Jump to content

Aleera Lux Evanik Malfoy

Magos Expertos
  • Mensajes

    2.396
  • Ingresó

  • Última visita

  • Días ganados

    1

Todo lo publicado por Aleera Lux Evanik Malfoy

  1. Las noticias volaban. Una parte de la comunidad mágica estaba revolucionada mientras que otra seguía con su natural (y neutral) existencia. La cuna de todo el movimiento se encontraba en Europa, eso la había obligado a regresar a casa. ¿Y si la familia la necesitaba? ¿Sus amigos? ¿Sus camaradas? Había hecho un juramento eterno que era cuidar y apoyar a los suyos. Para eso necesita no morir congelada en Londres. Apareció a pocos metros de la entrada envuelta en una nebulosa blanca y cubierta de pies a cabeza. Hacía frío y de donde venía disfrutaba un hermoso verano, el contraste era complicado. Observó alrededor, las calles de Ottery estaban desiertas, eso era raro. -Soy una Malfoy, soy una Malfoy, siempre lo fui y siempre lo seré –se repetía para sí misma como un mantra poderoso al tiempo que su mano empujaba la reja de entrada a los terrenos de la mansión. El hierro cedió y respiró profundamente. Esperaba que le cayera un rayo, se abran los suelos para llevarla al séptimo círculo del infierno o algo similar por volver de esta manera, pero nada sucedió. El pasto estaba escarchado y el camino de piedra que guiaba a las puertas dobles y decoradas algo resbaladizo. Avanzó con cuidado, no quería que la reconozcan por su torpeza, aunque algunas veces era inevitable. Al llegar a la entrada se abrió paso sin esperar a los viejos elfos de sus abuelos. No tenía sentido, el pobre ser cada vez era mas cascarrabias y no sería una buena bienvenida. Cerró la puerta y caminó conduciéndose al salón principal. -¿Hola? ¿Hay alguien en casa? –pregunto mientras se quitaba los guantes de cuero que protegían sus manos.
  2. Hola!!! La oleada de muertos vivos me resucito!!! Ni yo lo creo pero pasan cosas buenas como saber que mi habitación en la Malfoy sigue (me refiero porque no me sacaron del árbol). Yo me acuerdo del club, aunque me daba cosita participar porque me sentía muy nueva, pero creo que se esfumó y ya no existe, era como la versión off rol de la Mansión que en su momento supo ser super activa. Llevo horas dando vueltas buscando un lugar me siento turista jajaja Es bueno leerlas chicas, besitos a ambas!!!
  3. Aleera escuchó con atención a ambos alumnos, por momentos hasta parecía que cierta timidez rondaba en el ambiente, esperaba no espantarlos. El que ambos cuenten con licencia simplificaba las cosas, nada mal para los tiempos que corrian. -Perfecto, entonces mas vale que tengan la suficiente experiencia para moverse con su licencia. Respecto al por qué elegir la materia, tranquilos, no influye en la nota, es solo para conocerlos mejor. Aleera poniéndose de pie se acercó mas a sus jóvenes promesas y tomó su varita con la diestra, en ese momento un floritura frente a ellos depositó bastante material bibliográfico, idéntico para cada uno de ellos. -Mel, Roma, estos son sus materiales. Romalo, iras a Marruecos, Melrose a Corea del Sur. Deberan ir y tomarse 3 fotografías en los puntos mas destacados de la ciudad. Cuando vuelvan deben traerlas. Junto a las fotos traen comida típica del lugar y nos van a contar por qué esos lugares son tan especiales.-sonrió esperando que haya comentarios- Pero… antes de irse deben saber que llevaran un hechizo encima que les prohíba usar el inglés, en los libros frente suyo tienen lo necesario, les aconsejo que se apuren.
  4. Observó con su mirada esmeralda el trayecto de Romalo hasta su banco. Mantuvo una expresión tranquila, sonriente y relajada, aunque se preguntaba por qué su alumno tomaba en una habitación llena de bancos uno mas alejado. ¿Acaso la demonio daba miedo? Trató de recordar la imagen que minutos antes le había devuelto el espejo donde parecía una joven veinteañera de grandes ojos y sonrisa afable. -Eh… si, por supuesto – se dirigió hasta la parte del escritorio que se encontraba mas cerca de la enorme pizarra. Abrió el cajón de la derecha y comenzó a sacar cosas: un telescopio, pergaminos, una paloma, una piedra, un oso de peluche… Para el momento que el escritorio rebalsaba de objetos sin sentido ella levantó airosa una pluma que entregó al mago- Toma, puedes quedártela. Movió la varita y en el tiempo que toma pestañar todos los objetos habían desaparecido. Fue justo en ese momento que la puerta se abrió por segunda vez. Ahora era una bruja la que se aproximaba a ella con un ligero porte nervioso. De nuevo dudó sobre si ella asustaba o no pero no podía imaginarse causando terror. -Hola Melrose, estábamos esperando. Ahora que están ambos, es mejor que nos apuremos. Primero que nada necesito saber si ambos tienen licencia de aparición, esto nos simplificaría mucho las cosas… -tragó saliva y continuó- Quiero saber qué idiomas dominan, cómo lo aprendieron y cuál es su lengua materna. También ¿Por qué decidieron tomar este conocimiento?
  5. Balanceaba los pies a medio metro del suelo mientras leía un pequeño ejemplar de “El cuervo” la obra de Edgar Allan Poe, aquella novela era una distracción para la espera. El chirrido de la puerta vieja de madera y metal que alzara la vista desde las amarillentas hojas de su libro. Un joven mago se asomaba. -Buenos días –le respondió animada- Pasa, estás en el lugar correcto. Señaló uno de los bancos cercanos a ella para que el chico se sentara y pegando un saltito desde la mesa alcanzó el piso sin hacer ruido. Le sonrió y una vez que su alumno estaba ubicado decidió presentarse. -Roma, un gusto –le dijo-, mi nombre es Aleera y seré tu profesora. Esperemos unos momentitos mas a ver si llega tu compañera para que podamos comenzar. Creo que tendremos una clase muy emocionante.
  6. Era maravilloso y nostálgico que siendo nuevamente 1ro de Septiembre inicie otro curso. Mientras Aleera se encontraba en la oficina de la academia su cabeza anidaba ese pensamiento. Tomó una foto sobre su escritorio, una versión de ella muy joven y feliz saludaba a la cámara emocionada por empezar en Hogwarts Un ruido la sobresaltó, una lechuza que se chocó contra el vidrio de la ventana que daba a los campos universitarios. Se puso de pie abriendo la portezuela para permitirle pasar. Llevaba un pergamino atado a su pata, ella lo tomó con cuidado y premió al viejo animal con unas golosinas para lechuzas que guardaba en el cajón de su escritorio invitándolo a que descanse antes de regresa -¡Manos a la obra! –dijo con una energía renovada mientras acomodaba la carta debajo de un pisapapeles. Aleera vestía un túnica color nude muy bonita, llevaba unos bordados en los puños, cuello y dobladillo mientras que combinaban con un sofisticado par de zapatos con tacones altos. Se miró al espejo corroborando su apariencia, luego, salió de la oficina por la única puerta que comunicaba a un aula. Tomo la varita e hizo unas rápidas anotaciones en el pizarrón dando la bienvenida a sus nuevos alumnos. Luego se sentó sobre el escritorio sonriente con un libro pequeño en el regazo esperándolos. -Adelante… -dijo en un tono suave y musical pero claro para que la escuchen del otro lado de la puerta- está abierto.
  7. La Evanik guardó distancia permitiendo que su joven alumno trabajara sin interrupciones, esperaba no ponerlo nervioso, sin embargo, la mirada esmeralda de la demonio lo siguió en todo su trayecto. El joven trabajó arduamente frente a la biblioteca antes de aproximarse a Klaus, el viejo soldado no era un hombre que supiera una pizca de inglés o español, así que no hay riesgos. Era alemán o alemán. Las horas pasaron y no quedaban dudas, el trabajo había sido como ella esperaba. Alzó la vista, tratando de localizar a Jessie y Mía pero no estaban cerca del sector donde ella se encontraba. Así que decidió culminar por su lado. Tomó un pergamino y con una letra pulcra y detallada comenzó a escribir. Sintió unos pasos y levantó la vista encontrando al mago frente a ella. -Adrian, un minuto por favor -le dijo Tomó otro papel y completo los espacios en blanco. Lo enroscó y selló con cera azul oscura asegurando su contenido. -Bien, ha llegado la hora -dijo sonriente- debo decirte que me sorprendiste gratamente Adrian. Haz hecho un trabajo muy bueno. Toma -le extendió el pergamino cerrado-, solo me queda felicitarte, haz aprobado tu clase de idiomas.
  8. El efecto parecía el adecuado, se sentía a gusto sabiendo que frente a ella tenía un alumno sediento de conocimiento, que sabía como valorar aquellas grandes mentes que ella admiraba. Sonrió ante la respuesta aunque le representaba un desafío. -Comprendo, Adrian - dijo meditativa- no tenía preparado caer en lenguas no humanas por el momento, pensé que lo mejor era caer en algo mas tradicional que te represente mejor uso. De todos modos, no quiere decir que no podamos hallar algo... Aleera se puso de pie e invitó a su alumno a que la acompañe. Cuando el joven estuvo a su lado, realizó una floritura con la varita logrando aparecer frente a ellos una pequeña estanteria con libros. Se hizo a un lado permitiéndo al joven mago observarlos y deleitarse con ellos. -Este será tu material, está cómodamente organizado. Tu labor será entrevistar al Capitan Klaus, un aleman un poco cascarrabias pero honesto, sobre la guerra. Cuando termines quiero que me expliques un resumen. -dijo la Evanik tranquilamente- El Capitan habla únicamente aleman, así que requeriras los libros del segundo estante. Cualquier consulta me encontraras por acá.
  9. Aleera evaluó cada movimiento de su alumno, no porque ello influyera en la nota, sino por curiosidad. Desde siempre el comportamiento de los seres humanos le atraía, creía que era como una lengua paralela, que pocos conocían y decía tanto de la persona como la legeremancia. -¿Cooperación mágica internacional? –repitió en el mismo tono delicado y musical de voz- interesante, si, evidentemente sería un buen crédito extra gradurte en mi clase. Supongo que entonces estaras familiarizado con el conflicto que nos trajo hasta la Antartida ¿verdad? Aleera no necesitaba una respuesta exactamente al respecto, sino que la charla era un medio de relacionarse, de conocer al otro. El tono de voz, gestos, posición y por supuesto su acento iba a decirle mucho. El cerebro de la demonio funcionaba como una máquina aceitada a todo vapor. -He conocido un mago que hablaba 351 idiomas y conocía cada uno de los dialectos, le tomo bastantes años pero se puede si uno se dedica, este es un buen paso para tu objetivo, Adrian –Aleera pronunció el nombre suavemente y añadió casi de inmediato- ¿Te molesta que te llame Adrian o prefieres tu apellido? Siempre priorizo los gustos de mis alumnos. La Malfoy escuchó al joven y sonrió –Bien, entonces dime, ¿Dominas algún idioma? Quiero saber cuál es tu lengua materna, idiomas adquiridos y si hay alguno que requieras con mayor urgencia de conocer… todo ayudará al desarrollo de nuestra práctica.
  10. La tienda carecía de lujos, todo aquello a lo que la Malfoy estabab acostumbrada no existía en ese lugar. Esperaba que la clase sea amena, al menos así el tiempo pasaría volando, volvería a la Universidad a llenar los formularios y brindaría el aprobado, o no, a su alumno. Consultaba un reloj de varias manecillas cuando una joven mujer se aproximó. -Suerte –murmuro devolviendo el saludo con una sonrisa cuando la identíficó, ella y Jessie arrancaron los arreglos de su clase mientras que la Evanik aguardaba un poco mas. El próximo en llegar fue su alumno Adrian, al menos esta vez su alumno se presentaba y no viajaba en vano. Eran muchos galeones desperdiciados del dinero de magos para que los brujos no le den importancia. -Yo soy Aleera, exactamente –dijo aproximándose al joven que no pareció reconocerla-, tu profesora. ¿Comenzamos? Como veras una pequeña guerra mágica ha entrado en acción pero nosotros serviremos al ministerio inglés. Aleera guió a su alumno al punto mas apartado de la tienda e hizo aparecer dos grandes almohadones en el piso. Se sentó en uno de ellos cómoda e indicó al joven que la siga. -Antes de explicarte la utilidad de nuestra presencia en medio del conflicto necesito saber de vos. Contame ¿Por qué estudiar idiomas?
  11. En algún lugar de la Antártida La tapa del periódico rezaba “Clarin, el gran diario argentino” Los ojos verdes de la Malfoy recorrían los renglones de una pequeña nota sobre un desprendimiento de hielo. A los pocos segundos levanto la vista, chasqueó la lengua y sonrió cansada. -Al vocero del Ministerio deberían darle vacaciones para que trabaje su creatividad- al ver la expresión de Jessie le extendió la nota y completó- taparon la guerra diciendo que el desprendimiento se debe al calentamiento global, es la cuarta vez en lo que va del año que usan esa excusa. Hasta los muggles no son tan tontos para creérsela… creo… Las dos brujas se deslizaban por la blanca extensión de la Antártida rumbo al campamento de Inglaterra. Era uno de los pocos lugares seguros cercanos a la batalla. Actualmente, Arabia y Francia estaban en guerra por un trozo de hielo en el Sur del mundo, obviamente, Inglaterra había apoyado a Francia. Sin embargo los árabes usaban alfombras voladoras y monos para bombardear con pociones ácidas al bando rival, generando el mayor ataque sorpresa. Había muchos heridos en los aliados de occidente y ahí trabajarían. Ellas iban en un transporte que era la perfecta combinación entre un carruaje y un trineo, los Threstals llevaban aquella cabina donde ambas brujas viajaban cómodas y charlando relajadas. Aleera había sumado a su loba, Luna, era un hermoso ejemplar que amaba el frío. La Evanik iba envuelta en una abrigada capa blanca, llevaba piel en el cuello, puños y borde inferior mientras que la tela era un cuero pesado y tratado mágicamente para protegerla de las temperaturas bajo cero. En las manos llevaba guates al tono que la envolvían como una segunda piel y botas altas que apenas se asomaban las puntas. -Gracias por aquel hechizo que me pasaste. Ahora mis zapatos y guantes están calientes por dentro, a ello le sume un hechizo impermeabilizador para la nieve… no creo que tengamos complicaciones con el clima. La mortífaga corrió la cortina y observó el exterior, era casi de noche y llevaban una hora viajando. –Ya casi llegamos, Sis, espero que nuestros alumnos se presenten y estén a la altura de la situación. Allí nos recibirá el jefe Stonewell, será nuestro guía en el campamento. Pasado un tiempo el carruaje se detuvo suavemente y alguien abrió la puerta. En un tono de Irlanda del norte profundo saludó. Aleera devolvió el saludo y presento a la bruja a su lado. El mago Stonewell la condujo a una gran tienda de campaña. -Dice que podemos instalarnos por acá para esperar a los chicos, luego iremos todos a la enfermería. Nosotros vamos a obtener detalles de los ataques mientras vos y Mía salvan vidas. –finalizó sonriente al tiempo que los ojos color esmeralda escaneaban alrededor en busca de los alumnos- espero que estos chicos no se demoren…
  12. Aleera se acomodó en su asiento mientras su alumna se presentaba, le pareció una joven agradable, sería buena compañera para el viaje que habían planeado con Yekaterina. Sonrió asintiendo mientras se familiarizaba con las leguas que ella conocía. -No, no vas a necesitar para anotar, ni serás traductora –Aleera tomó el pequeño bolso con el que había llegado y revisó el interior, extrajo una serie de pergaminos que extendió hacía Jo.- Como veras o imaginaras, el idioma es un código que usan las culturas para comunicarse, el mismo puede ser oral, escrito o ambos como la mayoría de los que conocemos hoy en día. Aleera mostró que uno de los pergaminos contenía un mapa mágico de la ciudad, otro era una especie de definición con historia incluida, algo así como la teoría de la materia. -Si nuestra clase se basara únicamente en teoría me haría vieja en este mismo instante. En uno de los pergaminos tenes un resumen de las palabras mas frecuentes. Nuestra primera tarea será así, vas a bajar a la convención y mezclarte con los magos y brujas, con ayuda del material que te di, entrevistaras a 5 de ellos, todos deben ser de nacionalidades diferentes y me contaras dónde se formaron para la adivinación, puede ser un “don de familia” –Aleera hizo con los dedos un gesto como encerrar entre comillas- o por estudio, la idea es que trates de hacerte entender y vos a ellos. No uses el inglés, claro está. Aleera le sonrió, aguardó un momento para que su alumna se pusiera al corriente de los papeles en sus manos y por si surgía alguna pregunta. Al cabo de un rato añadió. -Bueno, para esta prueba tenes 24hs, que te sea leve
  13. Feliz de estar al frente de su primera clase en la Universidad, avanzaba entre la multitud siguiendo a su compañera. Este mes las clases se dictaban relacionadas con otro departamento lo que los hacía movilizarse a Estocolmo. Era una ciudad muy linda y, en estos momentos, cuna de cumbre mágica. Si bien la adivinación no era una de sus especialidades había escuchado que en cumbres como éstas pasaban cosas... extrañas y su alma curiosa no pudo negarse a pasar por aquí -Seguro sacaremos algo lindo… -pensó para sí, manteniendo la sonrisa en su rostro mientras que su compañera daba una breve indicación. Esperaba que entre ambas pudieran cuidar de dos alumnos de posgrado sin acabar en un psiquiátrico. Recordaba que la última vez que se realizó en Europa San Mungo prestó sanadores especialistas en salud mental para reforzar ante una epidemía de magos que pensaban que iban a morir a la brevedad o, peor aún, que ya estaban muertos. -Joa, ¿Cómo estás? Soy Aleera y seré tu profesora y guía en los idiomas… –le dijo acercándose mas para no necesitar ser oida por un grupo de brujas francesas que hablaban demasiado alto. De inmediato se vieron resguardadas en un hermoso edificio y la profesora de Adivinación los condujo a un reservado- la idea es que la clase sea relajada y enfocada en tus objetivos. Me gustaría que me cuentes por qué elegiste esta clase y qué idiomas conoces. Mientras, Aleera, dejó un pequeño bolso de mano sobre la mesa y se quitó la capa de viaje. No había planeado iniciar la clase en el exterior pero amaba los desafíos y aquel viaje sería uno de los mas interesantes. Miró a la otra alumna que estaba siendo interrogada por Yekaterina y le sonrió, a lo mejor podía consultar una vidente acerca de su futuro.
  14. Los duelos nunca fueron su fuerte, no le gustaba la idea de estar luchando con el riesgo de lastimar a alguien o lastimarse. Sin embargo, necesitaba aquel libro así como los siguientes y solo había un modo. Continuar. En el momento que lanzó su ataque, su oponente, creo un escudo que la protegió del rayo, era lo esperable, así que no se preocupó por ello, por el contrario le resultó aliviante. Antes que Akiza pueda hacer cualquier otro movimiento la Malfoy, rápida en reflejos, la mantuvo en la mira de su varita y exclamó con voz fuerte y clara que todos sintieron. -Silencius –instantáneamente la mortífaga se vio afectada por aquel hechizo que la Evanik le envió. Observó como la boca de su compañera se movía tratando de pronunciar otro ataque que quedó nulo ante la imposibilidad de pronunciarlo logrando que la castaña sufra ninguna herida. En ese momento algo sumamente extraño sucedió, un ser horrible y mal oliente se dirigió desde el otro extremo de la plaza, por suerte desde la parte más alejada a Aleera. La ex sanadora reconoció que era un troll, no muy grande pero si feo que inmediatamente pareció ensañarse con Lestat, su compañero. El efecto del anillo de amistad con las bestias pareció surgir efecto, pues el hipogrifo al cual ella había acariciado se interpuso entre aquel feo ser y la delgada bruja, aunque siempre manteniendo la suficiente distancia. -Embrujo punzante –pensó Aleera de inmediato apuntando a su compañera de bando y en ese instante los efectos se hicieron presentes en su compañera de duelos- que esto termine pronto, por favor –pensaba Aleera.
  15. Hola Athenas!!! Perdoname que te moleste pero tengo una duda, seguro no entiendo bien por el estres de la semana muggle pero no quiero meter la pata. En el segundo turno cuando nos ataca el trol, es un trol a cada uno, a cada pareja o uno a los 4??? De ser así, podríamos por ejemplo ponernos de acuerdo entre todos para abatirlo y sin necesidad que nos haga mucho daño, ya que somos 4 magos adultos desarrollando poderes superiores contra una criatura carente de inteligencia???? Me extendí un poco especialmente para no cometer spam por falta de líneas pero la pregunta es sencilla, vale que nos complotemos 4 a 1 contra el troll y chau?? Gracias linda!!
  16. No había notado lo rápido que sucedió todo. La clase avanzaba, como ellos, a un nuevo nivel llegando a su final. Aleera siguió al grupo en silencio notando como el clima empeoraba. No le gustaba que desaparezca su preciado sol. Los ubicaron en una plaza bastante grande con pocos detalles, un terreno ideal para actividades físicas y pronto sus pesadillas se hicieron realidad. Llegaba la hora de un duelo. -Con Colt no, por favor, contra Colt no Voldy querido –rezaba para adentro al tiempo que los anillos se ajustaban en su muñeca por si los necesitaba luego en la batalla, aunque mas que anillos necesitaría un milagro. Como si fuera una respuesta a su plegaria Athena la unió con Akiza, la otra dama del grupo, Aleera le dirigió una sonrisa amistosa a causa del alivio. Mientras los hombres ansiosos de adrenalina se pusieron en marcha ellas se tardaron un poco mas. Primero vio las grandes bestias que los acompañaban -¿Hipogrifos? Por la calva incipiente de Voldemort –exclamo debilmente mientras respiraba profundo. Recordó las palabras de su abuelo hace ya muchos años cuando le enseñó que la cobardía no era agradable para nadie. Ella sabía que eran criaturas muy orgullosas y que ella debería dar el primer paso con cautela. Tranquila, sonriendo y mirando fijamente al animal fue cerrando la distancia. Sintió los anillos contra su piel, el anillo de las bestias estaba allí. Tenía las de ganar. Sin apartar la vista le dirigió una reverencia y aguardó. Si no funcionaba lo mejor era correr con todas tus fuerzas o ser comida para bestias. Al cabo de unas fracciones de segundo (que parecieron eternos para la castaña) el hipogrifo le devolvió el saludo y dejó que la pequeña mano blanquecina de la Malfoy acariciara su suave plumaje. -Hola belleza –dijo ella suavemente- hoy estaremos juntos… Guardó distancia, aunque sabía que aquel animal ahora estaba vinculado. Mas tranquila volvió a dirigirle una mirada y notó que sus colores eran hermosos, blancos con manchas beige, parecía ideal para ella. A unos 10 metros de distancia de su nuevo amigo Aleera regresó a su encuentro. Una reverencia similar a la dedicada al Hipogrifo fue para su compañera y levantó ambos pulgares mientras movía los labios con la palabra “suerte”. -Expelliarmus Su voz clara se sintió a su alrededor, parecía que el lugar tenía buena acústica, ya que ella misma se sorprendió. La bruja tenía su mano derecha apuntando directamente a su contrincante, la cual también se distanciaba de ella en 8 metros. Lo suficiente para un duelo.
  17. Continuó repitiendo el movimiento lentamente tratando de hacerlo propio. Estaba segura que podría recordarlo cuando llegue el momento y se encontraba dispuesta a dar lo mejor de sí por este libro. Recibió ansiosa la devolución de la Rouvas y, casi, emite un gritito ahogado en señal de felicidad. -Gracias –dijo con su tono melodioso, algo bajo y esbozando una sonrisa. Se sintió satisfecha consigo misma al tiempo que guardaba la varita y atenta escuchaba como la Instructora revelaba el poder los anillos. -Por ejemplo si los pongo en una pulsera ¿Está bien? –le preguntó cuándo hubo lugar para no interrumpir a nadie- Y uno de los anillos nos permite oír conversaciones mientras que otro nos protegen de que nos oigan ¿verdad? ¿Qué pasaría si deseo oír la conversación de alguien que usa un anillo de protección de conversación? ¿Se anulan mutuamente…? –Movió la mano descartando la idea- Perdone. Pensé en voz alta. Aleera empezó a imaginar ciento de situaciones en las que usar los anillos. Le daba mucha curiosidad. Deseaba ponerlos en práctica. Mientras lo hacía, sin intención, notó la mirada de Lestat y sintió un escalofrío. ¿Habría dejado alguna ropa ridícula sin darse cuenta? Pensó en que ojala alguno de los anillos trajera un espejo para verse y saber el por qué esa mirada hostil en el rostro de su compañero de clases.
  18. Deseaba desaparecer y volver el tiempo atrás. No se le escapó que a la profesora evidentemente no le había caído bien. Si era por llegar tarde o por otra cosa lo ignoraba pero aquello la hizo retraerse y desear volver a su casa. Bajó la mirada a sus manos mientras frotaba las palmas y calentaba las puntas de sus dedos. Respiró, contó hasta diez antes de que empezara a hiperventilar y forzó a sus sentimientos a no mostrarse aunque los ojos verdes estaban con una leve película húmeda. -Lo siento –dijo en voz baja- Mi nombre es Aleera… me dicen Alee… Siguió los pasos de la docente mientras mentalmente se daba patadas por allá abajo donde se pierde la espalda. Era su regreso a los estudios desde hacía años y ya se ganaba una mala posición y nada mas ni nada menos que con la profesora. Se mantuvo medio paso atrás de sus compañeros pero sin perder a la Rouvás de vista. Cuando el grupo se detuvo sacó una pluma y un pergamino de su mochila y tomo nota rápidamente de los dos hechizos “salvaguarda mágica” y el de curación. En ese momento lamentó no haber conservado primeros auxilios. Otra cosa que sentía que iba en contra aquel día. -Oh… -exclamó viendo su expresión reflejada en la consternación de Akizia. Sin embargo repitió en su mente el otro hechizo y la imagen de la profesora mientras indicaba el modo correcto de realizar. Tomó su varita y con cuidado repitió el movimiento mas lento (no deseaba lastimar a ninguno de sus compañeros o docente). Por un momento se sintió de regreso a los dormitorios amarillos de Hogwarts, donde en las noches repasaba cada lección del día. -Disculpe, ¿así está bien? –preguntó con ganas de esforzarse para obtener aquel libro y los poderes que el mismo guardaba.
  19. Otra vez. Como había estado ocurriéndole seguido en el último tiempo había sucumbido a los brazos de Morfeo en la bañadera. Su piel estaba toda arrugada mientras se envolvía en una esponjosa toalla tibia. Había pasado mas de una hora y media sumergida en el agua con aceites aromáticos y ahora la rodeaba una nube dulce y floral como resultado. Al ingresar en la habitación, la brisa que se colaba por la ventana se sentía como una caricia que avivaba sus sentidos. Inmediatamente notó una no carta que esperaba por ella. Bastó acercarse para sentir la presencia de magia, un traslador. La leyó, llegaba tarde para su clase del libro de fortaleza que tan ansiosa la tenía. Se cambió en menos de lo que canta un gallo, tomo un par de pertenencias y las apretó en una mochila y se la colgó en los hombros. Por último, en una mano su varita y en otra la carta y desapareció. Llegó última como sospechaba y apuró el paso, notando la falta de ejercicio y regañándose por ser tan perezosa. Miró haciendo un reconocimiento, por mas de ver algunos rostros que le traían recuerdos solo podía adjudicar su conocimiento a Colt. -Perdone, Instructora, lamento mucho mi demora –dijo bajando la cabeza- Espero estar a tiempo. Había escuchado de los anillos que descansaban en uno de los tantos bolsillos de su bolso, mientras que el libro… bueno, lo había ojeado pero no estaba lista para una evaluación inmediata. -¿Debíamos aprenderlo ya para esta clase, Señora? -preguntó algo temerosa
  20. Hola, Mil disculpas, no sé como ver cuándo me arroban en los avisos, y esta semana por un problema personal + pascuas no pude pasar pero ya mismo me subo al bote. Mil disculpas. Saludos Si por algún motivo no puedo participar por ser tarde estaré atenta para que me avisen. Perdón!!!!
  21. Se sentía algo mas familiar el tener la complicidad de Goshi, antes que la castaña pudiera poner manos a la obra la vampiresa estaba arrasando la cocina. El polvo se levantaba a 10cm del suelo rodeándola pero la albor que llevaba a cabo era mucho mas importante. Sonriendo la observaba si tenía éxito la noche sería una maravilla. Finalmente, triunfal, volvió a su encuentro con un pequeño tesoro en las manos. -¡Me encan…! –oir su nombre, reconocer el tono de voz, la sorprendió- ¿May? ¡Maaayyy! La abrazó fuerte como si hubiera pasado una vida desde que se dieron el último abrazo. Por supuesto que la recién llegada estaba llena de preguntas acerca de aquel improvisado grupo pero con la compañía del vino y la ayuda de Goshi podrían ponerla al corriente. -Bien, veamos por dónde arrancamos… -dijo mientras la abrazaba y la guiaba por la sala hasta unos viejos sillones polvorientos. Sacó la varita y sacudió el polvo mientras hablaba- todos recibimos una carta, imagino que vos también ¿verdad? – May asintió- bueno, básicamente Orión tuvo un encuentro no muy amistoso con una bruja y, como sospecharas, no fue nada bien. Ahora está en peligro mortal. –Aleera se sentó resignada, sabía que esos sillones no podrían acabar mejor al menos aquella noche- Lo mas curioso es que no es él solo, por supuesto que para hacerlo sufrir e incomodarlo todos aquellos que guardamos amistad o lazo de sangre con él también lo estamos. Los que fueron llegando son todos aquellos que él logró ubicar y citar ya que este cálido y amoroso lugar podría protegernos. Goshi regresó con las copas y con un gesto casi desesperado, mientras aún continuaba explicando todo a su prima y amiga, le rogó por una bebida. -En fin mañana veremos qué idearon con la tía Gatiux, ellos están por allá arriba “juntos” –añadió moviendo las cejas de arriba abajo sugerente- pero la casa es nuestro primer paso para poder pensar minimizando los riesgos. Parece abandonada, como veras, así que tendremos que trabajar mucho para ponerla decente. –finalmente exhaló mientras apoyaba los labios en la copa y permitía al alcohol obrar su magia en su sistema.- ¡Delicioso!
  22. Buenas noches, vengo a anotarme a las clases!! Nick: Aleera Lux Evanik Malfoy ID: 43192 Libro de Hechizos: Libro de la Fortaleza Justificante de compra del Libro (Link al post del Concilio de la bóveda trastero): http://www.harrylatino.org/topic/109996-boveda-trastero-de-aleera-lux-evanik-malfoy/page-2?do=findComment&comment=5068189 Rango Social: Dragones de Plata Nivel de Magia: XII Fecha aproximada de aprobación EXTASIS o de salida de la Academia (versión anterior): Cerca de Oct 2008 egresé de la academia, para ese entonces no existían los EXTASIS Link a la Bóveda: 83645 Link a la Ficha: 78792
  23. Se había abstraído en su cabeza mientras que, autómata, su mano movía los fideos de un lugar a otro del plato pegoteándolos. Allí su demonio interno se paraba molesta regañándola por aceptar la situación, era evidente que la reprendía, no entendía que la familia era primero. Escuchó algo que sonó como su nombre medio ahogado y levantó la vista del punto fijo en el que se había perdido. -¡Estupendo, Goshi! –respondió volviendo a la realidad de la sala e ignorando a su maligna conciencia- Yo dormí demasiado, desde que volví a Londrés no he encontrado mucho para hacer excepto gastar algo de mi pequeña fortuna. Tomó las pastas con el tenedor, las enroscó y con lentitud fue llevando comida a su boca, trató de no detenerse en la falta de salsas, y alimentarse. Luego bebió un vaso de agua de uno y ayudó llevando su plato al fregadero donde con un simple hechizo quedó como nuevo. Se volteó viendo como se marchaba su tía y su pareja, aquel grupo se iba dispersando lentamente. -¿Crees que encontremos alguna botella de vino potable por acá? –le consultó a Goshi en voz baja para que solo ella la escuchara- No me vendría mal un poco de estímulo para la guardia. –añadió guiñando un ojo con complicidad
  24. Aleera se encontraba en medio de un torbellino de emociones, trataba de respirar y seguir una vieja técnica de relajación basada en números y cosas, así no perdía su porte. Mataría a aquel viejo duende que no le había dado las indicaciones precisas. Sin saber de dónde salió un joven mago se apareció frente a ella haciéndose cargo del trámite. -Gracias –le dijo a la hechicera que amablemente había atendido en primera instancia, mientras que centró su mirada verde en el mago frente a ella. El empleado de la tienda verificó atento los papeles y finalmente le aprobó la compra, ella brotó de alivio y alegría mientras le agradecía con un hilo de voz. -Se lo agradezco mucho, quédese tranquilo, de acá mismo corro a la Universidad para poner todo en orden, le aseguro que no será inconveniente, muchas gracias por su ayuda. Que la Magia de Merlín lo ilumine en su trabajo. –añadió en despedida tras saludarlo con un apretón de manos.
  25. La fila detrás de la Malfoy crecía, algunas personas evidenciaban un poco de la ansiedad que genera hacer algo tan privado y casi prohibido. Aleera casi arrugaba el papel en sus manos y éstas temblaron ligeramente cuando apareció la vendedora. La mujer, amablemente, le explicó que no podía realizar la compra, había inconvenientes con su bóveda. -No, disculpe, perdón… -dijo mientras la joven hechicera continuaba atendiendo a las demás personas y aprobando sus trámites- disculpe, le ruego que lo verifiquemos nuevamente. Aleera metió la mano en los pliegues de su túnica y comenzó a sacar de allí pertenencias: una pluma, un frasco de tinta nuevo, galletas para perros, alpiste, una rata muerta, otro frasco de tinta… -ya, debe estar por acá, lo sé- dijo con sus manos ansiosas mientras continuaba desparramando sus pertenencias en el mostrador- ¡Acá está! Le extendió un pergamino con los trámites realizados en Gringotts, la copia de lo que el duende le había hecho firmar cuando abrió su bóveda hace unos días atrás, curiosamente lo llevaba con ella por posibles dificultades. -Entiendo que muchos digan lo mismo, pero le ruego lo verifique, el duende que arrinconé en el callejón hablé recién antes de venir me dijo que mi bóveda fue abierta hace instantes, quizás no miraron bien en los registros, pero estoy segura que con su atención tan dedicada ustes puede corroborarlo, Señorita –la Malfoy prácticamente le rogaba a la bruja mientras tomaba un trozo de pergamino y la pluma para garabatear nuevamente la orden de compra. ID: 43192 Nick: Aleera Lux Evanik Malfoy Link a la Bóveda Trastero: Bóveda Trastero Link a la Bóveda de la cual se hará el descuento: 83645 Nivel Mágico: XII Fecha: 2017-03-28 Nombre del producto: Libro del Aprendiz de Brujo Consumible o Libro de Hechizo: Libro de Hechizo Nivel (del libro): AAAAA Precio: 1000 G Nombre del producto: Libro de la Fortaleza Consumible o Libro de Hechizo: Libro de Hechizo Nivel (del libro): AAAAA Precio: 5000 G Precio total: 6000 G

Sobre nosotros:

Harrylatino.org es una comunidad de fans del mundo mágico creado por JK Rowling, amantes de la fantasía y del rol. Nuestros inicios se remontan al año 2001 y nuestros más de 40.000 usuarios pertenecen a todos los países de habla hispana.

Nos gustan los mundos de fantasía y somos apasionados del rol, por lo que, si alguna vez quisiste vivir y sentirte como un mago, éste es tu lugar.

¡Vive la Magia!

×
×
  • Crear nuevo...

Información importante

We have placed cookies on your device to help make this website better. You can adjust your cookie settings, otherwise we'll assume you're okay to continue. Al continuar navegando aceptas nuestros Términos de uso, Normas y Política de privacidad.