delacour]

Dimitri Belikov

 

Las seis de la mañana. Amanecía en Hunyad y el Belikov ya se encontraba en las caballerizas del castillo. El termómetro marcaba una temperatura de tres grados bajo cero. No apto para cardíacos y blandengues. Sonrió y siguió acariciando a su montura, un bello pura sangre de color dorado y ojos azules. No le molestaba el frio, es mas, le gustaba. Habia nacido y se había criado en los montes carapatos. Su entrenamiento desde bien niño, entre nieve, viento y granizo, solo le habían hecho mas fuerte. Soportaba las inclemencias climatologías como si de un vampiro se tratase, cosa que lo enorgullecía.

Su turno de entrenamiento comenzaba dentro de una hora, siendo el patio central de la fortaleza el lugar de reunión para con su gente. Los nuevos integrantes a la guardia habían sido llamados y el como capitán general de aquel ejercito tenia el deber y el honor de enseñarlos. Se subió al corcel de un salto, sin montura y espoleo a aquel joven caballo en busca de un poco de adrenalina. Aquello no solo le servia como distracción, sino que también como patrullaje. El castillo estaba en calma, pero nunca se sabe quien o que puede querer alterar esta. Menos aun en los tiempos que corren. El paseo no duro mas de media hora.

Ambos; bestia y hombre, arriaron de nuevo a su hogar satisfecho de la pequeña aventura vivida. El rumano admiraba la conexión que todos los nacidos en Transilvania parecían tener con la naturaleza. Era digna de mención. Lisa había hecho las cosas muy bien desde su andadura en el mandato. Pensando eso, se encamino hacia su habitación. Tendría que tomar una buena ducha y vestirse como lo que era; un soldado a las ordenes de Hunyad. No obstante, algo lo derivo, o mas bien, alguien. Se acerco a paso rápido hasta donde el blandir de espadas arrecia y allí se encontró con la mirada ambarina de su hermana de armas.

- No te hacia por aquí – Se acerco y le regalo el saludo que los reconocida como parte del clan lobo negro. El puño derecho firmemente apretado sobre su corazón – Bienvenida de nuevo – Las pintas que tenia le hubiese avergonzado frente a cualquier otro, pero era Kamra quien tenia al frente, lo había visto así y en trapos menores. Lucia un pantalón negro de montar algo raído por el tiempo y el uso. Unas botas de piel de dragón y una bandolera en donde tenia guardada su katana. Sin camiseta. Dejando de muestra que tal curtida y nívea era su piel, así como su trabajado abdomen – el clan Marshall tiene nuevos integrantes.

Una mera formalidad, pues sabia de mas y de sobra que la Ashryver estaría informada. La Weasley y ella, aunque jamas se lo dirían, eran como uña y carne. Ninguna hacia nada que la otra no supiese. Era el vivo ejemplo de camaradería y lealtad – Parece ser que no soy el único que le sorprende esta visita – El guerrero de cabellos como el oro señalo hacia uno de los laterales, donde una loba de brillante pelaje blanco salia a saludar a la reina escocesa. Yuki, nadie sabia como o porque, siempre estaba presente – te dejo seguir con la faena, me voy yendo que...... - No termino la frase cuando las cornetas anunciando una aproximación comenzaron a sonar. Los grandes portones se abrieron casi instantáneamente.

- Señorita Dumbledore – Por mucho que no le gustase su vestimenta justo en aquel momento, pues estaba medio desnudo y con, seguramente, olor a caballeriza, sus galantes modales y su esencia de noble en ciernes no lo abandonaban nunca – Es todo un placer verla de nuevo. Lisa se encuentra en sus aposentos aun y Luca, me temo, que esta de viaje por asuntos de la corte. Ni una palabra acerca de los demás residentes. No le incumbía a nadie mas que a la familia - ¿Que la trae por aquí? - Desde la ultima vez, la cual fue un tanto precipitada y no del gusto de todos, pues las formas e incluso el tono de la reunión había sido un poco brusco, no se habían vuelto a ver. Ahora, ya como aliados, esperaba que el animo estuviese mas ligero.

[Ada Camille Dumbledore]

El estar allí en aquel Castillo me hacía pensar en que me había devuelto en el tiempo, me fascinaba lograr observar la arquitectura del lugar, ver sus grandes extensiones y la elegancia del lugar. Era increíble pero jamás podría imaginar a la familia real Rumana Viviendo en un lugar diferente a eso. Los conocía por sus acciones, sus países, las leyes pero no los conocía personalmente.

Me que de observando a la Reina Kamra mientras practicaba un estilo arte marcial que me recordaba el Systema, el arte marcial ruso que había aprendido con la fuerzas especiales de ese país en mis inicios cuando había militado en la gendarmería francesa. Sonreí de recordar todo aquello hace algunos años, en aquel entonces no tenía aspiraciones políticas hasta que conociera a mi mentor, sentí extraño pensarlo y ver que de ese tiempo ya habían pasado dos años.

Suspiré y traté de centrarme en donde estaba al escuchar una vos que me emocionada mire justo delante de mí estaba el bien esculpido cuerpo de un caballero al mirarlo, y tratar de no dejar la boca abierta por más de dos segundos al verlo. Era un poco incomodo verlo así era un joven bastante apuesto y solo había visto en vivo y en directo a un caballero en mi vida y trate de no sonrojarme ni verme muy tímida.

 

-Monsieur Dimitri, que gusto verlo… bueno venir a verlos… a visitarlos…. Traje un buen vino de mi país.

 

Traté de callarme y no observarlo mucho sino mirar sus ojos y su sonrisa. La verdad es que esperaba que no me hubiera sonrojado.

@ Kamra Ashryver D.  @ Lisa Weasley Delacour

[Kamra Ashryver D.]

- Apuesto a que tú mañana ya ha mejorado gracias a mi presencia, Dim - le dijo con una sonrisa malvada mientras, dejando de lado el saludo formal del Clan Lobo negro, fué a golpear su musculoso brazo de manera juguetona con su puño. La poderosa contextura física de Belikov era por decir poco abrumadoramente perfecta, además de dar la impresión de que debajo de la piel nivea y accidentada aquí y allá con alguna cicatriz, bajo la superficie se encontraban músculos de hierro esculpidos con arduo entrenamiento en un sin fin de disciplinas.

Antes, prácticamente una vida atrás, al conocer a Dimitri se le había hecho agua la boca ante el soldado bien constituido y bendecido con un rostro igual de exquisito que su complexión...pero aunque aún su mirada ambarina se demoraba unos segundos más en el soldado, eran más hermanos que hombre y mujer... De hecho creía que el la veía como un varón más, y vaya que si se comportaba como uno más allá de su apariencia femenina. Le sonrió ligeramente y miró hacia el patio lleno de soldados entrenando. 

- Quería verlos por mi misma. Solo he admitido a un único recluta para el escuadrón Némesis - una cabezada en dirección al muchacho que balanceaba dos baras de bambú hacía una estructura de madera giratoria que servía para entrenar en solitario - Quiero únicamente lo mejor para la élite, aunque la calidad de los ingresantes cada vez es más baja...

Kamra giró su cabeza a tiempo para ver como Ada Camille Dumbledore se acercaba a ellos. Su ceño se frunció pero además de ese fugaz gesto, nadie habría notas su descontento ¿Qué hacía allí? Si, era su aliada y Kamra la empezaba a ver cómo una amiga...pero era día de entrenamiento, y no le gustaba una sola distracción. 

- Buenos días señorita Dumbledore - le dijo estrechando su mano y sonriéndole ligeramente. Suponía que era la primera vez que la ministro la veía sin maquillaje y bien arreglada, y a comparación de ella Dumbledore parecía una delicada princesa, frágil y llamativa en comparación a los demás a su alrededor. 

Un borrón de blanco y espeso pelaje y luego dos poderosas patas apoyadas en su hombro fue toda la advertencia que tuvo antes de rodar sobre la nieve con Yuki. La loba lamió su rostro y se incorporaron como una cuando el animal se giró a mirar a Ada - Amiga - le dijo, asegurandole con aquella palabra que Dumbledore no era una amenaza, el resto, la aceptación de Yuki hacia Ada, dependía únicamente de la loba. 

Kamra levantó su mirada desde donde estaba acuclillada a tiempo de ver las mejillas de su nueva aliada sonrojarse ante la vista de Dimitri. Ashryver no era celosa, pero no lo gustaba el poco control que la mujer tenía sobre sus celestes ojos - ¿Vino? Mejor lo dejamos para después ¿Quieres alguna lección de lucha? Cuando la magia falla es bueno tener como defenderse. 

- Si dices que si, escoge ¿Quieres al señor Belikov o a mi como primer tutor? Animate - una sonrisa salvaje en dirección a la bella mujer ocultaba toda la malicia que sentía por dentro. 

Era de las buenas, pero le encantaba ser malvada de vez en cuando. 

@ Lisa Weasley Delacour  @ Ada Camille Dumbledore

[Lisa Weasley Delacour]

Dimitri Belikov

La sutileza de la Ashryver no era uno de sus fuertes, es más, el Belikov estaba seguro que no sabia ni el significado de tal palabra. ¿Habia siquiera abierto un diccionario alguna vez? Era un huracán incontrolable. Una tormenta eléctrica. Ni delante de los solados ni de la ministra francesa se comportaba. La mujer no solo saludo al rumano con una camaradería brutal, sino que acabo rodando por el frio suelo enredada entre el sedoso pelaje de una loba blanca. Ignoro el comentario acerca de los nuevos soldados, luego hablarían sobre ello en un lugar mas confortable.

Dimitri negó con la cabeza ante el espectáculo que estaban dando, porque si, el se regia por unos principios férreos y la imagen que tenia delante los desmontaban todos y cada uno de ellos. El no estaba vestido adecuadamente para darle la bienvenida a una aliada del país y la peliblanca de ojos color miel estaba mas que interesada en ver como la Dumbledore blandía una espada y se dejaba de tantas miradas y sonrisas coquetas hacia su persona. Eran un dúo único y menos mal. Estaba seguro que si los dejaban, serian capaces de volver loco a cualquiera, en especial Luca.

Si bien el rubio hubiese cambiado la escena, le agradaba la libertad de la escocesa. Estar a su lado era un soplo de aire fresco, muy al estilo de su reina – Creo que nuestra invitada prefiere un tour por el castillo antes que enfrentarse a ti en un combate singular hermana – Sus ojos azules se empequeñecieron, un gesto claramente reprobatorio ante los celos de Kam. La comandante del clan Némesis era tan parecida a Lisa en ese sentido que asustaba. Ambas igual de protectoras con los que consideraban suyos.

- Yuki, esta es Ada Camille Dumbledore, parte de la coalición y ministra de Francia – La loba alfa se acerco al guerrero con pasos lentos, las orejas alzadas como si estuviese deliberando acerca de si la intrusa era tan buena como parecía -Ada, esta es Yuki – Ningún Transilvano se sorprendería ante aquella presentación, pues sabia que la bestia era singular cuanto menos, pero la semis veela parecía aturdida ante el gesto – No te extrañes, ella es parte de Lisa, es algo así como su tótem animal. Considerarla un escalafón en la confianza de todos los cercanos a la corona.

Y como si la nombrada supiera que se estaba hablando de ella, hizo acto de presencia, con una ropa tan casual como la que ambos, Kamra y el, portaban. Unos pantalones vaqueros negros con algún que otro roto en las perneras de estos. Una camiseta de tirantes azul con el blasón de la corte en su lado derecha y unas botas de piel de dragón, las que solía usar cuando salia a pasear por el extenso bosque que rodeaba la edificación. La Weasley saludo a los participantes de aquella extraña conversación con un asentimiento de cabeza y sonrió a su animal predilecto.

- Bienvenida a Hunyad,Ada – Tan natural como siempre, obviando los títulos, inclusive el suyo – Dim, ve a vestirte y tu, como luego agarres un resfriado por andar así a mi no me vengas con excusas, que el pesado de mi primo anda de damisela últimamente – El nombrado le regalo a su regente una reverencia y se encamino hacia sus aposentos. Luego los apremiantes ojos fueron hacia los de quien consideraba su hermana – Controla a tus chicos – No dijo mas, no tenia porque. Con ese pique sabia que iniciaron un divertido intercambio de comentarios que aliviaría la tensión y lograría que todos se sintiesen cómodos.

[Ada Camille Dumbledore]

La situación se me hacia bastante curiosa, tenía un muy guapo hombre en frente semidesnudo que me hacía sentir algo incomoda, la Reina estaba entrenando arduamente cuerpo a cuerpo, me encantaba ver que se tomaba tan enserio su entrenamiento si debía entrar en batalla de alguna forma. Eso me recordó las palabras de Rowan alguna vez sobre que su madre, la Reina, le había enseñado a defenderse adecuadamente si necesitaban protegerse a ellos y a sus hermanos. Era lindo ese concepto de familia que tenían, no conocía ni su pasado ni su historia, pero esa tradición que se sentía en ellos se veía fabulosa.

Estreche la mano de la Reina Kamra y le sonreí amablemente, ella me agradaba pero siempre que me miraba sentía que quería asesinar me por una u otra razón y la verdad eso me hacía pensar si yo le causaba alguna repulsión o algo por el estilo, ya lo diría el tiempo.

- Pues su majestad si desea practicar conmigo será un honor, hace bastante tiempo que no practico mi defensa personal, desde que salí de la gendarmería y me senté tras un bonito escritorio, así que si usted no se opone practicará con usted.

Le había elegido a pesar de saber de antemano que sería una rival sin piedad alguna, pero la distracción de un hombre guapo y semidesnudo ante mi timidez iría en mi contra. Una hermosa loba entró en el lugar y vi como saludo a la Ashryver, me recordó a Sasha mi loba huargo que adoraba, la observe hasta que el Joven Dimitri me explicó que esa loba era la acompañante de la Reina Lisa, quien llegase donde nosotros estábamos y a quien salude con una venía.

El señor Belikov me presentó a la loba, la mire con calma y deje que me observará, sabía por experiencia que debía esperar a que ella no me viera como una amenaza, me hinque para quedar a nivel de la loba

- Hola Yuki, soy Ada, es bueno conocerte…

La mire directo a los ojos, sabía que ellos percibían toda clase de sentimientos e intenciones. Me reí de ver como la Reina reñía a su hermano para no enfermar a causa del frío y su poca ropa. El joven se retiro y yo me levante para saludar a la Rumana.

- Gracias por permitirme venir majestad

Conteste con calma, la verdad el sentirme cómoda era bueno, no sabía realmente porqué había ido hasta allí, pero ya mi corazón me lo diría.

@ Kamra Ashryver D.  @ Lisa W Delacour @ Lisa Weasley Delacour

[Cissy Macnair]

Contemplaba el castillo desde el bosque, a una distancia prudente de las defensas, puesto que aunque Luca y yo éramos aliados, no me parecía correcto invadir su propiedad. Sí, había sido invitada y sí, sabía que nadie dentro de aquellos muros me iba a atacar, pero con la paz dentro de la Hermandad prendiendo de un hilo, me había vuelto algo más quisquillosa con mis movimientos, incluso Hades me decía que quizás era momento de relajarme un poco. 

Estábamos a poco del inicio del invierno y aunque era normal en aquellas tiernas un clima frío y nuboso, aquella mañana de otoño se notaba clara, como si en pocas horas más el sol fuera a llenar, alto en el cielo, todos los bosques con su calurosa luz y así, al menos, parecería que había algo de esperanza que bañara la fría piedra del castillo. 

-Pero si no hay nada desesperanzador aquí- dijo Marcus, que podía leer mi mente como si estuviera hablando a viva voz. 

Mi hermano, mejor amigo y general de las tropas de la Hermandad, era a la única persona además de Hades a la que le hubiera pedido acompañarme a aquella reunión. Tenía la sensación de que Luca y él iban a conectar a cierto nivel que yo no entendía y por eso le había pedido que me acompañará. Además, era un ser empático, podía sentir la tensión en el ambiente más rápido que nadie, quizás por sus años en batalla que le habían enseñado a agudizar todos sus sentidos.

-Vas a tocar el timbre o debo hacerlo yo- una pregunta que fue más que una afirmación cuando el vampiro se lanzó a la carrera hacia el castillo y no tuve más remedio que seguirlo. Quizás le cayera en gracia a Luca por pura empatía de hombre de honor a hombre de honor... O quizás mi tosco hermano encontraría la forma de cag.arla.

 

Editado 3 de Diciembre del 2021 por Cissy Macnair

[Lisa Weasley Delacour]

Lisa Weasley Delacour

 

- Siempre es grato ver el rostro de una amiga. Mi hogar tiene las puertas abiertas para todo aquel leal a Rumanía.

La Dumbledore había sido la ultima en unirse al tratado, el cual comenzó con Escocia y con el que estábamos haciendo historia en Europa. No nos conocíamos mucho, mas allá de lo hablado en Brașov hacia unas semanas. Lo principal lo tenia claro; Ada tenia unos ideales parecidos a los míos, no obstante, agradecía que esta se hubiese auto invitado, pues aquel contacto era bueno y necesario para todos. Podíamos ganar en confianza, conocer sus puntos fuertes y débiles y ver como nos seria útil en caso de amenaza. Los pros y contras de tenerla como socia habían sido vistos muy precipitadamente por las causas que forzaron la alianza, así que yo también abogaba por aquel acercamiento, pues y era lógico, una coalición unida era imposible de vencer. Cuantos menos secretos, menor probabilidad de caer ante las artimañas de los enemigos.

- ¿Tu, que? - Esta vez dirigí nis palabras a la peliblanca - ¿Vas a aceptar el desafió de la señorita Dumbledore y me dejaras ver como has avanzado en los últimos tiempos o prefieres dejarlo por hoy, darles el día libre y tomar algo en el jardín?

Sabia de antemano que Kamra tomaría mis palabras como un desafió a su poder. Lo era. De hecho, yo también necesitaba una buena dosis de adrenalina. Los últimos acontecimientos me habían dejado un tanto bullente. Gaia lograba mantenerme en control, pero el elemento primigenio ansiaba por salir. Con ella todo era un juego. La rivalidad que teníamos había sido siempre una manera de mejorar y esforzarnos por crecer, como reinas, como brujas e incluso como personas. Jamas se lo diría, pero si lo transmitía a través del vinculo que habíamos logrado crear. Confiaba en ella y estaba orgullosa. Habia hecho del escuadrón Némesis uno de los mejores de los últimos tiempos. Eran la élite de mi ejercito. Todo el país los respetaba, no solo como guerreros, sino también como personas y eso era en parte gracias a las enseñanzas de la vampiro.

- Vamos....

No pude terminar mi frase, pues las cosas se sucedieron de una manera tan rápida que hasta al mas experto le hubiese costado seguir. Yuki, la cual desde que había hecho acto de presencia, había estado tranquila, sentada a mi lado, se irguió, saltando y quedando frente a frente con un hombre, el cual no reconocía y este había ingresado al castillo de forma abrupta y alocada. Su deber era protegerme y vaya que lo hacia sin ningún tipo de dudas. Tres alabarderos, los de las torres, habían sacado los arcos y disparado directamente hacia la cabeza del individuo. Y yo, por instinto, había encerrado al susodicho en una burbuja de agua, conocida como aqueora, para evitar que siguiese avanzado hacia mi figura y la de mis allegados. Esta no solo hizo que frenase en seco, sino que evito que las flechas impactasen. Estaba a punto de incriminar su falta de auto control cuando vi quien venia detrás.

- Por dios, Cissy, estáis entrando en una propiedad privada, con evidentes defensas – Elimine mi hechizo al segundo – ¿Avisar no se te ocurrió, no? - Puse los ojos en blanco ante la Mcnair – No pienso pedir disculpas, asúmelo – La mejor bienvenida que el chico tendría.

Editado 2 de Diciembre del 2021 por Lisa Weasley Delacour