Eliah Ryddleturn

Aquel castillo volvía estar enfrente de la chica de ojos azulados con toques amarillos que podían recordar a la mirada de una felina, algo que la quedaba de su madre, aquella herencia que la hacia acordarse de ella en cada instante, puesto que siempre estaría presente en ella no solo en su mirada sino en su corazón. La fortificación que se alzaba delante de ella fue la última morada que guardó la guardo a ella y su madre, la última familia que quedaba a la ex mortifaga. Quizás fuera lo único que la quedaba en aquel mundo que se había convertido en un lugar más frío y oscuro de lo habitual. Tenía raíces en aquella familia y solo quería un poco de paz y tranquilidad, quizás volver a la realidad de nuevo después de estar en una especie de limbo tras la partida de su amada madre. Ni siquiera sabía si la recordarían, era alguien que solía pasar desapercibida para los demás, a veces era bueno, no ser alguien importante para que no la echaran de menos cada vez que se ausentaba, pero quizás si echaba de menos tener a alguien que la recordara y que la esperase. Pero no podía volver al pasado, debía de afrontar su vida desde presente y mirando al futuro, solo esperaba que pudiera hacerlo en aquella familia que la había recibido siempre con los brazos abiertos y que por suerte pensaban igual que ella sobre la pureza de sangre. Entro en el castillo junto a sus dos elfos, aquellos dos estaban llenos de sus pertenencias y maletas que portaba la demonio. Por suerte no eran muchas. La puerta enseguida cedió dándola paso, como si supiera que ella pertenecía allí. Solo esperaba que su habitación estuviera en aquel lugar como siempre y que no hubiera desaparecido al igual que lo hizo ella. Ahora tenía que intentar ser mas sociable y volver a conocer a la gente que allí residía, puesto que ahora aquella era su familia, aunque no la gustaría perder el primer apellido con el cual su madre la recibió en aquel mundo. ¿Que sería mejor esperar a que alguien la recibiera o buscar su cuarto? mientras pensaba lo que hacer la puerta se cerró tras de sí mientras ella dubitativa pensaba la mejor opción para aquel momento.

La verdad esque se había quedado tan petrificada mirando todo aquello que no se dió cuenta de que esa todavía no era la verdadera tienda donde tenía que llegar. Pero por suerte la voz de una elfina llamó la atención de una demonio que bajó su mirada hasta la pequeña elfa que se la quedaba mirando de dos formas, entre espectante y a la vez sorprendida. Entornó los ojos, sabía que ella se parecía mucho a su madre Katara tanto que parecían dos gotas de agua por eso muchos elfos que trabajaban con su madre se quedaban sorprendidos cuando la veían. Cuando dijo aquello de que su madre tenía fotos de ella en la oficina algo en su frío corazón palpito. Su madre si que era cariñosa con ella y a la vez dura cuando debía serlo pero no esperaba que tuviera fotos de ella. Aunque era normal, era su hija y la echaba de menos cada vez que la bulgara decídia desaparcer por un tiempo de Londres, era normal que la echara de menos. Suspiró antes de contestar a la elfina cerrando levemente los ojos para luego fijarse de nuevo en Siyanna. -hola...si estaba buscando una serie de libros y esperaba encontrarlos aquí....´-comentó aunque la verdad la gustaría saber, bueno saber no, la gustaría la verdad ver la oficina de su madre y por cierto....donde estaría Lionel...no lo había visto desde que había vuelto de nuevo a Londres aunque pare decir la verdad siempre ambos habían estando distantes. Era como si el fuera el hijo perfecto que controlaba sus poderes demoniacos y ella la hija que tenía una pequeña tara en ese control de los poderes demoniacos. Suspiró....a veces tenía celos e incluso envidía de él y sabía que su madre lo adoraba.

Al poco tiempo los elfos llegaron cargados de bandejas por lo que sentó en el lugar mas cómodo de aquel salón ubicado cerca, por no decir al lado, de la habitación de su madre y donde además podía observar a las dos brujas Ivaskhov que tenía delante. Mientras tanto se sirvió un vaso de zumo de naranja natural mientras tomaba una tostada con jamón serrano y unas gotas de aceite de oliva por encima. Tomó un bocado mientras su madre comenzaba a explicar o mejor dicho a responder la pregunta que había lanzado su hermana menor Maida. Cuando su madre dijo lo de las lecciones la castaña se acomodó en el sillón colocando su espalda bien apoyada en el respaldo y escuchandola. A poca gente su madre contaba los problemas que tenía la ojiazul, solo a gente de mucha confianza, como por ejemplo, familia, más que nada para que estuvieran alerta y advertidos del pequeño problemilla que acarreaba desde pequeña. Lo que contó era verdad, aquel compañero Bulgaro la tocó mucho las narices, demasiado, por lo que optó por arreglar sus problemas ella sola. Lo bueno esque la mano de su madre y sobretodo, porque su padre era el mismo director de Durmstrang, era lo que ayudo a que siguiera estudiando en aquel colegio tan importante donde las artes oscuras era algo primordial en sus lecciones. Siempre se acordaría de aquellos veranos con su abuelo y la relación tan fuerte que obtuvo con él al pasar tantos veranos en el averno a su lado. Mas otros añitos de pequeña en alguna que otra casa de campo donde pasaba las vacaciones, la verdad esque él abuelo para ella era muy divertido. -Me cuadra, pero mi pregunta es¿ como esque no sabiamos hasta ahora que eramos Ivaskhov? sabía que eramos Selwyn....pero no sabía que corria por mi sangre la linea Ivaskhov....-comentó mientras se quedaba dubitativa. Pero la verdad esque la gustaría saber cual eran los otros planes de su hermana pequeña.¿ Que planes había tenido para no conocerla?. La Selwyn había entrado en las filas tenebrosas nada más acabar todos sus estudios y la verdad esque la encantaba ser mortífaga y sentir el poder y el miedo en su cuerpo, pero se había retirado por todos los quehaceres que conllevaba la marca y por que ahora no tenía todo el tiempo para dedicarse plenamente a ella. Era era su excusa de no haber tenido tiempo para conocer mas de Maida, ese había sido su plan de vida pero no sabía cual había sido el plan de vida de su hermana pequeña. @@Lyra Katara Selwyn @

Ahora que se suponía que se había instalado de nuevo en su nueva familia lo que quería era tener más atención con sus queridas mascotas, es por ello que se acordó de que su madre tenía una tienda en el callejón diagon denominado Chrookshanks. Era el lugar idoneo para visitar y sobretodo solucionar el tema que tenía pendiente, tener un libro donde estuvieran todas las criaturas mágicas con sus diferentes formas de cuidado y otro libro de criaturas no mágicas y con el mismo contenido del anterior. Y sabía que allí podría encontrarlo y mas con la ayuda de su amada madre que entendía mucho sobre aquel tema y la facilitaria la mejor obra para aquel tema. Aquel dia iba con una túnica sin mangas y por dentro de esta unos pantalones cortos y una blusa sin mangas. Sus pies vestían unas sandalias con un poco de tacón y la mitad de su melena castaña clara con rasgos rubios iba la mitad recogida en una coleta y la otra mitad suelta. Se había aparecido en el callejón diagon en aquel dia caluroso y se acercaba con paso seguro hasta la tienda. Allí había conseguido a su querida serpiente Ketket a la que quería con locura y tambien fue regalo de su madre su querido minino. Llegó al poco tiempo a la puerta de la tienda la cual abrió con delicadeza notando que algo extraño habia pasado en la tienda. Había algo que había cambiado y no se daba mucha cuenta de que era. Entró en el interior de la tienda cerrando la puerta tras de ella mientras fruncia el ceño, no sabía donde estaba la verdad, llevaba tiempo fuera pero no pensaba que la tienda hubiera cambiado tanto. Algo la decia o que se había equivocado o que su madre lo había reformado. No había leido el letrero y normalmente era algo depistada pero estaba segura de que esa era la tienda de animales de Katara.

La verdad esque no sabía muy bien lo que había pedido su hermana pero los elfos asintieron ante la petición de Maida por lo que ellos sabrían lo que sería aquello. La verdad esque ella no quería esperar a la hora de comer para preguntar a su madre las dudas que la acontencia, preferíria disparar sus preguntas en el almuerzo de aquellos instantes. Parecía que iban a tomar el almuerzo en el cuarto de su madre por lo que se asintió con la cabeza y les pidió a los elfos que la trajeran una varias tapas de jamón serrano con aceite de oliva y de beber cerveza de mantequilla. Había desayunado hace tiempo y lo que la pedía el cuerpo era algo fresquito y que llenara algo su estomago vacio. Por suerte se asentarón en lugar donde se llevaría a cabo el almuerzo no sin antes que uno de los elfos se marchara para ir preparando las cosas y Kowalsky se quedará con ellas por si había alguna petición particulas. La ex mortifaga no sin antes miró con una sonrisa orgullosa a Maida cuando dijo que ambas Ivashkov tenían un porto envidiable. Daba gusto escuchar a alguien hablar así, la verdad esque no se acordaba mucho de su hermana pero lo que estaba escuchando la gustaba....si la gustaba y mucho, se llevaría bien con ella. -La verdad, esque todas las que llevamos la sangre de Lyra tenemos buen porte y mas si somos de esta familia....por cierto madre....-ahi es cuando hizo una pausa pues sabía que iba a lanzar una pregunta a su madre-¿ como es que soy de Linea sanguinea una Ivashkov?....vale que mi padre es bulgaro pero no se de donde vienen mis raices rumanas....-comentó dubitativa mientras miraba a su madre pensativa y luego a la mesa intentando de enlazar datos. -Eso si, comentar que me encanta el apellido, suena a poder y a fuerzas tenebrosas y ya sabes que a mi eso me encanta, pero me gustaría saber mas detalles para decir bien orgullosa que soy una Ivashkov-comentó intentando dar un poco más de tiempo a ella y a su madre para procesar la futura repuesta que la iban a conceder Katara. Luego miró a Maida con una media sonrisa esperando que ella lanzara su próxima pregunta. -Bueno hermanita te toca soltar pregunta-comentó divertida, aquello la gustaba no quería ver sufrir a su madre pero siempre que había preguntas se lo pasaba bien viendo como su madre las daba ciertas explicaciones. Y esque ser nieta de Lucifer y de haber tenido que vivir mucho tiempo en secreto y alejadas del resto del mundo era complicado. Luego pasaba lo que pasaba, que se iban descubriendo cosas y debían poco a poco saber de sus origenes. Pero ella no se quejaba, estaba bien orgullosa de haber nacido donde había nacido y de ser hija de Lyra y sobretodo, de ser descendientes del señor del averno. Además sabía que en cuanto formulara Maida alguna que otra pregunta sabría más de ella y podría conocerla mejor y quizás tiempo a tiempo entendería, por las diferentes circustancias, por que su madre la dejaba temporadas con el abuelo o se quedaba en casa a cuidado de otras personas mientras ella hacia algun que otro viaje. Esta charla en verdad prometía,por el momento, parecía, que Katara no quería que se enterese nadie excepto ellas. Y la Selwyn lo prefería, la gustaba la discreción en aquellos asuntos. @@Lyra Katara Selwyn @

Buenas familia hermosa!! Me pasa por aqui para avisar que acabo de postear mi actualización de ficha colocandolos como familia sanguinea =D. No sabía si tenía que pasarme para avisarlo, pero por asi acaso lo dejo por acá diciendolo. Asi ya me faltan menos tramites para seguir actualizando al personaje e incluyo que ya he integrado en mi historia a esta hermosa familia ( ahora solo me queda el cambio de nick T_T). Bueno ya les dejo de dar guerra por aqui, espero no molestar diciendo esto por aqui ^^. Un abrazoo!!

Hola! Me gustaria realizar los siguientes cambios en mi ficha de personaje. Muchas gracias adelantadas. Datos Personales: Nombre del Personaje: Eliah Selwyn Ivashkov Sexo: Femenino Edad: Joven Nacionalidad: Española(Inglesa por parte de madre y Bulgara por parte de padre) Familia(s): Familia sanguínea : Ivashkov Familia Adoptiva : Evans McGonagall Padre(s) Sanguíneo: Lyra Katara Ryddleturn Director de Drumstrang(Igor Karkarov)** Perfil del Personaje: Raza: Demonio. Aspecto Físico: Piel pálida, ojos azules con algo de amarillo que parece la mirada de un felino los cuales llamean y cambian de color(amarillo) cuando sale su lado demoniaco, cabello castaño claro que la llega hasta pasar los hombros, cuando le da le sol se aclara pareciendo rubio oscuro, Mide 1.70, tiene un cuerpo Atlético y con atractivas curvas. En el omoplato tiene una marca con forma de pentagrama invertido. Suele vestir de forma despampanante para dejar impresionados a los demás. Cualidades Psicológicas: Agradable y simpática con su familia, a no ser que alguien moleste a sus allegados puede llegar a ser bastante desagradable. Malévola y Fría con sus enemigos no tiene pavor en hacerlos sufrir. Por los demás suele ser algo distante,fría y poco sociable, pero cuando tiene mal día puede estar más apagada de lo habitual o en ocasiones enfadada. Es algo distante con la gente y suele guardar las distancias mostrándose fría, seria y algo altanera, además de ser muy orgullosa. A veces parece que no esta a gusto con nada y es fiel a los ideales tenebrosos con los que se ha criado. Es una persona muy leal y se puede confiar en ella. La gusta ayudar y animar a sus familiares y amigos cuando pasan por mal momento. Aunque se dice que tiene una faceta sádica y violenta que los que la han sufrido no han podido nunca afirmar si es verdad. Suele ser fuerte en los momentos malos y ser el pilar en los que se pueden apoyar sus familiares y amigos cercanos siendo un gran apoyo para estos aunque no lo demuestre. A veces no suele mostrar sus sentimientos en público, solo en privado con gente de confianza. Poca gente puede tener la confianza de la española. Historia: Descendiente de la grandiosa familia Ivashkov y de la desaparecida familia Selwyn, Hija de la matriarca Lyra Katara Selwyn Ivashkov y del director de Durmstrang Igor Karkarov**, además de ser nieta de Satanás**. Su Infancia fue alegre en el seno de la familia Mortífaga creció feliz junto a sus hermanas, aunque tenía problemas con sus poderes demoníacos heredados de su madre Lyra. Siempre ha tenido una obsesión con el fuego, elemento que controla con dificultad ya que es su elemento demoníaco. Cuando Eliah tenía apenas 5, se propuso tintar a los gatos de su madre de colores estrafalarios,peinarles con crestas y vistiéndoles con mini-chaquetas de cuero. La costo mucho pero salió satisfecha de su trabajo. Aunque la peor travesura fue dos años después, cuando rapó el pelo a sus hermanas mientras dormían tranquilamente. Apenas siguieron creciendo sus travesuras también, quizás la pequeña Eliah como demonio influyera en su hermana demoniaca (por parte de padre) Kutsy ,a la que no conocía por el momento, a cometer malvadas travesuras. A la que mucho más tarde conocería trabajando en el ministerio en el cuidado de criaturas mágicas y viviría con la familia de Kutsy, siendo la Evans Mcgonagall su familia adoptiva. Aunque no siempre quería molestar a su madre por lo que decidió una noche preparar la cena a la familia. Pero Eliah al ver el fuego. y sin saber de sus poderes demoniacos, empezó a jugar con él formando llamaradas y bolas que acabaron quemando la cocina. Por suerte, salió sanas y salvas y el fuego se apagó rápido. La Selwyn acababa siempre con pequeñas heridas después de alguna travesura fallida, que no la importaba para nada hacérselas, es más las mostraba con alegría por haber hecho tal hazaña. Al cabo de un tiempo y por su descontrol, estuvo viviendo en el Averno acompañando a su madre Katara a visitar a su abuelo. Allí intento hacer alguna travesura pero estaba más controlada y ninguna la salía bien, por lo que dejó de intentarlo. Ahora que salía a jugar sola (al tener mas edad ) por Ottery,tuvo algunos problemas con otros niños de otras familias mágicas por lo que Katara decidió que su abuelo intentara controlar la ola de violencia que tuvo la niña de ojos azules parecidos a los de los felinos .Y allí empezó a acostumbrarse poco a poco en la vida en el infierno que fue bastante dura para la Ivashkov pues sus poderes y su ansia de sangre fue bloqueada por el tatuaje que lleva en el omoplato con forma de pentagrama. Eliah paso un tiempo con Maharet , cuando su madre Lyra no podía ocuparse de ella, con la que paso una etapa bastante feliz hasta que llegó la carta de Hogwarts. Compró su primera varita y a su primera lechuza,Azanatos. Nada más ingresar en Hogwarts fue destinada a Slytherin allí se esforzó muchísimo para dejar alto el nombre de la familia de su madre .Muchos temían el alto conocimiento de la joven sobre las artes oscuras o su increíble manejo de ellas y de los hechizos mas peligrosos del mundo mágico, por lo que llamó la atención de un heredero de Slytherin.Radamantys, el cual la propuso ingresar en la familia Slytherin cuando acabara sus estudios y ser él su padre adoptivo e instructor. Cuando acabó sus estudios en Hogwarts la llegó una de lechuza de la escuela de Durmstrang, una academia donde se le daba especial importancia a las artes oscuras y allí completo su formación mágica y la fascinó tanto la magia oscura que pensó que el mejor lugar para mostrar su potencial y seguir aprendiendo más era ingresar en el selecto grupo de los mortífagos al cual había pertenecido su madre. Aunque no sabía porque tenía la insistencia de estudiar en aquel colegio búlgaro cuando se suponía que ella no era de nacionalidad búlgara ni tenía ningún familiar. Mas tarde se enteraría de que el director era su padre, el cual tenía raíces, además de búlgaras, rumanas referentes a la familia Ivashkov por parte de la madre del Karkarov. Así que sin dudarlo siguió sus formación, (tras acabar en Durmstrang y conocer brevemente a su padre), en la academia de magia y hechicería. Supero con éxito la academia e ingreso en las filas mortífagas. Teniendo que cambiar su varita por otra mucho más poderosa ya que su otra varita no podía con el poder de Eliah. Cuando volvió de nuevo al hogar su madre Katara la regaló un minino pues tenía una caja de la que no dejaban salir mininos. Empezó a buscar trabajo en el ministerio donde adquirió un puesto como empleada en la oficina de seguridad. Aprovechando su trabajo su madre la encomendó la tarea de buscar miembros del linaje del señor tenebroso al estar la familia Selwyn ligada al señor oscuro. Mientras tanto supo que una parte de ella estaba ligada con otra nieta de lucifer ya que un el padre de Eliah había tenido una niña con la cual estaba ligada a Eliah. Quizás su abuelo consideró que Eliah debía de cumplir su función como nieta mayor del señor del infierno y guiar los pasos de sus descendientes y aquella niña medio demonio estaba muy alejada de los pasos demoniacos. Es mas cada vez que la Selwyn se acercaba a la Evans esta cambiaba su comportamiento bueno por el contrario, la podía manejar su carácter a su antojo. Por lo tanto tomó las riendas de su hermanastra como venganza a su padre por no haberse ocupado de ella después de tantos años. En una de sus idas y venidas, recibió una carta mostrándola cual era una de sus líneas de sangre la familia Ivashkov, haciéndola ver que su abuelo quería que viviera junto a su madre en un lugar mas tranquilo tras el cierre de la Selwyn y para que su madre estuviera con su hermana Taurogirl, tía de Eliah.

Había seguido de cerca a sus elfos, si sus malditos elfos que la acababan de traicionar de forma trapera. Ya serían castigados, sabía varios hechizos que eran bastantes molestos o eso o mandarles por un tiempo al averno, odiaban aquel sitio y quizás seria bueno para que supiera no entrometerse en sus cosas. Observó a su madre que la sonreía y ella intentó sonreir inocentemente pues ahora ya sabía porque no queria que la viera, ya sabia que no iba a tener oportunidad de elegir su habitación en algun lugar del castillo. Y no, no se equivocaba, su progenitora ya había lanzado la orden a uno de sus elfos para que llevaran sus cosas a la habitación de enfrente suya para tener vigilada a la castaña. Suspiro, sabía que era imposible escapar de los mandatos y deseos de Katara y que tenía programado que durmiera enfrente de ella para tenerla controlada y que no armara nada de las suyas. Bueno, era normal, había que decir que la española no tenía un curriculum muy sano en ese aspecto de portarse bien. Acabó abrazando a su madre mientras miraba a la chica, ahora que se fijaba bien la sonaba, ¿era una de sus hermanas pequeñas? la verdad esque a veces era tan egocentrica que no recordaba a la gente si pasaba un periodo largo de tiempo. Justo cuando iba a empezar con sus preguntas su madre la presentó a su hermana Maida a la cual miró expectante, había algo que no la cuadraba, ella era fiel a las ideas de sangre limpia y la extrañaba que algun familiar suyo no tuviera esos origenes o que se relacionara con muggles. Intentó esbozar una sonrisa hasta que escuchó como otra vez la Selwyn decía de ir a comer o a descansar. Sabía que de esa manera Katara quería ganar tiempo para contestar las miles de preguntas de sus hijas, eso estaba claro. -Encantada Maida...-dijo mentras la observaba cuando se acercaba con cautela, eso la gustaba que se acercaran con cuidado a ella sin agobiarla de repente. La devolvió una pequeña sonrisa mientras dirigía su mirada felina a su madre-no estaría mal comer algo y mientras comemos hablar de todo un poco-dijo divertida mientras en sus labios se dibuja una sonrisa malevola. -Nibiru y Kowalsky ya sabeis que hacer preparos para antendernos para comer algo y luego antender mi cuarto ya de paso.....-comentó mientras miraba de forma severa a sus elfos que la miraban desoslayo sabiendo que se habían equivocado con sus acciones.

Como siempre estaba en contacto con su amada madre Katara, sabía que era la única en la que podía confiar en aquel mundo de humanos y la verdad era la única que había dado la cara por ella. Pero lo malo es que se hacia mucho lio de su procedencia. Sabía que por parte era Selwyn por que era la familia que cuido y adopto a su querida madre, pero por lo visto tenía cierta sangre Ivashkov, pues su tía Taurogirl pertenecía parece ser a esa familia. La verdad no sabía si se había enterado muy bien de la historia, normalmente se hacía tanto lios que no acababa sabiendo cuales eran sus orígenes. Lo único que sabia es que su padre era el director de Durmstrang o eso la dijo su madre, así que a lo mejor por aquellos tiros si que tenía mas sangre transilvana aunque no lo sabía muy bien. No sabía por que pero pensaba muy claramente que debía de tener una charla con su madre de nuevo. Porque cada día tenía mas lio en su cabeza sobre sus orígenes, lo único que tenia claro esque era su hija y que era la nieta de lucifer, lo que conllevaba a ser demonio lógicamente, aunque tuviera a la vez mitad de bruja. Estaba dando demasiado vueltas a su cabeza y eso la provocaba dolor a la bruja de ojos azules con toques amarillos, aquello no la hacia gracia. Llegó a la que era una cabaña de aspecto abandonado que estaba ubicado en aquel pueblo ingles. Parecía que cualquiera podría entrar, aunque en verdad quien iba a querer entrar en aquel lugar si no sabía lo que era. Aquella idea la parecía genial una gran idea, la verdad esque daba gusto cuando la familia era sangres limpias y sabia con lo que trataban. Tocó la brillante verja que había delante de la cabaña que pronto la traslado hasta Rumania, mas bien Transilvania. Apareció en entrada principal que separaba con una verja metálica los terrenos de la familia con el exterior. Abrió la puerta para adentrarse no sin antes percibir el lema de la familia. Aquello la gustaba, menos el tema que tardó como cinco minutos de cuesta hasta llegar a la puerta del castillo, que fue lo que mas la gusto nada mas aparecer allí era imponente. A su lado iba su elfo fiel y algo pesado Nibiru que la acompañaba a todos los viajes, con un poco de suerte su otro elfo Kowalsky ya habría llegado al castillo Ivashkov y habría puesto sus cosas en el cuarto, aunque seguro que Katara se había encargado del alojamiento de su cuarto cerca del suyo o con un poco de suerte no se había enterado de su llegada y podría elegir habitación. No hizo falta tocar a la puerta pues su elfo Kowalsky ya se la estaba abriendo desde dentro mientras Nibiru salía disparado impaciente a buscar a la ama Katara. -Nibiru, no, espera-susurró entre dientes la bruja castaña mientras el elfo salía disparado al cuarto de Lyra para avisar de su llegada. Perfecto ahora no podría elegir habitación y su madre la tendría controlada. Miró a Kowalsky de reojo mientras este se encogía de hombros. Elfos… no podían estarse un poco quietos aunque fuera un momento. Mientras tanto el elfo Nibiru nada mas llegar a la puerta de la habitación de Katara la abrió emocionado mientras miraba a la madre de su ama con expectación y a la vez la avisaba con emoción de que Eliah acababa de llegar al castillo, pero a la vez que el elfo avisaba a la hija de lucifer pudo ver a otra chiquilla reunida con la madre de su ama a la cual se quedo mirando con expectación pues se parecía a ambas brujas que él conocía. @@Lyra Katara Selwyn

Muchas gracias por darme la bienvenida a la familia y por aceptarme en ella =D ya soy super mega feliz *O* . Pues enseguida me pongo a rolear en la familia y hare los cambios pertinentes en la ficha =D. Ya me tendreís muy pronto por allí dando guerra muajajaja.

Bueno como fiel hija de mi madre Lyra Katara <3 vengo a inscribirme en esta familia y espero que me acepten. Ahora mismo soy neutral pero he sido mortifaga y mi personaje como siempre sigue fiel a sus ideales Mortifagos, adora matar y ser malota Ficha de registro: Nick: Eliah Ryddleturn Ficha Personal: http://www.harrylatino.org/topic/78636-eliah-ryddleturn-selwyn/ Bóveda Personal: http://www.harrylatino.org/topic/78681-boveda-de-eliah-ryddleturn/ Elfos o mascotas: Puff tengo muchos; Elfos: Nibiru y Kolwasky; mascotas: -gato de raza egipcia( Mau) -lechuza(Azanatos) -Piton(ketket) -toro de bravo español (taurus) Negocios (sólo si los tiene): no tengo Indicar de quién quieres ser familiar: Hija de Lyra katara Parentesco sanguíneo o adoptivo: sanguineo Mencionar en qué otra familia estás: Evans McGonagall Skype: saraeliah

Hola me pasó por aquí para poder rolear en esta familia como heemanosa de kutsy Nombre: Sara Cumpleaños: 10-11-1992 Nick del personaje: Eliah Ryddleturn Link a la Ficha de personaje:http://www.harrylatino.org/index.php?showtopic=78636 Link a la Bóveda: http://www.harrylatino.org/index.php?showtopic=78681 Parentezco con la familia (sanguíneo, adoptivo, visitante): adoptiva Inclinación de bando (Orden del Fenix/Marca Tenebrosa): marca tenebrosa (?) Relación con la familia (Hij@, sobrin@, ahijad@ de...): hermana de kutsy Mascotas/elfos que posea y desee que aparezcan en la lista: tengo una lechuza llamada apañaros, un gato llamado mau, mi elfo kowalsky, mi pitón ketket y creo que ya está...jajaja Actividad que puedes aportarle a la familia (alta, media, etc): baja (?) o media depende xD Correo electrónico/Skype/Facebook (opcional): Negocio en el Callejón (indicar si se tiene para promocionarlo en 1ra página):

Hola, buenas! Tengo el correo ligado a mi cuenta y desde don semanas me ha dejado de llegar los correos de aviso cada vez que alguien contesta algún apartado y antes siempre me avisaba. He mirado las notificaciones,cambiado los ajustes y todo y siguen sin llegarme correos de aviso. Me preguntaba si hay alguna solución o tengo que cambiar de correo o algo. Muchas gracias por su atención y espero respuesta pronto!

Necesitaba tranquilizarse no había sido la primera vez que su poder se hacia ver en el mundo mágico y aunque mas o menos lo controlaba, no debía de seguir en ese estado de alteración por lo que mejor en ese momento es que tomara las riendas de ese asunto y se relajara. Le había preguntando algo y el hombre parecía pensárselo muy bien antes de meter la pata. Ella solo intentaba relajarse pues si sus ojos se volvían amarillos sería lo peor que podía pasar a la mortífaga en ese momento, esos ojos solo se veía en ciertas ocasiones y con cierta gente. Fue entonces cuando volvió a escuchar la voz del mago intentando relajar las cosas. En verdad había llegado con una mal actitud y quizás se había dado cuenta en cuanto llegó la matriarca de los Selwyn su metedura de pata. La varita de la joven aún seguía en sus manos, agarrada con suma firmeza preparada por si el mago hacia un gesto que a ella la diera la sensación de peligro. Cuando le volvió a observar este parecía cansando y agotado quizás por la situación y según mostraban sus palabras era el momento que él se marcharía. Abrió la puerta de la sala dejando ver el resto de la tienda mientras indicaba con la varita la dirección de la puerta. Ya sabía donde estaba la salida de la tienda por lo que tenía constancia de lo que Drake tenía que hacer en ese momento. Y las palabras que la había dedicado la daba sensación de que le volvería a ver, cosa que a ella no la gustaba nada. Solo pensaba que se acercara a su familia la cabreaba aún mas pero debía dejar de lado esas ideas y relajarse. Lo único que en verdad la molestaba esque había venido a pedir consejo sobre un caballo a su madre y ahora mismo no podría saber que raza de ese animal la gustaría más. -si creo que debería marcharse...-comentó con voz fría pero mas tranquila. Aunque ahora mismo recordaba las palabras del inquisidor: "su familia y usted no pueden correr ningún peligro". Esa frase era la que mas curiosidad la daba, tendría que investigar sobre los inquisidores y saber que eran y que pretendían. Y dependiendo de lo que encontrara volvería a contactar con él para saber que era lo que quería conseguir.

El demonio interior de Eliah comenzaba a removerse a cambiar a sentirse incomodo. No entendía muy bien el porque pero sentía que no debía de estar allí en ese mismo instante. Quizás era la hora de marcharse, no quería hacer daño a nadie y mas en el negocio de su familia, pero en verdad no sabía lo que la pasaba, era algo extraño pero podía hacer que el humano saliese herido. Por suerte mientras él hablaba había seguido comiendo, intentando apaciguar al demonio interior para que cesase, pero aún seguía allí despertándose. -creo que has de disculparme, creo que voy a tener que ausentarme....-comento mientras su mirada había cambiado de repente. Tendría que saber que estaba pasando, porque el cambio que la estaba ocurriendo en ese instante. Quizás hablar con su madre....o su abuelo, no lo sabía muy bien pero todo había sido diferente desde que había conocido a su hermana menor Kutsy,no sabía porque estaba tan liagada a ella que sentía demasiado lo que la ocurría a ella y pensaba que a ella la pasaba lo mismo que lo que la pasaba a la Ryddleturn.

Estaba tan ensimismada en concentrarse en recoger el mayor calor en su cuerpo que sus ojos se habían quedado momentáneamente cerrados pues parecía que se la había olvidado que estaba en un lugar público donde solía haber gente.Aunque en aquel lugar justamente no había muchas personas por no decir que estaba algo vacio, pero casi que lo prefería no la gustaba estar rodeada de mucha gente así que ahora mismo se sentía bastante tranquila. Su respiración era relajada y ni siquiera se percató de que alguien había entrado en el local. La verdad esque tardaba mucho el camarero, quizás había aprovechado para colocar el almacén pero eso ahora mismo no la importaba pues estaba tranquila. Pero al poco tiempo de pensar en aquello la voz masculina de un mago la llamó la atención, haciendo que sus ojos se abrieran desvelando el color azul junto amarillo que tenía en ellos. Le observó por un instante, la sonaba su rostro aunque no tenía muy claro de que la sonaba. Se disculpó por que no había meseros a la vez que colocaba una carta de bebidas delante de ella. Deduciría que aquel hombre sería el dueño del local, por lo que ahora mismo tenía el prestigio de conocer de quien era aquella cafetería tan agradable en la que se encontraba ella. Miró la carta cuando al tiempo notaba que se sentaba cerca de ella en una de aquellas cómodas sillas que se encontraba allí. Ya tenía pensando que quería pero fue entonces cuando supo quien era al decir su nombre, un guardían con el que hace tiempo que hizo una guardía en un spa. Aunque se acordo vagamente puesto que estuvieron poco tiempo de guardia. -Encantada, soy Eliah y por cierto un chocolate caliente no estaría mal....-comentó mientras le sonreía por un momento aunque a la vez tras su comentario de los cómodos de los asientos se sentía algo avergonzada. -pensaba que estaba sola.....no te escuché llegar....-comentó desviando la mirada de él mirando cualquier otro lugar de la cafeteria. También se dió cuenta de la mala impresión que le había dando al mago.

Enarcó una ceja, como era posible que la preguntara aquello. Eso no lo contaba ella a no ser que quisiera contarlo, además quien se pensaba que era ella...Ahora tenía mas decidido lo que había pensando hacer antes. Fue entonces cuando el camarero apareció con un carrito empujando los diferentes platos de la cena de aquella noche. Dispuso los platos de la Selwyn en su lado de la mesa mientras que los de Sean se los dispuso en su lado de la mesa. Después de aquello el mago se retiró dejándolos de nuevo solos. -creo que aquello no te concierne...poca gente sabe algo de mi vida....-comentó con mirada fría para luego dispones su mirada azul en el plato de su cena.-que aproveche-puntualizo mientras notaba que pronto tendría que ausentarse pues la daba la sensación de que alguien la requeriría. Tomó el tenedor entre sus niveós y finos dedos a la vez que pinchaba la ensalada comenzando a comer esta, para luego combinarla con aquel pescado que había pedido para cenar. La verdad que estabsa delicioso y combinandolo con la copa de champan era una exquisitez. Suspiró levemente , tendría que poner su cabeza en orden pues no podía permitirse ciertas acciones y libertades, tenía que ser orgullosa como lo había sido siempre antes.

Aquella tarde empezaba a ser noche, una noche bastante mas fresca tras aquellos días tan calurosos que había pasado por todo Londres. Es más había sido muy atrevida tras haber salido del castillo Selwyn sin una chaqueta y con aquel vestido bastante primaveral aunque era mas bien veraniego. Aquel vestido corto de palabra de honor no cubría ni siquiera las rodillas que estaban completamente descubiertas, por no decir que sus pies vestían unas sandalias altas. Su rostro iba poco maquillado, tan solo algo de rimel y raya de ojos, en aquellos ojos azules y su cabello castaño liso que llegaba mas allá de los hombros iba totalmente suelto. Era la última vez que pretendía ir de compras sin antes mirar le tiempo que iba a hacer. Demasiado acostumbrada estaba a españa que en esa época del año haría buenísimo por las calles ibéricas. Ahora solamente quería entrar en calor, tomar algo que asentara la temperatura de su cuerpo y que su piel nívea dejara de estar helada como lo estaba en esos instantes. Mientras vagaba por el callejón, pudo contemplar una cafetería bastante cálida y por lo visto no muy transitada, pero eso era lo que la gustaba, no estresarse con mucha gente. No se lo pensó dos veces y entro en aquel lugar mientras empujaba la puerta que apenas hizo mucho ruido. Casi algo apresurada cerró la puerta tras ella y observó el calido ambiente de la cafetería. Fue entonces cuando su vista se dirigió a un lugar apartado con sillones y una mesa en el medio. Sus ojos azules con detalles amarillos brillaron como si hubiera descubierto el cielo. Ando aunque mas que andar parecía correr hasta aquel sitio donde se sentó rápidamente mientras se relajaba y cerraba los ojos. Si, eso era vida y calor aunque seguramente necesitaría una taza de café, esperaría allí un momento a que la atendiera, por el momento estaba disfrutando del relajado tacto de aquel estupendo sillón.

Su madre no aprobó la acción de la demonio la cual últimamente estaba algo descontrolada. Pronto aquella minina persa se convirtió en humana observando así a la matriarca de la Selwyn. Ahora si que se había metido en un lío, lo peor de todo era ver la hija de Lucifer enfadada, eso era lo peor que había. Trago saliva lentamente mientras sus ojos seguían fijos en Katara. Estaba realmente enfadada, la verdad esque se había tomado muchas libertades, pero en verdad aquel muchacho la había enfadado mucho tanto que no pensaba en las cosecuencias de sus actos. Bajo la varita mientras escuchaba las replicas de su madre, siempre había sido muy amable con ella, pocas veces la había visto enfadada y cuando se enfadaba temblaba la tierra, eso era seguro. Bajó la cabeza en silencio mientras asentía,siempre sería su madre y hacer las cosas mal provocaba que su madre la regañara era normal, de pequeña la había regañado mas Lucifer pero su madre también cuando la gota colmaba el vaso, es mas su madre siempre la decía que se controlase. Asintió con la cabeza ante las ultimas palabras de su madre mientras levantaba la mirada. -perdona madre....-se disculpo la mortifaga mirándola seria y arrepentida a la vez.. Pues lo ultimo que quería que tuvieran problemas con el mundo mágico. Después de aquello se levantó Drake del lugar donde la joven le había ordenado o mejor dicho impuesto que se sentara. Empezó a hablar a su madre de ciertos temas, aquello no la gustaba nada, tenía muy mala pinta y ella no se fiaba. Pero quería saber que era eso de los inquisidores, sonaba mal y a peligro, y quizás esos tales inquisidores querían hacer daño a los descendientes del infierno. Y aquello de que fuera un protector la sonaba raro, ellas sabía cuidarse solita además de que ya había sufrido heridas y cicatrices con su camino de ser mortífaga. Ahora mismo tras que su madre la dijera que tenía que hablar con ella, la verdad esque la dio verdadero miedo, temía pocas cosas pero lo que mas temía era a su madre enfadada o las posibles broncas que podía echarla. Asintió ante lo que dijo su madre de que mas tarde tendría que hablar con ella mientras se mordía el labio inferior. Fue entonces cuando notó la mirada del italiano al cual lo miró de forma fulminante como queriendole decir: " te has metido en un buen lío a ver como sales de él". Apretó los puños intentando frenar sus ganas de acabar con aquel tipo aunque escuchando sus palabras tendría que apañarselas de otra forma. -vale yo me encargo, si no me meteré en mas lios-contesto a su madre mientras la observaba marchar. Seguramente el mago habría notado que su madre aclaraba lo de acabar con aquel asunto, su madre la conocía bien por lo que supo que tendría que aclarar como acabar con aquello. -Ya estas contento....-dijo acercandose de nuevo a Drake y empujandole con una mano para que la parte de detras de las rodillas se chocara con la silla y le obligara a sentarse.

A pesar de que intentara simular que estaba relajado su cuerpo lo estaba traicionando, el olor a ponzoña era patente en el ambiente y seguramente que sus colmillos se estuvieran afilando, por lo que sabía que se intentaría poner a la defensiva o protegerse de alguna forma. Y a pesar de que su varita estaba contra su garganta el parecía no ceder ni un momento. Pensaba que el mago creía que ella sería inofensiva y se estaba equivocando claramente, no sabía hasta que grado podía llegar si se enfadara. Antes de que pudiera actuar escuchó el sonido de un felino no muy lejos de ella. Miró de reojo hacia abajo y pudo observar a la minina persa, en su rostro no se dibujo ningún gesto, no quería dar muchas opciones ni ninguna pista al intruso. Notó como la felina se frotaba contra sus piernas y sonrió para si interiormente, ya que sabía que aquella gata era su madre que estaba en su forma de animago, una preciosa gata persa. La verdad esque por suerte de pequeña aprendió que lo peor que podía hacer era enfadar a una minina y más si la tirabas de la cola, mala opción. -Silencius-dijo antes de darle alguna opción mas de escapar de allí por el momento no tendría ninguna opción para usar ningún hechizo. La verdad es que no la había mucha gracia que se moviera por el establecimiento como si la intentara vacilar. Sabía que su madre escucharía todo y lo entendería por lo que cuando vi amenazar al Drake se rió divertida mientras seguía apuntando al mago. AL poco tiempo la felina se subió encima de ella posándose en su hombro algo que a ella la gustaba era divertido llevar allí a su madre en forma de felina. Cuando noto la cola de su madre pasar por su nariz no pudo evitar moverla pues la había hecho ciertas cosquillas, aunque había que decir que estaba sumamente suave¿ Qué champú estaría utilizando para su pelaje?. -Entonces solo vas a tratar el tema con mi madre ¿no?-preguntó aunque era más una afirmación- tranquilo, no te preocupes por la tienda estará bien-prosiguió hablando mientras se acercaba con la varita en alto hacia él. -Incárcerus-pronunció de nuevo y de su varita salieron tres cuerdas que ataron al mago , sus manos estarían atadas a su cuerpo por lo que no las podría utilizar. Eso de intentar hacer como si no pasará nada no la gustaba nada, ya había metido la pata y ahora mismo era hora de que supiera que no se jugaba con una Selwyn. Poso la punta de la varita en su espalda mientras lo obligaba a andar hacia un lugar mas apartado. Quizás ir al almacén sería mucho mejor, un lugar apartado donde nadie les molestaría y donde no podrían destrozar nada. Ahora mismo no podía hablar él cosa que la interesaba por el momento. AL llegar al almacén abrió la puerta entrando en él y la cerro tras de si con llave. No sabía si a su madre aquello la gustaría pero tenía que resolver ese asunto pronto y rápido. Aquel juego que se llevaba el mago la aborrecía, eso de que intentarán jugar con ella o su familia de esa manera la ponía de mala gana. Le invitó con un gesto con la mano a que se sentará en la silla, en cuanto lo hiciera lo ataría con la silla y ya vería lo que su madre quería hacer con él. De momento estaba en su hombro por lo que se enteraría la matriarca Selwyn de todo lo que pasara o dijera aquel vampiro que se intentaba meter con la familia de Lucifer.

Sabía que sus palabras acabarían con aquellas palabras del mago, era muy fácil saber la contestación del mago pero ella ya tenía planeado aquella noche y realmente le dejaría anonadado. Se lo había planteado toda la noche pero en sí ya tenía muy claro lo que iba a hacer aquella noche. Entornó los ojos por ultimo cuando acabo de contestarla mientras al tiempo escuchaba que la hablara de ella. Posó su espalda en el respaldo de la silla mientras miraba con una media sonrisa al Macnair que quería saber mas de ella. EN verdad nunca hablaba de ella, era un pasado y una historia peligrosa y algo oscura, por lo que hablar de ella era algo complicado y su historia solo la sabía su gente cercana. Por lo que tenía que contar algo de ella sin meter ningún detalle, aunque no entendía el interés de saber de ella ahora, no importaba su vida del pasado sino que ahora mismo importaba el presente. Pero bueno tendría que decir algo y pensaba que palabras o que contar sobre ella. Aclaró su garganta antes de hablar tomando un sorbo de su bebida que aclaró y refrescó su garganta y luego posó de nuevo la copa en la mesa. -Pues pasé mi infancia en el castillo Ryddleturn, fui a Hogwarts y a Durmstrang y me forme como bruja en la academia de magia y hechiciera...-explico sin contar mucho más- y luego trabaje en el ministerio para ser algo mas independiente y ayudar al mundo mágico a ser mejor-comentó mientras lo miraba sin más esperando que eso le valiera.

En verdad la daba bastante igual como la llamara siempre que respetara su nombre y sus apellidos, el orden la daba igual no cambiaba para nada lo que ella era. Aunque la verdad aquellas miradas que lanzaba no la gustaba ni un pelo, como siguiera con su irrespetuosidad tendría que tomar cartas en el asunto. A veces pensaba lo bien que estaba junto a su abuelo, el respeto hacia ella era unánime aunque ella tenía aún mas respeto con su abuelo y mas con su madre, a la cual tenía siempre en un pedastal de oro del que nunca se caería. Aunque ahora mismo la era incomodo estar tan cerca del vampiro pues había aprovechado el tiempo para poder analizar el aura del chico para descubrir que era un vampiro. Seres que a veces la parecían algo inferiores a ella pero en otro sentida era como ella, hijos de la misma noche y oscuridad, adoradores del mal y de su abuelo o así pensaba ella. Ahora mismo se dio cuenta de un detalle que se le había pasado, que estaba él allí para hacer un regalo a una chica y por lo que pudo deducir la quería comprar una mascota. Finalmente tras separarse del mostrador volvió a quedarse enfrente del mago mientras lo observaba pensativa hasta que volvió a escuchar las palabras del vampiro de nuevo salir de sus labios. La verdad para ella las dos familias a las que pertenecía seguían las lineas de sangre una más que otra pero ambas tenían buenas lineas de sangre y puras, pero no sabía a donde quería llegar aquel mago con eso, aunque no tardaría mucho en saberlo, incluso antes de saberlo se la paso por la cabeza que pudiera ser un componente de la orden del fenix. Entonces la demonio al escuchar lo último fijo sus mirada en Drake como si le quisiera matar con la mirada en ese mismo instante.¿Como demonios sabía eso? nadie lo sabia solo la gente muy cercana a ellas, a su madre y al resto de la familia. Su sorpresa se convirtió en digamos ira, o algún sentimiento parecido que represento apretando la mandíbula fuerte y respirando profundó. La verdad esque ese gesto podría aterrorizas a cualquier persona, pero eso no acababa ahí. En su mano apareció su varita negra que rápidamente puso la punta en el cuello del italiano mientras lo miraba bastante desafiante. -como osas....¿quien eres en realidad? ¿quien te ha enviado?.....estas muerto...-dijo la mortifaga mientras penetraba sus ojos azules que parecían refulgir con el fuego del infierno. Ahora mismo se daba cuenta de que no era trigo limpio. Tenía que haber hecho lo que pensaba en principio no fiarse nada de él y no haber seguido hablando con él. Quizás hubiera puesto en peligro su familia y si era así sabía perfectamente lo que hacer con él, eliminarle del mapa para siempre. Quizás el resto de su familia no fuera capaz de algo así, pero ella no estaba dispuesta de marcharse de Inglaterra ni que su familia se fuera de aquel país cuando tenían aquí su vida. Tendría que resolver entonces aquel error de la manera más rápida y fácil.

Enserio, ¿por que demonios sonreía? ¿había contado algo gracioso? por que ella pensaba que para nada había dicho algo gracioso. Frunció el ceño era algo ofuscante ese hombre la verdad no tenía que haber hablado para nada con él. Sin mas decir hola y adiós y punto, eso la pasaba por intentar ser sociable, quien demonios la diría que fuera mas sociable. Ahora echaba de menos esos momentos en los que con solo mirar con ira o con enfado quemaba todo a su paso, maldito abuelo, por que había refrenado su forma piromana. Siempre se acordaría del primer susto que metió a su madre cuando mató a aquel niño que se había metido con ella, aunque era verdad que en ese momento no quería hacerlo y menos pensaba que aquella piedra impactara con la cabeza del niño. Al recordar aquello llevó su mano al omóplato donde tenía el tatuaje que realizo su abuelo en su omóplato con forma de pentagrama. En verdad fue la única forma de frenar la ola de maldad que la dio cuando su hermana mayor Anna se fue al colegio de magia y hechiceria. Por un momento no se había dado cuenta de que seguía delante del mago, por lo que retiró la mano de su omóplato como si nada mientras miraba una estantería lo que era diferentes juguetes para jugar con las mascotas a la ves que escuchaba al enigmático chico. Espera un momento, como que lo sé, que demonios sabe si no tienen ni idea de quien era ella. Eso era indignante....espera un momento, era una gran bruja que venía de una gran familia conocida por el mundo mágico quizás si que la pudiera conocer de algo. Ahora mismo el ego de la demonio estaba por las nubes y eso si que era algo peligroso. Un italiano, por lo pudo comprobar al saber su nombre y parecía que estaba enamorado por las palabras que había dedicado de comprar algo a una chica. Los Italianos la habían dado bastante mal rollo sobretodo por la Salvatore que atacó una vez a la familia Ryddleturn, aquella demonio que intento derrocar a su madre por lo que comprobó cuando todo pasó y también por lo que pudo descubrir gracias a uno de sus hermanos. Ahora mas que nunca era mas reticente a aquel ser del cual tenía que saber cual era su esencia que parecía querer ocultarla. -Encantada.....supongo....-dijo mirandole como intentando saber lo que pensaba- Soy Eliah Ryddleturn Selwyn...."caballero"-dijo en un perfecto español pues ella había nacido en españa. Y el porque tenía el apellido Ryddleturn primero es por que siempre llevaría a su primera familia con ella aunque quizás habría que corregirlo- O si prefieres Eliah Selwyn Ryddleturn....o la que te va a patear el culo si prefieres-comentó pero esto ultimo en bajo mientras esperaba su reacción. - y por cierto, como eso eso de "lo se"-dijo imitando la voz del caballero con cierto tono burlón pero a la vez sabiendo que quizás pudiera sonsacarle algo y poder contestar sus preguntas.

Parecía que el mago se había quedado sin palabras. Solo había pedido lo que quería comer y se había quedado callado. No sabía si le había pasado algo o sin más no estaba acostumbrado a tener una cita y no sabía que tema sacar. Por el momento la comida que había elegido era bastante sabrosa o eso pensaba ella, no tenía muy mala pintan o mejor dicho no sonaba para nada mal. En cuanto pidió aquello el camarero se marchó llevándose la carta que habían utilizado para elegir los platos y les había vuelto a dejar allí solos. -Parece que te comió la lengua el gato....-comentó mientras colocaba sus brazos educadamente en la mesa como debía hacerse. Aunque quizás con esas palabras Sean pudiera decir algo ingenioso, eso estaba segura, pero también era una manera de apoyarle para que supiera de que hablar. Parecía que necesitaba una mano salvadora, pues seguramente sacaría el tema del tiempo y del tiempo la verdad no se podía hablar pues llevaban mas de media tarde y noche metidos en aquel negocio, por lo que sería bastante ridículo hablar del tiempo en una cita.

Ahora parecía que el mago se retractaba de las palabras que había usado ante ella. Era extraño pero eso era lo que la había gustado que se acobardara y diera para atrás en las palabras que había utilizado. Y claro que estaban fuera de contexto, la próxima vez que lo hiciera o espera mejor que no hubiera una próxima vez sino aquel mago acabaría bastante mal si seguía jugando con fuego. Pero parecía que le gustaba jugar con fuego muy a menudo pues se había acercado peligrosamente a la ojiazul tanto que estaba ahora a su lado. No le miró pero escuchó sus palabras mientras pasaba sus manos por el cabello. Pero entonces cuando nombró al Thestral fue cuando supo que algo iba mal, bastante mal, poca gente sabía que tenía un thestral y los que lo sabían que era apenas un par de personas, se acordaban de que aquel animal lo tenía desde que era niña y ya desde niña era bastante,digamos, peligrosa, tanto que su madre la tuvo que llevar con su abuelo Lucifer para que intentara controlarla un poco. Aunque también era bien sabido que poca gente podía verlos, y ella había matado a numerosas personas y para bien o para mal aquello de quitar vidas la encantaba. -si bueno, se como manejar un Thestral digamos.....-comento sin afirmar con palabras que tenía ese animal al que había llamado Tenebris.-ya de por si un Thestral es un animal mucho mas peculiar que un caballo o un gato ¿no crees?-dijo sin mirarle mientras observaba el suelo un momento para luego levantar la vista. Aunque ahora mismo no sabía si contestarle a la pregunta de que si podía verlos,quizás lo mejor era contestar lo mas corto y conciso posible para no dar mucha mas pista sobre ella. Quizás era lo que quería y no se sabía donde podría haber un espía de la orden del fenix y mas sabiendo que sus familias siempre habían estado ligadas a la magia oscura. -si puedo verlos.-contesto mirándole para ver su reacción y poder saber que intentaba aquel mago que parecía querer retarla.