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SLE III | Roles | Fecha 2 - Grupo 2: Eisenberg Erklings vs Firenze Falcons


Noeline Malfoy McFarlan
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Turno de Buscadores 2 - FF

Luego de los penales de entretiempo, con EE teniendo 3 goles a favor y FF habiendo anotado 2 goles con Dimitri y Branislava, un dúo que había sorprendido a todos por su agilidad, además de con la natural camaradería entre ambos cazadores, el partido se reanudó - como desde su principio - con fuerza y rapidez. 

Leonor Espino fue una vez más quien avistó la snitch dorada de entre el caos de los cuerpos chocando y las escobas. A sólo unos metros de ella, Martha Uno seguía batallando por alcanzar a la buscadora de los Halcones e igualarla en velocidad - o superarla - para ganar la ventaja y llevar a su equipo a la victoria. 

Ante la vista de los buscadores en acción, los fanáticos de ambos equipos gritaban directrices innentendibles gracias al  interminable sonar de los tambores y trompetas de las bandas que habían asistido a animar con sus cánticos a los jugadores en batalla. Y no fueron los únicos en reparar en el movimiento de ambas buscadoras, ya que Walda Fretes sostuvo con un poderoso y bien definido brazo su bate para enviar la bludger en dirección a Espino con una letal precisión, pero fue interceptado por Greta Ianello con una facilidad que demostraba las horas de práctica invertidas en cada movimiento y técnica. 

Habiéndose librado de los obstáculos e intentando mantener a raya los avances de su homóloga rival, Leonor cayó en picada,  cerrando la distancia entre ella y el alado objeto mágico. Martha se apresuró y pudo equiparar la velocidad de la buscadora de Firenze Falcons, intentando agarrar fallando en agarrar la snitch dorada por solo un par de centímetros.  

Con la snitch aún escurriendose de las manos de ambas jugadoras, el partido continuaba sin alteración, pero no con poca pasión y rudeza, que eran después de todo, la esencia del quidditch. 

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Turno 14 (penal) - Eisenberg Erklings

Las buscadoras volvían a moverse, la mirada de la Gryffindor viajó enseguida hacia ellos, intentando seguir la veloz trayectoria que cada una de ellas trazaba en el aire mientras intentaba lograr llegar a aquella pequeña pelota dorada, desde allí imperceptible. El púbico se debatía, entre seguir celebrando los penales y guardar silencio para focalizar su atención en la intensa persecución, en la cual Leonor Espino empezaba a tener ventaja.

Algo no gustó nuevamente al árbitro, quien no dudó en volver a cobrar un penal en favor del equipo italiano. Al parecer, los modales de la argentina, Martha Uno, no se condecían con las costumbres de la Liga Europea. La Gryffindor se preguntó cómo la buscadora no había recibido sanciones en el Mundial, pero recordó que en dicho evento todas las reglas parecían un poco más flexibles, en base a los distintos orígenes y modos de expresión de cada país contendiente.

Así fue como Luciana debió nuevamente enfrentarse cara a cara a uno de los cazadores rivales, Dimitri Belikov. La Guardiana de origen argentino había logrado atajar solo un penal en el entretiempo, pero había bastado para ampliar la diferencia entre ambos equipos y dejar el resultado 50 a 30, en favor de su equipo.

Dimitri se preparó para lanzar, haciéndolo hacia uno de los aros centrales. Aymar estuvo lista, moviéndose ágilmente y logrando tomar la quaffle antes de que ésta pudiese generar un peligro para su equipo.

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Turno 16 (Tiro de Resbalón) - Eisenberg Erklings

Todo el estadio se unió en un grito, la mitad de ellos de decepción, pues esperaban que aquella quaffle de Dimitri lograse acortar la diferencia entre el equipo italiano y el alemán. Los demás, por el contrario, vitorearon con entusiasmo a Luciana Aymar por su gran atajada. El partido continuaba con Eisenberg Erkings 20 puntos por encima de Firenze Falcons, siendo las expectativas alemanas cada vez más anchas respecto a una posible victoria.

La Gryffindor, contempló a la joven guardiana. Luciana sostenía la quaffle aún en sus manos y parecía estar mirando hacia la guardiana rival, Gianna, como midiendo posibilidades.

-¡Vamos Luciana! -gritó la castaña, sintiéndose tonta al instante, sabiendo que su ex compañera no podía escucharla, pero motivada por lo que sabía que podía hacer.

Fue entonces cuando la muchacha actuó, utilizando un “Tiro de Resbalón”, modo en que habían apodado a la jugada, disparando desde su área hacia la rival. Gianna Eberle, sorprendida, intentó realizar una atajada relámpago hacia uno de sus aros laterales, el cual había sido blanco del tiro de Luciana. Sin embargo, nada pudo hacer la italiana para detener aquella pelota, que fue celebrada de inmediato por quienes rodeaban a la Gryffindor.

60 a 30 fue el resultado parcial, dejando al equipo alemán con 30 puntos de ventaja.

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Turno 17 y 18.

 

Las acciones del partido se intensifican de una manera que era imposible pestañear si se quería mantener el hilo de las jugadas. Era lógico, ningún equipo jugaba perder pero la vehemencia de los cazadores y golpeadores de ambos equipos podía resaltarse sin problema. Por ejemplo, la quaffle estuvo en disputa al menos unos cinco minutos antes que Beta Meyer se hiciera con ella, la alemana no dio su brazo a torcer hasta alzarse en la escoba victoriosa; de hecho, estaba tan concentrada en eso que no pudo preveer el Golpe de Cañón que Ianello dirigió con mucha precisión hacia ella.

 

Un sinfín de momentos parecidos podían contarse para este encuentro y el público lo disfrutaba, vitoreaban sin cesar y mezclando los cánticos de uno y otro equipo. La quaffle, por supuesto, no tuvo demasiado respiro, Dimitri Belikov se la alcanzó sin mayor problema a Branislava, los Firenze Falcons no habían dejado de estar pendientes de ella, con la diferencia que ellos si tenían a sus compañeros atentos, fue así que Pietro, no sólo había ayudado a recuperar la quaffle, sino que interceptó la bludger que estaba destinada a la pobre Branislava.

 

Como un cuento de hadas de antaño, terminó con un final feliz: Branislava anotó un tanto para los Firenze Falcons.

 

La seguidilla de situaciones no se iba a detener con un gol, eso lo sabían los catorce jugadores en el campo de quidditch, pero no las tribunas, estas sencillamente se entregaban a la algarabía de celebrar la victoria momentánea que podía significar un tanto a favor.

 

El torneo pasado los italianos no lo habían hecho del todo mal, pero no había logrado llegar a la final y era algo que les pesaba, aunque hubiese sido su primer torneo. Las ilusiones se mantenían intactas en esta oportunidad y si había que pelear gol por gol, lo harían. Las tribunas contaban con la vehemencia que los jugadores estaban mostrando y se le agradecían justamente con toda la algarabía de la que eran capaces sus gargantas.

 

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TURNO BUSCADOR 3. 

La diferencia de veinte puntos parecía ser nada y mucho a la vez. Greta notó el ambiente tenso que se había formado conforme fue avanzando el partido, y ni siquiera la actuación de la buscadora podría cambiar demasiado el curso del partido, salvo que lograsen darlo vuelta como había ocurrido otras veces, aunque no con su equipo precisamente. La capitana de Firenze Falcons sabía quién había estado entre la gente de la tribuna, y sabía también que sólo podría significar problemas. Estaba segura de que si presencia allí sólo significaba malas noticias.

Quizás por la mente dispersa o por la cruz que tenía en el hombro en ese momento, el golpe que le dió a cierta bludger fue deplorable. Ni siquiera había logrado apuntar bien, la pelota de metal se fue en la dirección contraria a dónde realmente quiso enviarla: hacía Marta Uno. Y aún así seguía sin reaccionar. Sólo lo hizo cuando sintió un dolor agudo entre las costillas que la obligaron a voltearse para encontrarse con la mirada recriminatoria de su hermano, quien elevó en alto el bate con una mano y Greta tuvo que semi cubrirse el rostro pensando que iba a ser golpeada.

Sin embargo, Pietro acababa de interceptar una bludger que iba dirigida a Leonor Espino. Al enviarla de regreso, golpeó a quien la había lanzado originalmente. 

-- Concéntrate --fue lo único que alcanzó a escuchar de él. Y a unos metros, ambas buscadoras habían fallado el intento de agarre.

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~ Mosquito ~          Ianello 

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Turno 20 - Firenze Falcons 

El partido continuaba mientras el pequeño pero intenso momento entre los buscadores de ambos equipos se llevaba a cabo con la misma rapidez con la que empezó. Los cazadores se disputaban la quaffle, pero esta terminó rápidamente en las manos de Jonas Fischer, quien con alarmante facilidad venció a sus contrincantes y se encontraba intentando cerrar la distancia entre el y los aros de Firenze Falcons.  

El partido estaba cerca de su fin y los fanáticos en las gradas continuaban apoyando a sus jugadores favoritos con el mismo fervor desde el inicio del encuentro. El estadio, aunque se trataba de equipos no tan famosos como algunos otros, estaba casi lleno en su totalidad. Pero el quidditch siempre llamaba a los magos y brujas de todas las nacionalidades a acudir por la pura emoción y amor por el deporte. 

Gianna Eberle pensaba en eso en algún rincón de su mente, pero toda su concentración estaba puesta en el cazador que se acercaba con velocidad hacia la zona que ella defendía con fierra disciplina y sentido del deber. Cuando estuvo lo suficientemente cerca, Gianna abandonó su posición frente a los aros, saliendo al encuentro de Jonas y con facilidad casi alarmante, haciendo uso de su perfeccionada habilidad llamada All In, le robó la quaffle a Fischer, quien parecía alarmado por la rapidez de los movimientos de la guardiana de los halcones. 

- ¡Como robarle un dulce a un niño! - gritó Eberle en dirección a Jonas mientras hacía un pequeño espectáculo dando vueltas en su escoba, acción que tuvo como resultado una interminable ovación del público, todos gritado el nombre de Gianna al unísono. 

Así, Firenze Falcons se salvaba de un tanto en contra y el partido continuaba. 

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 Turno Especial de Buscadores 4 - Eisenberg Erklings

El partido continuaba. Los cazadores alemanes parecían llenos de confianza al encontrarse con ventaja frente a sus rivales. Los 30 puntos de diferencia eran un signo de fortaleza y seguridad, pero nada estaba dicho. Jonas Fischer intentó avanzar hacia los aros entre diferentes movimientos y amagues. Desafortunadamente, Gianna estaba lista para salir al encuentro del alemán, presionándolo hasta quitarle la quaffle prácticamente de las manos.

El público protestaba, abucheando o vitoreando la juagada de la guardiana, pero el silencio se expandió por las tribunas, pues fue evidente que los buscadores se pusieron nuevamente en movimiento. Esta vez era claro, ambos habían visto la snitch y la intentaban alcanzar, utilizando toda su velocidad de vuelo para ello.

Los golpadores no estaban dispuestos a quedarse al margen de la jugada, volando hacia ellos, listos para atacar o defender. Walda Freites golpeó una bludger rumbo hacia la buscadora italiana, mientras que Greta Ianello lanzó un golpe bombeado hacia Martha Uno, quien no logró evadir, centrada como estaba en su objetivo.

Pietro Ianello intentó también interceptar la bludger lanzada hacia Leonor Espino, pero el golpeador tampoco tuvo éxito en la jugada. Leonor hizo su intento de esquivar el golpe, pero la bludger le impactó de lleno en el brazo que ésta extendía hacia la snitch.

Ambos buscadores, igualmente, intentaron lograrla captura, pero ninguno de ellos logró el objetivo en ese momento. La persecución seguiría.

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TURNO 22. 

Cuando Gianna le quitó la quaffle a Jonas Fischer, la lanzó inmediatamente hacia los cazadores de su equipo, Donatello Ferrari fue quien la atrapó ágilmente y avanzó por el campo de juego sin ningún obstáculo; ni siquiera el de Gretchen que intentó golpearla con una bludger pero, por cosas de vaya uno a saber qué, terminó dirigiendo la pelota de metal hacia Mina Meyer, una cazadora de su propio equipo. Donatello, al ver que el camino estaba libre, le pasó la quaffle a Branislava Dark Blood. 

Branislava recibió la quaffle y avanzó hasta los aros, desde donde ambas golpeadoras del equipo alemán la esperaban cada una con una bludger en su dirección. Greta Ianello, capitana de Firenze Falcons, interceptó la primera bludger con Interferencia de águila. La segunda, fue la misma Branislava quien se encargó de esquivarla con un rápido movimiento que le permitió safar del peligro de ser golpeada y disparar. 

El disparo de la quaffle salió con fuerza, tal es así que, a pesar de que Luciana Aymar intentó detenerla, no lo logró. El marcador aumentaba diez puntos a favor de los italianos y les daba un poco más de esperanza para ganar el partido. Un 60 a 50 era mucho mejor que el resultado que estaban manteniendo hasta hacía unos momentos. La tribuna parecía entender también lo que eso significaba, por lo que el festejo fue aún más grande del que esperaban.

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~ Mosquito ~          Ianello 

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TURNO 24. 

Tras el gol realizado por Branislava, ésta y el resto de cazadores comenzaron la nueva danza por la lucha de la quaffle. Por un lado, el Cabeza de Halcón interpretado bastante bien por parte del equipo alemán, mantenían la pelota entre los tres con una determinación impecable. Sin embargo, la formación realizada por Firenze Falcons, conocida como Parkin's Pincer, fue superior a Eisenberg Erklings. Dimitri Belikov fue en encargado de robar la quaffle para su equipo y pasársela a Donatello Ferrari.

Ferrari avanzó, sorteando al resto de jugadores que intentaban detenerlo. Hizo el amague de intentar disparar pero, antes de hacerlo, en realidad realizó un Reverse pass, dándole la quaffle a Branislava, quién lo había estado siguiendo de cerca y aprovechando de que la atención estaba centrada en él. Los golpeadores alemanes, desde luego, vieron la oportunidad perdida pues en realidad no podrían detener a Branislava, y gastar tiempo en Donatello era innecesario. Por lo que simplemente parecieron limitarse a esperar lo mejor de Luciana Aymar. 

Aymar esperó a Branislava desde un lado seguro de los aros. Cuando la cazadora disparó, Luciana se lanzó hacia la quaffle pero no pudo hacer mucho para atajarla. El gol del empate había llegado dejando el marcador en 60 a 60. El partido podría ser para cualquiera, tanto para Firenze Falcons que ansiaba de forma desesperada una victoria, como para Eisenberg Erklings, para quienes significaría demasiado una victoria en su partido como debutantes.

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~ Mosquito ~          Ianello 

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Turno 5 de Buscadores - Eisenberg Erklings 

El conjunto alemán comenzó a caer contra la arremetida de los Firenze Falcons. Los italianos habían despertado de su aletargamiento dándose cuenta de la pocas chances que tenían de pasar a la otra ronda si volvían a perder. Por otro lado los Erklings estaban aguantando el resultado y poniendo los últimos cartuchos en juego. El empate cayó como una bomba para ambos equipos. 

La responsabilidad quedó en manos de los buscadores. Leonor Espino iba por delante de Marta Uno con mucha ventaja. Gretchen Johann intento lanzar una bludger en dirección a la Buscadora rival para atrasar su avance, pero no tuvo suerte. La pelota quedó muy lejos de molestar a cualquier jugador. 

Leonor Espino no fue suficientemente rápida y, a pesar de estar por delante, no pudo atrapar la Snitch dejándole una oportunidad a Marta Uno, que tampoco aprovechó. La Snitch se perdió en el cielo mientras el árbitro daba por finalizado el encuentro. Los rostros de decepción de los Erklings, no era nada comparada a la de los Halcones. Ellos estaban en la cuerda floja luego de un regular comienzo de campeonato.

-¡Lo hicimos bien, chicos! -Alentó Jonas a su equipo. 

-Empatamos y no atramos la Snitch, Jonas -Replicó Gretchen con una mueca de molestia. 

-Lo que cuenta es no perder -Él mago le guiño un ojo a Mina - ¿No lo dice Mina todo el tiempo? 

Gretchen prefirió no seguir comentando y se sumó a sus compañeros para hacer un rápido paseo cerca de los palcos dónde estaba la hinchada repletos de colores violeta y amarillo. 

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