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Enredaderas Litigantes - Mayo 2022


Kahlan Blackthorn
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Noeline Malfoy McFarlan
Encantamientos

Sus ojos azules, de alegría brillaron como el traslador que en ese momento les transportaría a su destino. Aunque no tuvo tiempo de apreciarlo con mayor atención, la voz era reconocible, el que gritaba apurado para darles alcance era su hermano mayor. No había esperado encontrarse con su padre y mucho menos con Tazz. 

Al instante siguiente todo el grupo se encontraba en un lugar muy diferente y posiblemente lejano. Detestaba la sensación que provocaba aquel artefacto de transporte mágico y parecía que no era la única, los gestos en los rostros del resto de integrantes del grupo lo dejaba en evidencia, gesto que posiblemente se estuviera dibujando en su propio semblante. Enseguida buscó acercarse a su hermano, con Kyle ahora en medio de ellos no había oportunidad de saludos más efusivos. Antes de la intervención de Blackthorn le pareció escuchar algo de la otra mujer que conformaba el grupo, pero tal vez había sido solo el viento.

Examinando con la vista el lugar, solo atinó a descubrir que la entrada ante la que estaban les llevaría a unas galerías subterráneas y luego de la explicación eso quedó claro. El rubio fue el primero en adelantarse a explorar el lugar detectando un Lazo del Diablo. Debían internarse en las catacumbas, pero la propuesta de hacerlo en escoba, aunque le resultaba apetecible no parecía lo más práctico. Era un lugar cerrado y la Malfoy estaba acostumbrada a volar a altas velocidades.

–Comparto su opinión,– mencionó acercándose a la bruja. –dada la situación, mejor caminemos.– Y levantando su varita se adentró a las catacumbas. Atenta para cualquier trampa que hubiera y en espera de que el resto del grupo se uniera.

Draco&Draco
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Ludwig Malfoy
Herbología


Estar reunidos en familia hacía que Ludwig se sintiera más seguro pues sabía que estaban ahí los unos para los otros, que en caso de que las cosas se pusieran difíciles no se abandonarían, al contrario se apoyarían para salir adelante. Al menos eso le hacía sentir un poco más tranquilo. Incluso estar cerca de Valky a quien tenía años sin ver, lo hacía sentir como en casa y como en los viejos tiempos. Fue así que juntos caminaron a la par, codo a codo mientras que sus hijos hacían lo mismo pero quedándose unos metros atrás.

Una vez que se percató que todos habían pasado sin problema por el lazo del diablo, Ludwig ofreció su brazo para que la chica lo tomara mientras se encargaba de formular una serie de preguntas a las que Ludwig tampoco tenía respuesta. La opción de dividirse era una buena idea aunque eso podría disminuir sus posibilidades de salir ilesos de aquella encomienda. Tendrían que arriesgarse. Observó entonces como su compañera lograba descubrir el camino a seguir, de esa manera se acercaban un poco más a su destino.

Al avanzar observó la vegetación que crecía en aquel lugar, era extraño observar plantas crecer dentro de cuevas y catacumbas por lo que supuso que se trataban de plantas con propiedades mágicas. Utilizando su conocimiento en herbología pudo distinguir a la perfección de que plantas se trataban, eran lavanda y valeriana. Rápidamente tomó un cuchillo y cortó cuatro ramas de cada una de las plantas y regresó al camino.

-Creo que podemos utilizar éstas plantas – comentó – con ellas puedo crear una pócima para dormir, con ella los ladrones quedarán dormidos y sin posibilidad de escapar.

 

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Chanter-Kyle

 

— Parece que le temen a las escobas, damas—comentó el Holandés. Colgándose su saeta de fuego al hombro, decantándose por caminar como el par de mujeres. La intervención de Ludwig le pareció acertada en esos instantes, detectando cierta seguridad que emanaba por cada poro de la piel del Malfoy— Eso es lo más extraño robar varias cosas, pero lo más intrigante es que no han sido hurtadas por el mismo grupo de rufianes—compartía esa información con los que le acompañaban. Tazz de había quedado levitando en el limbo, tal vez buscando la forma más aventurera y desafiante de montar la escoba que el Ángel Caído dispuso para el joven.

— Según mi investigación existen dos entradas y dos salidas. Pero una de ellas fue tapeada por los últimos intrusos que usaron estas catacumbas como escondite—haciendo referencia a que solo tenían una sola vía de escape— Tres caminos y cinco personas, podemos echar una moneda al aire y que ella decida el destino que debemos seguir—mostrándose convencido de que las cosas apenas comenzaban a teñirse lentamente de misterio y peligro que les pondría en la cuerda floja sin duda— Los que conozcan algún encantamiento que no hayan aprendido dentro de una clase, pero si leyendo algún libro por mera curiosidad, no duden en emplearlos—abriéndoles un abanico de posibilidades ilimitadas, si decidían ser emprendedores y no quedarse de brazos cruzados.

— Cuidado donde pisen, recuerden mirar de cuando en cuando sobre sus cabezas. Puede que el destello más ligero e inocente, les muestre una puerta falsa y los libre de caer en una trampa—parafraseaba jugando con la mente de los jóvenes. No todo tenía porque ser tan lineal y estructurado, no si tenían de su lado algunas hierbas que pusieran a dormir a sus enemigos sin tener que cantarles una nana y arrullarlos — Concuerdo con Ludwig, te aconsejo que seas meticuloso a la hora de elegir las plantas. No queremos que te envenenes y nos dejes con un aliado menos—intentó no bromear, rompiendo un poco la tensión que les rodeaba.

— Haz de la Noche—abría ese portal como una ventana al pasado que se vivió dentro de esas cuevas. Deseando dar con una pista adicional, empleando sus conocimientos en historia de la magia, recorriendo cada uno de los pasajes que pasaban como un carrete de fotografías delante de sus ojos. Tomando los fragmentos que poco a poco, le daban forma a un encuentro bastante acalorado entre cuatro sujetos— Aquí están, malnacidos—siseó para si. Evitando alertar a los alumnos, no quería despertar falsas esperanzas y lanzar palos al agua sin obtener resultados satisfactorios. 

@ Ludwig Malfoy Haughton @ Valky @ Tazz @ noe_snape

Cuando eres tan grandiosa como yo, es difícil ser humilde

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Básicamente ya eres la mitad de una maldición

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Noeline Malfoy McFarlan
Encantamientos

 

Para su suerte en esta ocasión la mitad de los presentes en la misión eran parte de su familia, ya le costaba relacionarse con algunas personas como para verse en un grupo completamente nuevo en cada oportunidad. Hasta aquellos que llevaba algún tiempo encontrándose en circunstancias muy especificas solían representar un reto. Ya sabía que era algo que convenía trabajar en ciertas circunstancias, pero llevaba ya buen tiempo en el mundo siendo así y le seguía pareciendo más conveniente relacionarse con un grupo reducido de personas.

–Lumos– susurró a medida que el grupo avanzaba lentamente internándose en la oscuridad subterránea, tenían que ser precavidos y observar con cuidado no sabían qué trampa podrían encontrar en el camino. Ludwig nuevamente se les había adelantado, era innegable su capacidad de liderazgo y como en cada oportunidad tomaba cada reto como algo personal. A la par Kyle se le había acercado al rubio a compartir unas cuantas palabras que no alcanzó a escuchar por estar mirando hacia otro lado. Cuando intentó seguir los comentarios del guía, lo vio concentrado en un hechizo que la pelirroja no conocía.

Alejándose un poco del grupo comenzó a internarse por un amplio pasillo que de a poco se fue estrechando hasta llegar a unos pocos centímetros sobre su cabeza y a no ser más ancho que aproximadamente un metro. La estrechez le angustiaba, prefería los lugares amplios y abiertos. Sólo logró avanzar un par de metros más hasta que el corredor se vio obstaculizado. Delante de sus ojos se podía contemplar, bajo la luz de la varita, una puerta que cubría toda la pared del fondo. Era evidente la antigüedad de aquella, por el desgaste que presentaba, también porque en la actualidad no podría encontrar una puerta de ese estilo. Rodeada de cadenas de arriba a abajo no parecía una empresa rápida de superar.

–Alohomora– soltó de sus labios y las cadenas suavemente comenzaron a correr hacia tras cayendo silenciosamente en el piso. –¡Por acá!– exclamó a sus compañeros, intentando no gritar. No sabía lo que se podía encontrar detrás de la puerta. El callejón podría extenderse infinitamente o tal vez era el momento para dar con una galería donde habitara mayor información de lo que estaban buscando.

Cuando sus largos dedos se acercaron a la puerta para abrirla alcanzó a escuchar un ruido de movimiento del otro lado de esa entrada. –Petrificus Totalus– susurró sin saber que era lo que había producido el ruido y antes de percatarse si el hechizo había impactado con algo esperó a que el equipo se le uniera.

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Chanter-Kyle

 

Los años no habían pasado en vano dentro de esas cuevas, parecía que más de una cuadrilla de ladrones, les eligió para usarlas como caja fuerte. Sus zafiros delineaban con lujo de detalles algunos de los grabados que iban desde el suelo hasta el techo, quedando maravillado por todo lo que pudo recopilar con un par de pestañeos. Escuchando a lo lejos el llamado de Noe, no le quedo más que seguir al resto de los alumnos, dejándose los datos para el mismo de momento.
 
— Curioso que exista una puerta, no hay registro de ella en el mapa que me fue enviado. Parece que los secretos no dejan de hacer acto de presencia, ¿Qué la condujo por este camino?—interrogaba a la joven sin mostrarse demasiado inquisitivo. Era mejor mantener las cosas en un ambiente cordial, pero esconder información a aventurarse a sus anchas no era recomendable dentro de ese sitio desconocido para el grupo de hechiceros.

— Ahora debemos esperar a que se recuperen o anular los efectos del conjuro—entornaba sus ojos hacia Ludwig— Yo hubiera empleado un Incárcerus o tal vez algo que no les dejara rígidos como tablas—intentaba no sonar enfadado. Los alumnos eran libres de actuar como lo creyeran conveniente, pero era sensato detenerse a pensar en las consecuencias de el alcance que podían tener los conjuros que empleaban— Eso parece ser otra cosecha de lazo del diablo, no será sencillo librarnos de esos hierbajos—advertía elevando su varita con determinación—Lumos—soltaba con furia ese hechizo desprendiendose de la punta de su varita una luz azul celeste. 

— ¿Quién los habrá enviado a robar esos artícu.los?—señalaba un saco que parecía estar repleto de algo sumamente valioso e invaluable— Puede que ahí demos con parte del botín, aunque yo no me cufiaría demasiado a decir verdad—entrecerraba sus ojos olisqueando el ambiente como lo hace un ciervo moteado. Algo no estaba del todo claro en todo ese embrollo, ¿Por que Noeline dio tan fácilmente con esa vía de acceso?, dudas eran lo único que se aglomeraban en la cabeza del Ángel Caído. El ser desconfiado era un rasgo demasiado arraigado en su persona, nunca daba un paso sin analizar todos los pros y contras, volviéndose un poco maniático del control. 

— ¿Qué piensan los demás?—dejaba esa duda flotando en el aire, como si se tratará de un papalote que seria llevado a plácemes por el viento a donde este quisiera.

@ Ludwig Malfoy Haughton @ noe_snape @ Kaori M. @ Tazz

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Ludwig Malfoy
Herbología

Le resultaba difícil enfocar la vista en aquella oscuridad, los matorrales que pisaban en la mayoría de los casos únicamente eran hongos inservibles debido a la falta de luz solar en aquel lugar. Ludwig tendría que ingeniárselas si quería tener aquella poción lista para detener a los culpables de los crímenes cometidos. Observaba con lujo de detalle cada rincón y cada esquina, ya tenía una parte de los ingredientes pero sabía que los demás le serían más difíciles de encontrar.

Entonces escuchó las palabras de Kyle, su advertencia era clara, debía ser cuidadoso o de lo contrario sufriría una intoxicación o peor aún, un envenenamiento. Fue gracias a esa advertencia que pudo ser más precavido y utilizando sus conocimientos en herbología, pudo distinguir una planta bastante venenosa, la belladona. Si bien al tacto era inofensiva, si alguien las ingería podían morir rápidamente. Prefirió no tomarla y continuar por el camino en el que su hija se había adelantado. Rápidamente ella se encargó de abrir una de las puertas y tomando la delantera llamó a los otros.

-Debemos ser cuidadosos, según el haz de la noche de Kyle, los criminales vinieron por éste camino y parecen estar armados, no bajemos la guardia – volteó para ver si Tazz o Valky los habían seguido pero por la oscuridad de aquel lugar le resultó imposible observar, no le quedaba más remedio que continuar con el camino sugerido y encontrar el resto de ingredientes para crear su poción.

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Noeline Malfoy McFarlan
Encantamientos

Todavía seguía inmóvil ante la puerta debido al susto que le habría provocado el inesperado ruido. No tenía claro qué hacer, podría entrar y verificar a qué le había dado o ir en busca de sus compañeros para adentrarse juntos. Aún en la misma posición cavilaba entre esas dos opciones cuando Kyle se acercó y su voz llegó a sus oídos. 

Al inicio sus palabras eran bastante neutrales mientras exigía el motivo del rumbo que había tomado hasta llegar a esa puerta. La joven abrió la boca con la intención de comentar que sólo seguía las instrucciones dadas: investigar el lugar en busca de las reliquias perdidas. Pero antes de que las palabras se formaran en sus labios el mago continuó con sus observaciones, el tono controlado de antes ya no lo era tanto y la pelirroja intuía que aquel estaba sospechando de ella. No tenía ninguna certeza por lo que no podía actuar al respecto, pero intentaría estaría más pendiente de sus acciones. No le gustaba ser sujeto de sospechas.

En breve se les unió Ludwig había venido recolectando algún tipo de hierbas por el camino. Y el resto del equipo que había llegado con ellos parecía que se habían quedado un poco atrás, porque no asomaban por ningún lugar. Aunque sólo quedaran ellos a la delantera tenían que hacer algo.

–Lumos– encendió la varita para adentrarse a donde estaban los cuerpos petrificados. –Si está de acuerdo– le dijo al instructor y guía –sugiero que los revisemos y desarmemos mientras están en esa condición.

 

@ Ludwig Malfoy Haughton  @ Kahlan Blackthorn  @ Kaori M.  @ Tazz

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Fushiguro, Toji 

Astronomía 

Por fin habían llegado al punto real de encuentro, el viaje con el traslador le resultaba muy rudo, poco adecuado para la importancia de la misión que tenían entre manos. Pero poco podía hacer al respecto, ya habían utilizado la varita como medio de transporte y pese al descontento el viaje no le había resultado tan alocado como la última vez que tuvo que utilizar uno de esos. La mirada del nipón se desvió ligeramente cuando reconoció a su amigo Tazz, que también participaba de la misión. Era la primera vez que ambos estaban en el mismo sitio y más con el resto de los Malfoys revoloteando por ahí. —¡Bienvenido! — dijo casi en un susurro mientras se desplazaba por su lado, pero sin detenerse. —Por poco no llegas… — se colocó junto a la Karkarov intentando alejarse un poco de los Malfoys. 

—Estaré atento a las estrellas… — interrumpió al Blackthorn. —… quizás descubra una vía alterna libre de trampas… pero necesitaría un telescopio, no he traído el mío— soltó sin pensarlo mucho. Ahora ya un poco más centrado en las tareas que le habían sido encomendadas intentó buscar una manera diferente para hacerse con un telescopio que le ayude en las catacumbas para guiar al grupo por una ruta un tanto más seguro.

—Perdón, Blackthorn ¿Me podría dejar un telescopio? No he traído el mío propio… no creí necesitarlo, pero ya ve que nos sería de ayuda— dijo dirigiéndose al jefe de equipo. A simple vista le parecía una persona coherente y que se expresaba de manera adecuada, explicando los detalles actuales de la misión y actualizando cada detalle a la vez que iba ocurriendo. —Podría poner en prácticas mis conocimientos recién adquiridos sobre la astronomía si me deja un telescopio— se acercó aún más Kyle. Volvió su mirada hacia el cielo encantado que les cubría a lo alto de las catacumbas, había algo en ellas que le despertaban un pequeño cosquilleo, le inquietaba un poco el desconocer el posible camino que habían de tomar para poder recuperar las reliquias que habían sido sustraídas. 

@ Kahlan Blackthorn  @ Ludwig Malfoy Haughton  @ noe_snape  @ Kaori M.  

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Ludwig Malfoy
Herbología


Mientras caminaban por aquellos túneles se percataba de que el camino se hacía cada vez más estrecho impidiendo incluso que pudieran caminar codo a codo, debían formar una línea para poder pasar o de lo contrario se atorarían. El rubio intentaba encontrar los ingredientes que le faltaban, ya tenía casi todo pero el tiempo se les acortaba y podrían ser interceptados por los ladrones en cualquier tiempo. Volteó para ver si Valky y Kyle los seguían pero por la oscuridad no llegó a ver nada.

Adelante su hija, Noe, había mantenido la luz encendida, gracias a ella pudo encontrar finalmente unas raíces que se asemejaban mucho a las que había visto en su libro de herbología. Se inclinó y pudo cerciorarse que de estaba en lo correcto, era ortiga la cual en cuanto la tocó le causó comezón, debía ser mas cuidadoso, también había un poco de asfódelo y ajenjo. Con todo eso más los ingredientes que ya tenía estaba listo para crear la poción.

Sabía que era una poción de grado avanzado de hacer, pero tenía el conocimiento y era un experto pocionero por lo que mientras su hija desarmaba a los sujetos petrificados, el rubio comenzó a seguir los pasos que había en el libro de elaboración de pociones avanzadas – si quieren adelántense que esto tomará un poco de tiempo – dijo concentrado en su caldero, aplastó el ajenjo, picó un poco de valeriana, tomó un gusarajo y lo exprimió, revolvió y colocó el sopóforo, volvió a mezclar para finalmente agregar el asfódelo y la esencia de ortiga, dejó calentar a fuego lento por unos minutos y finalmente agitó su varita sobre el caldero. La poción estaba lista.

 

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Tazz Malfoy 

Maestría con Escobas 

El estómago se le había revuelto como consecuencia del viaje en traslador, no se había acostumbrado aún a los desplazamientos mediante objetos encantados. Trastabilló un poco al aterrizar en el suelo, pero lo disimuló como bien pudo para que sus compañeros de misión apenas no se percataran de su torpeza. Resopló aliviado sabiendo que pudo llegar a tiempo para no perder el traslador… el tiempo se le había echado encima y eso casi le provoca que le dejasen tirado en aquel bosque londinense. Una vez recuperó la compostura, echó una rápida mirada para buscar a alguien conocido.

Su mirada se detuvo un segundo en la mujer de cabello castaño… ¿Es imposible? ¿No puede ser…? Soltó una pequeña risita nerviosa. Se acercó un poco dubitativo porque no podría ser cierto, no podría ser real… ella “estaba desparecida” en su defecto lo que se podría traducir en “estaba muerta”. Ya hace mucho que la había llorada, que había pasado el duelo por perderla… Un padre no puede pasar por la pérdida de una hija o un hijo, es algo que no debería darse en ninguna circunstancia… sin embargo, Tazz lloró a Valkyria durante mucho tiempo, destrozado… —¿Cómo es posible? — soltó sin pensarlo. Obviamente no era el momento adecuado para resolver asuntos familiares, pero todos aquellos sentimientos de perdida a los que se enfrentó cuando Valky desapareció empezaron a aflorar. 

—Perdón… Yo podría tener algún conocimiento sobre las escobas voladoras— añadió al requerimiento del Kyle sobre las escobas como método de huida si así fuera el caso. —Claro, aun o poseo la maestría con las escobas, pero he presenciado a mi hermana Noe en sus entrenamientos de quiddicth, eso debe de contar… — intentó fingir una broma para rebajar la tensión de la situación. Se había percatado de la presencia de su padre y su hermana y para su sorpresa también se encontraba su amigo Toji. Resultaba ser un grupo un tanto curioso… 

—Gracias, Kyle— tomó la escoba que le ofrecía el jefe del equipo y atravesó el portal que abrió el mago después de darles las indicaciones pertinentes. Tazz salió disparado con la escoba que le habían dejado y haciendo piruetas y demás en el aire para comprobar que tenía conocimientos en vuelo puesto que al graduarse de Hogwatrs pasó su licencia de vuelo y aprobó con buena calificación…. o eso recordaba. 

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