Wishes Banned & Strange Passions (MM B: 80297)

[Kahlan Blackthorn]

Haise Malfoy

Por fin había logrado escabullirse del ojo clínico y avizor de Aryma, jamás le dejaba ni a sol, ni a sombra. Estaba más lampareado que un burro en primavera y eso que no se encontraba enamorado de ninguna fémina en particular, había aprendido a transformar su corazón en un condominio de varios pisos. Era más sencillo romperle el corazón a la mujer que se atreviera a meterse debajo de sus sabanas e intentar colarse mucho más allá de lo que implicaba una noche pasajera de pasión y desenfrenó.

— Tuve una excelente maestra, ¿no lo crees Black Lestrange?—desviando su vista hacia la mujer encapuchada que le acompañaba. Se mantenía en un perfil bajo sin desear llamar la atención de nadie en particular, le gustaba ser como las serpientes y acechar a su presa con sigilo y determinación. Su presencia dentro de Londres era similar a un relámpago, surcar el cielo con su estruendo y desvanecerse como lo hace el humo al ser arrasado por una fuerte ventisca.

El silencio de la vampira, le mantuvo sereno por un breve instante. Percibiendo que el mismo era secundado por un gélido escalofrío que le erizaba los pelitos de la nuca. Black Lestrange, no emitió una sola palabra ante su cuestionamiento, posiblemente porque estaba sumida en un profundo trance, provocado por la conexión que el mundo de los muertos mantenía con ella. Las voces de los caídos resonaban en su cabeza como las campanadas que llamaban a los feligreses de un pueblo cercano, clamores de dolor acumulados en un pozo sin fondo.

Su karma personal, pero no le atormentaba en lo más mínimo escuchar a todas horas, vitoreos teñidos de carmesí y plegarias que jamás obtendrían la respuesta que deseaban. Era un castigo dado por el dios de la muerte, no había mejor forma de morir que esa, abrazados por las llamas de averno que serían su cobijo eterno. Velo que cubría los ojos de las almas, intentando sin éxito darles un remanso de paz o serenidad perecedera, nada era del todo definitivo cuando el destino de estás estaba en las manos de la Nigromante.

[Ada Camille Dumbledore]

La noche me daba abrigo para salir a tomar un trago y de paso hacer unos asuntos que tenia pendiente, la protección de mi familia era primordial y después de dos intentos de asesinato, uno de ellos que casi me cuesta la vida, decidí manejar mi seguridad mas en serio. La loba huargo a mi lado era parte de esa seguridad, Shasa estaba entrenada para ser mi compañía y solo atacar en casos extremos en los que podría estar en peligro. Llegue al local, me observe un poco: un vestido negro con los hombros destapados con manga en campana, el cabello suelto y con la falda a mitad de pierna un velo caía en la parte posterior biselado dándole elegancia. Deje la loba en la puerta del local y dándole una suave caricia en el lomo y las orejas.

 

- Quédate aquí mi dulzura, volveré en un rato

 

Ingrese al lugar se veía oscuro y apenas luces tenues alumbran el camino hacia la barra, allí mirando al Barman sonreí de forma encantadora.

 

-Bonne nuit , dame un Black Rusiann, a esa mesa apartada por favor

 

Deje varios galeones a su manos y me retire hasta la mesa, tomé asiento y me relaje hasta que llegara a quién esperaba.

@ Lord Cubias

 

 

 

[Lord Cubias]

Luego de la cena auspiciada por el ministerio de magia francés, Cubías había logrado establecer un vínculo con @ Ada Camille Dumbledore  aunque hasta entonces se tratase únicamente de una relación estrictamente diplomática. Sin embargo, esa noche la cosa podía encausar un rumbo distinto, pues ambos habían quedado de entablar una nueva reunión más privada y con menos personas que entorpecieran sus plática y posibles negocios...

El destino de aquella reunión era un negocio el cual Cubías no conocía y ni siquiera había escuchado hablar de él, pero le pareció una buena oportunidad para estrechar aquel vínculo y a lo mejor pasar un buen rato, después de todo y entre tanto ajetreo no había podido tener un momento de relación para él. 

El Malfoy Triviani ingresó al recinto, iba ataviado de manera casual; un pantalón negro ajustado a las piernas y una camisa blanca de botones que marcaba su cuerpo cuando realizaba ciertos movimientos. Observó los alrededores hasta fijar la mirada en su objetivo, la chica estaba sentada en una de las mesas del lugar, de inmediato Cubías dirigió sus pasos hacía ella.

-¿Te acompaño?- preguntó al tiempo que obsequiaba una media sonrisa a la joven, sin esperar respuesta Cubías tomó asiento muy cerca de ella e inmediatamente levantó la mano para llamar la atención y pedir de beber.

 

 

 

[Ada Camille Dumbledore]

El sonido de la música en ocasiones era ensordecedor, la gente bailaba animada con los últimos éxitos de algunos grupos mágicos de música, reconocía algunos pero no todos los grupos. Solo a un joven cantante Francesa Ángeles, que cantaba a dúo con alguna otra británica. No le preste mayor importancia hasta que el trago llego a mi mesa, una delicia de cóctel, agradecí a la mesera con mirada de satisfacción y lleve el vibrante liquido a la boca. Estaba frío y sentí como bajaba por la garganta erizando mi espalda, era un cóctel que disfrutaba y no en todos los sitios podía hacerlo y hoy debía estar vivaz.

La voz de un caballero me distrajo, conocía esa voz, volteé despacio para encontrarme con unos ojos negros y profundos que me observaban con entusiasmo, sonreí con algo de picardía, en ese lugar podíamos dejar un poco la formalidad de la diplomacia y podíamos ser un poco mas nosotros. Tomo asiento cerca de mí y observe su vestimenta, muy elegante y me vi reflejada, así fuéramos a cualquier lado siempre iríamos bien vestido. Me reí llevando mi mano a la boca.

 

-Un placer verlo Monsieur Ministro, me adelante para probar un trago que aprecio mucho.

 

Vi como la mesera se acerco y espere a que pidiera lo que le apetecía.

 

@ Lord Cubias

 

 

[Lord Cubias]

El servicio fue inmediato, a penas terminaba de bajar la mano cuando la  mesera llegó por el pedido -Johnny Walker, seco- exclamó Cubías a penas moviendo sus labios, como si aquello le pesara o como si no estuviera seguro de su elección.

De inmediato volvió su mirada hacia la joven contiguo a él, por un momento se limitó a no decir nada y simplemente observarla, debía de confesar que el vestido negro le lucía bien, pero Cubías optó por no hacer un cumplido tan comprometedor y simplemente le respondió el saludo.

-il piacere é mio- dijo con un poco de malicia en su mirada y exagerando el acento, en seguida agregó. -¿qué tan larga crees que sea esta noche?-

[Ada Camille Dumbledore]

El caballero italiano estaba elegante y parecía estar a gusto en el lugar, no era un lugar que frecuentara pero si conocía a los propietarios y sabia que no era un bar sencillo, estaba muy bien situado en Londres además de estar lujosamente adornado. Me fije en el hombre a mi lado y me hizo reír sus acento italiano, tenían cierto encanto y recordé la leyenda de casanova, que justamente relataba las aventuras de un astuto amante italiano en la ciudad de Venecia, era de allí que el lenguaje italiano y la piel dorada por el sol eran algo típico de la estirpe. Me reí y disimule con mi copa, me traicionaban mis propios pensamientos por falta de ir a la playa a distraerme. 

-    Así que whisky escocés… es buena elección, suelo ser mas de vinos, de hecho aquí cerca esta la cava. En Italia que se acostumbra a beber, ¿Vino o consumen algo mas?

Algo me hizo despertar: me habia recargado en mi mano y lo miraba demasiado, pero recordé porque estaba allí,  así me reincorpore, pues me había ido por el apasionante tema de los vinos que tanto amaba. 

 

-Perdón olvidaba que debía hablarle de algo mas serio, debo advertirle de algo que tenemos un problema en nuestra frontera y la realidad es que me toma por tema personal. Existen allí una serie de mercenarios de origen de Europa oriental, su líder es un hombre lobo que busca otros hombres lobos además de convertir hombres fuertes para adiestrarlos y hacerlos de su ejército.  Mi hijo adoptivo, lo protejo después de haber sido traído por su padre para separarlo de este hombre: es el abuelo biológico de mi hijo.

 

Tome un suspiro y un trago largo de la copa de cristal, le había tomado cariño al niño aunque no era sino mi primo lejano.

-La intención de este hombre y su ejercito es dominar Europa, ya domino por un tiempo Rusia y su ejército. Es posible que ustedes se vean afectados también por él y sus intenciones pronto.

 

Lo mire a los ojos mostrándole mi preocupación, además de saber que le advertía lo que podría amenazarlos también. @ Lord Cubias
 

[Lord Cubias]

La mirada que tenía clavada Cubías en Ada fue interrumpida por la mesera que enseguida llevó la bebida que había pedido tan solo un instante atrás. Al ver la elección la joven interrogó al ojinegro sobre las costumbres de bebidas en Italia, la pregunta hizo titubear al Malfoy por un momento, pues realmente nunca había prestado atención a ese detalle, ahí mismo pensó que tampoco es que su vida se hubiese visto ligada a su tierra, pues gran parte de ella la pasó fuera, entonces era válido que no supiera  responder de forma inmediata, pero para no quedar mal intentó dar una respuesta.

-La gente acostumbra muchas cosas, cada quien con lo suyo, pero una buena copita de grappa siempre es una buena elección- Las palabras de Cubías sonaron de forma natural, nadie sospecharía que tuvo que rebuscar en sus recuerdos para recordar el nombre de esa bebida producto de la destilación de la uva. 

Mientras hablaba, Cubías notó que la joven se le había quedado mirando, él tampoco le soltó la vista, por un momento pensó que la conversación tomaría una vía distinta, pero la ministra francesa de inmediato retomó la compostura y le advirtió sobre un peligro que podría atentar contra su ministerio. Aquello que le mencionaba acerca del grupo de mercenarios puso en qué pensar al Malfoy, pero tampoco era una preocupación mayor y así se lo hizo saber presumiendo del poder que tenía en su ministerio.

-Agradezco mucho la información, creo que es muy valiosa, pero no debemos preocuparnos demasiado... cualquier mercenario es poca cosa ante nuestras fuerzas, si Francia necesita un aliado en esa causa entonces debes tener por seguro que nosotros vamos a estar ahí, además creo que nuestra seguridad necesita dar movimiento a sus habilidades- le respondió Cubías, con su respuesta pensó en su colega Illidan y también en Ludwig, quienes seguramente les encantaría la noticia de enfrentarse a mercenarios, después de todo ambos eran sedientos de violencia. 

-Creo que por hoy, podemos relajarnos y no pensar en amenazas, quizá esta noche la única amenaza podría ser yo...- sonrió maliciosamente al decir sus últimas palabras y al mismo tiempo intentó una maniobra para acercarse un poco más a la chica.

 

 

 

 

Editado 24 de Agosto del 2021 por Lord Cubias

[Ada Camille Dumbledore]

Desde el instante en que había conocido a Monsieur Malfoy había sentido una extraña curiosidad por él, no sabía bien si era que se me hacia familiar o de aquellas personas que son interesantes por su vida. Tras mi advertencia me hizo sentir segura por su equipo de trabajo y si era cierto talvez para Italia no fuera una amenaza porque exactamente sabia que los ataques que había recibido eran directamente hacia mi.

Era cierto y bastante lógico que el Ministro quisiera relajar la situación, el sitio nos ayudaba justo a eso, su trago había llegado y aproveche para que ella me trajera algo especial. Cruce la pierna delicadamente y deje a mi mente sacar el estrés y los asuntos pendientes lejos de mis pensamientos. Luego hable por encima de la musica a la mesera. 

 

- Madamme por favor tráiganos una botella de Kauffman Luxury Vintage por favor, hielo, copas y una tabla de quesos y jamones.

 

Sonreí al caballero de ojos negros y lo mire con curiosidad, no sabia si él era conocedor de licores, pero estaba segura que apenas probara ese vodka me daría la razón del porque había hecho esa elección

 

- El kauffman es el mejor vodka ruso, pasa por 14 destilaciones antes de ser embotellado, su producción es pequeña lo que lo hace muy exclusivo al igual que acceder a el, por su precio. El sabor es exquisito, es sedoso al paladar por tener mayor destilado. Lo único es que tiene un 40% de contenido de alcohol, pero no creo que sea un problema para usted.

 

Esperaba disfrutara el trago, quería mostrarle lo maravilloso de ese licor, además de uno de mis preferidos, la mesera llevo a la mesa la singular botella para que pudiéramos disfrutar de tan exclusiva bebida. Me acerque más a su oído para que me escuchara mas claramente.

 

- Y usted no me parece alguien peligroso.

 

Le lance una sonrisa encantadora digna de mi naturaleza de Veela, quería que el se sintiera cómodo.

@ Lord Cubias

 

 

[Lord Cubias]

A Cubías le sorprendió el singular conocimiento de Ada acerca de licores y bebidas espirituosas, cuando la chica hablaba parecía tener un amplio conocimiento en el tema, incluso dio una extensiva explicación sobre la botella que acababa de pedir que el Malfoy no pudo más que asentir con la cabeza y escuchar atentamente la descripción de aquella bebida que parecía muy especial.

En seguida la sorpresa fue mayor cuando la mesera llevó el pedido a la mesa, la silueta de la botella era la perfecta evidencia de su calidad, solo con verla Cubías supo que se trataba de una bebida muggle muy fina, estaba ansioso por probarla.

Cuando la mesera se alejó, la ministra francesa se acercó delicadamente al oído de Cubías para responder a lo último que él había dicho, el ojinegro podía jurar en ese momento que aquello era una invitación un tanto provocativa y decidió mantener el tono por la misma vía.

-Depende la necesidad del momento, puedo ser peligroso, o puedo ser totalmente inofensivo…- Cubías le sonrió y en seguida dirigió su mirada hacia la botella, quería tener un gesto caballeroso por lo que pidió permiso para servir.

-¿Puedo?- dijo, al tiempo que abrió la delicada botella que tenía en frente y empezó a servir en la copa de la joven, también él se sirvió una dosis prudente.

-¿Y que puedo esperar de ese lado?- preguntó Cubías observándola -¿Será que estoy en peligro?- 

[Ada Camille Dumbledore]

 Estaba embebida en el vodka, me agradaba que el se hubiese ofrecido a abrir la botella, era toda una escultura, lo que la hacia coleccionaba y singular para tenerla en el bar de la casa, recordé que la primera vez que la había probado había sido en Berlín durante un encuentro con la cancillería Alemana. Recordé a Anne Marié a quien había dejado en París ayudando en el ministerio, extrañaba a mi mejor amiga. Sonreí y después mire al Malfoy él era alguien muy singular y eso me agradaba, aparte estar embestido con el regir los lazos de un país, era gentil amable y guapo.

 

Observe su reacción cuando me acerque al oído a decirle algo me aleje con un sonrisa pícara y me mordí el labio en un gesto típico de nerviosismo y emoción, cuando me habló sentí una sensación en mi piel que me recorrió hasta la columna, sonreí. Me reí un poco disimulando el nerviosismo

 

- Yo si soy peligrosa… bueno solo cuando quiero serlo, pero es mi naturaleza de Veela, pero… - me acerque estando muy cerca a su rostro – esta noche prometo que me portare bien…

 

Me aleje sin dejar de mirarle a los ojos y dirigí mi atención a las copas llenándolas de hielo y le ofrecí ambos cristales para servir el licor. Mientras los miraba con una sonrisa.

@ Lord Cubias