The Arabic Place (MM B: 94021)

[Meryen]

Era una noche fría, y a pesar de ello aquella bruja había decidido dar una vuelta por el viejo callejón. Caminaba sin prisa escuchando el ruido de sus pasos al chocar contra el adoquín y el suave murmullo de su que su capa negra producía al arrastrase tras sus pasos, bajo esta bestia jeans claros y un suéter marrón que se ajustaba a su silueta.

 

Había perdido la noción del tiempo pero la soledad del callejón le decía que ya había pasado de las 2200 hs posiblemente todos los negocios estaban cerrados y eso no le importaba hasta que… sintió que algo tocaba su negra cabellera.

 

Levanto la vista al cielo, había comenzado a nevar finos copos de nieve caían sobre ella y si no buscaba refugio no tardaría en estar húmeda y con frio, bufo algo molesta y entro en el primer negocio que vio.

 

Se alejo de la puerta retrocediendo mientras se sacudía la nieve del pelo y se quitaba la capa que la cubría.

[akiles]

El frio arreciaba en el Callejon Diagon, a traves de la ventana se veia nevar finos copos de nieve, las noches anteriores habia comenzado de la misma forma lo que habia desembocado en una tormenta de nieve. Akiles se encontraba detras del mostrador fregando un par de vasos que le quedaban. En aquellos tiempos el local habia estado vacio y si alguien habia entrado no lo habia escuchado. Llevaba unos jeans negros y un polo de mangas largas blancos adornado en el centro con lo que parecia ser la imagen de la cabeza de un águila.

 

El sonajero de atras de la puerta sono avisando de que alguien habia entrado al local, la silueta de alguien que se sacudia la nieve corroboro aquello, por lo que el mago solo se limito a seguirlo con los ojos mientras continuaba con el ultimo vaso que le quedaba por fregar en las manos. La forma de una chica desconocida se formo ante el joven al quitarse la capa y retroceder, aun no lograba verle el rostro por mas que este se esforzaba, solo el reflejo de unos ojos grises que sobresalian de la sombra.

 

El lobo le hizo una seña a la chica con la mano para que se acercara a la barra, coloco el vaso junto a los demas y alejo la vista de la chica que se acercaba. -Que quieres como arma para pelear contra el frio- le pregunto el mago incluso antes de que la chica llegara, incluso antes de mirarla. Dio media vuelta y se coloco de frente para las bebidas esperandfo escuchar la respuesta de la recien llegada.

[Meryen]

Después de retroceder varios pasos giro sobre sus talones y sus ojos se posaron en el hombre tras la barra… este la llamo con un gesto y ella avanzó hacia el de forma instintiva, mientras su mirada recorría el lugar, la decoración era árabe todo en aquel lugar le recordaba a su tierra, a su hogar…

 

De forma automática miro su vestimenta y se llevo las manos al pelo, como siempre lo tenia descubierto pero esta ves sintió vergüenza de llevarlo así, hacia tanto que no seguía las viejas costumbre y tubo el sutil impulso de volver a la calle y enfrentarse a la nieve.

 

La vos de aquel hombre la devolvió a la realidad de forma brusca –un te de menta- dijo sin pensarlo siquiera, cuando finalmente llego a la barra y pudo sentarse en una de las butacas volteo a mirar el ventanal, la nieve parecía no dejar de caer, un suspiro escapo de sus labios mientras su mente volvía a llenarse de recuerdos de su infancia

[akiles]

Se encontraba dandole la espalda a la chica con su cuerpo girado hacia las botellas, cuando la respuesta de la chica llego a sus oidos, un raro sentimiento entre reir a carcajadas y llorar le invadio el cuerpo. Giró sobre sus talones lentamente a mirar de frente a la chica por primera vez. El impacto de semejante belleza inundo su cuerpo dejandolo por una fraccion de segundo en shock, fraccion de segundo imperceptible para todos, era una persona que no se dejaba controlar por su pensamientos ni sus impulsos y tenia total dominio de su lenguaje corporal, por lo que rapidamente se recompuso -Un te de menta? acaso te escapaste de la escuela?- se burlo el mago en la cara de la propia chica imaginando que nada bueno se podria deribar de semejante burla.

 

Comenzo a prepararle labebida a la muchacha, ni siquiera sabia todos los ingredientes de semejante pedido, por lo que demoro un poco mas de lo acostumbrado para ponerle el vaso lleno de bebida frente a la desconocida. -Aqui tienes, espero te caliente bien- sonrio el lobo de medio lado, clavando sus oscuros ojos en los grises de la muchacha, era costumbre intimidar a las chicas con aquella profunda mirada para luego burlarse de la forma en que apartan la vista, por lo que mantuvo la vista fija en esta, a la par que se subia las mangas del polo blanco hasta la altura de sus antebrazos. -Y se puede saber cual es tu nombre- pregunto el mago sin apartar los ojosde la muchacha, recostando su espalda sobre el estante, cruzando los brazos y flexionando una rodilla apoyandola en el mismo estante.

[Meryen]

Aquella voz devolviéndola al presente y de esa forma tan desagradable – te pedí que lo prepararas no que lo juzgaras- respondió con un tono de voz pausado pero tosco, volteo el rostro para mirar a su desagradable interlocutor que siguió de espaldas por unos minutos mas y cuando finalmente volteo la bruja no pudo dejar de observar sus ojos.

 

El mago no parecía ser el chico mas agradable que se halla cruzado en su camino pero no podía negar que poseía una de las miradas mas intensas y profundas que había visto, sintió como Ananel parecía exaltarse en su interior pero decidió no prestarle atención.

 

Él deposito el vaso lleno de menta frente a ella, la bruja miro su bebida y suspiro – si esto logra calentarme inventaste una nueva receta o de en definitiva no es menta - dijo sonriendo ligeramente y meneando de forma negativa como auto reprendiéndose.

 

Luego levanto la vista y el desconocido clavo su mirada en los ojos de la bruja, tal vez aquel hombre no lo esperaba pero Meryen lo tomo como un desafío y no aparto la vista de aquellos ojos, que parecían guardar un sinfín de secretos.

 

Lo vio ponerse cómodo sin quitarle la vista de encima, mientras ella delineaba el contorno del vaso con la yema de su dedo índice sin dejar de mirarlo de la misma forma que el lo hacia –se puede saber quien lo pregunta? – respondió con el mismo tono de vos altanero que el usaba – y dime en verdad pretendes seguir con este jueguito de quien resiste mas las mirada del otro por que si es así, te espera una noche larga-

[akiles]

Continuaba en aquella posicion recostado sobre el estante de las bebidas, cada una de las respuesta de la chica lo habian tomado por sorpresa, no esperaba encontrar a alguien que se le encarara de aquella forma, acaso no sabia la chica con quien estaba hablando. Sonrio con el comentario de la mirada, al parecer tenia frente a el una chica diferente, quien era esta forastera que jugaba tan bien a la par del mago. -Acaso te pone nerviosa mi mirada?- le pregunto el joven sin separar la vista de ella. El lugar se encontraba vacio a exepcion de aquellos dos magos que se acababan de conocer y del elfo Sors, que caminaba sin destino por algun lado del negocio.

 

Caminó hasta la barra agarrando una botella de wisky a mitad, vertiendo el liquido en un pequeño vaso con hielo, el cual quedo flotando entre la bebida. -Te molesta que me siente junto a ti? o tienes miedo de ser morida?- una media sonrisa se apodero de los labios, el desafio habia sido lanzado y sin esperar respuesta se encamino a la silla mas cercana de la muchacha, sentandose en ella y colocando el vaso sobre la barra, para volver a observarla de frente. La bruja le daba sensacion de calidez, pero dos trenes no pueden ir en direcciones contrarias por el mismo carril, por lo que algo le decia que esa noche traeria problemas para el,lo que lo hacia querer llegar cada vez mas lejos, siempre habia sido un iman para los problemas y le encantaba salir victorioso de estos.

 

-Asi que no me diras tu nombre hasta que te diga el mio eh?- movia el vaso con su mano haciendo girar el liquido de su interior muy cerca del borde del vaso, casi a punto de derramarse. -Cuando sea el momento lo sabras- sonrio el lobo elevando su recipiente en señal de brindis y llenadoselo a los labios para dar un pequeño sorbo.

[Nate Weasley]

La mañana continuaba para mí, el haber terminado los primeros trámites no garantizaba que todo ya estaba hecho, todavía quedaba un largo camino antes de terminar los retos. La meta estaba lejos, pero ganarlos lo valía, de eso se trataba la vida, de probar, animarse, aventurarse a probar cosas nuevas y vivir nuevas experiencias por los raros, peligrosos y desconocidos océanos que cada día se abrían en la inmensidad como una muestra de que el futuro nunca se acaba, de que es una muestra de que la vida no es eterna, compleja y difícil.

 

A pesar de todas esta charla anterior, llegué a The Arabic PLace porque necesitaba la ayuda de mi amiga Bodrik, había charlado con ella la noche anterior y ella había certificado que me regalaría lo que necesitaba, yo sabía que siempre podía contar con Bodrik para lo que necesitaba, era algo incondicional que esa muchacha fuera tan buena conmigo, la verdad le agradecía, muchas cosas le debía, y algun dia se las iba a retribuír.

 

El local estaba abarrotado de gente, gran éxito tenía el local de mi amiga Bodrik y los demás propietarios. El tan solo anhelar el hecho de que mi negocio por momentos era así, me hacía extrañar porque a veces había mucha gente, y en otras ocasiones parecía un pueblo fantasma que nadie quería visitar por que fuera algo de mala muerte.

 

Divisé a Bodrik sentada en la barra, tomando unos tragos. Me acerqué a ella rapidamente, me senté a su lado y la saludé con un beso en la mejilla.

 

- Bodrik. ¿Como estàs?

[Bodrik]

El día de navidad había llegado cargado como siempre de un gran invierno y las calles de Ottery estaban cubiertas de nieve. La miembro más joven de la familia Lockhart había decidido pasarse al callejón Diagon para comprar 5 árboles navideños, su intención era sin duda regalarle uno para el castillo donde vivía otra en la mansión de su madre, uno para el negocio y por ultimo pretendía regalarle uno a su amigo Gitax, para que usara en su nueva oficina.

 

Entro en The Arabic Place con la intención de guardarlos allí hasta la noche que era la hora de llevarlos a sus respectivos lugares de destino.Casualmente encontró allí a su amigo Nathan-Hola, yo estoy bien ¿y tú?-

[Gitax Weasley]

En la gala de Navidad, había unos retos que se debían cumplir. ¿El primero? Pues constaba de bastantes visitas a muchos lugares, pero a decir verdad no era nada difícil de concretar si se ponía toda la predisposición para lograrlo. Gitax, sabiendo que el primer paso era robar o pedir un árbol de un negocio del Callejón Diagon, decidió desaparecerse de la Mansión Weasley para dirigirse hacia uno de sus negocios. Allí esperaba poder encontrar todo lo necesario y no tener que seguir buscando por otros lugares desconocidos.

 

The Arabic Place. Cuando apareció girando sobre sus talones, leyó el cartel que él mismo había puesto un par de meses atrás, y sin demorarse demasiado, entró en el local para encontrarse con Bodrik que le había dicho que ese día ella trabajaría. Entonces, con paso apresurado se acercó hacia la Lockhart y le dijo:

 

-Bodrik, necesito llevarme este árbol de navidad; que por cierto está muy bonito-comentó el pelinegro, viéndose bastante preocupado por no llegar a tiempo a entregar todo lo que la lista pedía.

 

Miró a su compañera con una sonrisa, ¿Qué era lo que creería ella respecto a lo que el mago le pedía? Decidió aclarárselo:

 

-Es para unos retos que debo completar, no es nada ilegal ni parecido, Bo… ¡No te preocupes! Recuerda que siempre sigo el camino de la luz.

 

Era obvio aquello; si pertenecía a la Orden del Fénix, no estaría buscando la oscuridad ni nada parecido. En principio, Gitax nunca tendría relaciones con el mal si no era de enemigos.

 

 

[Nate Weasley]

- Yo estoy excelente Bo, gracias por preguntar. - le sonreí y le eché un gran abrazo, hacía mucho tiempo que no la veía, por eso envié todo mi cariño con ese abrazo.

 

En ese momento llegó mi hermano Gitax, parecía estar buscando el árbol de navidad que yo ya tenía esperando en mi mansión, lo había logrado materializar por un gran hechizo. Ahora yo necesitaba otra cosa, el siguiente paso al árbol de navidad, lo quería de parte de mi amiga Bodrik era un precioso adorno para llevarme a mi casa, busqué entre las cosas del local algo lindo para llevarme, hasta que en una de las paredes encontré un dulce caramelo en forma de bastón que llamaba mi atención.

 

- Bodrik.. necesitaría que me regales aquel bastón de caramelo de la pared. - le dije con una sonrisa. - me lo regalarías? - le pregunté a continuación con una mirada y una sonrisa en forma de súplica, para complementar uní ambos manos para aumentar mis posibilidades de poder llevarmelo.

 

Al menos, a Brodik estaría seguro de que no le robaría, era demasiado cercana a mí como para realizar tal gesto despreciable. Esperaba que me lo regalara porque dsi no debería recorrer infinidad de locales en una inmensa y eterna búsqueda por los adornos navideños que tanto necesitaba, debía completar el reto y ganar el premio... era algo que dominaba y resonaba en mi cabeza por el momento, lo quería, lo necesitaba, lo haría.

 

Los segundos se hacían largos, eternos, Bodrik parecía estar premeditando una respuesta, quizás me lo regalaba o quizas no, todo dependía de ella, mi destino, mi futuro.