Jump to content

Axel Rexdemort

Magos Expertos
  • Mensajes

    4.273
  • Ingresó

  • Última visita

  • Días ganados

    14

Todo lo publicado por Axel Rexdemort

  1. Axel tragó saliva, mientras continuaba con la mano en el aire. Poder controlar el flujo de magia desde la punta de su varita hasta las cuidadas articulaciones del caballero de metal, no era tan sencillo como parecía. Una pequeña y casi transparente gota de sudor caminaba lentamente por la sien de Axel a la par que la armadura avanzaba. Sus negros ojos se enfocaron el aquel objeto ignorando un poco a las personas que se encontraban en la biblioteca, cada que movía la varita para que la armadura moviera una extremidad Axel lo calculaba casi quirúrgicamente, le preocupaba no poder superar las expectativas de su amigo. Cerró los ojos fuertemente una vez que la jornada había terminado. Llevó su mano sobre su frente para sentir el sudor y enseguida levantó el brazo para intentar oler su axila, no quería apestar en la biblioteca. Sin embargó fue interrumpido después de una sonrisa confusa. Intentó regular su respiración, subir aquel pedazo de metal había sido una tarea difícil. – Debo estar muy oxidado.- Fue lo que pensó el joven Rexdemort cuando Apolo volvió a aparecer, haciendo un gesto de aceptar con la cabeza cuando Apolo le dijo. Suspiró y tomo aire, una vez que entró con el profesor, para dedicarle una sonrisa. Frunció un poco el entrecejo. La clase de encantamientos le estaba pareciendo dolorosamente difícil. Axel solo culpo de su desmejorada actitud a las pocas horas de suelo. -Gracias.- Le dedico una sonrisa al joven profesor mientras se sentaba cerca de la mesa. Se sentía un poco cansado, para sacudir la cabeza. - Un juego de Té.- Fue lo único que pensó el mago, mientras buscaba en su cabeza alguna idea bonita.
  2. Inclinó sutilmente la cabeza y llevó su mano sobre su sien tatuada. –Takk.- Susurró el joven, para después de un segundo corregirse a sí mismo. – Gracias.- Sin embargo antes de responder algo Apolo hizo presencia como el titular del curso, así que Axel se quedó con las ganas de responderle como se debía a Caroline. Axel devolvió sus ojos a su amigo, al cual miro de arriba abajo y escuchó con atención sus palabras. –Permanecer en silencio y estar callado.- Repasó mentalmente, después de que Apolo señalara aquellas grandes puertas. Axel permaneció de pie mientras mordió su labio inferior, era una tarea extraña. Sacó su varita y dio un ligero golpeteó contra el aire. –Locomotor.- Susurró para sí mismo prestando atención a toda la explicación, mientras caminaba detrás del mago de cabello azul. –Mmm… 2 metros.- Pensó el chico Rexdemort al contemplar la gran armadura de hierro fundido la cual sería parte de la tarea. – Que maldito.- Sonrió y moviendo la cabeza de izquierda a derecha. Encantar un objeto así para que “caminara” requería precisión y algo de maña. Y siendo honestos Axel tenia años sin usar ese hechizo. Se acercó mirando la armadura, contemplando el grosor de las piernas y usando sus dedos para palpar y adivinar el metal con el que estaba hecha. Con su sonrisa bajo aquella barba negra, Axel analizó la tarea y las posibilidades de fallar. Con su mano izquierda apuntó al brazo de la armadura y susurró el hechizo requerido. Levantó poco a poco la varita mientras la armadura azul se erguía enfrente del joven danés. El crujir de las piezas de metal que chocaron provoco un sonido hueco y débil mientras lentamente la armadura levantaba el brazo que Axel había apuntado. -Diablos.- Susurró al percatarse que no era una misión sencilla, debía continuar con el flujo de magia para volver a bajar el brazo y no provocar un sonido estremecedor. – Diablos.- Repitió el hombre, una vez que logro que la armadura bajara el brazo. Necesitaría una precisión envidiable si quería que aquel montón de chatarra subiera escalones en completo silencio. Apretó la mano sobre su varita y empezó moviendo lentamente la pierna derecha, intentando no crear un caos en la biblioteca.
  3. -No puedo creer que ese niño ahora sea profesor.- Suspiró lentamente mientras una nube de humo gris aparecía enfrente de su rostro. Agitó la carta en su mano izquierda la cual desapareció en llamas. Axel se levantó de su cama para buscar algo de ropa cómoda, tomando un jogger gris para inmediatamente desaparecer. -Meget Smuk- Susurró el hombre mientras sus ojos bailaban de derecha a izquierda, la gran colección de libros era impresionante, ver tantos tomos y tan diversos no solo los temas sino los materiales le parecía increíble. Axel un coleccionista de objetos muggles no tenía una afición por coleccionar libros, pero en esa biblioteca había algunos ejemplares dignos de una vitrina o una subasta en Praga. Mientras saciaba su curiosidad en libros de magia negra que hablaban de Nigromancia, Axel no pudo evitar suspirar. Era una situación rara, Apolo seria su profesor. Sonrió para sí mismo, su joven amigo realmente estaba progresando para ser reconocido por la Universidad como profesor. Y por fin lo encontró. Llevó su mano sobre su negro cabello para pasarlo por encima de su oreja, saludando con la cabeza de arriba abajo. –Hej.- Exclamó el sujeto al notar a una mujer. La amarillenta sonrisa del tatuado apareció inmediatamente al ver a su amigo acercándose a ellos. -Eh… Hej.- Levantó la mano izquierda, después de escuchar la primera indicación de Apolo. – Eh… Yo soy Axel.- Su grave voz fue clara y observo a los ojos a la mujer que los acompañaba. – Mucho gusto.- Terminó el tatuado.
  4. Nick: Axel Rexdemort ID: 11499 Conocimiento: Encantamientos / Idiomas Nivel de Magia: 24 Link a la Bóveda: http://www.harrylatino.org/topic/78301-boveda-de-axel-rexdemort/ Link a la Ficha: http://www.harrylatino.org/topic/78155-ficha-de-axel-rexdemort/ Cualquier de los dos conocimientos me gusta, entonces de preferencia me gustaria no estar solo (no me gustan mucho las clases de 1 profesor y un solo 1 alumno xD) asi que lo dejo a consideracion de los directores ademas prometo no gastar ningun galeon, despues me quedo pobre xD GRACIAS!! :3
  5. Iris clavo su mirada en el rostro del hombre en silencio. – Bonita estructura ósea.- A continuación llevó su mano sobre su barbilla mientras su cigarro desaparecía en la otra. – También tienes una nariz afilada.- Y con la punta de su dedo índice delineo sobre el rostro del sujeto. Podríamos arreglar esos pequeños detalles con algo de maquillaje, algo ligero. Un poco de contorno en tus mejillas.- la viuda Apfel parecía que hablaba sola mientras hacía un análisis sobre el rostro del hombre. La mujer sonrió bajo esos enormes lentes rojos. Un ruido llamo la atención de la señora, lo que hizo que despegara por un instante la mirada sobre Lestat. – Un momento mi vida, parece que el inútil por fin llego.- La mujer giro y movió su enorme abrigo negro de una forma que podría considerarse muy dramática. Con ese andar pausado, Iris se encamino hacia la recién llegada. – Hermoso cabello.- Fue lo primero que pensó la vieja bruja. Iris en su juventud nunca fue una mujer bella siendo honestos, no fue hasta que cumplió 40 años cuando su esposo murió que empezó a enfatizar sobre la belleza exterior, entonces al ver a una mujer tan bella, le recordaba sus tiempos mozos. -Oh por dios. – Se acomodó el marco de sus anteojos, eran dos mujeres. La otra aunque más pequeña también era muy linda. – Bienvenidas jovencitas. – Para Iris todas las mujeres eran jovencitas. Se acercó y dio un beso en la mejilla a la rubia, aunque realmente solo hizo el sonido del beso, no quería gastar su lápiz labial en las otras personas. -Que linda eres.- Para acercarse a la segunda, si bien no era tan alta tenía un toque tímido y un aire inspirador muy a lo Sedwick en su juventud. Llevando sus manos sobre el cabello castaño de la mujer. – Un bob largo te haría ver juvenil.- Dijo inmediatamente. – Ahh perdón.- Se disculpó casi instantáneamente, por invadir el espacio personal de aquella mujer. Iris era tan confiada que a veces pecaba en eso. -¿Les interesan estas chucherías? – Demando la anciana dando un par de pasos hacia atrás, mirando con un poco de desprecio la mercancía sobre la cubierta. – Calaveras, parches, patas de palo.- Envolviéndose en su enorme chaqueta negra la que hacia resaltar los collares de ámbar y jade sobre su pequeño cuerpo. -Ustedes jovencitas, necesitan algo más elegante.- Girando un poco la cabeza y meneando ese corto cabello blanco. – ¿Quieren ver la colección privada? – Cruzando los brazos, tomando con cada mano a una de las mujeres y las arrastro (considerando su cuerpo pequeño) -Ahorita regreso contigo guapo.- Gritando mientras llevaba a las mujeres de la mano hacia una puerta que bajaba de la cubierta. – Un hombre muy guapo, aunque algo callado. Cuidado con el primer escalón. – Iris las llevaría a la habitación principal donde Axel guardaba su colección de armas, vestidos y joyas antiguas.
  6. Yo de nuevo!!! Hola guerreros! hoy vengo con una duda duelistica que me surgio con mi duelo contra Bakari Bakari me respondio hace unos dias que el utlizar el libro del caos no cuenta como accion, o por lo menos yo asi lo entendi que puedes usar el libro del caos y tus dos hechizos no? Bakari por ejemplo en el duelo tenia dos acciones, una que fue "negada" por mi confundus y despues un protego para tapar el ataque del trol que el mismo invoco con ayuda dle libro del caos, estoy bien? La duda me surge por la siguiente condicion. La situacion es simple Ya van varias veces que utilizo el libro del caos, Señor del caos precisamente. y que gano en la suerte e invoco a la Ninfa, o el efecto de sanacion dle señor del caos La descripcion dice que la Ninfa otorga una curacion tipo "episkey" pero muchas veces no se utiliza por que mi personaje no esta herido, aqui es donde viene mi duda, con los tiempos Yo puedo utilizar la sanacion de la ninfa en cualquier momento de mi turno que la invoque? pongo un diagrama posteo señor del caos y sale la ninfa en mi siguiente posteo, tengo que empezar el rol con la invocacion de la ninfa o puedo dejarla hasta el final? Por ejemplo -Posteo anterior, ninfa - Usuario A - Ataque - Usuario B - contra ataque - Usuario A- invoca ninfa, se cura, ataque 2 se puede hacer eso?? por que yo pensaba en mi duelo con Bakari, utilizar la Daga del sacrificio y despues sanarme usando al señor del caos es posible algo asi - Yo - Confundus- - Bakari- Invoca trol, Confundido pierde la accion- - Yo - Daga del sacrifio, me autohiero para lastimar a bakari - Bakari - protego se defiende del trol se lastima con la daga - yo - invoco señor dle caos, sale la ninfa o el señor del caos que cura, y me curo sin gastar accion del turno esta pequeña tabla puede ser utilizada asi? en el duelo original no hice eso, pero me entro la curiosidad de como utilizar a la ninfa, ya que antes de hacer el post, cuando lanzas los dados ya sabes lo que resulta. -------------------------------- otra idea loca seria esta Primer par de posteos seria algo asi EMPIEZA EL DUELO 1er posteo A - Usuario A - Ataque (digamos expeliarmus) 1er posteo B -Usuario B - defiende protego - Usuario B - ataca (digamos sectusempra) 2ndo posteo A (sin contar por que son los dados) - Usuario A. señor del caos, invoca una ninfa - Usuario A - ataca expeliarmus (ambos rayos pegan, usuario A lastimado por sectusempra, Usuario B, pierde varita) -Usuario A, sin perder accion, como su posteo anterior lo dijo, invoco un señor del caos y por la suerte le salio una ninfa - Usuario A, se cura del sectusempra sin perder accion -Usuario A - Sectusempra esta teoria es posible??? ya que la invocacion no tiene accion puede ser utilizadda en cualquier parte del posteo, ya sea antes de la accion 1 o la accion 2, incluso despues de la accion 2?? La tabla quedaria asi? 1.- A - Expeliarmus 2.- B - Protego (se defiende expeliarmus) 3.- A - Expeliarmus 4.- B - Sectusempra (Rayo vs Rayo, ambos pegan, A lastimado por Sectusempra, B pierde varita) 5.- A- invoca señor del caos, ninfa, se cura del sectusempra, no pierde acción 6.- A - desmaius Ya seria de que B contraacaque o se proteja, pero al perder la varita su accion seria recuperarla y entonces no podria defenderse del desmaius quedaria asi la tabla no?? 1.- A - Expeliarmus 2.- B - Protego (se defiende expeliarmus) 3.- A - Expeliarmus 4.- B - Sectusempra (Rayo vs Rayo, ambos pegan, A lastimado por Sectusempra, B pierde varita) 5.- A- invoca señor del caos, ninfa, se cura del sectusempra, no pierde acción 6.- A - desmaius - pega contra B 6.- B - recupera varita, pierde accion, golpea desmaius se desmaya, (necesita usar finite) A gana el duelo eso es posible??? por que B tendria que usar finite para curarse del desmaius, pero A puede intercalar de nuevo y ahora volver a atacar, por ejemplo un cinaede, un seneca, un incarcerus, etc etc, la ninfa le pudo regalar un turno "extra" a A (creo que lo mismo puede aplicar usando la curacion del primer libro tambien no?) o existe un tiempo especifico para estos hechizos de libros? espero que me de a entender xD saludos y gracias a los duelistas que me respondan mis dudas!
  7. ¿Un Trol? – Axel se quedó boquiabierto, observando a la criatura atacar al guerrero. Si algo habia aprendido de Bakari era que el libro del caos poseía una magia tan catastrófica como su nombre lo indicaba. El no estar sujeta a nada racional era precisamente lo que hacía que el libro fuera tan difícil de dominar. El mago apretó la varita entre sus dedos, pensando en cual sería su siguiente movimiento. - Veamos si el caos me sigue ayudando. – Suspiró viendo al enorme trol que estaba entre los dos hombres. Concentró sus pensamientos y agitó la mano derecha dibujando un círculo en aire con su varita. Axel volvería a invocar el caos, precisamente la ayuda de algún Señor del Caos. La oscuridad se materializó rápidamente, un ente oscuro surgió de entre las sombras, el mismísimo señor del Caos. Axel levantó las cejas sorprendido observando a la criatura y suspiró. -Cinaede.- Con un tono de voz bajo y un poco vacilante, el mago continuaría con el ataque cuando el trol se lanzó al ataque de su propio invocador. De una forma digna de un guerrero, pudo ver como Bakari detuvo el ataque de su misma criatura, ahora sería turno de ver como se desharía de ese gas traslucido casi invisible que rodeaba a causa de los pétalos del pensamiento. Cambió de mano su varita, para pensar en su siguiente acción, con el trol atacando Axel podría ganar algo de tiempo. Calculó una distancia prudente acercándose un poco lentamente no quería llamar la atención del trol. -Desmaius.- Axel pronuncio claramente levantando la mano izquierda con la que ahora sostenía su varita, un rayo plateado salió de la punta de su arma, si el rayo le impactaba al guerrero la balanza se pondría de parte del tatuado mago aprendiz.
  8. El joven danés solo suspiro, una parte de él le decía que tener al mismo Bakari de rival sería muy complicado, pero no imagino que verlo por fin de pie enfrente de él, fuera tan intimidante. Mordió su labio inferior pensando en las oportunidades que tendría de enfrentar a un guerrero Uzza cara a cara, mientras que sus ojos revisaban cada parte del terreno. No había ningún objeto cercano, un seco paramo hasta donde la vista llegara. – Tendré que confiar en el libro.- Materializando una vez el libro del caos en su mano derecha. -Necesitare mucha suerte. – Agito la mano derecha, cuando la izquierda recorría las hojas del libro para abrirlo en una sección. – Intentemos una vez más- Colocándose enfrente del guerrero, inclino la cabeza en señal de respeto. -Magt Hjul – Axel invocaría una vez más la rueda del poder, esperaba que esta ocasión la suerte le sonriera. Sintió un cosquilleó en el pecho. - ¿Habrá funcionado? – Se preguntó a sí mismo, agitando la varita para desaparecer el libro. -Confundus.- Pensó el hombre, apuntando al guerrero, si el hechizo funcionaba podría obtener un poco más de poder y confundir al rival. La idea era probar las gracias de aquel libro.
  9. -Aun me duele la cabeza.- Suspiró el joven mago, mientras observaba la madera ya carcomida del techo de su habitación. La luz del sol entraba por la pequeña escotilla que funcionaba como ventana. Axel bostezo y se levantó aun con sueño de su cama. Buscó su varita y transformó una pila de libros en un par de mancuernas. Habían pasado días desde aquel extraño incidente dentro de la clase de la universidad. El joven no recordaba mucho solo que la carrera había empezado y al día siguiente estaba tirado en un campo abierto. Según la serpiente que lo acompañaba todo se había vuelto negro. Axel solo suspiró, ojala pudieran haber terminado la carrera. Terminó sus ejercicios para irse a alistar, una carta había llegado unos días atrás, por lo visto la clase continuaría en Rusia. – Ese maestro es muy divertido.- Leyendo la carta una vez más, preparándose para tomar sus cosas e irse de nuevo. La dirección estaba clara, aunque no estaba muy confiado en viajar desde Inglaterra hasta Rusia en escoba, pero Axel lo vio como una aventura. -- El aire helado lo golpeo directamente en la cara, Axel sonreía bajo aquella gran bufanda gris. Después de horas de vuelo bajo el clima frio, el joven danés había llegado a Rusia, una idea pésima viajar con el clima así pero al menos había podido aprender y repasar los estilos de vuelo que aprendido meses atrás con el profesor Luxure. -Y aun no lo conozco.- Buscando un lugar donde aterrizar, el objetivo era una especie de fábrica de escobas. Axel reviso su mochila en su espalda, mientras localizo el lugar del encuentro. Pero un hombre con un singular cabello verde llamo su atención. -Valla, esperaba verte aquí.- Sonriendo al notar que su compañero Antoni ya había llegado. Para darse cuenta del anuncio que estaba en la puerta. - ¿Gremio del miau? – Rascando su cabeza para leer la adivinanza sin entenderla por completo. -¿Qué se supone que tenemos que hacer? – Preguntó el hombre a su compañero, cuando fue interrumpido por el crujir de la puerta que se abría ante los dos estudiantes. -Yo pensé que era algo como el hilo.- Axel era terrible con las adivinanzas. Entrando detrás de Antoni a la fábrica.
  10. Axel Rexdemort

    Libro del Caos

    Suspiró y tomo aire lentamente, mientras el libro del caos volvía a materializarse sobre su mano derecha. Levantó la mirada hacia la mujer y le dedico una sonrisa para volver a enfocar su atención en el grueso y pesado libro. Buscó con presura en el libro y lo abrió en una sección para intentar repasar la utilidad de la rueda del poder. Los ojos negros del mago intentaban tontamente buscar donde era posible rectificar el error cometido, pero la voz del guerrero volvió a hacerse presente. Axel se quedó en silencio observando el cuerpo del guerrero, en cierto y retorcido modo lo respetaba, un hechicero poderoso no cabía duda. Escuchó con atención. -El caos, esa extraña magia caprichosa.- Levantando el libro en su mano para cerrarlo una vez más. -No sé, si algún un día, yo sea capaz de conocer todos los secretos que se esconden en estas páginas.- Mostrándole el libro al guerrero Uzza, su semblante era sereno pero disfrutaba experimentar con esa magia que no seguía una línea, esa magia confusa y juguetona. La ninfa que se encontraba detrás de su espalda desapareció paulatinamente, girando un poco la cabeza para observar como esta dejaba de acompañarlo. – De hecho alcanzar su nivel es una tarea titánica.- Llevando una mano sobre su nuca para intentar mantener erecta su columna y eliminar aquella minúscula sensación en su espalda. -Los poderes del caos, según mi poca, o poquísima experiencia.- Volviendo a mirar al guerrero Bakari.- Pensar en la oscuridad me sirvió. – Se detuvo un momento en lo que sus palabras inundadas por aquel acento nórdico se escuchaban con claridad. – Mi reinserción en la vida normal fue un proceso doloroso y difícil. La pérdida de un ser amado y de la familia crean más complicaciones de las que uno se puede imaginar, y en mi caso particular, tenía incontables asuntos que tenía que resolver.- Bajando la mirada ahora sobre la cobertura del libro cerrado. – Un poco el dolor, algo de rabia y rencor. – Para volver a ver al anciano hombre que lo instruía. – Supongo que el libro del caos toma las escenas más caóticas de la vida de las personas. Esta naturaleza torcida y juguetona adyacente a la suerte.- El tatuado realmente no sabía como explicar el funcionamiento del libro, conocía los puntos básicos de la invocación con el libro, pero era obvio que Bakari tenía años de superación con los patéticos poderes del mago. Axel rio un poco. – Tampoco soy el mago más brillante o hábil de toda Inglaterra. – Mostrando aquella sonrisa chueca.
  11. Axel Rexdemort

    Libro del Caos

    Axel se quedó abstraído por el aturdimiento observando su arma; aquella varita de madera gris. Cuando la voz del guerrero pareció sacarlo de su transe y al escuchar una a una su pregunta. -¿Mi deseo? – Repitió vagamente, agitando su varita nuevamente. La sonrisa amarillenta del hombre apareció bajo aquella desarreglada barba de días. – Mi deseo es dominar este libro.- Dijo en tono bromista, el joven Rexdemort no pensaba mucho en el futuro, pero algo tenía en su mente. Aprender los secretos del libro del caos y no volver a ver a Bakari. –Supongo que mi temor es el mismo, tres veces ser tu alumno…- Susurrando eso último y rascando su cabeza con sus dedos, llevó su varita a la boca y apareció el libro del caos en sus manos. Sabía que la respuesta no sería la adecuada para el Uzza, pero Axel realmente no tenía ambiciones ni deseos en ese momento de su vida. Suspiro resignado, en el mismo momento en el que abrió el libro y se puso a buscar un hechizo. Cerró los ojos por un segundo, ya sabía como controlar las fuerzas del caos, no era la primera vez que se enfrentaba a eso, ya había pasado por un entrenamiento previo así que su trabajo había rendido frutos. Tomó aire y pronuncio claramente en danés, con su libro en su mano. – Magt Hjul .- Axel intentaría imitar a su compañera y haría el mismo hechizo que ella, la rueda del poder, con un poco de suerte podría ser interesante. Concentró sus pensamientos y el caos haría su trabajo. Anque algo no se sentía tan bien. Axel rio con todas sus fuerzas. – Lort… que mala suerte.- Le dijo a la ninfa que se encontraba detrás de él. Sentía su varita flácida y sin movimiento. El tatuado sentia que el hechizo solo había reducido sus habilidades y la mujer afectado su varita. Podía sentir que su fuerza se había dividió por dos. Agitó su varita sin ningún resultado, no funcionaria. – Gracias.- Suspiró por su mala suerte, mirando a la ninfa detrás de él como si ella fuera la responsable de la rueda dle poder. – ¿Zancadilla? – Dijo apuntando sin poner mucha atención, la suerte era un factor muy importante en el libro del caos, cerrando el tomo purpura en su mano con la mano izquierda y sosteniendo la varita con la otra.
  12. El joven Rexdemort llevó su mano sobre su cabello y suspiro. – Una carrera…- Mirando alrededor en el vestidor y entendió la tensión que se vivía allí dentro, escuchando poco a poco las reglas, Axel tragó saliva y buscó los ojos de su compañero. – Esta muy emocionado.- Pensó el mago, un poco nervioso al terminar de dictar como sería la carrera. Levantó el cuello y movió la espalda intentando relajarse, para encontrar los uniformes británicos. – Valla…- Dijo sonriendo al ver el jersey blanco y rojo con el escudo de la Gran Bretaña. Girando la cabeza disimuladamente. -Un danés participando por el equipo británico…- Suspiro para sí mismo con una leve risa, para ponerse rápidamente el uniforme y los guantes, y seguir a Antoni que estaba realmente emocionado y ya estaba listo. La cabeza del hombre era un caos, pero al salir de los vestidores y ver el estadio, todo eso se le olvido al notar a la audiencia. – DEMOOONIOS.- Se le escapó un grito, cuantas personas estaban reunidas para la carrera. Y una vez más su atención fue robada, está ocasión por algunas criaturas muy extrañas. – ¿Un dragón? – Con los ojos abiertos como platos, el tatuado no podía creer que el objetivo de la carrera fuera proteger a un dragón hasta la meta. Llevó sus manos sobre su cabello, una costumbre adquirida. Notando que la criatura era solo un hechizo. – Oh… lort - Su acento vikingo era obvio, a la derecha noto un gran hipogrifo que movía sus alas para mantenerse rodeado por el equipo de Polonia, moviendo un poco la mirada identifico una esfinge alada por parte de los hombres de Egipto. Sin poder dejar de mirar a aquella extraña manticora con cabeza de león y enormes alas por parte del equipo Ruso. Sonrío por un segundo. – Esto será muy divertido.- Olvidándose de sus nervios la ver a los equipos contrarios, Axel se montó en su escoba y se colocó al lado de Antoni. – Vamos a ganar.- Sentenció aun con la sonrisa en la cara.
  13. Volver a ver a Antoni en aquel lejano lugar fue una muy agradable sorpresa, y su amplia sonrisa sobre su rostro era motivo a la reunión. – Vale, cuenta con… - Se quedó callado de repente. –con…migo.- Un fantasma lento había aparecido enfrente de los dos hombres, una entrada bastante espectacular al atravesar a su amigo. Los ojos negros del chico Rexdemort fueron cautivados por el ente, el cual empezó a hablar, debían de darse prisa si lo que querían era aprobar la primera fase. -¿Qué divertido.- Susurra para sí mismo cuando el espectro desapareció tan rápido como apareció. Axel escucho con atención a su viejo amigo, poniendo atención a los detalles que este mencionaba. – Excelente plan, manos a la obra.- Colocándose por segunda vez los lentes, pudo sentir el aire helado atravesar el cementerio. Axel se subió a su escoba cerrando su chaqueta hasta arriba no quería que Emilie su serpiente se fuera a caer. Empezaron a ganar altura y escuchó con plena atención el plan de Antoni. – Empecemos.- Fueron las palabras del mago, tomando la red que el joven había transmutado. La velocidad aumentaba constantemente, así que implementar el estilo “Equilibrio perfecto” era necesario, Axel se tambaleaba un poco pero planto su pie derecho en el mago de su escoba, necesitaba estar a la altura de su compañero, cuando se puso de pie. Lo más complejo era mantener el equilibro y las manos ocupadas con la red, así mismo más usando trucos pero Axel tenía confianza, le recordaba sus primeras clases con la escoba en las islas Feroés. -Las snitchs.- Fue lo único que pudo decir al sentir el viento contra el rostro, e intentar imitar a Antoni el cual parecía ir un paso delante de él joven Rexdemort, notando que estaban cerca de la red, sus ojos se clavaron en su amigo el cual tomó una rápidamente. Sin pensarlo mucho Axel se lanzó para tomar una para sí mismo, terminando colgado con la mano derecha en la escoba y una snitch en la izquierda. – Hecho!- Dijo riendo al sentir ese viento helado mientras se balanceaba solo con una mano de su escoba. -QUE DEMONIOS.- Gritó Axel al sentir el golpe duro en el trasero al caer en un duro piso. Observo a su alrededor, el cementerio ya no estaba ni el frio clima, estaban dentro de una habitación totalmente desconocida, parecía una especie de vestidor deportivo. -¿Estas bien? – Preguntó el hombre poniéndose de pie, para buscar a Antoni. Dándose cuenta que estaban rodeados de más personas. Extrañado por lo que acababa de pasar, Axel busco alguna respuesta pero todo indicaba que estaban en los vestidores de algún equipo. ¿Sería Quidditch? Su sonrisa no se borró al notar a los demás hombres que los acompañaban. – Supongo que pasamos la primera prueba.- Le comentó a su joven amigo.
  14. Axel miró una vez más de abajo hacia arriba la lista de objetos que necesitaría. Era la primera vez que se anotaba a un curso como lo era Maestría en Escobas, así que no sabía exactamente que llevar. Había conseguido los libros prestados del castillo Selwyn, mientras repasaba todos los libros. – Creo que será interesante, muy interesante.- Dijo en una extraña lengua que parecían silbidos a la serpiente que lo miraba fijamente desde la puerta de su habitación. El tatuado mago le sonrió al animal una vez había guardado los libros en su mochila muggle mientras le ofreció su mano izquierda para que la criatura se trepara en su brazo. El animal le respondió con ese característico sonido. – Vamos anímate, será muy divertido.- Saliendo de su habitación para encontrar la escoba que se tenía afuera. – Vámonos.- Fueron sus palabras cuando el hombre desapareció de su negocio en el callejón Diagon. Axel leyó la nota y miro a los ojos al reptil que colgaba desde su cuello. – Sabes Emilie, esto me emociona, estar tan cerca de casa para un curso.- Dirigiéndose al animal, una vez que habían llegado al aula de la Universidad, si lo pensaban un poco era obvio que tendrían que aprender a volar en un lugar abierto y no en un salón. El chico Rexdemort sonrío para sí mismo buscando el traslador. El aire helado golpeo de inmediato el rostro del mago, lo que provocó una enorme sonrisa y una sonora carcajada. – DIAAAAABLOS, hace un frio riquísimo.- Mientras reía divertido, el aire helado podría congelarle los huesos, era el mismo que sentía cuando vivía en Copenhague o cuando practicaba con la escoba en las Islas Feroés. Entre risas Axel transmuto su chaqueta, para hacerla más caliente y con ayuda de unas hojas de papel que saco de su mochila y su varita, Axel las transformo en una bufanda negra. – Vamos entra aquí.- Abriendo su chaqueta para que su serpiente entrara en el interior, una animal así no sobreviviría en un lugar tan inhóspito. -Por aquí debe estar el profesor, Emilie.- Volvió a decir en parsel el tatuado hombre, cuando miro el lugar con atención un cementerio y el cielo gris le daban ese aire melancólico, Axel estaba maravillado con el lugar de la clase, mientras caminaba entre las tumbas, para encontrar la tercera nota. Axel la leyó rápidamente, y observo a su alrededor, el silencio era obvio pero se podía escuchar un pequeño zumbido. – Deben de ser las Snitchs.- Le comentó a la serpiente, la cual no respondía solo se acurrucaba dentro de la ropa del mago. Fue cuando notó a un hombre de negro. Dejo sus cosas cerca de una tumba, para colocarse las gafas de protección y desempacar su escoba mientras revisaba el libro que el profesor desconocido había citado. – Hej.- Saludo buscando a su compañero de clases. Enfocando sus ojos en esa reluciente cabellera verde. - ¿Antoni? – Preguntó acercándose y levantando sus googles para ver al mago al cual le sonrío automáticamente. - ¿Seremos compañeros en esta clase? – El grave tono de voz del mago parecía divertido, tener un compañero como el haría la clase mucho más interesante.
  15. Axel sonrió complacido al escuchar la respuesta de Emmet, mientras terminaba su trago de vodka, una vez más volvía a hacer esa cara de desagrado al tomar alcohol sin ninguna medida. – Delicioso.- Riendo a través de ese gesto que deformaba su rostro. Se puso de pie lentamente, intentando no caerse en la silla, confesando que ya estaba un poco ebrio. Axel tragó saliva y pudo notar esa sensación que el vodka le producía en la garganta, justo cuando el vampiro lo ayudo. -Si mañana tengo tiempo, prometo pasarme por el castillo Gaunt.- Levantando la mano derecha como si se tratara de un niño pequeño haciendo una promesa a su profesor. Ambos hombres salieron del lugar, el tatuado se pudo dar cuenta que el negocio ya estaba solo, y en su cabeza recorría la pregunta, ¿Cuánto tiempo estuvo allí? Pero el aire helado de la calle al salir le golpeó de frente el rostro. -Brrr... que rico.- Levantando la nariz para sentir el clima frío. Mientras Emmet cerraba el negocio. Axel contemplo el cielo, una noche muy bonita realmente. Para voltearse y sonreírle al mago. -Si tengo tiempo mañana pasare a tu castillo.- Volvió a decir el Rexdemort, y le ofreció su mano para un cordial saludo, aunque el vampiro respondió de una manera muy diferente. Axel se quedó en silencio cuando el vampiro desapareció en medio de la noche. – Que hombre... – Susurró para sí mismo al llevarse la mano derecha sobre su mejilla y observar con detenimiento el negocio del que acaba de salir. – Atelier de Hestia… creo que vendré mucho más seguido.- Riendo solo en la oscuridad, mientras se alejó pensativo del lugar con paso lento, deambulando por los callejones.
  16. -En tu castillo será.- Respondió inmediatamente. – mmm… ¿Vives en el Ottery verdad? – Demandó el chico Rexdemort. Había pasado tanto tiempo que el mago no tomaba alcohol que esos tragos ya le estaban pasando factura, pero no por eso quería dejar de seguir bebiendo. Se sirvió una vez más vodka, aunque en esta ocasión si se lo tomaría moderadamente, o por lo menos eso esperaba. Axel puso atención a su anfitrión y miró el reloj de la pared después de que el vampiro lo hiciera. Escuchando las palabras de Emmet de forma clara. -Entonces te pagare en Praga, por mí no existe inconveniente.- Acompañado de esa sonrisa galante del tatuado, que pese a tener los dientes algo amarillentos por causa de la enorme cantidad de cigarros que fumaba al día no se veía mal. – Ya es algo tarde.- dijo a continuación mirando a su alrededor cuando notó que el Gaunt miraba el reloj una vez más, levantándose lentamente con cara de fatigado. –Una disculpa, me encantaría acompañarte a cenar.- Frunciendo un poco los labios. – Pero ya es tarde, ni siquiera recuerdo a que hora llegué. – Llevando su mano sobre su cabello despeinándolo un poco, para disculparse con el mago. - ¿Sería muy atrevido invitarte a cenar en otra ocasión? - @@Emmet Haughton Gaunt
  17. Iris Apfel Llevó sus arrugados dedos sobre sus labios completamente rojos, para soltar una enorme bocanada de humo casi purpura, con un movimiento lento y delicado, para seguir observando una revista muggle. -Odio esta nueva tendencia de princesa.- Exclamó subiendo un poco el tono de su voz, mirando con desdén bajo esas enormes gafas la página donde algunas modelos posaban. Iris era una mujer experta en el mundo de la moda, le gustaba gastar sus días criticando las revistas de moda de todo el planeta tierra y ahora que se encontraba de vacaciones en Inglaterra pensó que sería una buena idea visitar a su amigo Axel. – Quisiera quitarle esos zapatos la hacen ver más vieja que yo.- Escupió de nueva cuenta para volver a su cigarro. -¿Por dios mamacita, estas en tus cabales?, VIVIENNE YA ERES UNA ANCIANA DESQUISIADA, NO PUEDE SER, NO PUEDE SER, NOO PUEDE SER!- Sin embargo sus reclamos a la publicación de papel cesaron cuando escucho un ruido extraño. - ¿Sera ese inútil bueno para nada, que me saque de este antro de mala muerte? – Se levantó con extraña facilidad para una mujer de su edad, dejando la revista en la silla donde se encontraba y se dispuso a atravesar la habitación, donde Axel tenía su colección de objetos.- ¿No es el inútil? – Se preguntó en silencio al percatarse que una voz desconocida preguntaba por el joven Rexdemort. La viuda Apfel subió las escaleras hacia la proa del barco, solo en la cabeza de Axel tener un negocio dentro de un barco era una buena idea, y obviamente Iris consideraba esto muy fuera de lugar, aunque podía reconocer que el trabajo de manteamiento del barco y la decoración era exquisita, y más si ella era quien la había patrocinado. Por el pequeño umbral salió una figura muy delgada envuelta en una chaqueta de cachemir negro y el sonido de más de cinco collares de cuentas de diferentes colores y materiales que se balanceaban sobre el cuello de la mujer. – ¿Quién eres? – Preguntó desde lejos acercándose a su ritmo (que al fin de cuentas era una anciana en zapatos de tacón alto) mientras sus ojos recorrían la silueta del joven que había llegado al negocio. - ¿Un amigo del inútil? – Replico una vez que estaba lo bastante cerca para que su cansada vista bajo aquellos enormes marcos rojos distinguieran a un hombre apuesto. @@Lestat Rambaldi
  18. Solo se limitó a encogerse de hombros acompañado de una risa divertida, después de aquella expresión de desagrado a causa del alcohol puro. – Iuuugggg.- Trago saliva. – Esta bien, está bien acepto mi derrota.- Axel sentía una sensación extraña había tomado demasiado en poco tiempo quizás. Aunque alejo eso de su cabeza cuando escucho a Emmet hablar de nuevo. Prestó atención a cada palabra dejándolo casi boquiabierto al escuchar sobre el clan al que pertenecía. –Leinster.- Repitió con su marcado acento vikingo, Axel conocía solo lo básico sobre la historia de Inglaterra e Irlanda, pero estaba seguro que en alguno de los libros que tenía en su habitación había leído ese apellido más de una vez. - Pero si pertenecen a tu familia, ¿estarás seguro en venderlas? – Tomando su cigarrillo para darle un largo toque. Las reliquias de vampiros eran aún más caras y extrañas en las subastas e incluso un artículo sumamente raro en los mercados negros especializados. No por nada Axel conocía a los mejores en Republica Checa, Suecia y Noruega. -Claro que estoy interesado, me encantaría verlas, pero no te preocupes puedo esperar, no es necesario ahora mismo… además no tengo el mejor juicio en este momento. – Apuntando con la mirada al vaso vacío de vodka. -¿Premio? … - Repitió casi instantáneamente, quedándose en silencio por un par de segundos. – La verdad, no se… no pensé que perdería.- Soltando una sonora carcajada. – Tu deberías de decidir.- @@Emmet Haughton Gaunt
  19. Axel giró la cabeza hacía la izquierda con el ultimo comentario que el Gaunt hizo, desde hace varios minutos había absorbido toda su atención, pero esa última línea lo hizo elucubrar en silencio. -Dagas irlandesas…- Repitió frunciendo el entrecejo. – Estaría completamente agradecido y endeudado contigo. – Abriendo la cajetilla para que el hombre tomara otro. – El clan de MacCarthy Mórs, si no me equivoco eran los que dominaban las tierras de Desmond en ese siglo... ¿no? – Mientras Axel volvía a sacar su varita para prender el cigarro de Emmet. -El mercado mágico de las tierras de Irlanda está muy restringido… y el muggle, es casi imposible conseguir objetos históricos reales… a menos que tengas muy buenos contactos.- Era muy difícil esconder la emoción que todo eso representaba para el heredero de los Rexdemort. – El ministerio de magia suele ser muy estricto con la venta de este tipo de artículos a individuos, debido a la terqueza del gobierno británico. - Miró los ojos azules y penetrantes del joven con el que bebía, para después reír un poco. – En verdad, me encantaría ver esa colección, haría cualquier cosa para adquirir un bebé irlandés a mi colección. – Bebió un poco más y acto seguido se sirvió un trago más. - Si tú me dices que día puedo venir de nuevo a verte aquí estaré.- Mientras se levantó de nuevo para llenar el vaso de su compañero. - Vamos, un poco más.- Señalando los vasos llenos de vodka en la mesa. – Veamos quien se lo toma primero y el perdedor tendrá un castigo… como regalarme una daga.- Riendo con algo de soberbia mientras se divertía un poco. @@Emmet Haughton Gaunt
  20. -Vodka.- Con ese notorio acento danés que inundaba la mayoría de sus palabras, Axel realmente estaba teniendo una conversación bastante agradable, en el momento en el que sus labios tocaron el alcohol después de servirse solo un poco. – Uff… - Suspiró carraspeando la garganta y exhalando un poco. – Takk.- La expresión de su cara mostraba la satisfacción de un fuerte producto. -Pues esperemos que el concilio no se queme. – Sirviéndose una cantidad adecuada para girar el vaso en sentido contrario a las manecillas del reloj revolviendo el alcohol con los hielos. - Tampoco es muy saludable estar encerrado en el trabajo todos los días.- Haciendo un gesto con los labios mientras sentía el sabor del vodka sobre su lengua. – Yo intento viajar mucho, es raro que pase temporadas muy largas en Inglaterra, aunque debo de admitirlo, este país es muy bueno… tiene cosas muy bien hechas… - Mirando de abajo hacia arriba al señor Gaunt. -Yo colecciono objetos muggles, sobretodo armas – Cerrando por un segundo los ojos al dar un nuevo sorbo. – Cuchillos, dagas, puñales, espadas.- Quizás por eso me entusiasma tanto una subasta de armas. Tambaleando un poco la cabeza. – Además el cambio de ambiente. – Susurró para sí mismo. Terminando su vaso dando un enorme respiro.- Cuando guste puedo mostrarle mi colección.- @@Emmet Haughton Gaunt
  21. Axel abrió los ojos como platos al escuchar la afilada lengua de Emmet, para a continuación soltar una enorme carcajada. -Espera, Espera, Espera.- Dijo entre cortado intentando omitir la risa y la sonrisa pueril que acompañaba a esas palabras. – No necesito ser Legilimante para imaginar que estás pensando, ehhhh.- Dejando el café sobre la mesa. -Iris es solo mi mentora ehhh, no pienses mal ehhhh. – Axel se sentó enfrente de Emmet con ese gesto divertido, valla que lo había hecho reír. – Me refiero a que como eres un hombre bastante atractivo debes atraer mucho las miradas. – Buscando un nuevo cigarrillo y colocándose sobre la oreja derecha.- Iris es una mujer extravagante no lo niego, le encanta que todo el mundo la volteé a ver, pero no tenemos ese tipo de relación ehhh.- El joven Rexdemort suspiró y dio un largo sorbo a la taza de café sintiendo de nuevo ese aroma recorrer su garganta. – Después de que mi esposa me dejo, hice una tonta promesa… que no me acostaría con mujeres.- Axel dijo eso como si fuera cualquier cosa. – Y créeme… lo eh cumplido… NADA DE MUJERES. y mucho menos con ese saco de huesos- Levantando los brazos riendo de nuevo. – Pero en este mundo existen más cosas que mujeres. ¿Si me explico? – Aun entre risas, levantando las cejas en un gesto entre divertido y raro, solo para seguir riendo. -Supongo que somos del mismo bando.- Axel bajó su cigarro y después de darle unos ligeros golpes en la punta se dispuso a fumarlo. – Entonces espero contar con tu presencia, en unos días te mandare a mi jobberknot con la fecha de partida y lo que necesites. Para que te programes, quiero pensar que el concilio se puede dar el lujo de que su director se tomé un fin de semana. Créeme una subasta en la casa Apfel… - Quedando en silencio un momento. – La última vez desperté con un dolor de cabeza horrible… supongo que de usarla tanto. – ¿Qué tipo de bromas hacia Axel? Este solo reía divertido cuando termino su café. – Oye sería un abuso… ¿tendrás algo más fuerte? – Mostrando los dientes y levantando la taza de café vacía una vez más. – Y no me refiero a su abdomen señor Gaunt. – El sentido de humor del danés dejaba mucho que desear. @@Emmet Haughton Gaunt #TeamTrixie

Sobre nosotros:

Harrylatino.org es una comunidad de fans del mundo mágico creado por JK Rowling, amantes de la fantasía y del rol. Nuestros inicios se remontan al año 2001 y nuestros más de 40.000 usuarios pertenecen a todos los países de habla hispana.

Nos gustan los mundos de fantasía y somos apasionados del rol, por lo que, si alguna vez quisiste vivir y sentirte como un mago, éste es tu lugar.

¡Vive la Magia!

×
×
  • Crear nuevo...

Información importante

We have placed cookies on your device to help make this website better. You can adjust your cookie settings, otherwise we'll assume you're okay to continue. Al continuar navegando aceptas nuestros Términos de uso, Normas y Política de privacidad.