~ House of Books ~ (MM B: 103943)

[Seba Granger]

No pude evitar sonreír mas cuando ella decía que este podría sentirlo como su hogar por como estaba quedando, la verdad eso quería que día a día nuestra relación se fuera complementando por completo, llegando al día en que las noches se nos hiciera difícil separarnos y ella decidiera quedarse conmigo, por ahora intentaría que no se sintiera que apresuraba las cosas pero por como decía nuestro lugar algo esta captando mi idea.

-Te adoro mucho mas, podrá tener todos los cajones que quiera- cuando pronuncio lo de la ropa no pude evitar que una sonrisa traviesa se dibujara en mis labios, mientras sentía su caricia.

Lo siguiente hizo que la piel se me erizara, sentía como una corriente especial recorria mi cuerpo desde mi nuca bajando por mi columna vertebral cuando sentía gemir a mi novia un poco, además como sus labios se apoderaban de los mios en un beso lleno de pasión.

Me estremecí aun mas cuando la bruja mordía mi labio como antes yo lo había hecho, la miré a los ojos con intensidad cuando tras de mi sentía la orilla de la cama, esta vez intente tomar la iniciativa apoderandome de su boca con mi lengua volviendo a besarnos con mucha pasión y una pizca de deseo.

Mis manos comenzaron a recorrer su espalda con delicadeza mientras el beso se prolongaba o mas bien mi intención es que no acabara nunca, que no llegara esa instancia en la que tendríamos que aterrizar y dejarla partir. Me atreví a jugar un poco mas con mis dedos por su columna, casi sin tocarla buscando que descubrieramos nuevas sensaciones juntos.

[Darla G Dumbledore]

Los labios de Darla cedieron al sentir como la lengua de su novio empujaba suavecito hasta apoderarse de su boca, recorriéndola y besándola con pasión, respondió entrelazando sus lenguas, acariciándolas entre si como en una danza húmeda mientras los besos se volvían más apasionados y llenos de deseo el uno por el otro.

 

Un estremecimiento recorrió el cuerpo de la pelirroja al sentir como las manos de Seba recorrían su espalda, un nuevo gemido escapó de sus labios al sentir el roce de los dedos sobre su columna. Sus manos acariciaban a su vez la espalda del mago subiendo lento y suavemente hasta llevar una de sus manos a jugar en la nuca de él, enroscando sus dedos en los cabellos de él.

 

Por unos segundos, sin separar sus labios le vió a los ojos y no dudó en pegar aún más su cuerpo al de él, sintiendo el calor que le transmitía. Ronroneó como una gatita cuando se pegaba más a las curvas del cuerpo del hombre que la hacía perder la cabeza.

 

--Te amo --susurró en los labios de Seba, olvidándose totalmente de todo lo demás que no fuese su novio.

[Seba Granger]

Podía sentir como su cuerpo se estremecía en mis brazos, como con cada caricia de mis manos creía provocar una nueva sensación en su cuerpo, apoye mi palma de lleno en la parte medía de su espalda, mientras su mirada se cruzaba con la mía y por un segundo creía que el tiempo se detenía en aquel contacto.

Apreté su labio inferior entre los míos, mientras susurra a medias algunas palabras -¿Quieres que me detenga?- aunque la verdad no esperaba mucho su respuesta ya que nuevamente la besaba con pasión luego de sentir su cuerpo mas pegado al mío, volví apoderarme de su boca una vez mas, la cual no ponía mucha resistencia a que mi lengua jugara con la de ella.

Mi respiración estaba agitada ademas que cada vez que inhalaba mas profundo mis fosas nasales se llenaban del aroma de la mujer que tenía en mis brazos, la que me volvía cada vez mas loco, la que se la había jugado por mi sin temores, a la que no le había importado esperar con paciencia que el dolor se fuera.

Mi corazón latía sin control por la Potter Black, por mi vampira sexy a la cual hubiera jurado sentir como su propio corazón latía desbocado mientras nos fundíamos en un beso y otro, con un poco de timidez lleve una de mis manos a su cintura acariciando en ella, para luego hacer lo mismo con todo su costado derecho subiendo y bajando por el.

[Darla G Dumbledore]

Los libros, la decoración del lugar y la comida habían pasado a segundo plano, había olvidado por completo el resto del mundo, solo los labios tibios de su amado y la mano que recorría su costado encendiendo en ella todos sus instintos existían en ese instante en el universo.

 

--No pares, nunca me sueltes --susurró ahogada entre beso y beso como respuesta a la pregunta de su novio.

 

Su mano recorría la espalda de Seba acariciándolo con pasión y amor, en respuesta a las caricias del mago y su diestra continuaba el jugueteo en su nuca mientras sus labios y sus lenguas se fundían en un baile erótico que solo podría ser correspondido por sus propios cuerpos.

 

Sin darse cuenta la respiración de la vampiresa se había agitado, como si estuviera más viva que nunca mientras su pecho subía y bajaba aceleradamente contra el pecho de su pareja. Sin poder evitarlo volvió a morder con delicadeza el labio de él y aunque no le causo herida alguna un estremecimiento de placer recorrió su cuerpo, como cuando había probado su sangre.

[Seba Granger]

Mi cuerpo se estremeció aun mas cuando de sus labios salieron las palabras que en cierto modo esperaba, dejé continuar el juego de nuestras lenguas enredandose la una con la otra, a veces en su boca, otras en la mía obviamente aprovecho de saborearla aun mas cuando esta en la mía, chupando con pasión su lengua y sus labios.

 

Mis manos ya no solo buscaban caricias sobre la ropa, sino mas el sentir su calor, sentir si su piel se podía estremecer con el rose de la mía, intentar descubrir que le provocaba a la vampira, si ella sentía lo mismo que yo sentía cuando la tenía tan cerca de mi. Por unos segundos seguí recorriendo su costado con la palma de mi mano abierta, arrastrando su ropa cuando esta subía, buscando rozar en la caricia uno de sus pechos, luego bajaba de nuevo haciendo el mismo recorrido pero al volver hacía arriba lo hacía por dentro de su blusa sintiendo que mi mano temblaba al sentir la tibieza de su piel.

 

-Te amo, te necesito- escaparon las palabras entre gemidos y besos, sentí el calor en mis mejillas pero ya no sabía si era sonrojo o la pasión por ella que iba en aumento, pegué mas la parte baja de mi cuerpo al de ella buscando un sutil e intimo rose entre los dos.

[Darla G Dumbledore]

El estremecimiento del cuerpo de Seba se había contagiado al propio cuerpo de Darla, sus lenguas entrelazadas en un beso tierno y pasional a la vez la hacía respirar agitadamente casi sin darse cuenta de que lo hacía. Un gemido escapó de los labios de Darla al sentir la caricia que ya no iba sobre su ropa sino que rozaba su piel, subiendo hacia sus senos. Sus manos correspondieron a las de su novio, recorriendo el cuerpo de él, pegándose más en su beso, acelerándose la respiración al sentir como su propia piel se erizaba respondiendo a sus caricias suaves y apasionadas a la vez.

 

La mirada de la vampiresa destelló con placer al escuchar las palabras que salían de los labios del hombre que amaba, ronroneo en sus labios sintiendo como sus cuerpos se rozaban más íntimamente y sin dudarlo susurró bajito en los labios de su amado.

 

--Yo soy tuya mi amor --sus labios, su piel, sus manos, todo su cuerpo se entregaba al hombre que la había enamorado, que se había robado su corazón haciéndolo latir como en años no lo había hecho --te amo más, como nunca imaginé amar.

[Seba Granger]

Las caricias y besos entre ambos no pararían nunca mas, desde el mismo momento que ella me había dado el si, me había propuesto amarla con locura y cada vez lo hacía mas, y no solo eso sino que quería dejar caer todas las barreras entre los dos, dejar que os miedos al dolor desaparecían de todo.

Las palabras que salían de los labios de mi novia entre gemidos y ronroneos hacían que el fuego se encendiera mas entre los dos, por un instante mis ojos se quedaron fijos en los de ella mientras mi respiración estaba completamente agitada cada, mi corazón estaba desbocado bombeando a mil por hora, sin darme cuenta comencé avanzar mas hacía mi mujer, haciendo que esta retrocediera por la presión de mi cuerpo en el de ella hasta acorralarla entre la pared y mi ser.

Tomé sus manos entre las mías y mientras las subía hasta mas alta de su cabeza aprovechaba de rosar sus costados con mis dedos y los de ella, ya cuando estaban sobre su cabeza las aprisione solo en una mía, mientras que seguía besando sus labios y mejillas, la miré con un dejo de picardía y sin decir nada comencé a besar su barbilla, dejando un reguero de besos por su piel hasta llegar a su cuello, sonreí mucho cuando le daba una mordidita a mi vampira, luego besé con ternura y pasión donde deja una mordida.

-¿Solo mía?- susurré dejando me aliento en su piel, mientras su aroma me embriagaba, mi mano de volvía a deslizar bajo su blusa acariciando su piel con sutileza y sensualidad.

-Yo te amo mas, estoy loco por ti- pronuncie sobre su piel de nuevo, regresando un poco el rumor a mis mejillas.

[Darla G Dumbledore]

El cuerpo de Seba presionaba suavemente sobre ella y Darla se dejó deslizar hasta topar su espalda contra la pared, un suave quejido salió de sus labios, pero no debido al dolor, sino al placer de sentir el cuerpo de su amado contra el de ella. Los ojos de la vampiresa se habían dilatado y hubiera jurado que la sangre palpitaba en sus sienes, ¿o era en las de él?

 

La sed la consumía, pero no de sangre, con pasión bebió los besos de labios de su hombre mientras su piel se erizaba al sentir como sus dedos rozaban su costado. Dejó que el mago sostuviera sus manos sobre su cabeza y un nuevo gemido escapó de entre sus labios cuando su piel se estremeció con sus caricias.

 

--Solo tuya --jadeó aún con la sensación placentera de sus besos y su mordida, echó hacia atrás la cabeza, apoyándola contra el muro mientras sus colmillos rozaban sus labios, se concentró volviéndolos a la normalidad mientras ronroneaba con el beso que su Seba le daba.

 

--Y yo estoy loca por tí, nadie más importa en mi vida --susurró mientras se dejaba llevar por el placer de sentir la mano de su novio recorriéndola bajo su blusa.

[Seba Granger]

Mis labios intentaban recorrer cada centímetro de su piel, de besar y deleitarse con su sabor, con su suavidad, con la calidez que su cuerpo emanaba, creo que eso no lo entendería tan fácil pero el saber o el darme cuenta que podía hacer sentir a mi novia me encantaba, se me inflaba el pecho.

No podía dejar de tocarla, no había modo que mi mano se quedara quieta sobre su piel, las caricias se volvían mas sensuales y delicados intentando sacarle mas gemidos de esos labios que me encantaban, de esos labios que me decían cuanto me amaban, que solo era mía y de nadie mas.

Me estremecí aun mas a sentir que mi mano llegaba a un tope, su bracier impedía que mis caricias continuaran, levanté la mirada por un instante para encontrarme con sus ojos, era la mirada mas bella que había visto, el deseo de ambos emanaba del uno al otro.

Un dejo de picardia y timidez se apoderaron de mis ojos mientras jugaba mi dedo en el borde de su sostén, -¿Puedo?- dije sintiendo un temblor en mi voz, mordí su labio inferior suavecito para que no se diera cuenta.

-¿Hasta donde me dejarás llegar mi amor?- pronuncie mientras dejaba libres sus manos y llevaba mi mano a su cadera para acariciarla mientras mi cuerpo se pegaba mas a ella.

[Darla G Dumbledore]

Los quejidos y suspiros escapaban de los labios de la vampiresa mientras los labios y la mano de su novio la recorrían, haciéndole sentir nuevas y deliciosas sensaciones. Hacía mucho tiempo, no, jamás había sentido así, jamás había sentido el deseo de tener su alma y entregársela junto con su cuerpo a la persona que estaba con ella. Jamás había querido pertenecerle a alguien como deseaba ser para siempre de Seba.

 

Los ojos de ambos quedaron prendados en ese momento, no existían barreras ella no le ocultaba nada, dejaba que sus ojos y su cuerpo hablaran por ella. Humedeció sus labios superiores como los inferiores ya estaban y su respiración se aceleró sin poder evitarlo al escuchar la pregunta de su pareja. Un gemido escapó de sus labios al sentir la suave mordida que él le daba, ohhh, que si fuera vampiro la mataría no podía encenderla tanto así.

 

--Puedes --susurró nerviosa mientras él soltaba sus manos y acariciando su cadera volvía a preguntar, un nuevo gemido escapó de los labios de Darla mientras empujaba suavemente contra el cuerpo de él, para sentirlo mejor, con la respiración aún más acelerada clavó sus ojos en él, sintiendo las pupilas dilatadas --el cielo es el límite --susurró antes de pegar sus labios a los de él, devorándolo en un beso apasionado mientras acariciaba su nuca con sus manos ahora libres.

Editado 20 de Junio del 2014 por Darla Potter Black