Jump to content

Los Hermanos Ryddleturn


Publicaciones recomendadas

Publicado

Habían pasado muchos años desde que la familia Ryddleturn casi había dejado de existir, habían tomado otros apellidos y formado otras familias, pero la sangre seguía siendo la sangre. Ya habían pasado muchos años desde que nació en el seno de esa familia donde la matriarca y su madre era Lyra Katara Ryddleturn, la misma madre que la de @ Cillian Haughton . Pero por ciertas causas, sus caminos se separaron, ella siguió a su madre en la Selwyn, Cillian partió a la Haughton la cual lo acogió.

Una figura cubierta por aquellos ropajes mortifagos y su máscara, recorría aquel antiguo y emblemático lugar, mientras la misma niebla abrazaba su figura femenina. Parecía estar buscando algo mientras removía con sus pies algún que otro escombró que había por el suelo. Sus pasos se detuvieron mientras andaba por encima de los cascotes de lo que fue el castillo de la familia Ryddleturn, donde ella había jugado junto a su hermano pequeño en tantas ocasiones. 

Aunque ambos habían seguido los ideales de la familia con mucho orgullo. Ella había conseguido, después de años, el rango de Nigromante dentro la Marca Tenebrosa, en cambio, el pequeño de los Ryddleturn, era el mismísimo líder de los mortifagos. Si la mismísima matriarca de la familia los pudiera ver a ambos estarían muy orgullosa de los dos, estaba segura.

En su mano portaba la varita azabache, mientras flexionaba sus rodillas, al ver un peluche de un minino, podría haber sido de cualquiera de los niños que habitaron esa familia. Se llevó una mano a la máscara para quitarsela de su rostro, mientras casi al instante sus ojos amarillos cambiaban a sus ojos normales, aquella mirada azul y amarilla, que se asemejaba a los de un felino. La máscara despareció en una nube de humo negro para dejar el rostro de la Selwyn, mientras miraba con añoranza aquel lugar.

Pudo escuchar unos pasos acercarse, por lo que se irguió mientras sonreía al rubio que había llegado a aquella cita. No estaba mal honrar su antiguo apellido con un duelo, como llevaban haciendo siempre que las circunstancia les dejaba. Se apartó la capucha de aquella túnica mortifaga, dejando así su melena rubia mecerse por el viento que soplaba como si fuera una caricia.

Gracias por venir....Es hora de recordar un poco el pasado, hermanito....—Comentó mientras saludaba con una reverencia a su hermano antes de empezar el duelo contra él. Sabía que ninguno de los dos moriría. Habían acordado atacar con todo, él con su rango de líder y ella con el de nigromante con los libros que tuvieran cada uno, era hora de jugar juntos.

 Strellatus murmuró apuntando directamente hacia el rostro del Haughton, Flasheandole con una luz cuya energía había  estado acumulando , Eliah, en su interior para impactarle en el rostro del líder mortífago.

g21DL34.gif  o6Kvv.gif  qgPkiGS.gif

XssD3Cy.png

  8H0Q9ww.gifCillian-Haren-Morado.gif

nqOolSA.gif

Publicado

Cillian Haughton permaneció en silencio mientras avanzaba entre las ruinas del castillo de los Ryddleturn. La niebla que rodeaba el lugar parecía intensificar los recuerdos que palpitaban en su mente, imágenes fragmentadas de risas infantiles y tardes interminables de juego con su hermana, Eliah. Aunque sus caminos se habían separado desde hacía años, la sangre era la sangre, y el vínculo que compartían nunca había desaparecido del todo. El lugar, aunque en ruinas, aún conservaba los ecos de un pasado que ambos habían compartido, a pesar de las decisiones que los llevaron a diferentes destinos.

Al llegar, divisó la figura de Eliah, cuya máscara mortífaga desaparecía en un destello de humo negro. Su cabello rubio ondeaba al viento, y aquella mirada felina que alternaba entre el amarillo y el azul lo observaba con la misma intensidad de siempre. Una ligera sonrisa se dibujó en el rostro de Cillian, aunque su expresión mantenía la tensión de quien se sabe ante un desafío inevitable.

—Eliah... —saludó con un tono que, aunque cálido, no dejaba de ser solemne. Dio un paso más hacia ella, inclinando ligeramente la cabeza en señal de respeto. A pesar de sus diferencias y las circunstancias que los separaron, seguía siendo su hermana. Extendió una mano como si quisiera acariciar aquel vínculo que, aunque marcado por las cicatrices del tiempo, seguía latente.

No tuvo tiempo de decir más antes de que la primera chispa de magia cruzara el espacio entre ellos. Una luz intensa y acumulada por Eliah surgió de su varita, dirigiéndose directamente hacia él. La rapidez de su reacción fue clave.

Expavescerent —pronunció con claridad, alzando su varita en un movimiento seguro. De esta surgió una chispa brillante que anuló el efecto que había lanzado su hermana. La niebla a su alrededor pareció arremolinarse momentáneamente por el choque mágico, pero la tensión en el aire no disminuyó. La chispa se extinguió, y el hechizo quedó prohibido para ambos durante el resto del duelo.

Cillian alzó una ceja, como si quisiera recordarle a Eliah que, aunque él lideraba, no había perdido el toque para los duelos. Sin una palabra más, movió su varita con un gesto rápido y preciso, utilizando un embrujo sutil pero eficaz:

Zancadilla —pensó, dejando que la magia hiciera su trabajo. Un lazo invisible se enroscó en los tobillos de Eliah, obligándola a perder el equilibrio y caer al suelo. La magia del hechizo hizo que su postura elegante y dominante se viera interrumpida, aunque Cillian sabía que ella encontraría la forma de liberarse en poco tiempo.

—Hora de recordar quién te enseñó algunos de esos trucos, hermana —comentó con una media sonrisa mientras se preparaba para el siguiente movimiento.

 

@ Eliah Selwyn R.

OjQFQY0.gifbfqucW5.gif

image.png

Publicado

No pudo tomar la mano que el Haughton la ofrecía pues ya estaba lanzando el primer hechizo que fue perfectamente inhabilitado por el mago con aquel hechizo que ella no conocía del todo. Pero por lo visto, aquel hechizo que la peliblanca acababa de utilizar no iba a poder usarse por ninguno de los dos en todo el duelo. Una pena la verdad, ya que estaba probando aquellos hechizos que la otorgaba su nuevo rango dentro de la marca.

Su hermano había cambiado mucho, ya no era un niño asustadizo, para nada, era todo lo contrario. Decidido, con fuertes ideas y convicciones, además con manera de líder. Ella nunca había aspirado a ser líder, la gustaba mas trabajar para la marca desde otros estamentos o cargos, estas a cargo del resto de mortifagos y no ser la mente pensante que decidían los siguientes movimientos.

—Me enseñaste muchas cosas hermanito pequeño, pero ya sabes que yo te enseñe también muchas otras...—comentó la bruja con una sonrisa cómplice con el líder mortifago. Antes de pensar que hechizo iba a intercalar, no sabía si lo iba a dejar jugar o no, pero se iba a arriesgar un poco para dar vidilla a aquel duelo de ambos y antiguos Ryddleturn.

—SénecaPronunció apuntando con la varita al hechicero justo antes del hechizo que iba a lanzar el rubio. El efecto sería instantáneo por lo que empezaría a deshidratarse, hasta no poder articular palabra. Era un conjuro poderoso  y aunque no quisiera, estaba utilizando a su hermano como conejillo de indias.

Pero tan pronto como como lanzó aquel hechizo, ella recibió el impacto del encantamiento de su hermano provocando que se cayera de bruces no sin antes apoyar las rodillas y luego los brazos. Había sido muy considerado, aunque a ella estar de rodilla la gustaba para otras cosas y eso no inmiscuía al Haughton, la verdad.

No se iba a poder levantar en su turno, así que debería de pensar en algo rápido que no precisara apuntar con la varita. Desde ahí miraba a su hermano con leve sonrisa juguetona. Siempre era divertido duelear contra @ Cillian Haughton y obviamente lo estaba demostrando. Solo esperaba levantarse pronto pues era incomodo estar entre tanto polvo y ver a su hermano desde el suelo.

— Fuego NegroInvocó a 3 metros por encima de ella una bola de fuego negro que esperaría cualquier orden que la bruja le diera de forma mental. De momento la tendría ahí, tampoco quería ser muy brusca con Cillian puesto que habían empezado el duelo de forma amigable, al menos por el momento. Sabía que todo aquello cambiaría según fueran cogiendo calor en el ardor del aquel enfrentamiento en honor a los Ryddleturn. 

g21DL34.gif  o6Kvv.gif  qgPkiGS.gif

XssD3Cy.png

  8H0Q9ww.gifCillian-Haren-Morado.gif

nqOolSA.gif

Publicado

Cillian observó con atención a su hermana, notando cómo utilizaba sus movimientos con la misma precisión y gracia que siempre había caracterizado a Eliah. Su hechizo de Zancadilla había cumplido su cometido, pero su sonrisa se desvaneció ligeramente al sentir los primeros efectos del Séneca. Un calor seco comenzó a recorrerle la garganta y los labios, mientras su cuerpo se deshidrataba lentamente.

No tuvo tiempo de devolverle el comentario antes de que ella invocara el Fuego Negro, una bola de fuego que flotaba sobre ella, cargada de peligro y lista para recibir sus órdenes mentales. La intensidad del hechizo lo obligó a actuar de inmediato.

Necromatia Lingua —murmuró, apuntando con su varita hacia la esfera negra. El conjuro surgió en forma de una onda mágica que envolvió el fuego, silenciando su energía y anulando su existencia en un instante. El aire se calmó, aunque Cillian sabía que aquello no sería suficiente para mantener a raya a su hermana.

—Siempre has sido creativa, Eliah. Eso es lo que más admiré de ti... y lo que más temí —murmuró con una leve sonrisa antes de apuntar de nuevo con su varita, esta vez optando por un ataque que podría inclinar la balanza a su favor.

Flechas de Fuego —pronunció, haciendo que varias ráfagas de fuego salieran disparadas hacia su hermana. Las flechas eran rápidas y precisas, buscando dañarla, con la intención de mantenerla bajo presión y limitar sus movimientos cuando lograra levantarse.

Sin embargo, al terminar el ataque, Cillian bajó levemente la varita, dando un paso hacia Eliah, su mirada dejando entrever algo más allá del duelo.

—¿Te acuerdas de aquel día en que Lyra —ahora Cillian sabía que nunca había sido realmente su madre— nos hizo practicar juntos? Yo no podía siquiera conjurar un hechizo sin tropezarme, pero tú... tú siempre fuiste tan impecable. Nunca te lo dije, pero aquel día me hiciste sentir que había algo en lo que podía confiar. Que no estaba solo. —Hizo una pausa, mirándola con nostalgia y afecto. —Tal vez por eso acepté venir hoy aquí, Eliah. Porque, a pesar de todo, nunca dejé de considerarte mi hermana.

La intensidad de sus palabras no disminuía la fuerza con la que se preparaba para defenderse del próximo ataque, pero en aquel momento, el duelo parecía entrelazarse con los hilos de un pasado que ambos sabían que jamás podrían recuperar del todo.

@ Eliah Selwyn R.

OjQFQY0.gifbfqucW5.gif

image.png

Publicado

Por desgracia, su Fuego Negro no salió gracias a la avidez mental del Haughton, estaba orgullosa del rubio, cada día sabía mas y aprendía a como reaccionar en cada momento en los duelos. Sonrió orgullosa mientras pensaba en su siguiente movimiento, así que quizás, un intercambio de daños no sería tampoco una mala opción. Se levantó del suelo preparada para seguir el duelo sacudiéndose el polvo de sus vestimentas negras.

Las facciones de la Selwyn cambiaron para mostrar sorpresa ante las palabras del Líder mortifago, no se esperaba esas palabras y menos que incluso su hermano la temiera. Pero eso podría ser bueno,  infundir terror en sus contrincantes por como veía ella los duelos era quizás digno de admirar. Por eso una mirada, extraña en el rostro de la bruja, de dulzura se reflejo en su cara mirando a Cillian.

—Tu siempre has tenido un gran corazón e inteligente, Cillian y se nota en todas tus ideas y en tu actuar, se que  tu cabeza va a mil por hora siempre—comentó sabiendo que como Líder había intentando llevar el actuar de los mortifagos de otra manera. De una forma mucho más estratégica y más eficaz, gracias a eso tenía el control casi completo, los mortifagos,  de todo el ministerio de magia en gran Bretaña.

—Sectusempra—pronunció intercalando aquel hechizo, que salió justo después del Nicromantia. De su varita salió un rayo burdeos que impactaría en el pecho de su hermano creando graves heridas sangrantes. Eran bastante peligrosas si no hacia nada más pero ella también recibió el daño de aquellas saetas ardientes. En cuanto noto el fuego  en su piel se apunto a las zonas que estaban prendidas en su cuerpo para pensar aguamenti. De su varita salió un chorro de agua que roció por su. cuerpo apagó todos los filamentos de fuego que la habían impactado.

Recordar aquel momento de su infancia en que ambos aceptaron un entrenamiento de su madre con un duelo, la toco la fibra sensible y removieron los recuerdos en su mente. A veces pensaba que estaba sola, pero se tenía que dar cuenta de que no  lo estaba que podía contar con @ Cillian Haughton y escuchando sus palabras sinceras lo tenía más que claro.

—¿Sabes que siempre vas a poder contar conmigo no?—Le preguntó aunque era más afirmando mas que preguntando puesto que no solo era la fidelidad de siempre en la marca, sino que también era su fidelidad como hermanos. Era como medio irónico que ambos se abrieran en un duelo, pero quizás era su educación bélica desde que eran pequeños por lo que sabían abrirse de otra forma diferente a los demás, si podría ser así.

g21DL34.gif  o6Kvv.gif  qgPkiGS.gif

XssD3Cy.png

  8H0Q9ww.gifCillian-Haren-Morado.gif

nqOolSA.gif

  • 4 semanas más tarde...
Publicado

El impacto del Sectumsempra en el pecho de Cillian fue inmediato, desgarrando la tela de su camisa y dejando a la vista profundas heridas que comenzaron a sangrar de manera alarmante. Apretó los dientes para no soltar un gemido, y aunque el dolor era evidente en su rostro, el líder mortífago mantuvo la compostura.

—Siempre tan precisa, hermana —murmuró con un tono que mezclaba admiración y resignación mientras apuntaba su varita a las heridas. Sabía que no podía permitirse perder más sangre; su mente, siempre estratégica, priorizó una solución rápida y efectiva.

Vulnera Sanentum —pronunció en un susurro, permitiendo que la magia fluyera desde su varita hacia las heridas. La sangre dejó de brotar y los cortes comenzaron a cerrarse, aunque no completamente. El efecto era suficiente para estabilizarlo y mantenerlo en pie, algo que Eliah seguramente ya sabía.

Alzó la mirada justo a tiempo para ver cómo su hermana apagaba las llamas de sus propias heridas con un encantamiento rápido y eficaz. El juego de luces y sombras que creaba el duelo iluminaba su rostro con una expresión que no había visto en mucho tiempo: una mezcla de dulzura y empatía. Las palabras de Eliah, más allá de su fuerza y habilidad, fueron lo que realmente lo impactaron.

—Lo sé, Eliah. Siempre lo he sabido, incluso cuando creí estar solo. Tú también tienes a alguien en quien confiar. Me tienes a mí. —Su voz tembló ligeramente al pronunciar esas palabras, reflejando la verdad y la profundidad de sus sentimientos. A pesar de las diferencias y los caminos divergentes que habían tomado, seguían siendo hermanos, y esa conexión era irrompible.

El líder mortífago respiró hondo, recuperando algo de energía mientras observaba el entorno. Cerca de él, un trozo de escombro sobresalía entre el polvo y los restos del castillo. Su mente, siempre activa, concibió una idea que, aunque simple, cargaba un simbolismo profundo.

Morphos —pronunció con claridad, apuntando hacia el pedazo de roca. En un instante, el escombro se transformó en un gato blanco, cuya apariencia impecable contrastaba con el caos del lugar. El animal se movió con gracia, acercándose a la Selwyn, mientras el observaba la escena con una sonrisa en el rostro.

—¿La recuerdas aún, Eliah? —preguntó con una sinceridad que no intentó ocultar. No era solo una pregunta sobre el presente, sino sobre el vínculo que habían compartido desde siempre. Aunque ahora eran adultos, con responsabilidades y cicatrices que los definían, en el fondo seguían siendo aquellos dos niños que aprendieron juntos a manejar una varita y a enfrentar el mundo, uno al lado del otro.

@ Eliah Selwyn R.

OjQFQY0.gifbfqucW5.gif

image.png

Unirse a la conversación

Puedes publicar ahora y registrarte más tarde. Si tienes una cuenta, conecta ahora para publicar con tu cuenta.

Guest
Responder a esta discusión...

×   Pegar como texto enriquecido.   Pegar como texto sin formato

  Sólo se permiten 75 emoji.

×   Tu enlace se ha incrustado automáticamente..   Mostrar como un enlace en su lugar

×   Se ha restaurado el contenido anterior.   Limpiar editor

×   No se pueden pegar imágenes directamente. Carga o inserta imágenes desde la URL.

Cargando...

Sobre nosotros:

Harrylatino.org es una comunidad de fans del mundo mágico creado por JK Rowling, amantes de la fantasía y del rol. Nuestros inicios se remontan al año 2001 y nuestros más de 40.000 usuarios pertenecen a todos los países de habla hispana.

Nos gustan los mundos de fantasía y somos apasionados del rol, por lo que, si alguna vez quisiste vivir y sentirte como un mago, éste es tu lugar.

¡Vive la Magia!

×
×
  • Crear nuevo...

Información importante

We have placed cookies on your device to help make this website better. You can adjust your cookie settings, otherwise we'll assume you're okay to continue. Al continuar navegando aceptas nuestros Términos de uso, Normas y Política de privacidad.