Ollivander's (MM B: 94928)

[Mei Black Delacour]

Solange

 

 

Las calles del Callejón Diagon se hallaban ajetreadas de gente, como era habitual en aquel lugar, pues era lugar de trabajo de muchos, además de que en aquel lugar había ciertos locales y edificios fundamentales los cuales siempre estaban poblados, como era el banco Grigotts o el mismo negocio donde Solange se dirigía en esa ocasión.

 

En cuando había encontrado el negocio al que debía asistir, se quedó observando momentáneamente el cartel que rezaba "Ollivander's. Tienda de varitas, excelentes varitas desde 382 a.c.". Aquel lugar ciertamente le traía viejos recuerdos a la mayoría de los que vivían en ése país, pero ella a diferencia de los demás, no había podido tener el placer de comprar allí su primera varita, aunque ahora que se hallaba en Londres nuevamente, si surgía alguna emergencia, sin duda acudiría.

 

Luego de meditar un momento, la muchacha ingresó al local y rápidamente se acercó al mostrador. Un poco más allá de donde ella se estaba, un pequeño grupo de personas hablaban, y Solange alcanzó a distinguir a la dueña del local, por lo que esperó a que se acercara a ella.

 

–Buen día, – saludó mientras sonreía la chica – soy Solange, la agente de The Hunters encargada de su negocio.

[Ada Camille Dumbledore]

Tras la entrega de aquel hermoso presente, me quede unos momentos alli antes de regresar y volví al cafetín, no acababa de tomar asiento cuando las campanillas avisaron la entrada de alguien más.

 

Salí de nuevo y me encontre con una joven, saludo y se identifico como una agente de the hunters.

 

-Solange bienvenida al negocio, soy Selene Ariane...

 

Ella era la encargada de vigilar el negocio lo que agradecí, pues justo esta mañana me había enterado que unos pillos (XD) habían hecho daño en un local cercano e incendiado algunos muebles y cosas.

 

- hay es gratificante saberlo,puedo ofrecerte algo de tomar? tomas un jugo de calabaza ?

 

Solte espontaneamente

[Gellert Dumbledore]

- Yo tampoco sé donde la pasaré, la verdad es que aún no pensé en ello aunque debería hacerlo pronto ya que esta muy cerca. – agregué con simpatía contestado a la pregunta de mi hermana mientras daba otro sorbo a la bebida que anteriormente me había dado mi madre.

 

A continuación escuché a mi madre decir que para ella sería un honor que pasáramos la navidad en el castillo, junto a ella. Era una buena idea y seguro sería divertido pasarla con ella por lo que con una amplia sonrisa le contesté:

 

- Entonces yo la pasaré contigo, ¿vale mamá?

 

Al decir eso observé como un elfo entraba por la puerta y le entregaba un ramo de flores a mi madre, bastante sorprendido quería preguntarle quien se las había mandado pero cuando lo iba a hacer una chica entró en el lugar. Mi madre se dirigió a atenderla y yo la acompañe esperando poder ayudar.

 

- ¿Qué es The Hunters? – pregunté sorprendido a mi madre en voz baja para que la chica no me escuchara y no supiera de mi ignorancia sobre que era eso.

[Ada Camille Dumbledore]

La joven agente de "The Hunters", aun no habia hablado cuando mi querido hijo me habia alcanzado en la tienda y habia escuchado nuestra conversacion, por lo que le entro curiosidad de preguntarme que era aquella institucion y yo sonrei, acariciando su mano para contestarle.

 

- Corazon The Hunters es una agencia de seguridad privada, ya sabes que suceden agunos inicdentes provenientes de personajes poco favorables para la sociedad y ellos se encargan de evitar y enfrentarlos a ellos, es seguridad privada adicional a la proporcionada por los agentes aurores del Ministerio de magia.

 

Explique a mi querido hijo, pronto el entenderia mucho mas de todo el proceso de la burocracia en el mundo magico, sus regencias procedimientos y labores del lugar.

[Gellert Dumbledore]

Escuché atento la explicación de mi madre sobre The Hunters, para no perderme ningún detalle. Al parecer era una agencia de seguridad privada que defendía al negocio de mi mamá en caso de que alguien viniera a atacarlo. Y aunque suponía quien podría venir a atacar a aquel lugar igualmente tuve que preguntarle a mi madre, ya que seguramente sabía más del tema que yo.

 

- ¿Personas poco favorables para la sociedad como los mortífagos, mami?

 

Ya había tenido un pequeño conflicto con un par de mortífagos que me habían amenazado, pero ahora que era aspirante de la Orden del Fénix me sentía más valiente y no les tenía tanto miedo como antes. Me imaginaba al acabar la Academia de Magia y Hechicería trabajando para aquella organización secreta y si pudiera, también para ese negocio llamado The Hunters.

 

Seguidamente, mientras esperaba la respuesta de mi madre mordí el trozo de torta de chocolate que me había dado anteriormente, dispuesto a comérmelo ya que sabía muy bien.

[Mei Black Delacour]

Solange

 

–Un gusto, Selene – le devolvió el saludo Solange, saludando a la dueña del local mientras le sonreía amablemente y la observaba con atención de forma meticulosa para memorizar su rostro, pues creí que aquello era algo necesario.

 

Solange observó el local de arriba a abajo. El lugar estaba poblado de estantes llenos de pequeñas cajitas que de seguro contenían las varitas creadas y destinadas para determinados magos, que en cuanto hicieran presencia en el lugar, serían únicamente para ellos. Al oír que la dueña del negocio le ofrecía algo para tomar, la muchacha volvió a mirarla y sonrió y se percató de que otra persona se hallaba ahora al lado de la mujer, y se trataba de un muchacho.

 

–Claro, me encantaría – aceptó mientras dirigía sus orbes de color avellana al joven y le sonreía de lado de forma amistosa –. Hola – lo saludó la muchacha para no ser maleducada.

[Damian Black Lestrange]

Nimra Azaba, Zazako Mensu y Tamayata Nimrei

 

Tres jovenes caminaban por las calles de Diagon, no parecian brujos pero en realidad todos lo eras.

 

-Malditos magos, se creen demasiado- dijo Nimra haciendo rebotar su pelota de tenis en la mano y se quitaba el pelo de la frente que estorbaba su vision.

 

-Entonces ¿donde iremos primero?- dijo Zazako

 

-Donde van todos los magos a probar sus varitas, ahi debe haber respuestas- dijo la joven,

 

-Y a quien...bueno a quienes buscamos.

 

-A su hijo, y la que parece ser su mejor amiga- dijo la joven con una sutil sonrisa de venganza.

 

Los jovenes llegaron al lugar y sacaron las pelotas de tenis.

 

-Zazeko ¿me harias el honor?- El chico sonrio

 

-Con gusto- Apuntando a las pelotas de tenis sacando su varita y con una floritura de esta dijo

 

-Morphos- Las pelotas de tenis se habian convertido en rocas, los tres tiraron sus varitas en la calle, no planeaban usarlas. Uno de ellos saco una pistola Magnum, por un ademan de la mujer el joven guardo la pistola

 

-¿Tienen varitas escondidas?-Los dos asintieron- ¿Armas Muggles?- Todos volvieron a asentir-

 

Llegaron al local Ollivanders, la joven derribo a punta de patadas la puerta, los estantes de las varitas de lujo fueron acribillados por piedras haciendo que estas se cayeran, partiendose en mil pedazos.

 

-Alto- dijo Nimra

 

-Zazako, llama la atencion de los presentes- un balazo resono en el negocio, haciendo voltear a los que estaban ahi.

 

-No intenten nada raro, que somos gente con mas poder que ustedes, tenemos armas muggles mas poderosas que las varitas de ustedes.- dijo con prepotencia.

 

-Bueno me excedi,pero se entiende ¿no? Buscamos a 2 personitas porque nos robaron algo, si se lo preguntan, a mu me robaron un collar, a ella un anillo-dijo señalando a Tamayata- y a el 1000 galeones junto con 2000 sickles-dijo señalando a Zazaka-Sin mas preambulo quiero que me digan si saben algo de Jeremy Black Haughton, si no es posible esa informacion quisiera saber donde esta Blackimse Black- dijo gritando la bruja- Si no quieren que esta tienda quede reducida a escombros diganme donde se encuentran-

 

Los jovenes fueron a los otros estantes donde habia otras varitas, listos para tirar cada una de ellas.

 

Afuera de esta tienda un elfo temblaba de pies a cabeza sabiendo lo que se avecinaba para el amo Jeremy, el elfo desaparecio rumbo al lugar donde se encontraba Jeremy.

[Mei Black Delacour]

Solange

 

Mientras Solange esperaba a que la dueña del local y el otro muchacho le contestasen algo, algo que no esperaba en su primer día de trabajo sucedió. La puerta del negocio comenzó a ser aporreada a patadas, y para cuando se abrió por fin, la pelirubia actuó con un reflejo.

 

Viendo que varias piedras se dirigían a los estantes que contenían las varitas a vender a la gente, la muchacha apuntó hacia ellas.

 

–¡Impervius! – dijo con energía, a lo que las piedras se detuvieron en el aire y cayeron luego al suelo, quedando inertes ahí.

 

Solange miró a los tres jóvenes que habían ingresado al local de aquella forma tan atropellada y que, increíblemente, amenazaban a los presentes diciendo que poseían poderosas "armas muggles", mucho más que las propias varitas, algo que la pelirubia halló totalmente incrédulo.

 

–Ninguna de las personas a las que buscan de manera tan atropellada se hallan aquí – les contestó la chica con voz amenazante mientras apuntaba alternativamente a los tres. Aunque no sabía exactamente a quiénes buscaba y si realmente se hallaban allí, como era su trabajo proteger el lugar y las personas que se hallaban allí no permitiría que les sucediese algo –. No creo que sea prudente su accionar, por lo que les pediré que se retiren sin problemas, por favor – agregó, esta vez con un dejo de autoridad en su voz que pocas veces había conocido en ella misma.

[Ada Camille Dumbledore]

La conversación con Solange era agradable y depronto el ruido de la puerta siendo azotada les hizo sobresaltar, instintivamente protegí con mi cuerpo a mi hijo y lo empuje hasta el cafetín con su hermana dejandoles allí. Se percato que sus hijos no salieran del cafetín y con un ademan de su varita la cerro de un portazo para mantenerla a salvo y hechizandola para que no salieran.

 

Entonces escucho un estruendoso ruido y las palabras de un joven que buscaba a un mago que según él le habia robado a él y a sus dos compañeros.

 

Algunas cajas de varitas cayeron, mia amadas varitas, con una leve floritura las envie hacia la parte de atras para que no se dañaran, ni nadie las pudiese tomar.

 

- No se a quien solicitan, pero no conozco a esas personas!

 

Sabia sobre armas, sabia la proporción de perforación de una bala, como los organos sucumbian ante ellas. Solange estaba ya con su varita en la mano y la Dumbledore también hizo la suya preparada para cualquier ataque.

[Sol Lestrange Black]

Llegué de inmediato como atraída por una alarma, el ambiente del lugar era extraño, algo no estaba bien. Sin mucha ceremonia me dirigi a al cafeteria a buscar a Selene y sus hijos, el ambiente era demasiado tranquilo lo cual no me pareció normal.

 

- Niños es hora de irnos...- apenas vi al par de chicos que esperaban en el lugar a su madre, mi sexto sentido parecía estar alerta, por lo que me acerque a Gellert Dumbledore y Luna Cristal, tomándoles pos el brazo para salir de ahí.- Mamá nos alcanzara en casa...- dije intentando tranquilizarlos, tendiéndoles una mano a cada uno, que aunque algo confundidos me tomaron enseguida- Listo mis niños Vamonos...- Una luz blanca nos envolvió a los tres sacándonos de aquel lugar, esperando que nada malo pasara y que pronto pudieran ver a su madre.