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Rally Mágico


Kahlan Blackthorn
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La competencia anual de escobas era un suceso que le daba un leve respiro a toda la tensión que reinaba dentro de la comunidad mágica. Los más interesados en esa reyerta eran los buscadores de los equipos de quidditch, interesados en demostrar lo veloces que podían ser con tal de hacerse con la dorada pelota voladora. Aunque la invitación estaba abierta a todo aquel que supiera montar una escoba o tuviera la intención de aprender a como darle un buen mantenimiento y en el mejor de los casos repararla si la misma sufría algún daño considerable o terminaba rota. 

Las posibilidades eran ilimitadas y contando con la ayuda de su compañero, no dudaba que NoTazz se transformará en uno de los semifinalistas. Comenzando la primera tanda con los aprendices que habían tomado una capacitación detallada, sobre como asear de manera correcta el mango de la escoba y las cerdas del cepillo. Las más brillantes eran las que fueron tratadas con ceras finas y especiales, destacando el aroma a la madera que las componía. Cedro, caoba y abeto, podrían ser unas cuantas de las clases elegidas por los competidores.

Tomando con cuidado el mango de su escoba, sintió el instinto de montarse en ella e ir hacia el estadio de quidditch que se encontraba dentro de Hogwarts. Momentos gratos pasaron por su mente, vivencias que le hicieron recordar el momento en que Slytherin se alzará con la copa de las casas dándole una paliza a los Gryffindor sus más acerrimos rivales y los únicos capaces de enfrentarse a ellos sin que les temblaran las rodillas. 

— Veamos que tan lejos puede llegar, no le pondré las cosas sencillas y mucho menos le dejaré ganar de una—despertándose su espíritu competitivo. Apretando sus muslos contra el mango de la escoba, sintió un tirón que le llevaba a una velocidad moderada por momento que poco a poco aumento. El sentimiento de libertad extrema se apodero de cada poro de su cuerpo, haciéndole volar como una pluma que era llevaba por el viento a donde este quisiera darle una morada improvisada.

Alumnos inscritos
Agosto 2022

Aritmancia
Eobard Thawne

Maestría en Escobas
NoTazz

Profesora

Kahlan Blackthorn

Hitos por Conocimiento:

Maestría en Escobas: Intentar ganar la carrera mostrando un buen manejo y uso de la escoba voladora incluyendo darle el mantenimiento adecuado a lo largo de la carrera.

Aritmancia: Identificar por medio de la aritmancia las rutas que pueden darle a su compañero una vía de escape ante los obstácu.los que se irán presentando dentro de la carrera.

Instrucciones:

  1. Aparte del conocimiento que van adquirir dentro de está clase, podrán hacer uso de los poderes, habilidades u otros conocimientos que hayan aprendido con anterioridad para complementar su labor, siempre  y cuando estén relacionados con el hito o tarea encomendada. Para resaltar el conocimiento que están adquiriendo deberá estar resaltado dentro de sus roles en negrita y color rojo.
  2. Deben traer consigo escobas, mapas astrales, telescopios, brújulas y cualquier elemento que consideren les puede ser de utilidad. Además de sus varitas mágicas, evitando hacer uso de hechizos que no correspondan al nivel que ostentan actualmente.
  3. La misión primordial consiste en llegar al final de la trama y trabajar en equipo para sortear con éxito cada uno de los obstáculos que se les darán a conocer dentro del topic de la clase.
  4. Está permitido el uso de personajes secundarios en caso de que estén cursando dos conocimientos al mismo tiempo, si solo es un conocimiento se les dará la opción de hacer uso del personaje principal o el secundario que decidan elegir. Son libres de adherir personajes que les ayuden a mover la trama, dotándolos de habilidades que no rompan la coherencia o se salgan del juego del rol.
  5. Para aprobar se deben realizar mínimo 5 roles por el conocimiento que desean adquirir.
  6. En caso de dudas las podrán emitir en el topic de dudas correspondiente mencionando al profesor Consultas & Sugerencias.

@ Eobard Thawne  @ NoTazz

Editado por Goderic Slithering

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Recibir una misiva de Castelobruxo generaba sentimientos mixtos en el Black Lestrange, pues en el pasado había dictado cátedra ahí, ya fuera luciéndose con su expertise en Cuidado de Criaturas Mágicas o Idiomas; sin embargo, en esta ocasión le tocaba asumir el rol del alumno, una condición que adoptaba a partir de su decisión de retornar a la vida pública tras su intento de desaparecer como víctima del ataque del Inquisidor a Hogwarts. 

Pero lo más inquietante para él, no era la convocatoria, sino el lugar en el que se desarrollaría. Era casi como estar de vuelta en casa. 

⎯⎯Hace un día particularmente bueno, esperemos que los astros no arruinen esta espléndida oportunidad de volar ⎯ pronunció mientras se aproximaba al acceso del recinto deportivo, echando un ojo al despejado cielo de agosto. 

Llevaba la Saeta de Fuego apoyada sobre su hombro derecho, pues aunque dudaba utilizarla mucho, seguiría las indicaciones de la profesora, quien de hecho era una cara conocida para él. ¡Seguro lo mataba, por haber fingido su muerte! O tal vez lo entendía, todo era posible. Una vez que el césped comenzó a dejarme gotas de rocío a sus botas de siete leguas, agradeció haberse puesto una capa impermeable de tonalidades ocre que lo cubría hasta media rodilla, y que hacía juego con la mochila de fondo casi infinito que llevaba colgada del otro hombro. 

⎯⎯Una sorpresa en verdad, pero una buena. Menudo lugar para reconectar con el pasado ⎯ saludó con una cabezada a la profesora, quien ya se encontraba surcando el espacio aéreo montada en su propia escoba. Sospechó que el otro alumno aparecería pronto, y muy seguramente tendría más qué hacer con todo ese asunto de las escobas. 

Descolgó el transporte mágico al fin, cuidando de no llevarse la mochila en el proceso. Dado que aún no recibía instrucciones, lo mejor era quedarse relativamente quieto. Aunque, en un sitio como lo era el campo de quidditch, muchas veces eso resultaba en un grave error. Sus pensamientos lo llevaban hacia los distintos libros de texto que había leído respecto a la Aritmancia, una rama que aún le parecía ajena, a pesar de que durante su trabajo en Gringotts tuvo que improvisar con ésta para proteger las bóvedas. 

⎯⎯Habría preguntado en qué se relacionarían las escobas, o el quidditch mismo, con la aritmancia, pero creo tener una idea. Partiendo de que ésta se apoya en la numerología, que a su vez es una ciencia muy estudiada por los muggles, nos lleva al centro de todo: la geometría. Y es que, si uno sabe hacer bien sus cálculos, puede significar la victoria o derrota en casi cualquier deporte o asunto mundano. 

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Tazz Malfoy 

Maestría en escobas 

Mientras tanto, horas antes en la mansión de los Malfoy… 

Pocas cosas hacían que el pelinegro se retrase en sus responsabilidades, pero el asunto que le urgía esa mañana había puesto en jaque al pequeño de los Malfoy. La repentina llamada del hospital en dónde había trabajado hace varios años se había puesto en contacto para hacerle una consulta que no podía esperar, más sabiendo que la diferencia entre los husos horarios entre los dos países era más que evidente. Pero tal era la urgencia que a Tazz no le quedó más remedio que contestar a esas horas intempestivas. —Señores… no es lo adecuado en estos casos, pero la urgencia del asunto amerita medidas extremas— dijo el pelinegro a través de la chimenea del salón principal de la mansión familiar. Un brote epidémico se empezaba a desatar en una pequeña población cerca de la cuidad capital de indonesia. Ya hace tiempo que había dejado el país y la investigación que había empezado, pero él era a persona que más conocimiento tenía sobre ello y por eso se pusieron en contacto. 

Cuatro horas después, esa misma mañana… 

Más de tres horas habían pasado desde la llamada del ministerio de asuntos mágicos internacionales. Diligentes, las autoridades medimágicas habían seguido todas las recomendaciones que les había dado para la contención del virus. El sol había ya hace bastante rato, Tazz sabía que tenía una cita para mostrar sus habilidades sobre la escoba y todo lo que tenía y había aprendido de ello, con el paso del tiempo y gracias a su hermana Noe, que era una profesional del deporte mágico por excelencia, el quidditch. Los hermanos se habían pasado la mitad de su infancia sobrevolando los terrenos familiares y muchas veces mucho más allá de los lindes permitidos por sus progenitores. Para demostrar su destreza y maestría en escobas, había sido convocado a una competición de vuelo en escoba a la que podía participar cualquier persona. El pelinegro con las prisas llegó un poco más tarde de la hora convocada, pero al parecer aún no había empezado el certamen, lo cual le alivió un poco. 

El lugar escogido para dicho evento no era otro que el mismo campo de quidditch escolar de Hogwarts. Nobles recuerdos evocaron las gradas de madera que delimitaban el campo de juego, se había pasado horas y horas viendo entrenar y viendo jugar a su hermana, a pesar de no ser tan forofo del quidditch, sin embargo, desde siempre era el punto de apoyo para su hermana y su principal fan cuando ella cogía el bate y su bludger. —Vaya… no pasa el tiempo por este sitio… —dijo el Malfoy admirando el sitio y la multitud. Estaba en el sitio de encuentro y junto a él estaba el que parecía ser su compañero de equipo, o eso le había entendido a Kahlan. —Perdón por la tardanza… me surgió un imprevisto ineludible… pero ya estoy aquí— dijo Tazz mientras dejaba su Nimbus 2000 sobre una de las mesas para darle mantenimiento. Saco un par de ungüentos de la bolsa que llevaba y los dejó a un lado y con paño en mamo se dispuso a pasar un poco de cera al mango de caoba de su Nimbus. —Una buena puesta a punto es necesaria si hay que volar de manera profesional—comentó mientras pasaba el paño por cada rincón de la escoba. 

@ Kahlan Blackthorn  @ Eobard Thawne

 

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Las mesas estaban abarrotadas con escobas de diversas marcas, acompañadas por paños de colores vistosos y ungüentos que serían aplicados sobre los mangos y lustrarlos hasta que brillaran como tacitas de plata. La mirada de la Alemana estaba fija en el firmamento tras aterrizar de manera elegante, salto de su varita dándole la bienvenida a sus alumnos— No hay nada que perdonar, todos tenemos asuntos que entender dentro de las ajetreadas vidas que nos han tocado—esbozando una media sonrisa en sus labios, no daba seguidilla al tema de su retraso.

Echando una mirada a las cerdas de su escoba, agradeció que ocupar un cepillo del número cuatro, sirvió para sacarle las que ya estaban en mal estado— ¿Cuántas marcas de escobas conoce, Señor Malfoy—lanzando la primera pregunta que daba paso a la parte teórica. Le agradaba la idea de entrar en modo detectivesco, indagando si había consultado alguna clase de enciclopedia que diera datos de cuales eran las mejores escobas para usar en una competición, donde estaban inmiscuidos desde profesionales hasta amateurs 

— Un placer verlos a ambos, lamento omitir de forma tan descarada el saludo—se excusaba dándole su atención al Señor Thawne, formulando una pregunta que le ayudará a entrar en calor— ¿Considera que los números son confiables para apostar dentro de una carrera como está?—la duda levitaba como lo hacen los jugadores de quidditch dentro del campo. Viéndose amenazados por una bludger mal intencionada que busca a toda costa romperles un hueso o dejarles la nariz fuera de su eje natural.

Ella conocía perfectamente lo que era confiar en el azar, echando los dados al aire esperando que dieran un número que favoreciera a la escuadra que iba adelante en el marcador. Sus pensamientos se fueron de golpe al reciente mundial que había concluido hace algunos días, asintiendo ante la apuesta que realizará en favor del país que se elevará como campeón— Podría decirme que la fecha de nacimiento de Tazz, revelaría sin error alguno que puede que gane está reyerta—hablaba con firmeza, dándole un dato más para analizar al mago que estaba ahí para aprender sobre Aritmancia. 

— Creo que con eso pueden empezar, además debemos estar preparados porque los campeones de los dos años anteriores. Están dentro de la lista de enemigos a vencer, demostremos que tenemos lo necesario—echaba una mirada a sus anotaciones sobre la fecha de nacimiento de dos de los mejores en ese ámbito. Elaborando un par de cuentas, mientras que se disponía a comenzar con el mantenimiento de la escoba que encontrará dentro del ático del instituto que pertenecía a su familia.

@ NoTazz @ Eobard Thawne

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Tazz Malfoy 

Maestría en escobas 

Kahlan, quien les había convocado en los terrenos del campo de quidditch de la escuela de magia y hechicería Hogwarts, le interrogaba sobre las diferentes marcas de escobas que el Malfoy conocía. Mientras bajaba de su escoba, con la cual había dado unas primeras vueltas para tantear el terreno o simplemente le apetecía volar, dedujo el Malfoy. Era curioso porque no las conocía todas a pesar de su íntimo vínculo con el deporte mágico por parte de su hermana, sin embargo, sí que sabía de unas cuantas e intentó hacer memoria para poder decirlas correctamente sin equivocarse, ya que de hacerlo Noeline se enfadaría si se enterarse. —Bueno, recuerdo unas cuantas y seguramente haya más por ahí… — Tazz empezó con su respuesta. — … pero las desconozco… las que si le puedo decir son la línea de barredoras fabricadas por los hermanos Ollerton, de la empresa Cleansweep Broom Company.

Tazz dejó a un lado el paño con el que estaba limpiando el mango de su escoba para ponerle más atención a lo que le estaba comentando a Kahlan y de vez en cuando girándose para cruzar mirada con su compañero Eobard, quien de alguna forma le ayudaría con la carrera. —… luego también tenemos la línea de cometas creada por la empresa Comet Trading Company en 1929… — continuó añadiendo una de las empresas más famosas que fabrican escobas. —y no hay que olvidar de las Nimbus que fueron creadas por la empresa Nimbus Racing Broom Company— Tazz se llevó la mano con la que había limpiado la escoba a la barbilla describiendo un gesto de pensamiento, quizás se olvidaba de alguna más… quizás. —! Ah! y por supuesto de las saetas de fuego— dijo al tiempo que se daba cuenta que el gesto le había costado una pequeña mancha en la barbilla de cera para escobas. 

El Malfoy quitó la tapa al abrillantador de madera especial para escobas profesionales y con un paño nuevo empezó a frotar el mango del vehículo esperando no haberse dejado de lado ninguna marca de escobas. Seguramente habrás de una poco conocida o que apenas ha fabricado una sola línea de escobas y se han quedado allí sin hacer más, pero esas ya se le escapaban al Malfoy. —Por cierto — de forma abrupta se giró porque se le había olvidado hacer un último comentario a lo demandado por Kahlan. —Nuestra mejor opción es la Saeta de Fuego Suprema— dijo señalando con el paño a la escoba que estaba abrillantando. —Es la sucesora de la saeta de fuego y que hizo su primera aparición en el mundial de quidditch del 2014 por el equipo búlgaro— finalizó un poco orgullo de lo que tenía en posesión.

@ Kahlan Blackthorn  @ Eobard Thawne

 

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Le sorprendió gratamente la pericia demostrada por parte del Malfoy. Además de dar un ejemplo magistral sobre las clases de escobas que existían, no reparo en agregar algunos detalles adicionales que enriquecieron la información proporcionada a la Blackthorn. Asintiendo ante la mención de que el Thawne, le ayudaría a ganar la competencia, siendo guiado por los números que se manejaban dentro del estudio de la Aritmancia. Ella confiaba en las cifras que solían estar asociadas a las fechas de nacimiento de sus alumnos o las que conmemoraban algún evento que marcó un antes y un después dentro del mundo mágico.

— Parece que sabe del tema, no encuentro fisura alguna ante lo que me comenta—sentenció centrando su atención en su propia escoba. Lustrando con ahínco el mango de la misma, sacándole más brillo del esperado— Muchos equipos de quidditch han resultado campeones, gracias a las escobas que usaron dentro de los juegos que les llevaron hacia la senda de la victoria—recordando vagamente el último mundial que se celebrara en Brasil. Aquella nación que solía sobresalir en todo lo referente a los deportes o competencias mundiales.

— Yo recuerdo que algunas de las más grandes jugadas, han sido logradas gracias a las escobas saeta de fuego. La velocidad que poseen las mismas, hacen que el jugador que la monta se sienta como una pluma que es llevaba por el viento y llega a buen puerto—lo miraba notando un poco ausente a Eobard. Si el no se ponía las pilas, ya le tocaría a la Ángel Caído, lanzarle el primer dato al Malfoy— ¿Cuál es su fecha de nacimiento?—indagaba dejando de lado la franela. Elevando su vista hacia el firmamento, observando con atención a los que estaban calentando antes de iniciar la competencia.

Uno a uno los números que llevaban plasmados en sus camisetas, le otorgaban información valiosa a la Vidente. Algunos de ellos hicieron trampa en el pasado, recurriendo a estropear las escobas de sus contrincantes, cortando las cerdas de las barredoras y rompiendo los mangos como si fueran palillos—Debe tener cuidado con el número 14 y 19—murmuraba con la mirada perdida en la nada. De un momento a otro, ya no tenía el control de sus pensamientos y acciones, reaccionando al hechizo que lanzarán sobre ella.

Sintiendo sus extremidades tensarse como lo hacen los hilos de una marioneta, impidiéndole gesticular palabra alguna. Sus ojos estaban centrados en un punto fijo, resistiéndose ligeramente a ser sometida de una manera tan cobarde y hartera. Esperando ver si obtenía ayuda del Thawne, porque el Malfoy debía mantener su atención en ganar esa reyerta a como diera lugar.

@ Tazz Malfoy @ Eobard Thawne

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