Roxanne Rambaldi

Holi *inserte lunita de whats* ha vuelto por quien lloraban. - ¿Eres miembro o aspirante? Si eres miembro, dinos el rango: Aspirante - Nick: Roxanne Rambaldi - Nombre Muggle: Roxana - Edad: 19 - País: Chile - Fecha de Cumpleaños: 6 de Mayo

Hola hola caracola *-* @@Albus Severus Black Bienvenido a la familia, aunque ya te recibi por el castillo, no esta demás decir que eres más que bien recibido en la familia. He visto que eres bastante activo asi que espero verte roleando por Ottery. Tambien soy algo compulsiva asi que podemos ver que rol formamos, seguro algo interesante sale :3 @ bueno, aunque no te conoci, seguro fuiste un excelente aporte a la familia, mucha suerte en lo que te propongas ahora. El tema de las bajas lo ven las matriarcas @ Saludines :3

Nombre del Negocio: Magic Coffee Link a la Bóveda del Negocio: http://www.harrylatino.org/topic/101355-boveda-negocio-magic-coffee/ Trámite a Realizar: Cambio de iniciador, anterior: Laimi Evans, nuevo: Roxanne Rambaldi. Quitar familia Delacour.

El elfo la había llevado de vuelta al salón donde su abuela ya estaba con el desayuno servido. Alexander se encontraba allí también, y otros de sus familiares a los que lamentablemente no conocía, sin embargo, aprovecho la presentación para reconocer sus caras. Se sentó con Zelkat a un lado, y Alexander al otro. Tenía poco de su regreso a la familia, y supo que solo el pelirrojo la reconocería de una visita anterior, pero en algún momento debía conocer al resto de los Lockhart, y aquel era el momento perfecto. Mientras se servía una taza de té, y algunas galletas dulces observó como Alex bromeaba con su hermana, y la timida Zelda se mantenía callada. Sonrió a la última, quien en esos momentos hablaba para si misma respecto a la magia que traía consigo las fiestas de fin de año. - Concuerdo contigo, pero al menos estas fechas nos reúnen una vez al año para ponernos al corriente de nuestras vidas.-respondió, no era lo deseable, pero al menos era algo.- Soy Roxanne, un gusto conocerte... ¿Zelda? Esperaba no equivocarse con su nombre, apenas la venía conociendo. - No nos conocíamos, soy nieta adoptiva de los patriarcas.

No pudo evitar conmoverse con las palabras del joven. Que pusieran toda la confianza del mundo en la Rambaldi, para que se encarga de los preparativos de transporte en el día más importante de su vida significaba más que cualquier cosa en el mundo. Agradecía de todo corazón que el mismo Antoni la prefiriera a ella antes que a otro funcionario, podría haber escogido a un jefe, o al mismo director, pero no, era a ella a quien quería el día de su boda. - Estaré allí ese día.-prometió, y aunque tuviera que encargar por contrabando los vehículos mágicos, se los tendría allí aquel día. Y es que la Rambaldi ya tenía un plan bajo la manga pero no se lo mencionaría al joven hasta que estuviera cien por ciento segura. Como directora había hecho contacto con sus pares internacionales, con el de Rumania por ejemplo, había logrado una gran amistad, y estaba segura, que si le pedía un favor por los antiguos y buenos días, este lo cumpliría. Aún quedaba un último negocio que visitar, allí colocaría el traslador que llevaría al chef y el servicio de catering a la fiesta. Tal vez, y hasta podría probar el menú del gran día. Sintió rugir su estomago mientras pensaba en la comida, había olvidado la última vez que había comido ese día, o si siquiera lo había hecho. - Ahora, antes de que me hagas llorar, Tonks, ¿Nos vamos al restaurante? @

La Rambaldi ya empezaba a planificar todo en su mente, necesitaría de alguno de sus compañeros para que se quedara en Londres y supervisara el traslado de los invitados en Aura de Thestral mientras ella se ocupara del mismo, pero en la boda en Rumania. Vaya que sería una gran operación, pero si alguna vez había manejado un festival, ¿Como no iba a poder con una boda? Antoni también empezaba a prepararse, y antes de que la funcionaria pudiera decir algo, este ya le tenía un objeto para ocuparlo como traslador. Le parecía discreto, lo suficiente para que pasara desapercibido con el resto de la decoración, pero también notorio como para que nadie fuera trasladado a Londres sin querer. Cogió la esfera en sus manos, evaluando el peso y características. - Me parece muy bien, solo tendrían que llevarla ese día a la boda, y me encargaría del resto cuando los visite por allá.-explicó, devolviendole la figura de arcilla al Tonks.- Si es que me lo permiten, por supuesto, no quisiera interrumpir en su boda sin permiso. Aún faltaba mucho para la boda, por lo que no se atrevía a dejar activo un traslador con una procedencia a distancia. Además, debía estar presente en la supervisión de los viajes al estudio, aunque era obvio que dependía de si el joven prefería a otro funcionario para dicha tarea, o a la misma Rambaldi. @

Una vez que la escultura fue agrandada por medio del Engorgio pudo notar la semejanza con la de Aliento de Dragón. Ahora entendía que eran gemelas, solo que a distinta escala. Escuchó las dudas del joven, y aunque le sorprendió que la empezará a tutear, la Rambaldi se concentró en responderle al tiempo que rodeaba la escultura investigándola con el ceño levemente fruncido. - En teoría funcionará durante toda la fiesta, pero estos objetos son meramente de ida.-explicó, colocando una mano sobre el dragón blanco.-Es decir, pueden usarlo todo el día, y noche, para invitados que deseen ir hacia Rumania. Pero si quieres volver a Inglaterra no podrás, pues allá no estará la estatua. Hasta ese momento no le habían mencionado su intención de volver, pero al menos Roxanne tenía un as bajo la manga. - Pueden volver en alguna de los carruajes, aunque tardarían mucho tiempo...-dijo, mientras colocaba sus finos dedos en el mentón.- Tal vez podríamos instalar un traslador allá, y cuando deseen venir aquí a fotografiarse, lo hagan a través de este medio; luego, cuando la sesión finalicen usarían este mismo dragón para volver. Era la mejor idea que tenía pero estaba abierta a otras opciones si es que Antoni tenía alguna. Dejo que el Tonks pensara en el tema, y mientras, aprovecho el momento para realizar el hechizo. De su varita y hacia la escultura, se desprendió un fino brillo traslucido se colocó sobre el dragón, una vez que desapareció el resplandor, la escultura se transformó temporalmente en un traslador que llevaría a quien lo tocará al lugar de la boda. - Muy bien, ya he terminado.-anunció, guardando su varita.- Entonces, ¿Que opinas? @

Roxanne Rambaldi Empleada Departamento de Transportes y Deportes Mágicos Viajaran desde el Aliento de Dragón al Aura de Thestral, Antoni dirigió el viaje por aparición y Roxanne simplemente se dejo llevar, sin forzar, sin colocar sus propios deseos en el destino, pues bien sabía que aquello podía acabar mal para ambos. El estudio de pintura y fotografía destacaba por su exquisita decoración, pero la naturaleza de un exterior al que solo podían acceder los dueños fue lo que le llamó la atención. Allí, un jardín la esperaba. Entendía entonces porque habían decidido hacer la sesión de fotos en ese lugar, y no en cualquier otro. Recordaba bien la suya propia, una perfecta boda invernal. Su propio vestido blanco se llegaba a confundir con la nieve, el aire invernal que le había sonrosado las mejillas y el lago congelado atrás de los novios había sido la postal perfecta para una noche mágica. Era cierto que para ese entonces ya estaba separada de su flamante marido, pero siempre le agradecería la magnifica fiesta que tuvo. Se volvió a enfocar en el presente, justo cuando el Tonks le señalaba el lugar y la escultura. - ¿Es esta la que quieres usar de traslador?.-preguntó, a la vez que sacaba de su cartera tanto la varita como la copia del formulario de Antoni. @

Roxanne Rambaldi Empleada Departamento de Transportes y Deportes Mágicos Por fortuna, el Tonks tenía tiempo libre como para acompañarla a la siguiente instalación. Accedió a la propuesta del joven, aunque podía verse muy ejecutiva, como para estar todo el día en una oficina, la Rambaldi estaba acostumbrada a caminar todo el día sobre tacones. Además, entendía el tema del hechizo antiaparición, y aunque quisieran aparecer dentro del local, la Rambaldi quedaría los 200 metros atrás, y el Tonks tendría que esperarla quisiera o no. - Tus formularios aún están en trámite, Antoni, pero en cuanto se aprueben con gusto te visitaré para instalarlos.-dijo, esbozando una sonrisa amable. Lamentablemente tendría que esperar un tiempo prudente hasta que pasara por toda la burocracia ministerial, hasta entonces, solo podría realizar la primera parte de su trabajo, y luego se encargaría de las conexiones. La Rambaldi, mientras conversaban, se había arreglado, y tanto la capa de viaje, como sus guantes de chiporro ya estaban puestos. - ¿Nos vamos? @

Roxanne Rambaldi Empleada Depto de Transportes y Deportes Mágicos. Shena fue muy receptiva con su petición y de inmediato la llevo a recepción, allí se encontraba Antoni, pero su compañía no estaba. Suponía que la persona que había llamado al Tonks ya debía de haber tratado el tema pendiente, así que el joven estaría libre. Eso era perfecto, pues la Rambaldi tenía la intención de viajar en esos momentos al siguiente negocio donde instalarían el traslador. Shena seguía a su lado, notaba la curiosidad en sus ojos. - Antoni, me preguntaba si podríamos ir a Aura de Thestral ahora para instalar el otro traslador.-dijo, esperando que este respondiera afirmativamente. Planeaba terminar con la instalación de trasladores aquel día, después del negocio de Antoni iría al restaurante, y finalmente a Ottery St Catchpole donde visitaría a Shena para dar por finalizado el trabajo. - Y Shena, tal vez podrías esperarme en el castillo para la otra instalación. @ @

El Departamento de Transportes y Deportes Mágicos certifica que la familia Moody adquirió los siguientes servicios: - Conexión de la red flu: -- Conexión al Ministerio de Magia --Conexión al Magic Mall -- Conexión al Centro de Comercio Universal -- Conexión al Moon River -- Conexión al castillo Evans McGonagall - Hechizo antiaparición activado: --Las matriarcas pueden aparecerse en cualquier lugar del castillo y los terrenos propiedad de los Moody que circundan el asentamiento familiar (los cultivos, el bosque de pinos y el lago). --Los demás miembros de la familia pueden aparecerse en el pasillo de entrada, el patio de piedra protegido por las murallas y los terrenos circundantes. --Los miembros de la Orden del Fénix pueden aparecerse fuera del castillo, dentro de la zona protegida por las murallas. --Magos y brujas ajenos a la familia y a la Orden del Fénix, deben aparecer más allá de los terrenos de la familia. Roxanne Rambaldi Empleada

Roxanne Rambaldi Empleada Depto de Transportes y Deportes Mágicos Contrario a lo que la Rambaldi esperaba, Madeleine no se molestó ni un poco por la perdida de sus papeles, más bien, entendió el asunto e incluso le hizo un comentario acerca de las mejorías que los muggles habían hecho en su propio sistema, y como los magos, estabamos en desventaja con ellos. Era muy cierto, la organización de los no mágicos era mucho más evolucionada que la de ellos en ciertos aspectos, como por ejemplo, en la automatización de los procesos. Si solo tuvieran la cuarta parte de la tecnología que los muggles tendrían, tal vez los documentos no se perderían con la frecuencia que lo hacían. - Estoy de acuerdo.-dijo, esbozando una sonrisa.- Para sus adentros agradeció la actitud calmada de la matriarca, sin embargo, su sueño culpable habría sido ver como reaccionarían los altos directivos de su departamento contra una demanda por parte de una familia como la Moody. Se reprendió a si misma por tal pensamiento, era mejor no llamar a la mala fortuna. A continuación, la dejaron sola para hacer su trabajo. Madeleine se había retirado con el hombre recién llegado, y unas elfinas se encargarían de cualquier petición que hiciera la funcionaria ministerial. A Roxanne le bastaba con que la guiarán por la casa de entrada y salida, pero agradeció la atención de la mujer. Su primer trabajo fue instalar la conexión de red flú. Por fortuna, todos los viajes se harían a traves de una única sala, por lo que no tendría que recorrer todo el castillo instalando por separado. De su varita un fino velo plateado envolvió la chimenea que penetró en cuestión de segundos, y luego desapareció con un último resplandor. Desde ese entonces, y por un año a partir de ese día, el Hogar de la Familia Moody quedaría conectado por red flú de ida hacia el Ministerio de Magia, el Magic Mall, el Centro de Comercio Universal, Moon River y el Castillo Evans McGonagall. Roxanne hizo una pequeña marca al lado de dichos servicios, y continuó con el hechizo anti aparición. Con su varita conjuró el hechizo que protegería a la familia de cualquier visita extraña. Solo algunos estarían aceptados para aparecer dentro de los terrenos. Las condiciones, ya habían sido definidas por la matriarca. --Las matriarcas pueden aparecerse en cualquier lugar del castillo y los terrenos propiedad de los Moody que circundan el asentamiento familiar (los cultivos, el bosque de pinos y el lago). --Los demás miembros de la familia pueden aparecerse en el pasillo de entrada, el patio de piedra protegido por las murallas y los terrenos circundantes. --Los miembros de la Orden del Fénix pueden aparecerse fuera del castillo, dentro de la zona protegida por las murallas. --Magos y brujas ajenos a la familia y a la Orden del Fénix, deben aparecer más allá de los terrenos de la familia. Una vez terminado, hizo la misma marca en el formulario, esta vez en la sección del servicio que acababa de instalar. - Avísale a Madeleine que todo esta listo, el registro de su servicio se lo enviaré en un plazo de tres días. Probablemente estuviera aquel mismo día, pero con el sistema de archivo del Ministerio de Magia, nunca se sabía. La Rambaldi se despidió de Freya, y desapareció del Hogar de los Moody fuera de los terrenos de la familia, ya iba de camino a Londres.

Roxanne Rambaldi Empleada Departamento de Transportes Y Deportes Mágicos La visita inesperada de Antoni sorprendió a la Rambaldi, este apareció de repente saludando tanto a la empleada ministerial, como a su prometida. Además, se excuso por el poco tiempo que ambos tenían en aquellas fechas. Sin necesidad de explicaciones, la castaña había comprendido de antemano que los novios debían estar muy ocupados, al parecer, ellos mismos se habían encargado de todo el tema de administración y bien sabía que aquello requería muchísimo tiempo. - No ha sido nada, Antoni, es solo mi trabajo.-respondió esbozando una sonrisa discreta. A continuación, el novio procedió a guiarla a la escultura. En realidad, era sorprendente y no dejaba de ser magnifica. - Es perfecta para su boda.-se atrevió a decir, al tiempo que sacaba de su bolso tanto su varita, como el formulario que Antoni había llenado. Tan rápido como había llegado, el joven se retiró, esta vez, le pareció escuchar que lo esperaban abajo. Se quedó a solas con Shena para hacer el trabajo, y ya que tenía muchas otras cosas que hacer, se dispuso a continuar con su misión. Alzó su varita sobre la escultura, y con un movimiento envolvente la figura del dragón se cubrió con una fino velo que penetró en ella en cuestión de segundos. Brilló un último momento, y luego, volvió a verse como en un inicio. El hechizo estaba completo y el Hotel Aliento de Dragón ya serviría como transporte, a través de la escultura como traslador, hacia la cubierta del yate en un puerto ucraniano. - Todo listo, nos separamos por el momento Shena, pero se que nos veremos muy pronto.-dijo, guardando sus pertenencias de vuelta en la cartera.- Te agradecería si me escoltaras a recepción, aún debo hablar algo con tu prometido. @ @

Roxanne Rambaldi Empleada Departamento de Transportes y Deportes Mágicos. La espera tardó más de lo que esperaba, pero al menos, tenía algo de compañia. Un joven que se encontraba allí antes de su llegada también esperaba a la llegada de la matriarca, o al menos, de un elfo que los dejara entrar a un ambiente más cálido. Finalmente, después de más tiempo que hubiera querido, la muralla se alzó y tras esta, los esperaba Madeleine. La matriarca, y también ex compañera de la Academia, fue quien dejo en la ventanilla el formulario de servicios, y a quien buscaba aquel día. Los dejo entrar y tras cierto camino recorrido, la Moody se dirigió a los visitantes. Ya que el tema de su compañero parecía ser más serio que el de la funcionaria ministerial, fue esta quien presentó primero el motivo de su visita. - En primer lugar, lamentamos como departamento la tardanza a la respuesta de sus formularios, estos se extraviaron y los encontramos hace unos días.-explicó, aunque la realidad era otra, los formularios en realidad no habían sido atendidos a tiempo.- Hoy vengo a instalar sus servicios, conexión a red flú y hechizo antiparición. Mientras, la Rambaldi ya tenía en mano el formulario con las especificaciones de cada instalación, y estaba lista para trabajar. En realidad quería terminar rápido con las instalaciones, no eran solo ellos los afectados, sino al menos cinco otros contratantes y la situación le provocaba una profunda vergüenza ajena por los encargados de la ventanillas. En mis tiempos esto no hubiera pasado, pensó. Frustrada con la desorganización del departamento, no le quedaba más que hacer las cosas a su manera. - ¿Me podría señalar la chimenea que desean conectar?

Roxanne Rambaldi Empleada Departamento de Transportes y Deportes Mágicos Roxanne asintió con su cabeza a las palabras de Shena, tenía razón, era mejor prevenir que lamentar. Aún así, la empleada ministerial confiaba en que los invitados harían lo posible por llegar, y probablemente, cada uno de los carruajes estaría lleno para aquel día. A continuación, la novia accedió a llevarla al lugar donde estaba la escultura del dragón, a través de sus fauces pasarían los invitados y viajarían a Rumania. Le causaba curiosidad conocer la figura, ¿Sería importada de China? ¿O tradicional de Lancarshire? Recordaba haber visto en la sala común de los Dragones de Lancashire, la casa que la cobijo durante su época en la academia, dragones tallados en las paredes y en gran parte del mobiliario. Siguió a la joven al ascensor, subieron tres pisos y desde allí, hacia el norte. Era un enorme hotel, eso debía admitirlo, y habían tardado bastante al llegar, pero finalmente estaban allí. La sala, bastante amplia, alcanzaría para recibir a los invitados mientras esperaban su turno para entrar, incluso podrían hacer fila sin que esta se llenara por completo. - Vaya, lo han planeado muy bien.-dijo, sonriendo de aprobación.- ¿El dragón? Solo quedaba esperar la respuesta de la joven para continuar con el proceso de instalación. @

Roxanne Rambaldi Empleada Departamento de Transportes y Deportes Mágicos Notó como la Malfoy se confundía con sus palabras. La Rambaldi reaccionó entonces, dandose cuenta que quiza, el comentario sobre los invitados no invitados había sido de mal gusto. Aceptó ver la lista de amistades que atenderían a la boda y notó que en realidad eran cuarenta y cuatro la totalidad que haría uso de los carruajes, mientras que veinticinco los trasladores del castillo. - Por supuesto, todo ha quedado claro.-respondió regalandole una sonrisa.- Encontraran los carruajes aparcados a un lado del crucero para cuando arriben a puerto. Desde allí, estos llevarían a los invitados al castillo, tal y como Antoni había pedido. La Rambaldi dio un último sorbo a su té, y tomó una galleta para el camino, ya era hora de seguir con el trabajo. - Todo esta muy delicioso, pero comprenderás que en estas fechas mi tiempo es reducido.-explicó levantándose del asiento.- Si me mostraras el objeto que usaremos de traslador, te lo agradecería. Ya tenía una idea de que dimensiones podía tener dicha estatua. Según el formulario rellenado por el novio, era una cabeza de Dragón en la que los invitados se adentrarían para llegar al lugar. Más que un traslador, ocuparía la función de un portal. Le parecía una idea de lo más creativa, distinta a la que cualquier otro matrimonio hubiera pensado, al menos, en los años que ella tenía de servicio. De camino, la castaña tomó el formulario que hacia un par de días el prometido de Shena había llenado, una vez que terminara con dicho servicio, viajaría a Aura de Thestral, donde instalaría el segundo traslador. @

Roxanne Rambaldi Empleada Departamento de Transportes y Deportes Mágicos Siempre atenta a las palabras de la joven novia, Roxanne cogió una galleta en forma de árbol de navidad y la remojo apenas la punta en la taza de té para luego llevársela a la boca y saborear el dulce sabor a navidad concentrado en una masita. Asintió a las palabras de la joven, entendiendo que no todos los magos o brujas podían llegar a la hora y por supuesto, los novios no querían que sus amistades se perdieran en el camino. - Comprendo totalmente, Si llegaran a asistir más personas¿Estaríamos hablando de treinta invitados?.-aproximó, dispuesta a escribir en su agenda.- Porque además, nuestros carruajes son para aproximadamente seis personas y pensaba que podríamos distribuir cuatro a cinco por cada vehículo. La sugerencia parecía razonable, pero todo dependería de la visión y organización que darían los novios a los invitados. Tal vez incluso sobraría uno de los carruajes para llevar a la Rambaldi y sus acompañantes si es que no muchos magos o brujas se sumaban al evento sin ser invitados, cosa que ocurría más de lo que se podría llegar a pensar. Por otra lado, tenían pocos invitados a la boda, quizá diez carruajes había sido excesivo, pero también podían tener considerados a los no-invitados. Roxanne no sabía, pero estaba allí solo para apoyarlos. @

Roxanne Rambaldi Empleada Departamento de Transportes y Deportes Mágicos. El recepcionista no tuvo oportunidad de avisar a la dueña, pues apenas segundos después de que Roxanne pidiera una reunión con ella, apareció con bolsas de compras por las puertas de entrada. Se veía radiante, el ideal de una novia joven y sonriente. Le respondió con una sonrisa mientras asentía a sus palabras, gran parte de la comunicación respecto a los trámites ministeriales de transportes habían sido entre Antoni y Roxanne, mientras que Shena se había ocupado de la Seguridad Mágica del evento. - No podría rechazar una taza de té si es que tu me lo pides, Shena, además, me servirá para darme una idea de lo que quieren para la boda.-respondió, aunque mantuvo en secreto otra de las razones, moría de frío. Acompaño a la joven al lobby, muy cercano a la recepción, donde la Rambaldi escogió una mesa con dos sitiales de madera y una maravillosa tela estampada en flores. - Con dos de azúcar y un poco de leche, por favor.-dijo al elfo que les servía el té.- Tu novio me habló sobre el traslador que usarían en el hotel para llevar a la cubierta del yate. ¿Cuántas personas viajaran a traves de él, aproximadamente? Había puesto trasladores con capacidad para una cantidad mucho más grande que la que podría esperarse para un matrimonio, sin embargo, debía llevarse una idea para saber con que magnitud realizar el hechizo, y así, no dejar a los invitados atrás, o viajando en un traslador que los llevaría lejos de la recepción de boda. Recordaba el festival de música, Ottery St Catchpole, donde habían llenado un campo a las afueras del pueblo, y la gran mayoría, habían viajado a través de trasladores repartidos en Londres y el centro del pueblo del cual el festival llevaba el nombre. @

Roxanne Rambaldi Empleada Departamento de Transportes y Deportes Mágicos. No estaba en la naturaleza de la castaña esperar a que la llamaran para realizar un trabajo, sino más bien que ella misma se buscaba algo que hacer. Hacia un par de días había ayudado a una joven pareja de novios que preparaban su fiesta de matrimonio, estaban confundidos, y nerviosos, pero al terminar la jornada con ellos sentía que en algo les había aliviado la carga. Pero aún faltaba la parte más importante del contrato de los servicios, su instalación. Fue de esta manera, como Roxanne dejo su cómodo escritorio en el Departamento de Transportes y Deportes Mágicos para encaminarse al Hotel "Aliento de Dragón", lugar donde según el memorandúm de Antoni, su prometida Shena la recibiría. La figura de la mujer apareció frente a la tienda, grácil y femenina. Se acomodó los rizos tras su oreja izquierda y se adentró en el lujoso resort. Adentro la calidez se contradecía con el aire invernal del Callejón Diagon, por lo que la mujer tuvo que quitarse tanto los guantes, como su capa de viaje para adaptarse a la nueva temperatura. - Quisiera hablar con Shena Malfoy, por favor.-dijo, a quien atendía la recepción.-Vengo de parte del Departamento de Transportes y Deportes Mágicos por la instalación de los trasladores. Solo quedaba esperar. Aprovechando aquel tiempo, la italiana retrocedió algunos metros para reconocer el lugar. En la primera planta no se había escatimado en gastos, alcanzaba a ver parte del lobby, y la entrada al restaurante, también los ascensores y el sector de registro de los huéspedes. Le agradaba el estilo del hotel, era limpio y elegante, excelente para eventos como los que Roxanne adoraba organizar. Tendría que hacer una nota mental, pues aquel lugar, era perfecto para una fiesta.

Roxanne Rambaldi Empleada Departamento de Transportes y Deportes Mágicos. En medio de una ventisca invernal una figura menuda apareció grácil a las afueras del hogar de los Moody. La capa, que caía hasta sus rodillas, amenazaba con levantarse y con ella, el vestido rojo que tanto le gustaba. Camino a través del camino pedregoso a pasos rápidos, dando saltos intermitentes con el fin de evitar las rocas más grandes. Al fin, se encontró frente a la puerta. Tocó tres veces la puerta con sus nudillos, esperando a que la dejen entrar pronto, pues con el frío, llega a temer por su salud. Aquella misma mañana se había encontrado en la ventanilla del atrio un montón de formularios sin atender, algunos, databan de principios de diciembre. La Rambaldi, sin detenerse a pedir permiso a alguno de sus superiores, había cogido todos los pergaminos, aprobado los que estaban correctos, y enviado las modificaciones a aquellos que las necesitaban. No esperare a una autorización, o estas familias se quedaran sin transporte, se dijo a si misma, excusando su errático comportamiento. Y es que la realidad era que casi a un mes muchas familias seguían sin tener instalados los servicios contratados, y aún así, se realizaban visitas a negocios para ofrecer más contratos. No lo entendía, de haber sido ella quien organizaba el equipo, habría enviado a los empleados a terminar con los pendientes. Pero ya no era ella quien dirigía, pero eso claro estaba, no la detendría de hacer lo que ella quisiera y se le viniera en gana. - ¿Para esto recogí sus formularios?.-murmuró, tiritando de frío a la espera que alguien la dejara entrar. Empezaba a creer que su acto heroico de aquella mañana empezaba a perder valor.

Roxanne Rambaldi Empleada Departamento de Transportes y Deportes Mágicos Notó como Sagitas se arrepentía al momento sobre su comentario de la dirección, sin embargo pronto pudo cambiar el tema y ese malentendido quedó olvidado. Sonrió comprensiva al escuchar las excusas de las dueñas sobre sus respectivas ausencias. Entendía por completo los viajes repentinos, y sobre los negocios, coincidía por completo en los líos y problemas que podían acarrear cuando se intentaban hacer crecer. - Entiendo que las dueñas estén ocupadas, no te preocupes. Pero claro, la pelivioleta no se quedaría sin darle una solución. Un memo bastaría para que las dueñas se informaran de su visita, y ya que andaba con los formularios, se los haría llegar para que se familiarizaran con estos cuando debieran firmarlos. - No me ha tocado ir a tus negocios, pero si nadie ha ido aún, puedo pasarme y ayudarte con el papeleo.-contestó dedicándole una sonrisa.-Siguen siendo los mismos, solo debemos rellenarlos otra vez. ¿Recuerdas que la última vez estuve ayudándote en mi oficina? Será lo mismo, solo que esta vez una vez completados los llevaras a una ventanilla que esta en el Atrio, muy vistosa, tiene unos tubos enormes que conectan con todos los departamentos. La Rambaldi hizo gestos y levanto los brazos al aire para intentar explicarle donde quedaba dicha ventanilla. Esperaba que supiera llegar, aunque de todas formas, la italiana varias veces se encontraba en ese lugar atendiendo a los clientes. - Oh, y muchas gracias por la recepción.-añadió, mientras sacaba un pergamino del bolso.- ¿Estarás otro día? De verdad me han interesado algunos de estos títulos, pero ya sabes... Final de mes, poco dinero, mucho que pagar. Aunque tenía sus ahorros, no le sobraba dinero como para seguir costeando más objetos que no necesitaba realmente, pero quizá cuando le pagaran su sueldo... - Cierto, cierto, el formulario.-dijo apurada, casi lo olvidaba.

La navidad había llegado al Castillo Lockhart. La Rambaldi, preparada hacia ya algunos días, se había instalado por la tarde del día 24 en su cuarto y los regalos, los había puesto aquel mismo día bajo el árbol, cada uno bien etiquetado con el nombre de cada uno de los familiares, incluso había uno para el más pequeño de los hijos de los patriarcas. Al otro día, por la mañana, se reunió con su familia. Tanto Cye como Ishaya, y todo el resto de la familia se encontraba reunida, como también algunos amigos de los patriarcas. La Rambaldi, ya vestida para el desayuno bajo la escalera casi trotando, para abrazar suavemente a su abuela adoptiva y darle un cálido beso en la mejilla. - Feliz navidad, Cye.-dijo, en medio del abrazo.- Y feliz navidad a todos. A continuación, saludó a cada uno de los presentes, dándoles un cálido abrazo. La matriarca entonces los guió al comedor, donde desayunarían en familia. Al llegar allí, la italiana sintió de inmediato el aroma a chocolate caliente y su estomago rugió solo un poco por el hambre. Las palabras de Cye llenaron de amor los corazones de los presentes, era algo que solo ella con su infinito cariño lograba, y le estaba enormemente agradecida de haber sido adoptada en el seno de su familia. Terminado el discurso, un cantico desconocido para Roxanne, envolvió la atmósfera, sin conocerlo, la envolvió y de alguna forma se sintió más feliz y esperanzada. A su vez, del candelabro se desprendieron pétalos que alcanzó a cada uno de los presentes llenándolos de una calidez reconfortante. Luego, debían todos llevar su pétalo a sus respectivas chimeneas para encenderlas. La Rambaldi hizo lo suyo, y se llevo una grata sorpresa al darse cuenta que el mismo calor que ella sentía, se quedaría en su cuarto mientras el fuego estuviera encendido. Una vez que termino dicho ritual, bajo las escaleras de la misma forma que lo había hecho aquella mañana, saltando. En esos momentos, el elfo abría la puerta a una recién llegada y el fantasma que la acompañaba, Roxanne ya sabía que este era su esposo. - ¡Sagitas!.-saludó, recibiéndola con un abrazo.- Feliz Navidad, bienvenida. Supongo que este caballero es tu galante marido, bienvenido, feliz navidad. Entonces, se dirigió al elfo que se ocupaba de la recepción de invitados y familiares. - Mi abuela se me ha perdido, me guiarías a ella, por favor. @ @

Roxanne Rambaldi Empleada Departamento de Transportes y Deportes Mágicos Grande fue su sorpresa cuando vio aparecer frente a ella a Sagitas, antigua directora del departamento de accidentes. Tenia entendido que aquella tienda pertenecía a Xell y Reena, pero cualquiera que la atendiera le bastaba para aquel entonces. Sonrió amable a la pelivioleta, pero antes de que le diera oportunidad a dar el motivo de su visita esta ya le ofrecía todo tipo de libros para el departamento. -Lamentablemente el departamento ya no es mío, Sagitas.-haciendo referencia al nuevo director.- Y tampoco estoy en busca de algún libro relativo al departamento, aunque podría ver algo otro día. Se daría un autoregalo navideño, después de todo, había trabajado mucho durante el ultimo año y se lo merecia. - Aunque... Si puedes ayudarme.-dijo luego de reflexionar un momento.-Estoy en busca de las dueñas, el departamento ha vuelto a realizar visitas de rutina para ofrecer sus servicios y, ya que este negocio no tiene contrato con la oficina de red flú se me asignó visitarlo. Estaba segura que la Potter Blue entendería su posición, ya en ocasiones anteriores había hecho visitas similares a sus negocios cuando era jefa de la antigua Dirección de la Red Flú; en aquel entonces, le habían asignado dieciocho negocios, gran parte propiedad de Sagitas, y todos los había completado en un solo día. Eso si era eficacia, pensó, recordando aquellos tiempos. - Por favor.-dijo, sonriendo lo más angelical que podía.- Prometo ayudar con el papeleo.

Roxanne Rambaldi Empleada Departamento de Transportes y Deportes Mágicos Por vez primera en meses, o años, la Rambaldi se disponía a realizar visitas a negocios. Cuando se retiró del departamento, se dedicaba a trabajo de oficina más que de calle, sonrió mientras recordaba como envidiaba a Sophie, quien aún podía darse los lujos de salir y respirar algo de aire fresco. Se puso la capa de viaje, y la sujeto sobre su pecho con un broche del escudo de su familia. Supuso que no se tardaría más de un par de horas, y que pronto podría estar de vuelta en la oficina para ponerse al día con el papeleo. Salió del departamento despidiéndose de la nueva secretaria, aunque nueva y más guapa, la ex directora pensaba que nadie podría reemplazar a la gruñona de Gladys, quien a pesar de tener un difícil temperamento, siempre se esforzaba para dar lo más de si en su trabajo. La llenó la melancolía de tiempos pasados, su equipo de trabajo, y su familia, aquella que durante su ausencia creció a tal punto que a su retorno le fue irreconocible. - Librería La hermana quisquillosa.-leyó corroborando el nombre del negocio que le correspondía visitar. Desapareció en una esquina poco transitada para aparecer en el Callegón Diagón, lleno de magos y brujas cargados por paquetes de regalos. Le costó poco mas de un minuto ubicar el negocio, definitivamente era allí, quiza, hasta podía comprar algunos libros para Navidad aparte de promover la instalación de los servicios ministeriales. - Permiso.-dijo animada, entrando al cálido ambiente de la librería.- Departamento de Transportes y Deportes Mágicos.

Volvía otra vez a la tienda del Magic Mall. Esta vez, iba a adquirir pociones, especificamente, la Poción Escalofríante y la Poción Cara de Calabaza, ambas, especiales de la época de Halloween. La Rambaldi en realidad no sabía los efectos que estas tenían, pero tenía el presentimiento de que lo descubriría muy pronto. Se tardó un rato en encontrar las botellitas, pero al cabo de unos cinco minutos las tuvo en sus manos. Hizo sus cuentas mentalmente, y notó que estaba dentro de su presupuesto mensual. Llenó la ficha, y la entregó en el mesón. -Buenos días, quisiera llevar estos productos ID: 98673 Nick: Roxanne Rambaldi Nivel Mágico: VIII Link a la Bóveda Trastero: N° 109134 Link a la Bóveda de la cual se hará el descuento: N° 96979 Fecha: 2016-10-22 Nombre del producto: Poción escalofriante Objeto, Criatura, Poción, Consumible o Libro de Hechizo: Poción Catalogación: (colocar cantidad de A, X o P respectivamente) PP Puntos por unidad: 20 Precio: 1000 G Nombre del producto: Poción cara de calabaza Objeto, Criatura, Poción, Consumible o Libro de Hechizo: Poción Catalogación: (colocar cantidad de A, X o P respectivamente) PP Puntos por unidad: 20 Precio: 1000 G Precio total: 2000 G Total de Puntos: 40 109134