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Seba Granger

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Mensajes publicados por Seba Granger

  1. Nana, Elfina de Seba


    El Granger le había encargado a Nana esta vez la difícil tarea de hacerse cargo de sacar las cosas que necesitaba del hogar que lo había albergado tantos años. La elfina había aparecido en el cuarto aprovechando la hora que era en la que trabajaban el Granger y la Potter Black, hizo levitar unas cuantas maletas que lleno con las ropas de su amo, algunas pertenencias que tenía en el cajón de su lado de la cama, y luego algunos documentos importantes que estaban en su escritorio.


    Las criaturas por ahora querían en los establos, el amo de la criatura debía buscar un lugar donde llevarlos antes de sacarlos de la comodidad del hogar, Eros estaba enojado, sentía dejar su jardín, pero Dash era el mas triste por que no podría ver mas a la elfina de la bruja, por la misma razón era Nana la que se ocupaba de esos menesteres, era la de mas sangre fría.


    En cuanto tuvo listas las cosas de su amo Nana le dio un último vistazo al departamento y la cocina de este para desaparecer con las maletas del mago.
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  2. Besé con amor a mi novia, abrazándola por la cintura mientras ella bromeaba sobre nuestros elfos, así como íbamos lo mas seguro que se casaran ellos antes de nosotros, -Si, mejor vayamos a ver si esta en casa, sino se me olvidara que es la casa de mamá, aunque ella no esta ahora- dije riendo un poco en tono travieso.


    -Ven vamos a ver donde esta mi hermana, este lugar es grande así que tiene mucho lugar por donde meterse- sabía que no era una pequeña que se escondiera, pero nunca se sabía cuando alguien quería jugar.


    Abrí la puerta del cuarto para permitir la salida de Darla y en seco me encontré con una elfina, -Hola, disculpa si te asuste- sonreí al ver que esta había retrocedido un poco, escuché el mensaje que esta nos entregaba de parte de la señorita Ada, tallé un poco mi barbilla al escuchar el nombre.


    -Digale que estaremos ahí a la hora señalada- eso pasaba por estar alejado un poco de mis hermanos, que se los hubiera llevado a otro país mi madre complicaba un poco, no nos habíamos visto tanto como hubiera deseado.


    Sonreí a la elfina cuando se retiraba girando hacía Darla que estaba tras de mi, apoyé mis manos en el umbral de la puerta bloqueando la salida, -Nos quedamos algunos minutos- sonreí travieso, -¿Se te ocurre algo?- seguí bromeando mientras le coqueteaba.
  3. Dash, elfo de Seba

     

    Dash se quedo pensando unos segundos cuando la joven le decía que buscaba a los amos, ambos aun no llegaban pero por la hora que indicaba uno de los tantos relojes que colgaban las paredes del local seguro que pronto llegarían del trabajo, Dash siguió columpiándose en sus largos pies.
    -Los amos no se encuentran en este momento, pero si gusta los puede esperar, Dash cree que deben estar por llegar- el pequeño elfo del Granger vio que Tommy iba en su ayuda, -Si gusta Tommy le puede indicar donde puede esperar, mientras Dash va por ellos- señalo al elfo de la ama Darla, él sin dudas estaba mas acostumbrado a atender a la clientela.
    Dash le hizo una reverencia, dejo a la joven con Tommy y salía raudo por la puerta del local en busca de sus amos, en cuanto estuvo en la calle desapareció para así aparecer donde se encontrara la pareja.
    Seba Granger
    En la heladeria
    El helado había tardado un poco mas de lo que había esperado, así que al final habíamos decidido con Darla pedirlo para llevar, cuando estábamos apunto de pagar Dash se apareció a mis espaldas, me preocupo un poco que lo hiciera.
    Le dí el dinero a Darla para que pagara mientras hablaba con mi elfo, este me indicaba que había una señorita que los esperaba y solo en ese momento había notado que no le había pedido el nombre a esta, bajo la cabeza un poco avergonzado.
    -No te preocupes, Darla paga y vamos a casa- le respondí al elfo el cual desapareció al instante.
  4. Observaba mis zapatos en el césped como se humedecían un poco sin dañar el cuero por el esmalte que estos llevaban, de eso se encargaba Dash cada tarde de pulir los zapatos hasta las zapatillas aunque lo último me parecía un poco de exageración. Una voz llamo mi atención, sabía que la bruja la había visto antes, creo que en la gala de San Valentin, ella compartía mesa con Sagitas sino estaba mal informado.
    Extendí mi mano y tomé la de ella con delicadeza, -Buenas tardes señorita Ela- cuando dijo que era la prima de Cye recordé que así se había presentado en aquel evento.
    -¿Como esta usted?- seguía a la joven hacía donde me indicaba, -¿Cye no se encuentra presente?, andaba caminando por el callejón y se me ocurrió pasar a verla- me encogí un poco de hombros extrañando no fuera ella la que me había recibido.
    -Espero que le haya contado cosas buenas- sonreí un poco, -Llevamos muchos años de amistad con su prima- esperé que ella tomará asiento antes de hacerlo donde me indicaba.

     

    @@Ela Karoline

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  5. Aviso como parte del equipo de Duendes del Banco Mágico de Gringotts, que el 06 de Junio se ha efectuado el depósito de los sueldos correspondientes al mes de Mayo 2020 de los siguientes usuarios:

    • Anthony Ryvak Dracony
    • Arya Macnair
    • Demian Luxure
    • Eobard Thawne
    • Ernest Macnair Wilfred
    • Hayame Snape Potter Black
    • Hessenordwood Crouch
    • Juliette Macnair
    • Maida I. Yaxley
    • Nicole Evans Crowley
    • Oriánthi
    • Randal Ravenclaw
    • Sherlyn Stark
    • Syrius McGonagall
    • Bodrik
    • Edmund Browsler
    • Feyre Rhiannon Macnair
    • Roxanne W.
    • Isabella Hawthorne

    De acuerdo con el escalafón y número de posts indicados por su perfil.

    Atentamente:
    Seba Granger

    Duende del Banco Mágico de Gringotts

  6. Dash, elfo de Seba

     

    La campanilla de House of Books acababa de sonar y no la habían detenido eso significaba que no eran sus amos, Dash justo había salido por la puerta hacía la cocina del local luego de buscar a Nana en el departamento y no dar con ella, regreso en sus pasos en cuanto la escucho, asomo un poco la cabeza y luego su pequeño cuerpo completo, miró hacía el piso de arriba por si Leto se asomaba pero como no lo hizo se adelanto para atender.

     

    A Tommy le había parecido verlo salir hace un rato pero no estaba del todo seguro, y Lualu sabía que estaba en las bodegas por que ahí la había dejado cuando había venido por Nana para ver si la comida estaba lista, todos sabían que Eros no se asomaba por el negocio a menos que fuera para salir a la calle y no desaparecía desde el mismo jardín.

     

    -Buenas tardes señorita, soy Dash, busca algún libro? o a los amos del hogar?- preguntó este moviendo las orejas, no recordaba haberla visto antes por el lugar, pero tenía una esencia que le parecía conocida, -Si me permite Dash le puede ayudar- espero la respuesta de la joven como de costumbre columpiándose en sus pies como solía hacer cuando estaba nervioso por eso era Tommy o Leto los que atendían al público.

     

    @@Ada Camille Dumbledore

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  7. Escuche lo que decía de la chica que trabajaba desde hace un par de meses en el kiosko, -Me encantaría compartir la mesa contigo, y mi vida si quieres- sonreí travieso, mientras le roba un maní que esta recién había pelado.


    -Si quieres compartimos el postre también- susurré para los dos para no ser escuchados por la rubia que estaba en el interior del lugar, se alcanzaban a ver unos pelos dorados por la ventanilla, -¿Como estas mi amor?, hace rato que llegaste?- tendí los girasoles frente a ella.


    -¿Te los cambio por un beso?- sonrió cual novio embobado y estiré la trompa lo que mas pude hasta que recibí mi recompensa.


    -¿Ya te ofrecieron algo de comer?-miré a todos lados esperando ver al compañero de Tania pero no lo veía por ninguna parte, -¿Donde esta Michael?- alce un poco la voz para que se asomara de inmediato la joven bruja.


    -Buenas tardes jefe, esta por llegar, andaba comprando algunas verduras para las pizzas vegetarianas, ¿Van a comer ahora?- miré a Darla luego a la chica de nuevo, -Danos unos minutos, te avisamos- regrese la mirada a mi prometida.

  8. Nana, elfina de Seba

     

    La hora iba pasando con rapidez, los amos deberían estar en casa muy pronto y la elfina se esmeraba por preparar la comida para la merienda, como siempre poca ayuda recibía de los otros elfos para el gusto de la elfina, Dash desde que andaba enamorado de la elfina de la señorita Potter Black ya no pasaba tanto en la cocina como solía hacer.

     

    La criatura refunfuñaba cada cierto tiempo mientras cortaba los vegetales para el guiso que iba hacer, las papas ya se estaban dorando al horno, y el postre cuajaba en la maquina que refrigeraba como ella siempre le había dicho, aunque el amo siempre lo corregía de cual era su nombre en el mundo muggle.

     

    La elfina dejo cocinando a fuego lento el guiso y llevo los platos flotando en una bandejas con copas, servilletas y servicios que ocuparía para acomodar la mesa para los amos, así cuando llegaran todo estaría preparado, al pasar frente al reloj que indicaba donde estaban los integrantes del hogar se dio cuenta que el amo Seba y la ama no llegarían a la hora indicada.

     

    Casi maldijo por lo alto pero recordó que los otros elfos la podrían escuchar, -Nada cuesta avisar, nada cuesta avisar a Nana que no vendrán a comer, Nana trabajo un vano una vez mas- llevo la bandeja de vuelta de malas ganas y casi la arrojo sobre la mesada de la cocina, apago el horno y la estufa y se fue a su cuarto, si los elfos querían comer se tendrían que calentar solos, -Pero ya me oirá ese niño que no puede avisar- decía en voz baja refiriéndose al Granger.

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  9. Sonreí al oír que si quería que fuera su esposo, ya veníamos hace rato pensando en hacer la boda, la última vez había sido en la gala de San Valentin que para variar no había sido todo lo romántica que esperábamos, pero juntos siempre podíamos hacer que un mal momento se convirtiera en algo maravilloso o cercano a ello.
    -Siempre juntos mi amor, contra viento y marea, si el destino nos junto en el momento preciso es por algo, yo no iré contra el- sonreí feliz de aquel día que nos habíamos reencontrado y siempre lo escogería como mi día de suerte.
    -No temo por la cercanía, hay que tratar de hablar con los invitados desde mañana mismo si te parece, y así nos aseguramos de que todo sea perfecto, sobre mi madre no te preocupes, iré por ella a donde sea- la Dumbledore me había prometido que estaría el día especial para ambos, era su hijo y Darla su tía, así que estaba casi seguro que ahí estaría.
    -¿No creo que deba pedirle tu mano a Sagitas o si?- mordí mi labio un poco preocupado por eso, sabía la relación que tenían ambas.
    -Creo que necesito ese helado estoy empezando a sudar y ni calor hace- reí un poco con Darla aun en mis brazos, -¿Estas bien?, perdón la forma de plantearlo- me refleje en sus ojos.

     

    @@Darla Potter Black

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  10. Apareciendo en el castillo...

     

    La idea de llevarla desnuda a mi cuarto no me parecía nada malo, en realidad a nuestro cuarto ella era parte de mi, aunque lo mas seguro es que tendrían que renovar un poco los muebles para que el cuarto pareciera mas al de una pareja, pero seguro ella se ocupaba de darle su toque en poco tiempo.
    Pucheree un poco luego de su beso al ser tan lento y no llevármela antes, la Potter Black ya estaba casi vestida cuando llegaba a mi lado, -Anda, vamos a nuestro segundo hogar, y si, mi madre creo ya no esta, tengo que hablar con Luna sobre eso, si necesita ayuda con el castillo creo o a mi parecer es muy pequeña aun- reí un poco al darme cuenta lo viejo que estaba queriendo cuidar a mi hermana.
    Tomé la mano de mi prometida desapareciendo hacía el ala oriente del Castillo donde se encontraba mi cuarto y una pequeña salita que usaba a veces de escritorio, o al menos eso era cuando había pasado mas tiempo allá, desde que me había puesto el negocio con Darla, me había cambiado al departamento, y poco tiempo después comenzábamos a vivir juntos.
    Sonreí un poco bobo al pensar todos los años que llevábamos juntos y al fin daríamos el paso. Aparecimos en el medio del cuarto, el olor un poco a encierro llenaba mi nariz, solté por un instante la mano de Darla para abrir las ventanas de par en par.
    -¿Estas bien?- pregunté como cada vez que desaparecíamos juntos, -Creo que debí pedirle a Dash que viniera antes a ventilar el lugar- bese sus labios con ternura.
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  11. -¿Estas segura que quieres mandar a esos dos? creo que es mas seguro que Nana con su mal humor nos diga lo que pasa a que los hagan esos dos, además con lo unidos que están lo mas seguro que se pierdas ellos- levanté una ceja por unos instantes, -La verdad me gustaría saber que hacen esos dos tanto que se desaparecen, ¿Los elfos tienen bebés?- reí un poco con la idea, pero en realidad no sabía muy bien sobre el desarrollo de esas criaturas.


    Me sonroje un poco cuando Darla me seguía el juego y se refería a mi como sexy, no estaba seguro que lo fuera pero al menos lo intentaba para complacer a mi mujer como se debía, la pregunta del elfo que hacía Darla me regresaba a la mesa.


    -¿Tu dices como los nuestros cuando no se ven tras el mostrador?, podría ser y nosotros no lo hemos visto- tendí la mano a Darla para acercarnos a mirar quien nos podía atender, y creo ella recién caía en mi cambio de giro, se detuvo en seco con mi mano en la de ella.


    La acogí en mis brazos cuando esta se lanzaba a mi dejándome comer a besos y respondiendo como podía con los míos, -¿Aun estas segura que me quieres de esposo?- me separé un poco sonriendo, -Claro mi amor, algo intimo como siempre habíamos planeado, la familia y los mas cercanos- besé sus labios y sus ojitos aun de pie junto a la mesa.


    -Junio me parece muy bien, temes que me escape?- sonreí un poco por lo cercano de la fecha, -Tendremos que ponernos a ver eso cuanto antes- besé su nariz, luego su barbilla.



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  12. Aun en House of Books...


    El último mes había sido un poco complicado así que por mas ganas que tuviera no me había podido pasar por el castillo de la familia, además que siempre sentía que era muy grande, al menos hace unos años atrás casi eramos Darla y yo los que nos pasábamos para poner en orden y auxiliar al elfo que estaba cuidando la gran edificación.


    -¿Amor me acompañas al castillo?- dije en voz alta a Darla que estaba en el cuarto de baño, -Podemos aparecer en mis habitaciones para evitar el trayecto largo, aprovechemos los beneficios de ser patriarca- sonreí bromeando hacía donde estaba la Potter Black, me acerca al baño y asome mi cabeza.


    -¿Vienes conmigo?, prometo que te divertirás, de eso me encargo yo- añadí un poco mas travieso mientras le lanzaba un beso. -Me parece que mi madre ya no esta en casa, quiero averiguar eso también- mordí un poco mi labio, no había alcanzado a disfrutar mucho de la presencia de la Dumbledore, sabía que había mas gente en casa pero aun no estaba seguro si solo Luna.




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  13. -En eso tienes mucha razón, te elegí a ti, o tal vez tu me mandaste señales- sonrió bromeando un poco, - O mas bien tu al fin me viste como era debido, y pese a lo feito te conquiste- reí un poco mas haciendo muecas.
    -Consté eh? que llegando a casa te cuento algunas fantasías que se me acaban de venir a la mente, tiene algo que ver el helado para que te prepares, sabía que el pote que había en el refrigerador nos serviría pronto- reí un poco mas mientras cogía su mano y jugaba con sus dedos.
    -¿Tenemos un tesoro y no me habías contado?- me encogí de hombros un poco, -Mis brazos son suyos, bueno todo este cuerpecito es de su propiedad- señale con mis dedos mi cuerpo de arriba abajo.
    -Creo que tendremos que acercarnos al mostrador para pedir, por que no veo a quien hacerle señas- miré hacía varios lados, alzando un poco mas mi cuello por sobre Darla.
    -Pasando a otra cosa, creo que deberíamos fijar ya una fecha- le di un cambio repentino a la situación, hace ya unos meses que no habíamos tocado el tema, pero creo que podríamos aprovechar que mi madre había regresado para al fin hacerla mi esposa.
    -A menos que ya no quieras- puse una cara triste y un puchero.

     

    @@Darla Potter Black

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