En una noche con luna llamativa, radiante y luminosa con un cielo estrellado despejado como un inmenso mar se encontraba una joven caminante con una sonrisa triste, sus ojos reflejaban una mirada llena de incógnitas, preguntas, recuerdos vagos y memoria difusa que con cada paso se tornaba más y más llena de incertidumbre.
Al caminar por la calle donde se encontraban las diversas familias mágicas una de todas le llamó la atención, recuerdos leves inundaban su vista de jardín con un elfo doméstico muy feo, una sombra blanca que siempre se mostraba triste pero lo mejor una sola palabra le venía a la cabeza "Trelli".
-- aquí estará esa persona llamada así?-- comento Aysha al viento-- aquí estará por fin esa familia que solo veo en sueños?
Tras caminar hasta la puerta, la pelirroja con ojos verdes se detuvo al frente y con un suspiro toco el timbre esperando alguna respuesta o algúna señal.
Su ropa era muggle motivado a que toda su existencia había estado con unos padres que le habían indicado que ella había llegado cuando era una pequeña y no tenía ningún tipo de recuerdos, solo los gritos nocturnos por las pesadillas que nunca se iban.
--alguien que me recuerde por favor --dice aysha a la puerta con los ojos cerrados.